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Abril - 2008
PROBLEMAS Y PREGUNTAS DE ESTUDIO
El sitio está compuesto por fosas funerarias y otras no funerarias. Las últimas están
conformadas por estructuras negativas con alta densidad de material cultural. De una
de ellas (rasgo 31) proviene el material a abordar en este estudio.
El tipo de rasgo presente en este sitio es único en la región, ya que no se registran otros
similares en la prehistoria tardía regional. Las limitaciones que conlleva la realización de
un rescate arqueológico no permitió realizar un análisis completo del sitio durante su
excavación, sin embargo, la asociación de las estructuras negativas con fosas
funerarias y su alto contenido de materialidad cultural (sobre todo cerámica), nos lleva a
sugerir una depositación producto de alguna festividad ceremonial, lo que evaluaremos
a continuación.
1
ANTECEDENTES
Debido a las limitaciones que implica realizar un rescate arqueológico (poco tiempo y
limitación espacial), y la envergadura de los hallazgos, los investigadores a cargo1 ante
la imposibilidad de abordar el sitio completo, ya que excedía al terreno intervenido por la
villa, averiguaron sus posibles márgenes. Sólo se obtuvo información significativa para
el sector norte del sitio, donde existen referencias del hallazgo de tumbas prehispánicas
encontradas durante la construcción de un galpón un par de años previo al rescate. El
sector este y sur no presentaron evidencia de material fuera del área de construcción, y
el sector oeste lamentablemente se encontraba alterado por otras construcciones
residenciales. Frente a este panorama, cabe destacar que el sitio se encuentra en una
pequeña elevación con relación al resto del terreno, evitando su anegamiento, pero
lamentablemente la gran alteración del entorno, no posibilitó reconocer si dicha
elevación era natural o de carácter antrópico (Troncoso et al. 2006 Ms).
Capa C: Correspondiente al relleno de los fosos excavados que cortan la capa B y que
según los investigadores responderían, en cada rasgo, a un solo evento de
depositación.
Las referencias arqueológicas más cercanas son los trabajos realizados por Rodríguez
y colaboradores (1991) en el Cerro La Cruz, un importante enclave económico y
administrativo inca en la zona según plantean estos investigadores, así como también la
existencia de sitios asignables al Periodo Intermedio Tardío en zonas aledañas. Es
interesante recalcar que desde el sitio Villa Cardenal Raúl Silva Henríquez existe una
clara relación visual con el cerro La Cruz, a una distancia aproximada de 3Km
(Troncoso et. al. 2006 Ms).
1
Andrés Troncoso, Daniel Pavlovic y Rodrigo Sánchez
2
El contexto arqueológico correspondiente a estructuras negativas es totalmente
desconocido para la prehistoria de Chile Central. Sólo se cuenta con el referente de
hallazgos similares en otro sitio de construcción de viviendas básicas en Aconcagua,
Génesis 1, que podría sugerir una regularidad en el Valle de Aconcagua, pero
lamentablemente no contó con ningún estudio arqueológico. Este desconocimiento
hace urgente su estudio, haciendo necesario asociarlo con algún referente cultural
coherente con el periodo que se le está asignando al sitio.
Cabe destacar el hecho de que uno de los entierros humanos presenta como ofrenda
una vasija cerámica incaica. Este hallazgo lleva a sus investigadores a sugerir que este
sitio se asociaría a grupos locales bajo la influencia del dominio incaico. La propuesta
planteada al inicio, de que el sitio en cuestión sería fruto de alguna festividad
ceremonial, cobra aún más sentido al comprenderlo bajo la influencia del dominio
incaico. La Fiesta, como momento en que dos o más personas comparten un alimento
especial (fuera de las comidas cotidianas) en comidas ofrecidas para un propósito u
ocasión especial (Hayden 2001:28), o bien, como una forma de actividad ritual pública
centrada alrededor de un consumo comunal de comida y bebidas (Dietler 2001:67),
posee un inseparable nexo con la política, y a su vez con estrategias políticas de
dominio. La Fiesta provee de un campo de alta condensación de representaciones
simbólicas y la activa manipulación de relaciones sociales. Provee el principal contexto
para el arbitrio de disputas, presentación de juramentos legales, el acto público fuera de
sanciones (hacer el ridículo, imitar, emborracharse, etc.) además del mantenimiento del
control social dentro de la comunidad. Dentro de todos los eventos sociales que
pueden generar una fiesta (matrimonio, ritos de pasajes, etc.), la muerte, según Dietler
(2001:71), comúnmente sirve como el mayor campo para la manipulación de
simbolismo político.
No nos interesa en este informe realizar una reflexión acabada sobre el rol político de
las fiestas en las comunidades humanas, ya que se aleja de los objetivos planteados.
Sin embargo, se pretende proponer la Fiesta como una buena posibilidad explicativa del
contexto estudiado. Las fiestas son una particular forma de actividad ritual, y como tal
posee la pragmática virtud de ser potencialmente visibles en el registro arqueológico. La
naturaleza culinaria de las fiestas necesita del uso de contenedores para la preparación
3
y el consumo de alimentos (Dietler 2001:72). Así, como una particular forma de
actividad ritual, el consumo de comida y bebidas, propio de las fiestas, constituyen un
medio con alta carga simbólica para la expresión y la hospitalidad ‘comensal’ (por
ejemplo: grandes contenedores de chicha). La comida y la bebida constituyen una
forma especial de cultura material, producida específicamente por su ingestión dentro
del cuerpo humano (Ibíd.). Finalmente, lo que queda al ojo del investigador son los
contendores usados para su preparación y consumo.
Existen referentes etnohistóricos Incas (Bray 2003a y 2003b, Randall 1993) y Mapuches
(Pardo y Pizarro 2005) que relatan episodios relacionados a ceremonias festivas
asociadas a la muerte. Por ejemplo, dentro de los ritos mortuorios Incas, se registra uno
llamado paqarikuy (o Pacaricuc, ver Pardo y Pizarro 2005:73) usada para velar a los
muertos. En este rito los deudos debían quedarse cinco noches sin dormir, mientras
que se emborrachaban cantando canciones con las cuales elogiaban a sus
antepasados. Durante la ceremonia se vertía chicha en la sepultura para que el difunto
pudiese beber. También, dentro del año incaico existía un mes destinado a los muertos
a partir del 30 de octubre, mes nombrado por los Incas como Aya Marcay Quilla, o sea,
mes de llevar difuntos, en cuyas celebraciones se les daba de comer y beber
ritualmente (Randall 1993 y Pardo y Pizarro 2005). Si bien, los antecedentes no
mencionan pozos con material cultural asociado a dichas prácticas rituales asociadas a
la muerte de un ser querido, sí menciona el fuerte consumo de comidas y bebidas
asociadas a estos momentos, que podría asociarse al tipo de material que encontramos
en nuestra muestra cerámica.
“Y así les llenan los sepulcros de cantaros de chicha2, […] y lo demás que
cada uno, según su piedad y compasión que tiene al difunto […] Es cada entierro
una borrachera que dura tres y cuatro días, cantando las exequias al difunto;
para cuyo entierro hacen los poetas sus romances particulares y se los pagan los
parientes con chicha”
2
El destacado es nuestro.
4
que no dejará de tener sed, que beba. Y renovando la comida que tenía en la
sepultura, le ponen otra fresca y nuevos cantaros de chicha3”.
Entendiendo que ambos grupos culturales, los Incas y los Mapuches, estuvieron
presentes en la zona de estudio (además de otros grupos culturales), resulta de gran
interés mencionar dichos antecedentes, que pueden acercarse a la compresión del
contexto arqueológico en cuestión.
Los antecedentes revisados nos llevan a sugerir posibles hipótesis para nuestras
preguntas iniciales. Postulamos que los pozos no funerarios corresponderían a
depósitos de facto, con vasijas de alto grado de restaurabilidad, respondiendo al
equipamiento culinario (sensu Bray 2003a y 2003b) necesario para actividades de
congregación social, las cuales, en este caso se asociarían a prácticas festivas
asociadas a la muerte. Sobre la asignación cultural de los grupos que estarían llevando
a cabo estas prácticas está poco claro. Se puede sugerir que corresponderían a grupos
locales con, posiblemente, fuerte influencia incaica.
3
El destacado es nuestro.
5
ASPECTOS TEÓRICOS
El primero supone que todo el material cerámico que compone nuestro conjunto a
analizar, aunque fragmentado, constituyeron vasijas cerámicas, recipientes que fueron
llenados con diferentes sustancias y alimentos de acuerdo a la función que
cumplían4(Braun 1983). Esta distinción no deja de ser menor, ya que los fragmentos
cerámicos pueden representar una como varias vasijas. En este sentido, el fragmento
cerámico adquiere su significado cultural, en tanto, es parte de la vasija, y no por sí
mismo. Nuestra unidad mínima de estudio en el contexto cultural será la Vasija
cerámica. El análisis fragmentario se dirigirá hacia ese sentido, a descubrir de qué
vasija fue parte. Bien, como dice Braun (1983), las vasijas también son herramientas
(artefactos), y su morfología, composición y decoración están determinadas por su
contexto y condiciones de uso, por lo que es hacia la vasija completa donde tenemos
que apuntar. En otras palabras, no hay que analizar sólo el atributo, sino el artefacto
completo.
