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VISIONES DEL KAMMA EN LOS SUTTAS

El kamma o karma

Etimológicamente, el kamma significa “acción”, pero en el contexto de la enseñanza budista se refiere más
específicamente a una “acción intencionada” o a un “hecho producido deliberadamente”. Los actos no intencionales
tampoco constituirían, estrictamente hablando, el kamma, en el sentido budista de la palabra. Para que esto ocurra,
o sea, para que pueda hablarse con propiedad de una “acción kármica”, primeramente, tiene que estar involucrada
la voluntad de la persona, en segundo lugar, tiene que existir la posibilidad de una libre elección y, finalmente, el
sujeto debe estar consciente de su acción.

El kamma se expresa a través de las acciones corporales, verbales y mentales, cada una de las cuales puede ser
saludable (kusala, en pali) o insalubres (akusala). Más detalles sobre las diferentes formas de las acciones kármicas,
saludables o no saludables, llamadas dentro del lenguaje popular, “buen karma” o “mal karma”, respectivamente,
pueden observarse en el siguiente cuadro.

Cuadro: Diez formas del curso de acción kármica

Cursos de acciones no saludables Cursos de acciones saludables


(akusala) (kusala)

Asesinatos Evitar asesinatos

Tres acciones corporales Robos Evitar robos

Actos sexuales ilícitos Evitar actos sexuales ilícitos

Mentiras El hablar verdadero

Calumnias El hablar conciliatorio


Cuatro acciones verbales
El hablar violento El hablar suave

El hablar neciamente El hablar sabio

Codicia Altruismo

Tres acciones mentales Mala voluntad Buena voluntad

Equivocada visión Correcta visión


En la práctica, nuestras acciones pocas veces son puramente saludables o totalmente insalubres. Por ejemplo,
cuando empezamos a practicar la meditación, a menudo logramos buenos niveles de concentración que producen
un estado de calma mental (kusala), lo que generalmente es seguido por un sentimiento de apego a dichos estados
(akusala). A veces, nuestra práctica espiritual y las buenas acciones (kusala) pueden ser motivadas por el deseo de
ser vistos como buenas personas en la sociedad o para ganarse el cielo (akusala, en cuanto que representa un
motivo egoísta). Y así podríamos multiplicar los ejemplos.
Sin embargo, lo que más confusión ocasiona en relación a este tópico es la equivocada creencia, según la cual
el kamma consiste también en las consecuencias que sufrimos debido a nuestras acciones pasadas. Y si a esto
agregamos la creencia en la reencarnación, obtenemos una visión determinista totalmente errónea, según la cual la
felicidad, la prosperidad y el éxito, por un lado y el sufrimiento, la desgracia y la pobreza, por otro lado, son
consecuencias solamente de nuestras buenas o malas acciones, algunas de ellas, cometidas durante nuestras
existencias pasadas. Semejante visión se traduce generalmente en una total apatía frente a los desafortunados y
necesitados, y de hecho existe entre algunas de las sectas hindúes, pero es totalmente ajena a la enseñanza
budista, según la cual la doctrina del kamma debería considerarse simplemente como un sentido de responsabilidad
que tenemos por nuestras propias acciones de la vida, ya que las mismas tienen sus consecuencias, tanto para
nosotros como para los demás.
Las consecuencias o los “frutos del kamma” se pueden considerar dentro de cuatro diferentes ámbitos:
1. En el ámbito mental interno: los resultados del kamma que se producen dentro de nosotros mismos en forma de
nuestras tendencias interiores, formas de pensar, de sufrir, de ser feliz, etc.
2. En el ámbito físico: los efectos del kamma se manifiestan en nuestro carácter, formas peculiares de hablar y
gesticular, tendencias conductuales, etc.
3. En el ámbito de las experiencias: el kamma afecta nuestras vidas produciendo eventos tanto deseables como
indeseables, yerros o aciertos, victorias o derrotas.
4. En el ámbito social: son los resultados del kamma colectivo de una sociedad, de la cual emerge la prosperidad o
la pobreza, la armonía o la discordia, etc.
Obviamente, el resultado inmediato de la comprensión de la ley de kamma debería consistir en evitar las malas
acciones y procurar desarrollar las buenas. Si bien, esto es cierto y aconsejable a corto plazo, sin embargo en sí
mismo no constituye el último objetivo de la enseñanza budista sobre este tema. La última meta, por el contrario, es
la cesación total del kamma. El kamma es la causa de los resultados, que a veces son felices y otras veces
desafortunados, pero en su mayoría, mixtos. Esto obliga al ser humano a producir el kamma y a fluctuar
continuamente entre estos dos extremos. Dado que el kamma es una “acción condicionada”, en el sentido que surge
a partir de un deseo o motivo y persigue un determinado resultado –a veces bueno, otras veces, malo- siempre y
necesariamente produce algún resultado. En otras palabras, el hombre que produce el kamma interfiere en el natural
desarrollo del mundo y se ve obligado a seguir interfiriendo porque generalmente descubre que la solución de su
problema crea, a su vez, otros problemas, a veces, aún mayores por resolver y es entonces cuando, según las
palabras de Allan Watts:
El hombre está enredado en el karma. Karma es, pues, el destino de todo aquel que “trata de ser Dios”. Le pone al
mundo una trampa en la que él mismo cae prisionero (2003 :112).

El ideal del Buda o del arahant, el ideal de estar libre del sufrimiento, significa también estar libre del kamma: estar
más allá de los deseos y más allá del “yo” que desea.

