Sie sind auf Seite 1von 121

INSTITUTO POLITECNICO NACIONAL

ESCUELA SUPERIOR DE ENFERMERIA Y OBSTETRICIA

ALUMNO: GIOVANNI HERNANDEZ OROPEZA

GRUPO: 1EV3

PROFESOR: DANIEL PINEDA

MATERIA: ANATOMIA

TEMA: TRABAJO PARCIAL


SANGRE

La sangre (del latín: sanguis, -ĭnis) es un tejido conectivo líquido, que circula
por capilares, venas y arterias de todos los vertebrados. Su color rojo
característico es debido a la presencia del pigmento hemoglobínico
contenido en los glóbulos rojos.

Es un tipo de tejido conjuntivo especializado, con una matriz coloidal


líquida y una constitución compleja. Tiene una fase sólida (elementos
formes), que incluye a los eritrocitos (o glóbulos rojos), los leucocitos (o
glóbulos blancos) y las plaquetas, y una fase líquida, representada por el
plasma sanguíneo. Estas fases son también llamadas componentes
sanguíneos, los cuales se dividen en componente sérico (fase líquida) y
componente celular (fase sólida).

La parte líquida, llamada plasma, contiene agua, sales y proteínas. Más de


la mitad del cuerpo es plasma. La parte sólida de la sangre contiene
glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas.

Los glóbulos rojos suministran oxígeno desde los pulmones a los tejidos y
órganos. Los glóbulos blancos combaten las infecciones y son parte del
sistema de defensa del cuerpo. Las plaquetas ayudan a la coagulación de
la sangre cuando se tiene un corte o una herida. La médula ósea, el
material esponjoso dentro de los huesos produce nuevas células
sanguíneas. Las células de la sangre constantemente mueren y su cuerpo
produce nuevas. Los glóbulos rojos viven unos 120 días y las plaquetas
viven cerca de seis días. Algunos glóbulos blancos de la sangre viven
menos de un día, pero otros viven mucho más tiempo.

Su función principal es la logística de distribución e integración sistémica,


cuya contención en los vasos sanguíneos (espacio vascular) admite su
distribución (circulación sanguínea) hacia prácticamente todo el
organismo.

La sangre era denominada humor circulatorio en la antigua teoría


grecorromana de los cuatro humores.
Como todos los tejidos del organismo la sangre cumple múltiples funciones
necesarias para la vida como la defensa ante infecciones, los intercambios
gaseosos y la distribución de nutrientes. Para cumplir con todas estas
funciones cuenta con diferentes tipos de células suspendidas en el plasma.
Todas las células que componen la sangre se fabrican en la médula ósea.
Ésta se encuentra en el tejido esponjoso de los huesos planos (cráneo,
vértebras, esternón, crestas ilíacas) y en los canales medulares de los
huesos largos (fémur, húmero). La sangre es un tejido renovable del cuerpo
humano, esto quiere decir que la médula ósea se encuentra fabricando,
durante toda la vida, células sanguíneas ya que éstas tienen un tiempo
limitado de vida. Esta “fábrica”, ante determinadas situaciones de salud,
puede aumentar su producción en función de las necesidades. Por
ejemplo, ante una hemorragia aumenta hasta siete veces la producción
de glóbulos rojos y ante una infección aumenta la producción de glóbulos
blancos.

Hay dos tipos de vasos sanguíneos que transportan la sangre a través del
cuerpo. Las arterias llevan sangre oxigenada o “limpia” (sangre que ha
recibido oxígeno al pasar por los pulmones) del corazón al resto del
cuerpo. Las venas llevan la sangre “sucia” desde el resto del cuerpo hasta
el corazón y los pulmones, donde se vuelve a oxigenar. Cuando te
bombea el corazón, puedes notar cómo la sangre corre por tu cuerpo en
los puntos donde se suele tomar el pulso -como el cuello y la cara interna
de la muñeca- donde grandes arterias llenas se sangre pasan cerca de la
superficie de la piel.

La sangre que recorre esta red de venas y arterias se denomina sangre


entera. La sangre entera contiene los siguientes tres tipos de células
sanguíneas:

Glóbulos rojos
Glóbulos blancos
Plaquetas

Estos tres tipos de células sanguíneas se fabrican mayoritariamente en la


médula ósea (el tejido blando que hay en el interior de los huesos),
especialmente en la médula ósea de las vértebras (los huesos que
componen la columna vertebral), las costillas, la pelvis, el cráneo y el
esternón (el hueso que hay en el centro del pecho, entre las costillas). Estas
células viajan por el sistema circulatorio suspendidas en un líquido
amarillento denominado plasma. El plasma contiene un 90% de agua, así
como nutrientes, proteínas, hormonas y productos de desecho. La sangre
entera es una mezcla de células sanguíneas y plasma.

CARACTERISTICAS Y VALORES NORMALES DE LOS ELEMENTOS FORMES DE LA


SANGRE
ERITROCITOS
Los eritrocitos (del griego ἐρυθρός ‘rojo’, y κύτος ‘bolsa’) también llamados
glóbulos rojos o hematíes, son los elementos formes más numerosos de la
sangre. La hemoglobina es uno de sus principales componentes, y su
función es transportar el oxígeno hacia los diferentes tejidos del cuerpo. Los
eritrocitos humanos, así como los del resto de mamíferos, carecen de
núcleo y de mitocondrias, por lo que deben obtener su energía
metabólica a través de la fermentación láctica.

“La fermentación láctica es una ruta metabólica anaeróbica que ocurre


en el citosol de la célula, en la cual se oxida parcialmente la glucosa para
obtener energía y donde el producto de desecho es el ácido láctico.”

Los glóbulos rojos, hematíes o eritrocitos constituyen aproximadamente el


96 % de los elementos figurados. Su valor normal (conteo) promedio es de
alrededor de 4.800.000 en la mujer, y de aproximadamente 5.400.000 en el
varón, hematíes por mm³ (o microlitro).

Valores considerados normales de eritrocitos en adultos

Mujeres: 4 - 5 x 106/mL (mililitro) de sangre


Hombres: 4,5 - 5,5 x 106/mL (mililitro) de sangre

Su citoplasma está constituido casi en su totalidad por la hemoglobina,


una proteína encargada de transportar oxígeno y contienen también
algunas enzimas. El dióxido de carbono es transportado en la sangre (libre
disuelto 8 %, como compuestos carbodinámicos 27 %, y como
bicarbonato, este último regula el pH en la sangre). En la membrana
plasmática de los eritrocitos están las glucoproteínas (CDs) que definen a
los distintos grupos sanguíneos y otros identificadores celulares.

Los eritrocitos tienen forma de disco bicóncavo deprimido en el centro. El


eritrocito es un disco bicóncavo de entre 5 y 7,5 μm de diámetro, de 1 μm
de grosor y de 80 a 100 fL de volumen Esta forma particular aumenta la
superficie efectiva de la membrana. Los glóbulos rojos maduros carecen
de núcleo, porque lo expulsan en la médula ósea antes de entrar en el
torrente. Los eritrocitos en humanos adultos se forman en la médula ósea.
Hemoglobina

La hemoglobina —contenida exclusivamente en los glóbulos rojos— es un


pigmento, una proteína conjugada que contiene el grupo “hemo”.
También transporta el dióxido de carbono, la mayor parte del cual se
encuentra disuelto en el eritrocito y, en menor proporción, en el plasma.

Los niveles normales de hemoglobina están entre los 12 y 18 g/dl de sangre,


y esta cantidad es proporcional a la cantidad y calidad de hematíes
(masa eritrocitaria). La hemoglobina constituye el 90 % de los eritrocitos y,
como pigmento, otorga su color característico, rojo, aunque esto solo
ocurre cuando el glóbulo rojo está cargado de oxígeno.

Tras una vida media de 120 días, los eritrocitos son destruidos y extraídos de
la sangre por el bazo, el hígado y la médula ósea, donde la hemoglobina
se degrada en bilirrubina y el hierro es reciclado para formar nueva
hemoglobina.

Los eritrocitos derivan de las células madre comprometidas denominadas


hemocitoblasto. La eritropoyetina, una hormona de crecimiento producida
en los tejidos renales, estimula la eritropoyesis (es decir, la formación de
eritrocitos) y es responsable de mantener una masa eritrocitaria en un
estado constante. Los eritrocitos, al igual que los leucocitos, tienen su
origen en la médula ósea.

Las etapas de desarrollo morfológico de la célula eritroide incluyen (en


orden de madurez creciente) las siguientes etapas:

 Célula madre pluripotencial


 Célula madre multipotencial
 Célula progenitora o CFU-S (unidad formadora de colonias del bazo)
 BFU-E (unidad formadora de brotes de eritrocitos)
 CFU-E (unidad formadora de colonias de eritrocitos), que luego
formará los proeritroblastos.
 Proeritroblasto: Célula grande de citoplasma abundante, núcleo
grande con cromatina gruesa, nucléolos no muy bien definidos (20-
25 micras).
 Eritroblasto basófilo: Más pequeño que el anterior(16-18 micras),
citoplasma basófilo, cromatina gruesa y grumosa, aquí se inicia la
formación de la hemoglobina.
 Eritroblasto policromatófilo: Mide 10-12 micras, el citoplasma empieza
a adquirir un color rosa por la presencia de hemoglobina, aquí se
presenta la última fase mitótica para la formación de hematíes, no
posee nucléolos y la relación núcleo/citoplasma es de 4:1.
 Eritroblasto ortocromático: Mide 8-10 micras, tiene cromatina
compacta y el núcleo empieza a desaparecer.
 Reticulocito: Casi diferenciado en eritrocitos maduros. La presencia
en SP (sangre periférica) representa el buen funcionamiento de la
MO.
 Eritrocito, finalmente, cuando ya carece de núcleo y mitocondrias.
Tiene capacidad de transporte (gases, hormonas, medicamento,
etc.)

LEUCOCITOS

Los leucocitos (del griego λευκός [leukós] ‘blanco’, y κýτος [kytos] ‘bolsa’,
de ahí que también sean llamados glóbulos blancos) son un conjunto
heterogéneo de células sanguíneas que son ejecutoras de la respuesta
inmunitaria, interviniendo así en la defensa del organismo contra sustancias
extrañas o agentes infecciosos (antígenos). Se originan en la médula ósea
y en el tejido linfático. Los leucocitos son producidos y derivados de unas
células multipotenciales en la médula ósea, conocidas como células
madre hematopoyéticas. Los glóbulos blancos se encuentran en todo el
organismo, incluyendo la sangre y el tejido linfoide.

El número de leucocitos en la sangre suele ser un indicador de


enfermedad. El recuento normal de glóbulos blancos fluctúa entre 4 y 11 x
109/L, y suele expresarse como 4000-11 000 glóbulos blancos por microlitro.
Conforman, aproximadamente, el 1% del volumen sanguíneo total de un
adulto sano. Al aumento del número de leucocitos por arriba del límite
superior se le llama leucocitosis, y al decrecimiento por debajo del límite
inferior se le llama leucopenia.

Los leucocitos son células móviles que se encuentran en la sangre


transitoriamente, así, forman la fracción celular de los elementos figurados
de la sangre. Son los representantes hemáticos de la serie blanca. A
diferencia de los eritrocitos (glóbulos rojos), no contienen pigmentos, por lo
que se les califica de glóbulos blancos.

Son células con núcleo, mitocondrias y otros orgánulos celulares. Son


capaces de moverse libremente mediante pseudópodos. Su tamaño
oscila entre los 8 y 20 μm (micrómetros). Su tiempo de vida varía desde
algunas horas, meses y hasta años. Estas células pueden salir de los vasos
sanguíneos a través de un mecanismo llamado diapédesis (prolongan su
contenido citoplasmático), esto les permite desplazarse fuera del vaso
sanguíneo y poder tener contacto con los tejidos del interior del cuerpo
humano.
Clasificación

Todos los leucocitos son células nucleadas pero, por otra parte, distintos en
forma y función. Los glóbulos blancos se clasifican en dos linajes
principales: el mieloide (neutrófilos, monocitos, eosinófilos y basófilos) y el
linfoide (linfocitos T, linfocitos B y las células natural killer (células NK).
Neutrófilos

Los neutrófilos defienden al organismo contra infecciones bacterianas o


por hongos. Usualmente son los primeros en responder a una infección
microbiana; su actividad y muerte en gran número forman la pus.
Comúnmente se refiere a los neutrófilos como leucocitos
polimorfonucleares (PMN), aunque, en el sentido técnico, PMS se refiere a
todos los granulocitos (que incluyen neutrófilos, eosinófilos y basófilos).
Tienen un núcleo multilobulado que puede asemejar múltiples núcleos, por
lo tanto el nombre leucocito polimorfonuclear. El citoplasma puede
parecer transparente debido a los gránulos que se tiñen color lila pálido.
Los neutrófilos se encargan de fagocitar bacterias y están presentes en
grandes cantidades en la pus. Estas células no son capaces de renovar sus
lisosomas (utilizados durante la digestión de microbios) y mueren después
de haber fagocitado unos cuantos patógenos. Los neutrófilos son el tipo
celular más encontrado en las fases tempranas de la inflamación aguda.
Conforman del 60 al 70% de los leucocitos totales en la sangre del ser
humano. La vida media de un neutrófilo circulante es de,
aproximadamente, 5.4 día.

Niveles normales: 2.000-7.500 /ml

Niveles altos: el número elevado de neutrófilos (neutrofilia) aparece ante


infecciones, procesos inflamatorios, quemaduras, hemorragias agudas,
tabaquismo, y golpe de calor. Se puede asociar también a procesos en los
que se produce la muerte de las células de algún tejido, como el infarto de
miocardio.

Niveles bajos: se denomina neutropenia al descenso de la cifra de


neutrófilos, que hace que el paciente tenga una especial vulnerabilidad
para contraer infecciones, incluso las más insignificantes.
Eosinófilos

Los eosinófilos, ante todo, lidian con las infecciones parasitarias. También
son las células inflamatorias predominantes durante una reacción alérgica.
Las causas más importantes de eosinofilia incluyen alergias como: asma,
rinitis alérgica y urticaria; así como infecciones parasitarias. En general, su
núcleo es bi-lobulado. El citoplasma está lleno de gránulos que, con tinción
de eosina, asumen un color rosáceo-anaranjado característico.

Niveles normales: 50-500 /ml

Niveles altos: la eosinofilia (aumento del número de estas células) puede


indicar la presencia de alergias, asma, parásitos e infecciones. También se
asocia a enfermedades intestinales como Crohn y celiaquía, y a
enfermedades pulmonares (Löffler).
Niveles bajos: el descenso del número de eosinófilos es raro.

Basófilos

Los basófilos son principalmente responsables de las respuestas alérgicas ya


que liberan histamina, provocando vasodilatación. Su núcleo es bi- o tri-
lobulado, pero es difícil de detectar ya que se oculta por el gran número
de gránulos gruesos, estos gránulos son característicamente azules bajo la
tinción HyE.

Los valores de normalidad en sangre son entre 0 y 183 células/ ml


(100células /Litro).

En una persona sana el recuento de basófilos suele ser muy bajo, pero
cuando el conteo es inferior a lo normal se produce la basopenia (20
células/Litro).

La basofilia es el aumento de éste tipo de células blancas por encima del


valor normal: 183 células/ml. Cuando se produce la basófilia se produce
una la liberación aumentada de histamina que puede llevar a producir
reacciones corporales inflamatorias y alérgicas que conducen a trastornos:
enfermedades respiratorias como el asma, infecciones y trastornos de la
sangre.

Linfocitos

Los linfocitos son más comunes en el sistema linfático que en el torrente


sanguíneo. Se distinguen por un núcleo que se tiñe fuertemente y cuya
locación puede o no ser excéntrica, y por tener poco citoplasma. Los
linfocitos incluyen:

Células B, que producen anticuerpos capaces de unir, bloquear, y


promover la destrucción de patógenos así como de activar complemento.
Células T:

CD4+ cooperadoras: son células T que expresan el co-receptor CD4 y son


conocidas como linfocitos T CD4+. Estas células tienen receptores de
células T (TCR) y moléculas CD4+ que, en conjunto, reconocen péptidos
antigénicos presentados en moléculas del complejo mayor de
histocompatibilidad (CMH) clase-II por células presentadoras de antígeno
(CPA). Las células T cooperadoras producen citocinas y llevan a cabo
otras funciones que ayudan a coordinar una respuesta inmune adecuada.
En una infección por VIH, el conteo de estas células T son el índice principal
para identificar la integridad del sistema inmune del individuo.12

CD8+ citotóxicas: son células T que expresan el co-receptor CD8 y son


conocidas como linfocitos T CD8+. Estas células unen antígenos
presentados en moléculas del CMH clase-I en células infectadas por virus o
células tumorales. Casi todas las células nucleadas presentan CMH clase-I.

Células γδ T: poseen un receptor de células T alternativo (diferente al


receptor de células T αβ que se encuentra en células T CD4 y CD8
convencionales). Se encuentran más comúnmente en tejidos que en
sangre. Las células γδ T compartir características con las células
cooperadoras, las citotóxicas y las células natural killer.

Célula Natural Killer: célula capaz de matar células del organismo que no
presentan moléculas del CMH clase-I, o que presentan marcadores de
estrés como MIC-A (MHC class I polypeptide-related sequence A). La
disminución de la expresión de CMH clase-I y la regulación positiva de MIC-
A se puede llevar a cabo cuando células del organismo están infectadas
por un virus o son canceros.
Niveles normales: 1.300-4.000 /ml

Niveles altos: el aumento del número de linfocitos se denomina linfocitosis.


Aparece en procesos infecciosos agudos, crónicos, alergias
farmacológicas y procesos linfoproliferativos como la leucemia.

Niveles bajos: la disminución del número de linfocitos se llama linfopenia, y


es habitual encontrarla en personas cuyo sistema inmune es defectuoso o
están siguiendo un tratamiento inmunosupresor
Monocitos

Los monocitos comparten la función de “aspiradora” (fagocitosis) con los


neutrófilos, pero son más longevos y además, una función extra: presentar
partes de patógenos a linfocitos T para que éstos puedan ser reconocidos
de nuevo y ser eliminados. Los monocitos abandonan el torrente sanguíneo
para convertirse en macrófagos de tejido, que se encargan de remover
restos de células muertas y de atacar microorganismos. A diferencia de los
neutrófilos, los monocitos son capaces de reemplazar su contenido
lisosomal y se cree que su vida activa es mucho más larga. Su núcleo tiene
forma de riñón y no tienen gránulos y contienen abundante citoplasma.
Una vez que los monocitos abandonan el torrente sanguíneo y entran a
algún tejido corporal, pasan por cambios que permiten la fagocitosis (se
diferencian) y se convierten en macrófagos.

Los valores normales de monocitos se encuentran entre: 1000 y 4500 células


por ml.

TROMBOCITOS

Las plaquetas o trombocitos son fragmentos citoplasmáticos pequeños,


irregulares y carentes de núcleo, de 2-3 µm de diámetro, derivados de la
fragmentación de sus células precursoras, los megacariocitos; la vida
media de una plaqueta oscila entre 8 y 12 días. Las plaquetas
desempeñan un papel fundamental en la hemostasia y son una fuente
natural de factores de crecimiento. Estas circulan en la sangre de todos los
mamíferos y están involucradas en la hemostasia, iniciando la formación
de coágulos o trombos.
Las plaquetas liberan un gran número de factores de crecimiento
incluyendo el factor de crecimiento derivado de plaquetas (PDGF, por
platelet derived growth factor), un potente agente quimiotáctico, y el
factor de crecimiento transformante beta, (TGF-beta, por transforming
growth factor) el cual estimula el depósito de matriz extracelular; Estos dos
factores de crecimiento han demostrado desempeñar un papel
significativo en la regeneración y reparación del tejido conectivo; Otros
factores de crecimiento producidos por las plaquetas y asociados a los
procesos curativos incluyen: factor de crecimiento básico del fibroblasto
(basic fibroblast growth factor), factor de crecimiento-1 asociado a la
insulina (IGF-1 del inglés insulin-like growth factor-1), factor de crecimiento
del epitelio (EGF del inglés epithelial growth factor), factor de crecimiento
del hepatocito (HGF del inglés hepatocyte growth factor) y el factor de
crecimiento del endotelio vascular (VEGF del inglés vascular endothelial
growth factor). La aplicación local de estos factores de crecimiento en
altas concentraciones a través del plasma rico en plaquetas (PRP del inglés
platelet-rich plasma) ha sido utilizada, por varias décadas, para acelerar el
proceso curativo de diferentes lesiones

Valores normales
El valor normal de plaquetas puede variar entre 150 000 y 400 000/ mm³.

COMPONENTES DEL PLASMA


El plasma es la fracción líquida y acelular de la sangre. Se obtiene al dejar
a la sangre desprovista de células como los glóbulos rojos y los glóbulos
blancos.

Está compuesto por un 90 % de agua, un 7 % de proteínas, y el 3 % restante


por grasa, glucosa, vitaminas, hormonas, oxígeno, dióxido de carbono y
nitrógeno, además de productos de desecho del metabolismo como el
ácido úrico. A estos se les pueden añadir otros compuestos como las sales
y la urea. Es el componente mayoritario de la sangre, representando
aproximadamente el 55% del volumen sanguíneo total, mientras que el 45
% restante corresponde a los elementos formes (tal magnitud está
relacionada con el hematocrito). Además, contiene proteínas plasmáticas
(60-50 gr. proteína/l) a las que pertenecen la albúmina y las globulinas. Las
globulinas y el fibrinógeno son responsables de la coagulación.

Las proteínas plasmáticas tienen numerosas funciones, entre ellas originar la


denominada presión osmótica. La presión osmótica, sirve para mantener la
diferencia de presión a uno y otro lado de una membrana semipermeable.
Si desciende el contenido proteínico de la sangre, por ejemplo, por una
alimentación pobre en proteínas, se puede dar una acumulacion de
líquido en el tejido y surgen los edemas por hipoproteinemia.

Otra de las funciones de las proteínas plasmáticas reside en su capacidad


para unirse a diferentes sustancias. De esta forma, se transportan sustancias
indisolubles por la sangre. La unión de medicamentos o sustancias tóxicas
con una proteína plasmática disminuye su efecto terapéutico o nocivo,
respectivamente, y evita por otro lado su rápida eliminación a través de los
riñones o hígado.

Otros componentes orgánicos del plasma son la glucosa, la grasa, las


vitaminas y las hormonas.

Las sales juegan un papel vital, porque definen las propiedades físico-
químicas de la sangre. Junto al cloruro de sodio (sal común), que
compone el 75% del contenido en sales, hay disponibles en pequeñas
cantidades sales de potasio, calcio y magnesio en la sangre. El potasio y el
calcio, que solo se encuentran en la sangre en pequeñas cantidades, son
esenciales para la excitabilidad nerviosa y la contracción de los músculos.

El fosfonato y el bicarbonato regulan el ph alcalino de la sangre y lo


mantienen en 7,4 (efecto tampón.
Los componentes del plasma se forman en varias partes de la biología:
 En el hígado se sintetizan todas las proteínas plasmáticas salvo las
inmunoglobulinas que son producto de síntesis de las células
plasmáticas.
 En las glándulas endocrinas secretan sus hormonas correspondientes
hacia la sangre.
 El riñón mantiene constante la concetración de agua y solutos
salinos.
 Los lípidos son aportados por los colectores linfáticos.
 Otras sustancias son introducidas por absorción intestinal.

SISTEMA LINFATICO

El sistema linfático es la estructura anatómica que transporta la linfa


unidireccionalmente hacia el corazón, y es parte del aparato circulatorio.
En el ser humano, está compuesto por los vasos linfáticos, los ganglios, los
órganos linfáticos o linfoides (el bazo y el timo), los tejidos linfáticos (como
la amígdala, las placas de Peyer y la médula ósea) y la linfa.

El sistema linfático está considerado como parte del aparato circulatorio


porque está formado por los vasos linfáticos, unos conductos cilíndricos
parecidos a los vasos sanguíneos, que transportan un líquido llamado linfa,
que proviene de la sangre, tiene una composición muy parecida a la de
ésta y regresa a ella. Este sistema constituye por tanto la segunda red de
transporte de líquidos corporales.

La linfa es un líquido transparente, de color un tanto blanquecino que


recorre los vasos linfáticos y generalmente carece de pigmentos. Se
produce tras el exceso de líquido que sale de los capilares sanguíneos al
espacio intersticial o intercelular, siendo recogida por los capilares
linfáticos, que drenan a vasos linfáticos más gruesos hasta converger en
conductos (arterias) que se vacían en las venas subclavias.
El sistema linfático cumple cuatro funciones básicas:
El mantenimiento del equilibrio osmolar en el "tercer espacio".

Contribuye de manera principal a formar y activar el sistema inmunitario


(las defensas del organismo).

Recolecta el quilo a partir del contenido intestinal, un producto que tiene


un elevado contenido en grasas.
Controla la concentración de proteínas en el intersticio, el volumen del
líquido intersticial y su presión.

VASOS LINFATICOS

Se originan a expensas de redes capilares, a veces ampliamente abiertas,


a modo de lagunas, en el seno de los órganos. Unos siguen un trayecto
superficial mientras otros están situados profundamente; corren por lo
común a un lado de las venas y presentan anastomosis entre sí.

A lo largo de los vasos linfáticos existen abultamientos y estrechamientos


que los dividen en pequeños segmentos, cuya parte más ancha se halla
vuelta hacia la periferia.

Esta disposición es debido a la presencia de válvulas que corresponden a


las proporciones abultadas que tienen forma semilunar, de concavidad
hacia el corazón, y están colocadas por partes, favoreciendo la
circulación del líquido linfático.

La linfa que circula por los vasos linfáticos es análoga en su constitución en


la sangre, pero carece de glóbulos rojos. Su composición varía según el
órgano de cual proviene.
CAPILARES LINFÁTICOS

Son vasos microscópicos, formados por una capa simple de células


endoteliales que se superponen unas con otras. Si bien son similares a los
capilares sanguíneos, se diferencian porque comienzan en los tejidos,
tienen un extremo ciego y sus paredes son mucho más permeables. Esto
último posibilita el pasaje de moléculas de un tamaño mayor, como las
proteínas y restos de células, que no podrían hacerlo a través de los
capilares sanguíneos. Los capilares linfáticos que están en estrecho
contacto con las vellosidades intestinales se denominan quilíferos, y son los
que recogen las sustancias grasas digeridas. Se calcula que un 10% del
líquido intersticial se reabsorbe hacia los capilares linfáticos, y el resto a los
capilares venosos.
GANGLIOS LINFATICOS

Los ganglios linfáticos son unas estructuras nodulares que forman


agrupaciones en forma de racimos. Son una parte importante del sistema
inmunitario, ayudando al cuerpo a reconocer y combatir gérmenes,
infecciones y otras sustancias extrañas. Son más numerosos en las partes
menos periféricas del organismo. Su presencia se pone de manifiesto
fácilmente en partes accesibles al examen físico directo en zonas como
axilas, ingle, cuello, cara, huecos supraclaviculares y huecos poplíteos. Los
conductos linfáticos y los nódulos linfoideos se disponen muchas veces
rodeando a los grandes troncos arteriales y venosos aorta, vena cava,
vasos ilíacos, subclavios, axilares, etc. Son pequeñas bolsas que se
encuentran entre los vasos linfáticos. En los conductos linfáticos se
almacenan los glóbulos blancos, más concretamente los linfocitos.

