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“HACIA EL DESARROLLO PROGRESIVO DE LAS COMUNIDADES Y

CIUDADES SOSTENIBLES”.

Propuesta de Resolución presentada por la delegación de Marruecos

LA ASAMBLEA GENERAL,
Reconociendo, el derecho universal a una vivienda digna y adecuada plasmada en el
artículo 25, apartado 1 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos( DUDH) así
como en el artículo 11 del Pacto Internacional de Derechos Internacionales, Económicos,
Sociales y Culturales (PIDESC), como un derecho fundamental de todo ser humano por tal
condición;

Guiados por el objetivo número 11 de los 17 objetivos de desarrollo sostenible para


transformar el mundo: Lograr que las ciudades y los asentamiento humanos sean inclusivos,
seguros, resilientes y sostenibles;

Plenamente alarmados con la problemática actual que enfrenta el mundo, con 863
millones de personas viviendo en barrios precarios, según cifras de las Naciones Unidas, y
una proyección para el 2020 de 889 millones, sumamos que más de la mitad de la población
urbana de África vive en asentamientos informales según ONU Hábitat, siendo esta, la región
del mundo con la mayor incidencia de tugurios;

Advirtiendo además, que algunos políticos, como Gilbert Dzikiti, presidente de la


Asamblea Democrática para la Restauración y el Empoderamiento, consideran que esta
tendencia al aumento de los tugurios es consecuencia de que los gobiernos no han invertido
en desarrollo, ni rural ni urbano;

Convencidos, además, de que varios países han logrado frenar el crecimiento urbano
asociado a la pobreza y expansión de tugurios, mejorando la calidad de vida de sus
poblaciones, nace el programa Ciudades sin Tugurios, que busca promover la urbanización
sostenible, así como la mejoría en las condiciones de vida de los habitantes y así, eliminar los
asentamientos precarios;
Notando con satisfacción, que desde su lanzamiento en 2004, el programa ha
alcanzado más del 70% de sus objetivos, con efectos benéficos para los hogares menos
favorecidos, un fuerte liderazgo y voluntad política, con metas bien definidas, un modus
operandi y un presupuesto adecuado;

Dando la bienvenida, al apoyo de la Comisión Europea y al apoyo financiero del


Grupo África-Caribe-Pacífico (ACP), que logró que más de 150 pueblos y ciudades de esas
regiones consoliden sus esfuerzos por mejorar las condiciones de vida de los habitantes de
tugurios, siendo galardonado con el Pergamino de Honor de ONU- Hábitat en Octubre del
2010 en Shangai.

RESUELVE:

1. Considera a los asentamientos precarios “no como una consecuencia desafortunada,


sino como un problema de primera grandeza.” (UN-HABITAT, 2003), que no sólo se
refiere a la capacidad de consumo y/o tenencia de bienes, sino a un concepto global de
necesidades materiales y al estilo de vida de las personas en el lugar en el que residen.
2. Alienta a mejorar las condiciones de vida de las poblaciones de tugurios a través de
los gobiernos y sus autoridades, con un presupuesto de 18.000 millones de dólares
anuales - según estimaciones de las Naciones Unidas.
3. Llama a la participación en la Concatenación de Tugurios, que sugiere la
participación activa de los residentes y la cooperación del sector privado para tener
acceso, en primer lugar, a los servicios más importantes, como agua no contaminada,
higiene y saneamiento.
4. Recomienda el desarrollo de programas como La Corporación Nacional de Vivienda
(NHC) como inversión autofinanciada, que busca resolver el déficit habitacional, a
través de la construcción de multifamiliares, al que las familias podrían acceder con
apoyo del Estado, que les permita alquilar uno de los cuartos del apartamento, y de
esta forma, pagar la hipoteca y dejar los tugurios.
5. Define vínculos estrechos entre el Gobierno, el Ministerio de Vivienda y Desarrollo
Urbano, la Junta Nacional de Vivienda, sociedades inmobiliarias y las comunidades,
para realizar la reforma del sector urbano, otorgando la tenencia de tierras a la
población a través de terrenos en fideicomiso o lotes del Estado, con infraestructura y
servicios básicos.
6. Solicita al Gobierno y a los Ministerios competentes, las debidas alianzas estratégicas
a nivel nacional e internacional, además de asociaciones con importantes organismos
bilaterales de desarrollo, que permitan sumarse al programa Ciudades sin Tugurios,
para combatir la pobreza, no a los pobres; para acabar con los tugurios, pero no con
los habitantes de los tugurios; y para eliminar la ocupación ilegal, pero no a los
ocupantes ilegales.
7. Exhorta a los gobiernos la responsabilidad y el compromiso de garantizar y promover
entornos de paz, orden y buen gobierno, centrándose en la gestión urbana de los
tugurios, para la mejora de las condiciones de vida de las poblaciones vulnerables.
8. Finalmente condena, el aumento de tugurios a nivel mundial, exigiendo la
participación inmediata en las políticas CNUAH (Hábitat), en la Campaña Mundial
de Seguridad de Tenencia y en la Campaña Mundial sobre Gestión Urbana que exige
que los pobres, tanto en zonas rurales como urbanas, deben ser reconocidos como
ciudadanos, para así promover, una ciudad incluyente, como un lugar en el que todos
contribuyan productivamente y gocen de los beneficios de la vida urbana.
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Documento de Posición Oficial


