Operaciones con Sólidos, d4
2018-1, UdeA
Documento 4. Operaciones de
Reducción de Tamaño
Es toda una serie
de operaciones
tendientes a
reducir el tamaño
de las partículas
con el
consecuente incremento de superficie en la
masa unitaria. Son operaciones complejas
debido a la gran cantidad de imprevistos y
factores incontrolables: referentes a los
materiales, a las máquinas y a los procesos
o técnicas de operación.
Objetivos
√ Reducción de tamaño (combustión,
secado, lixiviación, liberación).
√ Obtención de un producto con
diámetro o tamaño definido y con una
distribución granulométrica determinada.
Finalidades
√ Aumentar la superficie específica
(combustión, lixiviación, secado).
√ Romper un material hasta reducirlo
a partículas finas con el fin de liberar un
material valioso que está disperso en otro
material sólido de poco valor.
√ Obtener una granulometría
específica.
Mecanismos de la reducción de
tamaño
El mecanismo de la reducción de tamaño es
extremadamente complejo debido a que
depende de múltiples factores: del
material, de los equipos, de los procesos o
formas de operar éstos.
Si una masa de un material se le somete a
un impacto brusco, generalmente se rompe
y da lugar a un cierto número de partículas
de tamaño relativamente grande y a un
cierto número de partículas finas con una
cantidad comparativamente pequeña de
partículas intermedias.
La reducción de tamaño que un molino
puede hacer, está limitada por el rango de
tamaños entre la alimentación y el
producto de descarga deseado con el
molino. Por esta razón en la mayoría de los
casos una operación de molienda se efectúa
por etapas: molienda primaria
(“crushing”), intermedia y fina
(“grinding”).
En las plantas de reducción de tamaño,
generalmente se dispone de varias zonas
de trituración y/o molienda, y entre ellas se
tienen operaciones de clasificación.
La trituración no es únicamente un proceso
mecánico; es también un proceso cinético
en el cual los efectos moleculares
ordinarios y químicos influyen de forma
importante, con lo que se pone de
manifiesto la variedad de procesos que
intervienen en la fragmentación.
La energía necesaria para efectuar una
operación de reducción de tamaño está
relacionada con la estructura interna del
material, habiéndose podido comprobar
que el proceso de reducción de tamaño en
partículas grandes se efectúa en dos etapas
diferentes. En primer lugar se abren todas
las pequeñas fisuras presentes en el
material y se efectúa la ruptura por planos
de clivaje débiles; en segundo lugar se
incrementa la superficie específica. Esto
quiere decir las partículas mayores se
forman más fácilmente y por consiguiente
se necesita más energía para producir
partículas finas caracterizadas por una alta
superficie específica.
Desde el punto de vista del consumo de
energía, el proceso de molienda es poco
eficiente si se compara la energía total
consumida por el molino durante el
proceso, con la calculada de acuerdo con
las distintas leyes existentes, lo cual es
debido a múltiples factores:
1

 Del material: elasticidad, plasticidad,
comprensibilidad, forma, tamaño.
 Del equipo: fricciones y desgastes en los
rodamientos y en las partes del equipo
en contacto con el material y
 Del proceso: circuito abierto o circuito
cerrado, alimentación libre u obstruida.
Por todo esto, las teorías basadas
únicamente en los procesos mecánicos,
como son las de Rittinger y Kick, son
superadas por la realidad.
La eficiencia del proceso depende también
de la forma como se apliquen las fuerzas,
de la magnitud de las mismas y de su
naturaleza: impacto, compresión,
cizalladura, desgarramiento.
Desde el punto de vista de la ingeniería, es
interesante conocer:
 Las leyes que rigen el fenómeno de la
desintegración, especialmente en lo
referente a la energía necesaria para
realizar la molienda
 Las características de los productos
desintegrados mecánicamente
 Los diferentes tipos de máquinas
existentes y los campos específicos para
los cuales cada tipo de máquina puede
emplearse.
Forma y granulometría de los
productos fragmentados
Es imposible obtener,
a través de los
procesos de
trituración, granos
que en su totalidad
sean de volumen igual y uniformes. La
trituración realizada de forma que ninguno
de los fragmentos obtenidos sobrepase una
dimensión previamente definida, conduce
a la obtención de toda una gama de
tamaños comprendidos entre dicha
dimensión y la infinitamente pequeña.
Dado que en función de la estructura del
material será su ruptura, se han generado
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una serie de estudios sistemáticos
originando las siguientes conclusiones:
√ El porcentaje de finos aumenta a
medida que aumenta el coeficiente de
reducción
√ La trituración de trozos planos, en
los cuales una dimensión es muy superior
a la media de las dimensiones, genera
proporcionalmente más finos que la
trituración de trozos de forma regular.
√ La forma media de los granos
triturados varía con su emplazamiento en
la escala de tamizado: los granos más
gruesos tienen una forma alargada, los
granos medios, forma más bien cúbica y los
finos suelen ser planos y alargados
√ Si el proceso de trituración tiene
lugar en una trituradora a la que se le pide
un excesivo coeficiente de reducción, la
muestra obtenida estará formada por un
porcentaje elevado de granos gruesos
cuyos ángulos están redondeados por el
desgaste y un porcentaje de granos muy
finos; prácticamente no se generan granos
de tamaños intermedios.
√ En un proceso de trituración de un
material heterogéneo, se genera un
porcentaje mayor de partículas
correspondientes a la dimensión media,
comparado con el caso de una trituración
de un material homogéneo sometido a la
misma reducción.
Eficiencia de las operaciones de
reducción de tamaño
La operación de molienda respecto a la
energía es un proceso poco eficiente. La
energía calculada con base en las tres leyes:
Rittinger, Kick y Bond es muy inferior a la
consumida por el molino en la práctica.
Los factores por los que en la mayoría de
los casos los rendimientos de la operación
de molienda resultan tan bajos son
múltiples, entre los cuales están:
2