Otro factor a considerar, serán las huellas de alteración en la cerámica. Se parte del
supuesto que existe una relación entre la huella en la cerámica y la acción que la
provocó, sea ésta de origen natural o cultural, haya ocurrido en contexto sistémico o
arqueológico (conceptos definidos por Shiffer 1972). Este tipo de estudio permite
ampliar la información para reconstruir la actividad humana del pasado, permitiendo
establecer patrones de comportamiento, inferidos a partir de las huellas dejadas en los
artefactos (Sanhueza 1998, Skibo 1992). Según Skibo (1992) la función de cualquier
artefacto singular esta determinada por cómo se realiza en la tecnología de una
sociedad particular. A partir de ello define dos tipos de funciones: la primera, la tecno-
función, como todo aquellos aspectos utilitarios del uso de un artefacto; el segundo, la
4
Asociado al lugar, actividad y material asociado (conjunto de vasijas).
6
socio e ideo-función, como aquellos componentes de la variedad artefactual
tradicionalmente ubicado dentro de las categorías estilísticas por Binford (1962, 1965
cit. en Skibo 1992:33) y que aluden a las funciones sociales. El estudio de la alteración
superficial cae dentro del reino de la tecnofunción, a pesar de que la estrategia para
determinar cómo un artefacto fue usado descanse en una mejor comprensión de las
funciones sociales e ideológicas (Plog 1980:18-19 en Skibo 1992:34). De esta forma, es
posible establecer para qué tareas fueron utilizadas las vasijas cerámicas y la manera
específica en que esta tarea se realizó. A partir de ello, este tipo de inferencias cubre un
amplio espectro del comportamiento, desde prácticas de procesamiento de alimentos,
hasta rituales funerarios. Sin duda una mayor profundización en esta materia nos
ayudará a definir la naturaleza del depósito ante el cual nos encontramos.
7
MATERIAL Y METODOLOGÍA
Identificar fragmentos que pertenezcan a una misma vasija nunca ha sido una tarea
fácil. Cuando los fragmentos remontan resulta evidente su pertenencia a una misma
vasija, como una suerte de fragmentos hermanos (sibling). Sin embargo, esto no
sucede siempre. Puede ocurrir que existan fragmentos de una misma vasija, pero de
distintas partes de ella, y no remonten. A estos grupos de fragmentos es lo que Orton
(et.al 1993) ha llamado ‘familias de fragmentos’. Ahora bien, Smith (1983) plantea que
pueden existir casos donde se hayan elaborado vasijas de la misma categoría y con la
misma pasta en una misma partida, generando fragmentos similares en color, pasta,
forma y tratamiento, y no sean de la misma vasija. Ello puede generar que dichos
fragmentos sean catalogados como parte de una misma familia, pero no sean de una
misma vasija, cuestión que se torna relevante al momento de calcular la
fragmentabilidad y restaurabilidad de una pieza cerámica.
Por tanto, nuestro análisis se inició dividiendo y agrupando la muestra analizable a partir
de ciertos caracteres cualitativos, como acabado de superficie, espesor, aspecto de la
pasta y color, que por su alta similitud pudieran permitir inducir su pertenencia a una
misma vasija o categoría de vasija o partida. Cada grupo, 13 en total, fue abordado
como una ‘familia de fragmentos’. A cada una de estas familias se le aplicó la misma
ficha de análisis y fueron designadas por un número arbitrario como nombre (Familia 1,
8
Familia 3, etc.), salvo aquellos fragmentos decorados5 y aquellos que no pudieron
asignarse a ninguna familia.
Las características evaluadas en la ficha para cada ‘familia de fragmentos’ fueron los
siguientes: tratamiento superficial, forma general y específica, tamaño y espesor del
fragmento, peso de cada fragmento, presencia de erosiones y adherencias, estados de
fracturas presentes en cada fragmento, estado de fractura presente en secciones de
remontes, además de las observaciones específicas.
Análisis de Morfología.
Cada ‘familia de fragmentos’ (sensu Orton) fue analizada para determinar las categorías
morfológicas presentes, examinando aquellos fragmentos de la vasija que otorgaran
más información para la reconstrucción de la vasija. Siguiendo lo planteado por Rice
(1987), la mayor información sobre la forma de la vasija lo podemos obtener de aquellos
fragmentos que constituyen los bordes, puntos de inflexión o esquina, puntos de unión,
cuellos, bases, asas y apéndices de la pieza. Su análisis permitió definir el perfil de las
piezas presentes siguiendo las categorías de Shepard (1956 en Falabella 2005b),
según estructura (restringidas, no restringidas, restringidas con cuello), según contorno
(simple, compuesta, inflectadas) y formas geométricas del cuerpo y cuello (esférico,
elipsoide vertical, elipsoide horizontal, ovoide invertido, ovoide, cilíndrico, hiperboloide,
cónico y cónico invertido).
La ‘alteración cerámica’ es un término acuñado por Skibo (1992), que refiere a toda
alteración efectuada en un artefacto cerámico desde su manufactura hasta su hallazgo
arqueológico, afectado por procesos tanto de uso, como de no uso6. Dichas
alteraciones dejan rastros o huellas posibles de observar y medir en el registro
cerámico, cuyo origen puede estar tanto en el contexto sistémico como arqueológico
(sensu Shiffer 1972, 1983).
5
Por ser cuantitativamente pocos los fragmentos decorados, y no pertenecer a la misma vasija, estos fragmentos
fueron analizados como grupo, pero no como familia de fragmentos.
6
La alteración por uso es aquella que requiere que la vasija participe en una actividad humana, mientras que la alteración
por no uso implica que las trazas son hechas mientras la cerámica no esta envuelta en una actividad humana.
9
El término de ‘alteración por uso’ fue acuñado por Hally (1983) en reemplazo del ‘use-
wear’, ya que demostró que dichas alteraciones se producían tanto por agregación
como por sustracción. La formación de rastros como resultado del uso de una vasija
cerámica es dependiente tanto de la naturaleza de la vasija cerámica (forma, tamaño,
peso, dureza, permeabilidad, porosidad, tratamiento superficial y fuerza) como de los
componentes de la actividad que realiza (cocinar, almacenar, limpiar y asar).
Según Skibo (1992) son tres las principales propiedades cerámicas que inciden en la
formación de rastros:
10
frecuentes, que puede ocurrir en su uso para la preparación y cocción de alimentos,
como por el proceso de quemas cuando los fragmentos ya han entrado en el contexto
arqueológico. La depositación interior se produce por la carbonización de las comidas,
que se adhiere a las paredes y se carbonizan cuando las vasijas son calentadas a
determinadas temperaturas. Mientras que la depositación exterior de hollín es producida
por la depositación de los subproductos de la combustión de la madera. Hally (1983)
plantea que la presencia de hollín sobre la vasija es evidencia directa de que la vasija
fue posicionada sobre fuego abierto durante su uso. Esto salvo dos excepciones, la
remoción intencional del hollín en los Indios Yuman del suroeste de los Estado Unidos,
o bien, cuando las vasijas, o sus fragmentos son accidentalmente expuesto al fuego
(como vasijas abandonadas). Sanhueza (1998:77) también resalta que cualquier evento
de quema o incendio que afecte el depósito arqueológico puede generar la depositación
de hollín en la cerámica. Un buen indicador que permite diferenciar los fragmentos con
presencia de hollín por uso de aquellos con presencia de hollín por eventos posteriores
al descarte es identificar los espacios por donde se dispersa el hollín en el fragmento.
Aquellos fragmentos que sólo presenten hollín en sus superficies y no en sus
secciones, y no presenten fracturas recientes (ocurridas durante o posterior a la
recuperación del registro) no habrán estado expuestas al fuego después del descarte.
Por el contrario, aquellos fragmentos que presenten hollín tanto en sus superficies como
en sus secciones, habrán estado expuestos al fuego después de la fractura de la vasija.
Por otro lado, como medida complementaria, y para entender mejor el proceso de
fragmentación, se decidió también medir el tamaño de los fragmentos. Esto,
complementado con la información proveniente de los estados de fractura de las
secciones (frescas y antiguas) y su restaurabilidad, constituirá una buena aproximación
para entender cómo se formó el registro. Tanto el grado de fragmentación y
restaurabilidad brinda importante información sobre el tipo de depósito que conforma el
conjunto cerámico estudiado (primario o secundario).
11
Cuantificación.
Análisis de Decoración.
Se realizó una descripción simple del tipo decorativo de los fragmentos que presentaron
dicha característica. La descripción se hizo en términos tecnológico (técnica plástica,
engobe o pintura) y formales (unidad de diseño), definiendo su ubicación en la vasija
(borde, cuello, cuerpo, base, asa) y las características propias de los fragmentos en que
se presentaban (tamaño, espesor, tipo de pasta). La información obtenida permitió
clasificarlos dentro de los tipos ya establecidos para la zona en el periodo estudiado.
Análisis de Pasta.