País: Marruecos
Comité: Conferencia de las Partes (COP 21)
Tema: Replanteamiento del ODM N° 11: Conseguir que
las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos,
seguros, resilientes y sostenibles.
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"Hemos logrado en el curso de 17 años realizar reformas políticas profundas,
grandes planes económicos y proyectos de desarrollo humano que han cambiado la
fisonomía de Marruecos”. – Mohamed VI
Las comunidades sostenibles son económicamente, ambientalmente y socialmente
sanas y fuertes y usan una perspectiva a largo plazo, centrándose tanto en el
presente como en el futuro para que las necesidades de la generación actual y
futuras sean satisfechas con recursos adecuados. Según información de la
Asamblea Regional y Local Euromediterránea, la tasa de urbanización de los países
mediterráneos, que en 2000 era del 64 %, pasará al 72 % en 2025, y como
consecuencia, Marruecos presentará necesidades cada vez más importantes, como
la creciente contaminación urbana, acústica y atmosférica provocada por la
circulación viaria, la congestión de redes con costes medioambientales y sociales y
problemas de transporte colectivo.

El Estado marroquí es consciente de la problemática general y para el beneficio de


su estado, buscan promover la adopción trascendental de un turismo sostenible -
principal actividad económica del país. Se suma la Iniciativa Nacional del Desarrollo
Humano (INDH) que busca hacer frente al déficit social ampliando el acceso a los
servicios sociales de base, promover actividades creadoras de empleo e ingresos
estables, además de adoptar acciones para el sector informal y ayudar a las
personas que padecen una gran vulnerabilidad frente a necesidades específicas,
como la urbanización sostenible y la mejoría de condiciones de vivienda para más
de 1.742.000 personas que viven en viviendas informales y de calidad inferior,
según datos de la conferencia realizada en el 2012 en Rabat por ONU- Habitat,
logrando así una cohesión social y una integración urbana mejor desarrollada.
Desde su lanzamiento en 2004, el programa ha alcanzado más del 70% de sus
objetivos, con efectos benéficos para hogares menos favorecidos, con apoyo, del
Consejo de Seguridad (2012-2013) donde se firmaron 6 declaraciones de
intenciones, relativas a Recursos Hídricos, Cuencas Hidrográficas, Turismo,
transporte, desarrollo Social y Cooperación Judicial.

En suma, queda claro que Marruecos es un país en plena transformación


económica, social y política, puesto que el país ha experimentado un crecimiento
económico notable, ha surgido una nueva clase media urbana, muchas ciudades se
han renovado extraordinariamente y las infraestructuras (carreteras, autopistas,
ferrocarriles y puertos) se han modernizado. Marruecos, en 2016, es un país más
desarrollado que hace 15 o 20 años. El nivel de vida de la población ha aumentado,
ha disminuido el analfabetismo y ha mejorado la educación. Ciudades sin
Tugurios, busca promover, actualmente, la urbanización sostenible, así como la
mejoría en las condiciones de vida de sus habitantes que pretende eliminar los
asentamientos precarios.

“Desde su lanzamiento en 2004, el programa ha alcanzado más del 70% de


sus objetivos, con efectos benéficos para hogares menos favorecidos, un fuerte
liderazgo y voluntad política, con metas bien definidas, un modus operandi y un
presupuesto adecuados. La democracia local se hizo más eficaz en el proceso y el
plan fue galardonado con el Pergamino de Honor de ONU-Hábitat, en octubre de
2010 en Shanghái. Con el apoyo de la Comisión Europea y el apoyo financiero del
Grupo África-Caribe-Pacífico (ACP), más de 150 pueblos y ciudades de esas
regiones aprovecharon la cooperación técnica de ONU-Hábitat para consolidar sus
esfuerzos por mejorar las condiciones de vida de los habitantes de tugurios.” (ONU
HABITAT)

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