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RECUPERACIÓN MEJORADA EN AMERICA LATINA

AN OIL PUMP JACK PUMPS OIL IN A FIELD NEAR CALGARY, ALBERTA, JULY 21, 2014. PUMP JACKS ARE USED TO PUMP CRUDE OIL OUT OF
THE GROUND AFTER AN OIL WELL HAS BEEN DRILLED. REUTERS/TODD KOROL (CANADA - TAGS: BUSINESS ENERGY ENVIRONMENT) -
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Las reservas probadas de petróleo a nivel mundial ascendieron a 1,65 billones de barriles en el año
2014, casi 180.000 millones de barriles más que en el año 2011, según los datos de la Administración
de Energía de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés). Y, la gran mayoría de este aumento se
debió al incremento de las reservas disponibles en campos ya operados y no a nuevos grandes
descubrimientos.

Según la Asociación de la Industria Hidrocarburera de Ecuador, hasta la década de 1960 la producción


de petróleo y gas en campos nuevos representaba entre el 50 por ciento y el 60 por ciento de la
producción total. Este porcentaje se ha reducido a entre el 12 y el 15 por ciento actualmente y será,
según las previsiones de esta asociación, de entre el 7 y el 10 por ciento en el “futuro cercano”.

De hecho, según las proyecciones de la compañía Exxon Mobil los nuevos descubrimientos aportarán
este año más de 5.000 millones de barriles a las reservas mundiales, pero no se volverá a alcanzar esta
cifra –la más baja de la serie histórica que comienza en 1930- en los próximos años.

Estos datos son una muestra de la situación en la que se encuentran muchos de los países petroleros.
Como apuntaba la consultora Ernst&Young, “no es un secreto que la era del petróleo fácil está llegando
a su fin”, y por ello, las técnicas de recuperación mejorada (EOR, por sus siglas en inglés) son
consideradas hoy en día como una de las claves para que la industria pueda mejorar el factor de
recuperación, que mide el porcentaje de petróleo que es recuperable en un campo –ver gráfico 1-.

Estimaciones de la consultora apuntan a que un incremento del factor de recuperación mejorada en


uno por ciento supondría sumar más de 88.000 millones de barriles a las reservas mundiales de
petróleo, lo que es más de tres de veces la producción mundial actual anual. Estas cifras cobran mayor
importancia en un escenario como el presente, en el que las cotizaciones del crudo hacen que muchos
proyectos de exploración y explotación no sean viables comercialmente.

Según la Agencia Internacional de la Energía (IAE, por sus siglas en inglés), los proyectos en los que ya
se están utilizando las técnicas de recuperación mejorada darán acceso a más de 300 millones de
toneladas de petróleo en el año 2030. Y han sido las responsables del 70 por ciento del aumento de
las reservas probadas desde el año 2000.

Apuesta decidida

Dadas estas cifras no es de extrañar que en todos los países petroleros se esté trabajando con técnicas
de EOR para alargar la vida útil de los principales campos petroleros. Latinoamérica no es ajena a esta
tendencia, y afecta a los principales países con recursos de hidrocarburos de la región: desde México
a Argentina, que llevan años haciendo esfuerzos por atraer la inversión extranjera a sus campos
maduros, pasando por Colombia, que se enfrenta al reto de mantener la producción en un millón de
barriles diarios sin que hayan tenido lugar grandes descubrimientos en los últimos años; hasta
Venezuela, Ecuador y Brasil (ver gráfico 2) están trabajando en la aplicación de distintas técnicas de
EOR en las cuencas que hoy en día están reduciendo su producción.
Uno de los primeros países que apostó por las técnicas de recuperación terciaria con más fuerza en los
últimos años fue México. Precisamente, la petrolera estatal Pemex lleva desde el año 2011 intentando
abrir el mercado a la inversión extranjera mediante contratos basados en incentivos sobre la
producción de campos maduros.

En ese proceso se adjudicaron siete bloques en campos maduros con los que Pemex espera sumar
125.000 barriles a su producción. De momento, la compañía Petrofac ha agregado 4.000 barriles en
los dos campos que se adjudicó.