 Producción de deformaciones elásticas
en las partículas.
 Producción de deformaciones no
elásticas que provocan reducción del
tamaño sin que ocurra fractura.
 Producción de distorsiones elásticas en
el equipo.
 Existencia de fricciones entre las
partículas y de éstas con el equipo.
 Producción de ruido, calor
vibraciones en el equipo
 Pérdidas producidas al vencer la
inercia de la máquina
 Pérdidas por rozamiento en
rodamientos de la máquina
Como puede observarse, cada uno de
estos factores consumen energía, sin que
por ello se logre reducir el tamaño de la
partícula. Además, al aplicar las leyes
tales factores no se tienen en cuenta.
Formas de operación de
molinos
Los molinos pueden operarse por lotes o
en forma continua:
 Por lotes: procesado de cantidades
pequeñas de material
 En continuo: operaciones a gran escala
Los molinos, bien sea operados por lotes o
en forma continua pueden trabajar con
alimentación libre o con alimentación
obstruida:
 Alimentación libre: cuando el molino
se opera a una rata de alimentación
relativamente baja, de tal manera que el
material una vez molido pueda salir
rápidamente y sin ningún obstáculo, lo
que permite a la partícula permanecer
dentro del molino por tiempo muy
corto. Esto evita de algún modo la
producción de finos.
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 Alimentación obstruida: consiste en
alimentar el molino a ratas muy altas, lo
que ocasiona que la cavidad trituradora
del molino se mantenga
completamente llena. Esto obliga a la
partícula a permanecer dentro del
molino durante períodos largos de
tiempo y a recibir probablemente más
de una trituración, lo que puede
traducirse en un aumento considerable
de partículas finas y en un aumento del
y consumo de energía. Este tipo de
molienda se recomienda para triturar
pequeñas cantidades o si se busca hacer
una sola molienda que dé la reducción
por debajo de un tamaño establecido.
los
Si el molino está siendo operado en forma
continua y el material pasa una sola vez a
través de él, la operación se está haciendo
en circuito abierto y ninguna fracción de
material regresa al interior del molino; pero
si el molino está siendo operado de tal
manera que descarga a un clasificador y el
rechazo de éste se regresa al molino para
los
una nueva molienda, la operación se está
efectuando en circuito cerrado con un
clasificador de tamaño. El material con el
tamaño deseado sigue el proceso y aquel
con tamaño superior retorna al molino (el
material grueso devuelto al molino por
medio de un clasificador adecuado se
conoce como carga circulante).
Operar en circuito abierto a menudo se
considera antieconómico, ya que se le
impone al molino una especificación de
finura del material descargada, obligando a
una excesiva molienda de la mayor parte
del producto. Los finos acumulados
tienden a actuar como cojines,
amortiguando el efecto de la fuerza
trituradora. En la molienda en circuito
cerrado, el clasificador permite obtener un
material terminado de tamaño óptimo,
devolviendo al molino las partículas
gruesas no acabadas para que sufran una
nueva trituración.
3