El kamma y el renacimiento
De acuerdo a la enseñanza del Buda todos los seres, excepto de arahants, están sujetos a la "renovación de la
existencia en el futuro" (punabbhava), es decir, al renacimiento. El renacimiento dentro del concepto budista, no es
la transmigración del yo o del alma sino la continuación del proceso, el flujo de la existencia, en el cual, las sucesivas
vidas se conectan juntos, más bien a través de transmisión causal de la influencia que a través de una identidad
sustancial. El patrón causal básico subyacente al proceso es aquel, que está definido mediante la enseñanza del
origen dependiente, enseñanza que demuestra cómo es posible el renacimiento sin un alma reencarnado.
El proceso del renacimiento enseñado por el Buda exhibe un definido carácter legal y ético. Este carácter ético está
establecido por el dinamismo fundamental que determina los estados dentro de los cuales los seres renacen y las
circunstancias que encuentran en el transcurso de sus vidas. Aquel dinamismo es elkamma, las acciones volitivas
del cuerpo, el habla y la mente. Aquellos seres que se involucran en malas acciones -acciones motivadas por las
tres perjudiciales raíces de la avidez, el odio y la falsa ilusión- generan el kamma perjudicial, el cual les conduce a
renacer en los estados bajos de la existencia y, si el mismo madura dentro del mundo humano, les tare penas y mala
fortuna. Aquellos seres que se involucran en buenas acciones -acciones motivadas por las tres raíces beneficiosa de
la no-avidez, el no-odio y falta de la falsa ilusión- generan el kamma beneficioso, el cual les conduce a renacer en los
estados elevados de la existencia y, si el mismo madura dentro del mundo humano, les tare la felicidad y buena
fortuna. Siendo que las obras que una persona realiza en el transcurso de una sola vida pueden ser
extremadamente variadas, el tipo de renacimiento que está por venir para ella, puede ser muy impredecible, como lo
demuestra el Buda en MN 136. Pero a pesar de esta variabilidad empírica, una invariable ley gobierna la relación
directa que existe entre los tipos de acciones realizadas y los tipos de resultados que los mismos producen; esta
correlación básica está esquematizada por el Buda en MN 57 y expuesta con más detalles en MN 135.
En varios suttas del Majjhima Nikaya el Buda se refiere a varios planos de existencia dentro de los cuales puede
ocurrir el renacimiento, al igual que ofrece indicaciones sobre los tipos del kamma que conducen a dichos planos. La
topografía cosmológica, desde el punto de vista budista, no es producto de conjeturas o fantasías sino algo
directamente conocido por el Buda a través de sus "poderes del conocimiento de Tathagata"(MN 12,36); hasta cierto
punto ese mismo proceso también puede ser verificado por aquellos que alcanzan el ojo divino (MN 39,20). Puede
ser útil aquí un breve repaso de los planos de existencia reconocidos por la cosmología budista con sus
antecedentes kámmicos, tal como han sido sistematizados en el desarrollo de la tradición budista.

El cosmos budista se divide en tres extensos reinos: el reino de la esfera sensorial, el reino de la materia sutil y el
reino inmaterial. Cada uno de ellos abarca un rango de los planos subsidiarios, dando un total de treinta y un planos
de existencia.

El reino de la esfera sensorial, llamado así porque el deseo sensorial predomina allí, consiste en once planos
divididos en dos grupos: el mal destino y el buen destino. El mal destino o el "estado de privación" (apaya) tiene
cuatro lugares: el infierno, el cual es un estado de intensos tormentos descritos en MN 129 y en MN 130; el reino
animal; la esfera de los espíritus (peta), seres afligidos por una intensa sed y el hambre; y la esfera de los titanes
(asuras), seres involucrados en continuos combates (no mencionados, sin embargo, como un plano separado en el
Majjhima). Los cursos del kamma que conducen al renacimiento dentro de esos planos están clasificados en un
grupo de diez: tres corporales, cuatro verbales y tres mentales. Los mismos están enumerados brevemente en MN
9,4 y explicados en MN 41. La gradación en cuanto a la gravedad de las malas intenciones, responsables de esos
hechos, da cuenta de las diferencias específicas del modo de renacimiento, en tanto resultante de dichas acciones.
Los buenos destinos dentro del reino de la esfera sensorial son el mundo humano y los planos celestiales. Estos
últimos son de seis clases: los dioses bajo los Cuatro Grandes Reyes; los dioses de los Treinta y tres (tavatimsa),
que están siendo presididos por Sakka, la metamorfosis budista del Indra, descrito como un devoto del Buda,
creyente, aunque propenso a la negligencia (MN 37); los dioses del Yama; los dioses del cielo Tusita, que fue la
morada del Bodhisatta anterior a su último nacimiento (MN 123); los dioses que se deleitan en la creación; y los
dioses que ejercen el poder sobre otras creaciones. Se dice que esta última, fue la morada del Mara, el Tentador en
el budismo, quien aparte de ser el símbolo del Deseo y la Muerte, es considerado también como una poderosa
deidad con malos designios que quiere impedir a los seres el escape de la red del samsara. La causa kámmica de
nacer dentro de los buenos destinos del reino de la esfera sensorial, es la práctica de los diez cursos de acciones
beneficiosas, definidos en MN 9,8 y en MN 41.
En el reino de la materia sutil los tipos burdos de la materia están ausentes y la dicha, el poder, la luminosidad y la
vitalidad de sus habitantes son muy superiores a las de aquellos que habitan el reino de la esfera de los sentidos. El
reino de la materia sutil consiste en dieciséis planos que tienen su contraparte en los cuatro jhanas. El logro del
primer jhana conduce al renacimiento entre la Asamblea del Brahma, los Ministros del Brahma o los Maha Brahmas,
de acuerdo si el jhana ha sido desarrollado en el grado inferior, mediano o superior. El Brahma Baka (MN 49) y el
Brahma Sahampati (MN 26, MN 67) parecen ser residentes de este último plano. Los suttas mencionan
especialmente las moradas divinas como el sendero que conduce a la compañía del Brahma (MN 99,24-27). El logro
del segundo jhana, dentro del mismo triple esquema de graduación, conduce respectivamente al renacimiento entre
los dioses de Limitada Radiación, de Inconmensurable Radiación y de la Radiación Transmitida. El tercer jhana
conduce al renacimiento entre los dioses de Gloria Limitada, de Gloria Inconmensurable y de la Gloria Refulgente. El
cuarto jhana comúnmente conduce el renacimiento entre los dioses del Gran Fruto, pero cuando es desarrollado con
el deseo de alcanzar un modo de existencia no sintiente, conducirá al renacimiento entre los seres no perceptivos,
para los cuales, la conciencia es temporalmente suspendida. El reino de la materia sutil contiene también cinco
planos especiales dedicados exclusivamente al renacimiento de los que no-retornan. Estas son las Moradas Puras:
Aviha, Atappa, Sudassa, Sudassi y Akanittha. Se dice que en cada uno de esos planos del reino de la materia sutil el
espacio vital es de una enorme duración, la cual se incrementa significativamente de un plano menor al mayor.

El tercer reino de la existencia es el reino inmaterial, donde la materia llega a ser inexistente y donde solamente
existen los procesos mentales. Ese reino consiste en cuatro planos, que tienen su contraparte en los cuatro logros
meditativos inmateriales, cuyos resultados se desprenden de sus nombres: la base del espacio infinito, la conciencia
infinita, la nada y la ni-percepción-ni-no-percepción. El espacio vital atribuido a esos planos es respectivamente
20.000, 40.000, 60.000 y 84.000 grandes eones.