Se utilizaron los fragmentos de ‘cuerpos’ que no remontaban con otras piezas para el
análisis de la pasta por medio de la lupa binocular.
Bajo aumento (10x a 40x) se revisó un corte fresco de una muestra de fragmentos
(30%) con el fin de definir grupos de pasta en base a los siguientes atributos: color de
7
Orton usa bordes y bases sumadas y lo divide por dos (Orton 1980 en Falabella 2005a)
12
arcilla, tipos de inclusiones, tamaño de inclusiones, distribución de inclusiones,
densidad de inclusiones. Se establecieron patrones con los ‘tipo de pastas’ más
recurrentes, montando una sección de cada patrón en cartón en series de decreciente
similitud para facilitar la comparación. Luego de asignar cada fragmento a un patrón, se
realizaron análisis cuantitativos comparativos: representatividad de cada patrón de
pasta por tratamiento de superficie y representatividad de cada patrón por grupos de
forma y de espesor (Falabella et al. 1993). El análisis de pasta resultó fundamental para
profundizar en torno a la funcionalidad de las vasijas representadas en la muestra (Ver
Análisis de Funcionalidad) y para verificar la pertenencia o no de los fragmentos a la
familia designada.
Análisis de Función.
Skibo (1992) nos habla de que los artefactos poseen una tecno-función8 prevista (para
qué un artefacto fue elaborado) y una tecno-función real (cómo el artefacto fue usado
realmente). Las vasijas pueden ser usadas para muchas cosas, y alteradas según el
uso real. En la manufactura de una vasija (función prevista) sus propiedades como la
morfología, la composición de la pasta, el espesor de las paredes y el tratamiento
superficial pueden ser manipuladas. En este sentido, nuestros dos primeros niveles de
análisis tecno-funcional, el morfológico y la característica de pasta, entran dentro del
primer tipo de función definida por Skibo (1992). La inferencia morfológica supone que
las vasijas de una clase funcional se diseñan y construyen adecuándose a una serie de
condiciones morfológicas dependientes de principios mecánicos que establecen ciertos
límites dentro de las cuales la operación a realizar es más eficiente9 (Falabella et. al
1993), mientras que la inferencia derivada de las características de la pasta, basada en
correlatos establecidos por la ciencia de los materiales y algunos casos etnográficos,
plantea que el tratamiento de superficie, tipo, tamaño y cantidad de desgrasante,
espesor de las paredes, cocción y porosidad de un pasta están directamente
relacionados a la función para la que fue elaborada la vasija. Por ejemplo está
demostrado experimentalmente que para una mayor resistencia mecánica es necesario
que la pasta tenga poca porosidad, o bien, que existe una mayor resistencia térmica
con desgrasante de tamaños homogéneos (Falabella et al. 1993).
En cuanto a la función real de la vasija, refiere a la reconstrucción de todos los usos que
se le dieron a la vasija. Dentro de esta línea cabe el análisis funcional de las huellas de
8
Ver tercer supuesto teórico.
9
A partir de diversos estudios etnográficos, Falabella y colaboradores (1993) plantean la existencia de ciertas
categorías de vasijas recurrentes. Vasijas para: cocina sobre fuego, procesar alimentos (sin uso del fuego), almacenar
líquido, almacenar sólidos, transportar líquidos, servir y comer.
13
uso (alteraciones por uso), que como definimos previamente pueden generarse por
desprendimiento (erosión) o agregación (adhesión). El análisis del grado de erosión nos
brinda información de la función real de la vasija por la correlación entre el grado de
recurrencia de cierta ejecución y el grado de abrasión, mientras que la adhesión de
material en una superficie puede responder al depósito de carbón resultante de la
cocción sobre fuego abierto (carbonización de la comida si se presenta en la pared
interior, carbonización de la madera o hollín si se presenta en la pared exterior) o a
residuos dejados por los contenidos de la vasija.
Todos estos pasos metodológicos han sido registrados en una ficha tanto para las
vasijas ensambladas, las familias de fragmentos, como para los fragmentos individuales
no agrupados, definiendo sus características de acuerdo a los parámetros señalados
arriba.
14
RESULTADOS
La agrupación por similitud de los 852 fragmentos de la muestra inicial dio como
resultado 13 familias de fragmentos, además de los fragmentos decorados (n = 15) que
se agruparon a parte, quedando 327 fragmentos sin agrupar, siendo catalogados como
‘sin familia’. Este último grupo recibió un análisis fragmento por fragmento.
Familia Total
1 72
3 13
4 26
5 63
6 10
7 45
8 56
9 25
10 28
11 70
13 56
14 39
15 7
Decorados 15
Sin Familia 327
Total general 852
Familia 1
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 1, con un total de 72 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (98%), sin embargo en 1 fragmento no es posible
observar su tratamiento interior por estar erosionado.
Erosionado Total
Familia Tratamiento Gral. Mediano Grueso Muy Grueso (s/medida) general
1 Alisado/Alisado 14 52 4 70
Alisado/Erosionado 2 2
Total 1 14 52 4 2 72
10
De los grosores obtenidos de la muestra total se determinaron los siguientes rangos de grosor: delgado, menores de
7,4mm; mediano, entre 7,5mm y 10,4mm; grueso, entre 10,5mm y 13,4mm; muy grueso, mayores de 13,5mm
15
Los fragmentos de cuerpo poseen grosores variables, entre medianos y muy grueso.
Los bordes presentan grosor mediano, mientras que el punto de inflexión, presente en
esta familia, posee grosor grueso.
Formas.
La familia 1 presenta los siguientes fragmentos de forma.
Borde Cuerpo
Familia B. Recto- Lab. Redondo
1 1 69
Al partir del diámetro de los fragmentos de borde (480mm), y la gran abertura que
presentan los fragmentos del cuerpo, se infiere que correspondería a una vasija
restringida de gran tamaño de perfil inflectado con borde recto y cuello de forma
indefinida.
Alteración cerámica.
De un total de 72 fragmentos, sólo 1 (1%) fragmento de cuerpo presenta erosión que
expone los áridos a la superficie interna y sólo 2 (3%) fragmentos presentan ahumados
adheridos a su superficie interna.
Del 100% de los fragmentos (n = 72), el 65% presenta fractura antigua y el 35% fractura
fresca.
16
Familia Frac. Antigua Frac. Fresca Total general
1 47 25 72
Este dato, cruzado con la información proveniente del estado de las fracturas, junto al
grado de restaurabilidad, nos ayudará entender cómo se formó el registro.
Esta familia además presenta 1 fragmento demasiado grande que rebasa los 200mm.
Cuantificación.
El peso ponderado de la familia 1 es de 5,589kg.
Si bien los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, plantean la presencia de al menos 1 sola vasija. Cabe mencionar que existe una
variabilidad de colores en la superficie exterior de los fragmentos que podría hablar de 2
vasijas de la misma categoría, y cómo veremos, de la misma pasta.
11
Los fragmentos que ensamblan por fractura fresca y antigua refiere a aquellos fragmentos que ensamblan con otros
tanto por su sección de fractura antigua como por su sección de fractura fresca.
17
Pasta
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 15 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 30% del total de los fragmentos de la familia, 49
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 1 (ver Anexo 1).
Función
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para procesar alimentos sobre el fuego
(cocinar), a partir de los indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993). Estos son: un
amplio perímetro representado por los fragmentos de borde en relación a los
fragmentos de cuerpo que pudo facilitar la manipulación de los alimentos, paredes de
gran espesor y un acabado de superficie alisado y sin decoración. Seguramente
presentó un gran volumen (debido a las dimensiones de los fragmentos recuperados) y
un perfil suave.
También, Rice (1987 cit. en Falabella et.al 1993) y Rye (1976 y 1988 cit. en Falabella et.
al. 1993), plantean que en vasijas con paredes de perfil continuo y base elevada, como
pareciera ser la de la Familia 1, poseen mayor resistencia térmica. Y según lo citado por
Falabella (et.al 1993:344), a mayor espesor de las paredes, como pareciera ser este
caso, también presentaría mayor resistencia mecánica. Sin embargo, el espesor de las
paredes pudo responder más al tamaño total de la vasija que a la intención de que
resistiera los golpes. Por lo que el espesor, en este caso, se vuelve una medida relativa
al tamaño, información con la que no contamos.
Aunque las huellas de uso registrados en esta familia son pocas, la presencia de
ahumado interno en 2 fragmentos corrobora que alguna sustancia o alimento se quemó
dentro de la vasija, por tanto, ésta estuvo expuesta al fuego.
Familia 3
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 3, con un total de 13 fragmentos, presenta un tratamiento superficial pulido
parcial tanto por exterior como por interior (46%). Debido a la irregularidad del pulido,
existen zonas que sólo presentan tratamiento pulido o alisado, generando fragmentos
con sólo pulido o con sólo alisado. Este es el caso de los pulidos/alisados, que
constituyen la mayoría de los fragmentos en esta familia (54%).
En esta familia los grosores presentes en los fragmentos se distribuyen entre delgados
y medianos, teniendo preponderancia cuantitativa aquellos fragmentos de grosor
mediano, que en promedio presentan el 85% de la fragmentería perteneciente a este
grupo.
