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Volumen 27 No.

1 Enero - Abril, 2001


Acogida a la franquicia postal como correspondencia de segunda clase en la Administración
de Correos de Ciudad de La Habana.

CIRCULACIÓN: 2 700 ejemplares PRECIO POR EJEMPLAR: $ 3,00

DIRECTOR ASESORES Dr. Antonio Márquez Guillén


Dr. Orlando Rigol Ricardo Dra. Sonia Águila Setién Dr. José Oliva Rodríguez
SECRETARIO †Dr. Celestino Álvarez Dra. Ada Ovies García
Dr. Nelson Rodríguez Hidalgo Lajonchere Dr. Romelio Paz Aguirre
Dr. Juan Castell Moreno Dr. Ernesto Piñón Montano
CO MITÉ DE REDACCIÓN
Dr. Enzo Dueñas Gómez Dr. Silvano Reyes Fuentes
Dr. Evelio Cabezas Cruz
Dr. Eduardo Cutié León Dra. Elba Gómez Sosa Dr. Alfredo Rodríguez Pérez
Dr. Orlando Díaz Mitjans Dra. Enma Heredia Torres Dr. Miguel Sosa Marín
Dr. Ubaldo Farnot Cardoso Dra. Violeta Herrera Alcázar Dr. Lemay Valdés Amador
Dr. Manuel Veranes Arias Dra. Blanca Manzano Ovies Dr. Juan Vázquez Cabrera

Edición: FREDESVINDA BLANCO. Diseño e ilustración de cubierta: JOSÉ MANUEL OUBIÑA. Diseño interior:
MANUEL IZQUIERDO. Traducción: MILTON FERRER.

La REVISTA CUBANA DE OBSTETRICIA Y GINECOLOGÍA es una publicación cuatrimestral con


artículos tanto de obstetricia y ginecología como de especialidades afines. Contiene trabajos originales,
revisiones bibliográficas y presentaciones de casos, principalmente de autores cubanos. Referencias biblio-
gráficas. Sumario y resúmenes en español e inglés. Fotos e ilustraciones. Formato: 16,5 x 23,5 cm.
Organismo patrocinador: Sociedad Cubana de Obstetricia y Ginecología.

SECRETARÍA DE R E D A C C I Ó N TODA LA CORRESPONDENCIA DEBE DIRIGIRSE A:

Admitimos contribuciones de médicos Centro Nacional de Información


de Ciencias Médicas.
cubanos y extranjeros. Los originales
Calle E No. 452 e/ 19 y 21. El

deben ser remitidos según las «Ins-- Vedado. Ciudad de La Habana.


10400, Cuba.
trucciones al autor». Los trabajos serán Correo electrónico: ecimed @ ecimed.sld.cu

iné-ditos. Solicitamos y agradecemos el Fax: 333063. Télex: 0511202

el canje con publicaciones similares. Teléfonos: 32-5338, 32-4519 y 32-4579.

1
INSTRUCCIONES AL AUTOR
PRESENTACIÓN DE ORIGINALES 1. You CH, Lee KY, Chey RY, Menguy R. Electrogastrographic study of patients
with unexplained nausea, bloating and vomiting. Gastroenterology
· Los trabajos serán inéditos. Una vez aprobados, no podrán someterse a 1980;79:311-4.
la consideración de otra revista, con vistas a una publicación múltiple, sin la 2. Goate AM, Haynes AR, Owen MJ, Farrall M, James LA, Lai Ly, et al. Predisposing
debida autorización de la Editorial Ciencias Médicas (ECIMED). locus for Alzheimer’s disease on chromosome 21. Lancet 1989;1:352-5.
3. New linking salt and hypertension [editorial]. BMJ 1981;282: 1993-4.
· La extensión máxima será 8 cuartillas para los trabajos originales, 12 las
revisiones y 4 las comunicaciones breves e informes de casos, incluidas las
LIBROS Y OTRAS MONOGRAFÍAS
tablas y figuras.

· Los artículos se presentarán mecanografiados en papel blanco, a 4. Weinstein I, Swartz MN. Pathologic properties of invading microorganism. En:
doble espacio, con márgenes no inferiores a 2,5 cm y 60 pulsaciones (com- Sodeman WA Jr Sodeman WA, eds. Pathologic physiology: mechamisms of
prendidos los espacios en blanco), con un total de 28 a 30 líneas por cuartilla, disease. Philadelphia: WB Saunders, 1974:457-72.
escrita por una sola cara, sin tachaduras ni arreglos manuscritos. Todas las 5. Eisen HN. Immunology: an introduction to molecular and celular principles of the
páginas se numerarán, con arábigos y consecutivamente, a partir de la primera. immune response. 5. ed. New York: Harper and Row, 1974:406.
La versión impresa debe acompañarse de un disquete de 3.5 pulgadas en
lenguaje Microsoft Word, sin sangrías, tabuladores o cualquier otro atributo de · Resultados y Discusión. Deben presentarse separados.
diseño (títulos centrados, justificaciones, espacios entre párrafos, etc.). El
disquete se le devolverá al autor.
· Conclusiones. No se presentarán aparte, deben estar desarrolladas en la
discusión y mencionadas en el resumen.
· Primera página. Contendrá el nombre de la institución que auspicia el trabajo;
el título que no excederá las 15 palabras; nombres y apellidos completos de
todos los autores ordenados según su participación (si el número es superior a · Tablas, modelos y anexos. Se presentarán en hojas aparte (no se interca-
4 se aclarará, por escrito, el aporte de cada uno en la investigación o prepara- larán en el artículo) y en forma vertical numeradas consecutivamente y men-
ción del artículo); grado científico y categoría docente o investigativa más cionadas en el texto . No se aceptarán en papel fotográfico. Las tablas se
importante de cada autor, así como su dirección y teléfono. ajustarán al formato de la publicación y la editorial podrá modificarlas si éstas
presentan dificultades técnicas.
· Segunda página. Incluirá un resumen informativo de 150 palabras, como
máximo, contentivo de los propósitos, procedimientos empleados, resultados · Figuras. Las fotografías, gráficos, dibujos, esquemas, mapas, salidas de
más relevantes y principales conclusiones del trabajo al igual que cualquier computadora, otras representaciones gráficas y fórmulas no lineales, se deno-
aspecto novedoso. El autor reflejará el contenido del documento a partir de 3 minarán figuras y tendrán numeración arábiga consecutiva. Las fotografías se
a 10 términos o frases (palabras clave) al pie del resumen y en orden de presentarán en papel de brillo con suficiente nitidez y contraste y un ancho
importancia. Por su parte, la ECIMED le insertará los descriptores correspon-
máximo de 10 cm. Los gráficos y dibujos se confeccionarán con tinta china
dientes a la indización de cada trabajo según el DeCS y el MeSH.
negra en cuartilla blanca o papel vegetal con un ancho máximo de 15 cm. Cada
· Referencias bibliográficas. Se mecanografiarán a 2 espacios, en párrafo figura portará su número correspondiente y una flecha en el reverso que indique
la parte superior, escritos con trazos de lápiz suave que no la dañen, Todas se
francés y en hoja aparte. Se seguirán las recomendaciones contenidas en los
mencionarán en el texto. Los pies de figuras se mecanografíarán en página
Requisitos uniformes para preparar los manuscritos que se proponen para
independiente a 2 espacios. El total de las figuras y tablas ascenderá a 5 para
publicación en revistas biomédicas, confeccionados por el Comité Internacional
los trabajos originales y de revisión y 3 para las comunicaciones breves e
de Editores de Revistas Médicas (CIERM). Se numerarán según el orden de
informes de casos.
mención en el texto y deberán identificarse mediante arábigos en forma
exponencial. Los trabajos originales no sobrepasarán las 20 citas; las revisio-
· Abreviaturas y siglas. Las precederá su nombre completo la primera vez que
nes, de 25 a 50 y las comunicaciones breves e informes de casos, 10. Se aparezcan en el texto. No figurarán en títulos ni resúmenes. Se emplearán las
incluirán citas de documentos publicados relevantes y actualizados. Deberá de uso internacional.
evitarse la mención de comunicaciones personales y documentos inéditos; sólo
se mencionarán en el texto entre paréntesis si fuera imprescindible. Las refe- · Sistema Internacional de Unidades (SI). Todos los resultados de labora-
rencias de los artículos aprobados para su publicación, se incluirán indicando el torio clínico se informarán en unidades del SI o permitidas por éste. Si se desea
título de la revista y la aclaración en prensa entre paréntesis (). Se relacionarán añadir las unidades tradicionales, éstas se escribirán entre paréntesis. Ejemplo:
todos los autores del texto citado; si tiene 7 o más autores, se mencionarán glicemia: 5,55 mmol/L (100mg/100 mL).
los 6 primeros, seguidos de «et al.» Los títulos de las revistas se abreviarán
por el Index Medicus (List of journals indexed in Index Medicus). No se desta- · Los trabajos que no se ajusten a estas instrucciones, se devolverán
cará ningún elemento con el uso de mayúsculas ni el subrayado. Se observarán a los autores. Los aceptados se procesarán según las normas establecidas
el ordenamiento de los elementos bibliográficos y el uso de los signos de pun- por la ECIMED. Para facilitar la elaboración de los originales, se orienta a los
tuación prescritos por el estilo Vancouver. A continuación, se ofrecen ejemplos autores consultar los requisitos uniformes antes señalados.
de algunos de los principales casos:

REVISTAS

1. You CH, Lee KY, Chey RY, Menguy R. Electrogastrographic study of patients
Los autores residentes en Ciudad de La Habana
with unexplained nausea, bloating and vomiting. Gastroenterology o en el extranjero enviarán sus trabajos a la Ecimed.
1980;79(2):311-4. Los del interior del país, los entregarán al centro provincial
Opcionalmente, se admite la omisión del número en las revistas con paginación de información correspondiente.
consecutiva para cada volumen.

2
R e v i s t a C u b a n a d e

✶ ❏●◆❍ ❅■ ✒✗ ✮ œ❍ ❅❒❏ ✑✥■❅❒❏ ✍✡ ❂❒❉●✍✒✐✐✑

SUMARIO CONTENTS

GINECOLOGÍA
EMBARAZO ECTÓPICO. SU COMPORTAMIENTO EN LOS AÑOS 1989-99 5
Ectopic pregnancy in the 1989-1999 period
Marta Lucía Cutié Bressler, Mariela Figueroa Mendoza, Constantino
Lestayo Dorta y Osmandy Cubero Menéndez

VALOR DE LA ULTRASONOGRAFÍA ABDOMINAL EN LA ENFERMEDAD


INFLAMATORIA PÉLVICA 12
Value of abdominal ultrasonography in the pelvic inflammatory disease
Lázaro García León, José R. Mendoza, Nancy Herrera Llerena y Aurora
Núñez

CARACTERIZACIÓN DE LA MUJER EN LA ETAPA DEL CLIMATERIO (I) 16


Characterization of the woman in the climateric stage (I)
Miguel Lugones Botell, Saylí Valdés Domínguez y Julia Pérez Piñero

CARACTERIZACIÓN DE LA MUJER EN LA ETAPA DEL CLIMATERIO (II) 22


Characterization of the woman in the climateric stage (II)
Miguel Lugones Botell, Saylí Valdés Domínguez y Julia Pérez Piñero

USO PROFILÁCTICO DE ANTIBIÓTICOS EN LA HISTERECTOMÍA ABDOMI-


NAL 28
Prophylactic use of antibiotics in abdominal hysterectomy
Carlos Pérez Velázquez, Mabel García Román y Arturo Pérez de Villa
Amil

EMBARAZO HETEROTÓPICO. PRESENTACIÓN DE UN CASO 34


Heterotopic pregnancy. presentation of a case
Ramón García Mirás, Jany Gallego Ramos, José Prado González y Edilia
Trelles Aguabella

OBSTETRICIA
MORTALIDAD PERINATAL I. ALGUNOS FACTORES QUE INFLUYERON EN ÉSTA
DURANTE 1998 39
Perinatal mortality I. Some factors that affect perinatal mortality in 1998
Jesús Hernández Cabrera, Abelardo de la Rua-Batistapau y Roberto
Suárez Ojeda

3
ANTICUERPOS ANTIISLOTES PANCREÁTICOS EN DIABÉTICAS
GESTACIONALES: PROBLEMAS MATERNOS Y COMPLICACIONES
NEONATALES 46
Islet cell antibodies in gestational diabetes women: maternal events and
neonatal complications
Davide Casagrandi Casanova, Ana Mary Sanabria Arias, Eduardo Ca-
brera Rode y Julia Pérez Piñero

LA CESÁREA EN LA HISTORIA 53
Cesarean section throughout the history
Miguel Lugones Botell

ESTUDIO CRONOLÓGICO DE LA MORTALIDAD FETAL TARDÍA Y LA MORTA-


LIDAD INFANTIL EN MANZANILLO 57
Chronological study of late fetal and infant mortality in Manzanillo
Dasha García Arias, Olga Roselló Salcedo y Luis Armando Mar tínez
Barreiro

ANÁLISIS MULTIVARIADO DE FACTORES DE RIESGO DE PREMATURIDAD


EN MATANZAS
Multivariate analysis of prematurity risk factors in Matanzas
62
Gerardo Rogelio Robaina Castellanos, Jesús Manuel Pollo Medina, José
Manuel Morales Rigau y Roberto E. Robaina Castellanos

ANTIBIOTICOTERAPIA PROFILÁCTICA EN LA CESÁREA 70


Antibiotic prophylaxis in cesarean section
Carlos Pérez Velázquez, Aimé Reyes Pérez y Arturo Pérez de Villa Amil

BETAMETASONA COMO MADURANTE PULMONAR FETAL. INFLUENCIA


SOBRE EL EMBARAZO Y EL PARTO 76
Betamethasone as fetal pulmonary maturant. Influence over pregnancy and
delivery
Ramón García Mirás, Deborah Pérez Valdés-Dapena, Miguel Lugones
Botell y Adalberto Lay Rodríguez

BETAMETASONA COMO MADURANTE PULMONAR FETAL. INFLUENCIA


SOBRE EL RECIÉN NACIDO 83
Betamethasone as fetal pulmonary maturant. Influence over the newborn
Ramón García Mirás, Olimpo Moreno Vázquez, Deborah Pérez Valdés-
Dapena y Miguel Lugones Botell

4
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):5-11

GINECOLOGÍA
Instituto Superior de Medicina Militar
“Dr. Luis Díaz Soto”

EMBARAZO ECTÓPICO. SU COMPORTAMIENTO EN LOS AÑOS


1989-1999

Dra. Marta Lucía Cutié Bressler,1 Dra. Cap. SM. Mariela Figueroa Mendoza,2 Tte. Cor.
Dr. Constantino Lestayo Dorta3 y Tte.Cor. Dr. Osmandy Cubero Menéndez4

RESUMEN: Se realizó una investigación descriptiva longitudinal y retrospectiva de 343 casos


con diagnóstico de embarazo ectópico en el Instituto Superior de Medicina Militar “Dr. Luis Díaz
Soto”, en el período comprendido entre los años 1989-1999. La incidencia del embarazo ectópico fue
de 21 x 100 y la mortalidad de 0,6 x 10 000 nacidos vivos. La edad predominó entre los 25 y 29 años,
y fueron el aborto y la enfermedad inflamatoria pélvica, los antecedentes más frecuentes; se utilizó
la salpingectomía como tratamiento más empleado, precedido por un diagnóstico precoz. Se encon-
tró una tendencia secular ascendente de esta entidad en los últimos 3 años.

DeCS: EMBARAZO ECTOPICO/cirugía; EMBARAZO ECTOPICO/diagnóstico; CAUSALIDAD; INCIDENCIA;


FACTORES DE RIESGO; TROMPAS DE FALOPIO/cirugía; MEDICINA MILITAR.

Pretender realizar un trabajo sobre em- En nuestro país, ocupa el 5-12 % den-
barazo ectópico, puede parecer de entrada tro de las causas de muertes maternas ocu-
una insistencia innecesaria en asuntos al- rridas.2 Así vemos que, en 1996 se produje-
tamente conocidos, sin embargo, el incre- ron 6 muertes maternas por este motivo, con
mento de su incidencia afirma lo contrario.1 una incidencia de 1 por cada 200 embarazos
El embarazo ectópico es una afección con esta localización. En 1997 se elevó la
muy frecuente en Ginecología y constitu- cifra a 7 muertes; 1998 y 1999 transcurrie-
ye, a pesar de la preocupación con que se ron sin fallecimientos, pero es altamente
atiende y de los recursos dedicados para significativo que en los primeros meses del
su diagnóstico, causa de muerte, inclusive año 2000, ya hubiesen ocurrido 3 muertes
en los países desarrollados. maternas por embarazo ectópico.3,4

1
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Profesora Asistente.
2
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Instructora.
3
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Profesor Titular.
4
Especialista de II Grado en Bioestadística.

5
Como vemos, existe actualmente una Finalmente se construyeron tablas y
elevada y progresiva incidencia del emba- gráficos estadísticos que facilitaron el aná-
razo ectópico en relación con los nacidos lisis de los resultados alcanzados.
vivos,2,3,5 por lo cual decidimos realizar un
estudio retrospectivo, para analizar el com-
portamiento de la afección en este hospital Resultados
y de las siguientes variables: edad, paridad,
antecedentes patológicos o factores pre- La tasa de incidencia del embarazo
ectópico fue de 2,1 x 100. En la figura se
disponentes, diagnóstico (precoz o tardío)
mostró el comportamiento por años y su
y tratamiento realizado.
aumento en los 3 últimos. La edad predomi-
nó entre los 25 y 29 con 128 casos, para el
37,3 % (tabla 1).
Métodos

Se realizó un estudio descriptivo TABLA 1. Edad de las pacientes con embara-


zo ectópico
longitudinal y retrospectivo de los casos
atendidos por embarazo ectópico en el Ins- Edad (años) No. %
tituto Superior de Medicina Militar "Dr. Luis
Díaz Soto", en el período comprendido en- <20 15 4,4
20-24 96 27,9
tre los años 1989-1999, para lo cual se con- 25-29 128* 37,3
feccionó una planilla-encuesta donde se re- 30-34 81 23,6
cogían los datos primarios de las historias >35 23 6,8
clínicas de las pacientes con este diagnós- Total 343 100.0
tico y que nos fueron suministradas por el
Departamento de Registros Médicos (Sec- p 0,05.
Nota: La edad promedio es de 27,3 años (S:5,3)
ción estadística y Archivo clínico) de di-
cho instituto, con las variables: edad, pari-
dad, antecedentes patológicos o factores
predisponentes, diagnóstico (precoz o tar- En relación con la paridad, las nulíparas
dío) y tratamiento realizado. y las primíparas obtuvieron significativos
Una vez recogidos los datos se proce- porcentajes (53,4 y 85 %, respectivamen-
saron de forma automatizada y se obtuvie- te) (tabla 2).
ron los valores absolutos y relativos (razo-
nes, porcentajes y tasas), necesarios; ade-
más, medidas de tendencia central, de dis- TABLA 2. Paridad de las pacientes diagnos-
ticadas con embarazo ectópico
persión y de análisis cronológico (tenden-
cia secular y canales endémicos). Se aplica-
ron pruebas de significación estadística Casos
(prueba de Chi cuadrado, prueba Q de por- Paridad No. %
centaje, prueba exacta de Fisher y compa- Ninguno 183 53,5
ración de promedios, así como tablas de Primero 136 85,0
contingencia 2x2 con una confiabilidad del Segundo 21 13,1
Tercero o más 3 1,9
95 % (p 0,05).

6
N o.
de casos

80

60

40

20

0
89 90 91 92 93 94 95 96 97 98 99 A ño

F uente:T abla 6

FIG. Tendencia secular de los embarazos ectópicos diagnosticados.

La tabla 3 muestra los antecedentes pa- TABLA 3. Antecedentes patológicos perso-


tológicos de las pacientes con embarazo nales en las pacientes diagnosticadas con
ectópico y se observa que el aborto en el embarazo ectópico.
62,7 % es la causa fundamental y el aborto
provocado el 86,5 % de ellos. seguido por la Antecedentes
enfermedad inflamatoria pélvica aguda (EIPA) patológicos Casos
46 %. personales No. %
El diagnóstico fue realizado precoz-
mente en el 68,4 % de las pacientes (tabla 4). Abortos 215 69,7
La cirugía convencional fue el tratamiento Inflamación pélvica aguda 158 46,1
Intervención quirúrgica
que se realizó en el 92,2 % de ellas, como se
abdominal 25 7,3
observa en la tabla 5, y dentro de ésta la Infertilidad 15 4,4
salpingectomía total en el 96,2 %. La tasa de Embarazo ectópico 9 2,6
mortalidad fue de 0,6 x 10 000 y la letalidad Microcirugía tubárica 7 2,0
de 0,3 x 100. Cirugía mínimo acceso 3 0,9
En la tabla 6 se observa que en los Endometriosis 2 0,6
últimos 3 años el promedio de embarazos Enfermedad de
transmisión sexual 2 0,6
ectópicos fue de 62,3, mayor que el prome- Ninguno 33 9,6
dio de 20,1 por años anteriores.
Existe un incremento de la tasa de inci- Nota: De los abortos, el 86,5 % fue provocado
dencia de 1,2 en 1989 a 1,4 en 1984 y 4,9 en (p 0,05) y sólo el 13,5 % fue espontáneo.

7
TABLA 4. Diagnóstico en las pacientes con 1999 y una disminución de la relación
embarazo ectópico embarazo eutópico: embarazo ectópico de
82:1 en 1989, a 70:1 en 1994 y 19:1 en
Diagnóstico No. % 1999, o sea, 4 veces más frecuentes.
Precoz 234 68,4 Se observa además una tendencia
Tardío 109 31,6 secular ascendente (figura) y unos canales
endémicos, donde está presente la mayor
Total 343 100,0
cantidad de casos en los meses de febrero
a junio, y en particular, en abril y mayo.
TABLA 5. Tratamiento empleado en las pa-
cientes con embarazo ectópico

Tratamiento No. %
Discusión
Cirugía convencional 340 99,3 El embarazo ectópico constituyó el
• Salpingectomía 330 96,2 2,1 x 100, de frecuencia de aparición en
• Microcirugía 5 1,5
nuestra casuística, lo cual concuerda con la
• Histerectomía 5 1,5
Cirugía de mínimo acceso 3 0,8 literatura mundial donde se reporta que el
2 % de todos los embarazos son ectó-
Total 343 100,0 picos2,5,6 y se comprueba que en los últimos
p< 0,05. 3 años existe aumento de su frecuencia en
Nota: La tasa de mortalidad materna fue de 0,6 la serie crono-lógica analizada (figura).
p/10 000.
La tasa de letalidad fue de 0,3 % Esta entidad aparece en los años de
Hubo 1 muerte materna (ectópico abdominal). mayor actividad sexual y reproductiva de la

TABLA 6. Tasa de incidencia y edad promedio en los años estudiados en las pacientes con
diagnóstico de embarazo ectópico

Edad promedio
en pacientes Relación
Nacidos Embarazos con emb.ectó- Tasas incidencia.emb emb. eutópico:
Año vivos ectópicos/años pico (años) ectópico (%) emb. ectópico

1989 1 494 18 30,3 1,2 82:1


1990 1 511 28 30,3 1,8 53:1
1991 1 518 14 26,4 0,9 107:1
1992 8 97 21 30,0 2,3 42:1
1993 1 637 28 28,9 1,7 58:1
1994 1 846 26 27,1 1,4 70:1
1995 1 747 16 24,6 0,9 108:1
1996 1 469 10 23,9 0,7 146:1
1997 1 369 53 27,6 3,9 25:1
1998 1 305 59 27,3 4,5 21:1
1999 1 520 75 27,0 4,9 19:1

Total 16 313 343 27,3 2,1 47:1

Nota: En los últimos 3 años, el promedio de embarazos ectópicos fue de 62,3 por año, mayor que el
promedio de 20,1 por año anterior (p 0,05).

8
mujer, pero llama la atención que hay una En nuestros casos, el 7,3 % tuvo el an-
relación inversa en cuanto a la paridad, ya tecedente de intervenciones quirúrgicas
que su incremento ocurre con la pri- abdominales anteriores que afectaron los
miparidad y tiene su mayor exponente en la genitales internos y el peritoneo circundan-
nuliparidad, lo que puede estar relacionado te las cuales condicionan un factor
con que a mayor paridad, existen menos po- tuboperitoneal.12
sibilidades o afecciones asociadas que con- Es importante el antecedente de emba-
dicionan o explican la aparición de embara- razo ectópio anterior, que en nuestra serie
zos ectópicos, y muchas de estas pacien- le siguió en frecuencia.
tes de baja o nula paridad, pudieran pre- Se plantea que el riesgo de repetir un
sentar factores asociados a la infertilidad, ectópico está entre el 13 y el 28 %. Después
con alteraciones funcionales y anatómicas de un segundo ectópico existe el 30 % de
de las trompas, que condicionan esta pre- posibilidades de un tercero.5
sentación y la favorecen.5-8 La repercusión en la morbilidad y la
El incremento cada vez mayor de las mortalidad de esta afección está relaciona-
intervenciones ginecológicas, las enferme- da directamente con la posibilidad de su
dades de trasmisión sexual, el aborto pro- diagnóstico precoz, el cual fue realizado en
vocado, así como los procesos infla- el 68,4 % de nuestros casos, favorecidos
matorios pélvicos, ocasionados fundamen- por el hecho de contar en nuestro medio
talmente por gérmenes como Chlamydia con un servicio de laparoscopia de urgen-
trachomatis o Neisseria gonorroheae , que cia, que disminuye el tratamiento del
por lo general cursan de forma asintomática ectópico complicado, por la mayor educa-
y con dificultades para su diagnóstico des- ción de la población, que concurre con ra-
de el punto de vista bacteriológico en nues- pidez al médico y por la calidad cada vez
tro medio, conjuntamente con tratamientos mayor de la atención médica primaria y
inadecuados basados en la clínica, propi- ginecológica.2
cian la posibilidad de ulteriores secuelas, Como muestra la tabla 5, el 99,2 % de
pues alteran la anatomía y fisiología del las pacientes recibió tratamiento quirúrgi-
hiatus tubo-ovárico.2,5-10 Estudios en Sue- co de tipo convencional, y fue la salpin-
cia y Estados Unidos encontraron eviden- gectomía total la de elección en el 96,2 %.
cias serológicas de anticuerpos positivos La introducción actual de la cirugía de
de Chlamydias en más del 50 % del total de mínimo acceso ha influido positivamente en
mujeres con embarazos ectópicos.5 el diagnóstico precoz, así como en conduc-
La infertilidad como antecedente apa- tas quirúrgicas conservadoras, debemos
rece en el 4,4 % de nuestros casos, lo cual recordar que esta entidad ocurre con fre-
se asocia al incremento de riesgo de emba- cuencia en mujeres que aún no han parido
razos ectópicos por instrumentaciones, y en muchos casos, en pacientes infértiles
histerosalpingografía, uso de proovula- de varios años y por supuesto contribuye
torios (por trastornos en el transporte del a disminuir la morbilidad en esta enfermedad.2
óvulo), procederes quirúrgicos sobre las A pesar de señalarse otros procederes
trompas, etcétera. terapéuticos como es el tratamiento médico
Se plantea que del 3 al 10 % de los ca- con metrotexate, no tuvimos ningún caso
sos con cirugía reconstructiva de trompas reportado en nuestro estudio.2,13
tienen riesgo de embarazo ectópico, en de- Nuestras cifras muestran resultados
pendencia del daño tubario.10-12. muy satisfactorios con solo 1 muerte ma-

9
terna. Se trataba de una paciente con un talidad sólo de 0,6 x 10 000 nacidos (cifra
embarazo abdominal que llegó a nuestro exitosamente baja); la edad predominante
centro procedente de un área rural, en shock osciló entre los 25 y 29 años, preferiblemente
irreversible, sin diagnóstico. Esto nos da en primíparas; el aborto fue el antecedente
una tasa de mortalidad de 0,6 x 10 000 naci- más frecuentemente encontrado, seguido
dos vivos y una tasa de letalidad de 0,3 % de la enfermedad inflamatoria pélvica; el
(tabla 5), lo que contrasta con reportes diagnóstico se realizó precozmente, lo cual
mundiales que ofrecen cifras del rango del influyó en los resultados, con una disminu-
5-12 % de las causas de muerte.2 ción de la morbilidad y la mortalidad; sal-
En Estados Unidos, el 15 % de todas pingectomía total fue el tratamiento de elec-
las muertes maternas anuales son por em- ción más realizado y se observó existe una
barazos ectópicos.5 tendencia secular ascendente de embara-
Podemos concluir que la incidencia del zos ectó-picos, así como una disminución
embarazo ectópico fue de 2,1 x 100 y la mor- de la edad promedio de las pacientes.

