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EVALUACIÓN INTERNA EN

LA ESCUELA
EVALUAR PARA MEJORAR.
EVALUACIÓN EDUCATIVA EXTERNA. ANTECEDENTES EN
MÉXICO.

PROFA. AMALIA ISABEL PÉREZ ALANÍS

ASESOR: GILBERTO NIETO LÓPEZ.


11 de Febrero 2018
Como docentes, la evaluación es parte de nuestras vidas, al terminar nuestra clase hacemos
un balance, de lo que hicimos, cómo lo hicimos y los que nos falta hacer. Cuando se pretende mejorar
es indispensable continuamente evaluar nuestros propios procedimientos de enseñanza, de modo que
nos permita adecuarlos a las necesidades y características del alumnado de manera que satisfagan
las expectativas de los educandos. De igual modo, los alumnos deben evaluarse para comprobar su
evolución y la eficacia del proceso de enseñanza-aprendizaje que estamos aplicando.

Todo ello nos lleva a la conceptualización que de la evaluación educativa hace Casanova, en
1995: “Proceso sistemático y riguroso de recogida de datos, incorporado al proceso educativo desde
su comienzo, de manera que sea posible disponer de información continua y significativa para conocer
la situación, formar juicios de valor con respecto a ella y tomar las decisiones adecuadas para proseguir
la actividad educativa mejorándola progresivamente”.

Y ese es el propósito que se ha instaurado en México a lo largo de varias décadas, mejorar la


calidad educativa, y con la reforma del artículo 3° Constitucional, adicionamos calidad educativa con
inclusión y equidad.

La escuela cada vez se concibe más a sí misma como autónoma requiere incrementar y
desarrollar la evaluación interna (o autoevaluación) y resituar la evaluación externa.

En México, se han utilizado principalmente dos instrumentos para evaluar el aprendizaje


alcanzado por los alumnos de educación básica y media superior: las pruebas ENLACE (Exámenes
Nacionales del Logro Académico en Centros Escolares) y EXCALE (Exámenes de la Calidad y el Logro
Educativo), administradas por la SEP y el INEE respectivamente.

La evaluación de ENLACE representó para nosotros los docentes un reto, pero al mismo tiempo
un método de empuje para mejorar nuestra práctica docente, analizar los resultados, las estadísticas
comparativas con otros estados, entre escuelas de nuestra zona propició que buscáramos estrategias
para mejorar nuestros procesos de enseñanza aprendizaje. Pero al mismo tiempo se presentaron
algunos inconvenientes y desacuerdos en su formulación y aplicación. Para empezar, no había
correspondencia entre la formulación de preguntas y el contexto rural de nuestros alumnos, sobre todo
en Telesecundaria, donde un gran número de alumnos son de condición indígena. Y después se
empezaron a presentar conductas deshonestas al preparar a los alumnos especialmente para el
examen de ENLACE y para obtener los beneficios de los incentivos por mejores resultados. Y en
cuanto a EXCALE, no se logró el reconocimiento social ni los resultados esperados para poder
encauzar objetivos que impactaran en decisiones sobre la política educativa.
Dado todo lo anterior, es aquí donde el INEE juega un papel radical en el proceso de evaluación
de escuelas. El INEE tiene como objetivo apoyar a las autoridades correspondientes en la evaluación
de las escuelas como organizaciones singulares, para lo cual diseña modelos de autoevaluación de
planteles y sistemas de evaluación además de monitoreo externo a complementarios. Una de las
orientaciones generales que se proponen para el INEE, establece que los resultados de las
evaluaciones no deben referirse a individuos, sino a sistemas o subsistemas.

Sin embargo, estas evaluaciones de Estándares Nacionales presentaron las siguientes


deficiencias:

a) no permitían construir una visión general del aprendizaje de los estudiantes como resultado
de su escolarización formal,

b) no daban información acerca de los puntos fuertes y débiles del aprendizaje de los
estudiantes en las asignaturas más importantes y,

c) no permitían las comparaciones del rendimiento escolar, ni la posibilidad de observar las


tendencias de los aprendizajes a lo largo del tiempo.