UN AUMENTO DEL UNO POR CIENTO EN EL FACTOR DE RECUPERACIÓN SUMARÍA 88.000 MILLONES
DE BARRILES A LAS RESERVAS MUNDIALES

El objetivo de México con el uso de técnicas de EOR se centraría en el campo de Cantarell, que llegó a
ser el segundo mayor del mundo. La Comisión Nacional de Hidrocarburos calcula que el uso de nuevas
técnicas de recuperación mejorada podría sumar cerca de un millón de barriles a la producción del
país. Aunque Pemex ya ha utilizado técnicas de EOR, paralizó los planes para Cantarell durante el
proceso de diseño y aprobación de la Reforma Energética, pero podría recuperarse una vez finalice la
Ronda Uno.

Argentina, que aprobó en el cuarto trimestre de 2014 su nueva Ley de Hidrocaburos, no sólo está
poniendo los esfuerzos en el desarrollo de los recursos no convencionales de Vaca Muerta. De hecho,
el contrato firmado con Chevron, por un total de 1.500 millones de dólares, incluye un conjunto de
iniciativas para el uso de técnicas de EOR. Y, tanto YPF como PAE siguen trabajando en el campo de
San Jorge, considerado de los mayores del país.

Uno de los países que ve un mayor potencial en las técnicas de recuperación mejorada es Colombia.
Ni Ecopetrol ni las compañías con contratos en el país han realizado ningún descubrimiento de
hidrocarburos destacable en los últimos años. Aunque el país quiere atraer la inversión hacia su
potencial –aún por probar- en recursos offshore y no convencionales, si quiere mantener el nivel de
producción en el millón de barriles diarios, tendrá que apostar por la recuperación terciaria.

Entre los planes de Ecopetrol se encuentra invertir hasta 75.000 millones de dólares en el periodo
2013-2020 en técnicas de EOR en las cuencas de Llanos y Magdalena. Y conseguir que en los 280
campos en los que pretende poner a prueba distintas tecnologías se produzcan entre 840.000 y
870.000 barriles diarios dentro de cinco años.

Sin embargo, la aplicación de técnicas de EOR sufrieron un duro revés en el verano de 2014, cuando
Ecopetrol y Pacific Rubiales –el mayor operador privado en el país- decidieron suspender el proyecto
STAR, que pretendía aplicarse en la recuperación de crudo pesado en el campo de Quifa SW.

Poco después de la cancelación de este proyecto, Ecopetrol y Occidental Petroleum lanzaron un


proyecto de EOR en el campo de crudo pesado Teca-Cocorná, con el que, a través de la inyección de
vapor, esperan lograr que las tasas de recuperación alcancen hasta el 60 por ciento.

En Ecuador, varias empresas como Schlumberger –líder del sector con una facturación en América
Latina de 7.700 millones de dólares-, Sertecpet, Tecpetrol o Canacol Energy ya están utilizando técnicas
de recuperación mejorada en los campos de Sushufindi y Libertador.

ECOPETROL INVERTIRÁ 75.000 MILLONES EN TÉCNICAS DE EOR HASTA 2020 EN DOS DE LAS
CUENCAS COLOMBIANAS

Las petroleras anteriores fueron algunas de las firmas –junto a Halliburton, Sincopec, YPF, KKR o
Sinopec- que participaron en las diez ofertas de licitación para 17 campos maduros que Petroamazonas
realizó a principios de 2014. La compañía estatal ecuatoriana sigue haciendo esfuerzos por atraer
inversiones hacia sus campos maduros.

El último acuerdo firmado, con Belorusneft, se centrará precisamente en la aplicación de técnicas de


recuperación mejorada en varios bloques de la selva ecuatoriana.

