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MOVIMIENTOS – UN PANORAMA PREVIO

Una de las ideas que podemos empezar a estudiar es la idea de espacio1. Esta idea surge en varios
momentos de la historia y más adelante se va desarrollando a lo largo de una gran cantidad de
tiempo. Hay que considerar que los sucesos en arquitectura necesitan del transcurso de muchos
años, por lo que es necesario estudiarla en un marco amplio para entender los cambios que
suceden. Es así como estudiaremos movimientos incipientes previos al sXX, estudiaremos las
vanguardias y también la relación con propuestas contemporáneas que se inspiran en aquellos
movimientos del s xx.

La historia, la teoría la crítica van juntas. Antes de estudiar esa idea de espacio, es necesario
entender qué es historia y qué es teoría.

La historia nos va hablando de hechos, de cosas que sucedieron y que quedaron registradas. Hay
que tener en cuenta incluso, cómo el ser humano interpreta lo sucedido. Los teóricos de la
arquitectura nos ayudan a interpretar los hechos históricos y a reflexionar sobre ellos, de esta
manera hay que ver si somos capaces de extraer aprendizajes, valiosas lecciones o nos limitamos a
mencionar fechas, períodos y datos que no tienen significado para nosotros.

Hay cosas que es necesario entender a través de la historia, porque sólo con una gran cantidad de
tiempo, podemos entender cómo el ser humano domina la naturaleza y se impone sobre ella,
también cómo las ideas evolucionan y los descubrimientos que cambian la manera en que
pensamos la realidad y lo que nos rodea hoy en día. Esto significa que, entendiendo hechos
pasados, podemos entender lo que sucede actualmente. Los hechos pasados involucran hechos de
toda índole, no solamente los hechos que se relacionan con lo arquitectónico.

Sin comprender conceptos como el movimiento moderno, qué es pos-modernismo, es difícil


entender a qué nos referimos cuando hablamos de lo contemporáneo. La arquitectura no es
solamente una expresión formal, un estilo que hay que asociar a un lugar o clasificar dentro de un
rango de tiempo. La arquitectura es un modo de pensamiento -es decir- se crean paradigmas que
van guiando la manera de proyectar. Por ejemplo, el paradigma de la arquitectura clásica: crear
arquitectura para dioses. Aun siendo humano, se puede representar la grandeza, belleza y demás
cualidades que pertenecen a lo divino, fabricando una visión de ser humano elevado.

Más adelante el ser humano desarrolla su capacidad lógica y su pensamiento racional y


desaparece el pensamiento centrado en fuerzas naturales o fuerzas míticas que entran en juego y
dirigen el destino humano. Es el ser humano ahora es el protagonista y el encargado de escribir su
propia historia – no los dioses como en la grecia antigua – es así como el paradigma de la época de
la ilustración se basa en lo científico como descubrimiento, explicar los fenómenos, encontrar la
causa a los efectos. De ahí viene una idea de progreso, al tiempo que transcurre la historia el ser
humano aprende a generar riqueza, y se va fortaleciendo la ciencia. El problema, es que para
generar riqueza hay que acabar con ciertos recursos naturales, que han creado problemas
ambientales de gran dimensión que vemos hoy en día.

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Durante el semestre, se hablará de la idea de espacio tomando como base los movimientos vanguardistas
Podemos imaginar aquellas épocas en donde no existían campos de conocimiento o disciplinas
definidas, como en el caso de la edad media, existían los oficios, aquellos que trabajaban con la
madera, con los metales, el trabajo manual del taller, eran los que se ocupaban en un trabajo
manual. Existían sistemas de creencias alrededor de lo religioso y lo pagano que explicaban las
cosas que sucedían, desde un pensamiento mágico. Es paradójico como en una época de la
historia, se intuía que la tierra es redonda, pero no se lograba dar explicación de este fenómeno,
pero como esta creencia iba en contra del poder religioso, había que acabar con quien defendiera
algo diferente a esos dictámenes de la iglesia. Más adelante se comprueba que la tierra es
redonda dando una explicación racional, con un conocimiento comprobado… ya no hay lugar para
las herejías, porque el conocimiento no es cuestión de creencia, se trata de aquello que se puede
explicar.

