Sie sind auf Seite 1von 2

LA FILOSOFIA CONTEMPORANEA Y MODERNA

La filosofía contemporánea es aquella filosofía que se desarrolla en el período actual de la


historia de la filosofía occidental, es decir, que corresponde a la Edad Contemporánea (siglos XIX,
XX y lo que va del XXI). Por extensión, se llama también con este nombre a la filosofía producida
por filósofos que aún están vivos. No debe ser confundida con la filosofía moderna, que inició en el
Renacimiento y culminó con el fin de la Ilustración (aunque algunos ubican su conclusión en el
siglo XIX o hasta entrado el siglo XX). La filosofía contemporánea supone una ruptura conceptual
con la filosofía moderna, derivada de la crisis de los valores y las premisas del pensamiento
ilustrado. El resultado fue un amplio abanico de corrientes filosóficas, muchas de las cuáles
nacieron en franco antagonismo unas con otras y posteriormente fueron conjugadas en nuevas
corrientes que asimilaron dicho antagonismo o que trataron de conciliar diferencias. Son corrientes
contemporáneas: el vitalismo, el marxismo, el positivismo, el neopositivismo, el existencialismo, el
estructuralismo, el posestructuralismo, el posmodernismo, la filosofía analítica entre otras.

La filosofía moderna abarca los comienzos del Renacimiento y la Reforma Protestante hasta los
últimos años del siglo XX. Después de XV siglos de filosofar acerca de cuestiones teológicas,
surge un espíritu de reacción de protesta en contra de la postura tradicional que había adoptado la
filosofía. Se considera a René Descartes, padre de esta filosofía, pues su genio lo condujo a la
creación de una nueva ciencia matemática, la geometría analítica y llegó a la conclusión de que
para evitar el error no basta la inteligencia, sino que hay que aplicarla adecuadamente, es decir
requiere de un método.
Debemos advertir que se llama filosofía moderna NO a lo que comienza con la historia moderna
(que tiene su punto de partida en la toma de Constantinopla] por los turcos). Sino que se considera
filosofía moderna a lo que comienza con Descartes. Lo característico de la filosofía moderna desde
Descartes hasta Husserl y todavía es seguida por muchos filósofos, es que cambiaron el punto de
partida de la filosofía y en vez de ser el punto de partida la consideración del mundo comenzaron
por la consideración del conocimiento del mundo, que no es lo mismo.

Características principales

Podríamos señalar que las características que presenta la filosofía moderna, a grandes rasgos,
son:

a) Desplazamiento de la cuestión teológica en favor de una mayor centralidad de los problemas de


la naturaleza y el hombre

Maticemos, desplazamiento, que no ruptura. Este desplazamiento se hace patente por la situación
de crisis, pero un análisis riguroso nos hace ver que, en el fondo, la mayoría de los pensadores de
la modernidad intentan, de una u otra forma, fundamentar su visión de la realidad en Dios.
De todas formas, hay una nueva forma de acercarse a la realidad en esta época de crisis. Ésta va
a venir suministrada por la naciente ciencia (Galileo) que al hacer una interpretación mecanicista
de la realidad física, le aporta una regularidad tal que de ella es posible un conocimiento firme,
seguro, matemático, indudable. Éste comenzará a ser el paradigma nuevo del conocimiento y se
buscará en todos los ámbitos una seguridad semejante a la aportada por él.

b) Insistencia en el sujeto humano como punto de partida del conocimiento. Ello supone el
abandono de la tesis del realismo ingenuo de la Antigüedad y el Medioevo que sostenía que en el
conocimiento se me da el objeto o cosa tal como es, y tal como sería aunque yo no lo conociera.

c) Primacía de la Gnoseología sobre la Ontología. Al desplazarse el interés de la realidad tal como


es al sujeto. Lo que nos interesa fundamentalmente –y esta afirmación habría que matizarla
mucho- es lo que el sujeto conoce. En consecuencia, la filosofía primera, el saber fundamental y
fundante de los otros, ya no será la Ontología, reflexión sobre el ser, sino la Gnoseología o Teoría
del Conocimiento, reflexión sobre el conocer. De ahí que, quizás, el primer problema que se
plantearán los filósofos de la modernidad será el del alcance o límites de nuestras facultades
cognoscitivas.

d) El concepto de verdad también varía. La verdad ya no es entendida en el sentido clásico de


“adecuación de la cosa con el intelecto”. Aunque a veces se defina así o de forma parecida lo que
se quiere decir es otra cosa. Las riendas del conocimiento y por tanto de la verdad, propiedad del
conocimiento, ya no estarán en la cosa misma, sino en el propio intelecto del ser humano. Pero,
¿qué hay en el entendimiento que pueda darme noción de verdad? La certeza. Es decir, el
sentimiento de seguridad que siempre acompaña a la posesión de la verdad. Aquí estará el punto
arquimédico, por eso, habrá que buscar los rasgos de esa certeza que tienen que ser comunes a
todos los seres cognoscentes.

Infografía
https://es.answers.yahoo.com/question/index?qid=20110510155101AACrFqs
http://es.wikipedia.org/wiki/Filosof%C3%ADa_contempor%C3%A1nea

Das könnte Ihnen auch gefallen