Los nódulos linfáticos actúan como filtros de la linfa, al poseer una


estructura interna de tejido conectivo fino, en forma de red, rellena de
linfocitos que recogen y destruyen bacterias y virus, por lo que estos
nódulos también forman parte del sistema inmunitario, ayudando al
cuerpo a reconocer y combatir gérmenes, infecciones y otras sustancias
extrañas. La linfa llega a través de vasos aferentes, vacían la linfa, se filtra
dentro del nódulo y se forma la respuesta inmunitaria humoral o celular al
entrar en contacto con los componentes activos inmunitarios. Una vez
filtrada la linfa, ésta sale por el vaso linfático eferente, propaga la
respuesta inmunitaria y llega a la sangre.

Los nódulos linfáticos se localizan en las axilas, ingle, cuello, mediastino y


abdomen.
Estructura de un nódulo linfático.

Los nódulos linfáticos tienen un tamaño menor a 1 cm de diámetro, con


forma de riñón y están formados por una corteza externa con una cápsula
de tejido conjuntivo que rodea al nódulo y una zona medular. De la
cápsula emergen trabéculas medias, que dividen al nódulo internamente.

Corteza

El parénquima está formado por nódulos o folículos linfoides a nivel de la


corteza con una zona clara redondeada llamada centro germinal1 rica en
linfocitos B. También se localizan las células dendríticas interdigitales. Estas
células foliculares pueden retener muchos antígenos al tener una gran
área superficial con numerosas dendritas.
Más internamente se encuentra la paracorteza rica en linfocitos T.
Médula

La médula está situada en la parte central del nódulo linfático, con senos
medulares por donde discurre el líquido linfático y cordones medulares de
tejido linfático difuso entre los anteriores. Es rica en células macrófagas,
linfocitos B y T, y células plasmáticas.

En toda la superficie del nódulo linfático, llegan vasos linfáticos aferentes,


llevando la linfa, esta llega al seno subcapsular o marginal, (entre la
cápsula y el parénquima ), continúa por los senos corticales, atraviesa la
corteza y va paralela a las trabéculas seno trabecular, la linfa sigue a los
senos medulares, muy tortuosos, llega al hilio' y sale por el vaso linfático
eferente. Los vasos están soportados por células reticulares, hay
macrófagos que hacen que la linfa se desplace lentamente y facilite su
filtrado. Las células endoteliales del seno subcapsular son discontinuas,
para facilitar el paso.

En los nódulos linfáticos puede haber folículos primarios carentes de centros


germinales. Al entrar los antígenos estos desarrollan un centro germinal y se
convierten en folículos secundarios, para preparar una respuesta
inmunitaria.

Tejidos y órganos linfáticos

En el ser humano, los órganos linfáticos o linfoides del sistema linfático son el
bazo y el timo; y los tejidos linfáticos o linfoideos son la amígdala, las placas
de Peyer, los ganglios linfáticos y la médula ósea, siendo estos los
principales.
El bazo tiene la función de filtrar la sangre y limpiarla de formas celulares
alteradas. El timo y la médula ósea, cumplen la función de madurar a los
linfocitos, que son un tipo de leucocito.

Los distintos órganos linfoides están interconectados por vasos sanguíneos y


vasos linfáticos, de modo que se constituye un sistema unitario, entrelazado
y bien comunicado. Estos vasos transportan células del sistema inmune, de
las cuales el tipo central es el linfocito.

Cuando la presión sanguínea aumenta dentro de los vasos capilares


sanguíneos, el plasma sanguíneo tiende a difundirse a través de las
paredes de los capilares, debido a la gran presión que se ejerce sobre
estas paredes. Durante este proceso se pierde gran cantidad de nutrientes
y biomoléculas que son transportados por medio de la sangre, creando
con esto una descompensación en la homeostasis; es en este instante en
donde toma una importancia radical el sistema linfático, ya que se
encarga de recolectar todo el plasma perdido durante el episodio de
exceso de presión sanguínea y hacer que retorne a los vasos sanguíneos,
manteniendo, de esta forma, la homeostasis corporal.
TIMO.

Es un órgano plano y blando situado en la cavidad torácica, por encima


del corazón. Está formado por dos lóbulos rodeados por cápsula de tejido
conjuntivo. A su vez, los lóbulos están divididos en lobulillos separados entre
sí por trabéculas de tejido conjuntivo. Cada lobulillo tímico está relleno de
células linfoides denominadas timocitos, dispuestas en una corteza de gran
densidad celular y una médula (interior) de menor densidad celular. Desde
la corteza hasta la médula existe un gradiente de diferenciación, de modo
que en la corteza se encuentran los timocitos más inmaduros, mientras que
en la médula se localizan los timocitos en fases madurativas más
avanzadas. Tanto la corteza como la médula están rellenas de una red de
células no linfoides que constituyen el estroma tímico, y que consta de
varios tipos celulares:

1. Tres tipos de células epiteliales, que forman una red que desempeñan un
papel muy importante en el proceso de diferenciación de los LT (se cree
que eliminan a los LT autorreactivos):
a) Nodrizas en la cortical externa:
– Participan en la instalación de precursores procedentes de médula ósea.
– Participan en el transporte de Ag al interior del estroma tímico, conde son
captados por las CPA.
– Contienen timocitos en el interior de vesículas intracitoplasmáticas.
b) Corticales:
– Están en contacto con íntimo con los timocitos corticales.

– Expresan MHC y moléculas de adhesión, y participan en la selección


POSITIVA.
– Secretan citocinas estimuladoras.
c) Medulares:
– Están en la médula y unión corticomedular, en estrecha relación con los
timocitos.
– Expresan MHC y participan en la selección NEGATIVA.

2. Células dendríticas interdigitantes sobre todo en el límite cortico-


medular.
3. Macrófagos, con una localización similar a las dendríticas.

El timo se desarrolla a partir de la tercera bolsa faríngea. Se sitúa en el


torax, sobre el corazón y las arterias mayores. Es un órgano bilobulado;
cada lóbulo se organiza en lobulillos o folículos separados por trabéculas
de tejido conjuntivo.

El timo de los mamíferos va involucionando con la edad, a partir de la


pubertad. En humanos, al nacer, el timo pesa 10-15 g, alcanza su m,aximo
en la adolescencia (40-70 g), y va regresionando, de modo que en la vejez
sólo pesa 3 g, aunque siempre queda un remanente de zona medular. Por
lo tanto, en la vida adulta, la producción de linfocitos T en el timo decae
bastante, aunque siempre existe una actividad residual.

La función tímica y respuesta inmune tienen una relacción clara, de tal


forma que en ausencia de timo hay un descenso de los linfocitos T
circulantes, y se induce una ausencia de inmunidad específica celular.
Ejemplo: timectomía neonatal en ratones, ratones transgénicos noqueados
(“ratones K.O.”) de tipo nude (“desnudos”) y en el síndrome de DiGeorge
(atrofia tímica).
En la fase adulta, cuando el timo ha involucionado, sigue habiendo
maduración de linfocitos T en otros lugares, principalmente en el epitelio
intestinal, donde se produce linfopoyesis de célula T g/d y T a/b, que
permanecen en el epitelio intestinal o migran a la lámina propia.

BAZO.

Es un órgano linfoide secundario grande (150 g en humanos adultos), de


forma ovoide, situado en el cuadrante superior izquierdo del abdomen.
Está especializado en capturar antígenos transportados por la sangre (p.
ej., en las situaciones de infecciones sistémicas).

Posee una cápsula de tejido conectivo, de la que salen hacia el interior


numerosas trabéculas que delimitan compartimentos. En cada
compartimento se distinguen dos tipos principales de tejidos:

– Pulpa roja (función hematológica). La pulpa roja es una red de sinusoides


venosos que continen macrófagos residentes especializados (macrófagos
de los senos esplénicos), que se encargan de destruir eritrocitos y plaquetas
viejos (proceso de hematocatéresis

– Pulpa blanca (función inmune). La pulpa blanca se dispone alrededor de


las arteriola central, formando el manguito linfático periarterial (PALS). En
este manguito hay dos áreas:

– Área de células T: alrededor de la arteriola central. Es la primera en


desarrollarse en la pulpa blanca del embrión. Las primeras células en
instalarse son los LT, macrófagos, CPA, y alguna célula plasmática.

– Área de células B: en la periferia del manguito, que contiene, además,


CPA, macrófagos y células B que recirculan lentamente. Se forma 1
semana después que la zona T.

La arteria esplénica se ramifica en numerosas arteriolas, que descargan a


los sinusoides esplénicos; de allí arrancan las vénulas, que finalmente se
unen en una sola vena esplénica que sale del órgano. La arteria central se
divide y forma las arterias peniciladas que están rodeadas por las vainas
peniciladas (macrófagos que captan Ags). Hay capilares que atraviesan la
pulpa blanca y continúan en la pulpa roja o terminan en la zona marginal
(zona de captación de Ags) que separa la pulpa blanca de la roja. El Ag
llega a través de la arteria esplénica, que entra al órgano por el hilio. La
arteria se divide en arteriolas, que a su vez conducen a capilares, que se
abren y vacían su contenido en la zona marginal de la pulpa blanca.
Las células B pueden formar folículos primarios (no estimulados) o
secundarios (estimulados), también llamados centros germinales.

AMÍGDALAS

Son órganos linfáticos situados en la faringe que contienen numerosos


folículos linfáticos. Su función es proteger al organismo de los gérmenes
(virus, bacterias, hongos) que puedan ingresar por las vías digestivas o
respiratorias. Estas estructuras son pequeñas al nacimiento, aumentan a los
5 años de edad y luego se reducen de tamaño. Contiene linfocitos que
reaccionan rápidamente ante la presencia de microorganismos que
ingresen por las cavidades bucal y nasal. De acuerdo al lugar que ocupen
en la faringe adoptan distintos nombres.
-Amígdala faríngea: situada en el techo de la faringe (adenoides).
-Amígdala palatina: a los lados del istmo de las fauces.
-Amígdala lingual: ubicada en la base de la lengua.

-Amígdala tubárica: alojada en el extremo faríngeo del tubo faringo


timpánico o trompas de Eustaquio.

situación de las amígdalas palatinas alojadas a los lados del istmo de las
faucesLa inflamación de las amígdalas (amigdalitis o anginas) es un
fenómeno que puede ocurrir a cualquier edad, aunque es más frecuente
durante la infancia. Se presenta con fiebre, decaimiento y dolor al tragar.
Las amígdalas están muy enrojecidas y con pus en forma de placas sobre
la superficie. Es frecuente que los ganglios submandibulares se presenten
agrandados y dolorosos al tacto.

CIRCULACIÓN LINFÁTICA

El sistema linfático no necesita de una bomba para que la linfa circule,


como sí existe en el sistema cardiovascular. La velocidad de circulación es
muy lenta y sigue una sola dirección. La propiedad de la linfa de circular
despacio hace posible un filtrado y una eliminación de partículas extrañas
más eficientes. La circulación linfática se ve favorecida por las diferencias
de presión entre el intersticio y los capilares linfáticos, las válvulas linfáticas y
los movimientos que ejercen los músculos. Además, cualquier situación que
provoque dilatación de los capilares sanguíneos, como los esfuerzos
musculares, dan por resultado un aumento de la filtración en los capilares
sanguíneos y una consecuente formación de linfa que ingresa a la
circulación. La linfa procedente de las extremidades inferiores y de los
órganos situados en las cavidades abdominal y pelviana circula por los
vasos linfáticos y desembocan en la cisterna de Pecket o cisterna del quilo.
Ahí se origina el conducto torácico, que asciende cercano a la arteria
aorta. Al llegar al tórax recibe la linfa procedente de los ganglios linfáticos
intercostales, pectorales y bronquiales. Por último, recoge la linfa del lado
izquierdo de la cabeza, del cuello y del brazo izquierdo. Toda la linfa de
esos órganos desembocan en la vena subclavia izquierda y entran en
contacto con la sangre, para llegar a la aurícula derecha del corazón a
través de la vena cava superior. La linfa procedente del tórax derecho, de
la parte izquierda de la cabeza, del cuello y del brazo derecho
desembocan en un corto canal, el conducto linfático derecho, que
termina en la vena subclavia derecha. Aquí la linfa llega a la sangre y
juntas arriban a la vena cava superior y al corazón.

SISTEMA RESPIRATORIO
El aparato respiratorio o sistema respiratorio es el encargado de captar el
oxígeno (O2) del aire e introducirlo en la sangre, y expulsar del cuerpo el
dióxido de carbono (CO2) ―que es un desecho de la sangre y
subproducto del anabolismo celular―. En humanos y otros mamíferos, el
sistema respiratorio consiste en vías respiratorias, pulmones y músculos
respiratorios que median en el movimiento del aire tanto dentro como
fuera del cuerpo humano.

El aparato respiratorio incluye fosas nasales (usadas para hacer ingresar el


aire al cuerpo), tubos (como la tráquea y los bronquios), los dos pulmones
(donde ocurre el intercambio gaseoso).

El intercambio de gases es el intercambio de oxígeno y dióxido de


carbono, del ser vivo con el medio. Dentro del sistema alveolar de los
pulmones, las moléculas de oxígeno y dióxido de carbono se intercambian
pasivamente, por difusión, entre el entorno gaseoso y la sangre. Así, el
sistema respiratorio facilita la oxigenación con la remoción contaminante
del dióxido de carbono y otros gases que son desechos del metabolismo y
de la circulación.

El sistema respiratorio también ayuda a mantener el balance entre ácidos


y bases en el cuerpo a través de la eficiente eliminación de dióxido de
carbono de la sangre.

El diafragma, como todo músculo, puede contraerse y relajarse. En la


inhalación, el diafragma se contrae y se allana, y la cavidad torácica se
amplía. Esta contracción crea un vacío que succiona el aire hacia los
pulmones (inhalación). En la exhalación, el diafragma se relaja y el aire es
expulsado de los pulmones.

En los seres humanos, el sistema respiratorio consiste en las vías aéreas,


pulmones y músculos respiratorios, que provocan el movimiento del aire
tanto hacia adentro como hacia afuera del cuerpo. El intercambio de
gases es el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono, del cuerpo con
su medio. Dentro del sistema alveolar de los pulmones, las moléculas de
oxígeno y dióxido de carbono se intercambian pasivamente, por difusión,
entre el entorno gaseoso y la sangre. Así, el sistema respiratorio facilita la
oxigenación con la remoción contaminante del dióxido de carbono (y
otros gases que son desechos del metabolismo) de la circulación.
El sistema también ayuda a mantener el balance entre ácidos y bases en
el cuerpo a través de la eficiente remoción de dióxido de carbono de la
sangre.
La parte interna de las vías respiratorias está cubierta por:

- Una capa de tejido epitelial, cuyas células muy unidas entre sí protegen
de lesiones e infecciones.

- Una mucosa respiratoria, responsable de mantener las vías bien húmedas


y una temperatura adecuada.
La superficie de la mucosa respiratoria posee dos tipos de células:

- Células mucosas: elaboran y segregan moco hacia la entrada de las vías


respiratorias.

- Células ciliadas: poseen cilios en constante movimiento con el fin de


desalojar el moco y las partículas extrañas que se fijan en la mucosa
respiratoria.

CAVIDADES NASALES

Son dos estructuras, derecha e izquierda ubicadas por encima de la


cavidad bucal. Están separadas entre sí por un tabique nasal de tejido
cartilaginoso. En la parte anterior de cada cavidad se ubican las narinas,
orificios de entrada del sistema respiratorio. La parte posterior se comunica
con la faringe a través de las coanas.

El piso de las cavidades nasales limita con el paladar duro y con el paladar
blando, que las separa de la cavidad bucal. Están recubiertas por una
mucosa que envuelve a los cornetes, serie de huesos enrollados en número
de tres (superior, medio e inferior). Dicha mucosa calienta el aire inspirado.
El hombre utiliza respiración pulmonar, su aparato respiratorio consta de:

Sistema de conducción: fosas nasales, boca, epiglotis, faringe, laringe,


tráquea, bronquios principales, bronquios lobulares, bronquios
segmentarios y bronquiolos.

Sistema de intercambio: los conductos y los sacos alveolares. El espacio


muerto anatómico, o zona no respiratoria (donde no hay intercambios
gaseosos) del árbol bronquial incluye las 16 primeras generaciones
bronquiales, siendo su volumen de unos 150 ml.

La función del aparato respiratorio consiste en desplazar volúmenes de aire


desde la atmósfera a los pulmones y viceversa. Lo anterior es posible
gracias a un proceso conocido como ventilación.

La ventilación es un proceso cíclico y consta de dos etapas: la inspiración,


que es la entrada de aire a los pulmones, y la espiración, que es la salida.
La inspiración es un fenómeno activo, caracterizado por el aumento del
volumen torácico que provoca una presión intrapulmonar negativa y
determina el desplazamiento de aire desde el exterior hacia los pulmones.
La contracción de los músculos inspiratorios principales, diafragma e
intercostales externos, es la responsable de este proceso. Una vez que la
presión intrapulmonar iguala a la atmosférica, la inspiración se detiene y
entonces, gracias a la fuerza elástica de la caja torácica, esta se retrae,
generando una presión positiva que supera a la atmosférica y
determinando la salida de aire desde los pulmones.

En condiciones normales la respiración es un proceso pasivo. Los músculos


respiratorios activos son capaces de disminuir aún más el volumen
intratorácico y aumentar la cantidad de aire que se desplaza al exterior, lo
que ocurre en la espiración forzada.

Mientras este ciclo ventilario ocurre, en los sacos alveolares, los gases
contenidos en el aire que participan en el intercambio gaseoso, oxígeno y
dióxido de carbono, difunden a favor de su gradiente de concentración,
de lo que resulta la oxigenación y detoxificación de la sangre.

El volumen de aire que entra y sale del pulmón por minuto, tiene cierta
sincronía con el sistema cardiovascular y el ritmo circadiano (como
disminución de la frecuencia de inhalación/exhalación durante la noche y
en estado de vigilia/sueño). Variando entre 6 a 80 litros (dependiendo de
la demanda).

los peligros que implica la ventilación pulmonar ya que junto con el aire
también entran partículas sólidas que puede obstruir y/o intoxicar al
organismo. Las de mayor tamaño son atrapadas por los vellos y el material
mucoso de la nariz y del tracto respiratorio, que luego son extraídas por el
movimiento ciliar hasta que son tragadas, escupidas o estornudadas. A
nivel bronquial, por carecer de cilios, se emplean macrófagos y fagocitos
para la limpieza de partículas.
La ventilación es controlada de forma muy cuidadosa y permite la
regulación del intercambio gaseoso, es decir que los niveles normales de
PaO2 y PaCO2 arteriales se mantengan dentro de límites estrechos a pesar
de que las demandas de captación de O2 y eliminación de CO2 varían
mucho. El sistema respiratorio se puede considerar un sistema de control de
lazo cerrado ya que posee un grupo de componentes que regula su
propia conducta, estos componentes pueden ser clasificados como:
sensores que reúnen información y con ella alimentan al controlador
central, en el encéfalo, que coordina la información y a su vez envía
impulsos hacia los músculos respiratorios efectores, que causan la
ventilación.

Sensores (entradas).

Los sensores protagonistas en el control de la respiración son los


quimiorreceptores, estos responden a los cambios en la composición
química de la sangre u otro líquido. Se han clasificado anatómicamente
como centrales y periféricos.

Quimiorreceptores centrales cerca de la superficie ventral del bulbo


raquideo están rodeados por el líquido extracelular del cerebro y
responden a los cambios de H+ en ese líquido. El nivel de CO2 en la sangre
regula la ventilación principalmente por su efecto sobre el pH del LCR.

Quimiorreceptores periféricos se hallan dentro de los cuerpos carotídeos,


en la bifurcación de las arterias carótidas primitivas, y en los cuerpos
aórticos por encima y por debajo del cayado aórtico, estos responden al
descenso de la PO2 arterial y al aumento de la pCO2 y de los H+, estos son
los responsables de cualquier aumento de la ventilación en el ser humano
como respuesta de la hipoxemia arterial.

En los pulmones también existen receptores sensoriales que intervienen en


el control del calibre de las vías aéreas, la secreción bronquial, así como en
la liberación de mediadores por las células cebadas u otras células
inflamatorias, esta información llega a los centros superiores a través de las
fibras sensoriales del nervio vago. Los receptores asociados a la vía vagal
son los siguientes:
Receptores de estiramiento pulmonar en el músculo liso de las vías aéreas,
producen impulsos cuando se distiende el pulmón, y su actividad persiste
mientras el mismo se encuentre insuflado.

Receptores de sustancias irritantes entre las células epiteliales de las vías


aéreas y son estimulados por gases nocivos y aire frío.

Receptores J o yuxtacapilares las terminaciones nerviosas de estas fibras se


encuentran situadas en el parénquima pulmonar en la vecindad de las
paredes alveolares y los capilares pulmonares, son estimulados por el
edema y la fibrosis pulmonar intersticio y dan lugar a la sensación de
disnea en estos pacientes, además se señala que tiene un importante
papel en la regulación de la secreción de surfactante pulmonar.

Existen otros receptores correspondientes al sistema de control respiratorio


o que de alguna manera pueden modificar la frecuencia ventilatoria:

Receptores nasales y de las vías aéreas superiores la nariz, la nasofaringe,


la laringe y la tráquea poseen receptores que responden a la estimulación
mecánica y química. Se les atribuyen diversas respuestas reflejas, como
estornudos, tos y broncoconstricción.

Barorreceptores arteriales los barorreceptores de la aorta y los senos


carotídeos por el aumento de la presión arterial puede causar
hipoventilación o apnea reflejas. La disminución de la presión arterial
causará hiperventilación.

Dolor y temperatura La estimulación de muchos nervios aferentes puede


general cambios en la ventilación. El dolor muchas veces causa un período
de apnea seguido de hiperventilación. El calentamiento de la piel puede
causar hiperventilación.
Controlador central

El control de la ventilación es una compleja interconexión de múltiples


regiones en el cerebro que inervan a los diferentes músculos encargados
de la ventilación pulmonar. El proceso automático normal de la respiración
se origina en impulsos que provienen del tallo cerebral, sin embargo, se
puede tener cierto control voluntario dentro de determinados límites ya
que los estímulos de la corteza se pueden priorizar respecto a los del tallo
cerebral.
Tallo cerebral periodicidad de la inspiración y espiración es controlada por
neuronas ubicadas en la protuberancia y en el bulbo raquídeo, a estas se
les denomina los Centros respiratorios, es un conjunto algo indefinido de
neuronas con diversos componentes.

Centros respiratorios bulbares: la región dorsal del bulbo está asociada con
la inspiración, estas son las responsables del ritmo básico de la ventilación,
y la región ventral con la espiración.

Centro apneústico: se ubica en la parte inferior de la protuberancia. Los


impulsos desde este centro tienen un efecto excitador sobre el área
inspiratoria del bulbo.

Centro neumotáxico: parte superior de la protuberancia en este centro se


desactiva o inhibe la inspiración y así se regula el volumen inspiratorio y
consecuentemente la frecuencia respiratoria.

Corteza: en cierta medida la ventilación tiene un carácter voluntario, la


hiperventilación voluntaria puede disminuir a la mitad la PCO2, si bien la
alcalosis consiguiente puede causar tetania con contracción de los
músculos de las manos y los pies, sin embargo la hipoventilación voluntaria
es más difícil, el tiempo durante el cual se puede retener la respiración es
limitado, por diversos factores, incluyendo la PCO2 y la PO2 arteriales.

Otras partes del cerebro: sistema límbico y el hipotálamo, pueden afectar


el patrón de la respiración, por ejemplo en alteraciones emocionales.
Efectores (salidas).

Como actuadores del sistema respiratorio están el diafragma, los músculos


intercostales, abdominales y los músculos accesorios. En el contexto del
control de la ventilación es fundamental que estos diversos grupos trabajen
conjuntamente en forma coordinada. Hay evidencias de que en algunos
neonatos, en particular los prematuros, existe falta de coordinación en la
actividad de los músculos respiratorios, en especial durante el sueño. Por
ejemplo, los músculos torácicos pueden realizar el trabajo inspiratorio
mientras los músculos abdominales efectúan el trabajo espiratorio.
Vía nasal: Consiste en dos amplias cavidades cuya función es permitir la
entrada del aire, el cual se humedece, filtra y calienta a una determinada
temperatura a través de unas estructuras llamadas cornetes.

Faringe: Órgano tubular y musculoso que se ubica en el cuello. Comunica


la cavidad nasal con la laringe y la boca con el esófago. Por la faringe
pasan los alimentos y el aire que va desde y hacia los pulmones, por lo que
es un órgano que pertenece a los sistemas digestivo y respiratorio. Las
partes de la faringe son:

-Nasofaringe: porción superior que se ubica detrás de la cavidad nasal. Se


conecta con los oídos a través de las trompas de Eustaquio

-Bucofaringe: porción media que se comunica con la boca a través del


istmo de las fauces.

-Laringofaringe: es la porción inferior que rodea a la laringe hasta la


entrada al esófago. La epiglotis marca el límite entre la bucofaringe y la
laringofaringe.
Las funciones de la faringe son:
-Deglución
-Respiración
-Fonación
-Audición

Epiglotis: Cartílago perteneciente a la faringe, impide el paso de alimentos


a la laringe durante la deglución. Funciona como una "tapa" al impedir
que los alimentos entren en la laringe y en la tráquea al tragar, durante la
deglución. También marca el límite entre la orofaringe y la laringofaringe.

Laringe: Órgano tubular, de estructura músculo - cartilaginosa, que


comunica la faringe con la tráquea. El diámetro vertical mide 5-7
centímetros. Se ubica por encima de la tráquea. El hueso hioides actúa
como aparato suspensorio.
La laringe posee nueve cartílagos: aritenoides, de Santorini y de Wrisberg
(pares) y los cartílagos tiroides, cricoides y epiglótico (impares). En la
deglución, el cartílago epiglótico (epiglotis) desciende para bloquear la
entrada a la laringe y obligar al bolo alimenticio a pasar hacia el esófago.

La laringe contiene las cuerdas vocales, estructuras fundamentales para


permitir la fonación.

De acuerdo a la posición que adopten las cuerdas vocales se establecen


dos características:

-Posición de respiración: las cuerdas vocales se abren hacia los lados y el


aire circula libremente.

cuerdas vocales separadas, posición de respiración

-Posición de fonación: las cuerdas vocales se acercan y el aire choca


contra ellas.
cuerdas vocales juntas, posición de fonación
Las funciones de la laringe son:
-Respiratoria
-Deglutoria: se eleva la laringe y el bolo alimenticio pasa hacia el esófago.

-Protectora: se cierra la epiglotis evitando el paso de sustancias a la


tráquea.
-Tusígena y expectorante (función protectora)
-Fonética

Tráquea: Es un órgano con forma de tubo, de estructura cartilaginosa, que


comunica la laringe con los bronquios. Está formada por numerosos anillos
de cartílago conectados entre sí por fibras musculares y tejido conectivo.
La función de los anillos es reforzar a la tráquea para evitar que se colapse
durante la respiración-

Las medidas aproximadas en humanos son de 10-11 centímetros de


longitud y 2 a 2,5 centímetros de diámetro. La tráquea posee unos 20-22
cartílagos con forma de herradura. La mitad de los anillos se ubican a la
altura del cuello, mientras que la otra mitad se aloja en la cavidad
torácica, a la altura del esternón. La tráquea se bifurca cerca del corazón,
dando lugar a dos bronquios primarios.
La forma tubular de la tráquea no es cilíndrica, ya que sufre un
aplanamiento en su parte dorsal donde toma contacto con el esófago.