Dentro de la cosmología budista, la existencia en cada uno de los reinos, siendo el producto del kamma de una
potencia finita, necesariamente es transitoria. Los seres renacen de acuerdo a sus acciones, experimentan los
buenos o malos resultados y luego, cuando el kamma generativa consume su fuerza, pasan a renacer de nuevo, una
vez más determinados por el otro kamma que haya encontrado la oportunidad de madurar. Tanto los tormentos del
infierno como las dichas del cielo, sin importar qué tan largos sean, están destinados a culminar. Por esta razón, el
Buda no ubica la meta final de su enseñanza en ningún sitio del mundo condicionado. Si bien, conduce a aquellos
cuyas facultades espirituales aún aspiran el renacimiento celestial y les enseña las líneas de conducta capaces de
satisfacerlas (MN 41, MN 120), sin embargo, a aquellos que tienen sus facultades maduras y pueden percibir la
naturaleza insatisfactoria de todo lo condicionado, urge a hacer determinados esfuerzos para poner fin al extravío del
samsara y alcanzar el Nibbana, el cual trasciende a todos los planos de la existencia.

Kammanirodha Sutta - Discurso sobre el cese


del kamma
El Budda explica la diferencia entre el "viejo" kamma (acciones perpetuadas en el pasado) y el "nuevo" kamma
(acciones del presente). También deja claro que el propósito final del budismo no es generar el "buen kamma" sino
llegar al cese del kamma.
“Monjes, voy a enseñaros sobre el kamma nuevo y viejo, sobre el cese del kamma y sobre el camino que lleva al
cese del kamma. Escuchad y prestad atención que voy a hablar.

“¿Y qué es, monjes, el viejo kamma? El ojo es el viejo kamma, en cuanto generado y fabricado por la volición, capaz
de experimentar las sensaciones. El oído es el viejo kamma… La nariz es el viejo kamma… La lengua es el viejo
kamma… El cuerpo es el viejo kamma… La mente es el viejo kamma, en cuanto generada y fabricada por la
volición, capaz de experimentar las sensaciones. Esto es lo que se llama el viejo kamma.

“¿Y qué es, monjes, el nuevo kamma? Cualquier acción que uno haga ahora a través del cuerpo, del habla o de la
mente. Esto es lo que se llama el nuevo kamma.

“¿Y qué es, monjes, el cese del kamma? Cuando uno llega a la liberación a través del cese de las acciones
corporales, de las acciones verbales y de las acciones mentales. Esto es lo que se llama el cese del kamma.

“¿Y cuál es, monjes, el camino que conduce al cese del kamma? El Noble Óctuple Sendero, es decir, el recto punto
de vista, la recta intención, el recto habla, la recta acción, la recta forma de vida, el recto esfuerzo, la recta atención
consciente y la recta concentración. Este es lo que se llama el camino que conduce al cese del kamma.

“De esta manera, monjes, os enseñé sobre el kamma nuevo y viejo, sobre el cese del kamma y sobre el camino que
conduce al cese del kamma. Cualquier cosa, monjes, que un maestro pudo haber hecho por sus discípulos, movido
por la compasión y el deseo de su bienestar, yo he hecho por vosotros. Allí hay raíces de los árboles, por ahí chozas
vacías: Practicad jhanas, monjes. No sed negligentes; no sea que tengáis que lamentaros luego. Esta es nuestra
instrucción para vosotros”.

Samkhitta, Vitthara y Sonakayana Sutta –


Resumen, Detalles [del kamma] y el brahmán
Sonakayana
AN 4,232 {15A4.5.4.2,232} Samkhitta Sutta – Resumen [del kamma]
[232] {232} "Monjes, existen estos cuatro tipos del kamma que han sido descubiertos, conocidos y comprendidos por
mí. Y, ¿cuáles son esos cuatro? He aquí, está el kamma que es oscuro con el resultado oscuro; el kamma que es
brillante con el resultado brillante; el kamma que es oscuro y brillante con el resultado oscuro y brillante; el kamma
que no es ni oscuro ni brillante con el resultado ni oscuro ni brillante, que lleva a la destrucción del kamma. Éstos
son, monjes, los cuatro tipos del kamma que han sido descubiertos, conocidos y comprendidos por mí”.

AN 4,233 {15A4.5.4.3,233} Vitthara Sutta – Detalles [del kamma]


[233] {233} "Monjes, existen estos cuatro tipos del kamma que han sido descubiertos, conocidos y comprendidos por
mí. Y, ¿cuáles son esos cuatro? He aquí, está el kamma que es oscuro con el resultado oscuro; el kamma que es
brillante con el resultado brillante; el kamma que es oscuro y brillante con el resultado oscuro y brillante; el kamma
que no es ni oscuro ni brillante con el resultado ni oscuro ni brillante, que lleva al fin del kamma. Éstos son, monjes,
los cuatro tipos del kamma que han sido descubiertos, conocidos y comprendidos por mí.

“¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que es oscuro con el resultado oscuro? Este es el caso, monjes, de alguien
que efectúa perjudiciales acciones corporales… perjudiciales acciones verbales… perjudiciales acciones mentales.
Al efectuar estas acciones perjudiciales, reaparece en el mundo perjudicial donde se ve afectado por los contactos
perjudiciales, experimentando las sensaciones que son exclusivamente dolorosas, al igual que pasa con los seres en
el infierno. En esto consiste, monjes, el kamma que es oscuro con el resultado oscuro.
“¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que es brillante con el resultado brillante? Este es el caso, monjes, de
alguien que efectúa no perjudiciales acciones corporales… no perjudiciales acciones verbales… no perjudiciales
acciones mentales. Al efectuar estas acciones no perjudiciales, reaparece en el mundo no perjudicial donde se ve
influido por los contactos que no son perjudiciales, experimentando las sensaciones que son exclusivamente
placenteras, como en caso de los siempre-radiantes devas. En esto consiste, monjes, el kamma que es brillante con
el resultado brillante.

“¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que es oscuro y brillante con el resultado oscuro y brillante? Este es el caso,
monjes, de alguien que efectúa tanto perjudiciales como no perjudiciales acciones corporales… tanto perjudiciales
como no perjudiciales acciones verbales… tanto perjudiciales como no perjudiciales acciones mentales. Al efectuar
estas acciones que son tanto perjudiciales como no perjudiciales, reaparece en el mundo que es tanto perjudicial
como no perjudicial donde se ve influido tanto por los contactos perjudiciales como por los que no son perjudiciales,
experimentando las sensaciones que son una mezcla de dolor y placer, al igual que los seres del mundo humano,
algunos devas y ciertos seres de los planos más bajos. En esto consiste, monjes, el kamma que es oscuro y brillante
con el resultado oscuro y brillante.

