El vocablo latino habēre llegó al castellano como haber. Este verboirregular
suele cumplir funciones auxiliares. Haber, en este marco, permite la conjugaciónde otros verbos en el caso de los tiempos compuestos. Por ejemplo: “Seguramente habrás visto lo que pasó” (“habrás” / haber), “Ya te he dicho todo lo que sé” (“he” / haber), “¿Qué has hecho anoche?” (“has” / haber). También puede usarse para denotar la obligación o la necesidad de hacer lo que expresa el verbo infinitivo que acompaña: “He de ir a la escuela, sino mis padres se enojarán” (“he” / haber), “Si no encuentro otro trabajo en los próximos días, habré de quedarme con este empleo” (“habré” / haber), “Hubo que ir a la comisaría a firmar unos papeles” (“hubo” / haber). En impersonal, haber se vincula a suceder, existir o estar: “El tránsito está interrumpido porque hubo un accidente” (“hubo” / haber), “La semana próxima, en la sala del centro cultural, habrá una función de teatro a beneficio de las víctimas del terremoto” (“habrá” / haber), “Debe haber unas doscientas personas en el restaurante”. En el terreno de la contabilidad, se llama haber a los bienes, caudales o derechos que posee una persona jurídica o natural. En un balance, las cuentas se dividen en el debe (pasivo) y el haber (activo). Una cuenta, de este modo, se divide en dos columnas. En la columna del debe, se registran los gastos y las obligaciones (pagos, impuestos, etc.). En el haber, en cambio, se inscriben los ingresos y los derechos financieros (ingresos por ventas, intereses cobrados por inversiones).