La tráquea está tapizada por una mucosa con epitelio cilíndrico y ciliado
que segrega mucus. El moco ayuda a limpiar las vías del sistema, gracias al
movimiento que los cilios ejercen hacia la faringe. El moco procedente de
la tráquea y de las cavidades nasales llega a la faringe y es expectorado o
deglutido. La tráquea tiene la función de llevar el aire desde la laringe
hacia los bronquios.

Bronquios: Son dos estructuras de forma tubular y consistencia


fibrocartilaginosa, que se forman tras la bifurcación de la tráquea. Igual
que la tráquea, los bronquios tienen una capa muscular y una mucosa
revestida por epitelio cilíndrico ciliado. El bronquio derecho mide 2-3 cm y
tiene entre 6 y 8 cartílagos. El bronquio izquierdo mide de 3 a 5 cm y posee
entre 10 y 12 cartílagos.

Los bronquios penetran en cada pulmón y van reduciendo su diámetro. A


medida que progresan van perdiendo los cartílagos, se adelgaza la capa
muscular y se forman finos bronquios secundarios y terciarios. La función de
los bronquios es conducir el aire inspirado de la tráquea hacia los alvéolos
pulmonares.

Bronquiolo: Son pequeñas estructuras tubulares producto de la división de


los bronquios. Se ubican en la parte media de cada pulmón y carecen de
cartílagos. Los bronquiolos están formados por una delgada pared de
músculo liso y células epiteliales cúbicas sin cilios. Penetran en los lobulillos
del pulmón donde se dividen en bronquiolos terminales y bronquiolos
respiratorios.

Alvéolo: Divertículo terminal del árbol bronquial donde se produce la


hematosis (Permite el intercambio gaseoso entre el aire inspirado y la
sangre, de manera que en su interior la sangre elimina el dióxido de
carbono y recoge oxígeno).

Los bronquiolos respiratorios se continúan con los conductos alveolares y


estos con los sacos alveolares. Los sacos alveolares contienen muchas
estructuras diminutas con forma de saco llamadas alvéolos pulmonares. El
bronquiolo respiratorio, el conducto alveolar, el saco alveolar y los alvéolos
constituyen la unidad respiratoria.
En los alvéolos del pulmón se lleva a cabo el intercambio de oxígeno y de
dióxido de carbono, proceso que se denomina hematosis. La pared de los
alvéolos se reduce a una muy delgada membrana de 4 micras de grosor.
Uno de sus lados contacta con el aire que llega de los bronquiolos. El otro
lado se relaciona con la red capilar, donde los glóbulos rojos realizan la
hematosis.

Pulmones: Órganos huecos, situados dentro de la cavidad torácica, a


ambos lados del corazón y protegidos por las costillas. Posee tres caras:
costal, mediastínica y diafragmática.

Los pulmones están separados entre sí por el mediastino. El mediastino es


una cavidad virtual que divide el pecho en dos partes. Se ubica detrás del
esternón, delante de la columna vertebral y entre ambas pleuras derecha
e izquierda. Por debajo limita con el diafragma y por arriba con el istmo
cervicotorácico.

Dentro del mediastino se ubican: el corazón, el esófago, la tráquea, los


bronquios, la aorta y las venas cavas, la arteria y las venas pulmonares y
otros vasos y estructuras nerviosas.

Los pulmones están llenos de aire, y su estructura es elástica y esponjosa.


Están rodeados por la pleura, que es una cubierta de tejido conectivo que
evita el roce de los pulmones con la cara interna de la cavidad torácica,
suavizando así los movimientos. La pleura tiene dos capas (parietal y
visceral) y entre ambas se encuentra el líquido pleural, de acción
lubricante.

-Pulmón derecho: es algo mayor que el izquierdo y pesa alrededor de 600


gramos. Presenta tres lóbulos: superior, medio e inferior, separados por
cisuras.

-Pulmón izquierdo: pesa cerca de 500 gramos y tiene dos lóbulos, uno
superior y otro inferior.

Cada pulmón contiene alrededor de 300 millones de alvéolos. La principal


función de los pulmones es establecer el intercambio gaseoso con la
sangre. Es por esa razón que los alvéolos están en estrecho contacto con
los capilares. Además, actúan como un filtro externo ante la
contaminación del aire, mediante sus células mucociliares y macrófagos
alveolares.
Mecánica Respiratoria: Inspiración y Espiración
El aire se inhala por la nariz, donde se calienta y humedece. Luego, pasa a
la faringe, sigue por la laringe y penetra en la traquea.

A la mitad de la altura del pecho, la traquea se divide en dos bronquios


que se dividen de nuevo, una y otra vez , en bronquios secundarios,
terciarios y, finalmente, en unos 250.000 bronquiolos.

Al final de los bronquiolos se agrupan en racimos de alvéolos, pequeños


sacos de aire, donde se realiza el intercambio de gases con la sangre.

Al inspirar y espirar realizamos ligeros movimientos que hacen que los


pulmones se expandan y el aire entre en ellos mediante el tracto
respiratorio.

El diafragma hace que el tórax aumente su tamaño, y es ahí cuando los


pulmones se inflan realmente. En este momento, las costillas se levantan y
se separan entre sí.

En la espiración, el diafragma sube, presionando los pulmones y


haciéndoles expulsar el aire por las vías respiratorias. Es cuando las costillas
descienden y quedan menos separadas entre sí y el volumen del tórax
disminuye.

HEMATOSIS

Es el proceso por el cual el oxígeno del aire inspirado pasa a la sangre y se


intercambia con el dióxido de carbono que es impulsado de la sangre a
los alvéolos para ser eliminado con la espiración al exterior. La hematosis se
rige cumpliendo con la ley de los gases, ya que la difusión se produce
desde un lugar de mayor a otro de menor concentración. La hematosis se
produce a nivel de los alvéolos (respiración externa) y de las células de
todos los tejidos (respiración interna o celular).
proceso de la hematosis

El aire inspirado, con alta carga de oxígeno, atraviesa por difusión simple la
membrana alveolocapilar y llega a la sangre, que tiene menos
concentración. El pasaje de oxígeno desde los alvéolos a los capilares
arteriales es favorecido por la presencia de la hemoglobina presente en los
glóbulos rojos. Cuando la sangre abandona los pulmones transporta el 97%
de oxígeno en forma de oxihemoglobina, quedando un 3% disuelto en el
plasma. Una molécula de hemoglobina se une a cuatro de oxígeno en

forma reversible.
El dióxido de carbono formado por el metabolismo celular es volcado a la
sangre venosa y captado por los glóbulos rojos. Una parte se transforma en
ácido carbónico, que rápidamente se ioniza formando bicarbonato y
protones. El resto es llevado hacia los pulmones en forma de
carbohemoglobina. La sangre que llega a los pulmones tiene más
concentración de dióxido de carbono que el aire inspirado, con lo cual
pasa a los alvéolos y es eliminado del organismo con la espiración.

FRECUENCIA RESPIRATORIA
Es la cantidad de veces que se realiza un ciclo respiratorio por minuto, es
decir, cuantas inspiraciones seguidas de espiraciones se producen en ese
lapso de tiempo. En condiciones normales los humanos tienen una
frecuencia respiratoria de 12 a 18 ciclos por minuto, valor que depende de
la edad y del estado físico.

VOLÚMENES RESPIRATORIOS

- Volumen corriente: es la cantidad de aire que ingresa y egresa en cada


movimiento respiratorio. En una persona adulta equivale a medio litro.
- Volumen de reserva espiratorio: luego de una espiración normal, es la
cantidad de aire que se puede eliminar tras una espiración forzada. En
humanos es aproximadamente 2 litros.

- Volumen residual: cantidad de aire que queda en los pulmones luego de


una espiración forzada. En una persona adulta equivale a un litro.

- Volumen de reserva inspiratorio: luego de una inspiración normal,


cantidad de aire que puede ingresar a los pulmones tras una inspiración
forzada. El valor promedio es de 2 litros.

RESPIRACIÓN FETAL

El intercambio de oxígeno y de dióxido de carbono entre la sangre fetal y


la sangre materna se realiza a través de la placenta. Los gases se movilizan
por difusión simple desde un lugar de mayor concentración a otro de
menor concentración (ley de gases). La placenta controla las presiones
parciales de los gases en la sangre del feto, para impedir que el centro
respiratorio del mismo se estimule ante la carencia o aumento de alguno
de ellos.

RESPIRACIÓN DEL RECIÉN NACIDO

A medida que la gestación avanza disminuye la actividad de la placenta,


con lo cual el aporte de oxígeno se reduce paulatinamente hasta cesar
por completo al momento del nacimiento. En ese instante aumenta la
presión parcial de dióxido de carbono, con lo cual se estimula por primera
vez el centro respiratorio del neonato que responde con una inspiración.
Los pulmones se insuflan, se dilata el tórax y se crea una presión negativa
intrapleural que irá en aumento al desarrollarse la cavidad torácica, hecho
que sucede más rápido que el propio crecimiento de los pulmones.

A los siete meses de gestación, el sistema respiratorio del feto posee todas
las estructuras necesarias capaces de iniciar la respiración ante un
eventual parto prematuro.

TOS

Es un mecanismo de acción voluntaria o involuntaria donde se expulsa de


manera violenta el aire contenido en los pulmones. Tiene por finalidad
mantener despejadas las vías respiratorias. No obstante, es un signo de
enfermedad del sistema respiratorio (faringitis, laringitis, bronquitis,
neumonía, gripe, tuberculosis, etc.) y de causas extra-respiratorias
(trastornos cardíacos, tumores de esófago, etc.).

El mecanismo de la tos se inicia con una inspiración profunda y cierre de la


glotis (porción más estrecha de la luz laríngea). Se producen contracciones
de los músculos torácicos, hecho que provoca aumento de presión dentro
de los pulmones respecto de la atmósfera. La glotis se abre de repente y se
produce un típico sonido a raíz de la brusca salida de aire.

EXPECTORACIÓN
Es el desprendimiento y expulsión, a través de la tos, de las flemas y
secreciones que se depositan en las vías respiratorias. El color del
contenido expectorado resulta ser de importancia clínica. Cuando es
blanquecino es de tipo mucoso, verde amarillento mucopurulento, verdoso
purulento y rojizo implica expectoración hemorrágica.

ESTORNUDO

Es un acto reflejo debido a numerosos factores que provocan irritación de


la mucosa nasal. El estornudo se inicia con una inspiración manifiesta
seguida por una violenta y sonora expulsión de aire de los pulmones. Se
acompaña con un movimiento hacia delante de la cabeza. Dentro de los
factores que desencadenan la necesidad de estornudar están los estados
alérgicos, los ambientes con mucho polvo, el polen de las flores, el pelo de
algunos animales, los productos tóxicos como el amoníaco y determinadas
enfermedades infecciosas como los resfríos y los estados gripales.

BOSTEZO

Es un acto no controlado donde ingresa aire por la boca hacia los


pulmones a través de una amplia separación de los huesos maxilares,
seguida de la eliminación de una cantidad algo menor de aire por la
misma vía con cierre de la cavidad bucal. En general, se acompaña de un
leve lagrimeo. Duran alrededor de tres segundos y suelen ser contagiosos
entre humanos.
Las causas del bostezo no son aún del todo claras. Entre las numerosas
hipótesis se cree que sirve para regular la temperatura del cuerpo, como
también señalar determinados comportamientos anímicos en especies
animales gregarias, donde el bostezo indicaría cansancio al grupo familiar,
sincronizando así los patrones del sueño. En general, se acepta que el
bostezo es un indicador de aburrimiento, agotamiento, estrés y rechazo.

HIPO

Son contracciones espasmódicas e involuntarias del diafragma, debido a


la irritación del nervio frénico. Este nervio es el responsable de la
contracción y relajación del músculo diafragmático. El hipo o singulto
produce una súbita inspiración y cierre de la glotis, con un sonido
característico. Las causas de esta manifestación son diversas, entre ellas la
ingestión muy rápida de alimentos, de bebidas gaseosas y muy frías,
consumo elevado de alcohol, tabaquismo, etc. Otras causas se deben al
estrés, la ansiedad, por una distensión gástrica y durante el embarazo.

La mayoría de las veces el hipo es pasajero. Una forma de detenerlo es


efectuando una inspiración profunda y reteniendo el aire en los pulmones
el mayor tiempo posible. Ello produce aumento del dióxido de carbono en
la sangre inhibiendo las contracciones.

Si el hipo se manifiesta de manera persistente puede que sea uno de los


signos de una enfermedad severa, con lo cual la consulta médica es
imperiosa.

VIAS AEREAS SUPERIORES

Los aparatos respiratorio y circulatorio convergen a nivel del pulmón en


una función trascendente para el metabolismo celular, cual es, el
intercambio de gases (oxígeno y anhidrido carbónico) a nivel de los
alveolos pulmonares. Con la participación del aparato respiratorio, que
con sus conductos bronquiales permite llevar el aire inspirado, hacia los
alvéolos y con el aparato circulatorio, que a través de los capilares del
circuito pulmonar (o menor), pone en contacto íntimo ese aire con la
hemoglobina de los glóbulos rojos, se logra materializar el intercambio de
gases.
En el aparato respiratorio se distinguen: La vía aérea superior, que
comprende aquellas cavidades ubicadas por sobre la entrada a la laringe,
esto es, fosas nasales y faringe; y la vía aérea inferior que incluye laringe,
tráquea y bronquios. Al final de la vía aérea inferior se encuentran los
alvéolos pulmonares.

Las funciones de la vía aérea es la conducción del aire desde el medio


externo hasta el medio interno, para realizar esta función es necesaria la
ventilación, que es el aumento de volumen a nivel de la parrilla costal.
FOSAS NASALES

La cavidad nasal corresponde a la primera porción de la vía aérea


superior y es un espacio común entre el cráneo y la cara. Esta cavidad se
constituye por dos partes, una zona anterior, llamada nariz o pirámide
nasal y otra posterior, las fosas nasales propiamente tales.

Nariz:

Estructura piramidal constituida de una porción ósea y una porción


cartilaginosa. La parte superior de la nariz tiene es esqueleto óseo, formado
por los huesos nasales, las apófisis frontales de los huesos maxilares, la
porción nasal del hueso frontal, y las porciones óseas del tabique nasal; en
cambio, la zona inferior posee un esqueleto cartilaginoso formado por los
cartílagos alares mayor y menor, el cartílago lateral, y la porción
cartilaginosa del tabique nasal. Estos cartilagos y la piel que las cubre
delimitan las narinas u orificios nasales (nares), a través de las cuales se
accede a un espacio, el vestíbulo nasal, región desprovista de mucosa,
cubierta por piel modificada y que presenta folículos pilosos denominados
vibrisas; estos gruesos pelos están encargados de captar partículas
extrañas que ingresan al respirar, constituyendo la primera barrera de
defensa de la vía respiratoria.

La piel que cubre la zona ósea de la nariz es delgada y se desliza


fácilmente sobre los planos profundos; la piel que cubre la zona
cartilaginosa de la nariz es gruesa, adherida a los planos profundos y con
abundantes glándulas sebáceas.

Los cartílagos nasales se encuentran en relación directa con músculos


faciales como el depresor del septo nasal y el músculo nasal, elementos
que van a permitir cierto movimiento de esta piezas cartilaginosas,
generando así el “aleteo nasal”.
Funciones de la cavidad nasal:

• Ingresar el aire oxigenado, fijando en el mucus las partículas extrañas


inspiradas (función detersoria).

• Eliminar los desechos respiratorios, principalmente dióxido de carbono,


hacia el exterior.

• Temperar y humectar el aire que respiramos, acondicionándolo para su


tránsito hacia los alvéolos pulmonares.

• Detectar partículas odoríferas, debido a que en la porción superior de


este segmento se encuentra el epitelio olfatorio.

• Participar en la fonación, sirviendo como resonador de la voz, función


donde participan los senos perinasales.

Límites de la Fosa Nasal:

1. Abertura anterior o también llamada abertura piriforme, reborde óseo


formado por los maxilares y los huesos nasales. Es en esta abertura se fijaran
los cartílagos de la nariz. En la zona baja de esta abertura se forma un
pliegue, el limen nasal, que separa el vestíbulo nasal de la fosa nasal.

2. Las coanas son orificios que comunican a la cavidad nasal hacia interior
.

3. El techo de la cavidad nasal, es la parte más angosta y anfractuosa de


la cavidad nasal. Está formado por el hueso frontal, la lámina cribosa del
etmoides y el cuerpo del esfenoides. La lámina cribosa del etmoides es
atravesada por los nervios olfatorios, elementos que se distribuyen por el
epitelio olfatorio (pituitaria amarilla), zona que en los animales
microosmáticos como el hombre presenta un área de 4 cm2. En la zona
posterior del techo se observa el receso esfenoétmoidal, zona donde
desemboca el seno esfenoidal.

4. El piso, rectilíneo y ancho, está conformado por los procesos palatinos


del hueso maxilar y la lamina horizontal del hueso palatino que hacia
posterior conforma la espina nasal posterior.
En la parte más anterior del piso de la cavidad nasal se encuentran dos
orificios, uno a cada lado de la línea media, que van a formar el canal
incisivo por donde pasará el paquete vasculo nervioso nasopalatino.

5. La pared medial de la fosa nasal, corresponde al tabique nasal


compartido por ambas fosas nasales; este tabique es cartilaginoso en la
zona anterior (cartílago del tabique, que soporta a la nariz cartilaginosa) y
óseo hacia la zona posterior, formado por el hueso vómer y la lámina
perpendicular del etmoides.
6. Pared lateral de la cavidad nasal está constituida por:
a) Los huesos nasales
b) Proceso frontal del maxilar
c) Concha nasal superior y media del etmoides
d) Concha nasal inferior
e) Hueso lagrimal
f) La lámina vertical del palatino
g) Cara medial del ala medial del proceso pterigoides

A diferencia de lo liso y regular que es la pared septal, en la pared lateral


observamos tres relieves óseos convexos hacia medial, dispuestos en
sentido antero-posterior, las conchas (o cornetes) nasales superior (la más
pequeña), media e inferior (la más larga). Estos elementos, por su forma y
disposición, van a acelerar el aire inspirado (efecto de turbina),
permitiendo que roce contra las paredes para que la mucosa respiratoria
pueda humedecer, entibiar y “filtrar” el aire. Entre la parte cóncava
(lateral) de las conchas y la pared lateral de las fosas nasales se forman
unos espacios, los meatos nasales, que toman el nombre de la concha
nasal que los delimita; entonces, observamos en cada fosa nasal el meato
superior, medio e inferior

A nivel del meato inferior, en la zona anterior de él, se abre el conducto


nasolagrimal, elemento que provee de un flujo constante de lagrima que,
al evaporarse, permite humedecer el aire inspirado.

A nivel del meato medio desembocan, de ventral a dorsal: el seno frontal,


las celdillas etmoidales anteriores y medias y el seno maxilar.
En el meato superior desembocan las celdillas etmoidales posteriores. A
nivel del receso esfenoidal que drena el seno esfenoidal
Cavidades (Senos) Perinasales:

1. Las cavidades perinasales: son cavidades pares, anexas a las fosas


nasales, formando porciones huecas de los huesos que las alojan, cubiertas
por mucosa respiratoria. Estas cavidades producen mucus que drena
hacia las fosas nasales.

2. El seno maxilar: se localiza en el hueso maxilar, presenta una forma


piramidal, cuya base se relaciona con la pared lateral de cavidad nasal y
el vértice con el hueso cigomático. La zona inferior de este cavidad tiene
relación con las raíces de molares y premolares superiores.
3. Celdillas etmoidales: se encuentran labradas en las masas laterales del
hueso etmoides, dándoles una forma de panal conocido como laberinto
etmoidal. Como dijimos, las celdillas etmoidales anteriores y medias
desembocan en el meato medio y celdillas etmoidales posteriores lo
hacen en el meato superior.

4. Seno Frontal: ubicados en la zona anterior del hueso frontal, se extiende


por encima del borde supraorbitario. El seno frontal tiene desemboca en el
meato medio denominada Infundíbulo , la cual es una celdilla etmoidal
anterior.

5. Seno Esfenoidal: Los Senos esfenoidales se separan por un septo y se


encuentran al interior del cuerpo del esfenoides. Se abre en el techo de las
fosas nasales, en el receso esfeno-etmoidal.

FARINGE
La faringe corresponde a un canal mucoso, membranoso y muscular,
dispuesto ventral a la columna vertebral, que se extiende desde la base
del cráneo hasta el nivel de la sexta vértebra cervical. Este canal se
encuentra abierto hacia ventral y se relaciona sucesivamente, de arriba
abajo con:
• Fosas nasales, nasofaringe

• Cavidad oral, bucofaringe

• Laringe, laringofaringe (zonda donde ocurre el cruce con de las vías


aerea y digestiva), para continuarse con el esófago.
ENDOFARINGE

1. Nasofaringe: Corresponde a la porción nasal (cavum) de la endofaringe.


Se extiende desde la bóveda de la faringe hasta el velo del paladar. Hacia
ventral comunica con las coanas. En su pared lateral desemboca la tuba
auditiva, conducto que comunica con el oído medio.

2. Orofaringe: Se extiende desde el velo del paladar hasta un plano


horizontal que pasa por el borde superior de la epiglotis. Hacia ventral
comunica con la cavidad oral a través del istmo de las fauces, estrecho
formado por los pliegues palatoglosos (o pilares anteriores del velo,
formados por el músculo del mismo nombre). Hacia atrás de estos se
disponen los pliegues palatofaríngeos (o pilares posteriores del velo). En su
pared lateral, entre los pilares anterior y posterior del velo palatino se ubica
la tonsila (amigdala) palatina.

3. Laringofaringe: Corresponde a la región más estrecha de la faringe. La


laringe se proyecta hacia el lumen de la laringofaringe, situación que
explica las crisis de sofocación provocadas cuerpos extraños retenidos en
esta zona.

Esta estructura se continúa hacia caudal con el extremo superior del


esófago y comunica hacia delante, a través del adítus laríngeo, con la
laringe. Entre la laringe y la pared faríngea se forman los recesos piriformes,
por los cuales se desplaza el bolo alimenticio hacia el esófago

Estructuralmente este canal presenta de adentro hacia fuera una mucosa,


una submucosa con tejido linfoide, una fascia llamada fascia
faringobasilar, firme, que da estructura de soporte de la faringe y una capa
muscular estriada formada por los músculos constrictores de la faringe.

En la mucosa faringea existe abundante tejido linfoide, que sirve de


barrera defensiva a las infecciones que ingresen al organismo por esta vía.
El conjunto de estas estructuras forman el círculo (anillo) linfático de la
faringe (Waldeyer).

CAPA MUSCULAR

Está compuesta por diez músculos, cinco a cada lado. Por fuera de estos
músculos se dispone un delicado tejido conectivo laxo, la fascia
bucofaríngea.
MUSCULOS CONSTRICTORES:

Corresponde a un grupo de músculos triangulares, con dirección hacia


ventral, que se ubican uno sobre otro. Al contraerse disminuyen y acortan
el espacio de la faringe, lo que genera una acción peristáltica que
desplaza al bolo alimenticio a través de la faringe (deglución faríngea).

1. Constrictor superior, extendido desde el rafe medio faríngeo hasta el


proceso pterigoides, el rafe pterigo-mandibular y la mandíbula.
2. Constrictor medio, extendido desde el rafe medio hasta el hiodes.

3. Constrictor inferior, extendido desde el rafe medio hasta los cartílagos


tiroides y cricoides.
MUSCULOS ELEVADORES:
Corresponden a dos músculos cuya función será elevar la faringe y la
laringe durante la deglución. Cuando estos músculos contraen y elevan la
faringe, los músculos constrictores se acortan, por ende se ensancha el
espacio de la faringe y se abren los recesos piriformes, permitiendo el paso
del bolo alimenticio hacia el esófago.

1. Músculo estilofaríngeo; se extiende desde el proceso estiloides, ingresa a


la faringe entre el constrictor superior y medio, para fijarse en la pared
faríngea y el cartílago tiroides.

2. Músculo palatofaríngeo; forma el pilar posterior del velo palatino, se


extiende desde el velo del paladar y de la tuba auditiva (porción
salpíngea) hasta la pared faríngea y el cartílago tiroides.

LARINGE

La laringe es un órgano que conduce el aire desde la faringe hacia la


tráquea. Se forma por la superposición de los cartílagos laríngeos, cubiertos
internamente por mucosa respiratoria y unídos por la musculatura
intrínseca de la larínge. Se sitúa por delante de la región inferior de la
faringe, con la cual se comunica a través de aditus laríngeo. Hacia ventral
se relaciona con la lengua y el hueso hioides, continuándose con la
tráquea hacia caudal.

La entrada o aditus laringeo está limitado por el borde superior de la


epiglotis y los pliegues ariepiglóticos. Este espacio, más o menos oval, se
encuentra en un plano oblícuo, hacia arriba y atrás y comunica con la
laringofaringe.

La laringe se compone principalmente por cinco estructuras cartilaginosas


superpuestas, dos pares y tres impares, todos unidos entre sí por pequeñas
articulaciones sinoviales. Estos cartílagos articulan con membranas que
sellan el espacio y se unen a elementos musculares extrínsecos de la
laringe permiten la fonación.
CARTILAGOS PARES:

1. Cartílagos Aritenoides: Cartílagos piramidales de base triangular. Se


articulan es su parte superior con los pequeños cartílagos corniculados.
En la base del cricoides se disponen los procesos vocales y musculares. El
proceso vocal, se orienta hacia medial y sirve de inserción para el
ligamento vocal. El proceso muscular, se orienta hacia lateral, y sirve de
inserción para los músculos cricoaritenoídeo lateral y cricoaritenoídeo
posterior.

2. Cartílagos Corniculados: Corresponden a dos pequeños cartílagos, que


se articula superior y medial a los cartílagos aritenoides.
CARTILAGOS IMPARES:

1. Cartílago Epiglótico: Cartílago elástico con forma de paleta, situado en


la parte alta de la laringe. Al descender permite el cierre del aditus
laríngeo durante la deglución.
2. Cartílago Tiroides: Es un cartílago incompleto, con forma de un libro
abierto hacia posterior. Su borde superior presenta la incisura tiroidea en el
centro y hacia lateral se observan los cuernos superiores, eminencias de
inserción muscular. En la cara interior del cartílago tiroides se insertan los
ligamentos vocales.

3. Cartílago Cricoides: Corresponde al primer anillo traqueal modificado y


le da soporte a la laringe. Tiene la forma de un anillo con la placa
orientada hacia posterior. Sobre esta placa se articulan los cartílados
aritenoides
ENDOLARINGE (LUMEN)

La mucosa laríngea corresponde a un de epitelio de tipo respiratorio,


ciliado pseudoestratificado, sin embargo, a nivel de los pliegues (cuerdas)
vocales inferiores el epitelio es de tipo pavimentoso (células planas
dispuestas en varias capas).

La laringe presenta dos pares de pliegues dispuestos en sentido


anteroposterior. Por cefálico los pliegues vestibulares (cuerdas vocales
superiores o falsas) y por caudal los pliegues vocales (cuerdas vocales
inferiores o verdaderas), que delimitan entre si un espacio llamado glotis.
Lateral a la zona ubicada en el pliegue vestibular y el pliegue vocal se
forma una hendidura que se extiende hacia afuera llamada ventrículo
laríngeo
MÚSCULOS LARINGEOS
La dinámica de la fonación está controlada tanto por músculos
extrínsecos, parte de la musculatura del cuello, como por músculos
intrínsecos, que se insertan en los cartílagos de la laringe.
MUSCULATURA INTRINSECA:

Según el efecto de la contracción de los diferentes componentes de la


musculatura intrínseca, los podemos clasificar en tres funciones.