“¿Y en qué consiste, monjes, el kamma que no es ni oscuro ni brillante con el resultado ni oscuro ni brillante, que
lleva a la destrucción del kamma? Este es el caso, monjes, de alguien con la intención de abandonar el kamma
oscuro con el resultado oscuro, con la intención de abandonar el kamma brillante con el resultado brillante y con la
intención de abandonar el kamma oscuro y brillante con el resultado oscuro y brillante. En esto consiste, monjes, el
kamma que no es oscuro ni brillante con el resultado ni oscuro ni brillante, que lleva a la destrucción del kamma.

“Éstos son, monjes, los cuatro tipos del kamma que han sido descubiertos, conocidos y comprendidos por mí”.

AN 4,234 {15A4.5.4.3,234} Sonakayana Sutta – Sonakayana


[234] {234} Entonces el brahmán Sikhamoggallana se acercó al Bienaventurado e intercambió con él cordiales
saludos. Cuando estas cordiales charlas y palabras de bienvenida habían terminado, se sentó a un lado y dijo al
Bienaventurado:

“En los días anteriores, Maestro Gotama, hace mucho tiempo, el brahmán estudiante de nombre Sonakayana se me
acercó y me dijo: ‘El asceta Gotama prescribe la distancia del kamma. Pero al prescribir la distancia del kamma,
aboga por la aniquilación del mundo. Este mundo, señor, que tiene el kamma como su sustancia, continúa mediante
el sometimiento al kamma’”.

[El Bienaventurado:] “Yo ni siquiera recuerdo haber visto al brahmán estudiante Sonakayana. ¿Cómo entonces
podría existir semejante discusión? He aquí, brahmán, estas cuatro clases de kamma que han sido proclamadas por
mí, después de que las hube descubierto por mí mismo mediante el conocimiento directo. Y, ¿cuáles son esas
cuatro? …”.

[El resto es idéntico al sutta anterior]

Nibbedhika Sutta – Discurso penetrante


El Buda enseña cómo penetrar la sensualidad, las sensaciones, las percepciones, las corrupciones mentales, las
acciones (el kamma) y la insatisfacción (dukkha) para alcanzar la liberación.

[63] {63} “Monjes, voy a enseñaros el discurso del Dhamma, que es un discurso penetrante. Escuchad y prestad
atención, que voy a hablar.”

“Sí, Venerable Señor”, respondieron los monjes y el Bienaventurado continuó:


“Y, ¿cuál es el discurso del Dhamma que es un discurso penetrante?

“Monjes, la sensualidad debe ser conocida. La causa, por la cual la sensualidad llega a operar, debe ser conocida.
La diversidad de la sensualidad debe ser conocida. Los resultados de la sensualidad deben ser conocidos. El cese
de la sensualidad debe ser conocido. El sendero que conduce al cese de la sensualidad debe ser conocido.

“Monjes, las sensaciones deben ser conocidas…

“Monjes, las percepciones deben ser conocidas…

“Monjes, las corrupciones mentales deben ser conocidas…

“Monjes, el kamma debe ser conocido…

“Monjes, la insatisfacción debe ser conocida. La causa, por la cual la insatisfacción llega a operar, debe ser
conocida. La diversidad de la insatisfacción debe ser conocida. El resultado de la insatisfacción debe ser conocido.
El cese de la insatisfacción debe ser conocido. El sendero que conduce al cese de la insatisfacción debe ser
conocido.

“Monjes, ¿y cómo, la sensualidad, la causa, por la cual la sensualidad llega a operar, la diversidad de la sensualidad,
el resultado de la sensualidad, el cese de la sensualidad y el sendero que conduce al cese de la sensualidad, deben
ser conocidos?

“Monjes, existen estos cinco objetos de la sensualidad. Y, ¿cuáles son esos cinco? Las formas cognoscibles a través
del ojo: agradables, placenteras, encantadoras, atrayentes, que fomentan el deseo y la seducción. Los sonidos
cognoscibles a través del oído… los olores cognoscibles a través de la nariz… los sabores cognoscibles a través de
la lengua… las sensaciones táctiles cognoscibles a través del cuerpo: agradables, placenteras, encantadoras,
atrayentes, que fomentan el deseo y la seducción. Monjes, en esta Disciplina de los Nobles, todo esto no es la
sensualidad, sino que se llama ‘los objetos de la sensualidad’.

Las decisiones apasionadas ligan al hombre a la sensualidad,


No hay alegría, en el brillo mundano de la sensualidad.
Las decisiones apasionadas ligan al hombre a la sensualidad,
Mientras que el brillo mundano de la sensualidad permanece igual,
El sabio, domina sus deseos.

“¿Y qué es la causa, por la cual la sensualidad llega a operar? El contacto, monjes, es la causa, por la cual la
sensualidad llega a operar.

“¿Y qué es la diversidad de la sensualidad? La sensualidad respecto a las formas es una, la sensualidad respecto a
los sonidos es otra, la sensualidad respecto a los olores es otra, la sensualidad respecto a los sabores es otra y la
sensualidad respecto a las sensaciones táctiles es otra: esto es, monjes, lo que se llama ‘la diversidad de la
sensualidad’.

“¿Y qué es el resultado de la sensualidad? Alguien que desea la sensualidad engendra los correspondientes estados
de existencia, alimentados con el mérito o el desmérito. Esto es, monjes, lo que se llama ‘el resultado de la
sensualidad’.

“¿Y qué es el cese de la sensualidad? El fin del contacto es el cese de la sensualidad. Y éste óctuple noble sendero
–recta visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de vida, recto esfuerzo, recta
atención consciente y recta concentración- es el camino que conduce al cese de la sensualidad.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce la sensualidad de esta manera, conoce la causa, por la cual la
sensualidad llega a operar de esta manera, conoce la diversidad de la sensualidad de esta manera, conoce el
resultado de la sensualidad de esta manera, conoce el cese de la sensualidad de esta manera y conoce el sendero
que conduce al cese de la sensualidad de esta manera, entonces su conocimiento penetra esta vida santa del cese
de la sensualidad.
“Monjes, es por eso que la sensualidad debe ser conocida, la causa, por la cual la sensualidad llega a operar, debe
ser conocida, la diversidad de la sensualidad debe ser conocida, los resultados de la sensualidad deben ser
conocidos, el cese de la sensualidad debe ser conocido y el sendero que conduce al cese de la sensualidad debe
ser conocido.

“Monjes, ¿y cómo, las sensaciones, la causa, por la cual las sensaciones llegan a operar, la diversidad de las
sensaciones, el resultado de las sensaciones, el cese de las sensaciones y el sendero que conduce al cese de las
sensaciones, deben ser conocidos?