Como un ejemplo de la relación de la forma
de operar los molinos con el consumo de
potencia y la eficacia de la operación, en el
caso de los procesos de molienda con
molinos de bolas en circuito abierto
necesitan más potencia que los de circuito
cerrado para productos que contengan una
misma granulometría. Esto se debe a que
al haber una menor presencia de partículas
de gran tamaño las bolas aumentan su
actuación sobre las otras generando
partículas de menor tamaño. La eficacia de
una molienda en circuito abierto es peor
pero tiene la ventaja de una mayor
simplicidad de ejecución, de
mantenimiento y de instalación.
Clasificación de los equipos de
reducción de tamaño
La gran diversidad de máquinas de
trituración y molienda que hay disponibles
actualmente en el mercado permiten hacer
clasificaciones muy diversas de las mismas.
Según el tamaño del producto se pueden
clasificar en: molinos primarios, para
molienda gruesa; molinos secundarios,
para molienda intermedia; molinos para
molienda fina (terciaria) y molinos para
molienda ultrafina. Han sido varios los
expertos que han intentado determinar los
límites entre los distintos tipos, pero
actualmente no existe ninguna norma para
delimitar los límites por tamaños. En una
instalación determinada, por ejemplo, un
molino terciario puede estar trabajando con
materiales de mayor tamaño que un molino
secundario de otra instalación.
Otra de las clasificaciones más utilizadas es
la basada en los tipos de fuerzas que
emplean los equipos. Estas fuerzas son:
compresión, la abrasión o la atrición, el
impacto, el cizallamiento y el corte.
En cuanto a la granulometría del material
que se obtienen de estos equipos, en
general los molinos que trituran por
compresión o desgarramiento dan un
producto con relativamente poca cantidad
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de finos. Los molinos que trabajan por
impacto o cizalladura, tienen tendencia a
producir muchos finos.
Criterios generales para la
selección de un molino
Los molinos que trituran por compresión o
desgarramiento dan un producto con poca
cantidad de finos, contrariamente a los
molinos que trabajan por impacto o
cizalladura, que tienen tendencia a
producir muchos finos. Por lo tanto, para
seleccionar un molino, deben tenerse en
cuenta algunos de los siguientes aspectos:
1. Qué tipo de máquina es la más adecuada
(compresión, impacto, cizalladura, corte o
desgarramiento).
2. Tamaño del equipo requerido. Depende
de la capacidad, las propiedades del
material a triturar y la relación de
reducción deseada.
3. El consumo de energía en vacío y cuando
es operado a la máxima capacidad.
4. Qué mantenimiento debe dársele para
reducir los desgastes naturales a un valor
tolerable.
5. Cuál sería el comportamiento del molino
cuando se le varíen las condiciones de
operación y cuáles son las condiciones
óptimas de operación.
4

Actualmente, se ha tomado conciencia de la
importancia de los fenómenos que
involucran las operaciones de reducción de
tamaño y su entendimiento. Pese a que se
han formulado leyes y modelos, en la
práctica se siguen presentando
ineficiencias y en la práctica el diseño y
escalado de estos procesos sigue siendo
empírico, de aquí la importancia de
comprender los mecanismos de
fragmentación.
TEORÍA DE LA PROPAGACIÓN DE
FRACTURAS
Se puede definir la fractura como la
culminación del proceso de deformación
plástica. En general, se manifiesta como la
separación o fragmentación de un cuerpo
sólido en dos o más partes bajo la acción de
un estado de cargas.
Por ejemplo, si observamos un cristal de
NaCl (sal de cocina)
Observamos que es un arreglo de iones
donde cada ión está rodeado de 6 iones de
carga, existiendo así fuerzas atractivas
entre iones de cargas opuestas y fuerzas
repulsivas entre iones de cargas iguales,
ambas fuerzas son iguales y opuestas. La
carga de oposición de los iones es
inversamente proporcional al cuadrado de
la separación entre los iones (ley de
Coulomb  𝐹 𝛼 1⁄ 2 )
𝑟 que era necesaria una teoría, además los
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Si la separación (r) entre los iones aumenta
o disminuye, varía el equilibrio del arreglo
de iones e inmediatamente cambian las
fuerzas repulsivas y atractivas, con lo cual,
la fuerza neta resultante reubica de nuevo
los iones. La relación entre la fuerza de
tensión o compresión aplicada y el cambio
resultante en la separación de los iones es
lineal, con lo cual se cumple la ley de Hooke
(la deformación es directamente
proporcional al esfuerzo aplicado).
Para quebrar el cristal es necesario separar
las capas adyacentes de iones y pasar a la
región elástica, donde no se cumple la ley
de Hooke, para esto se asumen dos
situaciones: Que todos los enlaces ubicados
perpendiculares al plano de aplicación se
rompan, con lo cual, la fuerza teórica es
mayor a la realmente aplicada; o que
algunos de los enlaces ubicados
perpendiculares al plano de aplicación se
rompan, con lo cual, la fuerza teórica es
menor a la realmente aplicada.
En la práctica el mecanismo real de fractura
para estos materiales se sale de esto y
envuelve cosas más interesantes.
La Mecánica de la Fractura empezó a
desarrollarse durante la Primera Guerra
Mundial por el ingeniero aeronáutico
inglés Alan Arnold Griffith (1912) para
explicar el fallo de materiales frágiles, ya
5