1. Modificar el aditus laríngeo: ensanchándolo al separar los pliegues


ariepiglóticos (músculo tiroepiglótico) o reduciéndolo al bajar la epiglotis
(músculo ariepiglótico).

2. Modificar la glotis: ensanchándola al rotar hacia afuera los ariteniodes


(músculo cricoaritenoideo posterior) o reduciéndola al rotar hacia adentro
los aritenoides (músculos cricoaritenoídeo lateral e interaritenoídeos).

3. Modificar la tensión de los pliegues vocales o cuerdas vocales


verdaderas: tensándolos (músculos cricotirídeo) o relajándolos (músculos
tiroaritenoídeo y músculo vocal).
MUSCULATURA EXTRÍNSECA:

La musculatura extrínseca de la laringe, va desde la laringe hasta los


órganos vecinos. Corresponde a los músculos esternotiroideo, tirohioideo,
constrictor inferior de la faringe, estilofaringeo y palatofaringeo. Su función
se relación con el ascenso y descenso de la laringe durante la deglución y
la respiración.
VIAS AEREAS INFERIORES

Es un órgano con forma de tubo, de estructura cartilaginosa, que


comunica la laringe con los bronquios. Está formada por numerosos anillos
de cartílago conectados entre sí por fibras musculares y tejido conectivo.
La función de los anillos es reforzar a la tráquea para evitar que se colapse
durante la respiración-

Las medidas aproximadas en humanos son de 10-11 centímetros de


longitud y 2 a 2,5 centímetros de diámetro. La tráquea posee unos 20-22
cartílagos con forma de herradura. La mitad de los anillos se ubican a la
altura del cuello, mientras que la otra mitad se aloja en la cavidad
torácica, a la altura del esternón. La tráquea se bifurca cerca del corazón,
dando lugar a dos bronquios primario.La tráquea tiene la función de llevar
el aire desde la laringe hacia los bronquios.
Pulmón

Los pulmones constituyen los órganos fundamentales de la respiración, su


principal función consisten a oxigenar la sangre venosa mixta. Los
pulmones de una persona sana son normalmente suaves, esponjoso y
tienen poco peso; son muy elásticos y se retraen hasta aproximadamente
un tercio de su tamaño cuando se abre la cavidad torácica. Los pulmones
tienen una forma cónica, y se hallan contenidos dentro de un saco pleural,
se separan entre sí por el corazón y los grandes vasos del mediastino
medio. <los pulmones se fijan al corazón y la tráquea por las estructuras de
sus raíces pulmonares (arterias y venas pulmonares, bronquios principales) y
al pericardio por los ligamentos pulmonares. Cada pulmón se compone de
vértice, base, raíz e hilio.
Vértice del pulmón

El extremo superior del pulmón, redondeado y en punta, se extiende más


allá del orificio toráxico superior dentro de la raíz del cuello. A este nivel, se
halla en íntimo contacto con la cúpula que forma la pleura cervical o
cúpula pleural.
Base del pulmón

En la cara diafragmática y cóncava del pulmón, que se relaciona con la


cúpula del diafragma. La base del pulmón derecho es más profunda,
porque la cúpula derecha se eleva hasta un novel superior, El borde inferior
es fino y punzante en la zona donde se introduce dentro del receso
costodiafragmático.
La raíz del pulmón

La raíz sirve como inserción del pulmón u es la vía a través de la cual entran
y salen del pulmón las estructuras hiliares. Conecta la cara medial del
pulmón con el corazón u la tráquea, esta rodeada por la zona de reflexión
de la pleura.
El hilio del pulmón

Es la zona en donde s e inserta la raíz del pulmón y contiene los bronquios


principales, los vasos pulmonares, los vasos bronquiales, los vasos linfáticos y
los nervios que entran y salen del pulmón.

Bronquios Primarios
Los bronquios principales, uno a cada lado, descienden lateralmente
desde la bifurcación de la tráquea, a la altura del ángulo esternal, hasta
las raíces de los pulmones. Al igual que la tráquea, las paredes bronquiales
están reforzados por anillos cartilaginosos en forma de C. Cada bronquio
principal muestra un patrón de ramificación característico, conocido
como árbol bronquial.

El bronquio principal derecho es más ancho, corto y vertical que el lado


izquierdo. Mide aproximadamente 2,5cm de longitud y entra directamente
en la raíz del pulmón. El bronquio principal izquierdo mide 5cm y desciende
lateralmente, por debajo del arco de la aorta y anterior al esófago y a la
aorta descendente. En los bronquios primarios la mucosa es igual a la de
la tráquea, en las ramas menores el epitelio suele ser cilíndrico ciliado. La
lámina propia esta formada por fibras elásticas, sigue a la mucosa una
capa muscular lisa, formada por hacer musculares dispuestos en espiral
que rodena completamente el bronquio. Exteriormente a esa capa
muscular, existen glándulas del tipo mucosas o mixtas, cuyos conductos
abren en la luz bronquial.

Las piezas cartilaginosas están rodeadas por un tejido conjuntivo rico en


fibras elásticas. Esta capa conjuntiva, frecuentemente llamada capa
adventicia, continúa con las fibras conjuntivas del tejido pulmonar próximo.
Bronquios Secundarios
Cada bronquio primario se divide en bronquios secundarios o bronquios
lobares dos en el pulmón izquierdo y tres en el derecho, que se distribuyen
en cada lóbulo del pulmón. Cada bronquio lobar da origen a los bronquios
terciarios o bronquios segmentarios que se distribuyen en los segmentos
concretos del pulmón denominados segmentos broncopulmonares y ellos
a su vez se dividen en segmentos lobulillares para cada lobulillo.

Bronquiolos

Cuando los bronquios alcanzan un tamaño muy pequeño y no tienen


cartílago en la pared se denomina bronquiolos, éstos a su vez continúan
subdividiéndose, disminuyendo su diámetro, aumentando su número y
adelgazando el grosor de su pared. El último bronquiolo que no se
subdivide es el bronquiolo termina que carece de cartílago y de glándulas
mucosas, aunque el epitelio que posee continua siendo cilíndrico.
El epitelio de los bronquiolos presenta regiones especializadas
denominadas cuerpos neuroepiteliales, cada uno de ello esta constituido
por 80-100 células que contienen gránulos de secreción y reciben
terminaciones nerviosas colinérgicas. Su secreción tiene efecto local. La
lámina propia de los bronquiolos es delgada y rica en fibras elásticas, la
mucosa se continúa con una capa muscular lisa cuyas células se
entrelazan con las fibras elásticas, éstas se prolongan hacia fuera y se
continúan con la estructura esponjosa del parénquima pulmonar.
Bronquiolo Terminal

La estructura del bronquiolo Terminal es similar a la del bronquiolo, solo que


su pared es más delgada, esta revestida en su interior por epitelio columnar
bajo o cúbico, con células ciliadas y no ciliadas, Los bronquiolos terminales
poseen también células clara no ciliadas, que presenta gránulos secretores
de función poco conocida.
Bronquiolo Respiratorio

El bronquiolo respiratorio es un tubo corto, en ocasiones ramificado,


revestido por el epitelio simple que varía del columnar bajo a cuboide,
pudiendo presentar cilios en la porción inicial. El músculo liso y las fibras
elásticas están bien desarrolladas, aunque forman una capa más delgada
que la del bronquiolo Terminal, Los alvéolos son expansiones sacciformes
de la pared de los bronquiolos y están recubiertos por un epitelio capaz de
realizar intercambios gaseosos. De los bronquiolos respiratorios, se
desprenden unos conductos largos y tortuosos que se conocen con el
nombre de conductos alveolares.

Alveolo

El conducto alveolar termina en un alvéolo sencillo o en sacos alevolares


formados por diversos alvéolos, éstos son pequeñas evaginaciones en
forma de saco, en ellos se pueden distinguir unas células que forman las
paredes y otras que se encuentran en el lado de las paredes sin formar
parte de ellas, entre las primeras se diferencian los Neumocitos Tipo I, que
son células de tipo epitelial que forman las paredes, u los Neumocitos tipo
II, que secretan una sustancia tensoactiva denominada surfactante
pulmonr.

En la superficie de los alvéolos se permite la difusión de los gases


ingresando Oxígeno hacia el interior del cuerpo y retirando CO2 producto
del metabolismo corporal.

SISTEMA NERVIOSO

El sistema nervioso es el conjunto de elementos anatómicos encargados


de regir el funcionamiento de los distintos aparatos del cuerpo humano.

En su acción más simple interviene un elemento nervioso(neurona sensitiva)


que recoge las impresiones del medio ambiente o del interior del cuerpo y
las transmite en forma de influjo nervioso mediante sus prolongaciones a
otra neurona o célula efectora.

El sistema nervioso es una red de tejidos de origen ectodérmico en los


animales diblásticos y triblásticos cuya unidad básica son las neuronas. Su
función primordial es la de captar y procesar rápidamente las señales
ejerciendo control y coordinación sobre los demás órganos para lograr una
adecuada, oportuna y eficaz interacción con el medio ambiente
cambiante.

Para su estudio desde el punto de vista anatómico el sistema nervioso se


ha dividido en central y periférico, sin embargo para profundizar su
conocimiento desde el punto de vista funcional suele dividirse en somático
y autónomo.
Capaz de recibir e integrar innumerables datos procedentes de los distintos
órganos sensoriales para lograr una respuesta del cuerpo, el Sistema
Nervioso se encarga por lo general de controlar las actividades rápidas.
Además, el Sistema Nervioso es el responsable de las funciones intelectivas,
como la memoria, las emociones o las voliciones.

Su constitución anatómica es muy compleja, y las células que lo


componen, a diferencia de las del resto del organismo, carecen de
capacidad regenerativa.

El sistema nervioso tiene tres funciones básicas: la sensitiva, la integradora y


la motora. En primer lugar, siente determinados cambios, estímulos, tanto
en el interior del organismo (el medio interno), por ejemplo la distensión
gástrica o el aumento de acidez en la sangre, como fuera de él (el medio
externo), por ejemplo una gota de lluvia que cae en la mano o el perfume
de una rosa; esta es la función sensitiva. En segundo lugar la información
sensitiva se analiza, se almacenan algunos aspectos de ésta y toma
decisiones con respecto a la conducta a seguir; esta es la función
integradora. Por último, puede responder a los estímulos iniciando
contracciones musculares o secreciones glandulares; es la función motora.

El ser humano está dotado de mecanismos nerviosos, a través de los cuales


recibe información de las alteraciones que ocurren en su ambiente externo
e interno y de otros, que le permiten reaccionar a la información de forma
adecuada. Por medio de estos mecanismos ve y oye, actúa, analiza,
organiza y guarda en su encéfalo registros de sus experiencias.

Estos mecanismos nerviosos están configurados en líneas de comunicación


llamadas en su conjunto sistema nervioso
El sistema nervioso se divide en:
Sistema nervioso central:
Comprende:

 Encéfalo.
 Médula Espinal.
Se le llama también "de la vida en relación" porque sus funciones son:

 Percibir los estímulos procedentes del mundo exterior.


 Transmitir los impulsos nerviosos sensitivos a los centros de
elaboración.
 Producción de los impulsos efectores o de gobierno.
 Transmisión de estos impulsos efectores a los músculos esqueléticos.
Sus Partes son:
Encéfalo

Es la masa nerviosa contenida dentro del cráneo. esta envuelta por las
meninges, que son tres membranas llamadas: duramadre, piamadre y
aracnoides.

-El encéfalo consta de tres partes más voluminosas: cerebro, cerebelo y


bulbo raquídeo, y otras más pequeñas: el diencéfalo, con el hipotálamo
(en conexión con la hipófisis del Sistema Endocrino) y el mesencéfalo con
los tubérculos cuadrigéminos.

Cerebro.- Es la parte más importante, está formado por la sustancia gris


(por fuera) y la sustancia blanca (por dentro).

-Dentro de sus principales funciones están las de controlar y regular el


funcionamiento de los demás centros nerviosos, también en el se reciben
las sensaciones y se elaboran las respuestas conscientes a dichas
situaciones. Es el órgano de las facultades intelectuales: atención,
memoria, inteligencia... etc.

Cerebelo.- Esta situado detrás del cerebro y es más pequeño (120 gr.);
tiene forma de una mariposa con las alas extendidas. Coordina los
movimientos de los músculos al caminar y realizar otras actividades
motoras.

Bulbo Raquídeo.- Es la continuación de la médula que se hace más gruesa


al entrar en el cráneo. Regula el funcionamiento del corazón y de los
músculos respiratorios, además de los movimientos de la masticación, la
tos, el estornudo, el vómito... etc.

Médula Espinal.- La médula espinal es un cordón nervioso, blanco y


cilíndrico encerrada dentro de la columna vertebral.

Su función más importante es conducir, mediante los nervios de que está


formada, la corriente nerviosa que conduce las sensaciones hasta el
cerebro y los impulsos nerviosos que lleva las respuestas del cerebro a los
músculos.
Tejido Nervioso
Los órganos que integran el Sistema Nervioso están formados
fundamentalmente por el tejido nervioso cuyos elementos constitutivos son
las neuronas y células gliales que dan origen a la sustancia gris formada
por los cuerpos neuronales y el neuropilo, y la sustancia blanca, formada
por las fibras nerviosas o axones y sus vainas.

Desde un punto de vista funcional, la sustancia gris forma centros de


procesamiento de la información y en la sustancia blanca se agrupan las
vías de conducción aferentes y eferentes y las vías de comunicación de
dichos centros entre sí.

La información llega a los centros superiores desde la periferia, pasando


por una serie de centros intermedios, y lo mismo sucede con las respuestas
que desde los centros superiores llegan a la periferia atravesando un
número variable de centros de procesamiento.

CELULAS DEL SISTEMA NERVIOSO


La Neurona
La neurona es la célula nerviosa, derivada del neuroblasto.

Es la unidad funcional del sistema nervioso pues sirve de eslabón


comunicante entre receptores y efectores, a través de fibras nerviosas.
Consta de tres partes:

 Cuerpo o soma: compuesto fundamentalmente por núcleo,


citoplasma y nucléolo.
 Dendritas: terminaciones nerviosas. son proyecciones o
prolongaciones del cuerpo, especializadas para recibir estímulos de
células sensoriales, axones y otras neuronas con múltiples
ramificaciones (pueden recibir estímulos simultáneos de otras
neuronas) Los impulsos que reciben se transmiten al cuerpo o
NEURONAS
 Axón: terminación larga, que puede alcanzar hasta un metro de
longitud.

El axón suele tener múltiples terminaciones llamadas "botones terminales",


que se encuentran en proximidad con las dendritas o en el cuerpo de otra
neurona. La separación entre el axón de una neurona y las dendritas o el
cuerpo de otra, es del orden de 0,02 micras.

Esta relación existente entre el axón de una neurona y las dendritas de otra
se llama "sinapsis".
A través de la sinapsis, una neurona envía los impulsos de un mensaje
desde su axón hasta las dendritas o un cuerpo de otra, transmitiéndole así
la información nerviosa.
La transmisión sináptica tiene las siguientes características:

La conducción de los impulsos nerviosos se efectúa en un solo sentido: del


axón de una neurona al cuerpo o dendritas de la otra neurona sináptica.

El impulso nervioso se propaga a través de intermediarios químicos, como


la acetilcolina y la noradrenalina, que son liberados por las terminaciones
axónicas de la primera neurona y al ser recibidos por la siguiente incitan en
ella la producción de un nuevo impulso.

En el sistema nervioso central, hay neuronas excitadoras e inhibidoras y


cada una de ellas libera su propia sustancia mediadora.

La velocidad de conducción de un impulso a lo largo de la fibra nerviosa


varía de 1 a 100 metros por segundo, de acuerdo a su tamaño, siendo
mayor en las más largas.

Cuando las terminaciones presinápticas son estimuladas en forma


continuada o con frecuencia elevada, los impulsos transmitidos disminuyen
en número a causa de una "fatiga sináptica".

La transmisión de una señal de una neurona a otra sufre un retraso de 5


milisegundos.
Células de la neuroglia dan soporte y protección a las neuronas.
Astrocitos:

El astrocito protoplasmático es una célula que pertenece al grupo de las


neuroglias del sistema nervioso central. Cumple la función junto al astrocito
fibroso, de servir de sostén físico y metabólico de las neuronas. Es una
célula con característica morfológica heterogénea, con un núcleo
redondeado y cuerpo celular del cual parten prolongaciones llamadas
"procesos pediculares o pies" que se dirigen a los vasos sanguíneos
adyacentes y transportan metabolitos y desechos de parte de la neurona,
de igual manera estos "pies" recubren las porciones del axón neuronal que
no está cubierto por la mielina, por ejemplo los nódulos de Ranvier.

La proteína ácida fibrilar glial está presente en pequeñas cantidades en el


astrocito protoplasmatico, haciendo que su morfología sea más
heterogéneo que la del astrocito fibroso.
Oligodentrocitos:

Los oligodendrocitos, también conocidos como oligodendroglías, son un


tipo de células de la macroglia. Estas, son más pequeñas que los astrocitos
y con pocas prolongaciones. Además de la función de sostén y unión, los
oligodendrocitos desempeñan otra importante función, que es la de
formar la vaina de mielina en el sistema nervioso central y exterior (SNC). En
el sistema nervioso periférico la mielinización es desempeñada por la célula
de Schwann. Se localizan tanto en la sustancia gris como en la blanca del
SNC. Su citoplasma denso contiene un núcleo relativamente pequeño.

Se han identificado dos tipos de oligondendrocitos en la neuroglia del SNC,


los oligodendrocitos interfasciculares -se encargan de la producción de la
vaina de mielina y aislamiento del axón- y los oligodendrocitos satelitales,
de los cuales aún no se precisa su función, aunque se cree que estos
tienen función eyectora sobre los músculos de tejido cavernoso del órgano
sexual masculino provocando la salida de millones de espermatozoides
durante la eyaculación.
Células microgliales:

Las microglías, microgliales o células de Hortega son células neurogliales


del tejido nervioso con capacidad fagocitaria que forman el sistema
inmunitario del sistema nervioso central. Se originan durante el desarrollo a
partir de precursores mesenquimales que, independientemente de la
circulación sanguínea, penetran en el parénquima cerebral. Durante la
vida adulta se ha propuesto que se pueden renovar por división in situ, a
partir de precursores de la médula ósea, o desde monocitos que alcanzan
el sistema nervioso a través de la sangre. Sin embargo, la producción de
microglía a partir de precursores de la médula ósea o monocitos
circulantes sólo se ha observado tras irradiar el sistema nervioso
central.[cita requerida] Representan el sistema mononuclear fagocítico en
el sistema nervioso central.
Células enpendimarias:

Las células ependimarias forman el revestimiento de los ventrículos del


encéfalo y del conducto ependimario de la médula espinal, forman parte
de la neuroglía.

Morfología columnar, en un único estrato. La superficie de la célula que se


orienta al ventrículo, suele presentar cilios. La cara opuesta tiene unas
fibras para su función conectiva. Es una capa de células cuboideas o
cilíndricas que reviste cavidades: los ventrículos cerebrales y el canal
central de la médula espinal. Sus características morfológicas y funcional
se relacionan con el transporte de fluidos. Su función principal está atada a
la contención de líquido cefalorraquídeo que se produce en los Plexos
Coroides. Producen y segregan líquido cefalorraquídeo.
Células de swhann:

Las células de Schwann (actualmente llamadas neurolemocitos) son


células gliales que se encuentran en el sistema nervioso periférico que
acompañan a las neuronas durante su crecimiento y desarrollo de su
función. Recubren a las prolongaciones (axones) de las neuronas
formándoles una vaina aislante de mielina. A diferencia de los
oligodendrocitos que se encuentran en el sistema nervioso central
recubren los axones con su citoplasma y tienen origen embrionario en las
células de la cresta neural.
CUERPO NEURONAL

 Núcleo: por lo común se encuentra en el centro del cuerpo celular.


Es grande, redondeado pálido y contiene finos gránulos de
cromatina muy dispersos. Por lo general las neuronas poseen un
único núcleo que está relacionado con la síntesis de ácido
ribononucleico RNA. El gran tamaño probablemente se deba a la
alta tasa de síntesis proteica, necesario para mantener el nivel de
proteínas en el gran volumen citoplasmático presente en las largas
neuritas y el cuerpo celular.
 Sustancia de Nissl: consiste en gránulos que se distribuyen en todo el
citoplasma del cuerpo celular excepto en la región del axón. Las
micrografías muestran que la sustancia de Nissl está compuesta por
retículo endoplasmático rugoso dispuestos en forma de cisternas
anchas apiladas unas sobre otras. Dado que los ribosomas contienen
RNA, la sustancia de Nissl es basófila y puede verse muy bien con
tinción azul de touluidina u otras anilinas básicas y microscopio
óptico. Es responsable de la síntesis de proteínas, las cuales fluyen a
lo largo de las dendritas y el axón y reemplazan a las proteínas que
se destruyen durante la actividad celular. La fatiga o lesión neuronal
ocasiona que la sustancia de Nissl se movilice y concentre en la
periferia del citoplasma. Esto se conoce con el nombre de
cromatólisis.
 Aparato de Golgi: cuando se ve con microscopio óptico, después
de una tinción de plata y osmio, aparece como una red de hebras
ondulantes irregulares alrededor del núcleo. En micrografías
electrónicas aparece como racimos de cisternas aplanadas y
vesículas pequeñas formadas por retículos endoplasmáticos lisos. Las
proteínas producidas por la sustancia de Nissl son transferidas al
aparato de Golgi donde se almacenan transitoriamente y se le
pueden agregar hidratos de carbono. Las macromoléculas pueden
ser empaquetadas para su transporte hasta las terminaciones
nerviosas. También se le cree activo en la producción de lisosomas y
en la síntesis de las membranas celulares.
 Mitocondrias: Dispersas en todo el cuerpo celular, las dendritas y el
axón. Tienen forma de esfera o de bastón. En las micrografías
electrónicas las paredes muestran doble membrana. La membrana
interna exhibe pliegues o crestas que se proyectan hacia adentro de
la mitocondria. Poseen muchas enzimas que toman parte en el ciclo
de la respiración, por lo tanto son importantes para producir energía.
 Neurofibrillas: Con microscopio óptico se observan numerosas fibrillas
que corren paralelas entre si a través del cuerpo celular hacia las
neuritas (tinción de plata). Con microscopio electrónico se ven como
haces de microfilamentos de aproximadamente 7 mm de diámetro.
Contienen actina y miosina y es probable que ayuden al transporte
celular.
 Microtúbulos: Se ven con microscopio electrónico y son similares a
aquellos observados en otro tipo de células. Tienen unos 20 a 30 nm
de diámetro y se hallan entremezclados con los microfilamentos. Se
extienden por todo el cuerpo celular y sus prolongaciones. Se cree
que la función de los microtúbulos es el transporte de sustancias
desde el cuerpo celular hacia los extremos dístales de las
prolongaciones celulares.
 Lisosomas: Son vesículas limitadas por una membrana de alrededor
de 8 nm de diámetro. Sirven a la célula actuando como limpiadores
intracelulares y contienen enzimas hidrolíticas.
 Centríolos: Son pequeñas estructuras pares que se hallan en las
células inmaduras en proceso de división. También se hallan
centríolos en las células maduras, en las cuáles se cree que
intervienen en el mantenimiento de los microtúbulos.
 Lipofusina: Se presenta como gránulos pardo amarillentos dentro del
citoplasma. Se estima que se forman como resultado de la actividad
lisosomal y representan un subproducto metabólico. Se acumula con
la edad.
 Melanina: Los gránulos de melanina se encuentran en el citoplasma
de las células en ciertas partes del encéfalo, como por ejemplo la
sustancia negra del encéfalo. Su presencia está relacionada con la
capacidad para sintetizar catecolaminas por parte de aquellas
neuronas cuyo neurotransmisor es la dopamina.
Clasificación Morfológica de las neuronas
BIPOLARES
• Con dos prolongaciones a partir del
soma, una dendrita y un axón
• Se localizan en ganglios vestibulares y
cocleares, y en el epitelio olfatorio
UNIPOLARES (seudounipolares)
MULTIPOLARES

Clasificación Funcional
SENSORIALES (AFERENTES)

• Reciben impulsos sensoriales y los conducen al SNC para su


procesamiento
MOTORAS (EFERENTES)
• Surgen en SNC y conducen impulsos a musculos, glandulas y
otras neuronas
INTERNEURONAS
• Localizadas totalmente en SNC, actuan como interconectores.
Establecen redes neuronales entre las sensoriales, las motoras y
otras interneuronas.

ORIGEN EMBRIONARIO DEL SISTEMA NERVIOSO

Los procesos de inducción, migración y diferenciación celular que se


llevan a cabo durante la formación del tejido nervioso generan un
sistema altamente organizado capaz de proporcionar al nuevo ser una
eficiente red de comunicación con gran respuesta adaptativa y con la
peculiaridad de responder autónomamente a estímulos físicos y
químicos originados tanto en el medio interno como en el externo. De
esta manera, el sistema nervioso central (SNC) permite integrar y
controlar las diferentes funciones del organismo. Si se observa la
evolución de las especies, la centralización de la información es uno de
los principios básicos de la organización de los seres vivos, y es el SNC el
encargado de asumir tales funciones. Un conocimiento básico de la
embriología ayuda a comprender de mejor manera las intrincadas
interrelaciones de los distintos componentes del SNC.

El sistema nervioso central empieza a desarrollarse durante la tercera


semana posterior a la fecundación del ovulo, lo primero en aparecer es
una placa de origen ectodérmico llamada placa neural.
Desarrollo del Tubo Neural

El sistema nervioso comienza su desarrollo embriológico en la tercera


semana, 19 días de gestación (embrión de aproximadamente 1,5 mm.
de longitud) . Este proceso llamado neurulación ocurre en la región
dorsal del embrión, entre la membrana bucofaríngea y el nodo
primitivo. Al comenzar la tercera semana, la notocorda en desarrollo y
el mesodermo adyacente estimulan al ectodermo que está encima de
ellos. Este complejo proceso de inducción notocordal hace que el
ectodermo se engruese, formándose así la placa neural. Actualmente,
se han identificado varios tipos de moléculas que actúan como señales
en los procesos inductivos y de diferenciación del SNC, Así por ejemplo
la interacción entre BMP (bone morphogenetic protein), cordina y
ácido retinoico, determinan la inducción y diferenciación de
ectoderma que origina piel, tubo neural cefálico o tubo neural caudal.
La inducción neural, trae como consecuencia una sobreproducción
inicial de células nerviosas. Se ha demostrado que a tal período
prosigue otro de muerte celular programada o apoptosis, lo que
determina la cantidad total de neuronas que el individuo tendrá
durante su vida.
Una vez completado el proceso inductivo, la placa neural se alarga desde
su sitio de origen craneal al nodo primitivo hasta la membrana
bucofaríngea. Alrededor del 19º día de desarrollo los bordes laterales de la
placa neural se elevan y forman los pliegues neurales; la porción media
entre los pliegues neurales forma el Surco neural. Hacia el final de la
tercera semana los pliegues neurales se elevan aún más, se acercan y se
fusionan irregularmente en la línea media formando el tubo neural. La
fusión empieza en la región cervical y sigue hacia cefálico y caudal.
Mientras ocurre la fusión, los bordes libres del ectodermo superficial se
separan del tubo neural. Posteriormente, ambos bordes se unen y forman
una capa continua en la superficie que dará origen al epitelio epidérmico.