Siempre existió esa pugna entre la creencia y lo racional como fuerzas opuestas, esto se
correlaciona con el arte y la ciencia, cuyos fundamentos se han dado desde extremos opuestos en
el pensamiento. Han existido fuerzas que han impulsado la idea de que lo racional es la cumbre
máxima a la que puede llegar el ser humano. Creer que la razón es lo único que nos salva, es parte
del paradigma positivista, que se ha comprobado que no es benéfico para la historia del ser
humano, pero continúa predominando hoy en día. Es así como existen científicos tecnicistas-en
una época de lo transdisciplinario- quienes profesan el dogma de la ciencia como la única que nos
puede dar todas las respuestas.

Como contraparte a esa filosofía positivista, existen otros paradigmas desde los cuales se explica y
se fundamentan disciplinas como el arte, donde surge la necesidad por comprender la experiencia
artística, que es el encuentro entre el ser humano con las sensaciones o emociones que una obra
provoca, que son subjetivas y difíciles de describir y explicar sus causas. El enfoque filosófico que
estudia y permite comprender la experiencia artística se ha denominado fenomenología.

Quizás el ser humano no pueda vivir y actuar sin paradigmas. Hay que saber que un paradigma es
una idea o un marco bajo el cual se concibe la realidad. Quizás la arquitectura sea una de las
pocas disciplinas que logra integrar a la vez lo técnico – científico, con lo subjetivo – artístico y que
permite hablar de una complejidad que integra paradigmas de la ciencia y el arte.

El ser humano a lo largo de las épocas ha tenido distintos proyectos de humanidad, la del
movimiento moderno fue construir algo nuevo, la nueva arquitectura, y esa necesidad de
construir, de renovar fue tan fuerte que no importaba lo que encontrara a su paso, nada debía
detener la construcción de ese nuevo mundo. El movimiento moderno era parte de un espíritu de
una época, de una necesidad de reconstruir ese mundo devastado por la guerra, de encontrar otro
horizonte y dar nuevo curso a la historia. Pero el proyecto del movimiento moderno en algunos
casos resultó exitoso, pero cambió por completo la historia de la arquitectura, ahora el arquitecto
puede proponer sus propios lenguajes, sus discursos y maneras de proyectar, gracias a que los
arquitectos del mov. Moderno propusieron dejar atrás la idea de arquitectura que propiciaba la
École de Beaux Arts2.

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Escuela francesa que propiciaba la idea de una arquitectura enmarcada en los órdenes clásicos siguiendo
los tratados antiguos.
Los paradigmas cambian, y lo que en un momento era una prioridad -reconstruir Europa- ahora se
ha convertido en el hecho de repensar la ciudad, mientras la mirada histórica estuvo puesta en los
países europeos, ahora el mundo mira a Latinoamérica como territorio para producir lo no visto,
por los desafíos que representan las urbes latinoamericanas. Es una oportunidad para un cambio
de perspectiva y considerar que desde el pensamiento latinoamericano puede producirse
conocimiento que es válido, por lo tanto, consideraremos en lo posible, ejercicios de arquitectura
latinoamericana que hayan sido vanguardistas3.

La ciencia comenzó observando fenómenos que eran tangibles, estudia lo natural, el mundo de la
botánica, la química, las estrellas, las cosas que están en nuestro mundo, son evidentes y se
pueden comprobar. Luego avanza al cosmos y a cosas lejanas hasta llegar a cosas intangibles y
empiezan a existir teorías que requieren de la imaginación para ser concebidas -como por ejemplo
la teoría de la relatividad- hasta abordar aspectos que la razón ya no alcanza a comprender y que
al tiempo que mezclan un mundo intangible, se relacionan con el hecho de ser seres humanos en
esta tierra, un ejemplo de ello es la física cuántica, como aquella rama de la ciencia que explica
cosas intangibles. La historia del arte, comienza como un oficio que consiste en el manejo de
técnicas y materiales, hasta convertirse cada vez más en una disciplina conceptual. La idea de
artista en otras épocas era el ser que se recluía en su estudio interminables horas, para
perfeccionar su técnica y sus ideas. Hoy en día, la concepción de artista ha cambiado y es una
persona que interactúa con todo tipo de disciplinas y con comunidades, es la idea del arte
relacional. Es así como los paradigmas se transforman a lo largo de las épocas.

