TEMA 12: EL ADVERBIO

1. Definición de adverbio:

Como cualquier clase de palabra se define por medio de serie de propiedades formales, es decir, es una forma
móvil dentro de la oración (en comparación con las conjunciones que son fijas), no son formas flexivas (como
pueden ser los adjetivos y sustantivos) y complementan a verbos, adjetivos, a otros adverbios y pueden
modificar a periodos oracionales completos. Pueden indicar distintas nociones: lugar, tiempo, modo, cantidad,
afirmación, negación, duda y otros matices. No obstante, estas propiedades no se cumplen siempre en todas
las palabras clasificadas como adverbios.

2. Propiedades formales del adverbio:

2.1. Movilidad:

La posibilidad de aparecer en distintas posiciones de la oración, lo que permite diferenciarlos de las

conjunciones que aunque son formas sin flexión igual, normalmente ocupan la primera posición, es decir,
tienen menos libertad de acción que los adverbios.

No obstante, la movilidad de los adverbios puede ir acompañada de diferencias en su interpretación y

comportamiento. Ejemplo:

 Pedro habló lamentablemente. (quiere decir que Pedro habló y lo hizo de una manera lamentable)
 Lamentablemente, Pedro habló. (quiere decir que fue lamentable el hecho de que Pedro hablara y no se
quedara callado)

2.2. Flexión:

Aunque tradicionalmente se admite que el adverbio es una forma no flexiva, esto en algunos casos es incierto.
Hay adverbios que se pueden situar dentro de paradigmas pronominales, nominales o adjetivales y sus
desinencias se pueden interpretar como formas casuales (de caso). Ejemplo:

De la raíz ἄλλο- además de los sufijos casuales de la flexión del sustantivo hay otros sufijos derivativos
adverbiales que se reinterpretan como desinencias de caso. (ἄλλ-ως indica manera; ἄλλ-οτε indica tiempo;
ἄλλοθεν indica origen; ἄλλ-ῃ indica lugar por dónde; ἄλλ-ου/θι indica lugar/ubicación; ἄλλ-οσε indica
dirección.)

2.3. Elementos modificados

Pese a la definición tradicional, los adverbios complementan en muy pocas ocasiones a adverbios y adjetivos,
esto suele ocurrir con adverbios que indican grado o intensidad (πολύ, μᾶλλον, etc.). La mayor parte de las
veces los adverbios funcionan como constituyentes de la oración, al igual que los sintagmas nominales y
sintagmas preposicionales o como oraciones subordinadas.
 2.4. Complementos
Algunos adverbios pueden llevar complementos dependiendo de las características léxicas de la base de la que
derivan. En ese caso, se comportan morfológica y sintácticamente como formas nominales.

Ejemplo:

 Οἱ δ’ εἰσὶ ποῦ γῆς; ποῦ τόδ’ εὑρεθήσεται. (Y ellos, ¿dónde/ en qué parte de la tierra están? S.OT. 108-
108)
Adverbio de ubicación que lleva un genitivo que indica la región mayor a la que pertenece el lugar.
También puede darse el caso con adverbios de dirección.

Otros adverbios pueden llevar complementos porque funcionan como predicados de dos lugares, es decir,
establecen relaciones entre dos entidades.

Ejemplo:

 ἰού, ὧ Ἱππία, ἧ θαυμασίως τε καὶ μεγαλείως καὶ ἀξίως σαυτοῦ εἴρηκας (Ay, Hipias, has hablado de una
manera asombrosa, noble y digna de ti. PI.Hp.Ma.291e3-4)

Adverbio de manera que puede llevar un genitivo que indica el valor como sucede con el adjetivo del que
deriva ἄξιος (digno de algo).

Por esta razón, muchos adverbios dan lugar a preposiciones o locuciones preposicionales, las denominadas
preposiciones “impropias.” Como pueden ser ἔξω (fuera/fuera de), ἄνω (arriba/arriba de), ὄπισθε(ν)
(detrás/detrás de),etc. Ejemplo:

 Οἱ δὲ Μινύαι ἐνδύντες τὴν γυναικηίην ἐσθῆτα ἅτε γυναῖκες ἐξήισαν ἔξω (Los Minias, tras ponerse
vestimenta de mujer, salieron fuera como mujeres. Hdt.4.146.13-4.146.14) Aquí es un adverbio.

 Οἱ μὲν ἔφευγον εὐθὺς ἔξω τῆς πόλεως (Ellos huyeron inmediatamente fuera de la ciudad. X.HG.5.2.31.4)
Aquí actúa como preposición que rige genitivo.
2.5. Gradación

Algunos adverbios admiten gradación, como los adjetivos y presentan, por tanto, formas comparativas y
superlativas (μάλα “mucho”, μᾶλλον “más” y μάλιστα “muchísimo”). Esta propiedad solo se extiende a una
parte de los derivados de adjetivos.

