Beer: ¿y cómo voy a saber?

Psicólogo: entonces ¿no te ha dicho?

Beer: no, claro que no, no la he dejado que me diga nada.
Psicólogo: ¿por qué?
La navidad se acerca y hay que preparar los festivales navideños para la escuela. Si quieres Beer: mire doctor puedo estar loca, pero no soy pendeja. Yo leo y mucho, sé que los
una obra de teatro con tema navideño, pero que no sea la típica pastorela, aquí tienes el esquizofrénicos se creen elegidos de Dios para hacer cosas importantes en este mundo. Ver
guión completo de esta obra de teatro corta navideña para dos mujeres y un hombre. Espero ángeles me preocupa, pero nunca me voy a sentir elegida de Dios ¡porque soy atea! así que
que la disfruten en su teatro escolar. no voy a escuchar un mensaje que no es para mi.
Mensaje divino (Comedia) Psicólogo: interesante...
Tania Ruíz Angel: ya te explique que lo tuyo no es esquizofrenia, ¡por Dios!
La acción sucede en el consultorio de un psicólogo escolar. El psicólogo está revisando un Beer: ¿a no? ¿entonces cómo le llamas a esto? Bipolaridad no es.
expediente con cara de preocupación, momentos después tocan su puerta. Psicólogo: ¿te dijo algo?
Psicólogo: adelante. Beer: sí, insiste en que no soy esquizofrénica. Por favor doctor, haga algo, ya. Lo que sea,
(Entran dos chicas, una de ellas está vestida como ángel, la otra está vestida de negro) pero quítemela de la cabeza.
Psicólogo: ¿fumas?
Psicólogo: ¿Bernardette? Beer: no
Bernardette: Sólo dígame Beer, no sé qué estaban pensando mis papás cuando me Psicólogo: ¿te drogas? Puedes decirme la verdad, esto no tiene por qué figurar en tu
pusieron ese nombre. expediente.
Psicólogo: Está bien, Beer, toma asiento. ¿Qué te trae por aquí? Beer: no.
Beer: ¿no leyó mi expediente? Psicólogo: ¿ves mucha televisión?
Psicólogo: sí, pero prefiero que tú me lo cuentes. Sé que los maestros pueden ser muy Beer: No doctor, si yo soy 132, yo sí leo, no veo televisa, ¿que no lo nota en mi lenguaje?
exagerados con sus comentarios, entiende, tienen muchos chicos que atender. ¿Parezco acaso creyente de la rosa de guadalupe y el airecito ese que anuncia el milagro?
Beer: pues lo que pasa doctor es que me estoy volviendo loca, así de fácil. Psicólogo: no, no pareces creyente de nada. Bien, vamos a comenzar con unas simples
Angel: que no te estás volviendo loca, ya te dije, soy un ángel, tengo un mensaje divino que preguntas. Estas alucinaciones pueden ser producto de un fuerte estrés, de la influencia de
darte. la época navideña, de el exceso de alcohol en las posadas, por citar sólo algunas causas
Beer: ¿escuchó? desencadenantes.
Psicólogo: sí, ¿por qué crees que te estás volviendo loca? Angel: mira Bernardette lo más sencillo es que me escuches, el tiempo apremia, tengo que
Beer: no escuchó. entregar mi mensaje o perderé la oportunidad de convertirme en árcangel.
Psicólogo: sí escuché. Beer: ¿de esto se trata todo?
Beer: a mí no, al ángel este que traigo al lado. Psicólogo: sí, en la mayoria de los casos las alucinaciones se pueden deber a ...
Psicólogo: ¿cuál ángel? Beer: no le pregunté a usted. ¿De esto se trata todo? ¿de volverme loca para que tú puedas
Beer: ¡ay mire doctor! dejemos de lado la terapia y vayamos directo a la medicación porque ser arcangel? ¿no te parece que es demasiado egoísta de tu parte conflictuarme de esta
ya no aguanto estar escuchando al angelito este diciéndome todo el día que me tiene que dar manera sólo por que quieres ser arcángel?
un mensaje divino. Angel: pero yo no te escogí, fue Dios.
Psicólogo: yo no te puedo medicar, soy psicólogo, no psiquiatra. ¿Desde cuándo ves al Beer: ¡ay no me salgas otra vez con eso! Por favor doctor, deme algo ¡ya!
ángel? Psicólogo: (busca en su cajón y saca un frasco de pastillas) sólo tengo paracetamol.
Beer: desde ayer. Angel: el mensaje es muy sencillo lo único que Dios quiere es...
