Lo primero que vamos a hacer es instalar VirtualBox en nuestro
Windows. Yo lo he hecho en Windows 7 pero es lo mismo si tenemos Windows Vista o Windows XP.
1. Descargamos VirtualBox de su página oficial (es completamente
gratuito). 2. Para instalar VirtualBox en Windows hacemos doble clic sobre el archivo descargado.
Contestamos que sí a la pregunta de si deseamos permitir que el
programa realice cambios en el equipo. Comienza el asistente para la instalación de VirtualBox y hacemos clic sobre Next para instalarlo.
En el siguiente paso debemos leer los términos de la licencia y
aceptarlos. Después hacemos clic sobre Next. Ahora podemos elegir las características de VirtualBox que vamos a instalar. Salvo que sepamos muy bien lo que hacemos, lo dejamos todo por defecto y pulsamos Next.
Después elegimos los accesos directos que queramos que se creen y
hacemos clic sobre Next. En la siguiente pantalla nos encontramos con un aviso sobre las interfaces de red: durante la instalación de los componentes de red de VirtualBox nuestra conexión a la red (local y/o Internet) se desconectará. Sólo será unos instantes pero hay que tenerlo en cuenta por si estamos haciendo a la vez alguna operación importante. Pulsamos el botón Yes.
Ya estamos listos para la instalación por lo que hacemos clic sobre el
botón Install. Tras una breve espera tenemos VirtualBox instalado y al hacer clic sobre Finish arrancará automáticamente.