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Artículos de revisión

Historia de los trastornos afectivos


Rogelio Luque1
Germán E. Berrios2

Resumen

El grupo de los denominados “trastornos afectivos” surge de la convergencia, ocurrida al


inicio del siglo XX, de ciertos términos (afecto y sus derivados), conceptos (nociones teóricas
sobre las experiencias relacionadas con el estado de ánimo) y conductas (cambios observables
en el discurso y la acción). La propia palabra afectivo tiene una dilatada e ilustre historia, y
forma parte de una “panoplia” de vocablos como emoción, pasión, sentimiento, ánimo, afecto,
distimia, ciclotimia o disforia, que denominan experiencias subjetivas superpuestas con eti-
mología y origen diferentes. Por una serie de razones históricas e ideológicas, la semiología
de la afectividad no alcanzó el mismo desarrollo que las funciones intelectuales. A lo largo
del siglo, las nociones predecimonónicas de manía y de melancolía se transformaron en los
nuevos conceptos de manía y depresión y se asociaron en los estados combinados (locura
alternante, circular, periódica, doble forma). Este proceso culminó con la integración de todos
los estados afectivos en la locura maniaco-depresiva de Kraepelin. Finalmente, este concepto
extenso se fue fragmentando por los trabajos, entre otros, de Wernicke, Kleist, Leonhard,
y culminó en la propuesta de Angst y Perris de separar la depresión unipolar del trastorno
bipolar, aceptada desde 1980 por el DSM-III.

Palabras clave: Trastornos psicóticos afectivos, historia de la medicina, trastorno bipolar,


trastorno depresivo, depresión,.

Title: History of Affective Disorders.

Abstract

The group of conditions called ‘affective disorders’ resulted from the convergence of certain
words, concepts, and behaviors that took place during the early part of the twentieth century.
The word ‘affective’ has itself a long and noble history and is part of a panoply of terms which
include emotion, passion, sentiment, feeling, mood, dysthymia, cyclothymia, etc. Although
these terms name overlapping subjective states, each has a different history and etymology.
The semiology of affect disorders has never achieved the richness of the psychopathology of
perception and cognition. This resulted from a long-term neglect and also from the obscurity
of the subject matter itself. Our current notions of depression and mania date from the se-
cond half of the nineteenth century and emerged from the transformation of the old notions

Profesor titular de Psiquiatría. Universidad de Córdoba, España.


1

Emeritus Professor of the Epistemology of Psychiatry. Universidad de Cambridge, Reino


2

Unido.

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Historia de los trastornos afectivos

of melancholia and mania. The new clinical está del todo claro si todos ellos se
versions of them combined the new concept refieren a una función mental unitaria
of alternating, periodic, circular, or double
o a una combinación de funciones.
form insanity. This process culminated with
Kraepelin’s concept of ‘manic-depressive in- En general, se ha distinguido el
sanity’ which included most forms of affective sentimiento, la emoción y la pasión,
disorder under the same umbrella. Finally, del ánimo y el afecto, por criterios
the overinclusive kraepelinian concept was como la duración, la intensidad, el
fragmented by the works of Wernicke, Kleist,
insight, la polaridad, la relevancia,
and Leonhard, capped with the proposal of
Angst and Perris to differentiate between la asociación con un objeto interno o
unipolar and bipolar psychoses, accepted externo, las sensaciones corporales
since 1980 by the DSM-III. y la motivación (3,4).

Key words: Affective disorder, psychotic; his-


Semiología de la afectividad
tory of medicine; bipolar disorder; depressive
disorder; depression,
La semiología de los trastornos
afectivos siempre ha sido consi-
Introducción derada el “pariente pobre” de la
psicopatología descriptiva (4), y,
en consecuencia, durante el siglo
El grupo de los denominados XIX no tuvo el mismo desarrollo
“trastornos afectivos” surge de la con- ni alcanzó la misma riqueza des-
vergencia, ocurrida al inicio del siglo criptiva de la psicopatología de la
XX, de determinados términos (“afec- percepción o el pensamiento. Tam-
to” y sus derivados), conceptos (no- poco sus síntomas sobresalieron en
ciones teóricas sobre las experiencias las definiciones de los trastornos
relacionadas con el estado de ánimo) mentales. Este menor progreso se
y conductas (cambios observables en debió al reinado de la razón en la
el discurso y la acción asociados con cultura occidental, donde se eri-
la neurobiología de estos trastornos, gió en la característica humana
sea la que fuere) (1-3). Cada uno de determinante.
estos elementos tiene una historia Desde la época clásica, las pa-
diferente y una evolución asincró- siones se han contemplado como el
nica. La propia palabra “afectivo” lado oscuro e inferior del hombre,
(como término operativo) posee una y han desempeñado un papel se-
dilatada e ilustre historia, y forma cundario en la definición de la na-
parte de una panoplia de vocablos, turaleza humana. Aunque durante
como emoción, pasión, sentimiento, el siglo XVIII, por la influencia del
ánimo, afecto, distimia, ciclotimia o movimiento romántico, se produjo
disforia, que denominan experien- una exaltación de las emociones,
cias subjetivas superpuestas, con esto no supuso el abandono de la
diferentes etimología y origen. No racionalidad, sino que, en todo caso,