SUMMARY: A retrospective longitudinal and descriptive study of 343 cases diagnosed with
ectopic pregnancy was made in “Dr Luis Díaz Soto” Higher Institute of Military Medicine from 1989
to 1999. The incidence of ectopic pregnancy was 21%, and mortality rate was 0.6 per 10 000 live
births. The predominant ages in pregnant women ranged 25 to 29 years. Abortion and pelvic
inflammatory disease were the most frequent history. Salpingectomy was the most used treatment
preceded by early diagnosis. There has been an upward secular trend in this entity in the last three
years.

Subject headings: PREGNANCY, ECTOPIC/surgery; PREGNANCY, ECTOPIC/diagnosis; CAUSALITY;


INCIDENCE; RISK FACTORS; FALLOPIAN TUBES/surgery; MILITARY MEDICINE.

Referencias bibliográficas 6. Kenneeth JP, et al. The Fallopian tubes and


ectopic pregnancy. En: Kistner´s Gyne-
1. Rodríguez Lapuente M, Valdés Vivó P, cology. Principles and practice. 6 ed. 1996:
Saavedra Vega J. Embarazo ectópico. Revi- 166-84.
sión casuística del hospital Ramón González 7. Corson SL, Batzer FR. Ectopic pregnancy,
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13. Ury SJ, Villanueva AL, et al. Conservative Apto 3 Zona 4 Alamar. Habana del Este, Ciudad
treatment of ectopic pregnancy with de La Habana, Cuba.

1 1
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):12-5

Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas


“Dr. Julio Alfonso Medina”

VALOR DE LA ULTRASONOGRAFÍA ABDOMINAL


EN LA ENFERMEDAD INFLAMATORIA PÉLVICA

Dr. Lázaro García León,1 Dr. José R. Mendoza,2 Lic. Nancy Herrera Llerena3 y Dra. Aurora
Núñez4

RESUMEN: Se realizó un estudio prospectivo descriptivo lineal, de una muestra constituida


por 135 pacientes ingresadas en nuestra institución, con el diagnóstico de enfermedad inflamatoria
pélvica y de ellas a 104 se les realizó ultrasonografía transabdominal. Se estudiaron las variables
tipos de imagen, existencia de dispositivo intrauterino (DIU), velocidad de eritrosedimentación y tipo
de enfermedad inflamatoria pélvica. Según la imagen se realizó correlación con las diferentes
variables. El tipo de imagen más frecuente fue la compleja en un anejo, la cual presentó su mayor
incidencia en las pacientes con DIU insertado. La velocidad de eritrosedimentación estuvo acelerada
en todos los tipos de imágenes. La imagen compleja en uno o en ambos anejos siempre estuvo
presente en la enfermedad inflamatoria pélvica tumoral.

DeCS: ANEXITIS/diagnóstico;ANEXITIS/ultrasonografía; ULTRASONOGRAFIA; SEDIMENTACION SAN-


GUÍNEA.

La enfermedad inflamatoria pélvica limitado valor en el diagnóstico, sólo ayu-


(EIP) se define como el síndrome clínico daría especialmente en el caso de la EIP se-
agudo asociado con ascensión diseminada vera.1-4 Sin embargo, es seguro en el 95 %
de microorganismos, no relacionada con de las pacientes en la detección precoz de
embarazo o cirugía, desde vagina o cuello, absceso pélvico y para monitorear la res-
al endometrio, trompas y estructuras veci- puesta a la terapéutica médica y el pronós-
nas.1 tico.3-7
Los signos precoces de EIP son esca- Una pequeña cantidad de líquido en el
sos e incluso imposibles de identificar fondo de saco posterior puede indicar una
sonográficamente,2 la ultrasonografía es de infección pélvica.6 Una manifestación tar-

1
Especialista de II Grado en Ginecoobstetricia. Profesor Asistente de la Facultad de Ciencias Médicas.
2
Especialista de II Grado en Ginecoobstetricia. Instructor. Facultad de Ciencias Médicas.
3
Licenciada en Enfermería.
4
Especialista I Grado en Radiología.

1 2
día de la EIP es el absceso tuboovárico, que Resultados
sonográficamente se observa como una
masa compleja multilobulada, que contiene Según el tipo de imagen (tabla 1), la
áreas quísticas y sólidas y en algunas oca- compleja en anejo fue la más frecuente, y
siones, pequeña cantidad de gas.6 de menor incidencia, la imagen compleja y
La utilización de la ultranosografía en líquido en el fondo de saco posterior.
nuestro centro, como proceder diagnóstico En el tipo de imagen y su relación con
y para evaluar la respuesta terapéutica, nos el DIU (tabla 2), el 65,38 % de las pacientes
ha motivado a realizar esta investigación para tenían insertados DIU y el tipo de imagen
conocer el valor de este medio. más frecuente en relación con las pacientes
con este anticonceptivo correspondió a la
imagen compleja en anejo.
Métodos
TABLA 1. Imagen de la ultrasonografía en
Se realiza un estudio prospectivo des- EIP
criptivo lineal de una muestra constituida
por 135 pacientes egresadas de nuestra ins- Tipo de imagen No. %
titución, con el diagnóstico de enfermedad
Imagen compleja en anejo 69 66,35
inflamatoria pélvica, en el período compren- Imagen compleja en ambos anejos 17 16,35
dido entre noviembre de 1995 y febrero de Imagen compleja y líquido en
1997. Se examinaron los resultados de la fondo de saco posterior 7 6,73
ultrasonografía transabdominal en 104 pa- Imagen de genitales normales 11 10,57
cientes en quienes se utilizó este proceder
Total 104 100,00
diagnóstico; en cada una de ellas se estu-
diaron las variables siguientes: tipo de ima-
gen, presencia de DIU, velocidad de eri- En relación con la velocidad de eritrose-
trosedimentación y tipo de enfermedad dimentación (tabla 3), estuvo acelerada en
inflamatoria pélvica. Se realizó correlación la mayoría de las pacientes y se presentó
entre las diferentes variables. Los datos se mayor incidencia en la velocidad de
obtuvieron de las historias clínicas y se eritrosedimentación menor de 100 mm y en
vaciaron en un libro que se confeccionó el tipo de imagen compleja en anejo.
para el estudio, se evaluaron por el método En la enfermedad inflamatoria pélvica
porcentual y se llevó a tablas para su ma- tumoral (tabla 4) siempre existió imagen com-
yor comprensión. pleja en uno o ambos anejos.

TABLA 2. Tipo de imagen en pacientes con DIU o sin él

ICA % ICAA % IN % ICL % Total %

DIU 48 70,58 8 11,76 7 16,29 5 7,35 68 65,38


No DIU 21 58,33 9 25,00 4 11,11 2 5,55 36 34,62

Total 69 66,34 17 16,34 11 10,57 7 6,73 104 100,00

ICA: Imagen compleja en anejo. ICAA: Imagen compleja en ambos anejos. IN: Imagen de genitales
normales. ICL: Imagen compleja y líquido en fondo de saco posterior.

1 3
TABLA 3. Tipo de imagen-eritrosedimentación

Eritrosedimentación ICA % ICAA % IN % ICL % Total %

>100 29 74,35 6 15,38 2 5,12 2 5,12 39 37,50


<100 39 61,90 10 15,87 9 14,28 5 7,93 63 60,57
Normal 1 100 1 0,96
No realizada 1 100,00 1 0,96

Total 69 66,34 17 16,34 1 1 10,57 7 6,73 104 100,00

TABLA 4. Tipo de imagen- tipo EIP

Tipo EIP ICA % ICAA % IN % ICL % Total %

Tumoral 57 78,08 14 19,17 0 2 2,73 73 79,19


No tumoral 12 38,70 3 9,67 11 35,48 5 16,12 31 29,80

Total 69 66,34 17 16,34 11 10,57 7 6,73 104 100

Discusión anejos, concuerda con lo planteado por


Ruth Tuomola, 5 que la formación de abs-
En nuestro estudio, la ultrasonografía ceso tuboovárico asociado con este mé-
transabdominal es un proceder diagnósti- todo anticonceptivo es permisible que
co que nos permitió el pronóstico de la EIP, ocurra por la diseminación secundaria al
en relación con la terapéutica, así como la parametrio de la erosión del endometrio
detección de la EIP tumoral, lo cual con- causada por el DIU.
cuerda con lo planteado por David La velocidad de eritrosedimentación
Eschenbach y Ruth Tuomola.3,5 La imagen estuvo acelerada en todos los tipos de imá-
compleja en un anejo fue la de mayor inci- genes, aunque no es un medio específico
dencia y fue poco significativo en nuestro de diagnóstico de la EIP, nos permitió eva-
estudio la presencia de líquido en el fondo luar su pronóstico.
de saco posterior. En ninguna de las pacientes se obser-
La asociación del DIU con la EIP vó presencia de gas en las ultrasonografías
tumoral y la imagen compleja en uno de los realizadas.

SUMMARY: A linear prospective and descriptive study of a sample of 135 female patients
admitted to our hospital and diagnosed with pelvic inflammatory disease was conducted. One-
hundred and four of these patients were applied transabdominal ultrasonograpy. Variables such as
type of image, IUD presence, blood sedimentation speed and type of pelvic inflammatory disease
were studied. According to the images, the different variables were correlated. The most frequent
type of image was the complex image in one of the adnexa, which was more prevailing in patients
with inserted IUD. Blood sedimentation speed was accelerated. The complex images in one or both
adnexa was always present in tumoral pelvic inflammatory disease.

Subject headings: ADNEXITIS/diagnosis;ADNEXITIS/ultrasonography; BLOOD SEDIMENTATION.

1 4
Referencias bibliográficas 6 . Berryl B. Pelvic ultrasonography, Kistner’s
Gynecology. St Louis: Mosby Year Book,
1995:646-7.
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Ginecology. St Louis: Mosby Year Book, Dr. Lázaro García León. Hospital Ginecoobsté-
1995:497-500. trico “Dr Julio Alfonso Medina”, Matanzas, Cuba.

1 5
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):16-21

Policlínico Docente “26 de Julio”

CARACTERIZACIÓN DE LA MUJER EN LA ETAPA


DEL CLIMATERIO (I)

Dr. Miguel Lugones Botell,1 Dra. Saylí Valdés Domínguez2 y Dra. Julia Pérez Piñero3

RESUMEN: Se realizó un estudio descriptivo de la totalidad de la población femenina del


consultorio médico No. 16 del policlínico “Jorge Ruiz Ramírez”, comprendidas entre las edades de 40
a 59 años, partiendo del registro de la dispensarización de la historia clínica familiar del consultorio.
Se les aplicó un cuestionario para conocer algunos aspectos del proceso del climaterio y la menopau-
sia como: edad de aparición de la menopausia y su posible relación con la edad de la menarquía,
número de hijos y tiempo de fumadoras, escolaridad, ocupación y estado conyugal de las pacientes.
Se utilizó como método estadístico el Chi cuadrado, la prueba de Fisher y la prueba Z para compara-
ción de proporciones. Se concluyó que la edad promedio de aparición de la menopausia en estas
pacientes fue de 47,7 años y que no guardó relación con la menarquía, ni el número de hijos ni el
tiempo de fumadoras; así como que la mayoría de las pacientes trabajaban, tenían nivel medio de
escolaridad y el mayor porcentaje mantenía pareja estable.

DeCS: CLIMATERIO/psicología; MENOPAUSIA/psicología; MEDICINA FAMILIAR; MEDICINA


COMUNITARY; PSICOLOGIASOCIAL.

Hasta una fecha relativamente recien- deben pasar por la etapa del climaterio. En
te, eran escasos los conocimientos acerca virtud de los logros alcanzados en nuestra
de la fisiología del climaterio y los cambios salud pública, es de esperar que cerca de
que afectan a las mujeres en esta etapa1-2 y, 4 000 000 de mujeres alcancen la edad de la
por consiguiente, su relación con las varia- menopausia,2 lo que de por sí justificaría
das manifestaciones que se presentan. sobradamente la necesidad del estudio de
Actualmente se considera que el 95 % las características y manifestaciones fun-
de las mujeres de los países desarrollados damentales de estas pacientes.

1
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Miembro de la Sección de Climaterio y Menopausia
de la Sociedad Cubana de Ginecología y Obstetricia. Policlínico Docente“ 26 de Julio”, Playa.
2
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Subdirectora Docente. Policlínico “Jorge Ruiz
Ramírez”, Playa.
3
Especialista de I Grado en Bioestadísticas. Hospital Docente “Ramón González Coro”. Miembro de la
Sección de Climaterio y Menopausia de la Sociedad Cubana de Ginecología y Obstetricia.

1 6
Es importante recordar que todo pro- do civil, edad de la menarquía, número de
blema de salud no es meramente biológico hijos y tiempo de fumadoras.
o psicológico puro, sino que es una mezcla Antes de aplicar el cuestionario, nos
compleja de componentes físicos, psíqui- entrevistamos con cada una de las pacien-
cos y sociales3 y esta etapa de la vida es tes, les explicamos los objetivos de la in-
rica en manifestaciones en todos estos as- vestigación y les esclarecimos dudas al res-
pectos. Por este motivo, el climaterio y la pecto.
menopausia no pueden considerarse como Como método estadístico se utilizó el
fenómenos aislados. Chi cuadrado, la prueba de Fisher y la prue-
Motivados por todo lo anteriormente ba Z para comparación de proporciones.
expuesto, es que nos hemos decidido a rea- Los datos se procesaron a través de la
lizar este trabajo de caracterización de la tabulación manual y se presentan en tablas
mujer en esta etapa, para poder llevar a cabo y gráficos para su mejor comprensión.
acciones concretas al precisar sus princi-
pales características.
Resultados
Métodos Como puede observarse en la tabla 1,
la muestra de las pacientes estudiadas está
Se realizó un estudio descriptivo, trans- compuesta por 105 mujeres, 57 de ellas
versal de la totalidad de la población feme- comprendidas en la perimenopausia para el
nina del consultorio médico No.16 del 54,3 % y 48 en la posmenopausia, para el
policlínico "Jorge Ruíz Ramírez", en las eda- 45,7 %.
des comprendidas entre 40 y 59 años, par- La edad promedio de la muestra anali-
tiendo del registro de la dispensarización zada fue de 45,3 años en las perimeno-
en la historia clínica familiar existente en el páusicas con un rango de 40 a 50 años; así
consultorio. como la edad promedio de las mujeres com-
De acuerdo con el estudio planteado, prendidas en la posmenopausia fue de
decidimos utilizar como técnica de recolec- 48,7 años, con un rango comprendido entre
ción de datos el cuestionario. Este fue anó- 41 y 55 años. En nuestro estudio se obtuvo
nimo y en él se recogieron la siguientes va- un valor promedio de 47,7 años para la edad
riables: edad, ocupación, escolaridad, esta- de la menopausia, la forma espontánea de

TABLA 1. Grupos de edades

Perimenopausia Posmenopausia
Grupos de edades No. % No. % p
(años)

40-44 26 45,61 2 4,16 x 2=36,760


45-49 22 38,59 15 31,25 3gl
50-54 8 14,03 15 31,25 p=3,969x10 -7
55-59 1 1,75 16 33,33

Total 57 100,0 48 100,0

Fuente: Encuesta.

1 7
presentación fue la más frecuente. Hubo También puede verse en la tabla 2 que,
10 casos de menopausia quirúrgica, los que en relación con el estado civil, la mayoría
no se consideraron, por supuesto, para de- de las mujeres están acompañadas de una
terminar la edad promedio de aparición de u otra forma, o sea, incluimos las casadas y
la menopausia. En nuestras pacientes en- las que tienen parejas, para el 73,6 % en las
contramos una edad promedio para la me- perimenopáusicas y el 62,4 % en las
nopausia menor que la reportada en otros posmenopáusicas, sin diferencias signifi-
países de Europa y Estados Unidos,4,5 lo que cativas entre ambos grupos, pero menor en
no es un elemento diferencial especial, pues las posmenopáusicas, lo que no deja de te-
este estudio, por supuesto, no representa a ner importancia, pues este aspecto puede
la mujer cubana. Estudios exploratorios reve- contribuir a la aparición del llamado "sín-
lan para Cuba una edad promedio de meno-
drome del nido vacío",6 que tiene mucha
pausia de 47 años.6
importancia en la esfera psicosocial de es-
En la tabla 2 analizamos algunas carac-
terísticas sociales y podemos ver que, en tas pacientes. Tal sentimiento se produce
relación con la ocupación, la mayoría de cuando la mujer siente que su hogar está
las mujeres trabajan para el 73,6 % de las solo y percibe que ha perdido su papel
perimenopáusicas y el 60,4 % de las protagónico socialmente, así como la fun-
posmenopáusicas, no existieron diferen- ción de la vida en pareja, asociado esto con
cias significativas entre ambas. En esta ta- la pérdida de los hijos que han ido contra-
bla vemos que la escolaridad de las pacien- yendo matrimonio.
tes, en su mayoría, es de nivel medio y En la figura 1 se analiza la edad de la
preuniversitario para ambos grupos, no exis- menarquía y de la menopausia. Para ello se
ten diferencias significativas entre ellos. aplicó como método estadístico el coeficien-

TABLA 2. Ocupación, escolaridad y estado civil

Perimenopausia Posmenopausia
No. % No. % p

Ocupación
Ama de casa 12 21,05 13 27,08 X2=2,668
Trabajadora 42 73,68 29 60,41 2gl
Jubilada 3 5,26 6 p)0,2634

Total 57 100,0 48 100,0

Escolaridad
Primaria terminada 3 5,26 4 8,33 X2=6,040
Secundaria terminada 7 12,28 14 29,16 4gl
Preuniversitario terminado 12 21,05 9 18,75 p=0,196
Técnico medio 17 29,82 12 25,0
Universitario 18 31,57 9 18,75

Total 57 100,0 48 100,0

Estado civil
Soltera 4 7,01 3 6,25 X2=3,318
Acompañada 6 10,52 5 10,41 4gl
Casada 36 63,15 25 52,08 p=0,5061
Divorciada 10 17,54 11 22,91
Viuda 1 1,75 4 8,33

Total 57 100,0 48 100,0

1 8
te de correlación de rangos de Spearman y observamos que no existe corresponden-
se encontró que no existe correlación ni cia entre la edad de la menopausia y el
dependencia entre la edad de la menarquía número de hijos; no se encontró signifi-
y la edad de la menopausia (p = 0,05 con cación estadística (p = 0,05 con valores
valores críticos ± 0,31975) no se halló signi-
críticos ± 0,31975).
ficación estadística.
Al analizar la figura 3, vemos la rela-
La relación entre la edad de la meno-
pausia y el número de hijos puede verse en ción entre el tiempo de fumadora y la edad
la figura 2, donde se aplicó también el méto- de la menopausia y tampoco encontramos
do estadístico del coeficiente de correla- significación estadística entre ambos
ción de rangos de Spearman y en el que parámetros.

E d ad
55
53
51
In icio m enopau sia

49
47
45
43
41
39
FIG.1. Relación entre la 37
edad de la menarquía y 35
la edad de la menopau- 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18
sia. M enarquia

E dad

55
53
51
Inicio m enopausia

49
47
45
43
41
39
37
35
FIG. 2. Relación entre la 0 1 2 3 4
edad de la menopausia
y el número de hijos. C antidad hijos

1 9
E dad
55
53
51
49
47
In icio m en opausia

45
43
41
39
37
35 FIG. 3. Relación entre el
5 10 15 20 25 30 35 40 45 tiempo de fumadoras y
la edad de la menopau-
T iem po fum adora sia.

Discusión exista en la pareja resulta fundamental, pues


como hemos visto, en esta etapa de la vida
La caracterización de la mujer climaté- se presentan distintos tipos de disfunciones
rica es fundamental para la verdadera com- que pueden complicar aún más la sinto-
prensión de todos los procesos clínicos, matología y el estado de ánimo de las pa-
sociales, psicológicos, etc., que ocurren en cientes.7
ella y poder verla de manera holística. La correlación entre la edad de la
Desde la edad de aparición de la meno- menarquía, el número de hijos y el tiempo
pausia tiene importancia, pues en muchas de fumadora con la edad de aparición de la
ocasiones los síntomas se exacerban alre- menopausia ha sido señalada como aspec-
dedor de ésta. En la literatura revisada se tos que influye en la misma, y aunque en
señala que la edad promedio de presenta- nuestro trabajo no encontramos signi-
ción es 51 años, con límites de 41 a 59 años.7 ficación estadística en ninguno de esos
La OMS señala que sucede entre los 47 y 3 aspectos, la literatura sí recoge relación
50; la mayoría de los autores y el grupo cien- entre ellos. Se ha señalado que mientras la
tífico de la OMS para la investigación de la menarquía sea más precoz, la menopausia
menopausia, coinciden en que existen va- podría ser más tardía, pero casi no existen
riaciones en el rango de edad de su apari- datos que confirmen tal planteamiento y los
ción.8,9 que hay son de dudoso rigor metodoló-
Un aspecto importante también lo es el gico.9 También se ha planteado que la edad
nivel cultural, ya que puede influir de ma- de la menopausia se adelanta en las fuma-
nera determinante en las diferentes formas doras10,11 y que un número importante de
de enfrentar la vida, lo que apoya el hecho embarazos retrasa su edad de aparición, lo
de que todas las manifestaciones del llama- cual no fue encontrado en nuestro trabajo.
do síndrome climatérico no dependen sola- Podemos concluir que la edad prome-
mente de la deprivación estrogénica.10 Tam- dio de aparición de la menopausia fue de
bién el estado conyugal y la relación que 47,7 años en nuestras pacientes, con un

2 0
rango entre 40 y 55 años. La mayoría de las No se demostró relación con el hábito de
pacientes tenía ocupación laboral; la esco- fumar, tiempo de fumadora, edad de la
laridad que predominó fue la de nivel me-
dio. La mayoría tenía pareja sexual, aun- menarquía y número de hijos con la edad
que fue menor en las posmenopáusicas. de aparición de la menopausia.

SUMMARY: A descriptive study of the whole female population aged 40-59 years cared for
by the doctor´s office # 16 of “Jorge Ruíz Ramírez” polyclinics was carried out, taking the family
medical history classification record of the doctor´s office as a basis. They were given a questionnaire
to find out some aspects of the climateric and menopause process such as age at menopause and its
possible relation with age at menarche, number of children, smoking, educational level, occupation
and marital status of the patients. Chi-square, Fisher´s test and Z test were used as statistical
methods to compare ratios. It is concluded that average age at which menopause appeared in these
patients was 47,7 years and it was not associated with menarche, number of children or smoking.
The majority of them were workers with middle educational level and the highest percentage
showed a fixed mate.

Subject headings:CLIMATERIC/psychology; MENOPAUSE/psychology; FAMILYPRACTICE; COMMUNITY


MEDICINE; PSYCHOLOGY, SOCIAL.

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2 1
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):22-7

Policlínico Docente “26 de Julio “

CARACTERIZACIÓN DE LA MUJER EN LA ETAPA


DEL CLIMATERIO (II)

Dr. Miguel Lugones Botell,1 Dra. Saylí Valdés Domínguez2 y Dra. Julia Pérez Piñero3

RESUMEN: Se realizó un estudio descriptivo transversal con la totalidad de la población


femenina del consultorio médico no. 16 del policlínico”Jorge Ruiz Ramírez” del municipio Playa,
comprendidas entre las edades de 40 a 59 años, partiendo del registro de la dispensarización de la
historia clínica familiar del consultorio y se les aplicó un cuestionario para conocer algunos aspectos
del proceso del climaterio y la menopausia, como: presencia de síntomas psíquicos y clínicos,
aparición de enfermedades crónicas y factores epidemiológicos relacionados con éstas, así como las
principales manifestaciones ginecológicas presentes. El total de pacientes se dividió para su estudio
en perimenopáusicas y posmenopáusicas. Se utilizó como método estadístico el Chi cuadrado, la
prueba de Fisher y la prueba Z para comparación de proporciones. Se concluyó que hubo incidencia
significativa de síntomas psíquicos con predominio en las posmenopáusicas, con manifestaciones de
ansiedad, depresión e irritabilidad, entre las más frecuentes. También predominaron los síntomas
clínicos en las posmenopáusicas, entre ellos la cefalea y dolores articulares, entre los más frecuen-
tes. Hubo predominio de la hipertensión arterial en ambos grupos asociada con la obesidad y el
hábito de fumar, como los principales factores de riesgo.