Psicólogo: ajá, ¿qué te dice? Beer: ¡Noooo! ¡Calla! No quiero escucharte. (Toma el frasco de pastillas) No digas nada, te
Beer: que me quiere dar un mensaje divino juro que me suicido
Psicólogo: ajá... ¿cuál mensaje?
Psicólogo: No por favor, apenas estoy comenzando mi carrera, no quiero tener un suicidio Angel:¿Rodriguez? ¡Ay, qué pena! Busco a Gonzáles. Bernardette González.
en mi expediente. Respira profundo, cierra los ojos, concéntrate en un punto blanco sobre Beer:¿cómo? Ni siquiera soy la elegida? Todo este tiempo tratando de volverme loca para
una superficie negra. nada.
Beer: (siguiendo las indicaciones) ¿y eso sirve para que el angel desaparezca? Angel: lo siento adiós.
Psicólogo: no sé, eso es lo que me dice mi psicólogo para que yo me tranquilice. Si quieres (El ángel desaparece, es decir ya no la ven ni el psicólogo ni Bernardette)
hazlo a ver si a ti te da resultado. Psicólogo: ¿desapareció?
(Beer comienza a reir histérica) Beer: eso parece. Yo ya no la veo.
Psicólogo: ¿ahora qué te pasa? Psicólogo: ¿y la escuchas?
Beer: es que todo es muy gracioso. (Los dos se quedan atentos, en silencio)
Ángel: ahora sí que estás a punto de volverte loca. Mira te voy a demostrar que no soy una Beer: doctor
alucinación. Psicólogo: ¿qué?
Psicólogo: (grita porque ya ve al ángel) Beer: ya no la escucho, sólo oigo a mis voces de siempre.
Ángel: buenos días doctor, ahora puede decirle a Bernardette que no está loca. Psicólogo: yo también. En ese caso creo que podemos dar por terminada la consulta.
Psicólogo: ¡Histeria colectiva! Eso es, leí un caso así en la escuela: mucha gente comienza Beer: ¿y cómo explica esto?
a tener los mismos síntomas o cree ser testigo de un milagro sólo por la histeria colectiva. Psicólogo: creo que es un caso agudo de estrés, causado por la presión de los exámenes,
Ángel: ¡Dios mío! Pero qué difícil es dar un mensaje divino hoy en día. Antes era tan por el exceso de los desvelos y por la presión de la navidad. Con un poco de descanso
sencillo, bastaba con cualquier señal, con que un animal hablara, con un sueño y ya. Todos olvidaremos todo esto.
quedaban convencidos de su participación dentro del plan divino. No cuestionaban a los Beer: bueno, prefiero estar estresada a ser esquizofrénica. Aunque usted también vio al
pobres mensajeros. ¡Tengo casi treinta años humanos tratando de dar un mensaje, uno solo ángel.
para poder ser arcángel y nada! Todos creen que enloquecieron. Hasta los más religiosos Psicólogo: bueno, hay que olvidar eso.
ponen en duda su cordura, ¡no ha habido nadie que me crea! Beer: sí, es más sencillo olvidar que creer en los ángeles.
Psicólogo: Tranquila, tranquila. ¿Has pensado que si todos están en tu contra quiza el Psicólogo: Puedes regresar a clase.
problema no sea el mundo, quizá el problema eres tú? (Beer sale, el Psicólogo se queda en su despacho, intentando entender la situación, toma
Ángel: ¡yo! unas pastillas, se va)
Psicólogo: es posible. FIN
Ángel: no, yo no puedo ser el problema.
Psicólogo: primer síntoma: la negación. Después vendrá la furia... Si este texto te gustó puedes hacer tres cosas:
Beer: doctor esos son los pasos para aceptar la pérdida. 1.- Comparte en tus redes sociales
Psicólogo: cierto, quizá apliquen en esta ocasión. 2.- Deja tus comentarios
Angel: ¡lo unico que quiero es dar mi mensaje¡ 3.- Deja tu correo para que recibas las nuevas obras publicadas.
Psicólogo: ¿ya ves? furia. Bueno, dinos tu mensaje Publicado por Tania Ruiz
Angel: ¿En serio? Etiquetas: comedia, Tania Ruíz teatro
Psicólogo: Sí, te escuchamos
Ángel: pero ... solo se lo puedo darselo a Beernadette
Beer: ¡yo no quiero escucharlo!
Psicólogo: No seas tan cerrada, por favor sólo es un mensaje.
Beer: ¡me vale madre su mensaje! Si usted lo que quiere escuchar está bien, pero a mí no
me metan en sus líos.
Psicologo: ¡Bernardette Rodriguez qué vocabulario es ese!