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el pensamiento característico del Manía antes de 1800


siglo XVIII consistió en la combina-
ción de “lo racional y lo emocional” En la época clásica, manía era
(5). La consecuencia más reseñable el término general utilizado para
para la psiquiatría fue la hegemo- denominar la “locura”, y se definía
nía de la visión intelectualista de la por la presencia de ira, agresión,
locura hasta tiempos recientes. Sin excitación y pérdida del control. En
embargo, durante la segunda mitad ella se incluían entidades que hoy
del siglo XIX creció el interés por la se identificarían con la excitación
afectividad, como demuestran los catatónica, la intoxicación por drogas
trabajos de Brentano, Janet y Freud. o el delirium. Es poco probable que
Junto con esto, la “naturaleza la manía denominara la euforia, la
elusiva de los sentimientos” dificulta hiperactividad o la megalomanía.
la definición de los componentes vi- Este significado de la manía como
venciales y conductuales de términos sinónimo de “locura” permaneció
como “sentimientos”, “emociones”, sin cambios hasta el siglo XVIII. Los
“pasiones”, “humor”, “afecto”. Los ejemplos son diversos. Por ejemplo,
esfuerzos realizados para denomi- William Cullen (7) denomina manía
nar estos fenómenos crearon un a la insania universalis (mentalia,
“palimpsesto terminológico” formado corporea, oscura), y en la entrada
por una colección de términos clási- “manía” del Dictionnaire Encyclopé-
cos redefinidos (manía, melancolía dique des Sciences Médicales, redac-
o distimia), junto con otros nuevos tada por Linas (1871), se indica que
(depresión, disforia, ciclotimia, ale- “cualquiera sea su origen, la palabra
xitimia, anhedonia) (3). μανία (manía) fue empleada por mé-
dicos, poetas, oradores e historiadores
Manía y melancolía antes de 1800 griegos para designar la locura y,
particularmente, las formas exaltadas
En la Antigüedad, manía y me- y furiosas de esta enfermedad” (8).
lancolía tenían significados distintos
a los actuales (6). En primer lugar, no La nueva manía: Philippe Pinel
hacían referencia a polos opuestos; es
decir, un estado no se definía contra- La muestra más clara de que
poniendo las características del otro, en 1800 el término manía significa
sino que sus definiciones se basaban “locura”, siendo el mejor ejemplo de
en el análisis del comportamiento: la “locura completa”, se encuentra
motilidad aumentada o disminuida, en Pinel, como refleja el propio título
ira, lentitud. Además, los síntomas del Traité Médico-Philosophique sur
afectivos (tristeza o euforia) no eran l’aliénation mentale ou la manie (9).
definitorios y pertenecían a diferentes La evolución que sufre el concepto de
niveles de organización semántica. manía en las primeras décadas del

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Historia de los trastornos afectivos

siglo XIX se aprecia en las distintas elementales” de Griesinger; y f. la


ediciones del tratado. En la segunda incorporación de las experiencias
edición (1809) ha desaparecido del subjetivas (12).
nombre de la obra el término manía, A mediados de siglo, la manía
que ahora se define como: “La manía, ya se reconoce como un trastorno
el tipo de alienación más frecuente, primario del afecto, como definen
se distingue por una excitación ner- Bucknill y Tuke en su Manual of
viosa o agitación extrema que a veces Psychological Medicine: “[Manía] Qui-
alcanza la furia, y por un delirio ge- zá la forma de enfermedad mental
neral más o menos marcado, a veces más interesante y mejor reconocida
con los juicios más extravagantes, ha sido considerada esencialmente
o incluso con trastorno de todas las como un trastorno del razonamien-
operaciones del entendimiento” (10). to. El Dr. Prichard la clasifica como
Por último, en la Nosographie de insania intelectual. Sin embargo, no-
1818, Pinel clasificó la manie como sotros consideramos que pertenece
uno de los géneros de las vesanies (lo- primariamente al grupo afectivo” (13).
curas), y la definió como: “trastorno A inicios del siglo XX, la manía
de una o de más facultades del en- (14) se definía como una “psicosis
tendimiento, con emociones alegres funcional” caracterizada por: a. ace-
o tristes, extravagantes o furiosas, leración patológica del flujo de ideas;
y, en ciertos casos, nula alteración b. inquietud motora; y c. ausencia
del pensamiento pero siempre con de síntomas que confirmen una en-
actos de furor”, reconociendo formas fermedad orgánica del cerebro. Al
delirantes y no delirantes (11). mismo tiempo, Mendel identificaba
Los factores que influyeron en el cuatro etapas: 1. inicial; 2. exaltación;
cambio conceptual de la manía fue- 3. furor; 4. declive; y cuatro subtipos:
ron: a. la “manía” era una categoría 1. hipomanía; 2. recurrente; 3. gravis;
demasiado amplia y general; b. el 4. periódica. Entre los síntomas de la
concepto de locura parcial reemplazó manía señalaba las alucinaciones, la
al de locura total; c. bajo la influencia anomalía del pensamiento, los deli-
de la psicología de las facultades, las rios, la confusión, la hipermnesia, la
“insanias emocionales” se organiza- hiperactividad y la pérdida de peso.
ron como grupo autónomo, como En resumen, durante el siglo XIX,
síndrome organizado alrededor de los el concepto de manía se fue compri-
síntomas afectivos y como trastorno miendo hasta quedar definido como
primario del afecto y de la acción; un trastorno del afecto y de la acción.
d. la exclusión de los estados orgá-
nicos (parálisis general, tumores, Melancolía
etc.); e. el desarrollo del lenguaje des-
criptivo en psicopatología y creación El concepto predecimonónico
de definiciones estables: “síntomas de melancolía constituía un cajón