“Monjes, existen estas tres clases de sensaciones: sensación placentera, sensación dolorosa y sensación ni
placentera ni dolorosa.

“¿Y qué es la causa, por la cual las sensaciones llegan a operar? El contacto, monjes, es la causa, por la cual las
sensaciones llegan a operar.

“¿Y qué es la diversidad de las sensaciones? Hay sensaciones placenteras conectadas con la esfera mundana y hay
sensaciones placenteras no conectadas con la esfera mundana. Hay sensaciones dolorosas conectadas con la
esfera mundana y hay sensaciones dolorosas no conectadas con la esfera mundana. Hay sensaciones ni
placenteras ni dolorosas conectadas con la esfera mundana y hay sensaciones ni placenteras ni dolorosas no
conectadas con la esfera mundana. Esto es, monjes, lo que se llama ‘la diversidad de la sensación’.

“¿Y qué es el resultado de las sensaciones? Alguien que siente la sensación, engendra los correspondientes
estados de existencia, alimentados con el mérito o el desmérito. Esto es, monjes, lo que se llama ‘el resultado de l a
sensación’.

“¿Y qué es el cese de las sensaciones? El fin del contacto es el cese de las sensaciones. Y éste óctuple noble
sendero –recta visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de vida, recto esfuerzo, recta
atención consciente y recta concentración- es el camino que conduce al cese de las sensaciones.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce las sensaciones de esta manera, conoce la causa, por la cual las
sensaciones llegan a operar de esta manera, conoce la diversidad de las sensaciones de esta manera, conoce el
resultado de las sensaciones de esta manera, conoce el cese de las sensaciones de esta manera y conoce el
sendero que conduce al cese de las sensaciones de esta manera, entonces su conocimiento penetra esta vida santa
del cese de las sensaciones.

“Monjes, es por eso que las sensaciones deben ser conocidas, la causa, por la cual las sensaciones llegan a operar,
debe ser conocida, la diversidad de las sensaciones debe ser conocida, los resultados de las sensaciones deben ser
conocidos, el cese de las sensaciones debe ser conocido y el sendero que conduce al cese de las sensaciones debe
ser conocido.

“Monjes, ¿y cómo, las percepciones, la causa, por la cual las percepciones llegan a operar, la diversidad de las
percepciones, el resultado de las percepciones, el cese de las percepciones y el sendero que conduce al cese de las
percepciones, deben ser conocidos?

“Monjes, existen estas seis clases de percepciones: la percepción de la forma, la percepción del sonido, la
percepción del olor, la percepción del sabor, la percepción de la sensación táctil y la percepción de las ideas.

“¿Y qué es la causa, por la cual las percepciones llegan a operar? El contacto, monjes, es la causa, por la cual las
percepciones llegan a operar.

“¿Y qué es la diversidad de las percepciones? La percepción respecto a las formas es una, la percepción respecto a
los sonidos es otra, la percepción respecto a los olores es otra, la percepción respecto a los sabores es otra, la
percepción respecto a las sensaciones táctiles es otra y la percepción respecto a las ideas es otra: esto es, monjes,
lo que se llama ‘la diversidad de las percepciones’.

“¿Y qué es el resultado de las percepciones? Yo digo, que las percepciones tienen como resultado el hábito; cuando
alguien está percibiendo una cosa, es así como se expresa: ‘estoy percibiendo esto’. Esto es, monjes, lo que se
llama ‘el resultado de las percepciones’.
“¿Y qué es el cese de las percepciones? El fin del contacto es el cese de las percepciones. Y éste óctuple noble
sendero –recta visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de vida, recto esfuerzo, recta
atención consciente y recta concentración- es el camino que conduce al cese de las percepciones.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce las percepciones de esta manera, conoce la causa, por la cual las
percepciones llegan a operar de esta manera, conoce la diversidad de las percepciones de esta manera, conoce el
resultado de las percepciones de esta manera, conoce el cese de las percepciones de esta manera y conoce el
sendero que conduce al cese de las percepciones de esta manera, entonces su conocimiento penetra esta vida
santa del cese de las percepciones.

“Monjes, es por eso que las percepciones deben ser conocidas, la causa, por la cual las percepciones llegan a
operar, debe ser conocida, la diversidad de las percepciones debe ser conocida, los resultados de las percepciones
deben ser conocidos, el cese de las percepciones debe ser conocido y el sendero que conduce al cese de las
percepciones debe ser conocido.

“Monjes, ¿y cómo, las corrupciones mentales, la causa, por la cual las corrupciones mentales llegan a operar, la
diversidad de las corrupciones mentales, el resultado de las corrupciones mentales, el cese de las corrupciones
mentales y el sendero que conduce al cese de las corrupciones mentales, deben ser conocidos?

“Monjes, existen estas tres clases de corrupciones mentales: la impureza mental de la sensualidad, la impureza
mental de la existencia y la impureza mental de la ignorancia.

“¿Y qué es la causa, por la cual las corrupciones mentales llegan a operar? La ignorancia, monjes, es la causa, por
la cual las corrupciones mentales llegan a operar.

“¿Y qué es la diversidad de las corrupciones mentales? Existen corrupciones mentales que llevan al infierno, otras
que llevan al útero animal, otras que llevan al plano de los espíritus hambrientos, otras que llevan al mundo humano
y otras que llevan al mundo de los devas. Esto es, monjes, lo que se llama ‘la diversidad de las corrupciones
mentales ’.

“¿Y qué es el resultado de las corrupciones mentales? Alguien que está inmerso en la ignorancia, engendra los
correspondientes estados de existencia, alimentados con el mérito o el desmérito. Esto es, monjes, lo que se llama
‘el resultado de las corrupciones mentales ’.

“¿Y qué es el cese de las corrupciones mentales? El fin de la ignorancia es el cese de las corrupciones mentales. Y
éste óctuple noble sendero –recta visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de vida,
recto esfuerzo, recta atención consciente y recta concentración- es el camino que conduce al cese de las
corrupciones mentales.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce las corrupciones mentales de esta manera, conoce la causa, por la
cual las corrupciones mentales llegan a operar de esta manera, conoce la diversidad de las corrupciones mentales
de esta manera, conoce el resultado de las corrupciones mentales de esta manera, conoce el cese de las
corrupciones mentales de esta manera y conoce el sendero que conduce al cese de las corrupciones mentales de
esta manera, entonces su conocimiento penetra esta vida santa del cese de las corrupciones mentales.