Debido a que la fusión de los pliegues neurales no ocurre


simultáneamente a lo largo de ellos, la luz del tubo neural comunica
con la cavidad amniótica en sus extremos cefálico y caudal a través de
los neuroporos craneal (anterior) y caudal (posterior). El cierre del
neuroporo craneal se realiza el día 25 (período 18-20 somitos). Por su
parte el neuroporo caudal se cierra el día 27 (período de 25 somitos). El
cierre de ambos neuroporos coincide con el establecimiento de la
circulación sanguínea hacia el tubo neural.

Mientras los pliegues neurales se acercan a la línea media para


fusionarse, un grupo de células neuroectodérmicas ubicadas en la
cresta de cada pliegue (cresta neural ) pierden su afinidad epitelial con
las células de la vecindad. La migración activa de las células de la
cresta neural desde las crestas hacia el mesodermo adyacente
transforma el neuroectodermo en una masa aplanada e irregular que
rodea al tubo neural. Este grupo celular dará origen a un conjunto
heterogéneo de tejidos de gran importancia: Ganglios de la raíz
posterior, ganglios autónomos, ganglios de los pares craneales V, VII, IX,
X, células de Schwann, las leptomeninges (aracnoides y piamadre),
melanocitos, médula suprarrenal, odontoblastos, etc. En consecuencia,
el tubo neural será el que se convertirá por diferenciación en encéfalo y
médula espinal, mientras que las crestas neurales formarán la mayor
parte del sistema nervioso periférico. Luego del cierre completo del
tubo neural, comienza el desarrollo del mismo. El extremo cefálico del
tubo neural se dilata y origina 3 vesículas encefálicas primarias:
-Prosencéfalo (cerebro anterior)
-Mesencéfalo (cerebro medio )
-Rombencéfalo (cerebro posterior)
El tercio caudal del tubo se alarga y su diámetro se acorta para formar la
médula espinal. El neurocele se estrecha y pasa a formar el canal central
(del epéndimo) de la médula espinal que se continúa con la cavidad de
las vesículas encefálicas. La cavidad del rombencéfalo es el Cuarto
ventrículo, la del diencéfalo el Tercer ventrículo y la de los hemisferios
cerebrales los Ventrículos laterales. Tercer y cuarto ventrículos se
comunican por la luz del mesencéfalo que se torna estrecha y origina el
Acueducto cerebral (de Silvio). Los ventrículos laterales se comunican con
el Tercer ventrículo por los agujeros interventriculares (de Monro ).
Médula Espinal

Luego de ocurridos los sucesos de neurulación, el tubo neural forma una


estructura totalmente separada de la cavidad amniótica cuya pared está
constituida por células cilíndricas que forman un epitelio
pseudoestratificado y que están conectadas por complejos de unión
Durante este período se distingue la capa neuroepitelial que está en íntimo
contacto con la cavidad del tubo neural. Esta capa da origen a todas las
neuronas y neuroglias (astrocitos y oligodendrocitos) de la médula espinal.
Durante la quinta semana, las células neuroepiteliales proliferan y
producen un aumento en longitud y diámetro del tubo neural. Además, es
posible observar cambios en la conformación de los diferentes elementos
intracelulares, como por ejemplo, modificaciones en la morfología del
núcleo o la presencia de un mayor número de ribosomas asociados al
retículo endoplásmico consecuencia del considerable aumento en la
actividad neurosecretora. Estas células denominadas Neuroblastos (células
nerviosas primitivas) migran a la periferia y se organizan en una nueva
estructura: la Capa del manto, la que posteriormente constituirá la
sustancia gris de la médula espinal.

Las prolongaciones axonales de las neuronas de la capa del manto migran


a la periferia y forman los fascículos nerviosos de la Capa marginal. Al
mielinizarse estas fibras nerviosas, la capa toma un aspecto blanquecino y
constituye la sustancia blanca de la médula espinal.

Gran parte de los glioblastos (células de sostén primitivas) deriva del


neuroepitelio una vez que este ya ha dado origen a los neuroblastos. Los
glioblastos emigran desde la capa neuroepitelial hacia las capas marginal
y del manto para allí diferenciarse en Astrocitos tipo I (aquellos que envían
prolongaciones a la piamadre y a los vasos sanguíneos encefálicos para
formar la barrera hematoencefálica) y tipo II (que toman contacto con los
nodos de Ranvier de los nervios mielínicos del SNC y suelen encapsular las
sinapsis químicas). Los astrocitos tienen importantes funciones en el SNC: 1)
Forman la barrera hematoencefálica que protege al SNC de cambios
bruscos en la concentración de iones del líquido extracelular y de otras
moléculas que pudiesen interferir en la función neural. 2) Eliminan K+,
glutamato y ácido, gama-aminobutírico del espacio extracelular. 3) Son
importantes almacenes de glucógeno; realizan glucogenólisis al ser
inducidos por norepinefrina o péptido intestinal vasoactivo (VIP).

a los axones de los tractos del SNC. Los oligodendrocitos satélites son
aquellos que rodean los cuerpos celulares y regulan el ambiente
bioquímico que rodea la neurona. Alrededor del cuarto mes aparecen las
células de microglia. Derivan del mesénquima circundante y se
caracterizan por ser pequeñas y muy fagocíticas. Llegan a la sustancia
blanca y gris del SNC luego de la aparición de los vasos sanguíneos.

Cuando las células neuroepiteliales dejan de producir neuroblastos y


glioblastos, se diferencian las células ependimarias que revisten el canal
central de la médula espinal.

Desarrollo de las placas basales, alares, del techo y del piso: La


multiplicación de los neuroblastos de la capa del manto a cada lado del
tubo neural origina unos engrosamientos en la región ventral y dorsal: 1)Las
placas basales.(engrosamiento ventral) incluyen los somas de las
motoneuronas que posteriormente constituirán las astas anteriores de la
médula espinal. 2)Las placas alares. (engrosamientos dorsales)
corresponden a regiones sensitivas que se diferenciarán en las astas
posteriores de la médula espinal. El crecimiento de las placas alares origina
el tabique medio posterior. Al sobresalir ventralmente las placas basales se
forma el tabique medio anterior, mientras tanto se desarrolla la fisura
mediana anterior en la superficie anterior de la médula espinal. El surco
limitante delimita ambas placas, y de esta manera también separa las
regiones motoras de las sensitivas. Las regiones dorsal (placa del techo) y
ventral (placa del piso) en la línea media del tubo neural no poseen
neuroblastos , siendo muy importantes en el proceso de diferenciación de
las neuronas de las placas alares y basales.

Entre las astas ventral y dorsal de los segmentos torácicos hasta el segundo
o tercero lumbar de la médula espinal se acumulan neuronas que
formarán el asta lateral o intermedia, que contiene neuronas del Sistema
nervioso autónomo.

Las meninges espinales y las modificaciones durante la formación de la


médula espinal: El tejido mesenquimático (esclerotoma) que rodea el tubo
neural se condensa para formar la meninge primitiva, que originará la
duramadre. A esta meninge primitiva se le agregan células provenientes
de las crestas neurales para formar la capa interna denomianda
leptomeninges (aracnoides y piamadre). Al unirse los espacios llenos de
líquidos que existen entre las leptomeninges, se forma el espacio
subaracnoídeo. El origen de la aracnoides y piamadre a partir de una
capa única explica la existencia de las trabéculas aracnoideas que existen
entre ellas. Como resultado del desarrollo del aparato locomotor durante
el cuarto mes, además de la adición de neuronas motoras y sensitivas, la
médula espinal se ensancha en las regiones cervical y lumbar formando los
engrosamientos cervical y lumbar.

Al tercer mes, la médula espinal se extiende a lo largo del canal vertebral


del embrión y los nervios espinales atraviesan los agujeros intervertebrales a
nivel de su origen. Poco después, la columna vertebral y la duramadre
crecen más rápido, longitudinalmente que el tubo neural ocasionando
que el extremo terminal de la médula se desplace a niveles más altos. A los
seis meses de vida intrauterina, el cono medular alcanza la primera
vértebra sacra, y ya en el neonato su extremo caudal está a nivel de L3.
Debido a este crecimiento desproporcionado, los nervios raquídeos tienen
una dirección oblicua desde su segmento de origen en la médula espinal
hasta el nivel correspondiente de la columna a nivel coccígeo.

En el adulto, la médula espinal termina a nivel L2 (esta es una medida


promedio, ya que el extremo medular puede estar tan alto como T12 o tan
bajo como borde superior de L3). Debajo, una prolongación filiforme de la
piamadre forma el filum terminale que se adosa al periostio de la primera
vértebra coccígea y señala la línea de regresión de la médula espinal
embrionaria. Las fibras nerviosas bajo el extremo inferior de la médula
espinal forman la Cauda equina, cuya denominación se debe a su
semejanza a la cola de caballo. Cuando se extrae LCR por una punción
lumbar, la aguja se introduce en un nivel lumbar bajo respetando así el
extremo terminal de la médula espinal.

Encéfalo

Las estructuras encefálicas aparecen luego de ocurridos cuatro procesos


básicos: (a) proliferación neuronal (b) migración (c) período de
organización, el cual se establece la diferenciación celular. Este se
desarrolla hasta el nacimiento una vez establecido el patrón de
funcionamiento de las diferentes regiones encefálicas, y (d) mielinización.

neural craneal al cuarto par de somitos se dilata considerablemente y


aparecen las tres vesículas encefálicas primarias a partir de las cuales se
origina el encéfalo: Prosencéfalo (cerebro anterior), Mesencéfalo (cerebro
medio) y Rombencéfalo (cerebro posterior). Simultáneamente se están
formando dos plegamientos: el pliegue cervical, en la unión del
rombencéfalo y médula espinal y el pliegue cefálico en el mesencéfalo. El
mesencéfalo limita con el rombencéfalo por un surco: el istmo del
rombencéfalo.

Durante la quinta semana el prosencéfalo y rombencéfalo se dividen en


dos vesículas secundarias: El prosencéfalo origina (1) el Telencéfalo que
consta de una parte media y dos evaginaciones laterales hemisferios
cerebrales primitivos) (2) el Diencéfalo, que presenta la evaginación de las
vesículas ópticas. El rombencéfalo formará finalmente (1) el Metencéfalo,
que constituirá la protuberancia y el cerebelo (2) el Mielencéfalo, el futuro
bulbo raquídeo. El límite metencéfalo-mielencéfalo queda definido por el
pliegue protuberancial. Este pliegue se origina debido al crecimiento
desigual del rombencéfalo dando lugar a un adelgazamiento de su techo.

Al principio, el encéfalo tiene su estructura básica muy similar a la médula


espinal, sin embargo, debido a la aparición de los pliegues y surcos
encefálicos se producen variaciones considerables en la disposición de los
diferentes elementos. En general, las placas alares y basales del
rombencéfalo y mesencéfalo se encuentran bien definidas, en cambio, en
el prosencéfalo las placas alares están acentuadas y las basales en plena
regresión.
ROMBENCEFALO
Está formado por: (1) Mielencéfalo (2) Metencéfalo
MIELENCEFALO Es la vesícula encefálica más caudal y se diferencia en el
bulbo raquídeo (médula oblonga). Sus paredes laterales sufren cierta
eversión tal como se abren las conchas de una almeja, sin embargo, su
estructura general es bastante parecida a la médula espinal. Los
neuroblastos de las placas alares migran a la capa marginal en dirección
ventrolateral para formar los núcleos olivares.

Ventralmente, las fibras corticospinales que descienden desde la corteza


cerebral (giro precentral) forman las denominadas pirámides. El pliegue
protuberancial hace que las paredes bulbares laterales se desplacen
lateralmente y que la placa del techo se extienda y adelgace
considerablemente. Como consecuencia, la cavidad del mielencéfalo
(futuro IV ventrículo) toma forma romboide y los núcleos motores pasan a
ubicarse medialmente a los núcleos sensitivos

Las placas alares y basales están bien definidas. La placa basal contiene 3
grupos de núcleos motores: (1) Eferente somático o medial (2) Eferente
visceral especial o intermedio (3) Eferente visceral general o lateral. Estos
tres grupos originan los núcleos motores de los nervios craneales IX, X, XI y
XII que se ubican en el piso del cuarto ventrículo medial al surco limitante.
La placa alar contiene tres grupos nucleares sensitivos: (1) Aferente
somático o lateral (2) Aferente visceral especial o intermedio (3) Aferente
visceral general o medial. Estos grupos neuronales forman los núcleos
sensitivos de los nervios craneales V, VII, VIII, IX y X y los núcleos gracilis y
cuneatus.
METENCEFALO
Incluye la región ubicada entre el pliegue protuberancial y el istmo del
rombencéfalo. La porción metencefálica ventral más una contribución
celular de la región alar del mielencéfalo originan el Puente
(protuberancia), mientras la región posterior conforma el cerebelo. El
puente forma una importante vía nerviosa entre la médula espinal y las
cortezas cerebral y cerebelosas. Por otra parte, el cerebelo es un centro de
coordinación de postura y movimientos. La cavidad del metencéfalo
forma la parte superior del futuro IV ventrículo.

La formación del pliegue protuberancial produce el distanciamiento de las


paredes laterales del puente y la extensión de la sustancia gris del piso del
IV ventrículo. Los neuroblastos de las placas basales constituyen tres
columnas de núcleos motores: (1) Eferente somático medial (2) Eferente
visceral especial (3) Eferente visceral general. Ellos originan los núcleos
motores de los pares V, VI y VII. La capa marginal de las placas basales se
expande y sirve de puente a fibras que conectan la médula espinal con las
cortezas cerebral y cerebelosas; esto explica el nombre de "puente".

Las placas alares poseen 2 grupos sensitivos: (1) Aferente somático lateral
(2) Aferente visceral general. Ellos constituyen el núcleo sensitivo principal
del n.trigémino, el núcleo espinal del V par y los núcleos vestibulares del VIII
par. Los núcleos pontinos se originan en las placas alares del metencéfalo.

Cerebelo: Cada placa alar se curva en su región dorsolateral en dirección


medial para formar los labios rómbicos. Estos labios aumentan de tamaño,
se proyectan caudalmente sobre la placa del techo del IV ventrículo y se
fusionan en la línea media. En la zona inferior del metencéfalo están muy
separados. La compresión cefalocaudal de los labios producto de la
exageración del pliegue protuberancial forma la placa cerebelosa que se
superpone al puente y al bulbo raquídeo. En el embrión de 12 semanas se
observa una parte media (vermis) y dos laterales (hemisferios). Inicialmente,
la placa cerebelosa consta de las capas neuroepitelial, del manto y
marginal, pero luego algunas células neuroepiteliales emigran a la
superficie cerebelosa a formar la capa granulosa externa que consta de
una zona proliferativa superficial. Al sexto mes, la capa granulosa externa
ya ha producido células granulosas, células en cesto y células estrelladas
que contactan con células de Purkinje aún indiferenciadas. La corteza
cerebelosa alcanza sus dimensiones definitivas después del nacimiento. Los
núcleos dentados y dentados accesorios (emboliforme, globoso y fastigio)
se presencian antes del nacimiento. Posteriormente, los axones que salen
de estos núcleos cruzan el mesencéfalo para llegar al prosencéfalo y
constituyen el pedúnculo cerebeloso superior. El crecimiento axonal de las
fibras corticopontinas y pontocerebelosas que conectan las cortezas
cerebral y cerebelosa conlleva la formación del pedúnculo cerebeloso
medio. Axones sensitivos provenientes de la médula espinal, núcleos
olivares y vestibulares forman el pedúnculo cerebeloso inferior.
MESENCEFALO

El mesencéfalo constituye la vesícula encefálica inmediatamente cefálica


al rombencéfalo que sufre menos modificaciones durante el desarrollo del
SNC. La cavidad de la vesícula mesencefálica se reduce
considerablemente para formar un conducto que unirá los futuros III y IV
ventrículos: el acueducto cerebral (de Silvio).

A cada lado, las placas basales y alares están separadas por el surco
limitante. Cada placa basal tiene 2 grupos de motoneuronas: (1) Eferente
somático o medial: origina los nervios craneales III y IV (2) Eferente visceral
general: forma el núcleo de Edinger-Westphal. La capa marginal de las
placas basales se expande y origina el pie de los pedúnculos cerebrales
por donde descienden fibras desde la corteza cerebral a centros motores
inferiores del puente y médula espinal (tractos corticopontinos,
corticobulbares y corticoespinales). Las placas alares y del techo forman el
tectum. Neuroblastos de las placas alares migran a la capa marginal del
tectum y forman agregados estratificados de neuronas sensitivas
separadas por un surco transverso: los colículos superiores (anteriores) y los
colículos inferiores (posteriores). Estos últimos son centros de relevo para
reflejos auditivos, mientras que los colículos anteriores forman centros de
correlación y de reflejos para estímulos visuales.

Una banda de sustancia gris adyacente al pedúnculo cerebral forma la


sustancia negra (locus niger). Se tienen muchas dudas si este elemento se
origina a partir de células de las placas basales o de células de las placas
alares que migran ventralmente.
PROSENCEFALO

Antes del cierre del neuroporo craneal, aparecen dos divertículos laterales
a cada lado del diencéfalo: las vesículas ópticas (primordios de la retina y
nervios ópticos). Posteriormente, aparecen las vesículas telencefálicas que
formarán los hemisferios cerebrales y sus cavidades: los ventrículos laterales.
Las placas del piso y del techo son delgadas; por otra parte, las paredes
laterales son gruesas como en la médula espinal.
DIENCEFALO
Se desarrolla a partir de la porción media del prosencéfalo y consta de
placas del techo y alares pero carece de placas basales y del piso. El
mesénquima vascularizado de los ependimocitos de la placa del techo
origina el plexo coroideo del tercer ventrículo. La porción caudal de la
placa del techo forma un divertículo ubicado anteriormente al
mesencéfalo que hacia la séptima semana ya forma un órgano macizo
con forma de cono: el cuerpo pineal (epífisis). El calcio acumulado en la
epífisis durante la adultez la hace un importante punto de referencia en
imagenología. Tiene importantes funciones sexuales (secreción de
melatonina que estimula la secreción de gonadotropinas) y es posible que
forme un nexus entre los ciclos de luz solar y endocrinos (ritmos circadianos)
y de la conducta.
En las paredes laterales del Tercer ventrículo (placas alares del diencéfalo)
aparecen tres prominencias que posteriormente formarán el hipotálamo
tálamo y epitálamo. El surco hipotalámico divide las placas alares en una
porción ventral (hipotálamo) y una dorsal (tálamo). Este surco no es la
continuación del surco limitante, como se creia antiguamente, y no divide
porciones sensitivas y motoras.

La notable proliferación ocurrida en el tálamo hace que éste protruya


hacia el III ventrículo de modo que las regiones talámicas derecha e
izquierda se fusionan en la línea media formando la adhesión intertalámica
(presente en un 70 a 80% de los cerebros). El hipotálamo (porción inferior
de la placa alar) se diferencia en varios grupos nucleares que constituyen
centros reguladores de variadas funciones del organismo (temperatura
corporal, emociones, hambre, saciedad, sueño, etc.). Uno de estos
núcleos, los cuerpos mamilares, sobresalen en la superficie ventral del
hipotálamo a cada lado de la línea media.

Desarrollo de la Hipófisis (glándula pituitaria): La hipófisis se origina


totalmente del ectodermo (cuarta semana). Se desarrolla a partir de dos
porciones: (1) Una evaginación diencefálica hacia caudal (Infundíbulo).
(2) Una evaginación ectodérmica del estomodeo (cavidad bucal
primitiva) anterior a la membrana bucofaríngea (Bolsa de Rathke). Este
doble origen explica la diferencia de tejidos hipofisiarios. En la tercera
semana, la bolsa de Rathke crece dorsalmente hacia el infundíbulo. Al final
del segundo mes, pierde contacto con la cavidad bucal y se contacta
íntimamente con el infundíbulo. Posteriormente, la multiplicación de las
células de la pared anterior de la bolsa de Rathke originan el lóbulo
anterior de la hipófisis (Adenohipófisis). La adenohipófisis consta de tres
partes: (1) Una prolongación de este lóbulo que crece rodeando el tallo
del infundíbulo: la pars tuberalis. 2) la pars distalis que constituye el lóbulo
anterior propiamente tal. (3) la pared posterior de la bolsa de Rathke no
prolifera y forma la pars intermedia, de poca importancia en el humano.

La evaginación diencefálica origina la eminencia media, el tallo


infundibular y la pars nerviosa que en conjunto se les denomina
Neurohipófisis (lóbulo posterior). El extremo distal del neuroepitelio del
infundíbulo experimenta una proliferación que origina los pituicitos, las
células de sostén de la neurohipófisis.

La proliferación de la pared anterior de la bolsa de Rathke reduce su luz


hasta formar una pequeña hendidura (ella es un posible sitio de quistes, por
ello, es importante conocerla).
TELENCEFALO

Es la vesícula encefálica más rostral. Consta en 2 evaginaciones laterales


(hemisferios cerebrales) y una porción media (lámina terminal). Sus
cavidades (ventrículos laterales) comunican con el III ventrículo a través de
los agujeros interventriculares.

Los Hemisferios Cerebrales: Entre la 5º y12º semana, las evaginaciones


bilaterales de la pared lateral del telencéfalo originan los hemisferios
cerebrales. La expansión anterior forma los lóbulos frontales mientras la
superolateral origina los lóbulos parietales; finalmente, la expansión
posteroinferior forma los lóbulos temporales y occipitales. El proceso
continúa con un aplanamiento medial de los hemisferios cerebrales.

El mesénquima de la fisura longitudinal del cerebro origina la hoz del


cerebro (falx cerebri). La pared medial de los hemisferios, donde se unen al
techo diencefálico, es delgada y sólo consta de una capa de células
ependimarias cubierta de mesénquima vascularizado: el plexo coroideo
del tercer ventrículo.

Durante la 6º semana, la parte basal de los hemisferios aumenta de


tamaño y sobresale hacia el ventrículo lateral dando origen al Cuerpo
estriado. Esta región de la pared hemisférica se expande en dirección
posterior y se divide en 2 partes: (1) núcleo caudado, dorsomedialmente
(2) núcleo lenticular, ventrolateralmente. La fusión de la pared medial del
hemisferio y la pared lateral del diencéfalo permite el contacto entre el
núcleo caudado y tálamo. Tractos ascendentes y descendentes de la
corteza cerebral pasan entre tálamo y núcleo caudado medialmente y
núcleo lentiforme lateralmente formando la cápsula interna. La pared del
prosencéfalo se engrosa formando una estructura longitudinal que
protruye al ventrículo lateral: el hipocampo.

La zona suprayacente al núcleo lentiforme crece lentamente y queda


ocultada entre los lóbulos temporal y occipital (lóbulo de la ínsula). Al final
de la vida fetal, la superficie hemisférica crece tan rápido que se forman
giros (circunvoluciones) separados por surcos y cisuras. Estos surcos y giros
permiten un aumento considerable de la superficie cerebral y, por ende,
un aumento de la superficie cortical sin sobrepasar el volumen del cráneo.

La Corteza Cerebral: La corteza cerebral se desarrolla a partir del palio,


que consta de tres regiones: (1) Paleopalio, (2)Arquipalio, (3) Neopalio.
Estas originan la paleocorteza, la arquicorteza y la neocorteza
respectivamente. En cualquier region de la corteza, las paredes de los
hemisferios cerebrales presentan tres zonas: (1) ventricular (2) intermedia (3)
marginal, más una que se agrega ulteriormente (zona subventricular). Las
neuronas que migran desde la zona intermedia (región subependimaria)
hacia la zona marginal originarán la corteza cerebral. De esta manera, la
sustancia gris queda ubicada superficialmente y los axones o fibras
nerviosas quedan ubicadas en la profundidad del cerebro. La primera
masa de neuroblastos que emigra en el neopalio se dirige a una zona
inmediatamente debajo de la piamadre para diferenciarse en neuronas
maduras. Las siguientes oleadas de neuroblastos van ubicándose entre la
piamadre y la capa anteriormente formada. En conclusión, los primeros
neuroblastos formados quedan en la porción profunda de la corteza
mientras que los formados posteriormente originan las capas superficiales
de la corteza. La diferenciación neuronal en las diferentes capas da un
aspecto estratificado a la corteza cerebral y origina zonas con una
composición celular específica. Por ejemplo, las células piramidales
abundan en la corteza motora y las células granulosas se encuentran en
gran cantidad en las regiones sensitivas.

Comisuras: Las comisuras cerebrales son un grupo de axones que


atraviesan la línea media a diferentes niveles y conectan los hemisferios
cerebrales derecho e izquierdo. La lámina terminal (extremo cefálico del
tubo neural) se extiende desde la placa del techo del diencéfalo hasta el
quiasma óptico.

La estructura comisural más importante que abarca gran parte de las fibras
del sistema comisural de la corteza cerebral es el cuerpo calloso. Se
desarrolla durante la 10º semana como un pequeño fascículo en la lámina
terminal y comunica regiones no olfatorias de ambos hemisferios. La
expansión del neopalio hace que el cuerpo calloso crezca hacia anterior y
luego posteriormente rebosando la lámina terminal y formando un arco
sobre el techo diencefálico. Todo este proceso induce un estiramiento de
la lámina terminal entre el cuerpo calloso y el fórnix que origina el septum
pellucidum.

La comisura anterior constituye la primera comisura en formarse y conecta


la corteza temporal y el bulbo olfatorio de un lado y otro. Se ubica
superiormente a la lámina terminal. El fórnix nace en el hipocampo,
converge en la lámina terminal y prosigue hacia posterior hasta llegar a los
cuerpos mamilares y al hipotálamo. La comisura posterior, la comisura
habenular y el quiasma óptico también son estructuras que permiten la
pasada de axones hacia el lado opuesto del cerebro.

Proceso de Mielinización: Comienza durante el periodo fetal tardío y


generalmente continúa durante los dos primeros años de vida postparto.
La mielinización de nervios periféricos la realizan las células de Schwann
que migran a la periferia y se disponen alrededor de los axones formando
la Vaina de Schwann (antiguamente denominada neurilema). Durante el
4º mes, muchas fibras nerviosas toman aspecto blanquecino por el
depósito de mielina que se forma por el repetido enrollamiento de la
membrana de la célula de Schwann alrededor del axón.
La mielinización de las fibras de la médula espinal comienza en el cuarto
mes de vida prenatal desde la región cervical hacia caudal, aunque
algunas fibras nerviosas que vienen desde centros cerebrales superiores
hacia la médula no se mielinizan sino que hasta periodos de vida
postnatal. La vaina de mielina que rodea las fibras nerviosas de la médula
espinal tiene su origen en las células de oligodendroglia. Las fibras de las
raíces posteriores se mielinizan después que lo hacen las raíces anteriores,
por tanto son las fibras funcionalmente motoras las que realizan el proceso
de mielinización en primer lugar.

En el cerebro, el proceso mielinizante comienza en la sexta semana de


vida fetal en las fibras del cuerpo estriado. Las fibras sensitivas que suben al
encéfalo desde la médula espinal son las segundas en mielinizarse. La
mielinización del encéfalo es tan lenta que al nacimiento sólo una
pequeña porción ha completado el proceso. Aquello se refleja en una
pobre capacidad motora del recién nacido, cuyas principales acciones
involucran en su mayoría reflejos. En el período postnatal, la mielinización se
vuelve sistemática y se realiza en diferentes regiones en tiempos
específicos. Por ejemplo, es sabido que las fibras del tracto piramidal se
mielinizan en la sexta semana de vida postnatal. Investigaciones recientes
muestran que algunas fibras encefálicas no se mielinizan sino hasta la
pubertad. Se cree que los tractos del sistema nervioso se mielinizan al
adquirir su capacidad funcional.