experimentos que el mismo Griffith realizó,
demostraron que la tensión de rotura
aumentaba cuando el diámetro de la fibra
era menor. Por lo tanto la resistencia a
tensión uniaxial, que se había usado
extensamente para predecir la rotura del
material, no podía ser una propiedad
independiente del material. Griffith sugirió
que la baja resistencia a la fractura
observada en los experimentos, al igual que
la dependiente del tamaño, era debida a la
presencia de pequeñas roturas
microscópicas en la masa del material.
Para comprobar la hipótesis de la fractura,
Griffith introdujo una fractura artificial en
las probetas experimentales. Dicha fractura
era mucho mayor que otras fracturas en la
probeta. Los experimentos demostraron
que el producto de la raíz de la longitud de
la grieta (L) y la tensión en la grieta (K) era
aproximadamente constante, es
decir: K√L = C. El fallo ocurre cuando la
energía libre alcanza un valor pico en la
longitud de grieta crítica. Por ejemplo,
causando la fractura.
Con lo cual Griffith concluyó que todo
cuerpo posee fallas microscópicas que
pueden producir grietas y su propagación
en el material genera fracturas, y cuando se
le hace un esfuerzo a ese cuerpo, este lo
almacena y no es uniformemente
distribuido porque se concentra alrededor
de los huecos, esquinas y fracturas,
además, que esta concentración de
esfuerzos (K) es proporcional a la longitud
de la grieta (L) e inversamente
proporcional al radio del agujero (R), así:
𝐿 centro de la muestra y se propaga hacia la
𝐾 = 1 + 2√
𝑅
Este factor de concentración de esfuerzos se
puede definir como:
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𝑒𝑠𝑓𝑢𝑒𝑟𝑧𝑜 𝑙𝑜𝑐𝑎𝑙
𝐾=
𝑝𝑟𝑜𝑚𝑒𝑑𝑖𝑜 𝑑𝑒𝑙 𝑒𝑠𝑓𝑢𝑒𝑟𝑧𝑜 𝑒𝑛 𝑒𝑙 𝑐𝑢𝑒𝑟𝑝𝑜
Alrededor de un agujero K puede ser igual
a 3.
La propagación de la fractura se da cuando
K incrementa incrementando L y la fractura
crece hasta quebrar el material
El resto de la energía es disipada como
sonido y calor en el material o llega a otras
fracturas.
El estudio de fracturas ha evolucionado en
las últimas décadas con el análisis de la
sensibilidad de los defectos de los extremos
de las grietas o fisuras. Estas actúan como
concentradores de esfuerzos, ya que, al
aplicarse una fuerza externa a un cuerpo
elástico que contiene una grieta, el material
justamente adelante de la grieta es
sometido a esfuerzos de tracción muy
grandes. Asimismo, se presentan esfuerzos
de corte sobre planos a 45º respecto al plano
de la grieta. De modo que en el vértice de
tal grieta, se alcanza el valor del esfuerzo
admisible o el de fluencia. Luego, la
fractura se puede producir cuando es
sobrepasado el valor del esfuerzo de
fluencia en el vértice de la fisura o grieta.
Las fracturas en un material se pueden
clasificar de dos formas, fracturas dúctiles
y fracturas frágiles. La fractura dúctil
ocurre bajo una intensa deformación
plástica, comienza con la formación de un
cuello y la formación de cavidades dentro
de la zona de estrangulamiento. Luego las
cavidades se fusionan en una grieta en el
superficie en dirección perpendicular a la
tensión aplicada. Cuando se acerca a la
superficie, la grieta cambia su dirección a
45° con respecto al eje de tensión y resulta
una fractura de cono y embudo. La fractura
frágil tiene lugar sin una apreciable
deformación y debido a una rápida
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propagación de una grieta. Normalmente KvX13  volumen inicial

