LA LIBRE EMPRESA EN GUATEMALA– Andrés Aragón

La libre empresa, esa opción que genera progreso y empleo, aquí en Guatemala no es nada
más y nada menos que una perdedora.

Pero ¿Por qué? Bien, una de las principales funciones de la empresa es el aporte al bien
común que genera por medio del pago de impuestos, asimismo, en igualdad de condiciones
la competitividad es una virtud que permite a ciertas personas tener más éxito que otros,
así se genera la división del trabajo que trae el progreso.

La libre empresa en el país no está pasando por sus mejores momentos, pues la palabra
empresario se ha ido desgastando y cegando gracias a las acciones corruptas de las
posiciones plíticas, que finalmente lograron manchar ese concepto. Esos “empresarios” que
evaden impuestos y logran ventajas a base de trampas, son el antónimo del concepto de
virtud del emprendedor.

La libre empresa, ha sido oprimida de su prestigio. Hay tanto hombres como mujeres que
han arriesgado, han sufrido y han seguido adelante, generan empleo, pagan buenos salarios,
cumplen correctamente con sus impuestos, compiten en igualdad de condiciones y no
buscan privilegios de forma sucia. Pero ahora esas personas deben cargar con ese
desprestigio que ese concepto genera.

Un buen inversionista competitivo busca actuar con en sitios donde no haya corrupción, no
busca actuar bajo ningún tipo de mordida o incentivo. Pues al final, eso no te otorga una
certeza jurídica y tarde o temprano se va a quedar en una situación completamente
vulnerable y le podria salir el tiro por la culata, como se suele decir. Un verdadero
empresario no busca exclusivamente negocios con el Estado y no se llenara de fortuna por
medio de privilegios.

Lamentablemente hay líderes (si se les puede llamar de esta manera) que estan en una
posición totalmente contraria, y esto es más por circunstancias que por méritos. Esos son
los más grandes enemigos del verdadero sector privado.

Hay que decir que la libertad para dedicaarnos a actividades empresariales destinada a la
oferta de bienes y servicios en una economia abierta es fundamental para que dicho Estado
pueda ofrecer inversión tanto naccional como internacional, un ambiente en donde se
pueda desarrollar de forma correcta y eficiente toda actividad comercial que le pueda
brindar un beneficio.

No obstante, también es obligación del Estado garantizarle a su población, especialmente a

los consumidores, un mínimo de calidad proveida por el empresario para así no ser sujeto
de estafas, engaños o chantajes a causa de la publicidad no ética.
El comienzo del siglo XXI ha visto venir una serie de decepciones y “escandalos
corporativos”, fracasos de las empresas al no poder cumplir desde un principio con las
expectativas de conducta esperadas por parte de sus empleados y accionistas, llevandolas
así a la quiebra luego de que estas parecian ser confiables. El resultado final de estos
escandalos no beneficia a nadie, pues los empleados pierden sus puestos de trabajo y los
accionistas pierden su inversión.

Se nos presenta el problema de establecer las limitaciones y los alcances de la libertad de

empresa, que por cierto tambien se le denomina libre iniciativa privada. Hatsa donde el
Estado, sin violar la garanatía constitucional que esta presenta, puede intervenir con
regulaciones legales que busquen crear normativas en uno o varios de los aspectos
relacionados con la actividad empresarial.

El concepto de empresa, según la Real Academia Española, es una unidad de organización

dedicada a actividades industriales, mercantiles o de prestación de servicios con fines
lucrativos. Pero encontré que el artículo 655 del codigo de comercio guatemalteco, define a
la empresa mercantil como el conjunto de trabajo, de elementos materiales y de valores
incorpóreos coordinados, para ofrecer al público, con propósito de lucro y de manera
sistemática, bienes o servicios.

Entonces tomando ambas conceptualizaciones podriamos entender que la empresa es una

unidad organizada de trabajo, elementos y valores que tiene como objetivo conseguir fines
de lucro y que su fin es obtener una ganancia mediante el ofrecimiento al público ya sea de
bienes o servicios.

El código de comercio guatemalteco estipula que el desarrollo de la iniciativa responde a un

criterio mercantil cuya flexibilidad y amplitud estimulará la libre empresa, facilitando su
organización, y regulará sus operaciones, encajandolas dentro de limitaciones justas y
necesarias, permitiendole al Estado mantener la vigilancia de las mismas, como parte de su
función coordinadora de la vida nacional.

Nuestra Consitución Política no define que es la libertad de empresa, sin embargo, la regula
en su artículo 43 el cual dice “Se reconoce la libertad de industria, de comercio y de trabajo,
salvo las limitaciones que por motivos sociales o de interés impongan las leyes”.

Como podemos ver, la libertad de empresa no simplemente es una garantía constitucional,

es un derecho fundamental, pero lo mismo no tendría sentido si el Estado interfiriera en la
actividad económica de manera directa. En Guatemala el régimen económico no es liberal
sino que esta inspirado en principios de justicia social.

En conclusión, se entiende como libertad de empresa a aquella garantía constitucional que

permite al comerciante desarrollarse en una economía libre de mercado, de manera
individual o colectiva, con la producción y comercialización de bienes y servicios, conforme a
los modelos de organización que la ley regula y protege, con el objetivo de luvrar con dichas
actividades y sin myores limitaciones que las establecidad por la propia ley.