18
Pulido parcial/Pulido parcial 6 6
Total 3 2 11 13
Los fragmentos de bordes presentan grosor delgado, mientras que los fragmentos de
cuerpo presentan grosor mediano.
Formas.
La familia 3 presenta 11 fragmentos de cuerpo y 2 formas múltiples.
- 2 uniones simples de cuerpo con borde recto y labio redondo.
Alteración cerámica.
No presenta erosiones por uso, ni adherencia de carbón u hollín en ninguna de sus
superficies. Sin embargo, 4 de sus fragmentos (31%) presentan una impronta blanca al
interior.
Del 100% de los fragmentos (n = 13), el 31% presenta fractura antigua y el 69% fractura
fresca.
19
Ensamblaje y análisis del Grado de Fragmentación y Restaurabilidad.
De total de fragmentos de la familia (n =13), 13 fragmentos remontan (100%). De los
cuales 4 fragmentos ensamblan por fractura antigua y 9 por fractura fresca.
Cuantificación.
El peso ponderado de la familia 3 es de 0,531kg.
Los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de forma,
plantean la presencia de 1 sola vasija.
Pasta
Ante el eminente remonte de todos los fragmentos de la familia 3, sólo se revisó la
pasta de uno de ellos en una fractura fresca pre-ensamble.
Función
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para servir alimentos, a partir de los
indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993). Estos son: un borde amplio, donde el
diámetro máximo coincide con el borde, con forma de cuenco abierto (plato), que puede
presentar un acabado de superficie no decorado. Otro indicador que no se pudo
obtener, refiere al volumen de la vasija, ya que no contamos con la vasija entera. En las
vasijas para servir pareciera existir una relación directa entre su volumen con el grupo
de consumidores. En este caso, el volumen pareciera ser muy grande, ya que presenta
un borde de 350mm de diámetro.
20
Si bien son pocas las huellas de uso registradas, sí podemos plantear que la vasija
representada contuvo alguna sustancia capaz de dejar la impronta blanca registrada en
4 de sus fragmentos.
Familia 4
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 4, con un total de 26 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (93%). Si embargo existen 2 fragmentos que presentan
pulido parcial, que hace posible pensar que la vasija que representan podría haber
estado pulida parcialmente en algunas zonas.
Formas.
En esta familia se registran 25 fragmentos de cuerpo y 1 forma múltiple.
- 1 Punto de unión por inflexión del cuerpo con sector indefinido de la vasija,
posiblemente cuello.
Si bien no contamos con muchos fragmentos de forma, la presencia del punto de unión
por inflexión permite inferir la presencia de una vasija restringida de perfil inflectado, de
borde y cuello indefinido.
El diámetro arrojado por el punto de unión por inflexión es de 220mm mientras que el
cuerpo presenta un diámetro de 250mm, lo que hablaría de una vasija preferentemente
pequeña en comparación al resto de las vasijas de la muestra.
21
Alteración cerámica.
No presenta erosiones por uso.
Del 100% de esta familia (n = 26), el 42% presenta fractura antigua, mientras que el
58% presenta fractura fresca.
22
4 4 4
Cuantificación.
El peso total de la familia 4 es de 0,422kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante 1 sola vasija, descrita en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 8 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 30% del total de los fragmentos de la familia, 24
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 3 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta pudo haber servido para procesar alimentos sin fuego, a
partir de los indicadores propuestos por Falabella (et.al 1993). Estos son: un amplio
perímetro representado por los fragmentos de borde en relación a los fragmentos de
cuerpo que pudo facilitar la manipulación de los alimentos y un acabado de superficie
alisado y sin decoración. El volumen, un dato que no se pudo obtener de los fragmentos
recuperados, se relaciona a las cantidades necesarias de acuerdo al grupo de
consumidores. En este caso, el diámetro representado por el punto de inflexión
responde a 220mm, relativamente pequeño en comparación a las medidas de las
vasijas representadas en el resto de la muestra.
A partir de las huellas de uso registradas se puede plantear que la vasija representada
contuvo alguna sustancia clara que se adhirió a su superficie interior (81% de sus
fragmentos presentan esta adherencia). No presenta huellas de haber sido expuesta al
fuego en ninguno de sus fragmentos.
23
Familia 5
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 5, con un total de 63 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (94%), sin embargo en 4 fragmentos no es posible
observar su tratamiento interior por estar erosionado.
Erosionado
Familia Tratamiento Gral. Mediano Grueso Muy Grueso (s/medida) Total general
5 Alisado/Alisado 2 55 2 59
Alisado/Erosionado 1 2 1 4
Total 5 3 57 2 1 63
Los fragmentos de cuerpo varían en su grosor desde medidas medianas a muy gruesa.
Los bordes12, cuellos y puntos de unión presentan un espesor grueso.
Formas.
En esta familia se registran 56 fragmentos de cuerpo y 7 formas múltiples.
- 5 puntos de unión por inflexión del cuerpo con el cuello evertido
- 2 puntos de unión por inflexión de borde evertido con cuello evertido.
A partir del diámetro observable en los bordes (460mm), y en los puntos de unión
borde-cuello (420mm), y la gran abertura presente en los fragmentos del cuerpo,
estaríamos ante una vasija restringida de gran tamaño.
12
Las medidas de los bordes de las formas múltiples fueron tomadas más hacia el punto de inflexión con el cuello, ya
que el borde mismo estaba muy erosionado.
24
Alteración cerámica.
Presenta 10 fragmentos (16%) con huella de erosiones por uso.
- 7 fragmentos presentan erosión interna que expone los áridos a la superficie (3 de
ellas con adherencia de carbón en su interior).
- 1 punto de unión por inflexión del cuerpo con un cuello evertido, presenta erosión
interna que expone los áridos a la superficie.
- 2 uniones de cuello evertido y borde evertido, con el borde y labio erosionados
internamente con exposición de áridos a la superficie.
Del 100% de esta familia (n = 63), el 60% presenta fractura antigua, mientras que el
40% presenta fractura fresca.
13
La presencia de carbón en las secciones se ha explicado como indicador de que dicho fragmento cerámico estuvo
expuesto al fuego posterior a su descarte. Sin embargo, hemos explicado la presencia de carbón en nuestros
fragmentos como producto de la exposición al fuego previo al rompimiento y descarte de la vasija que constituyó.
Esto debido a dos razones. Una, porque la distribución del carbón siempre se presenta de interior hacia exterior, de
forma decreciente; y dos, porque la mayoría de los fragmentos de esta familia presenta recurrentes trizaduras
interiores, que podrían explicar la introducción del carbón a la sección durante su uso.
25
Familia Ensam.frac.antigua Ensam.frac.antigua y fresca Ensam.frac.fresca Total n remontan
5 6 3 3 9
Familia Muy Pequeño Pequeño Mediano Grande Muy Grande Total general
5 2 14 33 10 4 63
Cuantificación.
El peso total de la familia 5 es de 5,217kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante 1 vasija, descrita en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 16 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 29% del total de los fragmentos de la familia, 55
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 4 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para procesar alimentos sobre el fuego
(cocinar), a partir de los indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos.
Seguramente presentó un gran volumen (debido a las dimensiones de los fragmentos
recuperados), lo cual se relaciona con la cantidad de consumidores.
También, Rice (1987 cit. en Falabella et.al. 1993) y Rye (1976 y 1988 cit. en Falabella
et.al 1993), plantean que en vasijas con paredes de perfil continuo y base elevada,
como pareciera ser la de la Familia 5, poseen mayor resistencia térmica. Rice (1987 cit.
en Falabella), también propone que existiría una mayor conductividad en pastas con
áridos gruesos, como los presentes en la pasta de esta vasija (Patrón 4, ver Anexo1).
Las huellas de uso corroboran que esta vasija fue usada para cocinar alimentos, ya que
presenta erosiones en el 16% de los fragmentos que pudieron generarse al revolver los
alimentos, generando la exposición de los áridos por su superficie interior. El carbón
26
adherido al interior del 10% de los fragmentos de la familia, refieren a alimentos que se
carbonizaron en su interior, corroborando que la vasija fue expuesta al fuego.
Cabe destacar, que debido al revestimiento en agua con el que fue acabado el
tratamiento superficial de esta vasija, se presentan erosiones de desprendimiento de
capas y secciones del cuerpo que tienden a la fractura (quizás por el gran tamaño de
los áridos). Prueba de ello son los fragmentos que presentan carbón desde su interior
hacia el exterior por su sección, generadas presumiblemente por los alimentos
carbonizados al interior, cuyo carbón se filtró por las fracturas del cuerpo.
Familia 6
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 6, con un total de 10 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (90%), sin embargo en 1 fragmento no es posible
observar su tratamiento interior por estar erosionado.
Formas.
En esta familia se registran 3 fragmentos de cuerpo y 7 formas múltiples.
- 4 uniones simples de cuerpos con bases convexas
- 3 uniones simples de cuerpos con borde recto y labios redondeados.
27
Alteraciones cerámicas.
No presenta erosiones por uso.
Del 100% de esta familia (n = 10), el 50% presenta fractura antigua, mientras que el
otro 50% presenta fractura fresca.