ocurre a lo largo de planos cristalográficos
KvX23  volumen final
específicos denominados planos de
fractura que son perpendiculares a la
tensión aplicada. Kv: factor volumétrico, entonces:
La mayoría de las fracturas frágiles son Cada partícula X1 dará lugar a X13/X23
transgranulares o sea que se propagan a partículas de tamaño X2.
través de los granos. Pero si los límites de
grano constituyen una zona de debilidad, Entonces, el área nueva generada sería:
es posible que la fractura se propague 𝑿𝟑𝟏
intergranularmente. Las bajas ( 𝟑 ) 𝑲𝒔𝑿𝟐𝟐 − 𝑲𝒔𝑿𝟐𝟏 (𝒆𝒄. 𝟏)
temperaturas y las altas deformaciones 𝑿𝟐
favorecen la fractura frágil. Ks: factor de superficie
Solucionando 1, tenemos:
𝑲𝒔𝑿𝟑𝟏
− 𝑲𝒔𝑿𝟐𝟏 (𝒆𝒄. 𝟐)
𝑿𝟐
Multiplicando por X1/X2 el segundo
término de la ecuación 2 y sacando factor
común, tenemos:
𝟏 𝟏
𝑲𝒔𝑿𝟑𝟏 ( − ) (𝒆𝒄. 𝟑)
𝑿𝟐 𝑿𝟏
Dividiendo por la masa de la partícula
original, tenemos:
En la figura anterior observamos los tipos
𝟏 𝟏 𝟏
de fracturas ocasionadas en un material, a) 𝑲𝒔𝑿𝟑𝟏 ( − ) (𝒆𝒄. 𝟒)
Fractura dúctil, b) Fractura 𝑿𝟐 𝑿𝟏 𝑲𝒗𝑿𝟑𝟏 𝝆
moderadamente dúctil, c) Fractura frágil Reorganizando la ecuación 4:
sin deformación plástica.
𝑲𝒔 𝟏 𝟏
( − ) (𝒆𝒄. 𝟓)
𝝆𝑲𝒗 𝑿𝟐 𝑿𝟏
Para producir estas fracturas es necesario
De la expresión 5 se obtiene el valor de
aplicar energía, con lo cual se hizo
la energía necesaria para reducir el
necesario desarrollar leyes que permitieran
conocer la energía asociada a las tamaño de un material, conocido
operaciones de reducción de tamaño. también como al ley de Rittinger, así:
𝟏 𝟏
𝑬 = 𝑪𝑹 ( − ) (𝒆𝒄. 𝟔)
𝑿𝟐 𝑿𝟏
Rittinger (1867) dijo: la energía requerida
para la reducción de tamaño de las La ecuación 6 se puede escribir en
partículas es directamente proporcional al forma diferencial así:
área de la nueva superficie creada.
𝒅𝑬 𝟏
= −𝑪𝑹 ( 𝟐 ) (𝒆𝒄. 𝟕)
𝒅𝑿 𝑿
X1 diámetro inicial
X2  diámetro final

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Sin embargo, CR se puede escribir como Si el 𝚫𝑿 es el cambio de tamaño de la

el producto entre la tensión de ruptura partícula, la relación del cambio en el
(FC) del material por la constante de diámetro la podemos escribir así:
Rittienger del material (Kr), con la cual,
la ecuación 6 quedaría: 𝑿𝟐 𝐗 𝟏− 𝚫𝐗 𝟏 𝚫𝑿
𝟏 𝟏 = =𝟏− (𝒆𝒄. 𝟏𝟐)
𝑿𝟏 𝑿𝟏 𝑿𝟏
𝑬 = 𝑭𝑪 𝑲 𝒓 ( − )
𝑿𝟐 𝑿𝟏 De donde la energía requerida para pasar
𝑭𝑪 𝑭𝑪 de un tamaño de partícula a otro según
𝑬 = 𝑲𝒓 ( − ) (𝒆𝒄. 𝟖) Kick sería:
𝑿𝟐 𝑿𝟏
𝟔𝝀𝚫𝝓 𝚫𝑿
Sabiendo que 𝑭𝒄 = para cada 𝚫𝑬 = −𝑪𝑲 (𝒆𝒄. 𝟏𝟑)
𝝆 𝑿𝟏
malla de la distribución
granulométrica, la ecuación 8 sería: La ecuación 13 en forma diferencial sería:

𝟔𝝀 𝚫𝝓 𝒅𝑬 𝟏
𝑬 = 𝑲𝒓 ( ∑ = −𝑪𝑹 ( ) (𝒆𝒄. 𝟏𝟒)
𝝆 𝑿𝟐 𝒅𝑿 𝑿
𝟔𝝀 𝚫𝝓 Solucionando la ecuación diferencial,
− ∑ ) (𝒆𝒄. 𝟗) llegamos a la ley de Kick (ec. 15).
𝝆 𝑿𝟏
Reescribiendo la ecuación 9 en términos de 𝑿𝟏
𝑬 = 𝑪𝒌 𝒍𝒏 ( ) (𝒆𝒄. 𝟏𝟓)
las propiedades medias, quedaría: 𝑿𝟐
𝑬 = 𝑲𝒓 (𝑨𝑾𝟐 − 𝑨𝑾𝟏 ) Esta proposición es irreal en muchos casos
para predecir la energía necesaria para
𝑬 = 𝑲𝒓 𝚫𝑺 (ec. 10) reducir una partícula de un tamaño inicial
La ecuación 10 es la que se conoce como la a un tamaño final, ya que si la relación de
ley de Rittinger. Sin embargo, la energía diámetros se conserva para un mismo
requerida es 200 – 300 veces mayor a la material la energía necesaria para reducirlo
requerida para la formación de nueva área sería la misma y se sabe que mientras más
superficial. pequeño es el tamaño inicial de la partícula,
la energía necesaria para reducir su tamaño
es mayor.
Kick (1885) basado en la teoría de la
deformación plástica dijo: la energía
requerida para la reducción de tamaño es Desviaciones de las leyes de Rittinger y
directamente proporcional a la relación de Kick.
volúmenes de la partícula de entrada y la
partícula de salida. Esta relación de
volúmenes la podemos escribir así: Las desviaciones que presentan en la
práctica ambas leyes se deben a lo
𝑲𝒗𝑿𝟑𝟏 𝑿𝟏 siguiente:
∝ (𝒆𝒄. 𝟏𝟏)
𝑲𝒗𝑿𝟑𝟐 𝑿𝟐 a) Se partía del principio de que la
La relación de diámetros determina los desintegración produce productos de igual
requerimientos energéticos para pasar de forma que los iniciales (isostenia), es decir,
un diámetro a otro. que al desintegrar partículas de forma
cúbica se producían cubitos o si se partía de
esferas se producían esferitas. Este
principio, lo cual no es válido.