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de sastre de distintas insanias, es, simplemente, el sirviente de la


cuyo denominador común era la disposición enferma […] la idée fixe
presencia de un número escaso puede no estar presente, pero la
de delirios. En la práctica, incluía melancolía sigue siendo lo que es:
estados alucinatorios, paranoides la depresión de la actitud, el retrai-
y demencias. Además, la tristeza y miento, el desinterés por el mundo
el ánimo descendido no se consi- exterior” (18).
deraban síntomas definitorios (15). La transformación se aceleró por
Por ejemplo, Robert Burton (16), en una serie de cambios conceptuales,
la Anatomía de la melancolía, men- como el desarrollo de la psicología
cionó la tristeza como síntoma de de las facultades, el nuevo modelo
la melancolía, pero también incluyó anatomoclínico de enfermedad y la
dentro de esta las obsesiones, los inclusión de las experiencias subjeti-
delirios, la conducta suicida y las vas (1,6,12,19). Como consecuencia
quejas hipocondriacas. En realidad, de ellos, la melancolía dejó de ser:
lo que hoy día llamamos “depresión a. un subtipo de la manía; b. un
mayor” no se hubiese considerado trastorno primario del intelecto; y
entonces “melancolía”, como apunta c. irreversible. Lo que resultó fue una
John Haslam: “La melancolía, la forma de “locura parcial”, definida
otra forma en que supuestamente como un trastorno primario de las
existe esta enfermedad (la locura), emociones, cuyas características
consiste para Ferriar, en la ‘inten- reflejaban un estado general de pér-
sidad de una idea’. Por ‘intensidad dida, inhibición, reducción y declive.
de una idea’, supongo que quiere Al igual que ocurrió con la ma-
decir que la mente se queda clavada nía, Pinel (10) fue el último de los
con más fuerza en un conjunto de grandes alienistas que consideró
ideas, o que recurre a éstas con más la melancolía en el antiguo sentido
frecuencia que cuando se encuentra clásico. Así, la definió como una lo-
en un estado de salud” (17). cura caracterizada por un número
Hacia 1820, esta visión am- circunscrito de delirios (délire exclu-
plia de la melancolía iba a cambiar. sif) y unos márgenes amplios, que
Bajo la influencia del romanticis- contenía todas las formas de psicosis
mo alemán, alienistas como Reil, crónicas, incluida la esquizofrenia:
Griesinger o Heinroth comenzaron
Por lo general la melancolía perma-
a otorgar mayor importancia a los nece estacionaria durante muchos
afectos y a las pasiones en el desa- años, sin que el delirio exclusivo,
rrollo de la enfermedad mental. Por que es su objeto, mude carácter, ni
ejemplo, Heinroth escribe en 1818: haya alteración en lo físico, ni en lo
moral. Se ven locos de esta espe-
“La presencia de una idée fixe no
cie en Bicêtre, hace doce, quince,
significa que la enfermedad sea una veinte, y aun treinta años, siempre
afectación del intelecto; el intelecto entregados a las ideas primitivas

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Historia de los trastornos afectivos