DeCS: CLIMATERIO/psicología; MENOPAUSIA/psicología; MEDICINA FAMILIAR; MEDICINA COMUNI-


TARIA; PSICOLOGIASOCIAL; FACTORES DE RIESGO; TRASTORNOS PSICOTICOS.

En el trabajo anterior expusimos algu- la edad de la menarquía, el número de hijos


nos aspectos que consideramos importan- y el tiempo de fumadora; además, algunas
tes para la caracterización de la mujer en la características socioculturales de estas.
etapa del climaterio y la menopausia, la edad Con igual criterio que allí, señalamos
de aparición de la menopausia y su posible que no debemos considerar a la mujer en
relación con algunos factores, entre ellos, esta etapa de la vida como un fenómeno

1
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Miembro de la Sección de Climaterio y Menopausia
de la Sociedad Cubana de Ginecología y Obstetricia. Policlínico Docente “26 de Julio”, Playa.
2
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Subdirectora Docente. Policlínico Docente “Jorge
Ruiz Ramírez,” Playa.
3
Especialista de I Grado en Bioestadística. Hospital Ginecoobstétrico “ Ramón González Coro. Miembro
de la Sección de Climaterio y Menopausia de la Sociedad Cubana de Ginecología y Obstetricia.

2 2
aislado, sino en todo un complejo holístico, Resultados
con todos los matices que conlleva esta
etapa en las diferentes esferas de la vida, En la tabla 1 pueden verse los princi-
por esto vamos a enfocar los aspectos que pales síntomas psicológicos, donde resal-
estudiaremos en lo adelante. tan 2 aspectos: predominio de síntomas
El síndrome climatérico, la aparición de psíquicos en estas pacientes, sobre todo
enfermedades crónicas no transmisibles y en las posmenopáusicas. La ansiedad so-
bresalió con 50,8 % en las perimeno-
su relación con algunos factores epide-
páusicas y el 64,5 % en las posmeno-
miológicos, así como las principales mani-
páusicas y la depresión para el 42 % en las
festaciones clínicas y ginecológicas, son perimenopáusicas y el 60,4 % en las
los principales aspectos que expondremos posmenopáusicas, con diferencias signifi-
en este trabajo. cativas entre ambas. También llama la aten-
ción en esta tabla que la mayoría de las
manifestaciones psíquicas como inseguri-
Métodos dad, miedo, intranquilidad, irritabilidad, etc.,
predominan en las posmenopáusicas, con
Se realizó un estudio descriptivo y diferencias significativas en relación con las
transversal de la totalidad de la población perimenopáusicas.
femenina del consultorio médico no. 16 del Los principales síntomas clínicos pue-
policlínico "Jorge Ruiz Ramírez"en las eda- den verse en la tabla 2, donde encontramos
des comprendidas entre 40 y 59 años, par- que hubo predominio de la cefalea con el
tiendo del registro de la dispensarización 52,6 % en las perimenopáusicas y el 75 %
en la historia clínica familiar existente en el en las posmenopáusicas, con diferencias
consultorio. significativas entre ambos grupos, segui-
De acuerdo con el estudio planteado, das de los dolores articulares con el 59,6 %
decidimos utilizar como técnica de recolec- en las perimenopáusicas y el 70,8 % en las
ción de datos el cuestionario. Este fue anó- posmenopáusicas, también con diferencias
nimo y en el mismo se recogieron las si- significativas.
En la tabla 3 podemos ver la aparición
guientes variables: principales síntomas clí-
de enfermedades crónicas con predominio
nicos y psíquicos, aparición de algunas
de la hipertensión arterial, tanto en las
enfermedades crónicas y su relación con
perimenopáusicas con el 33,3 %, como en
algunos factores como el hábito de fumar y
las posmenopáusicas para el 37,5 %.
la obesidad, etc. En la tabla 4 vemos como la mitad del
Antes de aplicar el cuestionario, nos en- total de las pacientes aproximadamente, tan-
trevistamos con cada una de las pacientes, to perimenopáusicas como posmenopáu-
les explicamos los objetivos de la investiga- sicas, tienen sobrepeso en nuestro estu-
ción y esclarecimos dudas al respecto. dio. En la segunda parte de la tabla 4 puede
Como método estadístico se utilizó el observarse que un número importante de
Chi cuadrado, la prueba de Fisher y la prue- pacientes perimenopáusicas fuman, para
ba Z para comparación de proporciones. el 64,9 % y el 66,6 % de las pos-
Los datos se procesaron mediante menopáusicas, lo que añade otro factor de
tabulación manual y se presentan en tablas riesgo importante a favor de las enfermeda-
para su mejor comprensión. des cardiovasculares y la osteoporosis.1,2

2 3
La tabla 5 muestra las principales alte- así como la displasia mamaria. No fue fre-
raciones ginecológicas presentadas y/o re- cuente la hiperpolimenorrea en nuestro gru-
feridas por las pacientes, donde vemos que po, pero estuvo presente en las perime-
predominó la sequedad vaginal en ambos nopáusicas exclusivamente para el 10,5 %
grupos, para el 24,5 %, en las perimeno- con diferencias significativas respecto al
páusicas y el 25 % en las posmenopáusicas, otro grupo.

TABLA 1. Síntomas psicológicos

Perimenopausia Posmenopausia
No. % No. % p

Con síntomas 44 77,19 47 97,92 X 2=7,974


Sin síntomas 13 22,80 1 2,08 1gl
Total 57 48 p=4,745 x 10-3

Perimenopausia Posmenopausia
Síntomas psicológicos No. % No. % p

Ansiedad 29 50,88 31 64,58 0,0787


Depresión 24 42,11 29 60,42 0,0308
Irritabilidad 22 38,60 27 56,25 0,0354
Inseguridad 7 12,28 12 25,0 0,0451
Miedo 5 8,77 13 27,08 6,566 x 10-3
Desconfianza 4 7,02 15 31,25 6,566 x 10-4
Intranquilidad 15 26,32 19 39,58 0,0739
Cambios en la memoria 4 7,02 16 33,33 1,563 x 10-3
Capacidad para tomar decisiones 6 10,53 12 25,0 0,0250
Sentimientos de inferioridad 5 8,77 3 6,25 0,3138

Fuente: Encuesta.

TABLA 2. Síntomas clínicos

Perimenopausia Posmenopausia
Síntomas No. % No. % p

Bochornos 9 15,79 18 37,5 5,612 x 10-3


Insomnios 27 47,37 36 75,0 1,991 x 10-6
Dolores articulares 34 59,65 34 70,83 0,1160
Cefalea 30 52,63 36 75,0 9,061 x 10-3
Calambres 11 19,30 19 39,58 0,0109
Palpitaciones 25 43,86 30 62,5 0,0284
Síntomas urinarios 4 7,02 9 18,75 0,0345

Fuente: Encuesta.

2 4
TABLA 3. Presencia de enfermedades crónicas

Enfermedades Perimenopausia Posmenopausia


crónicas No. % No. % p

Hipertensión arterial 19 33,33 18 37,5 0,3281


Diabetes mellitus 3 5,26 4 8,33 0,2649
Cardiopatía isquémica 7 12,28 6 12,5 0,4864

Fuente: Encuesta.

TABLA 4. Principales factores de riesgo encontrados

Perimenopausia Posmenopausia
Distribución según masa corporal No. % No. % p

Bajo peso 4 7,01 5 10,42 x 2=0,493


Normopeso 25 43,86 19 39,58 2gl
Sobrepeso 28 49,12 24 50,0 p=0,7814
Total 57 48

Perimenopausia Posmenopausia
Hábito de fumar No. % No. % p

No fumadoras 20 35,09 16 33,33 X2=2,107


Fumadoras 37 64,91 32 66,66 3gl

Total 57 48 p=0,5504

Fuente: Encuesta.

TABLA 5. Síntomas y/o signos ginecológicos encontrados

Síntomas y Perimenopausia Posmenopausia


signos No. % No. % p

Amenorrea 3 5,26 0 0,0 0,0534


Hiperpolimenorrea 6 10,53 0 0,0 0,0103
Baches amenorreicos 7 12,28 0 0,0 5,983 x 10-3
Leucorrea 11 19,29 9 18,75 0,4716
Sequedad vaginal 14 24,56 12 25,0 0,4793
Nódulo de mama 3 5,25 2 4,16 0,3963
Displasia mamaria 10 17,54 10 20,83 0,3345

Perimenopausia Posmenopausia
Operaciones ginecológicas No. % No. % p

Fibromas 1 1,75 9 18,75 1,561 x 10-3


Quiste de ovario 1 1,75 0 0,0 0,1782 x 10-3
Hematoma retroplacentario 0 0,0 1 2,08 0,1368

Fuente: Encuesta.

2 5
Discusión Creemos muy importante destacar la
aparición de algunas enfermedades cróni-
El climaterio y la menopausia están cas en esta etapa, que para algunos auto-
considerados entre las circunstancias psi- res tiene mucho que ver con la presencia
cológicas de causa endocrina mediados por del estrés y sus manifestaciones. 3 La
el estrés y con manifestaciones considera- hipertensión arterial y la cardiopatía
das como severas,3 como la irritabilidad, isquémica son afecciones cuya morbilidad
cefalea, signos de ansiedad (sudor, agita- aumenta durante el climaterio y constitu-
ción, temor, etc.) y depresión (olvido, tris- yen la mayor causa de muerte para la mujer
teza, etc.), entre otros. Solamente teniendo en el mundo.9 Estas enfermedades guardan
en cuenta estos aspectos, que por supues- relación con el estilo de vida y como pudi-
to, no son todos, se comprende la enorme
mos observar en la tabla 4, un número im-
importancia que tiene estudiar a este grupo
portante de estas pacientes estaba sobre-
en la atención primaria, para conocer sus
peso y fumaban, lo que añade factores de
principales problemas, manifestaciones y
condiciones de vida, entre otros aspectos, riesgo importantes para estas enfermeda-
y poder actuar sobre ellos. Las manifesta- des y otras como la osteoporosis.9
ciones psíquicas son muy frecuentes en También resulta de mucho interés cono-
esta etapa,4-6 que si bien no tienen por qué cer los principales trastornos ginecológicos
conducir al deterioro de la salud mental, sí que ocurren, como la hiperpolimenorrea, por
se traducen en una disminución de la satis- tener relación con la aparición del adeno-
facción personal e influyen en muchos as- carcioma de endometrio; aunque no siempre
pectos de la vida y en las relaciones perso- es así, deben seguirse muy de cerca estos
nales y familiares. También los factores casos. Tampoco deben descuidarse las en-
sociales inciden en esta etapa, como son fermedades de la mama, ya que como se co-
la cercanía de la jubilación, que crea pre- noce, el cáncer de mama tiene relación con la
ocupaciones lógicas, económicas y labo- aparición tardía de la menopausia.
rales y que pueden potenciar sinérgica- Podemos concluir que hubo inciden-
mente los malestares antes señalados. cia significativa de síntomas psicológicos,
El síndrome climatérico se presenta con predominio en las posmenopáusicas, y
con mucha frecuencia, ocurre en 2 de la ansiedad, la depresión y la irritabilidad
cada 3 mujeres.7,8 Este cuadro, como ya son los más frecuentes. Se encontró predo-
señalamos, se ve favorecido por el estrés,
minio de síntomas clínicos, principalmente
el calor, el ayuno y el consumo de alco-
en las posmenopáusicas, como cefalea y
hol, entre otros aspectos. En nuestro
dolores articulares que fueron los más fre-
medio, las crisis vasomotoras afectan a
cuentes. Predominó la hipertensión arterial
más del 80 % de las mujeres y se pueden
confundir con otras afecciones como en ambos grupos, seguidos de la cardiopa-
hipoglicemia o "isquemia miocárdica", por tía isquémica. La obesidad y el hábito de
lo que el médico debe estar muy bien fumar fueron los principales factores de ries-
documentado de las características clíni- go encontrados. Predominó la sequedad
cas de estas mujeres y que ya señalamos en vaginal y la displasia de mama dentro de las
las 2 primeras tablas. alteraciones ginecológicas encontradas.

2 6
SUMMARY: A cross-sectional descriptive study of the whole female population aged 40-59
years cared for by doctor´s office #16 of “Jorge Ruíz Ramírez” polyclinics in Playa municipality was
conducted, taking the family medical history classification record of the doctor’s office as a basis.
These patients were applied a questionnaire to find out some aspects of the climateric and menopause
process such as: psychic and clinical symptoms, occurrence of chronic diseases and epidemiological
factors related to them as well as the main gynecological manifestations. The patients were divided
into perimenopausal and postmenopausal for their study. Chi square, Fisher test and Z test were
used as statistical methods for comparing ratios. It is concluded that there was a significant incidence
of psychic symptoms predominantly in postmenopausal females, with anxiety, depression and
irritability as the most frequent ones. Also, headache and joint pains were the most prevailing
clinical symptoms in postmenopausal women. Blood hypertension predominated in both groups,
associated with obesity and smoking that were the fundamental risk factors.

Subject headings: CLIMATERIC/psychology, MENOPAUSE/psychology; FAMILY PRACTICE; COMMUNITY


MEDICINE, SOCIAL; RISK FACTORS; DISORDERS, PSYCHOTIC.

Referencias bibliográficas 6. Navarro D, García CT. Aspectos psicosociales


relacionados con la mujer menopáusica.
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térico. Aspectos clínicos. Rev Cubana Endo-
Treatment of the postmenopausal woman
crin 1989;1:89-97.
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2. Lobo R. Effects of hormonal replacement on therapy and life in Swedish postmenopausal
lipids and lipoprotein in postmenopausal women. En: Flint M, Kronenberg F, Utians
women. J Clin Endocrinol Metab 1991; Weds. Multidisciplinary aspects of meno-
73:925-30. pause. Ann New York Academy Sci 1990;
3. Hernández Mesa N, Anías Calderón J. 592:445-47.
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8(3):261-70. Hipertension Arterial. Su control en el nivel
primario. Rev Cubana Med Gen Integr
4. Lezcano Ramos J, Rodríguez R, González F,
1992;8(3):195-213.
Ferrer J. Estudio de los trastornos psíquicos y
somáticos que inciden en el climaterio. Rev Recibido:19 de marzo del 2001. Aprobado: 23 de
Cubana Med Gen Integr 1993;9(2):121-5. marzo del 2001.
5. Navarrro D, Artiles L. La menopausia no es Dr. Miguel Lugones Botell. Policlínico Docente
el fin de la vida. Rev Sex Soc 1996;5:35-9. “26 de Julio”, Playa, Ciudad de La Habana, Cuba.

2 7
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):28-33

Hospital Provincial Ginecoobstétrico Docente


“Mártires de Playa Girón”

USO PROFILACTICO DE ANTIBIÓTICOS EN LA HISTERECTOMÍA


ABDOMINAL

Dr. Carlos Pérez Velázquez,1 Dra. Mabel García Román2 y Dr. Arturo Pérez de Villa Amil3

RESUMEN: Se estudiaron 206 histerectomías en el período correspondiente al año 1996 en el


Hospital Ginecoobstétrico Provincial Docente “Mártires de Girón” de Cienfuegos, se excluyeron las
histerectomías abdominales realizadas por procesos sépticos ginecológicos y las histerectomías
obstétricas. Se realizó un estudio comparativo relacionado con el empleo o no de antibioticoterapia
profiláctica en este tipo de intervención quirúrgica, se analizó el efecto que el uso de antibióticos
ejerce sobre algunas variables que pudieran influir en la morbilidad quirúrgica séptica en la
histerectomía abdominal, como son: tipo de incisión y técnica quirúrgica empleada. Quedó demostra-
do el efecto protector que sobre la morbilidad quirúrgica séptica tiene el uso de antibiótico profilác-
tico en la histerectomía abdominal.

DeCS: HISTERECTOMIA; ANTIBIOTICOS/uso terapéutico; MORBILIDAD; PROFILAXIS ANTIBIÓTICA.

Cuando la mujer está en edad repro- la etapa reproductiva, por esto en muchos
ductiva y no tiene hijos aunque los desee, casos no constituye un problema decidir
la decisión de una histerectomía debe ser su extirpación.
analizada de una forma particular y sólo se Pero en los tiempos actuales en que
indicará sin dudarlo cuando la permanen- los progresos de la medicina han disminui-
cia del órgano ponga en peligro su vida. do los riesgos operatorios, la histerectomía
Según parece, el útero resulta útil sólo para continúa siendo una operación mayor con
la procreación, por lo cual se puede pres- morbilidad séptica y riesgo de lesión a otros
cindir de él cuando se hayan tenido los hi- órganos íntimamente relacionados con el
jos deseados.1 útero, por lo tanto, como toda cirugía, sólo
La mayor parte de las afecciones que debe realizarse cuando sea estrictamente
presenta este órgano aparecen después de necesario.

1
Especialista de I Grado en Ginecoobstetricia. Instructor.
2
Especialista de I Grado en Ginecoobstetricia.
3
Especialista de II Grado en Neonatología. Profesor Auxiliar.

2 8
Esta operación no acortará la esperan- En la bibliografía más reciente algunos
za de vida de una mujer, por el contrario, autores plantean que cuando se adminis-
puede en muchas de ellas evitar la muerte tran antibióticos profilácticamente en ciru-
por cáncer de útero, no afecta la sensibili- gía abdominal, la primera dosis debe indi-
dad, ni el deseo sexual, ni ocasiona moles- carse antes de comenzar la intervención
tias durante el coito.2 quirúrgica.9
El problema de la infección posopera- Otros autores plantean la utilización
toria después de la histerectomía abdomi- simple de piperacillin contra una triple do-
nal se ha definido de forma clara y ha sido sis de cefoxitin; ambas son efectivas en in-
objeto de un estudio constante. En un in- fecciones posoperatorias después de la
forme ofrecido de 600 histerectomías abdo- histerectomía abdominal.10
minales realizadas por White3 se registró Estudios realizados en Perú demostra-
una morbilidad febril de 36 %. ron que se utilizó antibioticoperapia
En más de 2 000 histerectomías abdo- profiláctica (cefalotina 1g endovenoso) mi-
minales realizadas por Gray, la frecuencia nutos antes de la intervención quirúrgica y
de la morbilidad febril fue del 18,2 %.4 Allen luego 2 dosis más a intervalos de 6 horas;
y Wheeless comunicaron la exitosa reduc- se aplicaron pruebas de significación esta-
ción de la morbilidad febril poshisterectomía dística, que evidenciaban que la antibioti-
observada en el 41 % de las enfermas con coterapia profiláctica utilizada carecía de
intervenciones abdominales, hasta el 14,1 % valor.11
cuando se administra profilácticamente En una clínica ginecológica en Per-
antibioticoterapia.5 nambuco fueron sometidas 104 mujeres a
Ohm y Galask señalaron una morbi- histerectomía total abdominal electiva, don-
lidad infecciosa posoperatoria del 39 % en de se demostró la efectividad de la antibio-
pacientes sin empleo de antibioticoterapia ticoterapia profiláctica, fue utilizada la
profiláctica, en comparación con un 15 % cefalotina 1 g, dosis única momentos antes
de morbilidad en pacientes tratadas con de comenzar la inducción anestésica. 12
antibióticos.6 Lo mismo señala el Dr. Nelson Navarre-
La histerectomía abdominal se consi- te en un estudio realizado en el Hospital
dera una operación limpia-contaminada, por Carlos Andrades de Quito, el cual obtuvo
el hecho de poner en contacto la cavidad resultados favorables al utilizar antibiótico
abdominal con la vagina, con un mayor ries- en profilaxis quirúrgica en dicha operación.13
go de infección; por esto, muchos ciruja- Otros autores señalan que la antibioti-
nos son partidarios del empleo profiláctico
coterapia profiláctica en la histerectomía
de antibioticoterapia.
abdominal, disminuyó el riesgo de sepsis
Antiguamente se evaluaba la calidad
posquirúrgica.14-16
de la atención médica según la mortalidad
por sepsis como indicador preponderante,
esta tasa disminuyó al aparecer la
antibioticoterapia.7 Métodos
Algunos autores señalan que la pre-
vención y control de la infección se basa Se realizó un estudio longitudinal en el
en principios de higiene, técnica quirúrgica que fueron analizadas 206 histerectomías
correcta, medidas de asepsia indispensa- abdominales realizadas en el período corres-
bles y no confiar solamente en el uso de pondiente al año 1996, se practicó un análi-
antibióticos.8 sis comparativo del uso o no de antibióti-

2 9
coterapia profiláctica en dichas intervencio- H1: con el uso de la antibioticoterapia profi-
nes quirúrgicas. láctica existen diferencias respecto a la
De nuestro trabajo se excluyeron la aparición de sepsis posquirúrgica, se to-
histerectomías abdominales realizadas por maron como referencia las variables que pu-
procesos sépticos ginecológicos agudos o dieran influir en la misma.
crónicos (donde el uso de antibiótico es
terapéutico) y las histerectomías obstétri- Los tipos de sepsis que se tomaron en
cas. cuenta fueron:
La muestra fue recogida mediante una
encuesta donde se expuso una serie de va- - Sepsis de cúpula vaginal.
riables como son: tipo de incisión, técnica - Sepsis de pared abdominal.
quirúrgica y complicaciones. - Sepsis urinaria.
Los datos obtenidos se llevaron a ta-
blas y fueron expresados en números y
porcentajes a los cuales se les aplicaron pro- Resultados
cedimientos estadísticos como: X2 correc-
ción de Yates, aceptado como valor de sig- En el período estudiado se analizaron
nificación p<0,05; riesgo relativo y estudio
206 histerectomías abdominales, en las cua-
estratificado de las muestras.
les se usó antibioticoterapia profiláctica en
Interpretación de los valores de riesgo
111 pacientes para el 53,9 % y no se usó en
relativo:
95 pacientes lo que representa el 46,1 %.
Esta terapéutica quirúrgica se realizó
- < 0,04 - Protección fuerte
con mayor frecuencia en las edades co-
- 0,04 – 0,56 - Protección moderada
- 0,57 – 0,83 - Protección débil rrespondientes entre 40 y 49 años, para el
- 0,84 – 1,20 - Protección insuficiente 51,9 % del total de pacientes estudiadas; la
- 1,20 – 1,74 - Riesgo débil afección más frecuente fue el fibroma uteri-
- 1,75 – 2,50 - Riesgo moderado no para el 77,2 %.
- > 2,50 - Riesgo fuerte Con el uso de antibióticos en la inci-
sión longitudinal, se comprobó que de
La antibioticoterapia utilizada fue la 72 pacientes en las cuales no se utilizó
combinación de penicilina más quemicetina, antibioticoterapia presentaron sepsis 17, lo
según lo establecido por el comité fármaco- cual correspondió con el 23,6 % y 55 pa-
terapéutico de nuestro centro hospitalario. cientes no la presentaron lo que representa
Se administró la primera dosis en la etapa el 76,4 %.
preoperatoria y se mantuvo por un período De las 86 pacientes en las que se utili-
de 24 horas. zó antibioticoterapia profiláctica se compro-
Se plantearon 2 hipótesis: bó sepsis en 9 para el 10,5 % y 77 no la
presentaron, para el 89,5 %.
H0: con el uso de la antibioticoterapia profi- Al realizársele pruebas estadísticas
láctica no existen diferencias respecto a la presentan X2:4,02 con una p<0,05 y un
aparición de sepsis posquirúrgica, se to- RR:0,44 con un intervalo de 0,21-0,93 es-
maron como referencia las variables que pu- tas fueron significativas, lo que demues-
dieran influir. tra el efecto protector en las pacientes en

3 0
las que se utilizó antibioticoterapia TABLA 2. Comportamiento del uso de
antibióticos en la morbilidad séptica en la
profiláctica (tabla 1).
incisión transversal

TABLA 1. Comportamiento del uso de anti- Incisión


biótico en la morbilidad séptica en la inci- transversal Sepsis No sepsis Total
sión longitudinal
Antibiótico 2 23 25
Incisión 8,0 % 92,0 % 100 %
longitudinal Sepsis No sepsis Total No antibiótico 6 17 23
26,1 % 73,9 % 100 %
Anbibiótico 9 77 86
10,5 % 89,5 % 100% X2: 1,67
No antibiótico 17 55 72 p>0,05
23,6 % 76,4 % 100 % RR: 0,31 (0,07-1,37)
IC: 95 %
X2:4,02
p<0,05 Se comprueba la significación estadís-
RR: 0,44 (0,21-0,93) tica y se obtuvieron los valores siguientes:
IC: 95 %
X2:4,69 con una p<0,05 y un RR:0,35 con un
intervalo de 0,14-0,37, queda demostrado el
Al comparar incisión transversal con- efecto protector del antibiótico en la varia-
tra morbilidad séptica y uso o no de anti- ble estudiada (tabla 3).
biótico profiláctico, hay que señalar que 2 pa-
cientes presentaron sepsis para el 8 %, con-
TABLA 3. Comportamiento del uso de anti-
tra 23 pacientes sin sepsis (92 %) cuando biótico en la morbilidad séptica en cúpula
se utilizó antibiótico. vaginal cerrada
Cuando no se usó antibiótico se infec-
Cúpula vagi-
taron 6 pacientes para el 26,1 % y 17 no la nal cerrada Sepsis No sepsis Total
presentaron, para el 73,9 %.
Al realizar pruebas estadísticas com- Antibiótico 6 73 79
7,6 % 92,4 % 100 %
probamos que no son significativas con un No antibiótico 1 4 51 65
valor de X2:1,67 con una p>0,05 y un 21,5 % 78,5 % 100 %
RR:0,31 con un intervalo de 0,07-1,37. Es
X2: 4,69
bueno destacar que expresándolo en por-
p>0,05
centaje, la sepsis disminuye en la medida RR: 0,35 (0,14-0,37)
que se utiliza antibioticoterapia profiláctica IC: 95 %
(tabla 2).
Al analizar la antibioticoterapia en la Cuando analizamos, en sentido gene-
técnica a cúpula cerrada, podemos obser- ral, el uso o no de antibioticoterapia
var que la utilizamos en 79 pacientes, 6 de profiláctica relacionado con la morbilidad
las cuales presentaron sepsis para el 7,6 %; séptica, obtuvimos los siguientes resulta-
y las otras 73, no, para el 92,4 %. No utiliza- dos: se utilizó antibiótico en 111 pacientes,
mos antibioticoterapia en 65 pacientes, de 100 de las cuales no presentaron sepsis para
las cuales 14 manifestaron sepsis para el el 90,1 %; la sepsis se manifestó en 11 pa-
21,5 % y 51 no, con el 78,5 % del total. cientes que correspondía al 9,9 %.