8

b) Se suponía que los materiales son
isótropos (igual resistencia en todas
direcciones (anisotropía).
c) No se consideraba que los productos a
desintegrar pueden tener grietas
superficiales (lugares donde se comienza a
desintegrar el material sin consumo de
energía).
d) No se tuvieron en cuenta ni las
deformaciones elásticas, ni que el producto
se mueve dentro de la máquina, lo que
produce rozamientos calor del material,
etc.
e) No se consideraba que la materia ya
molida amortigua el golpe de la maquina
contra la materia aun no molida.
Surgimiento de la teoría de Bond.
Luego de las discrepancias surgidas y
publicadas en relación a las teorías de
Rittinger y Kick, el Ingeniero Fred C.
Bond, convencido que el principio de
Rittinger era obvio y evidente, investigó
durante muchos años buscando
demostrar que la teoría de Rittinger era
correcta.
Antiguamente no existían métodos de
comparación de eficiencias de trabajo o
diferencias entre máquinas de
trituración y molienda y su
comportamiento con diferente tamaño
y distinta alimentación que pudieran
ser comparados, por lo que Bond
comenzó a probar otras posibles
relaciones, aparte de las de Rittinger y
Kick.
Entre aquellos intentos estaba el de la
raíz cuadrada del diámetro de la
partícula. Desde el principio, los
resultados con esta relación fueron
espectaculares. Cifras que
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anteriormente parecían tener poco
significado aparecían ahora de forma
consistente. Le pareció que, por fin,
había hecho un descubrimiento aunque
no coincidía ni con Rittinger ni con
Kick.
Durante unos tres años intentó y
comprobó la relación d en todos los
caminos posibles. Era generalmente
consistente el principio, incluso cuando
se empleaban aproximaciones de
distribución del tamaño de la partícula.
Finalmente estableció el empleo del
tamaño del 80% del material que pasara
una malla, como un criterio práctico de
finura que podía ser obtenido de un
análisis de tamaño. Encontró que los
datos de laboratorio concordaban con
los de la planta, lo cual no sucedía con
ninguna otra relación.
Sin embargo, analizaba Bond, la
relación de la raíz cuadrada del
diámetro tenía que tener algún
significado físico, puesto que aparecía
como fundamental en la ley actual de la
trituración y molienda.
Las relaciones de Rittinger y Kick
tenían ambas una respuesta de
significado físico para su formulación,
pero a pesar de ello no estaban de
acuerdo con su actual postulado.
Un poco más adelante se demostró que
el término d , aunque había sido
descubierto de una manera
completamente empírica acoplando y
cotejando datos, expresaba la longitud
de fisura del material roto.
9

Bond estaba convencido por aquel
tiempo que la energía empleada en la
reducción de tamaño, no variaba a
medida que se creaba área, y la nueva
relación mostraba que esta energía
variaba con la raíz cuadrada del área de
la superficie, la cual tenía
correspondencia con la longitud de las
nuevas fisuras formadas en la rotura.
Esto fue suficiente para una posible
explicación física de la relación
numérica encontrada y probada.
Quedaba todavía un aspecto pendiente:
la relación entre la alimentación y el
producto. Parecía obvio que el trabajo
realizado en el proceso de reducción de
tamaño, fuera expresado por la energía
potencial del producto obtenido menos
la energía potencial de la alimentación,
aunque este principio fue
menospreciado.
La relación fue finalmente formulada
en estos términos:
10Wi 10Wi
E  (ec.16)
P F
Dónde:
E = kilovatios-hora por tonelada corta
F = micrones, 80% de la alimentación
que pasa una malla determinada
P = micrones, 80% del producto que
pasa una malla determinada
Wi = índice de trabajo, kilovatios-hora
requeridos para moler una tonelada
(corta) de tamaño teóricamente infinito
de alimentación hasta que el 80% pase
por una malla de 100 micrones.
La anterior relación fue presentada por
primera vez en una reunión del
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Instituto Americano de Ingenieros
Civiles en Ciudad de México en octubre
de 1951. Fue todo un éxito y el premio
a la culminación de 20 años de trabajo
del Ingeniero Bond en un problema
físico recalcitrante.
Esta teoría tiene una amplia aplicación
sobre todos los problemas de
trituración y molienda. En cientos de
ejemplos ha dado resultados que son
completamente correctos dentro de la
precisión que permiten los datos de los
cuales se dispone. Es una herramienta
muy útil para el cálculo de procesos de
trituración y molienda en instalaciones
nuevas y para la evaluación de las
eficiencias relativas de procesos en
instalaciones ya existentes.
Algunos aspectos acerca de los
factores de la Teoría de Bond
Los tamaños de alimentación y
producto F y P pueden ser obtenidos de
forma muy precisa mediante análisis
granulométricos practicados a la
entrada y salida del proceso de
trituración o molienda.
Reducción de tamaño en una cantera
El índice de trabajo es una constante fija
del material a tratar. Numéricamente,
los kilovatios-hora requeridos para
reducir una tonelada corta desde un
tamaño de alimentación teóricamente
infinito, a un tamaño tal que el 80% pase
una abertura de malla cuadrada de 100
micrones, pueden ser determinados por
varios tipos de tests de trituración y
molienda, de los que se derivan el
tamaño del motor y de la máquina.
10