Con esto, es evidente que las diferencias entre adverbios y otras clases de palabras no están siempre muy
claras.

3. Morfología
Como venimos diciendo, según el punto de vista tradicional, los adverbios pueden ser derivables a partir de
sustantivos, pronombres y adjetivos o pueden ser raíces puras como por ejemplo νῦν (ahora).Pero pueden
tener otros dos orígenes: el uso regular de desinencias casuales dentro de un paradigma regular con valor
adverbial, como por ejemplo el neutro de los adjetivos es empleado en muchas ocasiones de manera adverbial,
es decir, el acusativo neutro singular en el caso de los comparativos y el plural con los superlativos σοφῶς
“sabiamente”, σοφώτερον “más sabiamente”, σοφώτατα “muy sabiamente” y por último, diversos sintagmas
nominales en acusativo adquirieron significados fijos y fueron reinterpretados con el paso del tiempo como
adverbios al perderse su conexión con el sustantivo o adjetivo (ἐρήμην “en ausencia”).

4. Funciones
4.1 Adverbios de Manera:

Esta función puede ser requerida por el marco predicativo de algún verbo y entonces es un argumento.
Ejemplo: el verbo ἔχω cuando significa “estar bien/mal”. Pero, cuando no es requerido por el marco
predicativo, sino que añade información adicional funciona como adjunto.

Ejemplos:

 ὡς μὲν τοίνυν οὐχὶ καλῶς οὗτος ἔχει καὶ δικαίως ὁ νόμος, οὔτ’ ἐρεῖν οἴομαι Λεπτίνην οὔτ’, ἐὰν λέγῃ,
δυνήσεσθαι. (Pues bien, esa ley no es buena ni justa, no creo que lo vaya a decir Leptines ni, en caso de
que lo diga, podrá demostrarlo. D.20.98.5-7). Aquí el adverbio funciona como argumento.

 Ἀργεῖοι μέν νυν διὰ ταῦτα Κλεομένεά φασι μανέντα ἀπολέσθαι κακῶς. (Pues bien, los argivos afirman
que Cleonte, volviéndose loco por eso, murió de mala manera. Hdt.6.84.1-6.84.2). Aquí el adverbio es un
adjunto.
4.2 Adverbios de espacio:

Los adverbios pueden desempeñar diversas funciones espaciales y al igual que los anteriores, pueden ser
argumentos indicando Posición, Ubicación, Origen y Dirección o adjuntos cuando se refieren a todo el estado
de cosas. Ejemplos:

 Τῶν οἰκούντων Ἀθήνησιν ( De los que habitan en Atenas. D.20.29.7.) Este es un ejemplo de argumento.

 ‘Υπολάβοι δέ τις ἄν ὡς οὐδεὶς ἄρα ἀδίκως ἠτίμωται Ἀθήνησιν. (Alguien podría objetar que en Atenas
[ocurre que] nadie es despojado de sus derechos de ciudadano sin razón. X.Ath.3.12.1) Aquí es el adverbio
es adjunto.

4.3 Adverbios de tiempo:

Los Adverbios temporales de dividen en adverbios de tiempo y adverbios aspectuales, pero siempre en función
de adjunto.
Los de tiempo sitúan el Estado de cosas indicando si es simultáneo, anterior o posterior a otro Estado de cosas
o momento temporal. Son adverbios como χθές “ayer”, τήμερον “hoy”, νῦν “ahora”, αὔριον “mañana”,
πρότερον “antes”, τότε “entonces”

Los aspectuales, en cambio, hacen referencia al tiempo interno del propio

Estado de cosas. Algunos de ellos son ἔτι “todavía”, ἤδη “ya”, πολλάκις “muchas veces”.

4.4 Adverbios de condición y concesión:

Estos son adverbios como τότε “entonces” (también temporal) y ὅμως “sin embargo”. En ocasiones, pueden
aparecer en la oración principal recogiendo una oración subordinada con la misma función.

Ejemplo:

 Εἰ δὲ κερδαίνειν ἐβούλου, τότ’ ἄν πλεῖστον ἔλαβες. (y si quisieras obtener provecho, obtendrías

muchísimo. Lys.7.21.2-3)

4.5 Adverbios de intensidad:

Estos pueden modificar otros adverbios y adjetivos y a veces sustantivos, aparte de verbos. Indican la
intensidad o grado con que tienen lugar una situación o se aplica una propiedad. La gradación se puede
establecer tanto con respecto a una escala fija como a escalas variables o en relación con otras entidades.
Ejemplos: μάλιστα “muchísimo” (escala fija), λίαν “demasiado” (escala variable), πλεῖον “más” (entre dos
entidades).