3 1
TABLA 4. Uso o no de antibióticoterapia pro- 0,21-0,80; quedó demostrado el efecto pro-
filáctica relacionada con la morbilidad qui- tector de la antibioticoterapia profiláctica
rúrgica séptica
en la histerectomía abdominal (tabla 4).

Sepsis No sepsis Total

Antibiótico 11 100 111 Discusión


9,9 % 90,1 % 100 %
No antibiótico 23 72 95
24,2 % 75,8 % 100 % En nuestro estudio quedó demostrado
el efecto protector que ejerce la antibio-
Total 34 172 206 ticoterapia utilizada en la histerectomía ab-
16,5 % 83,5 % 100 %
dominal en la incisión longitudinal.
X2: 6,59 Al realizar pruebas estadísticas en el
p<0,05 uso de antibióticos profilácticos y la inci-
RR: 0,41 (0,21-0,80)
IC: 95 % sión transversal no se comprobó una signi-
ficación estadística, pensamos que se de-
Cuando no utilizamos antibióticos se bió a la escasa muestra encontrada en las
infectaron 23 pacientes (24,2 %) y en 72 no operadas en las cuales se utilizó este tipo
se presentó sepsis (75,8 %) para un total de de incisión quirúrgica.
95 pacientes estudiadas en este grupo. Quedó demostrado el efecto protector
De 206 pacientes que constituyeron el
que ejerce la antibioticoterapia utilizada,
universo de nuestro estudio, 172 no pre-
sentaron sepsis (83,5 %) y 34 se infectaron tanto en la técnica a cúpula cerrada como la
(16,5 %). relacionada con la morbilidad quirúrgica
Se aplicaron pruebas estadísticas sig- séptica general, datos estos que concuer-
nificativas con valores de X2:6,59 con una dan con los de diferentes trabajos revisa-
p<0,05 y un RR:0,41 con un intervalo de dos.5,6,9,10,12,13-16

SUMMARY: Two-hundred and six hysterectomies were studied in 1996 in “Mártires de


Girón” provincial teaching gynecoobstetric hospital in Cienfuegos, but abdominal hysterectomies
due to gynecological septic processes and obstetrics hysterectomies were excluded. A comparative
study involving the use of antibiotic prophylaxis in this type of surgical intervention was made, in
which the effect of the use of antibiotics on some variables that may affect surgical septic morbidity
in abdominal hysterectomy such as type of incision and surgical technique were analyzed. It was
proved that the use of prophylactic antibiotics had a protective effect on abdominal hysterectomy.

Subject headings: HYSTERECTOMY; ANTIBIOTICS/therapeutic use; MORBIDITY; ANTIBIOTIC


PROPHYLAXIS

3 2
Referencias bibliográficas vs an intraoperative first dose. Br j Surg
1989;76:52-6.
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Habana: Editorial Científico-Técnica,1985. 21(4):181-5.
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8. Herrera OB. Sepsis nosocomial (Trabajo para 1995;50(11):795-805.
optar por el título de especialista de primer
grado en Ginecoobstetricia. 1983 Hospital Recibido: 2 de agosto del 2000. Aprobado: 12 de
Provincial Ginecoobstétrico Docente “Már- marzo del 2001.
tires de Playa Girón”,Cienfuegos. Dr. Carlos Pérez Velázquez. Hospital Provincial
9. Bates T. Timing of prophylactic antibiotics Ginecoobstétrico Docente Mártires de Playa
in abdominal surgery: trial of a preoperative Girón, Cienfuegos, Cuba.

3 3
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):34-8

Hospital Docente Ginecoobstétrico


“Eusebio Hernández”

EMBARAZO HETEROTÓPICO. PRESENTACIÓN DE UN CASO

Dr. Ramón García Mirás,1 Dr. Jany Gallego Ramos,2 Dr. José Prado González3 y Dra. Edilia
Trelles Aguabella4

RESUMEN: Se presentó un caso de gestación heterotópica. Se revisaron algunos aspectos


de su etiología, diagnóstico y tratamiento. Su frecuencia ha aumentado en los últimos años con las
técnicas de reproducción asistida. En este caso, la paciente presentó 7 semanas después de haberse
extraído un feto del fondo de saco de Douglas, un óbito de feto intraútero, complicación frecuente de
este tipo de caso.

DeCS: EMBARAZO; EMBARAZO ECTOPICO/etiología; EMBARAZO ECTOPICO/diagnóstico; EMBARAZO


ECTOPICO/terapia; COMPLICACIONES DEL EMBARAZO; TECNICAS DE REPRODUCCION /efectos ad-
versos.

El embarazo heterotópico es la combi- reproducción asistida a la práctica médica.


nación del embarazo intra y extrauterino y Ciertamente, la incidencia de embarazos
resulta raro, aunque cada vez más frecuen- combinados puede ser hasta del 1 % cuan-
te. El primer caso fue reportado por do se usa esta tecnología.3
Duverney en 1708, durante una autopsia.1 Otro factor que puede ser importante
La frecuencia reportada en 1948 fue de es el aumento de los casos con enfermedad
1:30 000 embarazos. Existen referencias re- inflamatoria pélvica, factor que claramente
cientes de cifras que oscilan entre 1:1 300 a se ha asociado con la aparición de embara-
1:15 600 embarazos.2,3 Este aumento en la zo extrauterino.4
frecuencia puede verse asociado con fenó- En pacientes sin factores de riesgo con-
menos ligados al ingreso de las técnicas de tinúa siendo un suceso obstétrico exótico.

1
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Profesor Asistente. Facultad Finlay-Albarrán
ISCM-H.
2
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Residente de 2do año en Ginecología y Obstetricia.
3
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Policlínico “Isidro de Armas.„
4
Especialista de I Grado en Radiología.

3 4
Caso clínico izquierda sin otros síntomas acompañan-
tes, por lo que se decide su ingreso para
Paciente de 31 años de edad, de la raza estudio y tratamiento. Se realizan exámenes
negra, con antecedentes de asma bronquial complementarios generales que resultan ne-
e hipertensión arterial crónica, con una his- gativos, excepto el estudio ultrasonográfico
toria obstétrica de embarazo (2), partos (0), el cual informa embarazo gemelar heterotó-
abortos (1, provocado) y una edad gesta- pico, con un feto en la cavidad uterina y
cional de 18 sem , que acude al cuerpo de otro en el fondo de saco de Douglas (figu-
guardia por dolor en hipogastrio y fosa ilíaca ras 1 y 2).

FIG.1.

FIG.2.

3 5
Se le realiza laparotomía a la paciente y rable. Se egresa a la paciente a los 7 d. En la
se confirma el diagnóstico. Se le extrae del semana 26 de la gestación se comprueba
fondo de saco de Douglas, embarazo de ecográficamente óbito del feto intraútero y
aproximadamente 18 sem y placenta (figu- se realiza a la paciente el método de Rivanol,
ras 3 y 4). Se realiza salpingectomía parcial con lo cual expulsa un feto de 680 g de peso.
izquierda por encontrarse el embarazo ad- El resultado de la necropsia informó como
herido a la fimbria de dicha trompa. conclusiones, un crecimiento intrauterino
La evolución posquirúrgica fue satis- retardado, muerte fetal de aproximadamen-
factoria y se mantuvo el embarazo intraute- te 10 d y signos de deciduitis y corio-
rino con buena vitalidad y evolución favo- amnionitis.

FIG.3.

FIG.4.

3 6
Discusión Clínicamente se debe sospechar emba-
razo heterotópico ante la presencia de:
La incidencia de embarazo heterotó-
pico ha aumentado sorprendentemente en - Embarazo con antecedentes de técnicas
los últimos 50 años. En la actualidad exis- de reproducción asistida.
ten referencias que indican como 1-4 de - Persistencia de síntomas y signos de
cada 100 pacientes sometidas a técnicas embarazo después de un legrado obsté-
trico.
de fertilización in vitro con transferencia
- Persistencia de títulos altos de gona-
de embriones, puede presentar una gesta-
dotropina coriónica después de un
ción heterotópica. La incidencia de emba-
legrado obstétrico.
razo combinado es 400 veces más alta en
- Cuadro clínico de abdomen quirúrgico
presencia de técnicas de reproducción asis- con masa anexial y embarazo intrauteri-
tida que en gestaciones espontáneas.5,6 no.
Así mismo se ha visto cómo la transfe-
rencia de 4 embriones aumenta el riesgo de En estos casos el proceder es quirúrgi-
gestación combinada.7 Si el riesgo global co y las posibilidades dependen de la edad
de gestación heterotópica secundaria a gestacional y del sitio de implantación. Si la
fertilización in vitro con transferencia de placenta se inserta en un órgano no vital
4 embriones ha sido estimada en 1:119 em- (epiplón, trompa), no se debe intentar des-
barazos, la transferencia de más de 4 em- prenderla, sino extirpar el órgano con la
briones modifica cada cifra a 1:45 embarazos.8 placenta. Cuando se inserta en un órgano
Aún cuando su etiología no ha sido vital se debe seccionar el cordón umbilical
plenamente esclarecida, muchos de los fac- lo más próximo a la placenta y dejarla en su
tores son compartidos con aquellos referi- sitio.
dos para el embarazo ectópico, como la en- Mientras la tasa de mortalidad fetal
fermedad pélvica inflamatoria, factor para el embarazo extrauterino es superior
etiológico potencial en aproximadamente, al 95 %, la del intrauterino oscila entre 45
el 45 % de los casos de embarazo ectópico. y 65 %. La mortalidad materna es inferior al
Se ha asociado también con factor 1 % en caso de embarazo ectópico tubario.
etiológico el embarazo múltiple dicigoto, en Cuando el embarazo heterotópico es de lo-
calización intraabdominal, esta mortalidad
el cual ambos óvulos provenientes de 1 a
puede ser de hasta el 6 % según estudios
2 folículos son fertilizados en el mismo coi-
realizados.12-14
to. Otros factores posibles son la super-
Concluimos que el embarazo hetero-
fecundación, la superfetación y la hiper-
tópico “espontáneo” sin factores de riesgo
estimulación ovárica.9 continúa siendo raro. El ultrasonido es el
Habitualmente, el diagnóstico es método diagnóstico más importante en esta
ecográfico, las imágenes más frecuentes entidad. El tratamiento es quirúrgico. Cuan-
visualizadas son: masa anexial y líquido li- do se implanta en el fondo de saco es facti-
bre en el fondo de saco en presencia de ble la extracción del ectópico y evolución
embarazo intrauterino.10 espontánea del eutópico, el cual está ex-
El ultrasonido transvaginal ha despla- puesto a complicaciones, entre las que se
zado casi por completo la ecografía con- encuentra el óbito fetal, como en el caso
vencional transvesical.11 que reportamos.

3 7
SUMMARY: A case of heterotopic pregnancy is presented. Some aspects of the etiology,
diagnosis and treatment of this entity are reviewed. The frequency of this pregnancy has increased
in the last years with the implementation of assisted-reproduction techniques. In this case, the
patient presented with a dead intrauterine fetus, a frequent complication in this type of cases,
7 weeks after she underwent the removal of a fetus from the bottom of her Douglas’s bag.

Subject headings: PREGNANCY, PREGNANCY ECTOPIC/etiology; PREGNANCY ECTOPIC/diagnosis;


PREGNANCY ECTOPIC/therapy; PREGNANCYCOMPLICATIONS; REPRODUCTION TECHNIQUES/adverse
effects.

Referencias bibliográficas ruptured interstitial pregnancy and subsequent


successful outcome of triplets. Am J Obstet
1. Voe RW de, Pratt JH. Simultaneous Gynecol 1995;172:216-7.
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13. Pisarka MD, Casson PR. Heterotropic abdo-
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heterotropic pregnancy. Fertil Steril marzo del 2001.
1994;61:1065-7. Dr. Ramón García Mirás. Calle 84 No. 4113 en-
8. Sherer DM, Scibetta JJ. Heterotopic quadruple tre 41 y 43, Marianao 14, Ciudad de La Habana,
gestation with laparoscopic resection of Cuba.

3 8
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):39-45

OBSTETRICIA
Hospital Ginecoobstétrico Docente de Matanzas
“Julio Alfonso Medina”

MORTALIDAD PERINATAL I. ALGUNOS FACTORES


QUE INFLUYERON EN ÉSTA DURANTE 1998

Dr. Jesús Hernández Cabrera, 1 Dr. Abelardo de la Rua-Batistapau2 y Lic. Roberto Suárez
Ojeda3

RESUMEN: Los indicadores de mortalidad perinatal constituyen hoy en día eficaces evaluadores
de las condiciones de desarrollo de un país y del seguimiento obstétrico, por lo que realizamos un
estudio prospectivo descriptivo del año 1998 en el Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas
“Julio Alfonso Medina”, de los productos y neonatos fallecidos. De un total de 3 707 naci-
mientos ocurrieron en 16 pacientes, 17 defunciones neonatales (1 gemelar) para tasa de 2,7 x 1 000 NV
y 63 pacientes aportaron 65 muertes fetales (2 gemelares) para una tasa de 14 x 1 000 NV (la
muestra está formada por 79 pacientes con 82 fetos). Una base de datos permitió la recogida de los
datos primarios que después de una forma descriptiva mediante su procesamiento en una computa-
dora IBM de la Universidad de Matanzas y por las bondades del sistema MICROSTAT, se aplicó el
∝≤ 0,01). Se elaboraron tablas estadísticas para su discusión y se
porcentaje, la prueba de x2 (∝≤
comparó con la bibliografía actualizada. Se encontró que las mujeres con mejores condiciones de
fecundidad, nulíparas, con enfermedad obstétrica y partos transpelvianos fueron las que predomina-
ron en la muestra. Las muertes neonatales ocurrieron en su mayoría en niños producto de edades
gestacionales extremas y con peso debajo de 2 500 g.

DeCS:MORTALIDAD INFANTIL; FACTORES DE RIESGO; EDAD MATERNA; EDAD MATERNA IGUAL O


SUPERIOR A 35 AÑOS; EDAD GESTACIONAL; RECIEN NACIDO DE BAJO PESO.

1
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Hospital Ginecoobstétrico Docente de Matanzas.
Instructor FCM. Presidente del Comité Mortalidad Infantil.
2
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Hospital Ginecoobstétrico Docente de Matanzas.
Servicios de Cuidados Especiales Perinatales.
3
Licenciado en Matemática- Computación. Profesor Universidad de Matanzas.

3 9
Desde el triunfo de nuestro proceso til hospitalaria y los demás datos estadísti-
revolucionario, la salud del pueblo en ge- cos al respecto.
neral y la materno-infantil en particular han Se organizó una base de datos que
sido en nuestra Patria objeto de “cuidados recogió los datos primarios que, en forma
y asistencia especializados”.1 de variables después, fueron organiza-
Para disminuir los índices de mortali- dos. De un total de 3 707 nacimientos
dad perinatal y mortalidad infantil se hace nos encontramos con 63 pacientes que
necesario enfatizar el trabajo profiláctico aportaron, 65 muertes fetales (inciden-
que se debe realizar1-12 y concentrar las in- cia de gemelos) y de 16 pacientes que
vestigaciones en aquellos factores que fa- aportaron 17 muertes neonatales (inciden-
vorecen la prematuridad y la hipotrofia y cia de gemelos) para una muestra total de
propician el producto final del nacimiento 82 casos que nos aportó una mortalidad
con el aumento de los datos neurológicos perinatal I de 82 casos para el 21,3 x 1 000 NV;
y retraso mental de los futuros recién naci- fetal tardía, 65 casos para el 17,9 x 1 000 NV
dos. 2-13 y neonatal precoz, 17 casos para el 3,4 x
Bajo estas condiciones y como el pe- 1 000 NV.
ríodo fetal es la piedra angular en lo que se El método utilizado fue eminentemente
refiere a la reducción de la mortalidad ma- descriptivo, sobre la base de los datos re-
terno-infantil debe reflejarse en criterios cogidos de los materiales antes citados y
aplicables que identifiquen temporalmente fueron procesados los resultados en una
los factores de riesgo,1-16 que se puedan computadora IBM de la Universidad de Ma-
presentar en la gestación –periparto y en el tanzas. Aprovechando las bondades del sis-
período de fertilidad de la pareja y ofrecer tema MICROSTAT se halló el método de
atención y cuidados especializados.1-20 porcentaje, la prueba del X2 en aquellas ta-
Convencidos de la necesidad de se- blas que quisimos demostrar mayor signifi-
guir mejorando el tratamiento obstétrico cación donde ∝≤ 0,01 y medias aritméticas.
para obtener resultados óptimos en nues- Una bibliografía actualizada que trata
tros indicadores perinatales, nos motiva sobre el tema escogido, sirvió para compa-
efectuar un estudio del comportamiento de rar nuestros resultados.
estos durante un período de 1 año y anali-
zar algunos factores concernientes, que
constituyen los objetivos generales de tra- Resultados
bajo.
La edad materna es un indicador muy
discutido en los estudios referentes a la
Métodos mortalidad infantil, tanto nacionales 3-13
como del mundo.15-20 Algunos autores de-
Solicitamos del Departamento de dican sus estudios específicamente a las
Achivos y Estadísticas del Hospital Docen-
edades extremas de la vida3,15,16,19,20 por con-
te Ginecoobstétrico de Matanzas durante
siderarlas de mayor riesgo.
el año 1998, las historias de las pacientes
que ocasionaron mortalidad perinatal I en No podemos afirmar que en nuestros
la referida institución, tuvimos en conside- casos las edades extremas de la vida tuvie-
ración también las actas y protocolos de ran una significación estadística de peso al
necropsias del Comité de mortalidad infan- aplicar el X2 (tabla 1).

4 0
En la tabla 2 encontramos que las tes de muertes fetales, 47 para 74,6 %. Na-
primigrávidas tuvieron mayor mortalidad, die duda lo negativo de este indicador al
lo cual coincide con los estudios revisa- estudiar la mortalidad perinatal.
dos;5,15,16,20 en contraposición con lo plan- En la tabla 3 analizamos las entidades
teado por otros autores que destacan que nosológicas. Entendemos que la calidad de
en las multíparas es donde se presenta la la atención prenatal, la correcta clasifica-
mayor incidencia de mortalidad pe- ción de riesgo y su tratamiento adecuado e
rinatal.4,6,7,10 interdisciplinario enmarcarán los pesos es-
Se recoge como dato de interés el an- pecíficos de la tasa de mortalidad perinatal,
tecedente de abortos (sin especificar cau- lo cual significa que los factores más im-
sas) y vemos que se presenta en un total de portantes que contribuyen a ésta son ple-
49 casos para el 55,6 % de la muestra con namente identificables y tienen usualmente la
predominio de las pacientes con anteceden- posibilidad de atención médica especializada.

TABLA 1. Incidencia de la edad materna en los diferentes grupos etáreos en relación con las
edades de las madres (mortalidad durante 1998)

Grupos étareos Total de Sin Muertes Muertes Media


(años) nacimientos mortalidad neonatales fetales Total % en años

Hasta 19 461 447 4 10 14 3,0 17,8


20-34 3 086 3 027 12 47 59 1,9 27,6
35 y más 160 154 0 6 6 3,7 37,4

Total 3 707 3 628 16 63 79 25,2

X2 = 4,54
D–f=2
p = 0,05
Fuente: Departamento Archivo y Estadística. Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas.

TABLA 2. Historia obstétrica

Muertes Muertes
neonatales fetales
Historia obstétrica No. No. % No. %

Antecedente de aborto 49 2 12,5 47 74,6


Nulíparas 38 11 * 68,8 27 42,8
Primíparas 34 3 18,8 31 49,2
Secundíparas 7 2 12,5 5 7,9

* Embarazo gemelar.
Fuente: Departamento de Archivo y Estadística. Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas.

4 1
TABLA 3. Entidades nosológicas encontradas
Muertes Muertes
neonatales fetales Total
Entidades nosológicas No. % No. % No. %

Enfermedad hipertensiva gravídica 5 31,3 11 17,5 16 20,3


Rotura prematura de membranas 6 37,5 10 15,8 16 20,3
Crecimiento intrauterino retardado 4 25,0 4 6,3 8 10,1
Hematoma retroplacentario 3 18,8 4 6,3 7 8,8
Gemelares 1 6,3 2 3,2 3 3,8
Diabetes mellitus gestacional 1 6,3 2 3,2 3 3,8
Desnutrición materna 2 12,5 11 17,4 13 16,4
Otros 1 6,3 15 23,8 16 20,3

Fuente: Departamento de Archivo y Estadística. Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas.

La bibliografía consultada también en- el seguimiento adecuado para con los ca-
cuentra estas entidades en mayor o menor sos de riesgo.
proporción, pero sobre todo la hipertensión En la tabla 5 vemos que fue en las ma-
arterial, el crecimiento intrauterino retarda- dres cuya edad gestacional se encontraba
do (CIUR),14-20 la ruptura prematura de las entre 28 y 34 sem en quienes ocurrió la ma-
membranas ovulares y las gestorragias que yor mortalidad. Los autores concuerdan
aparecen como significativos en la mortali- que a menor edad gestacional, menor peso
fetal y mayor riesgo de asfixia para el pro-
dad perinatal estudiada. En nuestro estu-
ducto.
dio, la desnutrición materna tuvo significa-
En la tabla 6 analizamos el peso en gra-
ción estadística, que concuerda con estu-
mos de los componentes de la mortalidad
dios revisados.
con sus correspondientes medias. Se ha
En la tabla 4 podemos apreciar la for- señalado la facilidad con que la enferme-
ma de parto en las muertes fetales y dad obstétrica repercute en la evolución de
neonatales. los productos, lo cual condiciona los índi-
Muchos autores demuestran que el he- ces de mortalidad y morbilidad con sus con-
cho de disminuir los casos de cesárea no
secuencias negativas posteriores, como
influye en el incremento de los indicadores
de morbilidad y mortalidad perinatal, sino destacamos en la tabla 3.
La mayor incidencia de muertes
neonatales ocurrió en niños cuyos pesos
TABLA 4. Vía del parto
estaban entre 1 000 y 1 499 g. Las muertes
Muertes Muertes Total fetales fueron más frecuentes en el grupo
Vía del parto neonatales fetales No. % que tenía entre 1 500 a 1 999 g.
Eutócico 9 58 67 81,7
La bibliografía destaca el elevado ries-
Fórceps 1 0 1 1,2 go de asfixia que presentan los fetos con
Cesárea 7 7 14 17,0 bajo peso (menos de 2 500 g).
Podemos concluir que la enfermedad
Total 17 65 8 2 100,0
hipertensiva gravídica, la rotura prema-
Fuente: Departamento de Archivo y Estadística. tura de las membranas ovulares, el creci-
Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas. miento intrauterino retardado y la des-

4 2
TABLA 5. Semanas gestacionales

Muertes Muertes
neonatales fetales Total
Edad gestacional (sem) No. % No. % No. %

28-34 12 70,5 35 53,8 47 57,3


34,1-36,6 3* 17,6 8 12,3 11 13,4
37-41,6 2 11,8 21 32,3 23 28,0
42 y más 0 0 1 1,5 1 1,2

Total 17 65 82

N=82.
* Embarazo gemelar.
Fuente: Departamento de Archivo y Estadística. Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas.

TABLA 6. Peso de los fetos en sus componentes

Muertes Muertes
Peso neonatales fetales Total
(en gramos) No. Peso en g No. Peso en g No. %

1 000 – 1 499 5 1 434,0 16 1 257,0 21 25,6


1 500 – 1 999 4 1 770,0 19 1 703,0 23 28,0
2 000 – 2 499 4 2 162,5 11 2 228,0 15 18,3

Subtotal 13 1 788,8 46 1 729,3 59 71,9

2 500 – 2 999 2 2 565,0 6 2 815,0 8 9,8


3 000 – 3 499 2 3 470,0 9 3 196,4 11 13,4
3 500 – 3 999 0 0,0 3 3 642,5 3 3,7
4 000 y más 0 0,0 1 4 600,0 1 1,3

Subtotal 4 3 017,5 19 3 638,9 23 28,0

Total 17 65 82

Fuente: Departamento de Archivo y Estadística. Hospital Docente Ginecoobstétrico de Matanzas.

nutrición materna, fueron los elementos AGRADECIMIENTOS


de más riesgo.
A las compañeras Evelyn Rangel Lo-
Debe evitarse el parto pretérmino peso renzo y Aymara de la Pua Fernández, por su
mucho menor de 1 999 g . participación en este trabajo.

4 3
SUMMARY: Perinatal mortality rates are today effective evaluators of the development
conditions of a country and of obstetric follow-up, therefore, a prospective descriptive study of dead
products and neonates in the year 1998 in “Julio Alfonso Medina” gynecoobstetric teaching hospital
in Matanzas was carried out. Of a total of 3 707 births, there were 17 neonatal demises (a pair of
twins) occurred in 16 patients for a mortality rate of 2.7 per 1000 live births and 63 patients
accounted for 65 fetal deaths (2 pairs of twins) for a rate of 14 per 1000 live births. (The sample was
made up of 79 patients and 82 fetuses). A database allowed the primary data gathering and then a
descriptive method was applied; they were processed by an IBM computer from the University of
Matanzas. Taking advantage of the MICROSTAT system, the percentage method and x2 test(α α≤
0.01) were applied. Statistical tables were worked out for discussion and compared with the updated
literature. It was found that women with better fecundity conditions, no previous pregnancy, obstetric
disease and transpelvic deliveries were predominant in the sample. Most neonatal demises occurred
in neonates weighing less than 2 500 g from mothers with higher gestational ages.

Subject headings: INFANT MORTALITY; RISK FACTORS; MATERNAL AGE; MATERNAL AGE 35 AND
OVER, GESTATIONAL AGE; INFANT, LOW BIRTH WEIGHT.