Plexos coroideos y Líquido Cefalorraquídeo (LCR): El epéndimo que se


encuentra en el techo del IV ventrículo está recubierto externamente por
la piamadre. En conjunto, estas estructuras forman la tela coroidea. La
proliferación de las células piales provoca una invaginación hacia el IV
ventrículo de la tela coroidea (plexo coroideo del IV ventrículo). Similar
fenómeno ocurre en el III ventrículo y en las fisuras coroídeas de los
ventrículos laterales.

La función de los plexos coroideos es la secreción del líquido


cefalorraquídeo (LCR), hacia el sistema ventricular. La absorción del LCR se
realiza hacia el sistema venoso a través de las vellosidades aracnoideas.
Estas vellosidades son protrusiones de la aracnoides hacia los senos
venosos de la duramadre, y consisten en una delgada capa de células
que deriva del endotelio de los senos venosos y del epitelio aracnoideo.
En neuroanatomía se dividen los nervios según su origen, en:
Branquiales:
- N. Trigémino o V par, inerva el primer arco branquial
- N. Facial o VII par, inerva el segundo arco branquial
- N. Glosofaríngeo o IX par, inerva el tercer arco branquial

- N. Vago o X par, inerva el 4º arco branquial, que se formó por fusión del 6º
y 5º
Somíticos:
- N. Hipogloso o XII par
- N. Oculomotor o III par
- N. Troclear o IV par
- N. Abducente o VI par

CELULAS DE TEJIDO NERVIOSO


Tejido nervioso

Es un conjunto de células especializadas presente en los órganos del


sistema nervioso. El tejido nervioso está formado por células nerviosas
denominadas neuronas y por células de la glía o neuroglias, que se
distribuyen como redes nerviosas por todo el organismo. Las neuronas
tienen la misión de transmitir los impulsos nerviosos a todas partes del
cuerpo. Las células de la glía son estructuras que cumplen funciones de
sostén, de nutrición y de defensa de las células nerviosas.

La función del tejido nervioso es captar los estímulos internos y externos y


transformarlos en impulsos nerviosos. Todas las modificaciones del medio
externo o interno y los estímulos sensoriales como la temperatura, la
presión, la luz, los sonidos y el gusto, entre otros, son detectados,
examinados y transmitidos por las células nerviosas. Por otra parte, el tejido
nervioso se encarga de coordinar las funciones motoras, glandulares,
viscerales y psíquicas del individuo.
NEURONAS

Son formaciones celulares muy especializadas que poseen la capacidad


para recibir estímulos externos e internos y conducir impulsos nerviosos. Un
estímulo es todo agente físico, químico o mecánico capaz de
desencadenar una reacción positiva o negativa en una célula o en un
organismo. Los estímulos son captados por receptores formados por células
sensoriales. Tras la recepción del estímulo se produce una respuesta a
través de células efectoras. Las neuronas establecen comunicación con
distintas células a una distancia variable, de manera rápida y precisa. Ese
contacto se establece mediante impulsos nerviosos con otras células
nerviosas, con células musculares o con estructuras glandulares. Las
neuronas se caracterizan por presentar prolongaciones de longitud
variable a partir del citoplasma. Las más cortas, llamadas dendritas, son
múltiples y se unen con otras neuronas. La dendrita es el lugar por donde
ingresa el estímulo nervioso a la neurona. La prolongación más larga se
denomina axón, sitio por donde los impulsos nerviosos salen de la neurona.
Por lo general, los axones son únicos. En el extremo final del axón se ubican
los terminales axónicos que se continúan con las dendritas de otras
neuronas o con algún órgano efector.

Neuronas unipolares

La dendrita y el axón se originan en un lugar común del cuerpo celular y se


separan tras un corto trayecto. Las neuronas unipolares se sitúan en las
raíces posteriores de los ganglios espinales (células en T).
Neuronas bipolares

Son de cuerpo celular alargado, con dos prolongaciones bastante


parecidas. Se encuentran en los ganglios vestibular y coclear.
Neuronas multipolares

Poseen muchas dendritas y un largo axón. Las neuronas multipolares


forman la mayor parte del encéfalo, de la médula espinal y de los nervios
periféricos. En el esquema siguiente pueden verse distintas formas de
neuronas. La flecha azul indica la dirección del impulso nervioso.
Las neuronas que poseen axones muy largos, con varios centímetros de
longitud, se denominan neuronas de Golgi tipo I. Son ejemplos las células
piramidales de la corteza cerebral y las neuronas motoras de la médula
espinal, con extensos trayectos de fibras nerviosas. Las neuronas de Golgi
tipo II tienen axones cortos y son de forma estrellada. Son mucho más
abundantes que las anteriores y se ubican en la corteza cerebral y en la
corteza cerebelosa.

El núcleo de las neuronas tiene ubicación central y en general es bastante


visible al microscopio óptico. Presenta gránulos de cromatina dispersos en
su interior. Las mitocondrias están presentes no solo en el cuerpo de la
neurona sino también en las dendritas y en el axón. Tienen formas
alargadas y esféricas. Dentro del citoplasma se encuentra la sustancia de
Nissl, compuesta por pilas de cisternas del retículo endoplasmático rugoso
con abundantes ribosomas adheridos y dispersos. Tiene por función la
síntesis de proteínas, que se distribuyen por todo el soma y sus
prolongaciones, reemplazando a las que se deterioran producto de la
actividad neuronal. El citoesqueleto de la neurona presenta microtúbulos
capaces de transportar en forma rápida las moléculas proteicas a través
de las prolongaciones neurales.

Las dendritas son prolongaciones del cuerpo o soma neuronal, que tienen
numerosas mitocondrias, retículo endoplásmico agranular o liso y sustancia
de Nissl. El axón también es una proyección citoplasmática con
abundantes mitocondrias y microfilamentos, pero poca sustancia de Nissl.
Por la función:

Las neuronas se clasifican en sensoriales, motoras o interneuronas


basándose en sus funciones.

Las neuronas sensoriales son receptoras o conexiones de receptores que


conducen información al sistema nervioso central. las que transmiten
impulsos producidos por los receptores de los sentidos

Las neuronas motoras o efectoras conducen información desde el sistema


nervioso central hasta los efectores (las que transmiten los impulsos que
llevan las respuestas hacia los órganos encargados de realizarlas"
músculos, etc.)

Las interneuronas que unen a dos o a mas neuronas, generalmente, se


encuentran en el sistema nervioso central.
Los cuerpos celulares de las neuronas se agrupan generalmente en masas
llamadas ganglios. Esta constituida por los componentes usuales: un núcleo
un citoplasma que se extiende hasta las ramas mas exteriores y una
membrana celular que lo encierra todo. Envolviendo el axón exterior al
sistema nervioso se encuentra una vaina celular, el neurilema, compuesta
de celulosas de Schwann. La mielina es una envoltura espiralada de
materia grasa que recubre a los axones. La vaina de mielina proporciona
una clase especial de conducción nerviosa.

CÉLULAS GLIALES
Este tipo de células nerviosas, conocidas también con el nombre de
neuroglia o células gliales, tienen la importante función de dar sostén al
tejido nervioso, ya que no hay tejido conectivo, y de proteger y brindar
nutrientes a las neuronas. Están provistas de prolongaciones del citoplasma
que actúan fijando las neuronas a los capilares sanguíneos. Las células
gliales tienen la propiedad de no ser excitables. Son diez veces más
numerosas que las neuronas pero de menor tamaño, con lo cual ocupan
alrededor del 50% del volumen del tejido nervioso. Forman la sustancia de
sostén de los centros nerviosos y están compuestas por una fina red que
contiene células ramificadas. Además, se encargan de mantener el
aislamiento de los axones neuronales. Cabe señalar que las células gliales
se consideran de vital importancia para el desarrollo de las neuronas,
puesto que la ausencia de células de la glía en cultivos neuronales impide
su crecimiento.

Según sea la ubicación de las células de la glía en el sistema nervioso, se


las clasifica en dos grupos, glía central y glía periférica. La glía central
incluye la neuroglia presente en el sistema nervioso central, es decir, en el
cerebro, cerebelo, tronco encefálico y médula espinal. La glía periférica se
compone de la glía del sistema nervioso periférico (somático y autónomo):
nervios, ganglios nerviosos y terminaciones nerviosas.
Astrocitos

Son las células más numerosas de la glía, de forma estrellada y con muchas
prolongaciones citoplasmáticas que van en varias direcciones. Tienen
núcleos esféricos en la parte central de la célula. Los astrocitos se dividen
en dos grupos.
-Astrocitos tipo I

Se ubican en la sustancia gris del sistema nervioso central (encéfalo y


médula espinal). Sus prolongaciones, cortas y gruesas, se distribuyen entre
las fibras nerviosas (axones). Los astrocitos tipo I también se denominan
protoplasmáticos.
-Astrocitos tipo II

Tienen prolongaciones citoplasmáticas largas y delgadas que también se


mezclan entre las fibras nerviosas. Los astrocitos tipo II o fibrosos están en la
sustancia blanca del sistema nervioso central.

Algunas de las prolongaciones de ambos tipos de astrocitos se unen a


cuerpos neuronales, a los capilares sanguíneos y a fibras nerviosas. Los
astrocitos tienen función de sostén de las neuronas al entrelazarse entre
ellas y formar una red. Además controlan el pasaje de nutrientes entre los
capilares y la neurona y regulan la composición química del líquido
extracelular, formando así la barrera hematoencefálica protectora de la
función nerviosa. Por otra parte, los astrocitos evitan la diseminación de
algunos neurotransmisores y cumplen actividades fagocíticas.

Oligodendrocitos

0Son células más pequeñas que los astrocitos y con menor cantidad de
prolongaciones. Cada prolongación envuelve en forma de espiral a un
axón diferente, con lo cual cada célula rodea a varias fibras vecinas. Los
oligodendrocitos se ubican en la sustancia blanca a lo largo de las fibras
nerviosas, y en la sustancia gris rodeando a los cuerpos neuronales. La
principal función de los oligodendrocitos es la producción y mantenimiento
de la vaina de mielina de las fibras del sistema nervioso central. Participan
también en el sostén y unión de las células nerviosas.

Microglia

Son células muy pequeñas que emiten prolongaciones que se ramifican y


dan lugar a proyecciones parecidas a espinas. Se ubican tanto en la
sustancia gris como en la blanca. Se identifican del resto de las células
gliales por la forma alargada del núcleo. El citoplasma contiene
abundantes lisosomas. La microglia no tiene actividad en condiciones
normales, pero ante alteraciones del sistema nervioso central se dividen y
cumplen funciones fagocíticas. La principal misión de la microglia es la
eliminación de estructuras celulares anormales y de mielina alterada,
reemplazando así a los glóbulos blancos que no pueden llegar al lugar.

Células ependimarias

Son estructuras de epitelio simple, forma cilíndrica y con núcleos alargados.


Se encuentran revistiendo los cuatro ventrículos del encéfalo y el conducto
del epéndimo de la médula espinal. Las células ependimarias poseen cilios
hacia el lumen de las cavidades que contribuyen en la circulación de
líquido cefalorraquídeo. La base de las células se ramifica y dan
prolongaciones hacia el interior del tejido nervioso. En algunas zonas del
encéfalo, las células ependimarias se modifican y dan lugar al epitelio
secretor de los plexos coroideos, que participa en la formación de líquido
cefalorraquídeo.
Células de Schwann

Son células presentes en el sistema nervioso periférico que acompañan el


crecimiento de las neuronas. Tal como lo hacen los oligodendrocitos, las
células de Schwann envuelven a los axones con vainas de mielina, pero
una sola célula recubre un segmento del axón. Como fue señalado al
principio, la mielina actúa como un aislante sobre los axones, haciendo
que el impulso nervioso se transmita rápidamente al llegar a los nodos de
Ranvier.
Células satélites

También llamadas células capsulares, son pequeñas estructuras ubicadas


en los ganglios craneales, espinales y autónomos del sistema nervioso
periférico. Las células satélites tienen por función dar soporte, nutrición y
protección a las neuronas presentes en los ganglios mencionados.

DIVISION DEL SISTEMA NERVIOSO

El sistema nervioso es una red de tejidos altamente especializada, que


tiene como componente principal a las neuronas, células que se
encuentran conectadas entre sí de manera compleja y que tienen la
propiedad de conducir, usando señales electroquímicas, una gran
variedad de estímulos dentro del tejido nervioso y hacia la mayoría del
resto de tejidos, coordinando así múltiples funciones en el organismo.
Divisiones

Anatómicamente, el sistema nervioso humano se agrupa en distintos


órganos, los cuales conforman en realidad estaciones por donde pasan las
vías neurales. Así, con fines de estudio, se pueden agrupar estos órganos,
según su ubicación, en dos partes: sistema nervioso central y sistema
nervioso periférico.

SISTEMA NERVIOSO CENTRAL

Esta formado por el Encéfalo y la Médula espinal , se encuentra protegido


por tres membranas, las meninges. En su interior existe un sistema de
cavidades conocidas como ventrículos, por las cuales circula el líquido
cefalorraquídeo.

· El encéfalo es la parte del sistema nervioso central que está protegida por
el cráneo. Está formado por el cerebro, el cerebelo y el tronco del
encéfalo.
Cerebro: es la parte más voluminosa. Está dividido en dos hemisferios, uno
derecho y otro izquierdo, separados por la cisura interhemisférica y
comunicados mediante el Cuerpo Calloso. La superficie se denomina
corteza cerebral y está formada por replegamientos denominados
circunvoluciones constituidas de sustancia gris. Subyacente a la misma se
encuentra la sustancia blanca. En zonas profundas existen áreas de
sustancia gris conformando núcleos como el tálamo, el núcleo caudado o
el hipotálamo.

Cerebelo: Está en la parte inferior y posterior del encéfalo, alojado en la


fosa cerebral posterior junto al tronco del encéfalo.
Tronco del encéfalo: Compuesto por el mesencéfalo, la protuberancia
anular y el bulbo raquídeo. Conecta el cerebro con la médula espinal.
Medula espinal: es una prolongación del encéfalo, como si fuese un
cordón que se extiende por el interior de la columna vertebral. En ella la
substancia gris se encuentra en el interior y la blanca en el exterior.

La médula espinal es un órgano con forma de cordón, que se encuentra


en el interior de la columna vertebral, protegido por las vértebras y por las
tres membranas denominadas meninges. Mide 45 cm de longitud y se
extiende desde el agujero occipital del cráneo ocupando casi los 2/3
superiores del conducto raquídeo labrado en el espesor de la columna
vertebral.

Un corte de la médula tiene forma de «H» y en él se aprecian sus dos


partes: la sustancia gris, que forma la parte interna, y la sustancia blanca,
en la parte externa.
Morfológicamente, la médula espinal es similar en toda su extensión, a
cada lado de ella emergen troncos nerviosos llamados raíces espinales,
dorsales y ventrales, normalmente hay 31 pares de raíces espinales que se
denominan según su relación con las vértebras: 8 cervicales, 12 dorsales, 5
lumbares, 5 sacras y un coxígeo.

Las raíces abandonan el conducto raquídeo siguiendo los agujeros


intervertebrales, luego se reúnen y dan origen a una rama nerviosa dorsal y
otra ventral.

La médula espinal tiene dos funciones fundamentales: en primer lugar, es el


centro de muchos actos reflejos. Las neuronas sensitivas entran por las
raíces dorsales de la médula y hacen sinapsis dentro de la sustancia gris,
con interneuronas y neuronas motoras que salen por las raíces ventrales de
los nervios espinales.

En segundo lugar, la médula es la vía de comunicación entre el cuerpo y el


encéfalo, gracias a los cordones blancos que permiten el paso de vías
ascendentes sensitivas y vías descendentes motoras.

La mayoría de las vías ascendentes, antes de llegar a su destino, cruzan al


otro lado del cuerpo. Así, las sensaciones que provienen de los receptores
de un lado del cuerpo van a parar a la zona contraria del cerebro.
Las vías descendentes que provienen de distintas estructuras del encéfalo
implicadas en el control motor también cruzan al lado contrario. Es decir
que, en general, un lado del encéfalo recibe la información del lado
opuesto del cuerpo y controla sus movimientos y otras funciones.
Debemos recordar que tanto el encéfalo como la médula espinal están
rodeados y protegidos por membranas de tejido no nervioso, llamadas
meninges, éstas son de afuera hacia adentro: la duramadre, la aracnoides
y la piamadre.

Entre la aracnoides y la piamadre queda un espacio subaracnoídeo que


contiene un fluido, el líquido cefalorraquídeo (LCR).

Diencéfalo: Es la parte del cerebro situada entre el tronco del encéfalo y el


telencéfalo y está compuesto por diferentes partes anatómicas: hipófisis,
hipotálamo, subtálamo, tálamo y epitálamo.

Hipófisis: La hipófisis o glándula pituitaria es una glándula compleja que se


aloja en una oquedad ósea llamada silla turca del hueso esfenoides,
situada en la base del cráneo, en la fosa cerebral media, que conecta
con el hipotálamo a través del tallo pituitario o tallo hipofisario.

Tubérculos cuadrigéminos: Los tubérculos cuadrigéminos o colículos


cuadrigéminos están ubicados detrás del acueducto de Silvio y de los
pedúnculos cerebrales. Conocida también como Lámina cuadrigémina
esta estructura es la porción dorsal del techo del mesencéfalo. Está
compuesta por dos pares de protrusiones (salientes o extensiones naturales
de un órgano), los tubérculos cuadrigéminos superiores e inferiores.

Los tubérculos cuadrigéminos anteriores o superiores se denominan nates.


Los posteriores o inferiores se denominan testes. Los anteriores actúan
como centros para los reflejos visuales y los posteriores para los auditivos. En
su estructura presentan la sustancia gris central recubierto por la sustancia
blanca.

Bulbo raquídeo: Es el más bajo de los tres segmentos del tronco del
encéfalo. Es llamado también médula oblonga. Es la terminación de la
parte superior de la médula espinal. Actúa sobre movimientos involuntarios
del corazón, intervienen en el funcionamiento de las vías respiratorias, del
esófago, intestino delgado, páncreas, hígado, participa en los mecanismos
del sueño y la vigilia, detecta los niveles de oxígeno y bióxido de carbono.
Una lesión puede producir un paro respiratorio.
SISTEMA NERVIOSO PERIFERICO

Está formado por los nervios, craneales y espinales, que emergen del
sistema nervioso central y que recorren todo el cuerpo, conteniendo
axones de vías neurales con distintas funciones y por los ganglios
periféricos, que se encuentran en el trayecto de los nervios y que
contienen cuerpos neuronales, los únicos fuera del sistema nervioso central.

El sistema nervioso periférico está constituido por el conjunto de nervios y


ganglios nerviosos. Se llaman nervios los haces de fibras nerviosas que se
encuentran fuera del neuroeje; ganglios, unas agrupaciones de celulas
nerviosas intercaladas a lo largo del recorrido de los nervios o en sus raíces .
Aunque también es periférico, el sistema nervioso simpático (también
denominado vegetativo o autónomo), se considera como una entidad
nerviosa diferente que transmite sólo impulsos relacionados con las
funciones viscerales que tienen lugar automáticamente, sin que influya la
voluntad del sujeto

Sistema nervioso somático


El sistema nervioso somático está compuesto por:

· Los nervios craneales, son 12 pares que envían información sensorial


procedente del cuello y la cabeza hacia el sistema nervioso central.
Reciben órdenes motoras para el control de la musculatura esquelética del
cuello y la cabeza.

Algunos de ellos están involucrados en los sistemas sensoriales del encéfalo,


como los nervios olfatorios, ópticos y auditivos.

Otros son exclusivamente vías motoras del encéfalo, como los nervios que
dan movimiento al ojo (oculomotores) y los faciales.
Por último están aquellos que tienen funciones mixtas, sensoriales y
motoras. El nervio trigémino, por ejemplo, proporciona sensibilidad facial y
controla los movimientos de masticación.

Todos estos nervios pasan a través de pequeñas aberturas en el cráneo,


para penetrar o abandonar el encéfalo.

El nervio vago es un nervio craneal que se extiende lejos de la cabeza. Va


al corazón, el tubo digestivo y demás vísceras. Participa en la acción del
sistema nervioso autónomo parasimpático.

· Los nervios espinales son 31 pares y se encargan de enviar información


sensorial (tacto, dolor y temperatura) del tronco y las extremidades y de la
posición y el estado de la musculatura y las articulaciones del tronco y las
extremidades hacia el sistema nervioso central y, desde el mismo, reciben
órdenes motoras para el control de la musculatura esquelética que se
conducen por la médula espinal.
Los que envían información sensorial (tacto, dolor) del tronco y las
extremidades hacia el sistema nervioso central a través de la médula
espinal, reciben el nombre de raíces dorsales (tienen fibras sensitivas).

Los que envían información de la posición y el estado de la musculatura y


las articulaciones del tronco y las articulaciones para el control de la
musculatura esquelética reciben el nombre de raíces ventrales (tienen
fibras motoras).

El Sistema Nervioso Autónomo: también llamado sistema nervioso


vegetativo o (incorrectamente) sistema nervioso visceral, está formado por
el conjunto de neuronas que regulan las funciones involuntarias o
inconscientes en el organismo (p.e. movimiento intestinal, sensibilidad
visceral).

El funcionamiento de los músculos obedece a un proceso voluntario; pero


no sucede lo mismo con el miocardio y con los músculos lisos de los vasos
sanguíneos, del tubo digestivo, de la vejiga, etc. Estas vísceras, que
cumplen funciones de la vida vegetativa lo mismo que las glándulas,
actúan de modo independiente (autónomo), no obstante estar en
comunicación con el sistema nervioso central.

El sistema nervioso autónomo o vegetativo es, pues, la parte del sistema


nervioso relacionada con la regulación de las funciones de la vida
vegetativa (respiración, digestión, circulación, excreción, etc.) que no está
sometido a la voluntad. Como su nombre lo indica, es un sistema
autónomo.

Se puede dividor en dos porciones:


-Sistema simpático
- Sistema parasimpático

Sistema Simpático

El simpático es un sistema nervioso compuesto de dos cadenas de 23


ganglios situados a lo largo y a los dos lados de la columna vertebral, y que
presiden la respiración, la circulación, las secreciones, y en general todas
las funciones de la vida de nutrición.

Los cilindros ejes de las neuronas de este sistema carecen de mielina (fibras
grises) y los ganglios simpáticos están formados por neuronas multipolares.

Cada ganglio es una masa de sustancia gris; comunica con el ganglio que
precede y con el que sigue; además recibe una ramificación de un nervio
raquídeo (rama comunicante) y emite una prolongación que dirige las
funciones de los órganos.

Los ganglios se agrupan en: 3 cervicales, 12 dorsales, 4 lumbares y 4 sacros.


Los nervios que salen de los ganglios forman varios plexos.

Sistema Parasimpático
El sistema parasimpático (al lado del simpático) está constituido por fibras
pertenecientes a ciertos nervios craneales y nervios raquídeos (de la región
sacra).

Estas fibras –que actúan independientemente de la voluntad– llegan a los


órganos que han de excitar pasando previamente por el ganglio
parasimpático; éste se halla ubicado junto a dicho órgano o en sus mismas
estructuras.
El sistema parasimpático comprende dos porciones:
- La cráneo-bulbar
- La sacra
Parasimpático cráneo-bulbar
Está constituido por las fibras correspondientes a los siguientes nervios:
a) al motor ocular común
b) al facial
c) al glosofaríngeo
d) al vago o neumogástrico
Parasimpático sacro
Inerva el recto y la vejiga; relaja los esfínteres y estimula la evacuación.

Funcionalidad entre Simpático y Parasimpático

Los órganos o vísceras inervadas reciben ordinariamente dos nervios; uno


proviene del simpático y otro del parasimpático; y el conjunto de los dos
sistemas gobierna las funciones de la vida vegetativa sin intervención de la
voluntad.
El Sistema Nervioso Simpático y el Sistema Parasimpático realizan acciones
que pueden parecer antagónicas (opuestas) de una misma función.

Para ello, el Sistema Nervioso Simpático actúa en casos de urgencia y de


estrés provocando diversas reacciones como el aceleramiento del pulso y
la respiración, frena la digestión, aumenta la presión arterial y hace que la
sangre llegue en mayor cantidad al cerebro, piernas y brazos, también
hace que aumente el nivel de azúcar en la sangre.

Todo esto lo hace para preparar a la persona para que utilice al máximo
su energía y pueda actuar en situaciones especiales.

El Parasimpático, en cambio, almacena y conserva la energía y mantiene


el ritmo normal de los órganos y glándulas del cuerpo. Después de un susto,
trauma, dolor intenso o cualquier situación especial del cuerpo, el
Parasimpático se encarga de que todo vuelva a la calma y normalidad.

De estos dos, obviamente el Parasimpático es el más importante para


sobrevivir, porque si no normalizara las funciones, el cuerpo no podría
soportalas.
Efecto de la estimulación simpática y parasimpática

El sistema nervioso autónomo produce estimulación en unos órganos e


inhibición en otros. La subdivisión del sistema nervioso autónomo hace que
este lleve a cabo acciones integradas y frecuentemente opuestas con una
finalidad: la armonía y sinergia del organismo.

Ambos componentes no son antagónicos entre sí: la mayor parte del


tiempo (excepto en periodo de estrés) interactúan de una forma armónica
e imperceptible. A través de esta inervación, la división simpática produce
una respuesta muy amplia; en cambio, el parasimpático se caracteriza por
su acción más limitada a las áreas locales de inervación.

ORGANOS DE LOS SENTIDOS

Los sentidos nos proporcionan la información vital que nos permite


relacionarnos con el mundo que nos rodea de manera segura e
independiente. Los órganos de los sentidos hacen parte del sistema
sensorial y son los que nos permiten percibir: luz, sonido, temperatura,
sabores y olores; que son transformados en impulsos nerviosos que llegan al
cerebro y son interpretados por este, para generar una respuesta
adecuada al estimulo.

Los receptores sensoriales son los receptores que ayudan a los órganos de
los sentidos a percibir todos los estímulos que nos conectan al mundo.
Existen 4 receptores sensoriales:
· Quimio-receptores: perciben el gusto y olfato.

· Mecano-receptores: son los que perciben el contacto y no contacto,


vibraciones, texturas
· Termo-receptores: son los que perciben el frío o el calor.
· Foto-receptores: se especializan en recibir la energía electromagnética.

Existen órganos sensoriales externos e internos. Los órganos externos son la


boca, la piel, la nariz, los ojos, el oído. Los órganos internos son el cerebro,
la lengua, oído medio e interno, pituitaria amarilla y roja; Al mismo tiempo,
los seres vivos necesitan recibir información delfuncionamiento de los
órganos internos para propiciar el estado de equilibrio indispensable: la
"homeostasis".
SENTIDO DEL TACTO

Sentido del tacto o mecano recepción. el tacto es el encargado de


percibir el contacto, la presión, la temperatura y el dolor. Su órgano
sensorial es la piel, pero también lo encontramos en las terminaciones
nerviosas internas del organismo pudiendo percibir los altos cambios de
temperatura o el dolor. La percepción de estos estímulos externos se realiza
a través de las células receptoras que llevan la información hasta el
cerebro.