28
presencia del 13% del perímetro total del borde (diámetro: 170 mm), y la presencia de al
menos el 80% del perímetro total de la base de la vasija (diámetro: 80 mm)
Cuantificación.
El peso total de la familia 6 es de 0,256 kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante sólo 1 vasija, descrita en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de fragmentos de cuerpos sin ensamblar,
correspondiente al 25% del total de los fragmentos de la familia, 4 fragmentos, contando
los fragmentos remontados como uno. Se comparó con la pasta del fragmento de borde
restante y los fragmentos remontados.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 1.b (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para servir alimentos, a partir de los
indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos. En cuanto al volumen, en
este tipo de vasijas pareciera existir una relación directa entre su volumen con el grupo
de consumidores. En este caso, el volumen pareciera ser pequeño en relación al resto
de la muestra, ya que presenta un borde de 170mm de diámetro.
Según el espesor de sus paredes, delgado, debería presentar una buena resistencia
térmica, según lo citado por Falabella (et.al 1993:344)
En cuanto a las huellas de uso, pareciera que esta vasija estuvo expuesta al fuego, a
partir del hollín exterior presentado por el 80% de sus fragmentos. También pareciera
haber contenido alguna sustancia o alimento capaz de dejar la adherencia plomiza
observada en el 70% de sus fragmentos.
Familia 7
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 7, con un total de 45 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (100%).
29
Los grosores presentes en los fragmentos se distribuyen entre delgados y muy gruesos,
teniendo preponderancia cuantitativa aquellos fragmentos de menor medida (delgados
y medianos). Los delgados son preponderantes en la muestra con un 62% de la
fragmentería perteneciente a este grupo, seguidos por los fragmentos de grosor
mediano con un 27%.
Familia Tratamiento Gral. Delgado Mediano Grueso Muy Grueso Total general
7 Alisado/Alisado 28 12 4 1 45
Total 7 28 12 4 1 45
Los delgados están constituidos tanto por fragmentos de cuerpo, como de borde,
mientras que los medianos presentan fragmentos de cuerpo como de bases. Por último,
los gruesos y muy gruesos representan sólo fragmentos de base.
Formas.
La familia 7 registra los siguientes fragmentos de forma.
Borde Bases Cuerpo
Familia B. Evertido-Lab. Recto Convexas
7 4 5 29
30
Alteraciones cerámicas.
No presenta erosiones por uso.
31
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 45), el 60% presenta fractura antigua,
mientras que el 40% presenta fractura fresca.
Familia Muy Pequeño Pequeño Mediano Grande Muy Grande Total general
7 3 29 11 1 1 44
Cuantificación.
El peso total de la familia 7 es de 0,910 kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante sólo 1 vasija, descrita en el análisis de forma.
32
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 7 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 30% del total de los fragmentos de la familia, 23
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 3 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para procesar alimentos sobre el fuego
(cocinar), a partir de los indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos.
Seguramente, esta vasija presentó un volumen menor que las otras vasijas del conjunto
total, por las medidas que presenta, lo que se relaciona con el número de
consumidores.
También, Rice (1987 cit. en Falabella et.al 1993) y Rye (1976 y 1988 cit. en Falabella
et.al 1993), plantean que en vasijas con paredes de perfil continuo y base elevada,
como pareciera ser la de la Familia 7, poseen mayor resistencia térmica. Reforzando
esta idea, de buena resistencia térmica, refiere al delgado grosor de sus paredes, que
según Falabella (et.al 1993:344) reforzaría esta propiedad.
En cuanto a las huellas de uso, esta vasija claramente estuvo expuesta al fuego, a partir
del carbón presente al interior de la vasija, cercano a la base, y la adherencia
blanquecina exterior, que pareciera relacionarse también al proceso de cocción.
Familia 814
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 8, con un total de 56 fragmentos, presenta gran cantidad de fragmentos
(79%) con tratamiento superficial alisado tanto por interior como por exterior. Sin
embargo, a diferencia de las otras familias revisadas, presenta también fragmentos con
tratamiento pulido por el interior (14%), y pulido parcial tanto por interior como exterior
(7%).
14
Al realizar la agrupación por similitud cualitativa de los fragmentos de esta familia, pareciera que dentro de su
variedad quedaron incluidas más de una vasija, o bien, más de una categoría de vasija en este mismo grupo.
33
Pulido parcial/Pulido parcial 1 3 4
Total 8 1 49 6 56
Los fragmentos de borde poseen paredes medianas. Los grosores del cuerpo son
bastante variables, pero preferentemente son medianos, algunos gruesos, y sólo uno
delgado.
Formas.
La familia 8 presenta las siguientes formas en sus fragmentos.
Borde Cuerpo
Familia B.recto-Lab. Redondo
8 4 50
34
Alteración cerámica.
No presenta fragmentos con erosión.
Respecto a las adherencias sólo 1 fragmento (2%) presenta una adherencia plomiza en
la pieza completa.
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 56), el 64% presenta fractura antigua,
mientras que el 36% presenta fractura fresca.
1) Esta vasija presenta un borde correspondiente al 15% del perímetro total (diámetro:
490mm)
35
Familia Muy Pequeño Pequeño Mediano Grande Muy Grande Total general
8 2 8 34 10 2 56
Cuantificación.
El peso total de la familia 8 es de 3,632kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante 2 vasijas, descritas en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 16 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 33% del total de los fragmentos de la familia, 48
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta mostró que los fragmentos de las dos vasijas representadas
poseían la misma pasta, correspondiente al Patrón 3 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de las vasijas representada en esta
familia, no se puede suponer uso para la primera (8.1), ya que se desconoce su perfil,
sin embargo, para la segunda (8.2) se propone que ésta habría servido para procesar
alimentos sin fuego, a partir de los indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya
descritos. El volumen, un dato que no se pudo obtener de los fragmentos recuperados,
se relaciona a las cantidades necesarias de acuerdo al grupo de consumidores. En este
caso, el diámetro representado por el borde responde a 460mm bastante grande dentro
de las medidas representadas en el resto de la muestra.
Familia 9
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 9, con un total de 25 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (96%), sin embargo en 1 fragmento no es posible
observar su tratamiento interior por estar erosionado.
36
Sólo un fragmento escapa del grosor promedio, y corresponde a un fragmento grueso
de cuerpo. El resto de los fragmentos presentan un grosor mediano, compuesto por
fragmentos de cuerpo y 1 punto de unión de cuello y borde.
Formas.
En esta familia se registran 24 fragmentos de cuerpo y 1 formas múltiples.
- 1 punto de unión por inflexión del cuerpo con borde recto y labio redondo.
Si bien sólo contamos con un fragmento de forma, éste nos permite hablar de una
vasija restringida de perfil inflectado con borde recto y labio redondo. Seguramente
constituyó una vasija de gran tamaño ya que su borde presenta un diámetro de 460mm
y el punto de unión por inflexión del borde con el cuello presenta un diámetro de 420
mm.
Alteración cerámica.
No presenta fragmentos con erosiones por uso.
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 25), el 76% presenta fractura antigua,
mientras que el 29% presenta fractura fresca.
37
Familia Pequeño Mediano Grande Total general
9 6 16 3 25
Cuantificación.
El peso total de la familia 9 es de 0,936kg.
Como dentro de esta familia, ningún fragmento remontó, el número de la muestra inicial
se mantuvo en 25 fragmentos.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante 1 vasija, descrita en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 8 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 32% del total de los fragmentos de la familia, 21
fragmentos.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 3 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para procesar alimentos sobre el fuego
(cocinar), a partir de los indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos.
Seguramente presentó un gran volumen (debido a las dimensiones de los fragmentos
recuperados) y un perfil suave.
También, Rice (1987 cit. en Falabella et.al 1993) y Rye (1976 y 1988 cit. en Falabella
et.al 1993), plantean que en vasijas con paredes de perfil continuo y base elevada,
como pareciera ser la de la Familia 7, poseen mayor resistencia térmica.
Las huellas de uso presentes en esta familia es bastante menor, sin embargo, a partir
de un único fragmento que presenta carbón en su interior, podemos plantear que la
vasija estuvo expuesta al fuego, y sirvió para procesar alimentos por medio de la
cocción. El carbón presente al interior de su pared, responde a algún alimento que se
quemó y carbonizó.
Familia 10
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 10, con un total de 28 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (82%).
38
Familia Tratamiento Gral. Delgado Mediano Total general
10 Alisado/Alisado 20 3 23
Pulido/Alisado* 2 2
Pulido/Pulido* 3 3
Total Familia 10 25 3 28
*Pertenencia a la familia cuestionable
Todos los fragmentos corresponden a sectores del cuerpo de la vasija. Sólo uno escapa
del grosor promedio (delgado).
Formas.
En esta familia se registran sólo 28 fragmentos de cuerpo. No presentó ningún
fragmento que permitiera inferir su forma. El tratamiento alisado interior sugiere una
vasija restringida.
Alteración cerámica.
No presenta fragmentos con erosiones por uso.
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 28), el 43% presenta fractura antigua,
mientras que el 57% presenta fractura fresca.