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4 5
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):46-52

Instituto Superior de Ciencias Médicas-Habana


Facultad “Cmdte. Manuel Fajardo”
Hospital “Ramón González Coro”

ANTICUERPOS ANTIISLOTES PANCREÁTICOS EN DIABÉTICAS


GESTACIONALES: PROBLEMAS MATERNOS
Y COMPLICACIONES NEONATALES

Dr. Davide Casagrandi Casanova,1 Dra. Ana Mary Sanabria Arias,2 Lic. Eduardo Cabre-
ra Rode3 y Dra. Julia Pérez Piñero4

RESUMEN: Diferentes investigaciones han evidenciado en los últimos años la presencia de


anticuerpos anti-islotes pancreáticos (ICA = islet cell antibodies) en pacientes con diabetes gestacional.
Con el objetivo de identificar la posible relación entre la presencia de ICA durante la gestación con
factores de riesgo de diabetes gestacional, el uso de insulina y algunas complicaciones puerperales
y neonatales se realizó un estudio retrospectivo de 58 pacientes con diabetes gestacional, a quienes
se les determinó la presencia o no de ICA inmediatamente después de establecido el diagnóstico. En
cada una de las pacientes se estudiaron variables como: presencia de ICA, presencia de factores de
riesgo de diabetes gestacional, uso de insulina durante la gestación y presencia de complicaciones
puerperales y neonatales. La determinación de ICA fue positiva en 9 pacientes (15,5 %) y los
factores de riesgo de diabetes gestacional tuvieron asociación estadísticamente significativa con el
antecedente de macrosomía fetal (p = 6,874 x 103), y la relación con otros factores no fue significa-
tiva. Se usó más frecuentemente insulina en las pacientes con ICA positivo y en este grupo fueron
más frecuentes las complicaciones puerperales y neonatales, aunque sin diferencias estadísticamente
significativas. Se concluyó que el antecedente de hijo macrosómico se asocia estadísticamente con
la presencia de ICA durante la gestación y se requieren ulteriores estudios con muestras mayores
para identificar otras posibles asociaciones.

DeCS: AUTOANTICUERPOS; ISLOTES DE LANGERHANS/inmunología; EMBARAZO EN DIABETES/


inmunología; EMBARAZO EN DIABETES/epidemiología; FACTORES DE RIESGO; COMPLICACIONES
DEL EMBARAZO; MACROSOMIA FETAL; INSULINA/efectos adversos.

1
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Instructor.
2
Residente de 3er. Año de Ginecología y Obstetricia. Profesora Asistente.
3
Licenciado en Biología. Investigador Auxiliar del Instituto Nacional de Endocrinología.
4
Especialista de II Grado en Bioestadística.

4 6
Diferentes investigaciones realizadas parto son objeto de análisis en la actuali-
en los últimos años han demostrado que dad. Didac M y colaboradores12,13 plantean
la diabetes mellitus insulinodependiente que las pacientes con diabetes gestacional
(DMID) es una enfermedad autoinmune es- y presencia de ICA muestran una mayor
pecífica.1,2 Asimismo, ha quedado definido frecuencia de DMID en el posparto a corto
que durante un intervalo prolongado de plazo, con un mayor deterioro global de la
tiempo, que puede durar hasta varios años tolerancia hidrocarbonada, sobre todo si
antes del diagnóstico clínico de la enferme- presentan títulos altos de ICA en el suero.
dad, es decir, la fase hiperglicémica, pue- Igualmente otros autores afirman que la pre-
den detectarse alteraciones inmunológicas sencia de ICA durante una diabetes
y metabólicas. Entre las primeras se cita la gestacional incrementa el riesgo en el 60 %
presencia de diferentes tipos de autoan- de padecer diabetes mellitus posterior al
ticuerpos, y entre las segundas, un deterio- parto.9-14 Incluso algunos plantean que el
ro gradual de la tolerancia a la glucosa y de valor predictivo de la presencia de ICA du-
la secreción de insulina.3,4 rante una diabetes gestacional es mayor
Algunos marcadores inmunológicos cuando se asocia con otros marcadores
han sido considerados útiles como inmunológicos como anticuerpos anti-
indicadores del desarrollo futuro de DMID. insulina (IA) o anticuerpos antiacido glutá-
Hasta la fecha se considera la determina-
mico descarboxilasa.14-16
ción de la presencia de anticuerpos anti-
Considerando todo lo anterior y tenien-
islotes pancreáticos (ICA: islet cell
do en cuenta que en el Hospital “Ramón
antibodies) como uno de los mejores méto-
González Coro” existe un Servivio de Dia-
dos para la identificación de individuos con
betes y Embarazo, se consideró oportuno
riesgo de desarrollar DMID.5.6 Estos son
realizar esta investigación para estudiar
autoanticuerpos circulantes de naturaleza
algunos aspectos relacionados con la epi-
IgG, dirigido contra elementos citoplas-
máticos de la totalidad de las células que demiología y la inmunología de la diabetes
constituyen los islotes pancreáticos. Según gestacional.
algunos estudios, la presencia de ICA está
fuertemente asociada con el desarrollo pos-
terior de diabetes tipo I. En efecto, estos Métodos
anticuerpos se encuentran entre el 60 % y
el 90 % de los pacientes diabéticos de diag- Se realizó un estudio prospectivo de
nóstico reciente7 y en el 10 al 15 % de los 60 pacientes con diagnóstico de diabetes
diabéticos caracterizados inicialmente como gestacional, atendidas en la Sala de Diabe-
tipo II.7,8 Otros investigadores han demos- tes y Embarazo del Hospital Ginecoobs-
trado la prevalencia de tipo I, oscilando esta térico “Ramón González Coro”, en el perío-
frecuencia entre el 0,8 y el 9 %.6 do comprendido entre 1997 y 1998.
La elevada prevalencia de ICA obser- Se estudiaron las gestantes que cum-
vada por algunos autores en la diabetes plían los siguientes criterios de inclusión:
gestacional indica la participación, hasta
ahora poco investigada, de mecanismos de - Diagnóstico de diabetes gestacional se-
base autoinmune en la génesis de esta enti- gún los criterios de la Organización Mun-
dad.9-11 La evolución de los títulos de ICA dial de la Salud (OMS).
y de la tolerancia a la glucosa en el pos- - Edad entre 18 y 50 años.

4 7
Se consideraron como criterios de ex- padeció al menos alguna de las siguien-
clusión los siguientes: tes: anemia, endometritis, infección de la
herida quirúrgica, síndrome febril.
- Tratamiento con agentes inmunosu- - Complicaciones neonatales: se conside-
presores durante los últimos 6 meses. raron como presentes si el recién nacido
- Afecciones crónicas severas como en- tuvo al menos alguna de las siguientes:
fermedades del colágeno y hepatopatías. macrosomía, hipoglicemia, hiperbi-
- Trastornos nutricionales y metabólicos lirrubinemia, trauma obstétrico, síndrome
severos. de dificultad respiratoria.

Para el diagnóstico de la diabetes La fuente primaria de información es-


gestacional se utilizó la prueba de toleran- tuvo constituida por la historia clínica de
cia a la glucosa oral y se realizaron 2 deter- las pacientes estudiadas y los datos fueron
minaciones de glicemia, según el método llevados a un formulario creado al efecto.
de la glucosa oxidasa. La primera determi- Para el procesamiento de la información se
nación se hizo en ayunas y la segunda, confeccionó una base de datos en el siste-
2 horas después de la ingestión de 75 g de ma de base de datos Microsoft Access
glucosa. Se consideraron patológicos va- 1997. La información fue resumida en ta-
lores de glicemia iguales o superiores a blas mediante porcentajes.
Para la identificación de las diferencias
7,8 mmol/L en sangre venosa a las 2 h de
entre los grupos definidos de acuerdo con
la ingestión de la glucosa.
la positividad de ICA y según los factores
A todas las pacientes se les determinó
de riesgo de diabetes gestacional se aplicó
la presencia de anticuerpos antiislotes
la prueba Z para comparación de propor-
pancreáticos (ICA) inmediatamente des-
ciones. Para la identificación de la relación
pués de establecido el diagnóstico. Se em-
entre ICA y uso de insulina y las complica-
pleó la técnica de inmunofluorecencia indi-
ciones puerperales y neonatales se aplica-
recta y se consideró positivo cuando el re- ron las pruebas de Chi-cuadrado y Fisher.
sultado fue superior a 10 unidades JDF (Ju- La última se empleó cuando por las limita-
veniles Diabetes Foundation). ciones de las frecuencias esperadas no fue
De acuerdo con la presencia o ausen- posible aplicar la primera. El nivel de signi-
cia de ICA se definieron 2 grupos y en cada ficación definido a priori fue p=0,05.
uno de ellos se estudiaron algunas varia-
bles que fueron recogidas en un formulario
confeccionado. Resultados
Estas variables quedaron definidas y
clasificadas de la siguiente forma: La distribución de las pacientes estu-
diadas según la positividad de los
- Presencia de anticuerpos antiislotes anticuerpos antiislotes pancreáticos se
pancreáticos. muestra en la tabla 1. Se puede observar
- Presencia de factores de riesgo para el que la determinación fue positiva en 9 pa-
desarrollo de diabetes gestacional. cientes, que representan el 15,5 % del total
- Uso de insulina durante la gestación. de la muestra.
- Complicaciones puerperales: se consi- El porcentaje encontrado en este estu-
deraron como presentes si la paciente dio es superior a lo reportado por autores

4 8
TABLA 1. Distribución de los grupos estu- fueron más frecuentes en el grupo de ICA
diados, según positividad de anticuerpos anti- positivo y se encontró diferencia altamente
islotes pancreáticos
significativa sólo en el caso del anteceden-
Anticuerpos antiislotes te de hijo macrosómico (p=6,87 x103).
pancreáticos No. % Diferentes autores coinciden en seña-
lar que la glicemia elevada en ayunas es
Positivo 9 15,5
Negativo 49 84,5 uno de los factores de riesgo más fuerte-
mente asociados con el desarrollo de dia-
Total 58 100,0 betes gestacional,17-19 como una expresión
de las alteraciones del metabolismo
hidrocarbonado presente en estas pacien-
como Füchtenbusch,14 quien al investigar tes. Igualmente, la macrosomía previa pue-
retrospectivamente un total de 437 pacien- de ser expresión de una intolerancia a los
tes con diabetes gestacional, encontró carbohidratos en gestaciones anteriores
el 8,5 % de ICA positivo en el momento del que determine un estado de hiperinsuli-
parto. Igualmente Dozio y colaboradores10 nismo fetal con lipogénesis aumentada. Sin
al determinar la positividad o no de ICA en embargo, no se encontraron en la revisión
145 diabéticas gestacionales, encontraron bibliográfica trabajos previos que busca-
que estas eran positivas en el 10 % de los ran una posible relación entre la presencia
pacientes, cifra inferior a la encontrada en de factores de riesgo y anticuerpos an-
el presente trabajo. tiislotes pancreáticos.
En la tabla 2 se muestran los grupos de Vemos en la tabla 3 que el uso de
estudio según la presencia de factores de insulina fue más frecuente en el grupo con
riesgo para el desarrollo de diabetes ICA positivo (33,3 % vs. 24. 5 %), aunque
gestacional. El factor de riesgo más frecuen- esta diferencia no resultó ser significativa
temente encontrado en ambos grupos de (p=0,8865).
estudio fue la glicemia elevada en ayunas En nuestro medio, y en concordancia
(mayor o igual a 4,4 mmol/L), ya que este con lo planteado por otros autores,17,18 el
antecedente estuvo presente en todas las uso de insulina en pacientes con diagnós-
pacientes estudiadas. Con excepción del tico de diabetes gestacional, queda reser-
antecedente familiar de diabetes, que fue vado para aquellos casos en los que el tra-
más frecuente en las pacientes con ICA tamiento con régimen dietético calculado
negativo, los restantes factores de riesgo no permite un adecuado control metabólico

TABLA 2. Distribución de los grupos estudiados, según ICA y factores de riesgo de diabetes
gestacional

ICA positivo ICA negativo


Factor de riesgo No. % n=9 No. % n=49 p

Edad materna 6 66,7 30 61,2 0,3786


Antecedentes patológicos familiares 4 44,4 31 63,3 0,1444
Sobrepeso corporal 3 33,3 9 18,4 0,1542
Macrosomía 3 33,3 3 6,1 6,874x10 -3
Glicemia >4,4 9 100 49 100 —
Muerte fetal 0 0 3 6,1 0,2229

4 9
TABLA 3. Distribución de los grupos estu- TABLA 4. Distribución de los grupos estu-
diados, según ICA y uso de insulina durante diados, según ICA y ocurrencia de complica-
la gestación ciones puerperales

Uso de ICA positivo ICA negativo Complicación ICA positivo ICA negativo
Insulina No. % n=9 No. % n=49 puerperal No. % n=9 No. % n=49

Sí 3 33,3 12 24,5 Sí 4 44,4 13 26,5


No 6 66,7 37 75,5 No 5 55,5 36 74,5

Total 9 100,0 49 100,0 Total 9 100 49 100

X2=0,020 1gl p=0,8865 X2=0,472 1gl p=0,4922

y se utiliza este medicamento para mejorar las probabilidades de complicaciones aumen-


dicho control y disminuir la ocurrencia de tan si existe descontrol metabólico.17-19 Sin
complicaciones maternas y neonatales. embargo, en relación con estas variables no
Falluca9 encontró que las pacientes diabé- se encontraron otros estudios con diseño
ticas gestacionales con ICA positivos tie- similar al actual, que permitieran conocer la
nen una peor tolerancia a la glucosa cuan- posible asociación entre ellos.
do se las comparó con aquellas cuya deter- Por último, la presencia de complica-
minación de ICA fue negativa, requiriendo ciones neonatales y su relación con la pre-
utilizar insulina con mayor frecuencia. Un sencia o ausencia de ICA se muestra en la
resultado similar al de este estudio encon- tabla 5. Dentro de las complicaciones
traron Lapolla y colaboradores,11 quienes neonatales se incluyeron: macrosomía, trau-
no pudieron evidenciar correlación entre la ma obstétrico, ictericia y síndrome de difi-
presencia de anticuerpos antiislotes cultad respiratoria. Como puede apreciarse
pancreáticos y el uso de insulina durante la en el grupo con ICA positivo ningún
gestación. Beischer y colaboradores20 en neonato presentó complicaciones, mientras
un estudio retrospectivo de 734 pacientes que en el grupo de los ICA negativo, 10 neo-
con diabetes gestacional, encontró que es- natos (20,4 %) presentaron al menos algu-
tos anticuerpos eran positivos en las pa- na complicación durante el período
cientes que utilizaron insulina para control neonatal. Esta diferencia no fue estadís-
metabólico durante la gestación. ticamente significativa, según lo evidencia
La ocurrencia de complicaciones du- el resultado de p=0,1575, obtenido tras apli-
rante el período puerperal y su relación con cación de la prueba de Fisher.
la presencia o ausencia de ICA se muestra
en la tabla 4. Las complicaciones puerpe- TABLA 5. Distribución de los grupos estu-
rales fueron más frecuentes en las pacien- diados, según ICA y ocurrencia de complica-
ciones neonatales
tes con ICA positivos (44,4 % vs. 26,5 %),
pero estas diferencias no resultaron ser sig- Complicacines ICA positivo ICA negativo
nificativas desde el punto de vista estadís- neonatales No. % n = 9 No. % n =49
tico (p=0,4922).
La presencia de complicaciones Sí 0 0 10 20,4
No 9 100 39 79,6
puerperales en las pacientes con diabetes
gestacional se ha relacionado con el grado Total 9 100 49 100
de control metabólico durante la gestación:
Fisher p = 0,1575

5 0
En relación con estas variables, ocurre Recomendaciones
una situación análoga a la presentada con
las complicaciones puerperales: no se dis- Teniendo en cuenta los resultados an-
pone de otros estudios que relacionen la teriores y las características de este estu-
presencia o ausencia de ICA con las com- dio, se recomienda seguir investigando la
plicaciones neonatales. Existen en la litera- posible asociación entre estas variables e
tura numerosos reportes17-21 que evidencian
incrementar la muestra a estudiar.
una estrecha relación entre el control meta-
bólico y la ocurrencia de complicaciones Considerando además la relación plan-
en este período. Para algunos, 17,18,21 el teada por diferentes autores entre la pre-
descontrol metabólico y la hiperinsulinemia sencia de ICA durante la gestación y el de-
fetal resultante son las principales causas sarrollo posterior de diabetes mellitus
de complicaciones como la macrosomía, insulinodependiente, se recomienda reali-
encontrada con cierta frecuencia en hijos zar estudios inmunológicos (determinación
de pacientes con diabetes gestacional. de ICA y anticuerpos antiinsulina) poste-
Podemos concluir que la frecuencia de riores al parto para identificar las pacientes
ICA fue alta en comparación con otros es- con mayor riesgo de desarrollar esta enfer-
tudios; que la presencia de ICA y el antece- medad.
dente de macrosomía estuvieron asociados;
que no se pudo demostrar asociación entre
la presencia o ausencia de ICA y el uso de
AGRADECIMIENTOS
insulina; y que tampoco se pudo demostrar
asociación entre la presencia o ausencia de
ICA y la ocurrencia de complicaciones A la Ca. Selkys Caraballo López por su par-
puerperales y neonatales. ticipación en este trabajo.

SUMMARY: In the last few years, a number of research studies have shown the presence of
islet cell antibodies in patients with gestational diabetes. With the objective of identifying the
possible relationship between the presence of ICA in pregnancy and the gestational diabetes risks,
use of insulin and some puerperal and neonatal complications, a retrospective study of 58 patients
with gestational diabetes was conducted. These patients were determined the presence of ICA
immediately after the diagnosis. Variables such as presence of ICA, presence of gestational diabetes
risk factors, use of insulin during pregnancy and occurrence of puerperal and neonatal complications
were studied in every patient. ICA was positive in 9 patients (15.5%). Among the gestational
diabetes risk factors, the association with the fetal macrosomia antecedent (p=6.874 x 103 )was
statistically significant whereas it was not significant with the other factors. Insulin was more
frequently used in patients with positive ICA who also had more frequent puerperal and neonatal
complications, even if differences were not statistically significant. It is concluded that the history
of macrosomic child is statistically associated with the ICA presence in pregnancy; however, further
studies with larger samples are required to detect other possible relations.

Subject headings: AUTOANTIBODIES; ISLETS OF LANGERHANS/immunology; PREGNANCY IN DIABE-


TES/immunology; PREGNANCY IN DIABETES/epidemiology; RISK FACTORS; PREGNANCY
COMPLICATIONS; FETAL MACROSOMIA; INSULIN/adverse effects.

5 1
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5 2
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):53-6

Policlínico Docente “ 26 de Julio”

LA CESÁREA EN LA HISTORIA

Dr. Miguel Lugones Botell1

DeCS: CESAREA/historia.

Varias ciudades que fueron fundadas, era algo misterioso y sobrenatural. Según
o embellecidas por emperadores romanos la mitología clásica, tanto el nacimiento de
recibieron el nombre de Cesárea lo que per- Esculapio como el de Baco fueron por
mite hacernos una idea de que los romanos cesárea. En la mitología griega hay referen-
tienen mucho que ver con él. Una de ellas, cias a nacimientos de dioses o semidioses
en la costa del Mediterráneo, entre Galilea por vía abdominal, como el que se refiere a
y Samaria, edificada por Herodes y que la Hermes que sacó a Dionisio por mandato
nombró Cesárea por adulación a Augusto: de Zeus del vientre de Semele, y Apolo, que
es la Cesárea de Palestina, capital de Judea, abre el abdomen de Corinis, muerta por
después de la destrucción de Jerusalén. Su Artemis, y saca a Esculapio.
puerto y ruinas están casi cubiertos por las Una palabra de origen latino, caedere
arenas. También está, entre otras tantas, la o scaedere, que significa cortar, podría ser
antigua ciudad de la Palestina bíblica en una de las 4 razones del origen de la deno-
Siria, cerca de la frontera de Palestina y de minación. Las otras 3 son: la ley regia de
las fuentes del Jordán, llamada así por el Numa Pompilius (siglo VIII AC) que impe-
nombre de un hijo de Herodes. Próxima a día inhumar a la mujer muerta embarazada
sus ruinas se halla la actual aldea de Banias sin haber sacado previamente al niño por
o Banya. En ella fue curada por Jesucristo una incisión abdomino-uterina (ley de los
la mujer hemorroisa, de que habla la Biblia.1 césares); la leyenda cuenta que Julio Cé-
Si intentáramos hacer una clasificación sar nació de esta modo y por último, los
de la historia de la cesárea nos gustaría re- escritos atribuidos a Plinio, historiador de
ferirnos a la que hizo Cifuentes en la que la antigüedad, que aseveraba que el prime-
señala que ésta puede dividirse en una ro de los césares nació por vía abdominal.1
parte anecdótica y mitológica y otra cien- Se debe agregar al capítulo anecdótico
tífica. y sólo registrado en la memoria de repiten-
La primera se emparenta con los tiem- tes de supuestos casos, las autocesáreas,
pos lejanos donde el nacimiento por cesárea las cesáreas del célebre castrador de cer-

1
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Policlínico Docente “ 26 de Julio”, Playa.

5 3
dos, Jacques Nüffer, de Sigershausen, en 1500.2 Empleó una navaja de rasurar y el
1500, a su propia mujer Isabel; los 14 casos niño nació vivo. La madre tuvo 5 hijos más,
de Francisco Rousser en 1581 y otros de lo que pudiera señalarse como uno de los
difícil comprobación. primeros partos vaginales después de una
Es bueno destacar que existieron le- cesárea, aspecto que en la actualidad cobra
yes relacionadas con este proceder. La ley vigencia y defensores. En 1582, Rousset
romana llamada “Lex Regia” del año 715 AC publica un libro en el que por primera vez se
establecía que cualquier mujer con embara- apoya el uso de la operación en mujeres
zo avanzado debía ser operada poco des- vivas. Paré (1510-1590) tuvo una opinión
pués de la muerte, si el niño estuviera vivo.2 opuesta a Rousset y no aceptaba la utiliza-
Antes de 1500, el Islam se oponía a este ción de la operación en mujeres vivas. El
tipo de procedimiento y señalaba que cual- observó 2 operaciones en las que las ma-
quier niño nacido por este método era des- dres murieron y un caso exitoso.
cendiente del demonio y debía ser sacrifi- Guillemeau escribió su libro “Chilbirth or
cado.2 La iglesia cristiana estaba a favor de the Happy Delivery of Women” donde de-
la operación, preocupada en la salvación dica un capítulo a las razones para oponer-
de vidas y almas.2 El Mischnagoth, publi- se la cesárea. Escipio Mercurio, un ciru-
cado en 140 AC y el Talmud, hacen referen-
jano del Padua del siglo XVI, comentó en
cias a nacimientos por cesáreas y los ritos
“La Commare Riccoglitrice” acerca del uso
de aquellos nacidos mediante esta opera-
de esta operación cuando no era posible el
ción. Precisamente es en el Talmud donde
parto normal. Hendrik van Roonhuyze de
se relata el nacimiento de Indra y se detalla
Amsterdam, en su libro “Obserb de Morbis
cómo se negó a nacer por vía natural. Ejem-
Mulier” refiere que un médico llamado
plos afines los encontramos en el caso de
Sonnius hizo la operación en 7 ocasiones a
Buda, del cual se afirma una creencia muy
antigua, que nació del costado de su ma- la esposa de Roonhuyze. Trautmann de
dre, o el caso de Brahma, de quien se dice Wittenberg en Nurtemberg, Alemania, en
que emergió a través del ombligo materno.3 1610 para algunos y en 1620 para otros, prac-
El primer registro de un niño nacido ticó una cesárea en una mujer viva en pre-
mediante cesárea fue en Sicilia, 508 AC se- sencia de 2 parteras. La mujer murió a los 25 d
gún Boley.2 Cuando se revisa el tema, ve- por sepsis. Algunos señalan este hecho
mos que diferentes autores se refieren a dis- como el primer documento indiscutiblemen-
tintos momentos en los que según ellos esto te auténtico sobre la cesárea en una paciente
ocurrió, pero en nuestra revisión, la más le- viva.3
jana encontrada fue esa. En Roma se les En 1637, Teófilo Raynayd en su obra
llamó Caesones a los nacidos por dicha vía, “ De ortu infantium contra naturam
lo que significa que se hacía con alguna persectionem Caesarean” describe 3 casos
frecuencia. afortunados.2 Mauriceau en su libro “ The
La historia científica y registrable en diseases of Women with child and child
su mayoría comienza en lo que algunos au- bed” criticó a quienes aconsejaban hacer
tores consideran el segundo período de la la operación.2 Únicamente consentía la ope-
historia de la cesárea4 y que cae después ración postmortem. Jubert publicó 2 casos
de 1500. La primera referencia histórica a la afortunados en 1693 y Laskish refierió un
realización de una cesárea en una mujer viva caso favorable en el “Acta erudit Lips ann”
corresponde a la practicada por Nufer en en ese mismo año.

5 4
Durante esta época no había aneste- Como métodos alternativos se usaban
sia; la incisión solía hacerse en el abdomen la craneotomía y los fórceps altos, pero
por fuera de los músculos rectos, en el sitio Williams, en 1779 concluyó que el fórceps
hacia el que se rotara el útero, con el fin de alto era más mortal que la cesárea.
proteger la vejiga. El niño se extraía por el Muchas referencias hay en cada país
costado de la madre.2 Solía hacerse una in- acerca de la primera cesárea. Así, en Co-
cisión longitudinal en el útero y se dejaba lombia, se señala que la primera se realizó
abierto. Rousset aconsejaba en ese momen- en 1844, en Estados Unidos en 1827 por
to colocar una infusión de hierbas y una Richmond, en Cincinnati; sin embargo, hay
cánula para el drenaje de los loquios hacia otras referencias en las que se plantea que
la vagina, dado que la causa de la muerte la primera cesárea realizada en ese país fue
era la infección. Se creía que el escape de en 1764, en un camarote, por el Dr. Bennett:
los loquios hacia la cavidad abdominal era su esposa presentaba una estrechez pélvica
el factor causante de la sepsis. Si bien no se que hacía imposible el parto normal y a pe-
cerraba el útero, la incisión abdominal se tición suya, en una mesa de operaciones
aproximaba con unos cuantos puntos bur- consistente en 2 tablones apoyados sobre
dos y un empasto pegajoso.2 Ruleau en toneles, sin ninguna anestesia y sujetada
1704 y Dionis en 1718 se manifestaron con- por 2 mujeres, el médico incidió rápidamen-
trarios a la operación. De la Mote, descri- te el abdomen y extrajo un niño vivo. Sin
bió en 1721 el primer caso de endometriosis embargo, este éxito nunca vio la luz públi-
laparotómica después de una cesárea.2 ca, pues como confesara el propio Bennett
En 1742, Ould en el “Tratise of “ningún médico ajeno al caso lo hubiera
Midwfery”, señaló que la cesárea era re- creído”. En Cuba, el Dr. Enrique Fortún
pugnante, no sólo para todas las reglas de André, cirujano del Hospital “Calixto
teorías y prácticas, sino también para la García”, opera en 1900 el primer embarazo
humanidad. Otros científicos eran más flexi- ectópico y realiza además la primera cesárea
bles como Burton y William Smellie, quie- con feto vivo.3 En Gran Bretaña, la primera
nes apoyaban el procedimiento en algunos cesárea fue hecha por el Dr. Smith de
casos y con recomendaciones. Edimburgo, y resultó un gran fracaso. El
En 1768 introdujo Segauten la feto falleció probablemente por un despren-
sinfisiotomía y, en 1769, Lebas, un cirujano dimiento prematuro de la placenta y la ma-
francés, fue el primero en cerrar la his- dre murió 18 horas después. La primera ope-
terotomía, por lo que fue muy criticado. Por ración realizada en Gran Bretaña en que la
esa época, Orborn recomendaba la madre vivió fue hecha por una partera lla-
craneotomía como método de extracción del mada Mary Donally.2
feto sin lesionar a la madre. Hay un tercer período en la historia de
En Inglaterra en 1799, Barlow fue el la cesárea donde ya se toma conciencia de
primer médico en hacer la operación con las causas de muerte en esta operación y
supervivencia materna. No hubo otro caso de las técnicas que se deben realizar, donde
favorable en ese país hasta 1834. se señala que es a partir de 1876 en que se
Desde finales del siglo XVIII la cesárea hace énfasis en la infección como primera
registra progresos en su técnica operatoria; causa de muerte, aspecto señalado por
unos preconizan la incisión transversal, Cavallini desde 1868. Con la sutura uterina
como Lauverjat, otros la longitudinal, como que practica Wiel desde 1835, entra esta
Levret. operación en una nueva era de progreso.

