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Pregunta de investigación:
¿De qué manera en el entorno social influye en las acciones del protagonista Jean-Baptiste
Código: gmf690.
Las actitudes de las personas son un mecanismo de reacción a la vida de manera mental y a
la vez emocional. Estas actitudes de los individuos se modifican a lo largo en base de las
interacciones que han tenido como el ámbito familiar, religioso, cultural y educacional. Sin
realidad de su vida, una inconformidad hacia la persona misma y la insatisfacción que tiene
por su vida, categorizándolas como acciones no éticas ante la sociedad. Dicho aspecto se
En la obra se puede determinar que al personaje se lo compara con otros personajes que hubo
siguiente lítote: “En el S. XVIII vivió en Francia uno de los hombres más geniales y
(Patrick Süskind “El Perfume”, 1985, p.9). Por otro lado combina el realismo con la ficción,
al momento que dice: “Se llamaba Jean-Baptiste Grenouille y si su nombre, a diferencia del
de otros monstruos geniales como De Sade, Saint-Just, Fouchè Napoleón, etcétera, ha caído
en el olvido” (Patrick Süskind “El Perfume”, 1985, p.9), debido a que se lo cataloga como un
monstruo que hizo algo de alta relevancia ante la sociedad, por otra parte debido a su
ambición, la cual se enfocaba en el mundo de los olores, no logró obtener una huella en la
El entorno social en el que nace Jean-Baptiste Grenouille el 17 de julio de 1738, París, no era
considerado un lugar higiénico apto para vivir, en especial el mercado de víveres, ya que una
Francia se encontraba con una extrema pobreza, esto que dejó pestes en los habitantes, y
miles de infecciones en esa área, como indica Patrick Süskind (1985) en su obra “El
Las calles apestaban a estiércol, los patios interiores apestaban a orina, los huecos de las
escaleras apestaban a madera podrida [...] hombres y mujeres apestaban a sudor y a ropa
sucia; en sus bocas apestaban los dientes infectados. Apestaban los ríos, apestaban las plazas,
apestaban las iglesias. El campesino apestaba como el clérigo, el oficial de artesano, como la
esposa del maestro; apestaba la nobleza entera, y sí, incluso el rey apestaba como un animal
carnicero. (p.9)
Muchas investigaciones determinan que en el entorno familiar el ser humano obtiene los
llaman “convivencia familiar”, debido a que su madre quiso deshacerse de él en el parto, así
como había hecho con sus otros cuatro hijos, como indica el autor: “Solo quería que los
dolores cesaran, acabar lo más repugnante parto. Era el quinto. Todos los habia tenido en el
puesto de pescado y las cinco criaturas habían nacido muertas o medio muertas.” (Patrick
Jean-Baptiste era diferente al resto de los niños, como se muestra en la siguiente metáfora:
“Igual que esta garrapata era el niño Grenouille. Vivía encerrado en sí mismo como una
cápsula y esperaba mejores tiempos” (Patrick Süskind “El Perfume”, 1985, p.26).Al fallecer
su madre en la horca y pasar a manos de una nodriza sin ningún tipo de educación, la actitud
de Jean-Baptiste comienza a formarse fría, es por esto que el autor comienza a compararlo
con una garrapata, queriendo demostrar que Jean-Baptiste a pesar de ser un niño aún, no
reflejaba ninguna emoción, sonrisa o un destello de mirada a menos que el decida que es el
momento indicado, por lo que los otros niños al ver esta actitud, comenzaron a tenerle miedo,
este personaje a lo largo de la historia desempeñó un roll de una persona que no expresaba
sus sentimientos, ni su forma de pensar, como lo indica la siguiente cita: “Hasta los tres años
no se puso de pie y no dijo la primera palabra hasta los cuatro; fue la palabra “pescado”
La niñez de Grenouille desde ese entonces influye bastante en su forma de ser y de pensar,
debido a que el personaje comienza a adoptar un odio contra él, y un desprecio hacia la
sociedad. Grenouille, luego de haber pasado toda su adolescencia trabajando con Grimal
como un curtidor. Este comienza a convertirse en un ser capaz de sobrevivir a todo tipo de
caza. El mayor coto de olores del mundo le abría sus puertas: la ciudad de París [...] miles y
miles de aromas formaban un caldo invisible [...] su finísimo olfato desenredaba el ovillo de
cuando emplea sinestesia para resaltar la escena como un pasaje ilustrado, haciendo
sinestesia:
Esta fragancia tenía frescura, pero no la frescura de las limas o las naranjas amargas, no la de
la mirra o la canela o la menta [...] no la de la lluvia de mayo o el viento helado [...] y era a la
vez cálida, pero no como la bergamota, el ciprés o el azmicle, no como el jazmín o el narciso,
no como el palo de rosa o el lirio [...] como un trozo de seda fina y tornasolada, pero tampoco
como la seda, sino como la leche dulce en la que se deshace la galleta [..., lo cual no era
posible, por más que se quisiera: ¡seda y leche! (Patrick Süskind “El perfume”, p.52)
Patrick Süskind define el término “perfume” cómo el roll que desempeña el ser humano ante
la sociedad, este al darse cuenta que no tenía una fragancia propia, comienza a actuar de
indebida, iniciando con interminables crímenes. La primera “presa” que persiguió por los
lúgubres callejones parisinos fue la que incentivó los otros asesinatos, debido a que lo que lo
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atrajo fue la comparación que este hizo con elementos de la naturaleza. De esta manera
nuevamente vemos como el autor refleja una sinestesia, la cual cumple dos de las anteriores
mencionadas, que es el olor al momento en el que asemeja el olor de su piel con las ciruelas y