En 2013, el INEE solicitó a un comité de expertos un estudio para analizar la validez de las
pruebas ENLACE y EXCALE. Además, organizó el Seminario Internacional “Hacia una nueva
generación de evaluaciones estandarizadas”, a fin de fundamentar el desarrollo de las nuevas
evaluaciones nacionales del aprendizaje, tomando en consideración las experiencias exitosas de otros
países.

Las experiencias nacionales de evaluación de logro educativo y la participación de México en


programas internacionales con objetivos similares han proporcionado lecciones muy importantes. Para
que las evaluaciones nacionales del aprendizaje cumplan con su propósito es necesario:

a) que se cuide el rigor metodológico en su diseño, construcción y aplicación;

b) que se norme el uso e impacto de los resultados y se garantice que la información que ofrecen
sus resultados se corresponda con los propósitos para los que fueron diseñadas; y,

c) que se garantice la precisión y la comparabilidad de las medidas, a fin de lograr que la


información que se dé sobre los posibles cambios a lo largo del tiempo sea lo más confiable posible.

Derivado de lo anterior, dio paso a la aparición de PLANEA, mejorando sus propósitos de


acuerdo a las necesidades actuales:
1.- Informar a la sociedad sobre el estado que guarda la educación del país en términos del
logro de aprendizaje de sus estudiantes de educación básica y media superior.

2.- Aportar a las autoridades educativas información relevante para el monitoreo, la planeación,
programación y operación del sistema educativo y de sus centros escolares.

3.- Ofrecer información pertinente, oportuna y contextualizada a las escuelas y a los docentes,
que ayude a mejorar sus prácticas de enseñanza y el aprendizaje de sus estudiantes.

4.- Contribuir al desarrollo de directrices para la mejora educativa con información relevante
sobre los resultados educativos y los contextos en que tienen lugar.

En 2014, el INEE publicó un reporte de la Organización para la Cooperación y Desarrollo


Económico (OCDE) que revisa críticamente las evaluaciones educativas en nuestro país. En el
capítulo 3 “La evaluación de los alumnos”, se puede encontrar el desarrollo de un nuevo marco para
la evaluación de los estudiantes, donde se toman en cuenta aspectos como el contexto, los
aprendizajes esperados, la participación de los padres de familia, capacidad del país para diseñar y
aplicar evaluaciones a grande escala, la voz de los propios maestros, directivos, alumnos y expertos
en educación, entre otros aspectos.

El cambio y la mejora de la calidad en los centros educativos es un objetivo alcanzable si se


mejoran los procesos de gestión, de organización. Una de las herramientas que posibilitan esta mejora
en la gestión es la evaluación.

La evaluación facilita la información necesaria sobre el estado del centro, potenciando


mecanismos de discusión, reflexión y participación de todos los agentes implicados.

La evaluación perderá su sentido si no está enfocada a analizar la eficiencia y la efectividad del


sistema para lograr un determinado perfil de centro y una determinada posición del mismo en el
entorno.

Finalmente, la evaluación del aprendizaje deberá cubrir ciertos requisitos técnicos, a fin de
asegurar su calidad y la posibilidad de cumplir con eficiencia sus objetivos: validez, confiabilidad,
objetividad y accesibilidad.
BIBLIOGRAFÍA

INEE ENLACE-PLANEA.pdf consultado en:

https://ucuauhtemoc.mrooms.net/pluginfile.php/1121/mod_resource/content/1/INEE%20ENLACE-
PLANEA.pdf

Horbath, Jorge E.; Gracia, Ma. Amalia. LA EVALUACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO Revista de
Relaciones Internacionales, Estrategia y Seguridad, vol. 9, núm. 1, enero-junio, 2014, pp. 59-85.

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