5 5
Autores como Porro, Müller, Taylor y to modificado de diversas formas en la
otros, hacen innovaciones en ese sentido. actualidad5
Bichot en 1870 introduce la histerectomía Hemos destacado algunos aspectos
total. Sanger, ayudante de Kredé en Leipzig, fundamentales que han marcado hitos en el
en 1882 incorpora la sutura de la pared desarrollo de la cesárea a través de la histo-
uterina a puntos separados en 2 planos ria. Aunque muchas pacientes la solicitan
paralelos. En 1912, Kröing en Alemania,
y quizás algunos se dejen influir por ellas,
postula la incisión vertical uterina, pero ya
resulta evidente que actualmente, ha logra-
advierte sobre la ventaja de practicarla en
el segmento inferior, hasta que en 1926 do salvar muchas vidas, tanto del producto
Kehr crea su clásica incisión segmentaria de la concepción, como de la propia madre.
transversal que se practica en nuestros Sin embargo, su morbilidad y mortalidad
días. continúan presentes, por lo que la vigen-
La preparación preoperatoria fue otro cia de este proceder radica en el cumpli-
paso de avance en este proceder, aspec- miento estricto de sus indicaciones.

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5 6
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):57-61

Ministerio de Salud Pública


Faculta de Ciencias Médicas de Granma “Celia Sánchez Manduley” Manzanillo

ESTUDIO CRONOLÓGICO DE LA MORTALIDAD FETAL TARDÍA


Y LA MORTALIDAD INFANTIL EN MANZANILLO

Ing. Dasha García Arias,1 Dra. Olga Roselló Salcedo1 y Dr. Luis Armando Martínez
Barreiro1

RESUMEN: Se realizó un estudio descriptivo retrospectivo del comportamiento cronológico


de la mortalidad infantil y la fetal tardía en el municipio Manzanillo desde 1987 hasta 1998. El
universo de estudio lo constituyeron todas las muertes fetales tardías e infantiles de estos 12 años.
La información fue recogida del departamento de estadísticas del Sectorial Municipal de Salud y se
usaron para procesarla, las tasas de mortalidad infantil y fetal tardía, el coeficiente de regresión y
de determinación. En los resultados se evidencia que la tasa de mortalidad fetal tardía no tiene una
disminución significativa con el tiempo, indicador al cual hay que prestarle mayor atención en el
municipio, la mortalidad infantil tuvo un comportamiento diferente. Se concluyó que la disminución
de las tasas estudiadas con el tiempo sólo tuvo una particular relevancia en la de mortalidad infantil.

DeCS: CRONOLOGIA; MORTALIDAD FETAL; MORTALIDAD INFANTIL; FACTORES SOCIOECONOMICOS;


TASA DE MORTALIDAD.

Los cambios ocurridos en el estado de ción con el apoyo extrasectorial y la


salud de la población cubana en las últimas priorización por las autoridades políticas y
3 décadas son expresión de la alta prioridad del gobierno en la consecución de un obje-
y de los esfuerzos realizados por la revolu- tivo estratégico que permitió la reducción
ción en la esfera social y en la transforma- de la morbilidad infantil en el 50 % en la
ción cualitativa del nivel de vida de la primera década y su disminución en grado
población. Al iniciarse el decenio de los similar en la segunda, lo que constituyó un
70, nuestra salud pública identifica y logro extraordinario.1
prioriza al grupo poblacional de la mujer y La mortalidad infantil es uno de los
el niño. El Programa Materno Infantil es un indicadores más sensibles y comúnmente
ejemplo de las posibilidades que brinda al usado para medir el estado de salud de una
aunar todos los esfuerzos de la organiza- población, constituye al relacionarse con

1
Profesor Asistente de Informática Médica. Facultad de Ciencias Médicas de Granma.

5 7
diferentes factores sociales, culturales y Las variables utilizadas en el estudio
económicos, el indicador del nivel de vida fueron: número de nacidos vivos, número
de la población y desarrollo socioeco- de muertes fetales tardías, fallecidos meno-
nómico de un país. Las comparaciones de res de 1 año por cada año estudiado.
las tasas de mortalidad infantil entre los di- Recolección de la información: La in-
ferentes países del mundo, tiene una larga formación fue recogida en los registros del
historia y se ha vinculado estrechamente departamento de estadísticas del Sectorial
con los índices, de penuria social y utiliza- Municipal de Salud.
do como un elemento político. Técnicas y procedimientos: una vez
En Cuba, la mortalidad infantil ha man- recogida la información se procedió a cal-
tenido una tendencia al descenso; en el año cular los siguientes indicadores: tasa de
1969 la tasa era de 46,7 y en 1999 fue de 6,4 mortalidad infantil (TMI) y tasa de mortali-
por 1 000 nacidos vivos (7 veces menor). La dad fetal tardía (TMFT).3
provincia Granma ha mantenido un compor- Para compararlas en función del tiem-
tamiento similar al país, la tasa de mortali- po se procedió a estimar los coeficientes de
dad infantil descendió de 13,6 en el año 1990 regresión (b) y determinación (r2) mediante
a 5,7 en 1999.2 el paquete estadístico Microstat versión
En Manzanillo este importante indica- 1.04 en una computadora Pentium, marca
dor de salud ha mantenido altas y bajas, A-Open del año 1997.
por lo que consideramos importante anali- Después de calculadas estas medidas,
zar su comportamiento en el tiempo. se presentaron en tablas para su mejor com-
Otro indicador importante dentro del prensión.
Programa Materno Infantil lo constituye la
tasa de mortalidad fetal tardía, pues son las
muertes de los fetos cuando ya les faltan Resultados
pocas semanas y a veces muy pocos días
para nacer. La tasa de mortalidad fetal tardía en
Teniendo en cuenta esta reflexión y estos 12 últimos años en Manzanillo ha dis-
dada la importancia que reviste llevar a cabo minuido, pero con fluctuaciones, es decir,
el perfeccionamiento del Programa Nacio- se ha elevado en algunos años (1989 y 1994).
nal Materno Infantil, es que nos propone- La disminución en el período estudiado ha
mos la realización de este trabajo, con el sido notable, de 14,5 a 9,8 x 1 000 nacidos
objetivo de estudiar cronológicamente esos
vivos. Las tasas de mortalidad infantil re-
indicadores.
gistradas en Manzanillo en los últimos
12 años presentan una tendencia a la dismi-
nución en este indicador, que va desde 14,1
Métodos en 1987 hasta 4,3 en el año 1998, aunque
esta tendencia a la disminución no ha sido
Se realizó un estudio descriptivo retros- mantenida, ya que en los años 1991 y 1994
pectivo del comportamiento de la mortali- existe un alza en este indicador con respec-
dad infantil y fetal tardía en el municipio
to al año 1987 (tabla 1).
Manzanillo desde 1987 hasta 1998 y el uni-
verso quedó conformado por todas las Si se observan los valores de (b) coefi-
muertes fetales tardías y de los menores de ciente de regresión de las 2 tasas, notamos
1 año ocurridas en el período en estudio en que la disminución de la tasa de mortalidad
su totalidad. infantil por año es mayor que la experimen-

5 8
tada por la tasa fetal tardía (algo más del este caso es de –0,71, es decir, que esta
doble). Esto se verifica con los resultados tasa disminuye 0,71 por cada año que pasa.
que nos ofrece el coeficiente de determina- Sin embargo, en la tasa de mortalidad fetal
ción (r2), y es mucho mayor en la tasa de tardía sólo fue de – 0,34 (menos de la mitad
mortalidad infantil, donde evidentemente de 0,7). Esto se corrobora con el coeficiente
existe una mayor relación con el tiempo (ta- de determinación (r 2) que en la mortalidad
bla 2).
fetal tardía es del 27 %, y no es más que la
variación de la tasa depende del tiempo sólo
TABLA 1. Tasa de mortalidad fetal tardía y en el 27 %, lo cual evidencia una asociación
mortalidad infantil por años estudiados muy débil entre estas varibles.
Tasa de Tasa de
Sin embargo, en la tasa de mortalidad
mortalidad mortalidad infantil, el coeficiente de determinación es
Año fetal tardía infantil del 51 %, esto muestra que existe una rela-
1987 14,5 14,1 ción alta entre la tasa de mortalidad infantil
1988 10,0 13,2 y el tiempo y nos indica que se realiza un
1989 17,9 11,2 significativo trabajo para disminuir este im-
1990 12,7 10,4
1991 11,8 15,2 portante indicador, pero conociendo a
1992 11,4 10,8 fondo qué es la tasa de mortalidad fetal tar-
1993 11,4 9,7 día (las muertes de los fetos de 28 sem o
1994 12,8 14,9
1995 9,3 8,3 más de gestación o 1 000 g o más de peso o
1996 12,4 4,5 35 cm o más de longitud) y que estas muer-
1997 10,7 8,9 tes forman parte, junto con las muertes
1998 9,8 4,3
neonatales precoces, de la tasa de mortali-
Fuente: Departamento de Estadísticas. Sectorial dad perinatal que constituye un buen indi-
Municipal de Salud. cador del desarrollo económico-social de la
salud pública y permiten evaluar la calidad
TABLA 2. Coeficientes de regresión y deter- de los programas de salud materno-infantil,
minación de las tasas y si hay menos muertes fetales tardías, dis-
Tasas de Coeficientes minuye la tasa de mortalidad perinatal. Los
mortalidad Regresión Determinación estudios se deben encaminar a conocer los
(b) (r2) factores que inciden en la mortalidad fetal
Fetal tardía -0,34 0,27 tardía para lograr una mayor disminución
Infantil -0,71 0,51 por año.
La disminución observada en la tasa
Fuente: Cálculos estadísticos.
de mortalidad infantil habla a favor de la
calidad obstétrica y pediátrica, así como de
la ardua labor desarrollada por los médicos
Discusión de la atención primaria, los cuales son ver-
daderos guardianes de la salud en su área
En este trabajo encontramos una nota- de trabajo y de los esfuerzos que realiza en
ble disminución con el tiempo, de la morta- este sentido el Ministerio de Salud Pública
lidad infantil, el coeficiente de regresión en y el Estado en general.

5 9
En Australia, la mortalidad perinatal es Una vez leído y analizado artículos de
5 veces mayor que la mortalidad infantil.4 otros países, que a pesar de sus programas
En el mundo actual hay una tendencia al y trabajo en este importante renglón de la
estudio de la mortalidad perinatal por los salud mantienen muy por encima de noso-
altos índices que muestran en los países tros estos indicadores, se evidencia que
del tercer mundo.5-8 sólo en un país como el nuestro se logra la
funcionalidad de estos programas.5-9
En el mundo, al igual que en Cuba, se
Concluimos que la tasa de mortalidad
implementan programas con el propósito de
fetal tardía ha disminuido en estos últi-
reducir la mortalidad infantil, aunque en mos 12 años, pero esa disminución no se
muchos casos se ven afectados por los re- puede considerar significativa; que la tasa
querimientos financieros necesarios para de mortalidad infantil en el municipio en
desarrollarlos. Un ejemplo de estos progra- esos 12 años sí ha tenido una disminución
mas es el “Fetal and Infant Mortality” significativa, y que la disminución de las
(FIRM) del Departamento de Salud de la tasas estudiadas con el tiempo tiene una
Madre y el Niño de la Univesidad de particular relevancia en la tasa de mortali-
Harvard en Estados Unidos.6 dad infantil.

SUMMARY: A retrospective descriptive study of the chronological performance of infant and


late fetal mortality in Manzanillo municipality from 1987 to 1998 was performed. The universe of
study was all late fetal and infant deaths during these 12 years. Data were collected from the
Statistical Department of the Municipal Health Division and processed by using late fetal and infant
mortality rates, regression and determination coefficients. The results revealed that late fetal
mortality rate did not decrease significantly with the time, which is an indicator to be paid more
attention at municipal level whereas infant mortality behaved differently. It is concluded that the
reduction of the studied rates with the time was only particularly relevant in the case of infant
mortality rate.

Subject headings:CHRONOLOGY; FETALMORTALITY; INFANT MORTALITY, SOCIOECONOMIC FACTORS;


MORTALITYRATE.

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se-specific perinatal death rates,birth weight Manzanillo, Granma, Cuba.

6 1
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):62-9

Hospital Ginecoobstétrico Docente Provincial de Matanzas


“Julio Alfonso Medina”

ANÁLISIS MULTIVARIADO DE FACTORES DE RIESGO DE


PREMATURIDAD EN MATANZAS

Dr. Gerardo Rogelio Robaina Castellanos,1 Dr. Jesús Manuel Pollo Medina,2 Dr. José
Manuel Morales Rigau3 y Dr. Roberto E. Robaina Castellanos4

RESUMEN: La determinación de los factores de riesgo de prematuridad constituye el primer


paso para su prevención en una población determinada y es objetivo de este trabajo determinar
factores de riesgo de prematuridad en nuestro medio para lo cual se realizó un estudio retrospectivo
analítico de caso-control en el que se incluyeron 486 recién nacidos vivos del Hospital Ginecoobstétrico
Provincial de Matanzas, nacidos en el año 1998, con los cuales se conformaron 2 grupos: grupo de
estudio (243 recién nacidos pretérminos) y grupo control (243 recién nacidos a término o postérmino).
Para determinar los factores de riesgo se realizó análisis bivariado y luego análisis multivariado, de
regresión logística mediante el sistema EPI-Info. (Versión Epi 6). Como medida de impacto se utilizó
la fracción atribuible de riesgo en cada uno de los factores de riesgo modificables determinados. El
bajo nivel de escolaridad, la presencia de oligohidramnios y el embarazo gemelar constituyeron
factores de riesgo. De los factores modificables determinados por análisis multivariado, la anemia
durante el embarazo (OR 16,3 IC 2,1-126), el asma bronquial (OR 4,4 IC 1,2-16,4), la ruptura prematu-
ra de las membranas ovulares (OR 4,1 IC 1,7-9,9), y la hipertensión arterial (OR 3,7 IC 1,8- 7,4) fueron
los más importantes dentro de la población estudiada. La modificación de los factores antes mencio-
nados tendría un impacto favorable en la disminución de la incidencia de partos pretérminos en
nuestro centro y la provincia.

DeCS: PREMATURO; FACTORES DE RIESGO; EDAD GESTACIONAL; TRABAJO DE PARTO PREMATURO/


prevención & control; PESO AL NACER; RECIEN NACIDO DE BAJO PESO; ANALISIS MULTIVARIADO.

1
Especialista de I Grado en Neonatología. Hospital Ginecoobstétrico Provincial de Matanzas. Instructor
de Fisiología. Facultad de Ciencias Médicas de Matanzas.
2
Especialista de I Grado en Neonatología. Hospital General de Cárdenas.
3
Especialista de II Grado en Higiene y Epidemiología. Centro Provincial de Higiene y Epidemiología de
Matanzas.
4
Especialista de I Grado en Higiene. Hospital Ginecoobstétrico Provincial de Matanzas.

6 2
La prematuridad continúa siendo el que cumplieran como requisito tener una
centro de atención de la Perinatología con- EG mayor o igual a 37 sem y que siguieran
temporánea. Históricamente se ha asocia- en orden cronológico al nacimiento de un
do con un mayor índice de mortalidad, pretérmino, según el registro de partos del
morbilidad y secuelas del neurodesarrollo.1,2 hospital donde se realizó el estudio.
Por otra parte, a pesar de su amplio Para la determinación de la EG se tuvo
uso, la mayoría de las tecnologías obstétri- en cuenta la edad señalada en el libro de
cas relacionadas con la prevención del par- partos según fecha de la última menstrua-
to pretérmino parecen haber tenido poco ción (FUM), y corroborada por examen físi-
impacto en la reducción de la incidencia de co del recién nacido (Método de Parkin o
nacimientos pretérmino.3 de Capurro). En los casos con menos de
Es por ello que en el último decenio la 2 sem de diferencia entre la EG por FUM o
mayoría de los estudiosos del tema enfatizan por examen físico se tomó la primera, pero
la prevención primaria del parto pretérmino en aquellos en los que la diferencia era ma-
(mucho antes de que se inicie el trabajo de yor de 2 sem o se desconocía la FUM, se
parto) a través de la identificación de los tomó la EG según examen físico del recién
factores de riesgo que influyen en él, como nacido.
una primera aproximación a la solución del Del Departamento de Estadística del
problema, pues ello debe ir seguido de la mencionado hospital se obtuvieron los da-
búsqueda y consecución de medidas para tos referidos al número total de nacimien-
el control de tales factores.4,5 tos y el total de recién nacidos pretérmino
Determinar los factores de riesgo para del año estudiado, con vistas a hallar el ín-
el nacimiento pretérmino en nuestro centro dice de prematuridad.
es el objetivo fundamental de este trabajo. A partir de los libros de parto e histo-
rias clínicas del archivo se obtuvieron los
siguientes datos: edad gestacional, núme-
Métodos ro de historia clínica, edad materna, estado
civil, escolaridad, hábitos tóxicos (tabaco,
Se realizó un estudio retrospectivo alcohol), estado nutricional al momento de
analítico de tipo caso-control con 486 re- la captación del embarazo, número de
cién nacidos vivos del Hospital Gineco- gestaciones, partos y abortos anteriores,
obstétrico Provincial de Matanzas, nacidos embarazo actual simple o gemelar, alteracio-
entre el 1ro de enero y el 31 de diciembre de nes en el volumen del líquido amniótico en
1998, con los que se conformaron 2 grupos: el embarazo actual, alteraciones de la
• Un grupo de estudio (pretérminos) placenta, presencia de ruptura prematura de
integrado por 243 recién nacidos con edad las membranas ovulares (RPM), diagnósti-
gestacional (EG) menor de 37 sem al mo- co de amnionitis, presencia de anemia du-
mento del nacimiento, de un total de 288 pre- rante el embarazo y de otras alteraciones
términos nacidos en el período estudiado. maternas que pudieran influir sobre el em-
Hubo 45 casos que quedaron excluidos por barazo estudiado: hipertensión arterial, dia-
datos incompletos en las historias clíni- betes, sepsis urinaria, asma bronquial,
cas. cardiopatías, etc.
• Un grupo control (recién nacidos a Los datos seleccionados fueron alma-
término y postérmino) integrado por igual cenados en una base de datos y a partir de
número de pacientes que el anterior, pero ellos se halló la incidencia general de recién

6 3
nacidos pretérminos, así como por grupos Los menores de 1 500 g representaron una
de peso y de EG. minoría con alrededor del 6 %. En cuanto a
Comparando cada uno de los grupos grupos de EG, el más numeroso fue el de
estudiados se determinó cuáles de las va- 35 a 36,6 sem, con 62,1 %.
riables incluidas constituían factores de ries- Por análisis bivariado de las variables
go en nuestra población, primero mediante reportadas como factores de riesgo por otros
análisis bivariado y posteriormente, análi- autores2,4,6 e incluidas en nuestro trabajo,
sis multivariado por regresión logística en encontramos que ni la edad materna (agru-
aquellas variables que resultaron significa- pada en <17, de 17-35 y >35 años), ni el
tivas en el análisis bivariado inicial. Luego estado civil (soltera o no), ni el estado
se determinó el impacto que tendría sobre nutricional al inicio del embarazo (bajo peso,
la incidencia de recién nacidos pretérminos normopeso, peso elevado), ni el número de
la modificación de dichos factores.
partos o la existencia de abortos anteriores
Para el análisis estadístico se utilizó el
constituyeron factores de riesgo de
sistema EPI-INFO (Versión EPI-6), emplean-
do como medidas de asociación entre las prematuridad en nuestra población. Tam-
variables estudiadas el estadígrafo Chi cua- poco constituyeron factores de riesgo la
drado sin corregir, y corregido, según co- presencia de alteraciones placentarias ni la
eficiente de Maentel y Haenszel, y de Yates sepsis urinaria u otras alteraciones mater-
en los casos necesarios. Se seleccionó un nas como cardiopatía, diabetes o epilepsia.
nivel de significación de p ≤ p,05. Para de- En la tabla 1 se muestran los factores
terminar los niveles de asociación se utilizó de riesgo de prematuridad determinados en
el odds ratio (OR) o estimador de máxima nuestro estudio por análisis bivariado, los
verosimilitud, así como los intervalos de cuales se mencionan a continuación: bajo
confianza al 95 % (IC). Como medida de nivel de escolaridad, hábito de fumar,
impacto se utilizó la fracción atribuible de oligohidramnios durante el embarazo actual,
riesgo. ruptura prematura de las membranas
ovulares, amnionitis, anemia durante el em-
barazo y afecciones maternas como la
Resultados hipertensión arterial de cualquier tipo y el
asma bronquial.
En nuestro estudio, teniendo en cuen- En la tabla 2 aparecen los resultados
ta que en el año 1998 hubo 3 641 nacidos del análisis de regresión logística realiza-
vivos en el Hospital Ginecoobstétrico Do- do a aquellas variables que fueron signifi-
cente Provincial de Matanzas, de los cua- cativas como factores de riesgo en el aná-
les 288 fueron recién nacidos pretérminos, lisis bivariado y que son modificables con
se obtuvo un índice de prematuridad de acciones de salud . En cada caso se mues-
7,9 x 1 000 nacidos vivos para ese año. tra el odds ratio con sus límites, el valor
De los recién nacidos pretérminos es- de p y la fracción atribuible de riesgo de
tudiados, las tres cuartas partes del total fue- cada variable, con sus límites superior e
ron de peso mayor o igual a 2 000 g (74,5 %). inferior.

6 4
TABLA 1. Factores de riesgo para el nacimiento pretérmino (determinados por análisis
bivariado)

No
Pretérmino pretérmino X2
Factores de riesgo No. (%) No. (%) Valor de p OR IC

Escolaridad Primaria 10 (4,5) 4 (1,08) 0,00005 - -

(*) Secundaria 65 (29,3) 3 8 (16,7)


Preuniversidad 135 (6,08) 150 (65,8)
Universitario 12 (5,4) 3 6 (15,8)
Hábito de Sí 18 (7,4) 6 (2,5) 0,01 3,15 1,17-9,8
fumar No 225 (92,6) 237 (97,5)
Oligoamnios Sí 13 (5,3) 0 (0) 0,0002 - -
No 230 (94,7) 243 (100)
Ruptura prematura Sí 36 (14,8) 7 (2,9) 0,000003 5,08 2,5-15,9
de las membranas
No 207 (85,2) 236 (97,1)
Ammionitis Sí 13 (5,3) 2 (0,8) 0,003 6,8 1,5-62,6
No 230 (94,7) 241 (99,2)
Embarazo Sí 30 (12,3) 1 (0,4) 0,00000007 33,9 5,5-1396
gemelar No 213 (87,7) 242 (99,6)
Anemia Sí 19 (7,8) 1 (0,4) 0,00003 20,4 3,2-856,3
No 224 (92,2) 242 (99,6)
Hipertensión Sí 44 (18,1) 12 (4,9) 0,000005 4,2 2,1-9,1
arterial No 199 (81,9) 231 (95,1)
Asma Sí 11 (4,5) 3 (1,2) 0,03 (¿) 3,8 0,98-21,4
bronquial No 232 (95,5) 240 (98,8)

* Los datos referentes a escolaridad no aparecen en la totalidad de los casos estudiados.


(¿): Significativo para X2 sin corregir y Mantel-Haenszel, pero no para Yates corregido.
Fuente: Archivo del Hospital Ginecoobstétrico Provincial de Matanzas.

TABLA 2. Análisis multivariado de factores de riesgo de prematuridad modificables encontra-


dos en neonatos

Fracción atribuibles de
Variable Odds ratio (IC) p Significación riesgo (LI-LS)

Anemia 16,35 (2,1-126) 0,0073 S 95,1 (63,3-99,4)


Asma 4,4 (1,18-16,4) 0,0273 S 85 (45,3-95,9)
Ruptura prematura 4,1 (1,74-9,92) 0,0013 S 82,9 (60,9-92,6)
de las membranas
Hipertensión 3,7 (1,85-7,38) 0,0002 S 76,5 (54,3-87,9)
Hábito de fumar 2,05 (0,74-5,7) 0,155 NS 68,4 (18,8-87,7)
Amnionitis 2,6 (0,52-13,59) 0,238 NS 85,3 (34,2-96,7)

S = Signicativo.
NS = No significativo.
LI = Límite inferior.
LS = Límite superior.
Fuente: Archivo del Hospital Ginecoobstétrico Provincial de Matanzas año 1998.