La arquitectura, el arte, han sido distintas manifestaciones de ese espíritu de época. Se puede
pensar el espíritu de una época como un impulso que contagia a las personas y las mueve a actuar
en cierta dirección, como el movimiento de liberación y revolución de los 60s el cual tuvo su
influencia y su expresión en la arquitectura, en colectivos como Archigram, Superstudio,
Archizoom, entre otros. Otro ejemplo es el pensamiento del movimiento moderno, que se expresó
a través de la pintura, la música, el cine y la arquitectura. Entonces, la arquitectura participa como
un miembro más, dentro de ese conjunto de expresiones y hace sus aportes a la cultura, a su
época.

Surge la pregunta… ¿existirá o es posible que exista alguna propuesta en arquitectura que esté
aparte del espíritu de la época y aparte de otras disciplinas y expresiones?

Por momentos, parece que la arquitectura es un mundo en sí mismo y puede que lo sea, pero
siempre ha compartido ideas, fundamentos de otras disciplinas y han existido inspiraciones
análogas entre diversas disciplinas, así que podemos pensar que la historia de la arquitectura ha
sido una historia ligada a la historia del mundo y de la cultura, porque la arquitectura ha
participado y es semilla para la construcción de la sociedad y el mundo.

Soy de las personas que piensa que el todo es más que la suma de partes, por lo que estudiar
movimientos, teorías y los rumbos que ha tomado la arquitectura en distintas épocas no se trata
de ir juntando fragmentos a ver de qué manera encajan, sino ver en esos fragmentos nuevas
maneras de relacionarlos, entender un panorama a la luz de una gran cantidad de tiempo, de
diversos cambios, de hechos que han cambiado el curso de las cosas y no la historia como una

3
Para saber más consultar: http://vanguardiasarquitectura.blogspot.com.co/
simple sucesión de hechos. Creo que es de esta manera más fascinante estudiar la historia, y
existe ese punto donde historia y teoría se juntan de manera estrecha. Tratemos de comprender
cómo es esa integración entre historia y teoría.

La teoría se puede definir, como aquello que nos permite reflexionar sobre el cuerpo de
conocimientos de nuestra disciplina. Desde la teoría surgen aportes y herramientas para
proyectar, herramientas tanto conceptuales como instrumentales. Nos ayuda a fundamentar y a
saber qué es lo que estamos haciendo, y en algunos casos el cómo hacerlo es una incógnita por
resolver en el acto proyectual.

La historia nos cuenta hechos, los cuales algunos están sujetos a interpretaciones y pueden
generar debate, por eso es importante conocer las corrientes de pensamiento, porque un hecho
pudo ser contado desde épocas diferentes, lo cual implica tener en cuenta diferentes perspectivas
de ver e interpretar lo que sucede. Por eso, las cosas pueden reinterpretarse, comenzar a ver
evidencias y usar el pensamiento creativo para provocar otro tipo de reflexiones. La teoría tiene
abierta la posibilidad de proponer.

Ahora podemos decir que teoría no es estudiar una lista de reflexiones o de ideas de distintas
épocas, sino es la posibilidad de construir algo a partir de una información dada, quizás
información que proviene de la historia, donde podemos a partir de hechos reflexionar, hacernos
preguntas, e imaginar cosas. Es allí donde teoría e historia interactúan y se relacionan. No sabría
realmente cómo separar o si se deben separar ambos campos. La teoría es una rama de la filosofía
y la historia es una disciplina en sí misma, pero creo que ambas comparten y se necesitan
mutuamente para ayudarnos en este viaje que es el conocimiento de la arquitectura.

Teniendo en cuenta la participación de la arquitectura en la construcción del mundo, pensaremos


los movimientos como un impulso para generar distintas expresiones, ligadas con los hechos
sociales, políticos, culturales y económicos. Vale la pena preguntarnos, cuál es el proyecto humano
de la época contemporánea, para entender bajo qué marco de pensamiento se están generando
propuestas en arquitectura. Teniendo un panorama amplio, vamos a descubrir esas posibilidades
de la expresión creativa de la arquitectura a través del estudio de las propuestas de las
vanguardias.

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