que descubrieron el trastorno de su El término lipemanía también fue


razón […]. Algunos dotados de un criticado. Por ejemplo, Delasiauve
carácter voluble pasan a un estado
(22) pensaba que era demasiado
de manía declarada, solamente por
la costumbre de ver, o de oír a los “elástico […] y aunque menos impre-
locos furiosos o delirantes; otros, al ciso no se diferencia en el contenido
cabo de algunos años sufren una de la antigua palabra melancolía”
revolución interior por causas desco- (22). Con esto, Delasiauve criticaba
nocidas, y un delirio muda de objeto,
que los delirios parciales (vestigio de
o toma una nueva forma. (10)
la vieja concepción intelectualista)
continuasen como criterio defini-
Transformación de la
dor. El autor francés restringió aún
melancolía en la depresión
más la lipemanía: “consiste en una
exageración y persistencia de los
Esquirol y el concepto de lipemanía
sentimientos depresivos” (22).
El punto culminante de la his-
El enfoque de la melancolía como
toria del concepto de lipemanía se
delirio parcial, sin considerar las
alcanzó con el trabajo de Billod (23),
emociones síntomas definitorios,
que propuso una clasificación con
suscitó el rechazó de autores como
cuatro grupos y dieciséis subtipos,
Rush (20), que propuso el término
basada en una detallada psicopato-
“tristimanía”, o Esquirol , que clara-
logía y definida por el tipo de afecto
mente manifestó: “La palabra melan-
colía, empleada en el lenguaje vulgar y los delirios depresivos.
para expresar el estado habitual El término lipemanía solo se utilizó
de tristeza de algunos individuos, en la psiquiatría francesa y española,
debería dejarse a los moralistas y a sin que tuviera repercusión en Alema-
los poetas cuya libre expresión no nia, Austria o Gran Bretaña, países
está sujeta al rigor de la terminología en los que se siguió usando la palabra
médica” (21). “melancolía”. El propio Esquirol señaló
Esquirol acuñó la palabra “lipe- que ambos términos podían utilizarse
manía” precisamente para referirse indistintamente. Hacia el final del siglo
a los estados afectivos primarios: “La XIX, la expresión “depresión mental”
melancolía con delirio o lipemanía fue sustituyendo gradualmente a la
es un delirio parcial, crónico, sin melancolía; esta se limitó, cada vez
fiebre, determinada por una pasión con más frecuencia, para denominar
triste, debilitante u opresiva. Esta un subtipo de depresión psicótica en
enfermedad no debe confundirse la vejez (24).
con la manía, cuyo delirio es general,
con exaltación de las funciones inte- El concepto de depresión
lectuales, ni con la demencia, cuya
incoherencia y confusión de ideas En la anterior cita de Delasiauve
son efecto de la debilidad […]” (21). aparece uno de los primeros usos

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Luque R., Berrios G.

técnicos del término “depresión” en disminución de la actividad gene-


psiquiatría, aunque ya estaba exten- ral, que puede llegar, en lo que se
dido en la medicina cardiovascular de refiere a la actividad exterior, hasta
mediados del siglo XIX para designar su suspensión” (28).
una disminución de las funciones Es posible que los médicos eli-
(12). Usada inicialmente en sentido gieran el término “depresión” frente
analógico como “depresión mental”, a “melancolía” o “lipemanía” porque
posteriormente se abandonó el ad- evocaba una explicación “fisiológica”
jetivo “mental”. En 1860 aparece en (3,12). Por ejemplo, sir William Gull la
diccionarios médicos: “se aplica al adoptó en 1868 en su clásico trabajo
abatimiento anímico de las personas sobre la “hipocondriasis” (29), cuya
que sufren alguna enfermedad” (25). “característica principal es la depre-
Lo sugestivo de esta definición, y que sión mental que ocurre sin ninguna
explicaría su gradual implantación, causa aparente”. Hacia finales del
radica en que sugiere una “dismi- siglo XIX, “depresión” era sinónimo
nución fisiológica y metafórica de la de “melancolía”, y se definía como
emoción cuya capacidad semántica una “enfermedad caracterizada por
permitiría nombrar al síntoma o a el abatimiento del ánimo, la falta de
la enfermedad” (12). De esta forma, valor o de iniciativa y la tendencia
pudieron armonizarse las teorías de a los pensamientos tristes. El sín-
Griesinger (26) sobre las “alteraciones toma se presenta en enfermedades
de los sentimientos” y las descripcio- del sistema nervioso, tales como
nes de la melancolía como tristeza. la neurastenia y, especialmente,
Esto se refleja en la primera la melancolía” (30). Savage, en su
edición del Manuel de Psychiatrie, de Manual, definió la melancolía como:
Régis, donde se definía la depresión “estado de depresión mental, en el
como “el estado opuesto a la excita- que la tristeza es desproporciona-
ción. Consiste en una disminución da tanto en relación con su causa
de la actividad general que va desde aparente como en la peculiar forma
pequeños fallos en la concentración que adopta. El dolor mental depende
a la parálisis total. Esta se traduce de cambios físicos y corporales y no
en una inmovilidad absoluta o es- directamente del ambiente” (31).
tupor” (27). En sucesivas ediciones, Estas tres definiciones consi-
Régis clasifica la depresión dentro deran la depresión como síntoma
del grupo de los trastornos de la (3,6). Kraepelin (32), sin embargo,
actividad general y la define como se refirió a los “estados depresivos”
“la reacción dolorosa pasiva o activa, como una categoría genérica bajo
que traduce el malestar psíquico de la que incluía la melancolía simple,
la melancolía. La reacción dolorosa el estupor, la melancolía gravis, la
pasiva (depresión propiamente dicha) melancolía paranoide, la melancolía
consiste en una actitud triste con fantástica y la melancolía delirante.