Cuantificación.
El peso total de la familia 10 es de 0,446 kg.
39
Luego de remontar los fragmentos posible de reensamblar, la muestra inicial de esta
familia, 25 fragmentos, se redujo 20 fragmentos.
Debido a que no se registró ningún fragmento que permitiera inducir la forma de las
posibles vasijas presentes en la familia, no nos atrevemos a proponer un número
mínimo de vasijas para este conjunto. Sin embargo sabemos que al menos existe 1
vasija en esta familia.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 6 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 30% del total de los fragmentos de la familia, 20
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 1.b (ver Anexo 1).
Función.
No se puede inferir su función a partir de los datos provenientes del análisis
morfológico.
A partir del análisis de su pasta, la vasija representada debería mostrar una buena
resistencia térmica por presentar un espesor delgado, según lo citado por Falabella
(et.al 1993:344)
Familia 1115
Tratamiento de superficie y grosor.
De un total de 70 fragmentos, todos presentan un tratamiento superficial Alisado /
Alisado (100%).
Los grosores presentes en los fragmentos se distribuyen entre mediano y muy gruesos,
teniendo preponderancia cuantitativa aquellos fragmentos con grosor mediano, que en
promedio presentan el 53% de la fragmentería perteneciente a este grupo, seguido por
los fragmentos gruesos con un 37%.
Los fragmentos de borde exhiben un grosor mediano, mientras que los cuerpos varían
entre grosores medianos, gruesos y muy gruesos. El fragmento de base presenta un
grosor muy grueso.
15
Al igual que la familia 8, al realizar la agrupación por similitud cualitativa de los fragmentos de esta familia,
pareciera que dentro de su variedad quedaron incluidas más de una vasija, o bien, más de una categoría de vasija.
40
Formas.
La familia 11 presenta las siguientes formas en sus fragmentos:
1) Vasija restringida de perfil inflectado, con borde evertido y labios redondo y sin
fragmento de cuello identificado. Seguramente constituyó una vasija de gran tamaño
debido al diámetro presentados por su borde (360mm) y por el punto de unión del borde
con el cuerpo (340mm).
41
En los dos, los fragmentos de cuerpo presentan una gran abertura, reforzando la idea
de que fuesen vasijas restringidas. Además existe un fragmento de base que no se
puede determinar a qué vasija pertenece.
Alteración cerámica.
No presenta fragmentos con erosiones por uso.
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 70), el 53% presenta fractura antigua,
mientras que el 47% presenta fractura fresca.
42
El porcentaje de la vasija presente en la muestra se obtuvo a partir del diámetro de los
bordes de las vasijas presente en esta familia:
Familia Muy Pequeño Pequeño Mediano Grande Muy Grande Total general
11 1 21 37 10 1 70
Cuantificación.
El peso total de la familia 11 es de 3,451kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores en esta familia estaríamos ante 2
vasijas, descritas en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 16 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 30% del total de los fragmentos de la familia, 53
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta mostró que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 1 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de las vasijas representada en esta
familia, no se puede suponer uso para la segunda vasija descrita (11.2), ya que se
desconoce la forma de su perfil, sin embargo, para la segunda (11.1) se propone que
ésta habría servido para procesar alimentos sin fuego, a partir de los indicadores
propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos. El volumen, un dato que no se pudo
obtener de los fragmentos recuperados, se relaciona a las cantidades necesarias de
acuerdo al grupo de consumidores. En este caso, el diámetro representado por borde
responde a 360mm, relativamente mediano en comparación a las medidas de las
vasijas representadas en el resto de la muestra.
Según lo citado por Falabella (et.al 1993:344), a mayor espesor de las paredes, como
pareciera ser este caso, mayor resistencia mecánica.
43
Familia 13
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 13, con un total de 56 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (84%). También posee 9 fragmentos (16%) que
presentan un pulido interior, los cuales responden a fragmentos de cuello o de cuerpos
cercanos al cuello.
Los grosores presentes en los fragmentos se distribuyen entre los medianos y los
gruesos, teniendo preponderancia cuantitativa aquellos fragmentos con grosor mediano,
que en promedio presentan el 87% de la fragmentería perteneciente a este grupo.
Los fragmentos de borde y cuello presentan grosores medianos. Por su parte, los
fragmentos de cuerpo presentan grosor mediano y grueso.
Formas.
La familia 13 presenta las siguientes formas en sus fragmentos.
Cuello Cuerpo
Familia Cuello evertido
13 6 47
A partir de los datos obtenidos se puede inferir la presencia de una vasija restringida de
perfil inflectado, de cuello evertido, borde evertido y labio erosionado. Seguramente
constituyó una vasija de gran tamaño debido al diámetro presentado por su borde (440
mm), y la abertura de los fragmentos de su cuerpo.
44
Alteración cerámica.
De un total de 56 fragmentos, 3 (5%) fragmentos de borde presentan erosión en el labio
y 1 fragmento (2%) presenta adherencia de ahumado por el exterior.
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 56), el 52% presenta fractura antigua,
mientras que el 48% presenta fractura fresca.
45
Cuantificación.
El peso total de la familia 13 es de 2,784kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante sólo 1 vasija, descrita en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 14 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 29% del total de los fragmentos de la familia, 48
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 3 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para procesar alimentos sobre el fuego
(cocinar), a partir de los indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos.
Seguramente presentó un gran volumen (debido a las dimensiones de los fragmentos
recuperados), lo que se relaciona con el número de consumidores.
También, Rice (1987 cit. en Falabella et.al 1993) y Rye (1976 y 1988 cit. en Falabella
et.al 1993), plantean que en vasijas con paredes de perfil continuo y base elevada,
como pareciera ser la de la Familia 7, poseen mayor resistencia térmica.
Las huellas de uso corroboran que esta vasija fue usada para cocinar alimentos, ya que
presenta erosiones en el 5% de los fragmentos que pudieron generarse al revolver los
alimentos, generando la exposición de los áridos por su superficie interior. El ahumado
adherido al exterior del 2% de los fragmentos de la familia corrobora que esta vasija fue
expuesta al fuego.
Familia 14
Tratamiento de superficie y grosor.
La familia 14, con un total de 39 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (95%), sin embargo en 2 fragmentos no es posible
observar su tratamiento interior por estar erosionados.
Familia Tratamiento Gral. Mediano Grueso Muy Grueso Erosionado Total general
46
(s/medida)
14 Alisado/Alisado 14 21 2 37
Alisado/Erosionado 1 1 2
Total 14 14 21 3 1 39
El fragmento de borde de la vasija posee grosor mediano, mientras que los fragmentos
de cuello presentan medida gruesa. El grosor del cuerpo es diverso, varía entre los
grosores medianos y muy gruesos.
Formas.
La familia 14 presenta las siguientes formas en sus fragmentos:
A partir de los datos obtenidos se puede inferir la presencia de una vasija restringida, de
perfil inflectado, de borde recto y labio redondo. No se registran fragmentos de cuello.
Seguramente corresponde a una vasija de gran tamaño debido al diámetro presentado
en su borde (340mm). También encontramos en esta familia la presencia de un asa
cinta, según la similitud con los otros fragmentos del grupo, sin embargo no se puede
deducir una pertenencia clara, ya que no se encontró ningún otro fragmento del grupo
que evidenciara la inserción del asa.
47
Alteración cerámica.
No presenta fragmentos con erosiones por uso.
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 39), el 54% presenta fractura antigua,
mientras que el 46% presenta fractura fresca.
Cuantificación.
El peso total de la familia 14 es de 2,249 kg.
48
Luego de remontar los fragmentos posible de reensamblar, la muestra inicial de esta
familia, 39 fragmentos, se redujo a 38 fragmentos.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante sólo 1 vasija, descrita en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 11 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 29% del total de los fragmentos de la familia, 38
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 1 (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para procesar alimentos sobre el fuego
(cocinar), a partir de los indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos.
Seguramente presentó un gran volumen (debido a las dimensiones de los fragmentos
recuperados), lo que se relaciona con el número de consumidores.
También, Rice (1987 cit. en Falabella et. al 1993) y Rye (1976 y 1988 cit. en Falabella
et.al 1993), plantean las vasijas con paredes de perfil continuo y base elevada, como
pareciera ser la de la Familia 7, poseen mayor resistencia térmica. Por su lado Falabella
(et.al 1993:344) habla que a mayor espesor de las paredes, como pareciera ser este
caso, mayor resistencia mecánica, sin embargo, como ya mencionábamos, el espesor
se relaciona también con el tamaño total de la vasija.
El 5% de los fragmentos presentan ahumado tanto por interior como exterior, lo que
corrobora que la vasija estuvo expuesta al fuego.
Familia 15
Tratamiento de superficie y grosor.
La Familia 15, con un total de 7 fragmentos, presenta un tratamiento superficial alisado
tanto por interior como exterior (100%).
Formas.
La familia 15 presenta las siguientes formas en sus fragmentos
49
Borde Cuerpo
Familia B. recto- Lab.redondo
15 2 1
Alteración cerámica.
No presenta fragmentos con erosiones por uso.