Los grandes productores de Latinoamérica

Para Venezuela, cuyo crudo es mayoritariamente pesado, las técnicas de EOR cobran especial
relevancia. Según declara la propia compañía estatal, Pdvsa, “durante los años de inicio de la industria
petrolera, debido a los escasos conocimientos que se tenían del subsuelo, se extraía petróleo sin
control hasta llegar a agotar los mecanismos de producción primaria por flujo natural y por
levantamiento artificial. Luego eran abandonados los pozos y el campo petrolero”.

Sin embargo, la aplicación de técnicas de recuperación mejorada, en especial la inyección de calor con
agua caliente, ha hecho posible un “sustancioso aumento de la recuperación”.

De hecho, las reservas de Venezuela han pasado de los 211.170 millones de barriles en el año 2010 a
los 298.350 millones de barriles de este año, según datos de la EIA.

Venezuela fue uno de los países pioneros en la utilización de técnicas de inyección de vapor y gas para
la recuperación mejorada de petróleo en el área del lago de Maracaibo. Y, ahora, la petrolera estatal
venezolana está a punto de cerrar el acuerdo para que Ancap –la estatal uruguaya- y Venro comiencen
a explotar nuevos campos maduros. El acuerdo está a falta de que en la alianza entrara una petrolera
privada –en este caso sería Venno.

El acuerdo posibilitará que se reanuden los trabajos de extracción en un área con cientos de pozos con
capacidad para producir entre 2.000 y 3.000 barriles diarios. Sin embargo, las petroleras pretenden
triplicar o cuadriplicar esta capacidad de producción gracias a la utilización de técnicas de EOR.

Brasil, por su parte, se ha centrado en el desarrollo de los recursos offshore del Presal. Sin embargo, la
evolución esperada para la producción petrolera del país se ha visto afectada por la disminución en los
campos maduros.

En el campo Marlin, por ejemplo, la producción de petróleo ha descendido desde los casi 60.000
barriles diario del año 2002 a menos de 20.000 barriles. Y lo mismo ha ocurrido en la producción de
gas, que ha caído más de un 66 por ciento desde el máximo que se alcanzó en 2002.

A pesar del potencial y los nuevos descubrimientos de hidrocarburos en el Presal, en 2014, Petrobras
firmó un contrato con la firma de servicios de análisis SAS para implementar modelos estadísticos y de
análisis de datos con el objetivo de “maximizar la ubicación de pozos y extender la vida de los campos
maduros para mejorar la rentabilidad de la compañía en proyectos como la producción en tierra
firme”, indican desde SAS.

Tanto Halliburton como la división de Oil and Gas de General Electric han establecidos centros
tecnológicos en Río de Janeiro para mejorar las tecnologías de recuperación mejorada, viendo las
posibilidades de desarrollo en este área.

Fuera de Latinoamérica, los países están haciendo también grandes esfuerzos por alargar la vida de los
campos maduros. Desde Rusia hasta Oriente Medio, las compañías están aplicando técnicas para
mejorar los factores de recuperación. Bakken, en Estados Unidos, es uno de los campos en los que se
están poniendo a prueba distintas técnicas de recuperación mejorada y de fracturación hidráulica.

Retos y oportunidades

La producción total de petróleo en el mundo mediante técnicas de EOR se ha mantenido relativamente


estable en los últimos años en niveles por encima de los tres millones de barriles de petróleo al día. De
ellos, casi dos millones de barriles se producen con métodos térmicos que, junto a los procesos de
inyección de gas y los procesos químicos y físicos, conforman la oferta global de técnicas de
recuperación mejorada (ver gráfico 3).
La combinación de técnicas de recuperación mejorada con otras técnicas de perforación, como
el fracking o la perforación horizontal, han dado una nueva perspectiva a campos que habían sido
descartados por su bajo rendimiento. Tanto la perforación horizontal como el fracking han permitido
el acceso a formaciones rocosas dentro de campos maduros que, junto a las distintas técnicas de EOR,
han hecho que las compañías vuelvan a prestarles la atención.

Si bien los métodos térmicos siguen siendo los más utilizados para reducir la viscosidad del petróleo,
los procesos de inyección de gas y los químicos y físicos han ido ganando terreno.

