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Actos lingüísticos
Siempre es la persona la que debe establecer el vínculo entre la palabra, por un lado, y el mundo por el otro.
A veces al hablar, la palabra debe adecuarse al mundo, pero otras el mundo se adecua a la palabra.
AFIRMACIONES Y DECLARACIONES
Si la palabra es la que debe adecuarse al mundo, hablaremos de afirmaciones; son el acto
lingüístico que pertenece a las descripciones. Pero no decimos como son las cosas, si no
como vemos las cosas y ya que los seres humanos comparten una estructura biológica
común y la tradición de distinciones de la comunidad, les es posible compartir lo que
observan a partir de las descripciones y lograr ciertos acuerdos sobre lo que ven en común.
Los seres humanos podemos distinguir entre afirmaciones verdaderas y falsas; las
verdaderas no hacen alusión a la verdad (decir como son las cosas). Las afirmaciones falsas
están a la espera de una confirmación pero cualquier testigo que haya presenciado tal
situación estaría en posición de refutar.
Las declaraciones no hablan acerca del mundo, si no que crean uno nuevo, que no se nos
hacía presente. Pueden ser validas o invalidas según el poder y autoridad que poseen las
personas que las hacen.
La declaración del no: decir no es de las declaraciones más importantes,
estrechamente relacionado con nuestra dignidad como personas. Puede adquirir
diferentes formas: NO, basta, no es aceptable para mí, es una forma de poner fin a
algo.
La declaración del sí: cuando declaramos un sí o un acepto, ponemos en juego el
poder de nuestra palabra, ya que constituye una promesa, un compromiso asumido.
La declaración de ignorancia: decir no sé, aceptar y reconocer el no saber brinda la
posibilidad de crear un nuevo mundo para un mismo, dándose la posibilidad de
aprender cosas nuevas.
La declaración de gratitud: el agradecimiento nos permite hacernos cargo del otro,
otorgarle reconocimiento y evitar el resentimiento, nos acerca a las inquietudes del
otro.
La declaración del perdón: este puede declararse en dos actos el primero: te pido
perdón y el segundo, te perdono. El perdón no nos exime de responsabilidades,
como resultado de nuestras propias acciones. El segundo acto evita el resentimiento,
como tercer acto se trata del perdón a uno mismo; el perdonarse.
La declaración del amor: decir te amo o te quiero es participar en la construcción de
la relación con el otro, y forma parte de la construcción de un mundo compartido.
LOS JUICIOS
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Los juicios son como veredictos, con ellos creamos realidades, que son totalmente una
interpretación enteramente lingüísticos. Son declaraciones, pero no todas las declaraciones
son juicios necesariamente.
Los juicios pueden ser:
Validos cuando guarden estrecha relación con la autoridad formal de quien los declare.
Fundados, cuando se basen en observaciones concretas de acciones del pasado, pero
también hablan del futuro.
COMO SE FUNDAN LOS JUICIOS?
Para fundar un juicio se precisa de:
1. La acción que proyectamos hacia el futuro
2. Los estándares que tenemos en relación a la acción
3. El dominio de observación en el que emitimos el juicio
4. Las afirmaciones que brindemos respecto de los estándares
5. El hecho de que no encontramos fundamento suficiente para sostener el juicio
contrario.
LENGUAJE Y ACCION
Los juicios siempre hablan de quien los emiten. Hay personas que viven de juicios ajenos es
lo que Rafael Echeverría llama “condición de inautenticidad”, son aquellas que delegan
toda autoridad a los demás para emitir los juicios que les importan.
PETICIONES Y OFERTAS
Promesas: cuando alguien nos hace o hacemos una promesa quiere decir que nos
comprometimos a ejecutar una acción en el futuro, permitiendo hacer planes en relación a
lo declarado. Comprende cuatro elementos fundamentales:
1) Un orador
2) Un oyente
3) Una acción a llevarse a cabo
4) Un factor de tiempo
Las promesas implican dos movimientos:
UNA DECLARACION DE
UNA PETICION U OFERTA TIEMPO
ACEPTACION POR OTRA PERSONA
Una promesa que no lleva consigo PROMESA un vencimiento no obliga, por lo tanto no
se considera una promesa.
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