Las eficiencias relativas de las
operaciones de las diferentes
instalaciones varían inversamente
según los valores de los índices de
trabajo calculados. La comparación del
trabajo operativo de la planta con el
valor del test de laboratorio indica la
eficiencia relativa del proceso, y la
comparación del índice de trabajo de las
diferentes máquinas en una misma
planta indica cuál de las máquinas es
más eficiente.
Si los índices de trabajo en los procesos
de la planta son calculados para cada
día o para cada turno, la eficiencia
puede ser mejorada ostensiblemente.
La expresión para calcular los valores
del índice de trabajo de la planta es la
siguiente:
E indica que el trabajo requerido varía
Wi  (ec.17)
 
 10 10 
 1  
 1  según la raíz cuadrada de la nueva área
 P F
Esta ecuación contiene cuatro términos
y con frecuencia es muy útil para
calcular el tamaño esperado del
producto:
2
 10Wi F 
P    (ec.18)

 E F  10Wi 
En los problemas de trituración y
molienda el circuito completo de
reducción debería ser más que una
simple máquina de reducción. Si un
molino trabaja en circuito cerrado con
un clasificador, éste debe ser
considerado como una parte integral
del conjunto de reducción. El tamaño
Operaciones con Sólidos, d4
2018-1, UdeA
de alimentación utilizado en la
ecuación debe ser aquel que supone el
total de la nueva alimentación del
circuito, ya sea al molino o al
clasificador, y el tamaño del producto
deberá ser el del clasificador.
La tercera ley, o Teoría de Bond, fue
formulado bajo tres principios básicos:
el primer principio de la relación de la
energía con el efecto de la trituración (es
decir, la variación de tamaño) es que la
energía requerida para un proceso
determinado es la diferencia de las
energías asociadas al producto y la
alimentación, respectivamente.
El segundo principio se refiere a que la
energía total requerida varía
inversamente con la raíz cuadrada del
diámetro de las partículas de la
alimentación y del producto. Esto
directamente según la longitud de
rotura producida en el material, o
de superficie producida.
Antes que una roca sea rota, esta es
deformada por la aplicación de presión
rápida o lenta. El esfuerzo de
deformación impone sobre la roca una
tirantez, y el trabajo efectuado es el
producto de la fuerza de compresión
por la distancia de la deformación.
Parte de esta deformación se encuentra
en la tensión.
Toda roca es una estructura
extremadamente compleja, tanto en la
conformación de la superficie como en
la configuración de las roturas
parciales, zonas de debilidad, y
deformaciones en capa. Cuando la
11
 Operaciones con Sólidos, d4
2018-1, UdeA

fuerza de tensión presiona en cualquier El tercer principio es pues que la rotura

localización, generalmente en la de la roca depende de la estructura de
superficie o cerca de ella, excede la fatiga extremadamente variada de la
tensión de rotura de la zona de roca misma.
debilidad y en aquel punto la roca falla
y revienta en diferentes formas. Los valores utilizados anteriormente
Inmediatamente después la fuerza de son para unidades específicas, por lo
fatiga cerca de aquella área se concentra tanto la ecuación se Bond se puede
en la punta del trozo partido, y es escribir así:
consecuentemente extendido a la
hendidura de la roca. La formación y 1 1
𝐸 = 𝑌𝑊𝑖 ( − ) (𝑒𝑐. 19)
extensión de la punta de la rotura √𝑋2 √𝑋1
rompe generalmente el equilibrio de la
fuerza de fatiga a través de la roca, y se Las unidades de cada uno de los
forman con ello nuevas puntas factores que intervienen en la ecuación
secundarias adicionales que se 19 para diferentes unidades las
extienden por toda la roca hasta podemos observar en la tabla siguiente
reventarla.
E Y Wi X
Muchos de estos puntos secundarios de