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Historia de los trastornos afectivos

No obstante, no existía acuer- excitación con un periodo, general-


do sobre el significado clínico de la mente más largo, de decaimiento
nueva melancolía o depresión (3). La (affaissement)” (40).
presencia de sus síntomas en otras En sucesivas publicaciones, Fal-
locuras se explicó como: 1. etapa ret (41-43) corrigió y amplió el texto,
en el desarrollo de una psicosis así estableció que “la locura circular
unitaria (33); 2. enfermedad inde- se caracteriza pues por la evolución
pendiente, incluida en sí misma o sucesiva y regular del estado ma-
fase de un ciclo junto con la euforia níaco, del estado melancólico y de
y/o el estupor (34); 3. desarrollo un intervalo lúcido más o menos
de la personalidad del sujeto (35); prolongado […]. Llamaremos acceso
y 4. expresión de una ascendencia de locura circular a la reunión de los
degenerada (36,37). En la octava tres períodos en los que la sucesión
edición de su Tratado, Kraepelin forma un círculo completo”. “Los tres
cortó el nudo gordiano y creó una períodos son: 1º el estado maníaco,
amplia categoría (la locura maniaco 2º el estado depresivo, 3º el intervalo
depresiva), que contenía todas las lúcido” (43).
formas de depresión (incluida la Por su parte, en enero de 1854,
melancolía involutiva) y de la manía. Jules Baillarger dictó ante la Aca-
démie de Médicine una conferencia
Falret, Baillarger y los estados documentada sobre siete casos de
combinados lo que llamó “folie à doublé forme”,
consistente en la “sucesión de dos
La áspera controversia entre periodos regulares, uno de depresión
Jean Pierre Falret y Jules Baillarger y el otro de excitación” (34). En las
sobre el “nacimiento de la locura sesiones siguientes de la Academia,
circular” está magníficamente des- Baillarger acusó a Falret de plagio,
crita por Pierre Pichot (38,39). En acusación que mantuvo de forma
julio de 1850, Jean Pierre Falret vehemente hasta veinte años después
pronunció en el hospital de la Sal- de la muerte de Falret.
pétrière la última de las diez sesio- La cuestión de la prioridad es
nes clínicas semanales dedicadas difícil de resolver y, probablemente,
a la “sintomatología general de las importa poco, ya que, como apuntó
enfermedades mentales”. El texto Ritti (44) en su monografía, la idea
fue publicado en enero de 1851, en de que los pacientes mostraran
la Gazette des Hopitaux, y contenía estados combinados depresivos y
doce líneas en las que mencionaba maniacos no era nueva y llevaba
una “forma especial de locura que tiempo en circulación (3). De hecho,
llamamos circular” (“forme circulaire Falret y Baillarger describían las
de maladie mentale”), caracterizada formas de la enfermedad maniaco-
por la “alternancia de un periodo de depresiva tal como otros autores

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Luque R., Berrios G.

habían hecho previamente y harían las enfermedades del ánimo (que


después. Por ejemplo, Kahlbaum clasificaba en “hipertimia”, “amimia”
(45,46) señaló que el alienista belga y “paratimia”) y distinguirlas de los
Guislain fue el primero en apreciar trastornos de la voluntad (“disbu-
el significado científico de la obser- lias”) y del intelecto (“disnoesias”).
vación clínica de que frecuentemen- En 1859, Flemming, una de las
te los trastornos mentales comen- grandes figuras de la psiquiatría de
zaban con melancolía y después los manicomios alemanes, publicó
cambiaban a manía (47), y que en una obra titulada Patología y terapia
Alemania, Zeller hizo lo propio en de la psicosis (Pathologie und Thera-
1845. De hecho, Kahlbaum señaló pie der Psychosen), que incluía un
que la locura circular (forma de capítulo dedicado a los síndromes
vesania typica para Kahlbaum) primarios de las emociones. Influido
podría llamarse “enfermedad de por la psicología de las facultades,
Guislain y Zeller”. Posteriormente, distinguió las “distimias” (enferme-
Billod (23) acuñó el término folie à dades del ánimo) de las “anoesias”
doublé phase, y Legrand du Saulle (enfermedades del intelecto) y de la
(48) hablaba de folie alterne y folie “manía” (enfermedades del intelecto
a doublé forme. y el ánimo). Dentro de las distimias
En 1880, la Académie de Médi- separó varias formas clínicas (alegre,
cine realizó una convocatoria para jovial, por un lado; triste, pesimista,
discutir sobre “la forma de locura por otro). Para Flemming, la distimia
llamada circular, de doble forma o seguía la tradición de la lipemanía
alternante”, resolver el permanente de Esquirol (52).
debate y escapar de las propuestas Estos autores señalan que, cu-
rígidas de Falret y Baillarger. Antoine riosamente, quince años después,
Ritti (44) recibió el primer premio y Flemming (53) renunció a esta cla-
Mordret (49), el segundo. Las dos sificación y criticó cualquier intentó
monografías aparecieron el mismo clasificatorio basado en este sistema,
año y sentaron las bases conceptua- por considerarlo carente de pro-
les de la locura maniaco-depresiva fundidad científica, y reintrodujo
de Emil Kraepelin. cuatro categorías diagnósticas su-
ficientemente confirmadas por la
Distimia: Stark, Flemming y investigación clínica: dos siguiendo a
Kahlbaum Kahlbaum (catatonía y hebefrenia), y
otras dos derivadas de la psiquiatría
Carl Friedrich Flemming (50) fue francesa (“megalomanía paralítica”
el primer psiquiatra que recuperó la y “locura circular”, esta última sin
antigua palabra “distimia”, aunque mencionar a Falret o a Baillarger).
el patólogo alemán Karl Stark (51) Las ideas de Karl Kahlbaum
la usó previamente para denominar sobre la melancolía y la manía son