Monólogo cortó para adolescentes
De Tania Ruíz
A veces quisiera...
Entra Melissa a la habitación, se ve que está molesta, prende su laptop o su vídeo celular.
Melissa: (preparando todo para grabar mientras dice el texto) ¿Así que me castigas porque
me quieres mucho? Sí, claro, ¡eso es estúpido! Tú eres una estúpida, miedosa y anticuada.
Quisiera que no fueras mi madre... siempre regañándome y prohibiéndome cosas. ¿Cómo te
atreves a decirme que me quieres?
(La cámara está preparada para comenzar a grabar, Melissa se ve en el espejo, se arregla)
Melissa: En este vídeo voy a hablar de los padres, de las madres y de lo mucho que nos
hacen sufrir.
A veces quisiera haber nacido en otra familia, a veces quisiera tener unos padres
diferentes...
¿Cuántas veces te han castigado? A mí muchas, y todo porque mi mamá tiene la absurda
idea de que así me demuestra su amor. ¿
Qué no se supone que cuando quieres a alguien haces cosas para que esa persona se sienta
bien? Yo me sentiría muy bien y muy feliz si mi mamá me diera permiso de ir a la fiesta de
Karina.
Pero no ¡¿cómo me va a dejar ir a una fiesta en donde habrá alcohol y muchachos guapos?!
Tengo 15 años, edad suficiente para divertirme, y sí puede que tome un poco. ¿Pero qué
tiene de malo tomar? No me voy a emborrachar, tampoco seré una alcohólica...
¿Y cómo voy a tener novio si no me dejan salir? ¿Mi mamá quiere que me meta de monja o
qué?
“Estudia”, me dice, cómo si estudiar terminara con todos los problemas. Mi mamá estudió y
de todas maneras no tenemos dinero. Mi papá también estudió ¿y? ¿sirve de algo? ¡No! No
me pueden comprar el Iphone que quiero, ni la ropa que me gusta. Miren los zapatos que
traigo ¡son una vergüenza!
Y ni les enseño mi casa porque es para morirse, está horrible.
(imitando a su mamá) “Te damos todo lo que necesitas” “tienes libros, comida, ropa, hasta
un celular, ya quisieran muchos tener lo que tú tienes” Pinche celular de porquería, esto
pasó de moda hace como tres años...
Lo que pasa es que mi mamá es una vieja aburrida y menopáusica que solo se la pasa bien
haciéndome sufrir.
Mientras yo grabo este vídeo, mis amigas se están arreglando para ir a la fiesta de Karina,
mientras yo esté haciendo la tarea, ellas estarán bailando, tomando y platicando con los
chicos más guapos de la escuela.
Seguramente mientras yo esté cenando, Karina estará besando a Jorge...
Tengo 15 años y nunca me han besado, porque según mi mamá estoy muy joven para eso.
Basta... ya sé lo que tengo qué hacer
(Apaga la cámara, marca en su celular)
Melissa: (al teléfono) hola, Karina... mi mamá no me dejó ir a tu fiesta... ya sé... es una
idiota, pero ya estoy harta de ella y de sus cuidados así que me voy a escapar de la casa,
total se supone que estoy en mi cuarto, puede que ni se entere que voy a salir... tiene mucho
trabajo, ni siquiera va a venir a ver cómo estoy... ya sé, me gustaría tener unos papás como
los tuyos... oye ¿tú crees que puedan venir por mí? .... ¿Ya estás con Jorge?... ¡qué suerte
tienes!... sí... muy bien... aquí los espero (cuelga)
Melissa: ¿qué me pongo? No tengo nada de ropa linda, tendré que irme con esto... ¡qué
emoción! Mi mamá está loca si cree que me voy a perder esa fiesta... y si me descubre, ni
modo... la divertida no me la quita nadie... ¡Los cigarros! Ya se me estaban olvidando y con
el trabajo que cuesta conseguirlos...
(Suena el celular)
Melissa: ¡hola!... mi mamá me castigó y no me dejó ir a la fiesta... sí, ya vez que es una
vieja histérica, a veces quisiera que ya se muriera para que me deje en paz... pero sí voy a
ir... sin permiso y a escondidas... le pedía a Karina que viniera por mí.... ¿sabes que ya está
con Jorge? ... ¿desde anoche?... ¡no es cierto!... ¿ella te dijo?... ¿y cómo fue?... ¡qué
nervios!... ¿en su casa?... es que los papás de Karina son la onda, mi madre se infarta si un
muchacho se queda a dormir aquí... ¡Con razón sentí que Karina estaba más feliz que de
costumbre!... sí, también parecía que estaba un poco tomada... bueno nos vemos al rato...
(Cuelga)
Melissa: (llama a Karina de nuevo) Hola... ¿les falta mucho para llegar? Ya estoy lista... ¿en
diez minutos? Bueno, sí me voy a la esquina de la casa y ahí los espero... (Melissa se retira
un poco el celular como si hubiera escuchado un sonido muy fuerte) ¡Karina! ¿qué pasó?...
¡Karina!... ¿están bien?

(silencio) ¡Karina contéstame!... ¡Karina!... (se nota que está preocupada) por favor, no me
hagas bromas, ya dime qué pasó... ¿quién habla?... sí, la conozco es mi amiga, estaba
hablando con ella... ¿por qué tomaste su celular?... ¿¡qué!?... ¿ella está bien? ... no es
cierto... ¿es una broma, verdad? Mira, dile a Karina que no es gracioso... voy a salir y la veo
en unos minutos en la esquina de mi casa...

(Melissa se queda escuchando... está inmóvil... no puede creer la noticia que le están
dando... a lo lejos se oye el sonido de una ambulancia)

Melissa: sí... puedo llamarle a sus papás... sí... (cuelga)

Melissa: (va a marcar, se detiene) no puede ser cierto... tiene que ser una broma, a Karina le
encantan las bromas... pero ahora sí se pasó... no puede estar muerta... no puede ser
verdad.... ¡Mamá! Necesito que me lleves a ver Karina, dicen que tuvo un accidente...

Melissa sale de escena.

Oscuro.

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Publicado por Tania Ruiz

Etiquetas: drama, Tania Ruíz teatro