Del 100% de los fragmentos de esta familia, 5 (71%) presentan algún tipo de
adherencia. De éstos, 3 fragmentos presentan ahumado por su superficie exterior, y los
2 restantes además de ahumado, presentan hollín, también por su superficie exterior.
50
Del 100% de fragmentos de esta familia (n = 7), el 86% presenta fractura antigua,
mientras que el 14% presenta fractura fresca.
Cuantificación.
El peso total de la familia 15 es de 0,199 kg.
Según los datos resultantes de los análisis anteriores, principalmente de los análisis de
forma, en esta familia estaríamos ante 1 vasija, descrita en el análisis de forma.
Pasta.
Para análisis de pasta, se tomó una muestra de 1 fragmentos de cuerpos sin
ensamblar, correspondiente al 25% del total de los fragmentos de la familia, 4
fragmentos, contando los fragmentos remontados como uno. Se comparó con la pasta
del fragmento de borde restante y los fragmentos remontados.
El análisis de pasta confirmó que todos los fragmentos poseían la misma pasta,
correspondiente al Patrón 1.b (ver Anexo 1).
Función.
A partir de los datos obtenidos sobre la morfología de la vasija representada en esta
familia, se propone que ésta habría servido para servir alimentos, a partir de los
51
indicadores propuesto por Falabella (et.al 1993) ya descritos. En este tipo de vasijas
pareciera existir una relación directa entre su volumen con el grupo de consumidores.
En este caso, el volumen pareciera ser pequeño en relación al resto de la muestra, ya
que presenta un borde de 150mm de diámetro.
Cabe destacar, que esta vasija, debido a las paredes homogéneas y ahumadas debería
presentar mayor resistencia mecánica que el resto de las vasijas, según lo planteado
por Steponaitis (1984 cit. en Falabella et.al 1993). Además de presentar resistencia
térmica por presentar un espesor delgado, según lo citado por Falabella (et.al 1993:344)
Decorados
Los fragmentos decorados no constituyen una familia de fragmentos, ya que su única
característica común es poseer algún tipo de decoración, pero poseen distintas pastas.
También se adjunto a este grupo fragmentos (generalmente pequeños) que no presenta
decoración, pero que claramente son de la misma vasija de algún decorado.
El grupo de los decorados presentan fragmentos con grosores delgados (93%) y sólo
uno mediano (7%).
Los fragmentos de borde, la base y los cuerpos presentan grosor delgado. Sólo un
fragmento de cuerpo es de grosor mediano.
Formas.
Entre el grupo de los decorados tenemos:
Borde Cuerpo
Familia B.recto-L.redondo
Decorados 1 12
52
- 1 unión simple del cuerpo con base convexa.
Dentro de este grupo de fragmentos decorados existen dos bordes, uno engobado y
otro decorado, los dos son rectos de borde redondo, al parecer no restringidas y de
perfil simple, ambas de 200mm de diámetro. También existiría al menos una vasija de
base convexa.
Alteración cerámica.
No presentan fragmentos con erosiones.
Del 100% de fragmentos decorados (n = 15), el 93% presenta fractura antigua, mientras
que el 7% presenta fractura fresca.
De las vasijas representadas por los bordes presentes en este grupo tenemos el 5% del
perímetro total de un borde alisado de decoración pintada (200mm), y el 3% del
perímetro total de un borde engobado (200mm).
Decoración.
Sólo se identificaron 2 fragmentos con decoración pintada, un fragmento de borde y uno
de cuerpo. El fragmento de borde presenta una decoración con pintura roja estrellada,
por interior como por exterior. Mientras que el fragmento de cuerpo sólo presenta
decoración interior, posiblemente con pintura roja y estrellada, sin embargo el color se
53
encuentra afectado por el ahumado interior, y su forma estrellada no se puede afirmar,
por ser un fragmento muy pequeño.
54
Pasta.
Se revisaron los 15 fragmentos decorados bajo la lupa, el 100% de los fragmentos
decorados.
Los grosores presentes en los fragmentos se distribuyen entre delgados y muy gruesos,
teniendo preponderancia cuantitativa aquellos fragmentos medianos, que en promedio
presentan el 49% de la fragmentería perteneciente a este grupo, seguido por los
fragmentos delgados con un 40%. Esto último, posiblemente responde a que la
fragmentería correspondiente a este grupo era de tamaño pequeño o muy pequeño (<
5mm). Esto se relaciona con la idea de que los fragmentos delgados tienen a
fracturarse en tamaños más pequeños.
55
Cuerpo Total Cuerpo
Muy Erosionado
Familia Tratamiento Gral. Delgado Mediano Grueso Grueso (s/medida)
Sin
Familia Alisado/Alisado 114 144 17 1 276
Alisado/Erosionado 8 8
Alisado/Pulido 2 4 1 7
Erosionado/Alisado 4 4
Pulido/Alisado 1 1 1 3
Pulido/Erosionado 1 1
Pulido parcial/Alisado 1 1
Pulido parcial/Pulido
parcial 2 2
Total Sin
Familia 120 149 19 1 13 302
56
1. 2. 3.
4. 5. 6.
7. 8.
9. 10.
57
11. 12.
13. 14.
15. 16.
17. 18.
58
19.
Cuello.
- 2 cuellos de forma indefinida.
Formas múltiples.
- 1 punto de unión por inflexión de cuerpo con cuello de perfil indefinido (Ver 1).
- 1 punto de unión por inflexión de cuello con borde evertido con labio erosionado
(Ver 2).
- 1 punto de unión simple entre cuerpo y borde recto con labio redondeado (Ver 3).
- 1 punto de unión por inflexión entre cuerpo y borde recto con labio redondeado
(Ver 4).
59
1. 2.
3. 4.
Alteración cerámica.
Presenta 4 fragmentos (1%) con huella de erosiones por uso.
- 2 fragmentos de cuerpo con erosión interna tipo pedestal.
- 2 formas múltiples con erosión en el labio.
En cuanto a las adherencias, 17 (6%) fragmentos de este grupo presenta algún tipo de
adherencia.
- 2 fragmento de cuerpo con adherencia de sustancia plomiza por interior.
- 1 fragmento de cuerpo con adherencia de sustancia plomiza por exterior.
- 8 fragmentos de cuerpo con ahumado exterior.
- 2 fragmentos de borde con ahumado exterior.
- 1 fragmento de cuerpo con ahumado exterior y hollín exterior.
- 1 fragmento de cuerpo con carbón por interior.
- 2 fragmentos de cuerpo con hollín exterior.
60
Del 100% de este grupo familia (n = 290), el 78% presenta fractura antigua, mientras
que el 22% presenta fractura fresca.
Pasta
De los 327 fragmentos sin pertenencia a ninguna familia, a 89 fragmentos,
correspondientes al 27% del total del grupo, se le realizó el análisis de pasta.
Del 100%, 32 (10%) fragmentos presentaron pastas del Patrón 1, 17 (5%) fragmentos
del Patrón 1.b, 6 (2%) del Patrón 2 y 34 (10%) fragmentos del Patrón 3 (Ver Anexo 1).
61
CONCLUSIONES
De los 852 fragmentos de la muestra inicial se lograron agrupar en las 13 familias 510
fragmentos, correspondientes al 60% de la muestra total. Los fragmentos decorados, 15
en total (2%) se agruparon a parte y se analizaron fragmento por fragmento. El restante
38% de la muestra, correspondiente a 327 fragmentos, no pudieron insertarse en
ningún grupo de similitud (o familia).
Las vasijas con menor diámetro en el borde, las familias 6, 7 y 15 también poseen
bordes de grosor delgados. Por el contrario, el resto de las vasijas que presenta mayor
diámetro en el borde, presentan grosores de mayor medida, preferentemente medianos.
62
La vasija no restringida de la familia 3 es la excepción, ya que su borde es delgado y
presenta un diámetro relativamente grande (350mm)
Borde Total B
Familia Diámetro (mm) Delgado Mediano Grueso
1 480 2 2
3 350 2 2
5 460 2 2
6 170 3 3
7 140 8 8
8.1 490 4 4
8.2 460 2 2
9 460 1 1
11.1 360 1 1
11.2 560 3 3 6
13 440 3 3
14 340 1 1
15 150 7 7
Total general 20 17 5 42
63
En este sentido, dado el tamaño preferentemente grandes de las vasijas representadas
en este conjunto, y su función relacionada al procesamiento de alimento con y sin
fuego, y de servir alimentos, se vuelve más coherente la idea, propuesta en un principio,
de que este material habría sido parte del equipamiento culinario necesario para
festividades comunales, con gran ingesta de comida y bebida, donde lo más necesario
es preparar comida y servirla a la multitud. Dentro de este punto, queda por estudiar los
compuestos de las adherencias presentes en algunas familias del conjunto (familias 3,
4,6 y 7), que pueda dar luz de los contenidos de las vasijas.