6 5
Así por ejemplo, tenemos que la ane- como factor de riesgo por diversos auto-
mia durante el embarazo constituye el prin- res.4,6,8 Este factor está estrechamente liga-
cipal factor de riesgo en nuestra población, do a la ocupación (que a su vez se asocia
de manera que una mujer embarazada con con el grado de actividad física durante el
anemia tiene una probabilidad 16 veces embarazo) así como al nivel socioe-
mayor de tener un recién nacido pretérmino conómico y de acceso a los servicios médi-
que una con valores de hemoglobina nor- cos.6 En nuestro medio este factor se rela-
mal. El asma bronquial, cuyos resultados ciona más con los ingresos económicos y
eran controversiales en el análisis bivariado, estilo de vida que con el nivel de acceso a
aquí aparece como un factor de riesgo de los servicios de salud que, como es conoci-
prematuridad importante, con un incremen- do, son gratuitos.
to del riesgo mayor de 4 veces en la emba- El hábito de fumar, al hacer el análisis
razada en que está presente. La RPM cons- bivariado, parecía asociarse con el nacimien-
tituye el 3er. factor de riesgo de
to pretérmino en nuestro estudio; sin em-
prematuridad en nuestra población, con un
bargo, al realizar análisis de regresión lo-
OR de 4,1; seguida de la hipertensión arterial
gística quedó excluido como factor de ries-
con OR de 3,7. Ni la amnionitis ni el hábito
go (tablas 1 y 2), si bien existen múltiples
de fumar resultaron estadísticamente signi-
ficativos en este estudio. reportes de asociación entre tabaquismo y
Por último, al analizar la fracción atri- crecimiento intrauterino retardado o
buible de riesgo de cada uno de los facto- prematuridad.6,9-11 El tabaquismo también se
res de riesgo determinados, podemos tener asocia con mayor frecuencia a RPM, des-
una idea de en qué porcentaje podría dismi- prendimiento prematuro de la placenta,
nuirse la incidencia de prematuridad (teóri- placenta previa y muerte fetal, los cuales
camente) con la modificación de cada uno pueden ser causa de parto pretérmino.6 De
de los factores de riesgo (tabla 2). cualquier manera, una reducción de este
hábito tóxico podría tener efectos benefi-
ciosos más allá de la reducción del índice
Discusión de prematuridad.
De los factores médicos investigados
El índice de prematuridad en nuestro en este estudio, la anemia durante el emba-
centro en el año estudiado fue de 7,9 x1 000 razo resultó el factor que más se asoció con
nacidos vivos, superior al reportado en el la ocurrencia de nacimientos pretérminos
año 1995 en que era de 5,3 x 1 000 nacidos (OR 16,35 IC 2,1-126), con una fracción atri-
vivos.7 buible de riesgo de alrededor del 95 % (ta-
De los posibles factores sociode- bla 2). Como vemos, la anemia constituye
mográficos de riesgo de prematuridad es- un importante factor de riesgo de
tudiados (edad materna, estado civil, esco- prematuridad en nuestro medio. Su relación
laridad, hábitos tóxicos y estado nutricional con el bajo peso al nacer y la prematuridad
de la embarazada), solamente la escolaridad ha sido estudiada.12
se asoció significativamente al nacimiento Por otra parte, el asma bronquial en la
pretérmino, el cual fue más frecuente en la madre también resultó un factor de riesgo
medida en que el grado de escolaridad fue de prematuridad. En el análisis multivariado
más bajo (tabla 1). (tabla 2) vemos cómo el nacimiento pretér-
El nivel cultural, valorado aquí como mino es 3 veces más común en mujeres que
grado de escolaridad, ha sido reportado padecen de esta enfermedad. Por ser la

6 6
neumopatía crónica más frecuente en nues- coriamnionitis sospechadas ni se hace diag-
tro medio, no resulta raro que aparezca como nóstico histológico de rutina.
un factor de riesgo de los más importantes. La hipertensión arterial constituye el
Además constituye un factor de ries- cuarto factor de prematuridad determinado
go de prematuridad importante en nuestro en este estudio y se ha asociado con el bajo
medio la presencia de RPM (tablas 1 y 2). peso y el parto pretérmino en múltiples tra-
Esta relación ha sido también ampliamente bajos. 4,6,17
estudiada. 6,13,14 Al parecer, la infección Las alteraciones del volumen del líqui-
intraamniótica es el factor causal común para do amniótico también han sido reportadas
la RPM del pretérmino y el inicio del traba- como factores de riesgo de prematuridad.4,6
jo de parto.14 Cada vez se tienen más prue- En nuestro estudio no se halló ningún caso
bas de la relación entre infección intraute- de polihidramnios, pero sí se determinó,
rina y trabajo de parto pretérmino.6,13-16 La por análisis bivariado, que el oligoamnios
infección intraamniótica puede ser constituye un factor de riesgo de
subclínica en muchas ocasiones, y se ha prematuridad. El oligoamnios pudiera rela-
demostrado relación entre corioamnionitis cionarse con la falta de aumento del volu-
histológica y cultivo positivo de líquido men plasmático en la mujer durante el em-
amniótico, así como entre estos y parto barazo, que ha sido indicada como meca-
pretérmino.15 La infección puede ocurrir con nismo potencialmente importante en el par-
membranas integras, de ahí que en los últi- to pretérmino,6 pero también el nexo entre
mos años se haya estudiado tanto la oligoamnios y parto pretérmino pudiera es-
vaginosis bacteriana, demostrándose rela- tar en las causas de oligoamnios, como la
ción entre ésta y parto pretérmino, por lo insuficiencia placentaria, pérdida cróni-
que se ha propuesto el tratamiento enérgi- ca de líquido amniótico, malformaciones,
co de la misma como una medida importan- etcetera.18
te en la reducción del parto pretérmino.4,14,15 Por último, nos referiremos al embara-
Otros estudios han demostrado los efectos zo multifetal, reportado como causa de par-
beneficiosos del tratamiento de la RPM del to pretérmino y bajo peso desde hace mu-
pretérmino en la prolongación de la gesta- cho tiempo.3,4,6,19,20 Está condicionado por
ción y disminución de la morbilidad mater- múltiples factores, entre los que se encuen-
na (incluyendo corioamnionitis) y de la tra una mayor distensión uterina con exce-
morbilidad neonatal.16 sivo desarrollo excéntrico del útero, mayor
En la presente investigación, aunque secreción hormonal placentaria, así como
la amnionitis sí se asoció con prematuridad las complicaciones que pueden surgir en
en el análisis bivariado (tabla 1), al hacer el este tipo de embarazo, como son:
análisis de regresión logística (tabla 2) no polihidramnios, placenta previa, abruptio
se pudo demostrar que esa asociación fue- placentae, toxemia grave, etcétera, que son
ra estadísticamente significativa, lo cual aquí más frecuentes. 20 Nuestros resultados
pensamos se deba a que en nuestro medio corroboran la importancia del embarazo
existe un subregistro de esta entidad, pues gemelar como factor de riesgo de
solamente se tienen en cuenta criterios clí- prematuridad, aunque vale la pena aclarar
nicos, con aislamiento bacteriano en algu- que hay una sobrevaloración del riesgo (de
nos casos, para el diagnóstico de la misma, aproximadamente el doble), relacionado con
pero no se realiza cultivo por amniocentesis los criterios de selección de la muestra en
de formas sistemática a todas las nuestro estudio, en el que se tuvieron en

6 7
cuenta las pacientes individuales y no los durante el embarazo, el control estricto de
embarazos. las pacientes asmáticas, el embarazo plani-
Al analizar en este trabajo la repercu- ficado, así como la prevención y el control
sión que sobre la incidencia de partos pretér- de las infecciones cervicovaginales en la
minos pudiera tener la modificación de los embarazada y el mantenimiento de un ade-
factores de riesgo que fueran susceptibles cuado control de la hipertensión durante
de ello, llegamos a una conclusión impor- la gestación podrían disminuir sustancial-
tante y es que la puesta en marcha de mente la incidencia del nacimiento pretér-
medidas como: el control de la anemia mino en nuestro hospital y en la provincia.

SUMMARY: The determination of prematurity risk factors is the first step towards prevention in
a given population; so this paper is aimed at determining prematurity risk factors in our context. To
this end, a retrospective analytical case-control study involving 486 live births born in 1998 in
Matanzas´s provincial gynecoobstetric hospital was made. The sample was divided into two
groups: a study group (243 preterm newborns) and a control group (243 term or posterm newborns.
For determining the risk factors, an bivariate analysis followed by a multivariate analysis of logistic
regression were made by using the EPI-Info system (Epi 6 version). As an impact measure, the
attributable risk fraction was applied to each of the determined modifiable risk factors. Low educational
level, the existence of olygohydramnios and twin pregnancy were the risk factors found. Anemia in
pregnancy (OR 16.3, CI 2.1-126), bronchial asthma (OR 4.4, CI 1.2-16.4), premature rupture of
membranes (OR 4.1- CI 1.7–9.9) and blood hypertension (OR 3.7, CI 1.8-7.4) were among the most
important modifiable risk factors determined by multivariate analysis in the studied population. The
modification of the aforementioned factors will have a favorable impact on the reduction of the
incidence of preterm deliveries in our center and province.

Subject headings: INFANT, PREMATURE; RISK FACTORS; GESTATIONAL AGE; LABOR, PREMATURE/
/prevention and control; BIRTH WEIGHT; INFANT; LOW BIRTH WEIGHT; MULTIVARIATE ANALYSIS.

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cionaria) Dr. Gerardo R. Robaina Castellanos. Santa Cris-
15. Hiller SL, Nugent RP, Eschenbach DA, Krohn tina, entre Unión y Glorieta, Versalles, Matanzas,
MA, Gibbs RS, Martin DH, et al. Association Cuba.

6 9
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):70-5

Hospital Provincial Ginecoobstétrico Docente “Mártires de Playa Girón”

ANTIBIOTICOTERAPIA PROFILÁCTICA EN LA CESÁREA

Dr. Carlos Pérez Velázquez,1 Dra. Aimé Reyes Pérez 2 y Dr. Arturo Pérez de Villa Amil3

RESUMEN: Se analizaron 582 cesáreas, la mitad correspondió al grupo control (año 1993 en
el cual no se usó antibiótico profiláctico) y la otra mitad, a nuestro grupo de estudio en el año 1995,
donde se comenzó la utilización de antibioticoterapia profiláctica, según el Manual de Diagnóstico y
Tratamiento en Obstetricia y Perinatología; se utilizó el antibiótico normado para la operación antes
señalada, en dependencia a la clasificación epidemiológica. Estudiamos variables como tiempo de
bolsa rota, tiempo de trabajo de parto, número de tactos vaginales e incluso, la sepsis demostrada.
Llegamos a la conclusión siguiente: el uso de antibiótico profiláctico disminuyó el riesgo de sepsis,
teniendo en cuenta que a medida que se prolongue más el factor de riesgo aumenta la aparición de
sepsis o disminuye el efecto protector del antibiótico.

DeCS: CESAREA; ANTIBIOTICOS/uso terapéutico; PROFILAXISANTIBIOTICA; INFECCIÓN DE HERIDA


OPERATORIA/ prevención & control; FACTORES DE RIESGO.

La cesárea constituye un proceder de ga estadía intrahospitalaria.4,5 En la actuali-


emergencia obstétrica y es en la actualidad dad se reconoce la preponderancia de las
un acto médico que permite prevenir la afec- infecciones nosocomiales y cómo la misma
tación de la salud de la madre y del recién aniquila los esfuerzos médicos, por lo que
nacido, con la utilización de los avances de en muchos países la política de atención a
la ciencia y la técnica especializadas.1-3 la salud se orienta a tomar medidas eficaces
La sepsis es una de las complicacio- para su prevención.6
nes más frecuentes en las pacientes some- “Es la cesárea la más antigua y a la vez
tidas a intervenciones quirúrgicas, aunque la más moderna de las intervenciones obs-
en la mayoría de los casos no llega a ser la tétricas”. No es este un proceder inocuo y
causa de la muerte, gracias a la utilización y libre de riesgo significativo, su práctica im-
disponibilidad de una variedad de antibió- plica, más allá de sus beneficios, morbilidad
ticos, pero sí en ocasiones provoca una lar- y costo además de transformarse de solu-

1
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Instructor.
2
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia.
3
Especialista de II Grado en Neonatología. Profesor Auxiliar.

7 0
ción, en problema. La historia de la Obste- maco-terapéutico de infecciones de nues-
tricia es la historia de la cesárea, este proce- tra institución (penicilina y gentamicina). En
der tan antiguo se acompaña de un gran el año 1993 no se utilizaba la clasificación
potencial de morbilidad.7 antes descrita y para hacer un control es-
Mucho se ha especulado respecto a tricto y comparativo del uso de antibióticos
los acontecimientos que podían aumentar profilácticos, toda vez que teníamos que
la frecuencia o gravedad de la sepsis en la utilizar un grupo control, nos dimos a la ta-
cesárea, lo que debe incluir la valoración de rea de reclasificar las cesáreas en dicho año
los factores que sitúan a las gestantes de y de esta forma basar nuestro estudio en el
alto riesgo para contraerla. año 1995,en el que sí se comenzó la utiliza-
La infección poscesárea sigue siendo ción de antibióticos profilácticos y tomar
motivo de preocupación ya que, a pesar del como grupo control las reclasificadas del
vigente programa nacional de reducción de año 1993.
la morbilidad materna y de las medidas es- Se excluyeron las cesáreas limpias, ya
tablecidas para su cumplimiento, el índice que ellas no requerían la utilización de
de sepsis continúa siendo alarmante. antibióticos en ambos años estudiados, así
Diferentes estudios demuestran que la como las sucias, porque generalmente en
infección de las heridas quirúrgicas es alre- todas sí se utilizó; la rotura prematura de
membrana (RPM) de más de 24 h no se to-
dedor del 10 % en heridas limpias y hasta
maba en cuenta antes de esta clasificación
más del 20 % en heridas sucias y contami-
como un parámetro importante de una pro-
nadas. 8
bable sepsis y, por tanto, no se utilizaban
Motivados por la repercusión que so-
antibióticos; según la clasificación actual,
bre la morbilidad y la mortalidad perinatal
por estar este parámetro dentro de las
tiene la cesárea, es que se encaminó nues-
cesáreas sucias y para demostrar la acción
tro estudio sobre esta operación no exenta
protectora de la antibioticoterapia
de complicaciones, como se ha expresado profiláctica preestablecida, decidimos ha-
anteriormente. cer un estudio que abarcara las cesáreas
encontradas en el rango de limpia contami-
nada y contaminada, así como la RPM de
Métodos más de 24 h, por la importancia que tiene en
la probable aparición de sepsis ulterior.
Para realizar nuestro estudio nos basa- A los resultados se le aplicaron méto-
mos en la utilización o no del antibiótico dos estadísticos como: Chi cuadrado y
profiláctico en la cesárea, aplicado según la Mantel-Haenszel para validar las mismas,
actual clasificación pronóstica sobre el ries- así como el riesgo relativo en todos los gru-
go de infección, que se encuentra en el pos estudiados para demostrar el efecto
Manual de Diagnóstico y Tratamiento en protector del antibiótico utilizado.
Obstetricia y Perinatolo-gía, vigente desde Interpretación de los valores de RR.9
1997. <0,4 _____ Protección fuerte
Utilizamos la antibioticoterapia 0,4-0,56 _____ Protección moderada
preestablecida por las normas nacionales 0,57-0,83 _____ Protección débil
antes citadas y avaladas por el Comité fár- 0,84-1,19 _____ Protección insuficiente

7 1
1,20-1,74 _____ Riesgo débil Resultados
1,75-2,5 0 _____ Riesgo moderado
>2,50 _____ Riesgo fuerte El antibiótico profiláctico tuvo un fuer-
te efecto protector en el grupo comprendi-
Se confeccionó una encuesta en la que do entre 1y 6 h de trabajo de parto, pues la
se recogieron los datos fundamentales que sepsis disminuyó del 26,8 al 4,5 % RR: 0,17
dieron respuesta a los aspectos necesarios (0,05-0,54). No ocurrió así en el grupo com-
para cumplimentar nuestros objetivos, los prendido de 7 o más horas de trabajo de
cuales fueron tomados de las historias clí- parto, donde el RR fue de 0,29 (0,03-2,60), lo
nicas de cada paciente. Utilizamos las si- cual demuestra que el efecto protector del
guientes variables: número de tactos antibiótico profiláctico fue mucho más dé-
vaginales, tiempo de bolsa rota y tiempo de bil, en comparación con los demás grupos
trabajo de parto. poblacionales. No obstante, de forma ge-
Los tipos de sepsis que se tomaron en neral, el antibiótico tuvo un efecto protec-
cuenta fueron: tor, RRC:0,32 (0,20-0,51) y además se de-
mostró que el mayor grupo poblacional pre-
- Endometritis. sentó de 0-6 h de trabajo de parto (tabla 1).
- Absceso de herida quirúrgica. Se comprobó el efecto protector del
- Hematoma séptico de herida quirúrgica. antibiótico con respecto a la aparición de
sepsis poscesárea en relación con el tiem-
- Sepsis de la histerorrafia.
po de bolsa rota RRC: 0,32 (0,20-0,51). No
obstante, al estratificar esta variable y al
Mediante nuestro trabajo demostramos
calcularle el riesgo relativo en el grupo com-
la eficacia de la antibioticoterapia profilác-
prendido de 24 o más horas de bolsa rota, el
tica en la aparición o no de sepsis en la
efecto protector del antibiótico se hace más
cesárea.
débil RR:0,67 (0,23-1,91),aunque tenemos en
Se analizaron las variables estudiadas,
cuenta que el mayor grupo poblacional se
una vez estratificadas y cómo influyeron
encuentra comprendido de 0-24 h de bolsa
en la aparición de sepsis con el uso o no de
rota, donde el antibiótico profiláctico tiene
antibióticoterapia profiláctica.
un gran efecto protector (tabla 2).
Se plantearon 2 hipótesis: En relación con el número de tactos
vaginales y el uso o no de antibiótico profi-
- Ho: con el uso de la antibioticoterapia láctico, se comprobó que el antibiótico tuvo
profiláctica no existen diferencias respec- un fuerte efecto protector RRC:0.32 (0,20-
to a la aparición de sepsis poscesárea, te- 0,51), el mayor grupo poblacional fue al
niendo en cuenta las variables estudia- que se le hicieron de 1-4 tactos vaginales y
das que influyen en su aparición. el antibiótico tuvo un efecto protector RR:
- H1: con el uso de la antibioticoterapia 0,32 (0,19-0,53). No ocurrió así con el grupo
profiláctica existen diferencias respecto a comprendido en la realización de 5 o más
la aparición de sepsis poscesárea, tenien- tactos vaginales que fue mucho menor, pero
do en cuenta las variables estudiadas que el efecto protector del antibiótico fue mu-
influyen en su aparición. cho más débil. RR:0,21 (0,03-2,36) (tabla 3).

7 2
TABLA 1. Tiempo de trabajo de parto y antibioticoterapia

Tiempo de trabajo RRC: 0,32(0,20-051)


de parto Sepsis No sepsis MH: 0,32(0,21-0,49)

0 horas
Antibióticos 17 183
8,5 % 91,5 %

No antibióticos 44 155 RR: 0,39 (0,23-0,65)


22,1 % 78,4 % X2 = 13,08 p<0,001
1-6 horas
Antibióticos 3 64
4,5 % 95,5 %

No antibióticos 19 52 RR: 0,17 (0,05-0,54)


26,8 % 73,2 % X2 = 11,16 p<0,001
7 o más horas
Antibióticos 1 23
4,2 % 95,8 %

No antibióticos 3 18 RR: 0,29 (0,03-2,60)


14,3 % 85,7 % X2 = 0,44 P>0,05

TABLA 2. Tiempo de bolsa rota y antibioticoterapia

RRC: 0,32 (0,20-0,51)


Tiempo de bolsa rota Sepsis No sepsis MH: 0,31 (0,20-0,47)

0 horas
Antibióticos 3 96
3,0 % 97,0 %

No antibióticos 19 98 RR: 0,19 (0,06-0,61)


16,7 % 85,9 % X2 = 10,23 p<0,01
1-6 horas
Antibióticos 5 85
5,6 % 94,4 %

No antibióticos 25 65 RR: 0,20 (0,08-0,50)


27,8 % 72,2 % X2 = 14,4 p<0,001
7-24 horas
Antibióticos 9 75
10,7 % 89,3 % RR = 0,45 (0,21 – 0,96)
15 48 X2 = 3,61 p > 0,05

No antibióticos 23,8 % 76,2 %


24 o más horas
Antibióticos 4 14
22,2 % 77,8 %

No antibióticos 7 14 RR:0,45 (0,21-0,96)


35,0 % 70,0 % X2 = 3,61 p>0,05

7 3
TABLA 3. Tacto vaginal y antibioticoterapia

Tacto vaginal Sepsis No sepsis RRC: 0,32 (0,20-0,51)


MH: 0,32 (0,21-0,49)
No tacto
Antibióticos 2 28
6,7 % 93,3 %

No antibióticos 15 55 RR: 0,31 (0,08-1,28)


22,1 % 80,8 % X2 = 2,28 p > 0,05
1-4 tactos
Antibióticos 18 226
6,7 % 93,3 %

No antibióticos 48 159 RR: 32 (0,19-0,53)


23,1 % 76,9 % X2 = 20,9 p < 0,001
5 ó más tactos
Antibióticos 1 16
5,8 % 94,1 %

No antibióticos 3 11 RR: 0,21 (0,03-2,36)


23,1 % 84,5 % X2 = 0,56 p > 0,05

Discusión demostró que a partir de las 24 h de bolsa


rota se considera como un riesgo importan-
El antibiótico profiláctico tuvo un efec- te para el desencadenamiento de la sepsis.13
to protector al ser utilizado en el grupo com- Iguales resultados obtuvieron los autores
prendido entre 1 y 6 h de trabajo de parto, Draper y Rijhsinghani.4,14
estos resultados se corresponden con los Quedó demostrado que el efecto pro-
encontrados por diferentes autores revisa- tector de la antibióticoterapia profiláctica
dos.4,7,12 disminuyó en la medida que se prolonga-
Kouman realizó un estudio comparati- ron algunos factores de riesgo como: tiem-
vo de las conductas clínicas en los casos po de bolsa rota, número de tactos vaginales
con ruptura prematura de las membranas y y tiempo de trabajo de parto.

SUMMARY: Fifty hundred and eighty two cesarean sections were analyzed, one half belonged
to the control group(the year 1993 when no antibiotic prophylaxis was used) and the other half to our
study group in 1995 when this prophylactic antibiotic therapy began to be implemented according to
the Manual of Diagnostic and Treatment in Obstetrics and Perinatology. The antibiotic prescribed
for this kind of surgery was used depending on the epidemiological classification. We studied
variables such length of broken amnion, length of labor , number of vaginal manipulations, including
the shown sepsis. We drew the following conclusion: the use of prophylactic antibiotic lowered
sepsis risk; the longer the risk factor remains, the higher the occurrence of sepsis and the lesser the
protective effect of antibiotic.

Subject headings: CESAREAN SECTION; ANTIBIOTICS/therapeutic use; ANTIBIOTIC PROPHYLAXIS;


SURGICAL WOUND INFECTION/prevention and control; RISK FACTORS.

7 4
Referencias bibliográficas 9. Verges GR, Delgado RM. Estudio de cohortes.
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7 5
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Hospital Docente Ginecoobstétrico “Eusebio Hernández”

BETAMETASONA COMO MADURANTE PULMONAR FETAL.


INFLUENCIA SOBRE EL EMBARAZO Y EL PARTO

Dr. Ramón García Mirás, 1 Dra. Deborah Pérez Valdés-Dapena,2 Dr. Miguel Lugones Botell3
y Dr. Adalberto Lay Rodríguez4

RESUMEN: Se estudió la respuesta a la betametasona como madurante pulmonar fetal en


gestaciones entre las 28 y 33 sem. El universo de trabajo estuvo constituido por 124 pacientes. De
estas, 67 utilizaron el corticosteroide antenatal. El grupo control estuvo conformado por 57 pacien-
tes que no recibieron tratamiento. La betametasona se asoció con la prolongación del período de
latencia (mayor de 24 h en el 79,1 % en pacientes con tratamiento y sin tratamiento, en el 54,3 %.
Según el modo de nacimiento, los productos pretérminos nacidos por cesárea presentaron mayor
incidencia de enfermedad de membrana hialina, tanto en el grupo con tratamiento como en el
control, comparado con los productos de partos transpelvianos, donde apareció el 2,6 % en el grupo
con tratamiento y 6,9 % en el control. Se observó que la puntuación de Apgar a los 5 min. menor de
7 fue 4 veces mayor en el grupo control que en el grupo tratado. En los productos de madres
hipertensas, la betametasona antenatal también disminuyó la frecuencia de enfermedad de mem-
brana hialina. Cuando relacionamos rotura prematura de membranas con aparición de infección
materna posparto encontramos que supera 3 veces a la infección con membranas intactas.

DeCS: BETAMETASONA/uso terapéutico; TRABAJO DE PARTO PREMATURO/prevención & control;


MADUREZ DE LOS ORGANOS FETALES/efectos de drogas; EMBARAZO; TRABAJO DE PARTO/efectos
de drogas; EDAD GESTACIONAL; SINDROME DE DIFICULTAD RESPIRATORIA/prevención & control.

Se ha señalado que dentro de las pri- mundial, entre el 7 y el 10 % de las embara-


meras causas de mortalidad y morbilidad zadas.1
del recién nacido, se encuentra el parto Múltiples son las complicaciones que
pretérmino, que ocurre, según la literatura se observan en los recién nacidos pretér-

1
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Profesor Asistente de la Facultad "Finlay-Albarrán"
del ISCM-H.
2
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Residente de 3er. año en Ginecología y Obstetricia.
Facultad "Finlay-Albarrán ".
3
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Instructor. Facultad " Finlay-Albarrán" del ISCM.
4
Especialista de I Grado en Gincología y Obstetricia. Hospital Ginecoobstétrico "Eusebio Hernández ".