Por ejemplo, la inyección de CO2 en las cuencas de Uinta y Powder River aumentó un 23 por ciento
entre los años 2010 y 2013, según los datos de la EIA. Sin embargo el desarrollo de las técnicas que
usan dióxido de carbono dependerá, como la de cualquier nueva tecnología, del precio del barril.

Según la EIA, el uso de técnicas de EOR de CO2 incrementa el coste del barril entre 20 y 30 dólares. Así,
en un escenario de precios bajos como el actual la Administración de Energía de Estados Unidos
considera que la producción con esta técnica no superará los 480.000 barriles al día en el año 2040.

De recuperarse la cotización del WTI a 100 dólares, la EIA pronostica que el 10 por ciento de la
producción de Estados Unidos se podría lograr gracias a estas técnicas.

El coste es el principal desafío al que se enfrentan las técnicas de recuperación mejorada, pero no es
el único. La industria, con las principales petroleras internacionales entrando con fuerza en esta
actividad, debe superar desde preocupaciones medioambientales hasta la reducción de los gastos de
capital que realizarán las empresas del sector debido a los bajos precios del petróleo; y con ello, tener
que hacer frente a otras actividades para captar recursos para el desarrollo de investigación y
desarrollo.

En el lado opuesto, las tensiones geopolíticas pueden resultar un estímulo para su desarrollo. El
objetivo de reducir la dependencia energética del exterior de algunos de los principales países
productores llevará a que las petroleras estatales apuesten por poder sacar el máximo partido y alargar
la vida útil de sus campos petroleros.
Ecopetrol desarrolla con éxito 19 proyectos de recobro de petróleo

Con el recobro mejorado las empresas petroleras del país no solo buscan aumentar
en el 2017 la producción y rentabilidad de sus campos, sino de paso incrementar el
número de barriles en las reservas de crudo.

Es decir, que a través de este proceso con tecnología de punta se pretende que
para el presente año la operación petrolera convirtiera en probadas, las reservas que
hoy registra como probables y posibles.

Solo Ecopetrol ha demostrado con sus proyectos que hay un amplio espacio para
recuperar crudo.

De hecho, la petrolera colombiana priorizó el año anterior 25 potenciales proyectos


de expansión en distintas regiones, 16 de recobro secundario mediante inyección de
agua y 9 de recobro terciario con inyección de agua mejorada.

A la fecha, 19 pilotos muestran resultados en producción, en el magdalena medio


hay nueve, en el Meta cinco y en el Huila, están los otros cinco, señaló el vocero de
Ecopetrol.

Se destacan los pilotos de inyección de agua en Castilla y Chichimene.


Este último ha permitido estimar un aporte adicional de reservas de 2,8 millones de
barriles. Por su parte Castilla buscaría incorporar 4,7 millones de barriles.
Por recobro mejorado, entre el año 2010 y el 2016 Ecopetrol ha incorporado 216
millones de barriles en reservas probadas.

En la tarea se han invertido US$320 millones en pilotos para incrementar el factor de


recobro.

Sin embargo, Ecopetrol no es la única que ha incursionado en el terreno de la


recuperación empresas como Ecopetrol, Occidental de Colombia, Mansarovar,
Pacific, Hocol y Equion desarrollan o se encuentran en etapa de inicio de procesos
de recobro mejorado.

En varios escenarios, Héctor Manosalva, vicepresidente de Desarrollo y Producción


de Ecopetrol, no solo ha señalado que el recobro promedio del país esta en un 19%,
sino que además el 88% de los campos se encuentran produciendo en etapa
primaria, el 11% en secundaria y el 1% en terciaria.

GRANDES EXPECTATIVAS

El ingeniero de petróleos y asesor de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH),


Carlos Gómez, en diálogo con Portafolio (mayo 2016) explicó que con la técnica del
recobro se permitirá que en los próximos cinco a ocho años el país pueda añadir a
sus reservas cerca de 2.500 millones de barriles adicionales,incluso de cumplir con
la meta de producción del millón de barriles diarios.
Se estima que en Colombia existen más de 53.000 millones de barriles de petróleo
de reserva, de los cuales solo se han recuperado el 17%.