En cuanto al proceso de formación del sitio, pareciera que las vasijas, como
comentábamos al inicio, fueron fragmentadas afuera del rasgo y luego depositados en
él, como en lo otros rasgos (estructuras negativas) que componen el sitio. Por ello no es
posible reconstruir las vasijas enteras. Sin embargo, pareciera que el período que
transcurrió entre la fragmentación de las vasijas y su depositación fue menor, ya que las
secciones de las fracturas antiguas no parecen estar tan erosionadas. Además, el
tamaño de la mayoría (50%) de lo fragmentos pertenecientes a una familia son de
tamaño mediano (5mm a 10,4mm), lo que hace suponer que tampoco estuvieron
expuestos a pisoteo u a otro factor erosivo. Dentro de los patrones de fractura, cabe
destacar el caso particular de la vasija de la Familia 7 (única vasija donde se pudo
observar) que pareciera haber sido lanzado verticalmente sobre el suelo, ya que su
base está más fracturada que su cuerpo (ver fotografía).
64
(principalmente fermentadas), fueron comunes entre las sociedades andinas, incluso
antes del incanato (Dillehay 2003:359).
Es por ello que se hace necesario seguir investigando en la zona, con el fin de
continuar avanzando en la comprensión de esta problemática arqueológica y
aproximarnos a comprender las diversas dinámicas sociales que se generaban en el
Aconcagua Medio durante el Periodo Tardío de la Prehistoria Regional.
Agradecimientos: Mis más sinceros agradecimientos a todos los que colaboraron en las
diferentes etapas de esta práctica profesional. Principalmente a Andrés Troncoso y
Fernanda Falabella, ya que sin ellos esta práctica no habría sido posible.
65
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66
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68
ANEXO 1
Patrón 1
Presenta principalmente áridos blancos, algunos opacos con secciones traslúcidas, y
otros más brillantes de tamaño heterogéneos (0,5mm a 1,5mm aproximadamente) y con
forma tendiente a lo alargado sub-angular. Presenta una densidad media alta (30%) con
una distribución pobre.
Patrón 1.b
Similar al patrón 1, presenta principalmente áridos blancos, algunos opacos con
secciones traslúcidas y otros más brillantes. Presentan una forma tendiente a lo
alargado sub-angular, sin embargo, se distingue del patrón 1 por presentar una
granulometría más fina (0,4mm aprox.). También presenta una densidad media alta
(30%) en la sección, con una distribución pobre.
Patrón 2
Inclusiones quemadas, presencia de áridos como los anteriormente descritos (blancos,
algunos opacos con secciones traslúcidas y otros más brillantes) en menor cantidad y
en tamaños diversos (muy grandes 1,5mm o muy pequeños 0,4mm) de forma alargado
sub-redondeado. Presenta una densidad baja (10%) y una distribución pobre.
Patrón 3
Presenta gran cantidad de litos de color oscuro (negros, café oscuros, plomos) en forma
esférica sub-redondeada y redondeada, con un tamaño de 1,5mm, y áridos blancos,
algunos opacos con secciones traslúcidas y otras más brillantes, en menor cantidad de
forma esférica sub-redondeada con un tamaño de 0,5mm. Hay una abundancia media
alta (30%) de áridos en la sección, además de presentar con una distribución pobre.
Patrón 4
Presenta gran cantidad de rocas graníticas y áridos blancos, algunos opacos con
secciones traslúcidos y otros más brillantes, de gran tamaño (1mm-2mm) y gruesos, de
formas alargadas redondeadas y esféricas sub-redondeadas. Presenta alta densidad
(40%) y distribución muy pobre en la sección.
La distribución de las familias por los distintos patrones de pastas puede observarse en
la siguiente tabla.
69
ANEXO 2
FICHA DE REGISTRO CERÁMICO
SITIO Villa Cardenal Raúl Silva Henríquez LOCALIDAD Catemu REGIÓN de Valparaíso
RASGO 31 REG. POR: Andrea Martínez FECHA: Enero 2008 FOTO SI DIBUJO SI
FAMILIA: 6
PASTA:
Patrón Nº: 1.b
Inclusiones: Blancas, algunas opacas con secciones traslúcidas y otras más brillantes.
Densidad: Media Alta (30%) Distribución: Pobre
Tamaño de inclusiones: 0,4mm Forma de inclusiones: Alargado Subangular
Cocción: Oxidante
SUPERFICIE
Interior Exterior
Tratamiento Alisado Alisado
Color Reddish Brown (5YR, 5/4) Dark reddish brown (5YR, 3/3)
FORMA
Categoría: No Restringida Simple
Forma sección cuerpo: Elipsoide horizontal Cuello: -----------
Tipo de labio: Redondeado irregular Borde: Recto Base: Convexa tendiendo a Plano
ASA
Nº -- Emplazamiento: ---------------------------------
Inserción: ------------------ Posición: -----------------------------------
Tipo: ------------------------ Sección: ------------------------------------
Largo: ----- Ancho: ---- Espesor: ---- Altura Superior: ---- Altura Inferior: -----
MEDIDAS
Espesor labio: 4,5mm Borde: 6mm Cuello: ----- Cuerpo: 5,48mm Base: 9,05mm
Alto Total: 5,3mm -6,7mm Diám. Máx: 170mm
Alto Cuello: ------------------ Diám. Borde: 170mm 13%
Alto Cuerpo: ----------------- Diám. Base: 80mm 80%
Alto Diám. Máx.: 5,3mm – 6,7mm Diám. Unión Cllo/Cpo: ---------
Alto Diám. Mín: ----------------------- Diám. Mín: ------------------------
OBSERVACIONES: -------------------------
70
FICHA DE REGISTRO CERÁMICO
SITIO Villa Cardenal Raúl Silva Henríquez LOCALIDAD Catemu REGIÓN de Valparaíso
RASGO 31 REG. POR: Andrea Martínez FECHA: Enero 2008 FOTO SI DIBUJO SI
FAMILIA: 7
PASTA:
Patrón N° 3
Inclusiones: Litos de color oscuro y áridos blancos, algunos opacos con secciones traslúcidas y
otras más brillantes (este último en menor cantidad).
Densidad: Media Alta (30%) Distribución: Pobre
Tamaño de inclusiones: 1mm los Feldespato y < 0,5 feldespato en menor cantidad.
Forma de inclusiones: Esféricos sub-redondeado y redondeados.
Cocción: Reductora
SUPERFICIE
Interior Exterior
Tratamiento Alisado Alisado
Color Light brown (7,5YR, 6/4) Brown (7,5YR, 5/4)
FORMA
Categoría: Restringida simple
Forma sección cuerpo: Ovoide Cuello: -----------------
Tipo de labio: Recto Borde: Evertido Base: Convexa
ASA
Nº 1 Emplazamiento: Sección superior del cuerpo.
Inserción: Adherida. Posición: Diagonal.
Tipo: Mamelón. Sección: Elipsoidal
Largo: 30mm Ancho: 30mm Espesor: 9,20mm Altura Superior: 180mm
Altura Inferior: 150mm
MEDIDAS
Espesor labio: 5,48mm Borde: 5,26mm Cuello:---- Cuerpo:6,03mm Base: 12,68mm
Alto Total: 220mm Diám. Máx: 180mm
Alto Cuello: ---------- Diám. Borde: 140mm 24%
Alto Cuerpo: 205mm Diám. Base: (convexa) 90% (aprox.)
Alto Diám. Máx: 100mm Diám. Unión Cllo/Cpo: ---------
Alto Diám. Mín: 205mm Diám. Mín: 130mm
71
FICHA DE REGISTRO CERÁMICO
SITIO Villa Cardenal Raúl Silva Henríquez LOCALIDAD Catemu REGIÓN de Valparaíso
RASGO 31 REG. POR: Andrea Martínez FECHA: Enero 2008 FOTO SI DIBUJO SI
FAMILIA: 15
PASTA:
Patrón Nº: 1.b
Inclusiones: Blancas, algunas opacas con secciones traslúcidas y otras más brillantes.
Densidad: Media Alta 30% Distribución: Pobre
Tamaño de inclusiones: 0,4mm Forma de inclusiones: Alargado Subangular
Cocción: Oxidante
SUPERFICIE
Interior Exterior
Tratamiento Alisado Alisado
Color Dark Brown (7,5YR, 3/2) Very dark brown (7,5YR, 2.5/2)
FORMA
Categoría: No Restringida Simple.
Forma sección cuerpo: Esférico. Cuello: -----------------
Tipo de labio: Redondo. Borde: Recto. Base: Convexa
ASA
Nº -- Emplazamiento: ---------------------------------
Inserción: ------------------ Posición: -----------------------------------
Tipo: ------------------------ Sección: ------------------------------------
Largo: ----- Ancho: ---- Espesor: ---- Altura Superior: ---- Altura Inferior: -----
MEDIDAS
Espesor labio: 4,86mm Borde: 4,92mm Cuello: ----- Cuerpo: 6,17mm Base: ---
Alto Total: no se puede, no tiene base Diám. Máx: 150mm
Alto Cuello: ------------------------------ Diám. Borde: 150mm 25,5%
Alto Cuerpo: ----------------------------- Diám. Base: ------------ 0%
Alto Diám. Máx: ------------------------ Diám. Unión Cllo/Cpo: ----------
Alto Diám. Min: ------------------------ Diám. Mín: ------------------------.
72