7 6
mino y diferentes autores han señalado la tituido por todas las embarazadas ingresa-
enfermedad de membrana hialina (EMH), das en el Hospital Docente Gine-
como consecuencia directa de la inmadurez coobstétrico “Eusebio Hernández”, con
pulmonar. Otras complicaciones son la he- edad gestacional entre las 28 y 33 sem, du-
morragia intraventricular, la enterocolitis rante el período comprendido de enero de
necrotizante, la displasia broncopulmonar, 1998 a diciembre de 1999, con probabilidad
la infección, la persistencia del conducto de tener un producto pretérmino.
arterioso y la retinopatía del prematuro, que Se conformó el estudio con un total de
se presenta con frecuencia variable en este 124 pacientes, distribuidas en un grupo de
tipo de pacientes.2 trabajo de 67 que recibieron el tratamiento
La enfermedad de la membrana hialina con betametasona como madurante
es la causa más frecuente de síndrome de pulmonar fetal y un grupo control com-
dificutad respiratoria del recién nacido puesto por 57 que no recibieron dicho tra-
pretérmino (SDR) y constituye el problema tamiento. Las pacientes del grupo de traba-
más común en un servicio de neonatología, jo recibieron una dosis de 12 mg intramus-
y la principal causa de mortalidad, pues cular de esta droga, la cual se repitió 24 h
ocurre en el 0,5 al 1 % de todos los naci- después, para una dosis total de 24 mg. La
mientos.3-5 En la literatura mundial se reco- reactivación se administró semanalmente
gen numerosos trabajos que reportan re- con dosis de 12 mg intramuscular de
sultados alentadores con el uso de betametasona, hasta la semana 33.
corticosteroide como madurante pulmonar Los criterios de inclusión se basaron
en pacientes con alto riesgo de parto en lo siguiente: toda gestante que estuvie-
pretérmino, para prevenir las diferentes ra comprendida entre las 28 y 33 sem de
complicaciones descritas anteriormente y gestación y presentara uno de los siguien-
así disminuir la mortalidad.6,7 tes factores:
En Cuba se ha incrementado el uso de
la betametasona antenatal como madurante 1. Amenaza de parto pretérmino.
pulmonar fetal en los servicios de 2. Motivo de interrupción de la gestación
perinatología. En 1997, en el Tercer Congre- por:
so Nacional de Perinatología, se presentó - Rotura prematura de las membranas.
el primer estudio que brindó buenos resul- - Hipertensión arterial de carácter grave.
tados en cuanto a la incidencia de enferme- - Gestorragia de la segunda mitad del
dad de membrana hialina, de hemorragia embarazo.
intraventricular y de mortalidad neonatal. - Retardo del crecimiento intraútero.
Por todo lo anterior nos motivamos - Oligoamnios.
para realizar un estudio en nuestro centro y - Cualquier otro factor que motivara la
valorar el efecto del uso de betametasona interrupción del embarazo antes de la
como madurante pulmonar sobre el desa- semana 34.
rrollo del embarazo y el parto.
Los criterios de exclusión fueron:

Métodos · Gestante menor de 28 sem y de 34 sem o


más.
Se realizó un estudio descriptivo y · Presencia de signos de infección mater-
prospectivo, donde el universo estuvo cons- no fetal.

7 7
La información se recolectó mediante TABLA 1. Relación entre el uso de betame-
tasona y el período de latencia
una planilla diseñada al respecto.
Las variables medidas fueron: n=40 n=84
Menor de Mayor de
24 h 24 h
· Relación entre el tipo de parto y uso de n % n %
betametasona, con la frecuencia de enfer-
medad de membrana hialina. Con tratamiento 14 20,9 53 79,1
Sin tratamiento 26 45,6 31 54,3
· Relación entre hipertensión arterial y uso
de betametasona, con la frecuencia de p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente
enfermedad de membrana hialina.
Ginecoobstétrico”Eusebio Hernández”.
· Relación entre la rotura prematura de mem-
branas y la frecuencia de infección de la
madre. En la tabla 2 se observa que la frecuen-
cia de EMH fue superior en los productos
Las 124 pacientes cumplieron con los que nacieron mediante cesárea que en los
criterios de inclusión. que se produjeron por vía vaginal, tanto en
En todos los casos se realizó prueba el grupo con tratamiento (10,0 contra 2,6 %)
de Chi-cuadrado (X2), con nivel de signifi- como en el grupo control (16,7 contra
cación de p=0,05, para determinar si las di- 7,4 %).
ferencias encontradas tenían significación En la tabla 3 observamos que el conteo
de Apgar de 4-6 a los 5 min del nacimiento
estadística.
fue menos frecuente en el grupo tratado
(4,4 %) que en el control (15,7 %), lo mismo
ocurre con los recién nacidos con Apgar
Resultados de 0-3, donde en el grupo tratado fue 1,4 %
contra 3,5 % en el grupo control.
En la tabla 1 vemos que en el grupo En la tabla 4 encontramos que el
tratado con betametasona antenatal, el corticoide antenatal se utilizó en el 36 % de
79,1 % de las pacientes tuvo un período de las pacientes hipertensas y en pacientes no
latencia mayor de 24 h. En el grupo control, hipertensas se usó en el 58,5 % por esta
sólo el 54,3 % sobrepasó este tiempo. razón, la frecuencia de EMH fue superior

TABLA 2. Relación entre tipo de parto y uso de betametasona con la frecuencia de EMH

Con tratamiento Sin tratamiento


Tipo EMH Sin EMH EMH Sin EMH
de parto n % n % n % n %

Cesárea 3 10,0 27 90,0 5 16,7 25 83,3


n=60
Parto transpelviano 1 2,6 36 97,3 2 7,4 25 92,6
n = 64

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstetrico “Eusebio Hernández”
EMH: Enfermedad de membrana hialina.

7 8
en los neonatos de madres hipertensas, que En las pacientes con RPM encontra-
en las no hipertensas. En el grupo sin trata- mos que la infección fue superior en el gru-
miento, la EMH fue inferior en las pacien- po tratado (39,4 %) que en el grupo sin tra-
tes hipertensas y en el grupo con tratamien- tamiento (25 %); sin embargo, entre las pa-
to se invirtieron los resultados y la inciden- cientes con membranas sanas, la inciden-
cia de dicha enfermedad fue superior en las cia de infección fue superior en el grupo sin
hipertensas, con una diferencia significati- tratamiento (15,2 % ) que en el grupo con
va en este estudio. tratamiento (8,8 %) (tabla 5).

TABLA 3. Influencia de la betametasona antenatal en el puntaje


de Apgar a los 5 min

Con tratamiento Sin tratamiento


n = 67 n = 57
Apgar n % n %

7-9 63 94,0 46 80,7


4-6 3 4,4 9 15,7
0-3 1 1,4 2 3,5

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstétrico “Eusebio
Hernández”.

TABLA 4. Relación entre HTA y uso de betametasona con la frecuencia de EMH

Con tratamiento Sin tratamiento


EMH Sin EMH EMH Sin EMH
n % n % n % n %

Hipertensas 2 22,2 7 77,8 1 6,2 15 93,8


n = 25
No hipertensas 2 3,4 56 96,6 6 14,6 35 85,4
n = 99

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstétrico “Eusebio Hernández”.
HTA: Hipertensión arterial.
EMH: Enfermedad de membrana hialina.

TABLA 5. Influencia de la RPM en la frecuencia de infección materna posparto

RPM No RPM
n = 57 n = 67
Infección No infección Infección No infección
n % n % Total n % n % Total

Con tratamiento 13 39,4 20 60,6 33 3 8,8 31 91,2 34


Sin tratamiento 6 25,0 18 75,0 24 5 15,2 28 84,8 33

Total de pacientes 19 33,3 38 66,7 57 8 11,9 59 88,1 67

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstétrico “ Eusebio Hernández”.
RPM: Rotura prematura de membranas.

7 9
Discusión Schiff y Friedman15 demostraron que
la preeclampsia acelera la madurez pulmonar
Tomamos como patrón las 24 h, por- fetal, lo que representa otra razón para uso
que es para la mayoría de los autores el de la betametasona en la hipertensión.
tiempo mínimo ideal que debe transcurrir Liggins y Howle,7 en sus estudios con
pacientes hipertensas, demostraron que la
entre la primera dosis de betametasona y el
incidencia de SDR fue mayor en las tratadas
parto, para lograr el efecto de maduración con betametasona que en las no tratadas.
pulmonar. Arias16 escribe que en pacientes con
Según Yeshay, 8 posterior al uso de HTA grave entre 24 y 34 sem se debe usar
betametasona puede aparecer actividad betametasona para madurar el pulmón fe-
uterina transitoria que no produce parto tal.
pretérmino. En el National Institute of Health
Kwong 9 encontró que en embarazos (NIH)1se plantea que en embarazos compli-
que recibieron betametasona y ritrodina cados, si se prevé que el parto ocurrirá an-
tes de las 34 sem, habrá que administrar
como tratamiento de la amenaza de parto
corticoides.
pretérmino, el período de latencia fue ma-
Garite,17 en un estudió, admitió que el
yor que en los que sólo recibieron ritrodina. corticoide antenatal en pacientes con RPM
La operación cesárea puede favorecer conlleva una proporción de riesgo de 1,7
la aparición de SDR.10 (p<0,05) de infección materna.
Hay que señalar que 60 (40,3 %) de los El 5-7 % de las puérperas tienen algu-
partos fueron por cesárea, algo lógico si na forma de morbilidad infecciosa posparto,
sabemos que se trata de embarazos pretér- y pueden llegar al 36 % en las cesarizadas.18
mino de riesgo, casi siempre con condicio- El riesgo de infección materna puede
nes cervicales desfavorables y que muchos incrementarse cuando se usa corticoide en
presencia de RPM pretérmino. No hay inci-
de estos fetos quizás no soportarían una
dencia de que dicho corticoide antenatal
inducción o trabajo de parto y parto es- interfiera con el diagnóstico de infección
pontáneo. materna.1
Sin embargo, se ha planteado que en En conclusión, el período de latencia
recién nacidos de muy bajo peso es menos fue mayor en el grupo que recibió cor-
frecuente el SDR si el parto termina por ticosteroide antenatal. En los casos de par-
cesárea.7 to por cesárea, los productos pretérminos
Correspondiendo con nuestros resul- presentaron un mayor porcentaje de EMH,
tados, los de Gardner11 y Crowley 12 plan- que los nacidos por vía vaginal. El porcen-
tean que los recién nacidos tratados con taje de Apgar bajo a los 5 min, fue menor en
el grupo tratado, que en el grupo control.
corticoide antenatal presentan mejor conteo
En los recién nacidos pretérminos de ma-
de Apgar que los no tratados. dres hipertensas, el corticoide antenatal no
Martín13 ha demostrado que el conteo influyó disminuyendo la incidencia de
de Apgar bajo suele acompañarse de SDR EMH, como ocurrió en los productos de las
en recién nacidos pretérminos. no hipertensas. La infección fue más fre-
Barks14 previene la encefalopatía hipó- cuente en puérperas que presentaron RPM,
xico isquémica con el uso de corticoide 3 veces más que en las que tenían membra-
antenatal. nas intactas.

8 0
SUMMARY: The response to the use of betamethasone as a fetal pulmonary maturant in 28
to 33 week pregnancies was studied. The universe of study was made up of 124 patients, 67 of
whom were administered antenatal corticosteroid. The control group was composed by 57 patients
with no treatment. Betamethasone was associated with the extension of the period of latency (over
24 hours in 79.1% of patients under treatment and 54.3% in untreated patients). According to the
mode of delivery, the pre-term neonates born by means of cesarean section showed higher incidence
of hyaline membrane disease (HMD) in both the treated group and the control group, compared with
transpelvian deliveries where HMD was present in 2.6% and 6.9% of neonates of the treated group
and the control group respectively. It was observed that Apgar score under 7 at 5 minutes was
4 times more frequent in the control group than in the group under treatment. In neonates from
hypertensive mothers, the administration of antenatal betamethasone also reduces the occurrence
of hyaline membrane disease. When we compare premature rupture of membranes with occurrence
of maternal infection after delivery, we find that frequency of infection is 3 times higher than in
intact membranes.

Subject headings:BETAMETHASONE/therapeutic use; LABOR;PREMATURE/prevention and control; FETAL


ORGAN MATURITY; PREGNANCY/drug effects; LABOR/drug effects; GESTATIONAL AGE; RESPIRATORY
DISTRESS SYNDROME/prevention & control.

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8 2
Rev Cubana Obstet Ginecol 2001;27(1):83-8

Hospital Docente Ginecoobstétrico “Eusebio Hernández”

BETAMETASONA COMO MADURANTE PULMONAR FETAL.


INFLUENCIA SOBRE EL RECIÉN NACIDO
Dr. Ramón García Mirás, 1 Dr. Olimpo Moreno Vázquez,2 Dra. Deborah Pérez Valdés-
-Dapena 3 y Dr. Miguel Lugones Botell4

RESUMEN: Se estudió la respuesta a la betametasona como madurante pulmonar fetal en


gestantes entre las 28 y 33 sem. El universo de trabajo estuvo constituido por 124 pacientes. De
estas, 67 utilizaron el corticosteroide antenatal. El grupo control incluyó 57 pacientes. La incidencia
de enfermedad de membrana hialina (EMH) fue 4 veces menor en los recién nacidos pretérminos con
tratamiento completo (p<0,05). La incidencia de EMH fue 3 veces menor entre los neonatos de
31 a 33 sem. Las complicaciones diferentes a EMH, asociadas con el neonato, fueron más frecuentes
en el grupo control que en el tratado (p<0,05). En 7 pacientes con rotura prematura de membrana
(RPM) tratadas con corticosteroide antenatal, sus recién nacidos sufrieron procesos infecciosos
(18,4 %), 6 de ellos tuvieron RPM de más de 7 d. La infección parece estar influenciada por la RPM
y no por el corticosteroide (p<0,05). La mortalidad neonatal fue inferior cuando se usó la betametasona
como madurante pulmonar fetal.

DeCS: BETAMETASONA/uso terapéutico; TRABAJO DE PARTO PREMATURO/prevención & control;


SINDROME DE DIFICULTAD RESPIRATORIA/prevención & control; EMBARAZO/ efectos de drogas;
TRABAJO DE PARTO/ efectos de drogas; ROTURA PREMATURA DE MEMBRANAS FETALES/
prevención & control; EDAD GESTACIONAL.

La enfermedad de membrana hialina es altamente surfoactiva, que impide el fun-


la causa más frecuente de síndrome de difi- cionamiento normal del alvéolo. Constitu-
cultad respiratoria del recién nacido ye el problema más común en un Servicio
pretérmino (SDR). Esta afección es conse- de Neonatología y la principal causa de
cuencia de la ausencia, deficiencia y altera- mortalidad; además, predomina entre los
ción primaria de la capa de revestimiento que pesan de 1 000 a 1 500 g1. Las anorma-

1
Especialista de I Grado en Ginecología y Obstetricia. Profesor Asistente. Hospital Ginecoobstétrico
“Eusebio Hernández”.
2
Profesor Titular de Pediatría Servicio de Neonatología. Hospital Gincoobstétrico “Eusebio Hernández.”
3
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Residente de 3er año en Ginecología y Obstetricia.
Hospital Ginecoobstétrico “Eusebio Hernández”.
4
Especialista de II Grado en Ginecología y Obstetricia. Instructor. Policlínico Docente “26 de Julio”.

8 3
lidades fisiológicas que se presentan son semanalmente con dosis de 12 mg in-
la reducción hasta de una décima parte de tramuscular de betametasona, hasta la se-
la adaptabilidad pulmonar normal, disminu- mana 33. Se consideró tratamiento comple-
ción de la perfusión pulmonar del 50-60 %,2 to, cuando se administraron 24 mg o más de
gran cortocircuito de derecha a izquierda,3 betametasona, antes de producirse el parto
reducción de la circulación sanguínea en el y tratamiento parcial, cuando se adminis-
lecho capilar pulmonar,4 ventilación alveolar traron solamente 12 mg.
disminuida y volumen pulmonar disminui- Se incluyó en el estudio toda gestante
do. Múltiples son las complicaciones que cuyo embarazo estuviera entre las 28 y 33 sem
se observan en los recién nacidos pretér- de gestación y presentara uno de los si-
mino, y entre ellos se señala la enfermedad guientes factores:
de membrana hialina, como consecuencia
directa de la inmadurez pulmonar. Otras 1. Amenaza de parto pretérmino.
complicaciones son la hemorragia intraven- 2. Motivo de interrupción de la gestación
tricular, la enterocolitis necrotizante, la dis- por:
plasia broncopulmonar, la infección, la per-
sistencia del conducto arterioso y la - Rotura prematura de las membranas.
retinopatía del prematuro. La única con- - Hipertensión arterial de carácter grave.
traindicación absoluta aceptada por todos - Gestorragia de la segunda mitad del em-
los autores para el uso de corticoides barazo.
antenatal, es la presencia de infección ma- - Retardo del crecimiento intraútero.
terna o fetal.5-7 - Oligoamnios

Cualquier otro factor que motivara la


Métodos interrupción del embarazo antes de la se-
mana 34.
Los criterios de exclusión fueron:
Se realizó un estudio descriptivo y
prospectivo, donde el universo estuvo cons-
- Gestación menor de 28 sem y de 34 sem o
tituido por todas las embarazadas ingresa-
más.
das en el Hospital Docente Ginecoobsté-
- Presencia de signos de infección materno
trico “Eusebio Hernández”, con edad ges- fetal.
tacional entre las 28 y 33 sem, durante el
período comprendido de enero de 1998 a Las variables medidas fueron:
diciembre de 1999, con probabilidad de te-
ner un producto pretérmino. - Frecuencia de enfermedad de membrana
Se consideraron, para el estudio, 124 pa- hialina, como principal complicación en
cientes distribuidas en un grupo de trabajo productos pretérminos
de 67 que recibieron el tratamiento con - Frecuencia de gestantes en donde se uti-
betametasona como madurante pulmonar lizó el madurante pulmonar fetal.
fetal y un grupo control compuesto por 57 - Relación entre edad gestacional e inciden-
que no lo recibieron. Las pacientes del gru- cia de enfermedad de membrana hialina.
po de trabajo recibieron una dosis de 12 mg - Otras complicaciones del recién nacido
intramuscular de esta droga, la cual se re- pretérmino como: hemorragia intraven-
pitió 24 h después, para una dosis total tricular, persistencia del ductus arterioso
de 24 mg. La reactivación se administró y enterocolitis necrotizante.

8 4
- Relación entre la rotura prematura de mem- En los neonatos que recibieron trata-
branas y la frecuencia de infección del miento parcial con betametasona en nues-
recién nacido pretérmino. tro trabajo, la incidencia de EMH fue del
- Mortalidad neonatal de los hijos de ma- 14,3 %, ligeramente superior al 12,3 % del
dres que recibieron o no tratamiento con grupo no tratado.
betametasona. En la tabla 2 vemos que la incidencia
de EMH fue 3 veces mayor entre los neo-
Las 124 pacientes cumplieron con los natos comprendidos en el grupo de 28-30 sem
criterios de inclusión. (14,5 %) que en los de 31-33 (5,2 %). En el
En todos los casos se realizó prueba primer grupo, la diferencia entre tratamien-
de Chi-cuadrado (X2), con un nivel de sig- to completo y sin tratamiento es significati-
va, lo que no ocurre entre tratamiento par-
nificación de p = 0,05, para determinar si las
cial y sin tratamiento (p <0,05). En el segun-
diferencias encontradas tenían significación do grupo, es significativo el resultado en-
estadística. tre tratamiento completo (donde no hubo
Se llegó a conclusiones según los re- ningún caso con EMH) y los otros 2 gru-
sultados obtenidos. pos (parcial y sin tratamiento), lo que no es
así entre el grupo con tratamiento parcial y
sin tratamiento, en los cuales los porcenta-
Resultados jes fueron algo similares (p<0,05).

La incidencia de EMH en el grupo que TABLA 1. Influencia de la betametasona


recibió la betametasona antenatal fue del antenatal en la incidencia de EMH (n=124)
5,9 %, (3,8 % con tratamiento completo y Tratamiento No. % Total
14,3 % con tratamiento parcial).
En las cifras de la tabla 1 encontramos Completo 2 3,8 53
Parcial 2 14,3 14
que la diferencia es significativa entre el tra- Sin tratamiento 7 12,3 57
tamiento completo y los otros 2 grupos (par-
cial y sin tratamiento), pero no lo es entre p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente
los grupos tratamiento parcial y sin trata- Ginecoobstétrico “Eusebio Hernández”.
miento (p<0,05). EMH: Enfermedad de membrana hialina.

TABLA 2. Relación entre edad gestacional y la incidencia de EMH (n=124)

Edad gestional Con EMH Sin EMH


28-30 sem n % n % Total

Tratamiento completo 2 9,5 19 90,5 21


Tratamiento parcial 1 20,0 4 80,0 5
Sín tratamiento 4 18,2 18 81,8 22

31-33 sem

Tratamiento completo - - 32 100,0 32


Tratamiento parcial 1 11,1 8 88,9 9
Sin tratamiento 3 8,6 32 91,4 35

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstétrico “ Eusebio Hernández”.
EMH: Enfermedad de membrana hialina.

8 5
En la tabla 3 observamos que el núme- En la tabla 4 observamos que hubo poca
ro de otras complicaciones asociadas con diferencia en la incidencia de infección en
recién nacidos pretérminos fue mayor en el neonatos pretérminos productos de embara-
grupo control que en el grupo tratado con zos con RPM o sin ésta (18,4 % y 21,0 %
betametasona antenatal. Entre estos 2 gru- respectivamente). Se encontró diferencia sig-
pos existe diferencia significativa (p<0,05). nificativa entre los grupos con tratamiento y
De las 5 hemorragias intraventriculares sin tratamiento, con respecto a la infección y
aparecidas, 3 no recibieron tratamiento y
no infección (p<0,05).
sólo 2 recibieron el medicamento.
En nuestro estudio de 5 casos con per- La mortalidad por todas las causas fue
sistencia del ducto arterioso 3 fueron no menor en el grupo tratado que en el grupo
tratadas y 2 recibieron tratamiento. control y en cada una de ellas. Incluso la
El único caso con enterocolitis necroti- muerte neonatal por EMH se produce en un
zante estuvo incluido también en el grupo niño que sólo recibió tratamiento parcial con
control. betametasona, como se observa en la tabla 5.

TABLA 3. Influencia de la betametasona antenatal en la aparición


de otras complicaciones en el recién nacido pretérmino

Con tratamiento Sin tratamiento


n = 67 n = 57
Complicaciones n % n %

Hemorragías 2 3,0 3 5,3


intraventriculares

Persistencia del ducto 2 3,0 3 5,3


arterioso

Enterocolitis necrotizante - - 1 1,7

Subtotal 4 6,0 7 12,3


Sin otras complicaciones 63 94,0 50 87,7

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstétrico “ Eusebio
Hernández”.

TABLA 4. Influencia de la RPM en la frecuencia de infección del recién nacido pretérmino

RPM No RPM
n = 57 n = 67
Infección No Infección Infección No infección
n % n % Total n % n % Total

Con tratamiento 7* 18,4 31 81,6 38 - - 29 100 29


Sin tratamiento - - 19 100,0 19 8 21,0 30 79,0 38

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstétrico “ Eusebio Hernández”.
* 6 de estos pacientes presentaron RPM de más de 7 días.

8 6
TABLA 5. Relación entre betametasona antenatal y mortalidad neonatal

Con tratamiento Sin tratamiento


n = 67 n = 57
Fallecidos No fallecidos Fallecidos No fallecidos
n % n % Total n % n % Total

Enfermedad 1 25,0 3 75,0 4 3 42,9 4 57,1 7


de membrana
hialina

Infección 2 28,6 5 71,4 7 3 37,5 5 62,5 8

Hemorragia 1 50,0 1 50,0 2 1 33,3 2 66,7 3


intraventricular

Hemorragia
pulmonar - - - - - 1 100,0 - - 1

Total 4 30,8 9 69,2 13 8 42,1 11 57,9 19

p<0,05.
Fuente: Historias clínicas. Hospital Docente Ginecoobstétrico “Eusebio Hernández”.

Discusión Se plantea en la mayoría de los estu-


dios, que no hay un incremento de la infec-
La bibliografía revisada reporta dismi- ción en los neonatos tratados con
nución de la incidencia de la enfermedad de corticoides antenatal. Varios autores repor-
membrana hialina (EMH) en recién nacidos tan un incremento de la infección en pro-
pretérmino tratados con corticoide ductos pretérminos de embarazo con RPM,
antenatal.8-12 Investigadores en el mundo comparado con los de membranas intactas,
plantean que a mayor edad gestacional
independientemente del uso de madurante
menor incidencia de esta enfermedad EMH.
pulmonar o no.8 La frecuencia de corioam-
Se observó además que es menos intensa
nionitis es mayor cuanto mayor sea el tiem-
con el uso de la betametasona antenatal en
po de RPM.11 Se puede concluir que el fac-
embarazos de 24 a 28 sem.10
Se reporta en la bibliografía un descen- tor infección parece estar influido por la
so de hemorragia intraventricular en recién presencia de RPM y no por el uso de la
nacidos entre 24 y 28 sem tratados con betametasona.
corticoides prenatal,10 así ocurre en los ca- Según lo comprobado, concluimos que
sos de enterocolitis necrotizante, como se la betametasona como madurante pulmonar
reporta en estudios realizados. En la persis- fetal fue utilizada en el 54 % de los recién
tencia del conducto arterioso no se detectó nacidos con edad gestacional entre 28
disminución de la incidencia de recién naci- y 33 sem. El tratamiento fue completo en el
dos de embarazos de 24-28 sem según 42,7 % y parcial en el 11,3 % del total de
Garite;10 sin embargo, el grupo colabo- casos. El tratamiento completo disminuye
rativo13 reporta una incidencia que varió de notablemente la incidencia de EMH, no así
12,5 a 7 % con el corticoide antenatal el tratamiento parcial. La incidencia de EMH
(p=0,06). fue mayor en los neonatos comprendidos

8 7
entre 28 y 30 sem que en los de 31 a 33 sem. ra diferencia al compararlos con el grupo de
La frecuencia de aparición de complicacio- membranas intactas sin tratamiento y con pro-
nes diferentes a EMH, fue mayor en el gru- cesos infecciosos. El factor infección parece
po control que en el grupo tratado. La in- estar influido por la presencia de RPM y no
fección de los productos de gestantes con por el uso del corticoide. Lo mortalidad
rotura prematura de membranas (RPM) que neonatal fue inferior en todos los casos en
recibieron tratamiento, presentan una lige- los que se usó el madurante pulmonar fetal.

SUMMARY: The response to the administration of betamethasone as fetal pulmonary maturant


in 28 to 33 week pregnant women was studied. The universe of study was made up of 124 patients,
67 of whom was administered antenatal corticosteroid. The control group comprised 57 patients.
The incidence of HMD was 4 times lower in pre-term newborns under complete treatment (p<0.05)
whereas it was also 3 times lower in 31-33 w neonates. Complications associated with neonates
other than HMD were more frequent in the control group than in the treated group (p<0.05). The
newborns of 7 patients with premature rupture of membranes(PRM) and treated with antenatal
corticosteroid suffered from infectious process (18.4%); 6 of these women had PRM for over 7 days.
The infection seems to be affected by the PRM rather than by the use of corticosteroid (p<0.05).
The neonatal mortality rate was lower in those cases which were administered betamethasone as
fetal pulmonary maturant.

Subject headings: BETAMETHASONE/therapeutic use; LABOR, PREMATURE/prevention & control;


RESPIRATORY DISTRESS SYNDROME/prevention & control; PREGNANCY/drug effects; LABOR/drug
effects; FETAL MEMBRANES, PREMATURE RUPTURE/prevention & control; GESTATIONAL AGE.

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8 8

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