4.6 Adverbios de negación:

Éstos, generalmente οὐ y μή, actúan como disjuntos y no describen el estado de cosas, sino que evalúan el
contenido proposicional de la oración.

Un aspecto importante de la negación es su doble uso: puede emplearse de manera neutra, es decir, negando
que se produzca el estado de cosas (Pedro no ha ido a su casa) o puede focalizar algún elemento (Pedro no ha
ido a su casa, es decir, ha ido a otro lugar que no es su casa).

4.7 Adverbios focalizadores:

Actúan como disjuntos y convierten uno o varios elementos de la oración en el foco y contrastan la información
disponible sobre éste con la información existente con una alternativa. Entre ellos se encuentran καί “también”,
οὐδέ “tampoco”/ μηδέ “ni siquiera”, μόνον “solo”, γέ “al menos”. Ejemplos:

 También PEDRO me ha dado un libro. (*En mayúscula el foco)

a) Afirmación: PEDRO me ha dado un libro
 b) Presuposición. ALGUIEN (aparte de Pedro) me ha dado un libro.

4.8 Adverbios de proposición:

Estos adverbios permiten que el hablante comente el contenido proposicional de su acto de habla, es decir,
sobre lo que habla. Unos tienen que ver con el grado de verdad de lo dicho, otros pueden expresar el grado de
certeza que tiene el hablante sobre el contenido de sus palabras (τάχα “quizás”, εἰκότως “probablemente”) o
muestran la fuente de lo que se dice (ὁμολογουμένως “como se reconoce”). Además hay otros que permiten
hacer un juicio sobre el contenido al hablante (δικαίως “de forma justa”).

4.9 Adverbios de ilocución:

Modifican el acto de habla del emisor y no el contenido. Son también disjuntos y sirven para marcar el tipo
de oración: declarativa, imperativa, interrogativa, desiderativa y exclamativa. En algunos casos es
imprescindible el adverbio para indicar el tipo de oración.

Desiderativa irreal y potencial: εἴθε “ojalá”; imperativas: ἄγε, ἴθι, φέρε “¡venga!” son formas verbales
fosilizadas en adverbios; interrogativa: ἄρα “¿acaso?; exclamativa: ὥς “¡cómo!”, ὅσον “¡cuánto!”.

5. Discurso.

La idea que subyace es que el hecho de hablar no consiste simplemente en emitir oraciones (simples o
compuestas), sino que están organizadas de manera que forman una unidad mucho mayor con un propósito
definido.

Estamos hablando del discurso, en el que hay elementos, entre ellos los adverbios, que funcionan a un nivel
superior al de la oración.

Y para mostrar la estructura del discurso hay que acudir a los marcadores como pueden ser las expresiones
metadiscursivas: el hablante utiliza expresiones que se refieren explícitamente a su propio discurso y nos
indican la estructura y el propósito de éste; los conectores de distintas clases como adverbios, conjunciones,
etc. que permiten a los hablantes establecer conexiones entre las partes del discurso facilitando la comprensión;
la disposición icónica del discurso (si es escrito) como puede ser la división en capítulos, enumeraciones, etc.
o las entidades de las que se habla.

El discurso cuenta con una serie de unidades propias: unas son principales y otras, subsidiarias (secundarias).
Entre ellas se establecen relaciones dependenciales.

Dentro de los discursos, en los considerados argumentativos, los conectores juegan un papel fundamental.
Pueden dividirse en argumentativos (apoyan una propuesta), contraargumentativos (sirven para refutar una
tesis), y conclusivos.
Los adverbios y las partículas también ayudan a introducir los diferentes tópicos de un discurso que sirven
para dar coherencia y unidad. Un tópico es la entidad sobre la que gira un fragmento o discurso.

Ya que los adverbios actúan en diferentes niveles, pueden desempeñar también funciones distintas en cada
nivel.

6. Conclusiones

La morfología de los adverbios influye en su nivel de integración: los derivados de adjetivos, pronombres y
sustantivos se emplean mayoritariamente como argumentos y adjuntos. Los de origen no derivativo aparecen
en los niveles más alejados del verbo (proposición, ilocución y discurso). A algunos es difícil asignarles una
función semántica precisa (προÏκα, gratis), mientras que a otros no se los distingue fácilmente de las partículas
(ἔτι se clasifica como adverbio cuando actúa como adjunto pero, cuando actúa en el nivel del discurso, se
asemeja a γάρ y tiene que aparecer en una posición fija).