UN LLAMADO A NO OLVIDAR

La edad del apóstol y su preocupación.

Estos son los últimos días del poderoso apóstol Pedro algunos creen que en estos
momentos tenia alrededor de 75 años y este anciano tenia una tremenda preocupación.
Quería que los creyentes no olvidaran. Cuando los años se vienen uno comienza a pensar en
muchas cosas, en su seguridad, en su muerte y en su legado. Estas no son cosas que piensen
los jóvenes. Sino que son cosas que se piensan al final de la vida. El quería que los
cristianos no se olvidaran. En estos momentos ya no es el impetuoso Pedro, sino que es el
cauteloso Pedro. El versículo 12 parece hablar con cuidado. No quería que sus lectores lo
mal interpretaran así que con cuidado les dice:
12
Por esto, yo no dejaré de recordaros siempre estas cosas, aunque vosotros las sepáis, y estéis
confirmados en la verdad (que está presente en vosotros) presente.

El sabía que los lectores ya estaban confirmados en su fe y que ellos sabían las cosas. La
palabra confirmados es la palabra griega STERIZO. Que significa fortalecer o estar firme.
Pero quería que no se olvidaran. Y es que, uno de los problemas que afectan ala iglesia hoy,
no es que los creyentes no sepan lo que Dios espera de ellos, sino que se olvidan (1:9) o no
estaban dispuestos a vivir de acuerdo a la verdad que ya conocen.

13 Pues tengo por justo, en tanto que estoy en este cuerpo, el despertaros (estimularos recordándoos
(Biblia de las Américas, tengo la obligación de refrescarles la memoria NVI) con amonestación;
14
sabiendo que en breve debo abandonar el cuerpo, como nuestro Señor Jesucristo me ha declarado.
15 También yo procuraré con diligencia que después de mi partida vosotros podáis en todo
momento tener memoria de estas cosas.

Pedro compara si vida con la de un tabernáculo 1 P. 1:1, 17; 2 P. 2:11. Algunos piensan que el Señor
le declaró a Pedro como iba a ser su muerte. Así que el tiempo de desarmar la tienda estaba cercano
pero había un deber que debía cumplir hasta el final. “15 También yo procuraré con diligencia que
después de mi partida vosotros podáis en todo momento tener memoria de estas cosas”
¿Cómo iba a lograr el apóstol esto?

16 Porque no os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo
fábulas artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad.

17 Pues cuando él recibió de Dios Padre honra y gloria, le fue enviada desde la magnífica gloria una
voz que decía: Este es mi Hijo amado, en el cual tengo complacencia. 18Y nosotros oímos esta voz
enviada del cielo, cuando estábamos con él en el monte santo.

19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a
una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga
en vuestros corazones; 20entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de
interpretación privada, 21porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los
santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.