“Monjes, es por eso que las corrupciones mentales deben ser conocidas, la causa, por la cual las corrupciones
mentales llegan a operar, debe ser conocida, la diversidad de las corrupciones mentales debe ser conocida, los
resultados de las corrupciones mentales deben ser conocidos, el cese de las corrupciones mentales debe ser
conocido y el sendero que conduce al cese de las corrupciones mentales debe ser conocido.

“Monjes, ¿y cómo, el kamma, la causa, por la cual el kamma llega a operar, la diversidad del kamma, el resultado del
kamma, el cese del kamma y el sendero que conduce al cese del kamma, deben ser conocidos?

“Monjes, yo digo que la volición es el kamma. Por haber querido uno realiza el kamma a través del cuerpo, el habla y
la mente.

“¿Y qué es la causa, por la cual el kamma llega a operar? El contacto, monjes, es la causa, por la cual el kamma
llega a operar.
“¿Y qué es la diversidad del kamma? Existe el kamma a ser experimentado en el infierno, otro experimentado en el
reino animal, otro experimentado en el plano de los espíritus hambrientos, otro experimentado en el mundo humano
y otro experimentado en el mundo de los devas. Esto es, monjes, lo que se llama ‘la diversidad del kamma’.

“¿Y qué es el resultado del kamma? Yo digo, existen estas tres clases de resultados del kamma: el que acontece
aquí y ahora, el que acontece en el [siguiente] renacimiento y el que acontece en otra subsecuente ocasión. Esto es,
monjes, lo que se llama ‘el resultado del kamma’.

“¿Y qué es el cese del kamma? El fin de la ignorancia es el cese del kamma. Y éste óctuple noble sendero –recta
visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de vida, recto esfuerzo, recta atención
consciente y recta concentración- es el camino que conduce al cese del kamma.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce el kamma de esta manera, conoce la causa, por la cual el kamma
llega a operar de esta manera, conoce la diversidad del kamma de esta manera, conoce el resultado del kamma de
esta manera, conoce el cese del kamma de esta manera y conoce el sendero que conduce al cese del kamma de
esta manera, entonces su conocimiento penetra esta vida santa del cese del kamma.

“Monjes, es por eso que el kamma debe ser conocido, la causa, por la cual el kamma llega a operar, debe ser
conocida, la diversidad del kamma debe ser conocida, los resultados del kamma deben ser conocidos, el cese del
kamma debe ser conocido y el sendero que conduce al cese del kamma debe ser conocido.

“Monjes, ¿y cómo, la insatisfacción, la causa, por la cual la insatisfacción llega a operar, la diversidad de la
insatisfacción, el resultado de la insatisfacción, el cese de la insatisfacción y el sendero que conduce al cese de la
insatisfacción, deben ser conocidos?

“El nacimiento es doloroso, la vejez es dolorosa y la muerte es dolorosa. La pena, lamentación, tristeza, angustia y
desesperanza son dolorosas. Asociarse con lo que no es querido es doloroso. Separarse de lo querido es doloroso.
No obtener lo deseable es doloroso. En resumen, los cinco cúmulos del apego son dolorosos.

“¿Y qué es la causa, por la cual la insatisfacción llega a operar? La avidez, monjes, es la causa, por la cual la
insatisfacción llega a operar.

“¿Y qué es la diversidad de la insatisfacción? Hay insatisfacción mayor y menor. Hay insatisfacción que cambia
pronto y el que dura mucho tiempo para cambiar. Esto es, monjes, lo que se llama ‘la diversidad de la insatisfacción’.

“¿Y qué es el resultado de la insatisfacción? Este es el caso de alguien que, vencido por el dolor, con su mente
exhausta, sufre, llora, se lamenta y, golpeando su pecho, queda perplejo. O, es el caso de alguien que, vencido por
el dolor, con su mente exhausta, emprende una búsqueda exterior: ‘¿quién conoce el camino para poner fin a este
dolor?’ Yo digo, monjes, que el resultado de la insatisfacción se experimenta tanto en la perplejidad como en la
búsqueda.

“¿Y qué es el cese de la insatisfacción? El fin de la avidez es el cese del kamma. Y éste óctuple noble sendero –
recta visión, recta resolución, recta forma de hablar, recta acción, recta forma de vida, recto esfuerzo, recta atención
consciente y recta concentración- es el camino que conduce al cese de la insatisfacción.

“Ahora bien, cuando el noble discípulo conoce la insatisfacción de esta manera, conoce la causa, por la cual la
insatisfacción llega a operar de esta manera, conoce la diversidad de la insatisfacción de esta manera, conoce el
resultado de la insatisfacción de esta manera, conoce el cese de la insatisfacción de esta manera y conoce el
sendero que conduce al cese de la insatisfacción de esta manera, entonces su conocimiento penetra esta vida santa
del cese de la insatisfacción.

“Monjes, es por eso que la insatisfacción debe ser conocida, la causa, por la cual la insatisfacción llega a operar,
debe ser conocida, la diversidad de la insatisfacción debe ser conocida, los resultados de la insatisfacción deben ser
conocidos, el cese de la insatisfacción debe ser conocido y el sendero que conduce al cese de la insatisfacción debe
ser conocido.

“Monjes, éste es el discurso del Dhamma que es un discurso penetrante”


Culakammavibhanga Sutta - Discurso menor
con la exposición del kamma
¿Por qué algunas personas viven una larga vida, mientras que otras mueren jóvenes? ¿Por qué algunos nacen ricos
y otros pobres? El Buda explica cómo el kamma es una explicación de la buena o mala fortuna de las personas.

Esto he escuchado: En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en la arbolada Jeta del Parque
Anathapindika, cerca de Savatthi.

[2] En esa ocasión, Subha, el estudiante del brahmán e hijo de Todeyya, se acercó al Bienaventurado e intercambió
con él cordiales saludos. Cuando esas amigables y corteses palabras de bienvenida habían terminado, se sentó a
un lado y se dirigió al Bienaventurado con estas palabras:

[3] “Maestro Gotama, ¿cuál es la razón, cuál es la condición por la cual algunos seres parecen inferiores y otros
superiores? He aquí, vemos algunas personas que tienen una vida corta y otras, larga, algunas personas saludables
y otras enfermas, algunas feas y otras bonitas, algunas sin prominencia alguna y otras prominentes, algunas pobres
y otras ricas, algunas del linaje bajo y otras de alta alcurnia, unas estúpidas y otras sabias. ¿Cuál es la razón, cuál
es la condición, maestro Gotama, por la cual algunos seres parecen inferiores y otros superiores?”.