el tacto, el cuál fue en el momento en el que la mató y comenzó a indagar sobre su cuerpo
quitándoles las prendas de vestir, para poder apreciar mejor, como se muestra en las
siguientes líneas:
Su sudor era tan fresco como la brisa marina, el sebo de sus cabellos, tan dulce como el aceite
de nuez, su sexo olía como un ramo de nenúfares, su piel, como la flor de albaricoque [...] y
la combinación de estos elementos producía un perfume tan rico, tan equilibrado, tan
fascinante, que todo cuanto Grenouille había olido hasta entonces en perfumes, todos los
edificios odoríferos que había creado en su imaginación, se le antojaron de repente una mera
insensatez [...] era la belleza pura. Grenouille vio con claridad que su vida ya no tenía sentido
Se puede apreciar que esta mujer era todo lo que el protagonista buscaba para poder
sustentarse, en ella encontró el propósito de su vida, lo que debía realmente se, pero al darse
cuenta de que no había forma de retener ese olor, se dio cuenta con claridad que su vida ya no
Había encontrado la brújula de su vida futura. Y como todos los monstruos geniales ante
quienes un acontecimiento externo abre una vía recta en la espiral caótica de sus almas,
destino. Ahora vio con claridad porqué se aferraba a la vida con tanta determinación y
terquedad: tenía que ser un creador de perfumes. Y no uno cualquiera, sino el perfumista más
Jean-Baptiste Grenouille nunca obtuvo una debida educación en la niñez, por lo que no sabía
distinguir entre lo bueno y lo malo, lo que conllevó a que a lo largo de la historia tomará
decisiones consideradas no éticas ya que comienza a buscar en otras mujeres y matarlas para
. El no conoce el amor, o el ser modesto. Para él sus ideas y metas eran tan claras que no se
paraba en detalles en cómo lograrlas. El egoísmo que sentía, era por el hecho de querer tener
un roll en la sociedad, importaba una cosa que era poder encontrar su olor propio. Esto puede
expresar su falta de educación. Cuando trabajó para Baldini, elaborando los perfumes o como
sin un rumbo fijo durante 7 años, el autor en esta parte denomina a la naturaleza con un
aspecto desagradable . «[...] como si fuera su propio cadáver, respirando apenas [...]» (El
perfume, 151) «[...] profirió un grito fuerte y terrible como si lo quemaran vivo», «Agitó los
brazos como si quisiera dispersar la niebla que quería asfixiarle» (Patrick Süskind “El
perfume”, p.163).
Grenuille recorre un largo camino lleno de asesinatos a mujeres con características parecidas,
refiriéndonos a el libro podemos decir que Grenuille hizo todo lo posible para logar su
objetivo, le daba lo mismo la vida o si es que tenía que matar gente para encontrar su lugar en
el mundo, de esta manera, con tal de satisfacer su necesidad llega al límite de una obsesión, lo
que al principio no tenía idea de que existía, se convirtió en algo sustentable para su vida, lo
único que le interesaba eran los olores y el perfume que quería crear, para tener una
presencia ante la sociedad, tras el asesinato de veinticuatro jóvenes doncellas, las cuáles
apresado. Süskind lo narra de manera fugaz e impersonal, sin ninguna importancia. Los
ciudadanos reclaman por su ejecución, pero segundos antes Grenouille abre la botella en la
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que contenía el perfume final y con esto abruma a la muchedumbre, consiguiendo así su
momento lo sabían todos [...] absurdo cariño infantil, y sí, Dios era testigo de amor hacia
aquel pequeño asesino y no podían ni querían hacer nada contra él [...] La multitud ya era
sólo líquida. Se había diluido interiormente en su alma y en su espíritu, era sólo un líquido
amorfo y únicamente sentía el latido incesante de su corazón; y todos y cada uno de ellos
pusieron este corazón, para bien o para mal, en la mano del hombrecillo de la levita azul: lo
Después de este suceso el protagonista tras haber logrado su objetivo que era elaborar el
mejor perfume del mundo, sintió que ya no tenía un propósito para seguir con su vida, todo lo
que deseaba estaba cumplido y expresa que su último deseo era morir, por lo que renuncia al
poder que tenía sobre la gente, ya no quería existir lo que se puede comprobar con la
siguiente cita: “Ya no le atraía la vida en una caverna. Había conocido esta experiencia y
comprobado que no era factible vivirla. En general, no quería seguir viviendo. Quería llegar a
París y morir allí. Esto era lo que quería.” Finalmente, Grenuille muere a manos de unos
vándalos que atraídos por su perfume se lo comen, como lo demuestra en las últimas líneas
de la última metáfora:
Se sintieron atraídos hacia aquel ángel humano del cual brotaba un remolino furioso, un
reflujo avasallador contra el que nadie podía resistirse [...] Se abalanzaron sobre el ángel,
cayeron encima de él, lo derribaron. Todos querían tocarlo, todos querían tener algo de él [...]
En un tiempo muy breve, el ángel asesino quedó partido en treinta pedazos y cada miembro
Como expresa Honneth “la vida social se cumple bajo el imperativo de un reconocimiento
recíproco, ya que los sujetos sólo pueden acceder a una autorrelación práctica si aprenden a
que sus destinatarios sociales.”. Es decir, cada persona puede construir una identidad de
acuerdo a qué lugar ocupan en la sociedad (una etiqueta social), si una persona no es
reconocida , pierde su integridad y su moral y es capaz de actuar de manera indebida ante las
Bibliografía
Arrese, H. (12 de diciembre de 2010). Obtenido de Studylib:
http://studylib.es/doc/4488875/alteridad-y-reconocimiento-en-la-teor%C3%ADa-de-axel-
honneth