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Historia de los trastornos afectivos

imprecisas, ya que las incluyó bajo (46). En esta clasificación destacó la


el término de distimia (3). En 1863, distimia como trastorno primario y
Kahlbaum publicó un libro funda- predominantemente afectivo.
mental sobre la clasificación psiquiá-
trica. Influido por los nosologistas Ciclotimia: Hecker y Kahlbaum
franceses de la primera mitad del
siglo XIX, propuso incorporar la Ewald Hecker (57,58) introdujo
variable “tiempo” en la definición de el término “ciclotimia” por primera
enfermedad mental (54). Esto signifi- vez en el léxico psiquiátrico en un
caba que la observación longitudinal artículo de 1877. Posteriormente,
de los pacientes era la clave para en 1898, publicó un trabajo de diez
definir sus límites (55,56). páginas con una vívida descripción
La original clasificación incluía de las características clínicas de
cuatro grupos: vesania typica, ve- la ciclotimia (59,60), refinando el
sania progressiva, vecordias y dys- trabajo anterior de Kahlbaum (61)
phrenia. El tercer grupo (las vecor- sobre esta entidad.
dias) se definía como trastornos El trabajo de Kahlbaum (61,62)
idiopáticos de la vida mental, de sobre la ciclotimia (basado en una
comienzo después de la pubertad y conferencia) constituye una contri-
con síntomas más o menos especí- bución teórica con la intención de
ficos. A su vez, siguiendo la psico- proponerla como una nueva entidad
logía de las facultades, se dividían nosológica y un desafío a la teoría
en trastornos del intelecto (vecordia imperante de la unidad mental. En
paranoia), trastornos de la volición este sentido, proporciona un sofis-
(vecordia diasthrephia) y trastornos ticado estudio psicopatológico más
del ánimo (vecordia dysthymia). Esta que una rica descripción clínica.
última incluía la dysthymia meläna y Kahlbaum, siguiendo su clasifica-
la elata, según predominara el ánimo ción basada en el curso (estable
triste (vorwalten trauriger affecte) o y variable) y la afectación de las
el exaltado (freudiger affecte). funciones psicológicas (parcial y
Posteriormente, Kahlbaum total), distinguió entre la vesania
(45,46) publicó un trabajo en el typica circularis (trastornos estables
que describe detalladamente los y totales que acaban en el deterioro),
cuatro fundamentos sobre los que de las formas parciales y variables
se reorganizó la nosología psiquiá- sin deterioro, para las que propu-
trica europea: curso de la enfer- so el término ciclotimia: distimia,
medad, extensión de las funciones para el ánimo triste, e hipertimia para
psíquicas implicadas, relación entre el ánimo elevado.
el comienzo de la enfermedad y el El “síndrome de la ciclotimia
periodo biológico vital y la supuesta de Kahlbaum-Hecker” (60), carac-
etiología (primaria o secundaria) terizado por episodios recurrentes

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de depresión o distimia y periodos de Pierre Kahn (64). Deny, que ya había