[4] “Estudiante, los seres son dueños de sus propias acciones, son herederos de sus propias acciones. Fueron
originados por sus acciones, están ligados a ellas y sus acciones son su refugio. Es la acción la que hace distinción
entre los seres inferiores y superiores”.

“Yo no entiendo el significado detallado de esta declaración, que ha sido pronunciada por el maestro Gotama en
forma breve sin que se le agreguen explicaciones más detalladas. Sería bueno que el maestro Gotama me enseñara
el Dhamma, de tal manera que pudiera entender en detalle la declaración del maestro Gotama”.

“En este caso, estudiante, escucha y presta atención que voy a hablar”.

“Así será, maestro Gotama”, respondió Subha, el estudiante del brahmán y el Bienaventurado dijo:

[5] {290} “He aquí, estudiante, existen hombres y mujeres que matan a los seres vivos; son sangrientos asesinos,
portadores de terror y violencia, sin piedad hacia los seres vivos. Por realizar semejantes acciones y comprometerse
con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de privación, teniendo un
destino infeliz, la perdición y hasta el infierno. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no
reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición o el infierno, sino que de vuelta llegan
al plano humano, dondequiera que renacen, su vida es corta. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva
a una vida corta: matar a los seres vivos; ser un sangriento asesino, portador de terror y violencia, sin piedad hacia
los seres vivos.

[6] “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que abandonaron la matanza de los seres vivos y se abstienen
de matar a los seres vivos. Los que desecharon sus vástagos y puñales y tratan con gentileza, amabilidad y
compasión a todos los seres vivos. Por realizar semejantes acciones y comprometerse con ellas, una vez disuelto su
cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de felicidad, en el plano celestial. Pero, si al disolverse su
cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de felicidad, en el plano celestial, sino que de vuelta
llegan al plano humano, dondequiera que renacen, su vida es larga. De modo que, éste es el camino, estudiante,
que lleva a una vida larga: abandonar la matanza de los seres vivos y abstenerse de matar a los seres vivos.
Desechar los vástagos y los puñales, y tratar con gentileza, amabilidad y compasión a todos los seres vivos.

[7] {291} “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que hacen daño a los seres vivos: con sus propias manos,
con zopencos, varas o puñales. Por realizar semejantes acciones y comprometerse con ellas, una vez disuelto su
cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y hasta
el infierno. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación,
teniendo un destino infeliz, la perdición o el infierno, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que
renacen, su vida es enfermiza. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a una vida enfermiza: hacer
daño a los seres vivos: con sus propias manos, con zopencos, varas o puñales.

[8] “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que abandonaron la práctica de hacer daño a los seres vivos:
no lo hacen ni con sus propias manos, ni con zopencos, varas ni puñales. Por realizar semejantes acciones y
comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de felicidad,
en el plano celestial. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de
felicidad, en el plano celestial, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, su vida es
saludable. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a una vida saludable: abandonar la práctica de
hacer daño a los seres vivos: no hacerlo ni con las propias manos, ni con zopencos, varas ni puñales.

[9] {292} “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que tienen un carácter furioso e irritable. Hasta cuando
reciben la más mínima crítica, se ofenden, se vuelven irritados, resentidos, hostiles, enojados y amargados. Por
realizar semejantes acciones y comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte,
reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y hasta el infierno. Pero, si al
disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino
infeliz, la perdición o el infierno, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, renacen
siendo feos. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la fealdad: tener un carácter furioso e irritable.
Ofenderse, volverse irritado, resentido, hostil, enojado y amargado, al recibir la más mínima crítica.

[10] “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que no tienen un carácter furioso ni irritable. Cuando reciben
la crítica, no se ofenden, no se vuelven irritados, resentidos, hostiles, enojados ni amargados. Por realizar
semejantes acciones y comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en
un estado de felicidad, en el plano celestial. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no
reaparecen en un estado de felicidad, en el plano celestial, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera
que renacen, renacen siendo bonitos. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la belleza: no tener
un carácter furioso e irritable. No ofenderse, no volverse irritado, resentido, hostil, enojado ni amargado, al recibir la
crítica.

[11] {293} “Además, estudiante, existen hombres y mujeres envidiosos, que envidian a otros cuando éstos reciben
ganancias, honor, respeto, saludos, reverencia o veneración. Por realizar semejantes acciones y comprometerse con
ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino
infeliz, la perdición y hasta el infierno. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en
un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición o el infierno, sino que de vuelta llegan al plano
humano, dondequiera que renacen, no tienen prominencia alguna. De modo que, éste es el camino, estudiante, que
lleva a la falta de prominencia: ser envidioso, envidiar a otros cuando éstos reciben ganancias, honor, respeto,
saludos, reverencia o veneración.

[12] “Además, estudiante, existen hombres y mujeres no envidiosos, que no envidian a otros cuando éstos reciben
ganancias, honor, respeto, saludos, reverencia o veneración. Por realizar semejantes acciones y comprometerse con
ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de felicidad, en el plano celestial.
Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de felicidad, en el plano
celestial, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, renacen como personas
prominentes. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la prominencia: no ser envidioso, no envidiar a
otros cuando éstos reciben ganancias, honor, respeto, saludos, reverencia o veneración.

[13] {294} “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que no ofrecen comida, bebida ni otro tipo de donativos,
como vestimentas, coches, guirnaldas, perfumes, ungüentos, camas, alojamiento o lámparas, a los ascetas y
brahmanes. Por no realizar semejantes acciones ni comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después
de la muerte, reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y hasta el infierno. Pero,
si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino
infeliz, la perdición o el infierno, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, son pobres.
De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la pobreza: no ofrecer comida, bebida ni otro tipo de
donativos, como vestimentas, coches, guirnaldas, perfumes, ungüentos, camas, alojamiento o lámparas, a los
ascetas y brahmanes.

[14] “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que ofrecen comida, bebida y otro tipo de donativos, como
vestimentas, coches, guirnaldas, perfumes, ungüentos, camas, alojamiento o lámparas a los ascetas y brahmanes.
Por realizar semejantes acciones y comprometerse con ellos, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte,
reaparecen en un estado de felicidad, en el plano celestial. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte,
ellos no reaparecen en un estado de felicidad, en el plano celestial, sino que de vuelta llegan al plano humano,
dondequiera que renacen, son ricos. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la riqueza: ofrecer la
comida, la bebida y otro tipo de donativos, como vestimentas, coches, guirnaldas, perfumes, ungüentos, camas,
alojamiento o lámparas, a los ascetas y brahmanes.