Eventualmente todos los campos tienen recobro adicional, pero en muchos casos no
se justifica por cuestiones tecnológicas y económicas. En el país, con un precio del
barril entre US$55 y US$60 permitiría continuar con los pilotos que se llevan a cabo
en diferentes campos.

El PROYECTO ECOPETROL

En la última década, Ecopetrol ha adelantado estudios de inyección de agua, gas y


agua mejorada y recobro térmico en cerca de los 30 campos más importantes del
país.
La petrolera colombiana ha venido desarrollando un programa para incrementar el
factor de recobro y por esta vía agregar cerca de 1.200 millones de barriles de
reservas al 2020.

En la actualidad el factor de recobro promedio de los campos de Ecopetrol es del


19%, frente al 35% promedio de otros países.

“El recobro es un tema que ha tenido impulso en los últimos años pero que no es
nuevo en Colombia, ya que desde hace mucho tiempo la mayoría de los campos
petroleros del país han sido desarrollados con el método de recobro primario y
algunos con recuperación secundaria”, explicó un vocero de Ecopetrol a Portafolio.
(Ecopetrol 2017)

Recuperación mejorada en un yacimiento de alta complejidad estratigráfica:


Campo Casabe (2015 Ecopetrol)

El Campo Casabe se encuentra bajo un sistema de recuperación secundaria por


inyección de agua desde hace más de 30 años. Sin embargo, a través del tiempo se
requiere la implementación de un mejoramiento en la condición de la eficiencia de
barrido. Con la aplicación de un sistema que complemente la adecuación del agua
en superficie se busca mejorar la eficiencia de barrido al disminuir la diferencia de
movilidades entre el petróleo y el agua inyectada, produciendo de esta manera
mayor arrastre de petróleo remanente. Debido a la gran diferencia de movilidad
entre el aceite y el agua en Casabe (M ~ 25), la madurez del proyecto de
recuperación secundaria y la compleja estratigrafía del campo, varios problemas
operativos han surgido, tales como el aumento del corte de agua, ocurrencia de
influjos, aumento del volumen de arena producida, entre otros. Esos problemas son
cada vez más limitantes para la continuación de la inyección de agua convencional
en el campo. Lo expuesto anteriormente sumado a las reservas del campo, hizo que
Ecopetrol iniciara en el año 2014 las pruebas y evaluaciones para la aplicación de
métodos EOR (Enhanced Oil Recovery por sus siglas en Ingles). El piloto involucra
la inyección de agua mejorada en un patrón correspondiente al bloque VI del Campo
Casabe y los objetivos principales que se persiguen con la ejecución de este piloto
son los siguientes.  Estimar el potencial de recursos recuperables y el factor de
recobro incremental de petróleo que se podría lograr mediante la aplicación de
métodos de recuperación mejorada (IOR/EOR) en el campo Casabe  Desarrollar
nuevas tecnologías específicas y conocimientos sobre recuperación mejorada
IOR/EOR que contribuyan a lograr los objetivos delineados, probando su
aplicabilidad en el campo mediante pruebas piloto para luego escalar a nivel de
campo y propiciar su extensión a campos similares a Casabe. En este trabajo se
muestran los desafíos, la metodología de selección y resultados exitosos de la
aplicación de inyección de polímeros en un yacimiento de alta complejidad
estratigráfica y considerables problemas operativos.

El campo Casabe es un yacimiento altamente estratificado, compuesto por 3


formaciones (Colorado, Mugrosa y La Paz), las

Cuales a su vez se subdividen en 26 tipos de formaciones diferentes agrupadas en


Arenas A, B y C.

Alta incidencia de canalización y producción de influjos en pozos productores.

Inestabilidad en las presiones de inyección a nivel de arenas (diferencial de


gradientes de presión).

Producción en commingled.

Alta relación de movilidad (alrededor de M=25).

Variación de propiedades petrofísicas considerable.

Alta producción de arena y finos de formación.

Otro

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