hipomanía o hipertimia, influyó introducido las ideas de Kraepelin
considerablemente en el concep- sobre la demencia precoz y la locura
to de locura maniaco-depresiva de maniaco-depresiva, tiene una idea
Kraepelin (62). Para Hecker, la ci- bastante amplia de la ciclotimia, ya
clotimia es una entidad nosológica que incluye casos de neurastenia,
definida por los cambios periódicos psicastenia, fobia y obsesión (65).
del ánimo, que oscila entre una Aunque la ciclotimia de Hecker
exaltación moderada y una depresión y Kahlbaum se asemeja al concepto
distímica (60). Las características de trastorno bipolar II, resulta ar-
nucleares son, durante la distimia, tificial acomodarla en los sistemas
la inhibición psíquica sin delirios de clasificación actuales, ya que los
ni alucinaciones, la desesperanza, conceptos diagnósticos constituyen
las quejas somáticas inespecíficas fenómenos culturales que pueden
y, especialmente, la tendencia a la cambiar a lo largo del tiempo (60).
crítica y la reivindicación.
En el estado hipertímico, los Emil Kraepelin y la enfermedad
pacientes presentan un ánimo ele- maniaco depresiva
vado, aceleración del pensamiento,
autoestima exagerada, dispendios Kraepelin, en la sexta edición
económicos, sexualidad aumentada de su Tratado, decidió que la me-
y persistencia de la irritabilidad y la jor forma de resolver el problema
hipercrítica. Generalmente, estas de las distintas categorías era eliminar
oscilaciones anímicas no requieren la distinción entre las formas depre-
la hospitalización psiquiátrica. El sivas y las circulares, e incluir todos
curso es impredecible con distintos los trastornos afectivos en una sola
patrones de duración y periodicidad, entidad nosológica, la locura maniaco
incluyendo lo que hoy se conside- depresiva:
rarían estados mixtos y cicladores
rápidos (60). Hecker, sin embargo, La locura maníaco-depresiva […],
resalta el buen pronóstico general comprende por una parte toda la
locura periódica y la locura circu-
de la ciclotimia (en contraste con la
lar; por otra parte, la manía simple,
parálisis general progresiva o la ve- la gran mayoría de los estados
sania typica circularis de Kahlbaum), patológicos que se describen bajo
y la distingue de otros trastornos la rúbrica de melancolía y también
psiquiátricos, como la melancolía, un número considerable de casos
la histeria o la neurastenia. de amencia. Finalmente, también
incluimos ciertas disposiciones del
Gaston Deny (63) introduce el
humor, ya sean pasajeras o dura-
concepto de ciclotimia en Francia en deras, que se pueden considerar
un trabajo publicado en 1908 y, un como el primer grado de trastornos
año después, en la tesis de su alumno más graves y que, por otra parte,

140 S Rev. Colomb. Psiquiat., vol. 40, Suplemento 2011


Historia de los trastornos afectivos

se funden sin límites estrictos con va realizada por Kraepelin recibió


el conjunto de disposiciones natu- una enérgica oposición por parte
rales del individuo. Con el paso de
de grandes figuras de la psiquiatría
los años he adquirido la convicción,
más férrea cada vez, según la cual europea, que preferían mantener la
todos los tipos clínicos enumerados melancolía como categoría indepen-
arriba no son otra cosa que mani- diente. Este fue el caso de Chaslin
festaciones de un único proceso (24), en Francia, y de Wernicke (68),
patológico. (32) en Alemania.
En el capítulo dedicado a la
La idea de Kahlbaum sobre la melancolía de sus Élements de sé-
importancia de la dimensión tempo- miologie et clinique mentales, Philippe
ral en la definición de la enfermedad
Chaslin dejaba claro: “la melancolía
mental influyó en el pensamiento de
es un tipo clínico al cual, en este
Kraepelin sobre la clasificación en
momento, bajo la influencia de las
psiquiatría (66). La propuesta de la
ideas teóricas de Kraepelin, muchos
existencia de una enfermedad inde-
autores tienden a negar una exis-
pendiente que abarcara los estados
tencia independiente de la locura
depresivos y maniacos no fue una
maníaco-depresiva” (24), y distinguía
originalidad de Kraepelin, sino que
cuatro tipos: a. melancolía simple o
recogió lo que ya estaba bien esta-
sin delirio; b. melancolía delirante;
blecido en el mundo psiquiátrico
c. melancolía ansiosa; d. melancolía
de su época. El verdadero aporte
fue agrupar prácticamente todos los con estupor.
trastornos depresivos y maniacos en Carl Wernicke (68) concebía la
una única enfermedad (incluida la enfermedad maniaco-depresiva en
melancolía involutiva, en la octava un sentido similar a Falret y Baillar-
edición) (67). ger. Los episodios aislados o recu-
Curiosamente, aquellos que rrentes de manía o melancolía sin el
aún defienden la visión unitaria viraje de uno a otro son distintos de
de Kraepelin han olvidado que este la enfermedad maniaco-depresiva.
incluyó la amencia, un concepto De este modo, Wernicke distinguió
impreciso descrito por Meynert en cinco tipos de melancolía (afectiva,
1890, dentro de la locura maniaco- depresiva, agitada, atónita e hipo-
depresiva. condriaca) y otros tantos de manía
(pura, paralítica, crónica, agitada).
La oposición a Kraepelin: El pensamiento de Wernicke tuvo
Chaslin, Wernicke, Kleist, continuidad en Karl Kleist y Karl
Leonhard Leonhard. La clasificación de las
psicosis endógenas de Kleist era
La agrupación de todos los muy compleja, ya que distinguía no
trastornos afectivos bajo la noción menos de 21 formas de esquizofrenia
de enfermedad maniaco depresi- y 18 de psicosis fásicas (69).