Los receptores del tacto están constituidos por los discos de Merkel, que se
subdividen en las siguientes categorías:

Corpúsculos de Pacini: se ubican en la zona profunda de la piel, sobre


todo en los dedos de las manos y de los pies. En general son poco
abundantes. Detectan presiones y deformaciones de la piel, y sus estímulos
duran poco.

Terminaciones Nerviosas libres: están en casi todo el cuerpo y se


especializan en sentir el dolor.

Terminaciones nerviosas de los pelos: sensibles al tacto. La mayoría de los


pelos son de este tipo.
Corpúsculo de Meissner: se encuentran en las papilas dérmicas,
abundantes en los extremos de los dedos, los labios, la lengua, etc. Se
ubican en la zona superficial de la piel y se especializan por el tacto fino.

Corpúsculos de Krause: presentes en la superficie de la dermis y son


sensibles al frío, se ubican en especial en la lengua y en los órganos
sexuales.

Corpúsculo de Rufino: son poco numerosos, alargados y profundos, son


sensibles al calor.
La piel:

Es una parte muy importante del organismo que protege y cubre la


superficie del cuerpo. Contiene órganos especiales que suelen agruparse
para detectar las distintas sensaciones como la temperatura y dolor.

La piel posee, en un corte transversal, tres capas: la epidermis, que es la


que interviene principalmente en la función del tacto, ya que es la más
externa. La dermis, que es la capa del medio y la capa subcutánea.

SENTIDO DE LA VISTA

El sentido de la vista es el que permite al ser humano conocer el medio que


lo rodea y relacionarse con sus semejantes. Es el sentido humano más
perfecto y evolucionado. El órgano receptor es el ojo o globo ocular.
- Funcionamiento del ojo: la luz penetra en el ojo por la córnea, que actúa
como una lente convexa, desviando los rayos hacia un mismo punto.
Después el iris actúa como diafragma regulador, dilatándose y
contrayéndose para controlar la entrada de luz. Pasa por la pupila y el
cristalino y enfoca la imaginen. Aunque el ojo es denominado a menudo
como el órgano de la visión, en realidad el órgano que efectúa el proceso
de la visión es el cerebro, la función del ojo es traducir las vibraciones
electromagnéticas de la luz en un determinado tipo de impulsos nerviosos
que se transmiten al cerebro a través del nervio óptico.

El globo ocular es una estructura esférica de aproximadamente 2.5


centímetros de diámetro con un marcado abombamiento sobre su
superficie anterior. La parte exterior se compone de tres capas de tejido:

La capa más externa o esclerótica: tiene una función protectora. Cubre


unos cinco sextos de la superficie ocular y se prolonga en la parte anterior
con la córnea transparente.

La capa media o úvea: tiene tres partes: la coroides (vascularizada), el


cuerpo ciliar (procesos filiares) y el iris (parte frontal del ojo).
La capa interna o retina: es la sensible a la luz.

La córnea es una membrana resistente compuesta por cinco capas a


través de la cual la luz penetra en el interior del ojo. El iris es una estructura
pigmentada suspendida entre la córnea y el cristalino y tiene una abertura
circular en el centro, la pupila. El tamaño de la pupila depende de una
músculo que rodea sus bordes, aumentando o disminuyendo la cantidad
de luz que entra en el ojo

La retina es una capa compleja compuesta sobre todo por células


nerviosas. Las células receptoras sensibles a la luz se encuentran en la
superficie exterior, tienen forma de conos y bastones y están ordenados
como los fósforos de una caja. La retina se sitúa detrás de la pupila. La
retina tiene una pequeña mancha de color amarillo que se denomina
mácula lútea, es su centro se encuentra la fóvea central, que es la zona
del ojo con mayor agudeza visual.

El nervio óptico entre en el globo ocular por debajo y algo inclinado hacia
el lado interno de la fóvea central, originando en la retina la pequeña
mancha llamada disco óptico. Esta estructura es el punto ciego del ojo, ya
que carece de células sensibles a la luz.
Funcionamiento del Ojo:
El enfoque del ojo se lleva a cabo debido a que la lente del cristalino se
aplana o redondea; este proceso se llama acomodación. En un ojo normal
no es necesaria la acomodación para ver los objetos distantes, pues se
enfocan en la retina cuando la lente está aplanada gracias al ligamento
suspensorio. Para ver objetos más cercanos, el músculo ciliar se contrae y
por relajación del ligamento suspensorio, la lente se redondea de forma
progresiva.

El mecanismo de la visión nocturna implica la sensibilización de las células


en forma de bastones gracias a un pigmento, la púrpura visual, sintetizada
en su interior. Para la producción de este pigmento es necesaria la
vitamina A, y su deficiencia conduce a la ceguera nocturna.

Cuando la luz intensa alcanza la retina, los gránulos de pigmento marrón


emigran a los espacios que rodean a estas células, revistiéndolas y
ocultándolas. De este modo los ojos se adaptan a la luz.
Los movimientos del globo ocular hacia la derecha, izquierda, arriba o
abajo se llevan a cabo por los seis músculos oculares que son muy precisos.
Se estima que los ojos pueden moverse para enfocar como mínimo cien
mil puntos distintos del campo visual.
Estructuras Protectoras:

Las más importantes son los párpados superior e inferior. Estos son pliegues
de piel y tejido glandular que se cierran gracias a unos músculos y forman
sobre el ojo una cubierta protectora. Las pestañas (pelos cortos que
crecen en los bordes de los párpados), actúan como una pantalla para
mantener lejos del ojo partículas cuando estos están abiertos.

Detrás de los párpados se encuentra la conjuntiva, que es una membrana


protectora fina que se pliega para cubrir la zona de la esclerótica visible.
Cada ojo cuenta también con una glándula lagrimal, situada en la
esquina exterior. Estas glándulas segregan un líquido salino que lubrica la
parte delantera del ojo cuando los párpados están cerrados y limpia la
superficie de las pequeñas partículas de polvo.
SENTIDO DEL OLFATO

El olfato es el más sensible de los sentidos, ya que unas cuantas moléculas


bastan para estimular una célula olfativa. Detectamos hasta diez mil olores.
el olfato tambien contribuye con el gusto, estimulando el apetito y las
secreciones digestivas. La nariz es el órgano por el cual penetran todos los
olores del exterior.

La parte interna de la nariz está formada por dos paredes: la pituitaria


amarilla y la pituitaria roja o rosada. En la amarilla se encuentran los
receptores del olfato, y la pituitaria roja (llena de vasos sanguíneos) ayuda
a regular la temperatura del aire que entra y sale de los pulmones.
Este sentido permite percibir los olores. La nariz, equipada con nervios
olfativos, es el principal órgano del olfato. Los nervios olfativos son también
importantes para diferenciar el gusto de las sustancias que se encuentran
dentro de la boca, es decir, muchas sensaciones que se perciben como
sensaciones gustativas, tienen su origen en el sentido del olfato. También es
importante decir que la percepción de los olores está muy relacionada
con la memoria, determinado aroma es capaz de evocar situaciones de la
infancia, lugares visitados o personas queridas.
La nariz:

Forma parte del sentido del olfato, del aparato respiratorio y vocal. Se
puede dividir en región externa, el apéndice nasal, y una región interna
constituida por dos cavidades principales (fosas nasales) que están
separadas entre si por el tabique vertical. Los bordes de los orificios nasales
están recubiertos de pelos fuertes que atraviesan las aberturas y sirven para
impedir el paso de sustancias o partículas extrañas.

Las cavidades nasales son altas y profundas, y constituyen la parte interna


de la nariz. Se abren en la parte frontal por los orificios nasales y, en el
fondo, terminan en una abertura en cada lado de la parte superior de la
faringe. La región olfativa de la nariz es la responsable del sentido del
olfato, la membrana mucosa es muy gruesa y adopta una coloración
amarilla.
Clasificación de las sensaciones olfativas:

Se puede decir que hay siete tipos de receptores existentes en las células
de la mucosa olfatoria. Las investigaciones sobre el olfato señalan que las
sustancias con olores similares tienen moléculas del mismo tipo. Estos tipos
son:

 Alcanfor
 Almizcle
 Flores
 Menta
 Éter (líquido para limpieza en seco)
 Acre (avinagrado)
 Podrido

SENTIDO DEL GUSTO

El gusto consiste en registrar e identificar sustancias solubles en la saliva.


Está unido al olfato, que complementa su función.

Los compuestos químicos de los alimentos se disuelven en la humedad de


la boca y penetran en las papilas gustativas a través de los poros de la
superficie de la lengua, donde entran en contacto con células sensoriales.
Cuando un receptor es estimulado por una de las sustancias disueltas,
envía impulsos nerviosos al cerebro. Hay cuatro sensaciones gustativas que
pueden reconocerse con facilidad: dulce, amargo, ácido y salado.
El sabor dulce se aprecia en la punta de la lengua; el amargo en la zona
posterior; el ácido en los bordes y el salado en la punta u en los bordes. Por
lo tanto la zona central de la lengua es insensible a los sabores.

La lengua posee casi 10.000 papilas gustativas que están distribuidas de


forma desigual en la cara superior de esta.
La lengua es un órgano musculoso de la boca y es el asiento principal del
gusto y parte importantes en la fonación, masticación y deglución de los
alimentos. Está cubierta por una membrana mucosa y se extiende desde el
hueso hioides en la parte posterior de la boca hacia los labios. El color de
la lengua suele ser rosado. Su principal función es la contención de los
receptores gustativos, que nos permiten degustar los alimentos. También
contribuye junto con los labios, los dientes y el paladar duro, la articulación
de las palabras y sonidos.

SENTIDO DEL OIDO

El sentido del oído nos permite percibir los sonidos, su volumen, tono, timbre
y la dirección de la cual provienen.

Para poder escuchar un sonido, las ondas sonoras deben pasar primero,
por el conducto auditivo externo y hacer vibrar así la membrana del
tímpano.

Las vibraciones se transmiten a través del oído medio por el martillo,


yunque y estribo. Al mismo tiempo, originan ondas en el líquido del oído
interno. Esos estímulos salen mediante los nervios auditivos superiores.

El oído es el órgano responsable no sólo de la audición, sino también del


equilibrio. Se encarga de captar las vibraciones y transformarlas en
impulsos nerviosos que llegarán al cerebro, donde serán interpretadas.

El oído se divide en tres zonas: externa, media e interna.


Oído Externo:
Es la parte del aparato auditivo que se encuentra en posición lateral al
tímpano. Comprende el pabellón auditivo (oreja) y el conducto auditivo
externo que mide tres centímetros de longitud. Posee pelos y glándulas
secretoras de cera. Su función es canalizar y dirigir las ondas sonoras hacia
el oído medio.
Oído Medio:

Se encuentra situado en la cavidad timpánica llamada caja del tímpano,


su cara externa está formada por el tímpano que lo separa del oído
externo. Es el mecanismo responsable de a conducción de las ondas
sonoras hacia el oído interno. Es un conducto estrecho, que se extiende
unos 15 milímetros en un recorrido vertical y otros 15 en un recorrido
horizontal. El oído medio está conectado directamente con la nariz y la
garganta a través de la trompa de Eustaquio, que permite la entrada y la
salida del aire del oído medio para equilibrar las diferencias de presión
entre éste y exterior. Está formado por tres huesillos pequeños y móviles,
que son el martillo, el yunque y el estribo. Los tres conectan acústicamente
el tímpano con el oído interno, que contiene líquido.
Oído Interno:

Se encuentra en el interior del hueso temporal que contiene los órganos


auditivos y del equilibrio, que están inervados por los filamentos del nervio
auditivo. Está separado del oído medio por la ventana oval. Consiste en
una serie de canales membranosos alojados en la parte densa del hueso
temporal, se divide en: caracol, vestíbulo y tres canales semicirculares, que
se comunican entre si y contienen endolinfa (fluido gelatinosos).
Capacidad Auditiva:

Las ondas sonoras, en realidad son cambios en la presión del aire, y son
transmitidas a través del canal auditivo externo hacia el tímpano, en el
cual se produce una vibración. Estas vibraciones se comunican al oído
medio mediante la cadena de huesillos y, a través de la ventana oval
hasta el líquido del oído interno.

El rango de audición varía de una persona a otra. El rango máximo de


audición en el hombre incluye frecuencias de sonido desde 16 hasta
28.000 ciclos por segundo. El menor cambio de tono que puede ser
captado por el oído varía en función del tono y del volumen.

La sensibilidad del oído a la intensidad del sonido también varía con la


frecuencia. La sensibilidad a los cambios de volumen es mayor entre 1.000
y los 3.000 ciclos, de manera que se pueden detectar cambios de un
decibelio. Esta sensibilidad es menor cuando se reducen los niveles de
intensidad de sonido.
Equilibrio:

Los canales semicirculares y el vestíbulo están relacionados con el sentido


del equilibrio. En estos canales hay pelos que detectan los cambios de la
posición de la cabeza.

Los tres canales semicirculares se extienden desde el vestíbulo formando


ángulo más o menos rectos entre si, lo cual permite que los órganos
sensoriales registren los movimientos que la cabeza realiza. Sobre las células
pilosas del vestíbulo se encuentran unos cristales de carbonato de calcio,
que cuando la cabeza está inclina cambian de posición y los pelos que
están por abajo responden al cambio de presión. Es posible que quienes
padezcan de enfermedades del oído interno no pueda mantenerse de pie
con los ojos cerrados sin tambalearse o caerse.

ANATOMIA DEL OJO


El ojo es un órgano que detecta la luz siendo la base del sentido de la vista.

Se compone de un sistema sensible a los cambios de luz, capaz de


transformar éstos en impulsos eléctricos. Los ojos más sencillos no hacen
más que detectar si los alrededores están iluminados u oscuros. Los más
complejos sirven para proporcionar el sentido de la vista.

Las partes del ojo son esenciales para la existencia humana porque gracias
a ellas captamos, percibimos y encontramos lo que se llama las imágenes
percibidas por este sistema.
En la mayoría de los vertebrados y algunos moluscos, el ojo funciona
proyectando imágenes a una retina sensible a la luz, donde se detecta y
se transmite una señal correspondiente a través del nervio óptico. El ojo por
lo general es aproximadamente esférico.

Para que los rayos de luz se puedan enfocar, se deben refractar. La


cantidad de refracción requerida depende de la distancia del objeto que
se ve. Un objeto distante requerirá menos refracción que uno más cercano.
La mayor parte de la refracción ocurre en la córnea, que tiene una
curvatura fija. El resto de la refracción requerida se da en el cristalino. Al
envejecer, el ser humano va perdiendo esta capacidad de ajustar el
enfoque, deficiencia conocida como presbicia o vista cansada.
Funciones del ojo

El ojo recibe los estímulos de los rayos de luz procedentes del entorno y los
transforman en impulsos nerviosos. Estos impulsos llegan hasta el centro
cerebral de la visión, donde se descodifican y se convierten en imágenes.
La vista es uno de los cinco sentidos que nos permiten comprender el
mundo que nos rodea y desenvolvernos en él. La pupila es el diafragma
del ojo. Los músculos del músculo ciliar que tienen forma circular y de radio,
la abren o la cierran en función de la luminosidad.
Movimientos oculares:
Los movimientos del ojo se dividen en:
a) laterales (abducción y adicción) en torno a un eje vertical;
b) verticales (elevación y depresión) en torno a un eje horizontal; y
c) rotatorios (rotación interna y externa, tomando como referencia el
extremo superior del meridiano vertical de la cornea) en torno a un eje
antero posterior.

Los rectos horizontales tienen una acción simple: el recto interno lleva el ojo
hacia adentro (adiccion) y el recto externo lo lleva hacia afuera
(abducción).

Los músculos verticales, rectos superior e inferior, y oblicuos mayor y menor,


tienen una acción más compleja, debido a que en la mirada hacia
delante (posición primaria) la dirección de los músculos verticales no
coincide con el eje antero posterior del ojo. Según la posición, se
comportan como elevadores o depresores, como rotadores internos o
externos y como abductores o aductores.
Anatomía del ojo

1 Procesos ciliares
2 Cámara posterior
3 Iris
4 Pupila
5 Cornea
6 Cámara anterior
7 Músculo ciliar
8 Ligamento suspensorio del cristalino
9 Cristalino
10 Humor vítreo
11 Fovea
12 Vasos sanguíneos de la retina
13 Nervio óptico
14 Disco óptico
15 Conducto hialoideo
16 Esclerótica
17 Coroides
18 Retina

El órgano de la visión está compuesto por los párpados, los globos


oculares, el aparato lagrimal y los músculos oculares externos. La visión
binocular, con la participación de ambos ojos, permite apreciar las
imágenes en tres dimensiones. El globo ocular mide unos 25mm de
diámetro y se mantiene en su posición gracias a los músculos oculares. Está
envuelto por una membrana compuesta de varias capas.

La capa externa, llamada esclerótica, es espesa, resistente y de color


blanco. La capa media, coroides, que contiene abundantes vasos
sanguíneos. La capa interna se llama retina, y en ella se encuentran las
células sensibles a la luz: los bastones y los conos. La parte anterior del
globo ocular está cubierta por la córnea, una membrana transparente y
resistente que carece de vasos sanguíneos.

Alrededor de la córnea está la conjuntiva. Por detrás de la córnea se halla


la cámara anterior, limitada por el iris y la pupila. Detrás de la pupila se
encuentra el cristalino, el cuerpo ciliar y la cámara posterior. La cámara
anterior está llena de un líquido transparente, el humor acuoso, que
humedece el cristalino y garantiza su nutrición. La cámara posterior esta
rellena de otro liquido coloidal llamado humor vítreo, que mantiene la
tensión del interior del ojo. El iris está formado por una fina red de fibras
conjuntivas, o estoma, provista de numerosos vasos sanguíneos y de los
músculos que controlan la dilatación y la contracción de la pupila.

El color del iris depende de la transparencia del estoma y de la cantidad


de pigmento que contiene. Cuando el pigmento es escaso, los ojos son
azules, mientras que cuando hay una cantidad mayor se aprecian matices
verdes o castaños.

El pigmento se forma durante los primeros meses de vida, por lo que todos
los recién nacidos tienen los ojos de color azul grisáceo. El color definitivo se
establece a los dos o tres meses de vida. Si no hay pigmentación los ojos se
vuelven grisáceos, en el caso de los albinos.

Cuando el pigmento es escaso, los ojos son de color azulado; si hay mayor
cantidad se aprecian matices verdosos o castaños.

El cristalino, está sostenido por unas fibras conjuntivas muy finas que a su
vez están unidas al músculo constrictor del cuerpo ciliar. El cristalino se
forma a lo largo de la tercera o cuarta semana de embarazo. Es blando y
elástico en los niños, pero se endurece con el paso de los años.
El cristalino aumenta de tamaño durante toda la vida: en un individuo de
70 años es casi tres veces mayor que en un bebé. Detrás del cristalino se
encuentra el humor vítreo, una masa gelatinosa, blancuzca y transparente
que ocupa la mayor parte del interior del ojo. Esta masa está rodeada por
la retina, que es la túnica más interna del ojo. La retina, sensible a los
estímulos luminosos, está conectada con las fibras del nervio óptico que se
prolonga hacia el cerebro.

La zona que rodea el nervio óptico es la papila óptica, un área que no


contiene células sensoriales y constituye el denominado punto ciego.
Sobre la superficie de la retina, en el eje antero posterior del ojo, hay una
depresión: la mácula lútea o amarilla, que es la zona con mayor agudeza
visual.

Movimiento del ojo

Sólo un objeto cuya imagen se sitúe en el centro de la retina (región de la


fóvea) estará enfocado. Por tanto, es necesario un control preciso de la
posición de los globos oculares. Seis músculos trabajan en grupo para
mover los ojos arriba, abajo, en sentido central o nasal, en sentido lateral,
temporal o en rotación. Estos músculos permiten enfocar unos 100.000
puntos diferentes del campo de visión.
Enfoque del ojo

Los rayos de luz que entran en el ojo son refractados, o reflejados, al pasar
por el cristalino. En una visión normal, los rayos de luz se enfocan justo sobre
la retina. Si el globo ocular es demasiado ancho, la imagen se enfoca más
cerca que la posición donde está la retina. Esto se llama miopía, es decir,
una persona corta de vista que no distingue con claridad los objetos
distantes. La condición contraria se llama hipermetropía; se produce
cuando los globos oculares son demasiado estrechos. En este caso, una
imagen enfocada de forma correcta queda detrás de la retina. Estas
condiciones también se pueden dar si los músculos oculares son incapaces
de variar la forma del cristalino para que enfoquen los rayos de luz de
forma correcta.

Pupila

La pupila viene del griego pupis y significa la parte central del iris. Se trata
de una abertura dilatable y contráctil de color negro con la función de
regular la iluminación que le llega a la retina, en la parte posterior del ojo.

La pupila es el diafragma del ojo. Los músculos del músculo ciliar que
tienen forma circular y de radio, la abren o la cierran en función de la
luminosidad.

La pupila en sí, es transparente, ya que es un agujero. Se ve negra ya que


es el reflejo del fondo del ojo.
Córnea y cristalino

La córnea es una importante porción anatómica del ojo y el cristalino es un


componente del ojo con forma biconvexa; constituyen el objetivo del ojo.
Cuando un rayo de luz pasa de una sustancia transparente a otra, su
trayectoria se desvía: este fenómeno se conoce con el nombre de
refracción. La luz se refracta en el cristalino y se proyecta sobre la retina. El
cristalino regula la distancia curvándose más o menos. Si el cristalino es
opaco, la retina transmite una imagen borrosa. Esta patología es conocida
como "cataratas".
Retina

En la retina están las células visuales, por lo que se puede comparar a una
película fotosensible. La luz se transforma allí en impulsos eléctricos que el
nervio óptico transmite al cerebro. Los nervios ópticos de la zona nasal de
ambos ojos se entrecruzan antes de entrar en el encéfalo, formando el
quiasma óptico, en cambio la zona temporal no se cruza, dejando en un
lado del cerebro el sector nasal de un ojo y el temporal del otro. Luego se
prolongan por las vías visuales hacia la zona media del cerebro y
atravesando el tejido cerebral, alcanzan los centros visuales de los lóbulos
occipitales. Se ignora que ocurre con exactitud después, pero los impulsos
eléctricos se transforman en imágenes. La imagen llega invertida y
deforme por las irregularidades del ojo a la retina, pero el cerebro la
rectifica y podemos percibirla en su posición original.
Conos y bastones

Las células sensoriales de la retina reaccionan de forma distinta a la luz y


los colores. Los bastones se activan en la oscuridad, y sólo permiten
distinguir el negro, el blanco y los distintos grises. Son células fotorreceptoras
de la retina responsables de la visión en condiciones de baja luminosidad.
Presentan una elevada sensibilidad a la luz aunque se saturan en
condiciones de mucha luz y no detectan los colores. Se ubican en casi
toda la retina exceptuando la fóvea.
Los conos, en cambio funcionan de día y en ambientes iluminados, por lo
que hacen posible la visión en los colores. En realidad hay tres tipos de
conos, adaptados a cada uno a los colores azul, rojo y verde; los cuales
interaccionan mezclándose para formar el espectro completo de luz
visible. El pigmento de los conos es una sustancia coloreada del retinol. Los
conos están concentrados en el centro de la retina mientras que la
frecuencia de los bastones aumenta a medida que nos alejamos de la
mácula lutea hacia la periferia.
Musculatura extrínseca

La musculatura extrínseca está formada por seis músculos que se insertan


por una parte en la órbita y del otro lado en la capa más externa del ojo,
la esclerótica. Estos músculos son los que permiten mover el ojo en
cualquier dirección sin necesidad de cambiar la posición de la cabeza, tal
como ocurre por ejemplo cuando seguimos con la vista un objeto en
movimiento.
Vías visuales

Los nervios ópticos de ambos ojos se entrecruzan antes de entrar en el


encéfalo, formando el quiasma óptico. Luego se prolongan por las vías
visuales hacia la zona media del cerebro. Finalmente estos impulsos
alcanzan los centros visuales de los lóbulos occipitales.

Cuando los impulsos nerviosos llegan a los lóbulos occipitales del cerebro,
la información debe ser procesada. El cerebro procesa la información
visual de forma particular. Los diferentes aspectos de una imagen son
decodificados por diferentes partes del mismo.

La forma de un objeto es procesada por una vía, mientras el color y el


movimiento lo son por otras vías diferentes. De esta forma, el daño de una
zona concreta del cerebro, puede producir ciertas manifestaciones
características, como ocurre en la agnosia (imposibilidad de nombrar y
reconocer un objeto común) que se produce cuando se lesiona un área
específica de asociación visual que se encuentra en el hemisferio cerebral
izquierdo.
Esclerótica
La esclerótica, la "parte blanca del ojo", es una membrana de color
blanco, gruesa, resistente y rica en fibras de colágeno. Constituye la capa
más externa del globo ocular. Su función es la de darle forma y proteger a
los elementos más internos.
Se caracteriza por que esta formado por 3 capas:
Fusca: es la capa más interna y contiene abundantes vasos.
Fibrosa: está compuesta fundamentalmente por fibras de colágeno.
Epiesclera: es una membrana que facilita el deslizamiento del globo ocular
con las estructuras vecinas.
Es la porción blanca del ojo. Tejido fuerte y fibroso que se extiende desde
la córnea hasta el nervio óptico y que comúnmente se conoce como "la
parte blanca del ojo".
Fóvea

La fóvea es una pequeña depresión en la retina, en el centro de la


llamada mácula lútea. Ocupa un área total un poco mayor de 1 Mm.
cuadrado. El área, denominada también fóvea centralis, no posee
bastones sino sólo conos, responsables de la percepción de colores. Un
objeto que el ojo enfoca se fija siempre de manera tal que su reflejo se
ubique exactamente justo en la fóvea centralis.

Debido a la falta de bastoncillos y la consecuente incapacidad de percibir


estructuras finas bajo malas condiciones de luminosidad, resulta
particularmente difícil, por ejemplo, leer un texto en la penumbra.
Humor vítreo

El humor vítreo es un líquido gelatinoso y transparente que rellena el


espacio comprendido entre la retina y el cristalino. Cumple la función de
amortiguar ante posibles traumas. Está compuesto en un 99.98% por agua.
Iris

El iris es la zona coloreada del ojo, ya sea azul, verde, marrón etc. con lo
define el color del ojo. En su centro se encuentra la pupila, de color negro;
la zona blanca que se encuentra alrededor se denomina esclerótica. Se
ubica tras la córnea, entre la cámara anterior y el cristalino, al que cubre
en mayor o menor medida en función de su dilatación.
Esta parte anatómica del polo anterior del ojo está constantemente
activa, permitiendo a la pupila dilatarse (midriasis) o contraerse (miosis), de
acuerdo a la intensidad que posea la fuente luminosa. Esta función tiene
como objetivo poder regular la cantidad de luz que llega a la retina.
Macula

Es la zona de la retina especializada en la visión fina de los detalles, nos


sirve entre otras cosas para poder leer y distinguir las caras de las personas.