[15] {295} “Además, estudiante, existen hombres y mujeres obstinados y arrogantes, quienes no rinden homenaje a
los que merecen ser homenajeados, no se levantan frente a aquellos, en cuya presencia hay que levantarse, no
ofrecen el asiento a quienes se debe hacerlo, no abren camino para quienes se debería abrirlo, no honran, no
respetan, no reverencian ni veneran a quienes merecen la honra, el respeto, la reverencia y la veneración. Por no
realizar semejantes acciones ni comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte,
reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y hasta el infierno. Pero, si al
disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino
infeliz, la perdición o el infierno, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, son de linaje
bajo. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva al linaje bajo: ser obstinado y arrogante, no rendir
homenaje a los que merecen ser homenajeados, no levantarse frente a aquellos, en cuya presencia hay que
levantarse, no ofrecer asiento a quienes se debe hacerlo, no abrir camino para quienes se debería abrirlo, no honrar,
no respetar, no reverenciar ni venerar a quienes merecen la honra, el respeto, la reverencia y la veneración.

[16] “Además, estudiante, existen hombres y mujeres no obstinados ni arrogantes, quienes rinden homenaje a los
que merecen ser homenajeados, se levantan frente a aquellos, en cuya presencia hay que levantarse, ofrecen el
asiento a quienes se debe hacerlo, abren camino para quienes se debería abrirlo, honran, respetan, reverencian y
veneran a quienes merecen la honra, el respeto, la reverencia y la veneración. Por realizar semejantes acciones y
comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de felicidad,
en el plano celestial. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de
felicidad, en el plano celestial, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, son de alcurnia
alta. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la alcurnia alta: no ser obstinado ni arrogante, rendir
homenaje a los que merecen ser homenajeados, levantarse frente a aquellos, en cuya presencia hay que levantarse,
ofrecer asiento a quienes se debe hacerlo, abrir camino para quienes se debería abrirlo, honrar, respetar,
reverenciar y venerar a quienes merecen la honra, el respeto, la reverencia y la veneración.

[17] {296} “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que no visitan a los ascetas ni brahmanes preguntando:
‘¿Qué es, venerable señor, lo beneficioso? ¿Qué es lo pernicioso? ¿Qué es lo censurable? ¿Qué es lo inocente?
¿Qué debería ser cultivado? ¿Qué debería ser abandonado? ¿Qué clase de acciones producen pena y sufrimiento
por largo tiempo? ¿Qué clase de acciones producen bienestar y felicidad por largo tiempo?’ Por no realizar
semejantes acciones ni comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en
un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición y hasta el infierno. Pero, si al disolverse su cuerpo
después de la muerte, ellos no reaparecen en un estado de privación, teniendo un destino infeliz, la perdición o el
infierno, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, son estúpidos. De modo que, éste es
el camino, estudiante, que lleva a la insensatez: no visitar a los ascetas ni brahmanes preguntando: ‘¿Qué es,
venerable señor, lo beneficioso? ¿Qué es lo pernicioso? ¿Qué es lo censurable? ¿Qué es lo inocente? ¿Qué
debería ser cultivado? ¿Qué debería ser abandonado? ¿Qué clase de acciones producen pena y sufrimiento por
largo tiempo? ¿Qué clase de acciones producen bienestar y felicidad por largo tiempo?’

[18] “Además, estudiante, existen hombres y mujeres que visitan a los ascetas y brahmanes preguntando: ‘¿Qué es,
venerable señor, lo beneficioso? ¿Qué es lo pernicioso? ¿Qué es lo censurable? ¿Qué es lo inocente? ¿Qué
debería ser cultivado? ¿Qué debería ser abandonado? ¿Qué clase de acciones producen pena y sufrimiento por
largo tiempo? ¿Qué clase de acciones producen bienestar y felicidad por largo tiempo?’ Por realizar semejantes
acciones y comprometerse con ellas, una vez disuelto su cuerpo después de la muerte, reaparecen en un estado de
felicidad, en el plano celestial. Pero, si al disolverse su cuerpo después de la muerte, ellos no reaparecen en un
estado de felicidad, en el plano celestial, sino que de vuelta llegan al plano humano, dondequiera que renacen, son
sabios. De modo que, éste es el camino, estudiante, que lleva a la sabiduría: visitar a los ascetas y brahmanes
preguntando: ‘¿Qué es, venerable señor, lo saludable? ¿Qué es lo perjudicial? ¿Qué es lo censurable? ¿Qué es lo
inocente? ¿Qué debería ser cultivado? ¿Qué debería ser abandonado? ¿Qué clase de acciones producen pena y
sufrimiento por largo tiempo? ¿Qué clase de acciones producen bienestar y felicidad por largo tiempo?’.

[19] {297} “De modo que, el camino que lleva a una vida corta hace que la gente viva poco y el camino que lleva a
una vida larga hace que la gente viva por mucho tiempo; el camino que lleva a la enfermedad hace que la gente esté
enferma y el camino que lleva a la salud hace que la gente sea saludable; el camino que lleva a la fealdad hace que
la gente sea fea y el camino que lleva a la belleza hace que la gente sea bonita; el camino que lleva a la
insignificancia hace que la gente no sea prominente y el camino que lleva a la prominencia hace que la gente goce
de la relevancia; el camino que lleva a la pobreza hace que la gente sea pobre y el camino que lleva a la riqueza
hace que la gente sea rica; el camino que lleva al linaje bajo hace que la gente nazca en los estratos bajos y el
camino que lleva a la alcurnia alta hace que la gente nazca en los estratos altos; el camino que lleva a la estupidez,
hace que la gente sea tonta y el camino que lleva a la sabiduría, hace que la gente sea sabia.

[20] “Los seres son dueños de sus propias acciones, son herederos de sus propias acciones. Fueron originados por
sus acciones, están ligados a ellas y sus acciones son su refugio. Es la acción la que hace distinción entre los seres
inferiores y superiores”.

[21] Cuando esto fue dicho, Subha, el estudiante del brahmán e hijo de Toddeyya, dijo al Bienaventurado:
“¡Maravilloso, maestro Gotama! ¡Realmente magnífico! Fue como si se enderezara lo que estaba torcido, como si se
revelara lo que estaba oculto, como si se mostrara camino a alguien que estaba perdido o como si se encendiera
una lámpara en un lugar oscuro, de manera tal que, los tienen ojos pudiesen ver: de la misma manera, el maestro
Gotama hizo claro el Dhamma de diferentes maneras. Yo voy al maestro Gotama por refugio, al igual que al
Dhamma y al Sangha. Que el maestro Gotama me considere, a partir de este día para siempre, como a uno de sus
seguidores laicos, que fue a él en busca de refugio”.

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