Si me viera un psiquiatra, probablemente me preguntaría porque estoy ahí.

En la sesión
el psiquiatra buscaría constatar alguna condición por la cual requiera prescribirme
alguna medicación. En mi caso en particular luego de conversar sobre aspectos de mi
vida actual y pasada, pienso que diría que estoy sano, y que he podido superar muy bien
circunstancias difíciles que han sucedido en mi vida.

Si me viera un psicólogo, seguramente habría una entrevista acerca de quien soy yo y

cuáles son las cosas que siento que me están afectando actualmente, y probablemente
hablaríamos sobre circunstancias del pasado y que relación tienen con mi vida actual.
De esa charla se desprenderían formas de cómo afrontar esas circunstancias que me
afectan para lograr superarlas o quizás para aprender a vivir con ellas. Seguramente
después de finalizada la charla diría que me ve muy bien, pero que le gustaría que
siguiera asistiendo a sus consultas de manera frecuente, como suele suceder en
muchísimos casos.

Si me viera un psicoterapeuta, iniciaría la entrevista preguntándome sobre los distintos

aspectos de mi vida, de manera de conocer quien soy yo en la actualidad y cuáles son
las circunstancias que me rodean. A partir de ahí indagaría cuáles son los aspectos que
me pueden estar afectando actualmente y si esos aspectos están relacionados con cosas
o personas del pasado. Estas sesiones estarían enfocadas desde el principio a lograr que
yo mismo descubra quien soy, mis necesidades, las cosas que me limitan, de manera de
aceptarme tal como soy y aceptar a los demás y de mejorar la forma como me siento
conmigo mismo y con mi entorno. En mi caso particular no diría en sí si estoy bien o
no, sino que con el transcurrir de las sesiones yo mismo iría descubriendo cuales son las
circunstancias que me limitan como persona para vivir plenamente.