Se localiza en la parte posterior de la retina y tiene una extensión


aproximada de 5 Mm. de diámetro, quedando limitada verticalmente por
las arcadas temporales. Se encuentra por lo tanto temporal al disco
óptico.
Coroides

La función de las coroides es mantener la temperatura constante y nutrir a


algunas estructuras del globo ocular. El coroides presenta una
pigmentación oscura debido a la presencia de melanina y una gran
abundancia de vasos sanguíneos, lo que ayuda a absorber la luz que llega
al ojo y prevenir así su reflexión
Órbita

Las órbitas son dos cavidades óseas, simétricas y profundas con forma de
pirámide cuyo vértice apunta hacia atrás, tienen la función de proteger al
ojo. Están situadas a ambos lados de la nariz, en el límite del cráneo con la
cara. Constan de cuatro paredes: superior, inferior, interna y externa y un
vértice donde se encuentra el agujero óptico que es la principal
comunicación de la órbita con el interior del cráneo.

Dentro de la órbita se encuentra el ojo y una serie de estructuras anexas


que son imprescindibles para el funcionamiento adecuado de este
órgano. A continuación se enumeran:

 Los músculos extraoculares o musculatura extrínseca. Es un conjunto


de 6 músculos que tienen la finalidad de mover el ojo en cualquier
dirección, como ocurre cuando seguimos con la vista un objeto en
movimiento.
 El músculo elevador del párpado superior que moviliza el párpado.
 La glándula lagrimal que produce las lágrimas para lubricar el ojo.
 El nervio óptico que transmite la información desde el ojo hasta el
cerebro.
 La arteria oftálmica y sus ramas que suministran riego sanguíneo al
ojo y anexos.
 La vena oftálmica por las que retorna la sangre hacia el corazón.
 Los diferentes nervios que controlan la movilidad del ojo y otras
funciones, como el nervio motor ocular común (III par craneal),
nervio motor ocular externo (VI par craneal) y el Nervio patético (IV
par craneal).
 Ligamento suspensorio del globo ocular que une el ojo a la órbita
para fijar su posición.
 Grasa periorbitaria, tejido conjuntivo y fascias que forman una
envoltura protectora de todo el conjunto.
Irrigación y Drenaje del globo ocular
La fosa orbitaria tiene dos sistemas de vascularización: El principal, lleva a
cabo la mayor parte de la irrigación, esta constituido por la arteria
carótida interna que irriga el cerebro. El segundo, en menor proporción, es
de emergencia, constituido por la arteria carótida externa que es la
encargada de vascularizar la zona de rostro y cuello.

Las arterias carótida interna y carótida externa están unidas por medio de
la arteria oftálmica y la arteria facial que son ramas de la carótida interna y
externa respectivamente, esto ocurre en la frontera de la fosa orbitaria. La
arteria oftálmica entre al interior de la fosa orbitaria por el agujero óptico
situado debajo del nervio óptico.
Las ramas en las que se divide la arteria oftálmica son:

1) Arteria central de la retina: al entrar en la fosa orbitaria por el agujero


óptico sale de la arteria oftálmica la arteria central de la retina y va por
dentro del nervio óptico irrigando así toda la zona de la retina.
2) Arterias ciliares posteriores: atraviesan la esclerótica, existen dos tipos -
cortas: forman plexos al entrar, dan lugar a la coroides -largas: llegan hasta
el cuerpo ciliar sin dar ramas.
3) Arteria lagrimal irriga a la glándula lagrimal

4) Arterias musculares: son las arterias que se encargan de la irrigación de


la musculatura del globo ocular. Las arterias de los músculos rectos poseen
ramificaciones terminales que son las arterias ciliares anteriores que
penetran por las inserciones de la musculatura con el globo ocular. Junto
con las arterias ciliares posteriores largas forman el circuito arterial mayor
del iris.
Del drenaje encargan los sistemas venosos ubicados dentro del cráneo, y
reciben el nombre de senosvasculares escleroticos.

En posición erecta, la sangre del globo ocular va a los senos cavernosos


por la arteria oftálmica superior y baja por la vena yugular. En posición
boca abajo, la sangre se drena por la vena facial.

La vena oftálmica superior y la vena facial se anastomosan (se unen) muy


cerca de la fosa orbitaria.

La vena oftálmica superior va aumentando de tamaño hasta llegar a los


senos cavernosos ya que recoge muchas venas:
1. Vena central de la retina
2. Vena lagrimal
3. Venas musculares
4. Venas vorticosas superiores procedentes de la uvea.
5. Vena oftálmica inferior: recoge las dos venas vorticosas inferiores.

Podemos drenar de la vena facial a los senos por la vena oftálmica


superior o al revés, ya que los senos no poseen válvulas que impidan el
reflujo.

ANATOMIA DEL OIDO

El oído humano se encuentra dividido en oído externo, oído medio y oído


interno. Desde el oído interno salen las conexiones nerviosas que lo
relacionan con el sistema nervioso central principalmente por el nervio
coclear y por el nervio vestibular.

El oído externo está formado por el pabellón auricular (PA) y el conducto


auditivo externo (CAE). El PA es una estructura constituida por cartílagos
cubiertos de piel. Los cartílagos reciben diferentes nombres siendo los más
importantes, hélix, antihélix y el trago. Están cubiertos de pericondrio,
siendo el pericondrio del trago en su cara posterior uno de los elementos
usados para injerto en las operaciones de timpanoplastía. La piel que los
cubre no tiene celular subcutáneo de modo que las inflamaciones de ésta
pueden comprometer la vascularización del cartílago y favorecer las
pericondritis e incluso la necrosis. El lóbulo del pabellón es la única zona
que no posee cartílago. La irrigación está dada por ramas de la arteria
temporal superficial y auricular posterior. Los vasos linfáticos drenan a los
ganglios auriculares anterior, posterior e inferior. Los nervios motores que
inervan los diminutos músculos que rodean esta zona están dados por el
nervio facial.

El CAE en un conducto que se ubica entre el PA y la membrana timpánica


(MT). Su largo es de 25 a 30 mm. Se divide en CAE cartilaginoso,
continuación del PA y ocupa un tercio del conducto y en CAE óseo, el
cual ocupa los dos tercios restantes. La piel que lo cubre es continuación
de la del PA y contiene solo en su porción más externa pelos y glándulas
sudoríparas modificadas denominadas ceruminosas y cuya función es
producir el cerumen. En dirección a medial esta piel se modifica pierde los
folículos pilosos y sus glándulas y termina en una piel extremadamente
delgada. La vascularización está dada por las arterias temporal superficial
y auricular posterior, ramas de la carótida externa. La inervación sensitiva
del pabellón y CAE está dada por el auricular mayor y occipital menor,
auriculotemporal, nervio facial y vago.

El oído medio se encuentra entre el oído externo y el oído interno. Es un


espacio de aire revestido por mucosa respiratoria y en cuyo interior se
encuentra la cadena osicular. Esta es formada por el martillo, el yunque y
el estribo. El martillo está íntimamente adherido a la Membrana Timpanica
de modo que es imposible un movimiento de ésta sin un movimiento del
martillo. La articulación del martillo con el yunque y la de este con el
estribo son rígidas, de modo que todo el movimiento de estimulación de la
MT se trasmite al estribo. Este se encuentra en un espacio conocido como
ventana oval la que está cerrada por la platina del estribo. En el espacio
de aire entre la ventana oval y la platina se encuentra un ligamento anular
que cierra este compartimento de aire (oído medio del oído interno).

La Membrana Timpánica en una membrana semitransparente que separa


el oído externo del oído medio. Está formada por la pars tensa (constituida
por piel, fibras elásticas radiales y circulares y por mucosa) y por la pars
flácida (sólo piel y mucosa). La pars tensa es la más amplia y
prácticamente se encuentra en los dos tercios de la MT. La pars flácida se
encuentra en la región superior de la MEl nervio Chorda tympani (cuerda
del tímpano), rama del nervio facial, pasa entre el martillo y el yunque y es
el responsable de llevar la inervación del gusto a los 2/3 anteriores de la
lengua ipsilateral.

La cadena osicular esta fija por varios ligamentos. Además al martillo llega
el tendón del músculo tensor del tímpano y al estribo el tendón del músculo
del estribo. El primero es inervado por el V par y el segundo por el VII
par.embrana Timpánica.
Las principales relaciones de la caja timpánica son:
• En la cara anterior, con la carótida interna y la trompa de Eustaquio

• En la cara superior, separada por delgada capa de hueso, con la fosa


media

• En la cara posterior, con la mastoides y porción descendente del nervio


facial

• En la cara medial o interna, con el nervio facial, cóclea y canales


semicirculares.
• En la cara inferior, con el golfo de la vena yugular
• En la cara lateral o externa, con el CAE a través de la MT

El oído interno está formado en un espacio que deja el hueso temporal en


la región denominada hueso petroso. Al espacio se le denomina laberinto
óseo y a la estructura membranosa que existe en su interior se le denomina
laberinto membranoso. Entre el laberinto óseo y el membranoso existe un
líquido denominado perilinfa, un ultrafiltrado sanguíneo de composición
similar al LCR. En el interior del laberinto membranoso existe otro líquido
denominado endolinfa, producido por una estructura llamada estría
vascular. El sistema perilinfático desemboca en el espacio subaracnoídeo
a través del acueducto coclear, mientras que la endolinfa viaja a lo largo
del ducto endolinfático y se reabsorbe en un saco ciego llamado saco
endolinfático, ubicado en el espacio epidural. En el oído interno existen
dos órganos, el auditivo o coclear (ubicado en la cóclea o caracol) y el
órgano del equilibrio o vestibular. La región coclear es anterior y la
vestibular es posterior.

El laberinto membranoso anterior (coclear) presenta la forma de un


conducto que da dos y media vueltas en relación a una estructura central
o modiolo y contiene en su interior al Órgano de Corti, que es un
mecanorreceptor. Este órgano contiene a las células ciliadas (externas e
internas) cuyas bases descansan sobre la membrana basilar. En el otro
extremo de estas células se encuentran sus cilios, los que se encuentran en
contacto con la membrana tectoria. Las células ciliadas reciben
inervación del ganglio espiral y la unión de estas terminaciones nerviosas
forman el nervio coclear, el que se dirige al tronco encefálico en un
conducto óseo conocido como conducto auditivo interno (CAI).
Posteriormente la vía auditiva asciende hacia la corteza cerebral haciendo
sinapsis en varios núcleos, en forma ipsi y contralateral.

El laberinto membranoso coclear se continúa a posterior con dos


estructuras membranosas el utrículo y el sáculo. Ellas se encuentran en un
espacio del hueso petroso que se denomina vestíbulo. Hacia posterior se
encuentran los laberintos membranosos y óseos conocidos como los
canales semicirculares (anterior, posterior y lateral). Los tres canales
semicirculares nacen y vuelven al utrículo y en uno de sus extremos tienen
una dilatación llamada ampolla, en donde, sobre la cresta ampular, se
ubica el neuroepitelio ciliado vestibular, cubierto por la cúpula gelatinosa.
El sáculo, el utrículo y los canales semicirculares conforman el laberinto
posterior o sistema vestibular. Las células ciliadas del neuroepitelio de estas
estructuras están en íntimo contacto con las primeras neuronas de la vía
vestibular, neuronas bipolares que se organizan en los nervios vestibulares
inferior y superior, los que transcurren por el CAI hacia el tronco encefálico.
En el tronco existen grandes núcleos vestibulares en el piso del cuarto
ventrículo, que a su vez presentan conexiones nerviosas con el cerebelo, la
médula espinal y pares craneanos oculomotores.

El cuarto elemento nervioso del CAI lo forma el nervio facial. La disposición


de los nervios en el CAI es: nervio facial (anterior y superior), nervio coclear
(anterior e inferior). Los nervios vestibulares están en la región posterior del
CAI.

La platina del estribo se relaciona directamente con el vestíbulo y por lo


tanto su cara medial está en contacto con la perilinfa.

PIEL Y ANEXOS

La piel es el mayor órgano del cuerpo humano o animal. En el ser humano


ocupa aproximadamente 2 m², y su espesor varía entre los 0,5 mm (en los
párpados) y los 4 mm (en el talón). Su peso aproximado es de 5 kg. Actúa
como barrera protectora que aísla al organismo del medio que lo rodea,
protegiéndolo y contribuyendo a mantener íntegras sus estructuras, al
tiempo que actúa como sistema de comunicación con el entorno, y éste
varía en cada especie. Anatómicamente se toma como referencia las
medidas estándar dentro de la piel humana. También es conocido como
sistema tegumentario.
La piel está al alcance y, por eso, tiene mucha importancia en la
exploración física, es uno de los mejores Índices de salud general.
La piel proporciona:

1. 1.-Proteccion: frente al medio, abrasiones, pérdidas de líquido (ej.


Quemaduras), sustancias nocivas y microorganismos invasores.
2. 2.- Regulación térmica: a través de Glándulas sudoríparas y vasos
sanguíneos.
3. 3.- Sensibilidad: nervios superficiales y Terminaciones sensitivas.
4. Absorción de radiaciones (U.V).
5. Regula la temperatura corporal.
6. Evita la deshidratación.
7. Vigilancia inmunológica (S.A.L.T)
8. Percepción sensorial.
9. Síntesis de vitamina D

La piel envuelve estructuras orgánicas (tejidos y Órganos) y sustancias


vitales (líquidos). Es el Órgano mayor del cuerpo, y está formada por:

a) Epidermis: capa superficial de células. La epidermis, en los


vertebrados, es la capa externa de la piel, un epitelio escamoso
estratificado, compuesto de queratinocitos que proliferan en su base
y se diferencian progresivamente, a medida que son empujados
hacia el exterior. La epidermis es la barrera más importante del
cuerpo al ambiente externo hostil. En los humanos, su grosor varía
desde un mínimo de 0,1 mm en los párpados, a un máximo de 1,5
mm en las palmas de las manos y en las plantas de los pies. Su origen
embrionario es ectodérmico.

Consta de cinco estratos de células (queratinocitos) • Estrato córneo •


Estrato Lúcido (no se observa) • Estrato granuloso • Estrato espinoso •
Estrato basal o germinativo - Membrana Basal

b) Dermis: capa profunda de tejido conjuntivo. La dermis es la capa de la


piel situada bajo la epidermis y firmemente conectada a ella. La cara
interna de la membrana basal de la epidermis se le une a la dermis, origen
embriológico del mesodermo, Está integrada por - Estrato papilar (tejido
conjuntivo laxo) - Estrato reticular (tejido conjuntivo denso).

Desempeña una función protectora, representa la segunda línea de


defensa contra los traumatismos (su grosor es entre 20 y 30 veces mayor
que el de la epidermis). Las capas profundas de la dermis contienen
folículos pilosos con sus músculos lisos erectores de pelo, y glándulas
sebáceas. Otra de sus funciones es la de nutrir a la epidermis, ya que esta
capa carece de capilares sanguíneos por lo que depende de la irrigación
sanguínea de la dermis. Función termorreguladora: la irrigación de la
dermis puede contraerse por vasoconstricción si hace frío y expandirse por
vasodilatación si hace calor

c) hipodermis es, a la vez, la capa más gruesa y más profunda de la


piel. Origen embriológico: Mesodermo • Está constituida por - Tejido
conjuntivo laxo y - Tejido adiposo (panículo adiposo).

Está situada debajo de la dermis (segunda capa de la piel), que se


sitúa, ella misma, debajo de la epidermis (la capa más superficial de la
piel). La hipodermis está formada por células adipocitos, que se
especializan en el almacenamiento de grasas. Esta capa grasa protege
al organismo del frío exterior. También sirve como reserva energética: en
caso de necesidad las grasas se movilizan y son utilizadas,
principalmente, por los músculos. En el hombre la hipodermis almacena
las grasas principalmente en la zona del vientre. En la mujer se
almacena, sobretodo, a nivel de Los glúteos y de los muslos.

Las capas profundas de la dermis contienen folículos pilosos con sus


músculos lisos erectores del pelo y glándulas sebáceas.

La contracción de los músculos erectores del pelo explica la erección


capilar. Los folículos pilosos se inclinan a un lado, en el lado donde apunta
el pelo se encuentran varias glándulas sebáceas.

Además la piel contiene muchas glándulas sudoríparas. La evaporación de


agua (sudor) explica el mecanismo termorregulador. La epidermis
avascular se nutre de la dermis vascularizada subyacente. La epidermis
carece de vasos sanguíneos y linfáticos, pero esta capa, así como la
dermis, es irrigada por arterias que se extienden hasta el límite entre la
dermis y el tejido subcutáneo, creando un plexo profundo de arterias
anastomosantes. La piel se inerva por terminaciones nerviosas aferentes,
sensibles al tacto, irritación (dolor), temperatura.

La capa profunda de la dermis se compone de un estrato de colágeno y


fibras elásticas entrelazadas. Estas fibras dan el tono a la piel y explican la
fuerza y dureza de la misma. Las líneas de tensión (o de Langer), siguen en
forma longitudinal en los miembros y circunferencial en el cuello y pliegues
articulares (ej. muñeca).
El tejido subcutáneo se compone de tejido conjuntivo laxo y adiposo: este
tejido es un regulador térmico que protege a la piel de las prominencias
Oseas. Situado entre la dermis y la fascia profunda, contiene: glándulas
sudoríparas, vasos sanguíneos, vasos linfáticos, y nervios cutáneos.

La distribución del tejido subcutáneo varía mucho en cada localización,


incluso en la misma persona, (ej. cintura y parte anterior de la pierna),
según género, estado nutricional, etc.

Las líneas de la piel son pequeñas bandas fibrosas en número abundante,


que se extienden por el tejido subcutáneo y unen la superficie profunda de
la dermis a la fascia profunda. Estos ligamentos permiten movilizar la piel
sobre estructuras subyacentes.

Se encuentran más desarrollados en las mamas (ligamentos suspensorios) y


en las palmas y plantas, donde son más cortos.

La fascia profunda es una capa densa y organizada de tejido conjuntivo


que reviste a los músculos. Los grupos musculares de los miembros, se
localizan dentro de compartimentos creados por la fascia profunda, que
los agrupa según su función. Estos pueden contener o dirigir la
propagación de infecciones o tumores. La contracción de los músculos
esqueléticos de los miembros comprime los nervios y junto con las válvulas
venosas mueve la sangre hacia el corazón.

Nervios de la piel: La piel esta inervada por fibras motoras vegetativas


(vasos, glándulas sudoríparas y músculos pilo erectores) y fibras sensoriales
que terminan en los distintos dispositivos sensoriales específicos de la dermis
y epidermis. El la epidermis se encuentran terminaciones libres
intraepiteliales que son receptoras de dolor y alrededor del folículo del pelo
de función táctil. En la dermis existen terminaciones nerviosas
encapsuladas, entre estas están los corpúsculos del tacto de Meissner,
abundantes en pulpejos de los dedos. Labios y mamas (tacto superficial).
Los corpúsculos lamelosos de Vater- Paccini, en membrana interóseas y
espacios periarticulares son mecanoreceptores y responden a estímulos de
presión, de forma ovalada, están constituidos por una serie de membranas
concéntricas que envuelven la zona central donde termina la fibra
nerviosa. Los bulbos de Krause y corpúsculos de Ruffini son específicos para
la discriminación térmica, en la piel de los genitales existen los corpúsculos
genitales, de estructura similar a los corpúsculos de Paccini.
Anexos de la piel:

Los anexos de la piel, también llamados faneras, comprenden los pelos y


las uñas que son modificaciones del epitelio cornificado.

Pelos: Distribuidos por toda la superficie de la piel, excepto las palmas de


las manos, plantas de los pies, glande, labios mayores, menores y ombligo.
Varía en cuanto a longitud y coloración en las diferentes regiones de la piel
que va a depender de factores genéticos, raciales y endocrinos.

Cada pelo tiene una raíz incluida en la piel, y un tallo libre que termina en
el ápex. La raíz presenta una expansión ovoidea, el bulbo del pelo, que
tiene una parte estrecha el cérvix del bulbo y una cavidad que se amolda
sobre la papila del tejido conectivo. La raíz está rodeada por una
invaginación llamada folículo del pelo y por una vaina de tejido conectivo
llamada bolsa del pelo. Consta de tres capas celulares concéntricas, la
medula, que forma un eje central laxo ;el córtex, formado por células
cornificadas alongadas que contienen melanina en cantidades variables y
la cutícula, que consta de una sola capa de células claras. Aplanadas y
cornificadas que se superponen como las tejas de un techo y se llaman
escamas.

Uñas: Son placas de queratina que recubren la parte distal de los dedos.
La uña empieza por la raíz, implantada en un suco de la epidermis,
continua con el cuerpo y termina por el borde libre; el borde oculto
corresponde al borde proximal de la raíz, cubierto por un pliegue cutáneo,
el valle posterior. La lúnula es la porción proximal y blanquecina del
cuerpo, es bien visible en el pulgar y va desapareciendo, cubierta por la
dermis en los últimos dedos mediales.

La matriz de la uña es una porción de la dermis sobre la que se asientan la


raíz y la lúnula. El lecho o lectulus de la uña es una zona epidérmica,
desprovista del estrato corneo, sobre ella se asienta el cuerpo de la uña y
presenta crestas u surcos., el lecho le da adherencia y permite su
deslizamiento. (Crece 0.5 mm por semana), esta ricamente vascularizado,
por lo cual presenta un color. Sobre la parte proximal de la uña el estrato
corneo se prolonga y forma el eponiquio, en la cara inferior del borde libre
al separarse la uña de su lecho se forma un reborde cornificado llamado
hiponiquio. Las uñas constituyen soportes rígidos al pulpejo de los dedos y
ayudan a los mecanismos táctiles.

Glándulas sudoriferas ecrinas: cuya secreción no contiene substancia


propia celular, representa la mayoría de ellas., el olor de la secreción
depende de la acción de las bacterias del sudor. Constan de un largo
tubo único cuya parte secretora esta enrollada sobre si misma en un ovillo
llamada parte terminal. La parte excretora o conducto tiene un trayecto
sinuoso a través de la dermis y epidermis y se abre en la superficie cutánea
a través de un poro sudorifero.

Glándulas sudoriferas apocrinas: cuya secreción contiene una substancia


propia de las células secretantes, se encuentran en la axila, areola, papila
mamaria, labios mayores y región perianal. Son mayores, menos enrolladas
y el conducto es más ancho, producen una secreción más espesa que el
sudor formado por glándulas ecrinas. Están inervadas por fibras del sistema
simpático.

Glándulas sebáceas: son pequeñas glándulas alveolares situadas en la


dermis. La mayoría son glándulas sebáceas de los pelos que situados
adyacentes a ellos, desembocan en los folículos pilosos, otras se abren
directamente en la superficie del cutis, como en el pene, labios mayores,
pálpebras y borde libre de labios orales. Más abundantes en la piel de la
cara y cuero cabelludo, no existen en palmas y plantas. Las células se
cargan de un material oleoso que se vierte a la luz del folículo y sirve como
lubricante para este y el cutis, protegiendo contra la desecación. La
secreción glandular no depende de un control nervioso, esta estimulada
por acción hormonal (andrógenos). Las glándulas sebáceas son frecuentes
sitios de infección leve, produciéndose la espinilla o comedón.
SISTEMA ENDOCRINO

El sistema endocrino o también llamado sistema de glándulas de secreción


interna es el conjunto de órganos y tejidos del organismo, que segregan un
tipo de sustancias llamadas hormonas, que son liberadas al torrente
sanguíneo y regulan algunas de las funciones del cuerpo. Es un sistema de
señales similar al del sistema nervioso, pero en este caso, en lugar de utilizar
impulsos eléctricos a distancia, funciona exclusivamente por medio de
sustancias (señales químicas). Las hormonas regulan muchas funciones en
los organismos, incluyendo entre otras el estado de ánimo, el crecimiento,
la función de los tejidos y el metabolismo, por células especializadas y
glándulas endocrinas. Actúa como una red de comunicación celular que
responde a los estímulos liberando hormonas y es el encargado de diversas
funciones metabólicas del organismo. Los órganos endocrinos también se
denominan glándulas sin conducto o glándulas endocrinas, debido a que
sus secreciones se liberan directamente en el torrente sanguíneo, mientras
que las glándulas exocrinas liberan sus secreciones sobre la superficie
interna o externa de los tejidos cutáneos, la mucosa del estómago o el
revestimiento de los conductos pancreáticos.

Las hormonas secretadas por las glándulas endocrinas regulan el


crecimiento, el desarrollo y las funciones de muchos tejidos, y coordinan los
procesos metabólicos del organismo.

El sistema endocrino está constituido por una serie de glándulas carentes


de ductos. Un conjunto de glándulas que se envían señales químicas
mutuamente son conocidas como un eje; un ejemplo es el eje
hipotalámico-hipofisario-adrenal. Las glándulas más representativas del
sistema endocrino son la hipófisis, la tiroides y la suprarrenal. Las glándulas
endocrinas en general comparten características comunes como la
carencia de conductos, alta irrigación sanguínea y la presencia de
vacuolas intracelulares que almacenan las hormonas. Esto contrasta con
las glándulas exocrinas como las salivales y las del tracto gastrointestinal
que tienen escasa irrigación y poseen un conducto o liberan las sustancias
a una cavidad.

Aparte de las glándulas endocrinas especializadas para tal fin, existen otros
órganos como el riñón, hígado, corazón y las gónadas, que tiene una
función endocrina secundaria. Por ejemplo el riñón segrega hormonas
endocrinas como la eritropoyetina y la renina.
CONCEPTO Y CLASIFICACION DE GLANDULA, HORMONA Y ORGANO
BLANCO.
GLANDULA

Una glándula (del latín glandem 'bellota' y ulam 'pequeño') es un conjunto


de células cuya función es sintetizar sustancias químicas, como las
hormonas, para liberarlas, a menudo en la corriente sanguínea y en el
interior de una cavidad corporal o su superficie exterior. Estas sustancias
pueden ser mensajeros químicos que se incorporan al organismo para
llegar a la célula a la que está destinada, según su característica especial,
o producir directamente un efecto específico en el medio al que son
secretadas.
Clasificación
Las glándulas se dividen en tres grupos:

Endocrinas - Se llaman también glándulas cerradas. Carecen de conducto


y vierten su secreción en los capilares que rodean las glándulas.

Mixtas - Son glándulas que en su estructura producen, tanto productos que


son secretados al exterior como al conducto sanguíneo.

Exocrinas - También llamadas glándulas abiertas. Secretan sus productos a


un tubo excretor que secreta su producto tanto sobre la superficie como
hacia la luz de un órgano hueco. Este tipo de glándulas se dividen en tres
grupos de acuerdo a sus mecanismos diferentes para descargar sus
productos secretados:

Apocrinas - parte de las células corporales se pierden durante la secreción.


El término glándula apocrina se usa con frecuencia para referirse a las
glándulas sudoríparas. Aun así, las glándulas sudoríparas apocrinas, cuyo
nombre procede de la antigua creencia de su tipo de secreción, tienen
una secreción merocrina que fue comprobada gracias a los estudios con
el MET.
Holocrinas - toda la célula se desintegra para excretar su contenido, como
en las glándulas sebáceas que se encuentran en el corion de la piel.

Merocrinas - las células secretan sus sustancias por exocitosis, como en las
glándulas mucosas y serosas.
Subdivisión

También se dividen en unicelulares y pluricelulares según su número de


células:

Unicelulares - Células individuales que se encuentran distribuidas entre


células no secretoras. Un ejemplo son las células caliciformes.

Pluricelulares - Compuestas por más de una célula, se pueden diferenciar


entre la disposición de las células secretoras y si hay o no ramificación de
los conductos secretores.

El tipo de producto secretor de una glándula exocrina puede dividirse


también en tres clases:
Seroso - producto acuoso a menudo rico en proteínas.
Mucoso - producto viscoso rico en carbohidratos, como las glucoproteínas.
Sebáceo - producto lípido.
HORMONAS

Das könnte Ihnen auch gefallen