rotura se inician en la intersección de la KWh/Tonc 10 KWh/Tonc
punta primaria de rotura con una zona m
de debilidad que constituye una región Cvmin/Ton 0.81 Cvmin/Ton
potencial a romperse. Cuanto más m
c 5 c
quebradiza es la roca, más extensivo es
el sistema secundario de rotura hpmin/Ton hpmin/Ton
formado y mayor es la rotura de la 1.46 Ft
c c
misma. En una roca quebradiza el
límite elástico de deformación y el
punto de fallo o rotura son casi La ecuación 19, también se puede
idénticos. escribir en forma diferencial, así:
𝑑𝐸 1
= −𝐶𝑅 ( 3 ) (𝑒𝑐. 20)
La mayoría de las rocas son 𝑑𝑋 𝑋 ⁄2
extremadamente heterogéneas en la
composición de su resistencia a la Holmes (1957) y Hukki (1962)
fatiga, y el mecanismo de rotura observaron que las ecuaciones 7, 14 y 19
descrito anteriormente, puede dar una se pueden escribir en la forma
ligera idea de lo complicado que es. diferencial:
Cualquier análisis matemático
completo de la rotura de una roca de 𝑑𝐸
= −𝐶𝑋 𝑛 (𝑒𝑐. 21)
forma irregular y de estructura interna 𝑑𝑋
heterogénea, asimismo, supone una
gran complejidad en su desarrollo. Para
Rittinger, n = -2; C = CR

12

Kick, n = -1; C = CK
Bond, n = -3/2; C = CB
Observación interesante ya que cada
ley fue determinada en forma empírica
y en épocas diferentes.
Los estudiosos del estas leyes han
llegado a la conclusión que la ley de
Rittinger se aproxima más a la realidad
cuando se trabaja con partículas
pequeñas, que son más elásticas y
dúctiles, mientras que la ley de Kick se
aproxima más a la realidad cuando
trabajamos con partículas grandes y
quebradizas (frágiles). La ley de Bond
es un intermedio entre las dos
anteriores.
Para calcular el índice de trabajo de
Bond mediante un ensayo normalizado
de laboratorio, se puede utilizar la
siguiente expresión (ec. 21):
44.5
𝑊𝑖 =
10 10
𝑃0.23 + 𝐺𝑏𝑝0.82 ( − ) 𝑒𝑛𝑒𝑟𝑔í𝑎 𝑎𝑏𝑠𝑜𝑟𝑏𝑖𝑑𝑎 𝑝𝑜𝑟 𝑒𝑙 𝑚𝑎𝑡𝑒𝑟𝑖𝑎𝑙
√𝑋2 √𝑋1
Dónde:
Wi: índice de trabajo de Bond
(Kwh/Tonc).
P: malla referencia (m).
Gbp: cantidad de finos producidos por
revolución (g).
X2: abertura de la malla por donde pasa
el 80% (m) del producto del molino.
X1: abertura de la malla por donde pasa
el 80% (m) del alimento del molino.
Operaciones con Sólidos, d4
2018-1, UdeA
Ejemplo de aplicación: si para reducir de
tamaño un material que inicialmente
estaba con un diámetro de 6 cm hasta
un diámetro de 3 cm se requieren 25
Kcal/ton, cuanta energía se requerirá
para reducir de tamaño el mismo
material desde un diámetro de 7 cm a
un diámetro de 2 cm?
Eficiencias de las operaciones de
reducción de tamaño.
La eficiencia de las operaciones de
reducción de tamaño se puede
determinar respecto a la energía
necesaria para reducir de tamaño un
material o respecto a la energía total
entregada al sistema.
Eficiencia de trituración
Esta eficiencia hace referencia solo a la
energía suministrada al sistema para
reducir de tamaño un material.
𝑒𝑛𝑒𝑟𝑔í𝑎 𝑛𝑒𝑐𝑒𝑠𝑎𝑟𝑖𝑎 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑐𝑟𝑒𝑎𝑟 𝑛𝑢𝑒𝑣𝑎 á𝑟𝑒𝑎
𝜂𝑡 =
Eficiencia global o del proceso
Esta eficiencia se refiere a la potencia
total suministrada al sistema de
reducción de tamaño.
Sabiendo que las leyes dan el valor de
energía en términos de la masa y que:
Entonces el valor de energía encontrado
con las leyes lo podemos pasar a
13
 Operaciones con Sólidos, d4
2018-1, UdeA

potencia multiplicándolo por el flujo de

entrada al molino.

Capacidad de un molino (Ton/hora)

14
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2017-1, UdeA

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