Rev. Colomb. Psiquiat., vol. 40, Suplemento 2011 141 S


Luque R., Berrios G.

Respecto a las últimas, Kleist (70) euforia puras; y la psicosis maniaco-


sugirió inicialmente que, de forma depresiva y las psicosis cicloides, en
similar a la epilepsia, habría un grupo la segunda.
nuclear (“la enfermedad maniaco- La complejidad de las clasifi-
depresiva como tal”), por un lado, y caciones de Kleist y Leonhard, con
varias “formas atípicas”, llamadas sus numerosos subgrupos y dife-
psicosis autóctonas de degeneración, renciaciones, frenó su difusión y el
por el otro. Como ejemplo de estas reconocimiento y la aceptación de
últimas, Kleist se refiere a diferentes la separación unipolar/bipolar (73).
formas: confusión, motilidad, an-
gustia y psicosis hipocondriaca. Sus Las psicosis unipolar y bipolar:
principales características residían Carlo Perris y Jules Angst
en mostrar lo que Kleist llamaba una
“afinidad con la ciclotimia” y “las si- En 1966 aparecieron de forma
militudes en su curso”. Debido a su casi simultánea, aunque realizadas
relación con la demencia circular, independientemente, dos obras que
esas enfermedades “podrían igual- defendían la distinción nosológica
mente llamarse psicosis cicloides”. entre los trastornos unipolar y bipo-
Posteriormente, Kleist (71) deno- lar, y que supondrían un “renacer”
minó “phasophrenias” a un grupo del trastorno bipolar (38,39) e iban
constituido por el trastorno afectivo a cambiar la clasificación de los
unipolar y por el trastorno bipolar, trastornos afectivos (74,75). Jules
que incluía la enfermedad maniaco- Angst, en Suiza, y Carlo Perris, en
depresiva y las psicosis marginales Suecia, partiendo de argumentos
(atípicas, cicloides). genéticos, mantenían la necesidad
Karl Leonhard (72), alumno de de revisar el concepto unitario de la
Kleist, siguió y desarrolló las ideas locura maniaco-depresiva estableci-
de este; así, culminó su nosología en do por Kraepelin. Angst pretendía
una obra de 1957, La clasificación comprobar el dogma kraepeliniano
de las psicosis endógenas. Leonhard de la inespecificidad de la transmi-
defendía un criterio (polaridad) que sión de esta enfermedad, mientras
permitía clasificar las psicosis fásicas que Perris quería confirmar las ideas
en formas puras (síntomas dirigidos de Leonhard (38). Los resultados
al mismo polo) de las formas hete- concordantes obtenidos apoyaban
rogéneas (síntomas que se suceden la existencia, dentro de la psicosis
hacia orientaciones opuestas). De maniaco-depresiva, de tres entidades
esta forma, separó las formas “mo- independientes: dos formas unipo-
nopolares” (maniacas o depresivas) lares (depresiva y maniaca) y una
de la forma “bipolar”, distinguien- bipolar (38). Los pacientes unipo-
do en las primera la melancolía y lares maniacos no se diferenciaban
la manía puras, y la depresión y la genéticamente de los bipolares, lo

142 S Rev. Colomb. Psiquiat., vol. 40, Suplemento 2011


Historia de los trastornos afectivos

que apoyaba que la psicosis bipolar y de manía y melancolía se transforma-


la depresión unipolar son entidades ron en los nuevos conceptos de manía
distintas. y depresión, y cómo se mezclaron
Dos años después, Angst y Perris en los estados combinados (locura
(76) publicaron un artículo conjunto circular, periódica, doble forma).
que comparaba los resultados de sus Este proceso culminó con la integra-
trabajos y distinguía la depresión ción de todos los estados afectivos
unipolar del trastorno bipolar (que en la locura maniaco-depresiva de
incluía la manía unipolar), basán- Kraepelin. Finalmente, esta amplia
dose en las diferencias existentes enfermedad se fue fragmentando por
en la genética, el género, el curso y los trabajos, entre otros, de Wernicke,
la personalidad previa. Kleist, Leonhard, hasta culminar en
Esta categorización fue confir- la propuesta de Angst y Perris de
mada por los trabajos de Winokur y separar la depresión unipolar del
Clayton (77,78) y Gershon y colabo- trastorno bipolar, aceptada desde
radores (79), en Estados Unidos, y 1980 por el DSM-III.
Zerbin-Rübin (80), en Alemania. La
aceptación internacional llegó con la Referencias
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Conflictos de interés: los autores manifiestan


que no tienen conflictos de interés en este artículo.

Recibido para evaluación: 19 de agosto del 2011


Aceptado para publicación: 22 de agosto del 2011

Correspondencia
Rogelio Luque
Área de Psiquiatría, Facultad de Medicina
Universidad de Córdoba
Avda. de Menéndez Pidal s/n.
14071 Córdoba. España
rluque@telefonica.net

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