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Clase N° 2
Los textos con los que vamos a trabajar ahora están ordenados por criterio,
por autor, por orientación epistémica, para mí fueron textos nuevos que
estudié con mucho entusiasmo, y reencontré muchísimo más a Lacan en
estos textos que en Miller, García, Mazzuca, Rabinovich, etc. Por ejemplo,
nunca vi tan bien trabajado “sujeto de la enunciación”, justamente porque
sujeto de la enunciación es un concepto del análisis de discurso.
Che vuoi?
enunciación
enunciado
Decidí empezar por Teun A. Van Dijk, quien es una de las dos o tres máximas
personalidades del análisis de discurso en el mundo en la actualidad. Dos
comentarios de un libro que es “El discurso como estructura y proceso”.
¿Cómo sienten este título? Estructura es algo que ya teníamos. Y “proceso”,
¿no es “de un Otro al otro”? Me parece que las coincidencias son
sorprendentes. Lo primero a destacar de este autor es que propone que el
análisis de discurso es una ciencia transdiciplinaria. Y en esto coinciden
todos los autores y me parece que es un concepto para empezar a pensar.
El fin del Siglo XX en ciencias humanas lleva un concepto bastante
sorprendente, que es el de ciencias transdiciplinarias, que prácticamente es
casi como una contradicción en los términos, ya que sería una ciencia entre
ciencias. Y de este libro destaco que Van Dijk plantea que el lenguaje o
discurso hablado y el lenguaje o discurso escrito, son dos modalidades del
discurso. ¿Ustedes toman nota de lo que habla un paciente? ¿Por qué se
toman notas? Porque no se trabaja con la idea de que son dos modalidades
distintas: se cree que discurso es palabra y que con la letra se fija la palabra,
se ancla la palabra. Y hay que ver que es así, o si se está cambiando la
modalidad y entonces ya no sería así. No digo que así sea, digo que me
parece que ha llegado la hora de que los psicoanalistas pensemos en esto.
Del segundo libro de Van Dijk, “Estructuras y funciones del discurso”, ahí
plantea algo que para mí fue una noticia bárbara porque eran buenas nuevas.
La mala noticia era que no podía creer que yo fuera tan bruto. Porque ahí
hace la historia de la lingüística y dice que hasta el ’60 fue la lingüística
estructural, que hasta el ‘68/’70, fue la lingüística generativa transformacional
chomskiana que dejó de ser paradigma dominante. Para mí es una
excelente noticia de la que no me había enterado. ¿Ustedes sabían? ¿No
creían que la generativa transformacional de Chomsky seguía siendo el
paradigma dominante en lingüística y que nosotros seguíamos perdiendo el
partido? Pues no es más paradigma. Ahí es cuando viene el momento de la
pragmática. Y desde el ‘64/65, análisis de discurso. Para Van Dijk, el
momento inaugural a partir del cual existe la disciplina análisis de discurso,
es 1964.
1
Van Dijk, Teun A.: Estructura y funciones del discurso. Siglo XXI (1978) p. 20.
“Es decir, una gramática sólo puede describir textos, y por lo tanto sólo da una
aproximación de las verdaderas estructuras empíricas de discursos emitidos.2
“Nótese que en esta última cláusula está implícito que hay todavía una diferencia
entre un discurso como tipo y una emisión discursiva como ocurrencia. Sólo esta
última es un “evento” empírico inmediato en un contexto particular y único.3
Entonces tenemos que a su vez discurso puede ser usado como tipo de
discurso, pero ya es una elaboración; o el evento discurso que como tal no
puede ser de ningún tipo, ya que tipo de discurso es una interpretación del
evento. No existe el “discurso analítico”, solamente hay discursos, en tanto
fenómenos observacionales. Decir “discurso analítico” es el producto de una
interpretación.
Con lo cual: diván, diploma de psicólogo, tipo con barbita, judío, libreta, una
mujer histérica que llora, eso no es discurso analítico. Ahí solamente habría
discurso. Será por interpretación que se dirá si eso es discurso analítico, de
amo, histérico, etc.
“Un texto, por otra parte, es más abstracto, un constructo teórico de los varios
componentes analizados en la gramática y en otros estudios discursivos. No sólo
tiene estructura “gramatical” (narrativa, por ejemplo) y otras clases de estructura
que la lingüística actual no puede explicar.5
transdiciplinar
2
Ibid.
3
Ibid.
4
Ibid.
5
Ibid. p. 21
discurso
texto
transdiciplinar
discurso
¿psicoanálisis?
texto
transdiciplinar
Psicoanálisis
discurso
texto
El psicoanálisis ha perdido desde los años ‘50/’60 casi todas sus temáticas y
se los voy a demostrar, porque todas ellas fueron conquistadas por el análisis
de discurso. Por ejemplo, para el análisis de discurso, todo texto es
producido en transferencia. ¿Podría haber pragmática sin transferencia?
¿Qué decía la lingüística? La lingüística trabajaba una oración, y sobre esa
oración trabajaba cómo operaba sobre el significado y cómo operaba con el
referente. ¿Qué dice la pragmática? Que si alguien dice algo, lo dice para
hacer algo con eso que dice respecto de alguien, o sea, ya es en
transferencia. Para la pragmática no hay un decir que no sea en
transferencia. Es decir que, a partir del año ’65 aproximadamente, la posición
que nosotros caracterizamos como tan novedosa del psicoanálisis, pasó a
Van Dijk propone –y son utilizadas prácticamente por todos los autores- tres
macrorreglas para la interpretación de discursos y son las siguientes:
supresión, generalización y construcción. Si no es represión, interpretación y
construcción… ustedes me dirán. Y son autores que no leen a Freud, no lo
citan jamás, no les interesa, es un muerto, un cadáver vienés; Lacan no
existió o en todo caso fue un loco soberbio y nada más. No crean que estos
autores estén influenciados por el psicoanálisis. Si el psicoanálisis fue el
relevo del médico en cierto momento del malestar en Occidente, les advierto
que, para mí, el análisis de discurso es el relevo de la caída del psicoanalista.
1. Supresión:
Dada una secuencia de proposiciones, se suprimen todas las que no sean
presuposiciones de las proposiciones subsiguientes de la secuencia.6
2. Generalización:
Dada una secuencia de proposiciones, se hace una proposición que contenga un
concepto derivado de los conceptos de la secuencia de proposiciones, y la
proposición así construida sustituye a la secuencia original.7
3. Construcción:
Dada una secuencia de proposiciones, se hace una proposición que denote el
mismo hecho denotado por la totalidad de la secuencia de proposiciones, y se
sustituye la secuencia original por la nueva proposición.8
“En las pláticas anteriores sostuvimos que las oraciones no deben estudiarse
aisladamente sino en relación a las demás oraciones de un discurso. Hemos
demostrado que el acento, la entonación, las estructuras sintácticas y sobre todo el
significado, y la referencia deben analizarse en relación a las estructuras de las
secuencias y del discurso como un todo.
Ahora queremos dar otro paso adelante y argüir que tampoco la emisión, cuya
estructura textual ya describimos, debe analizarse “aisladamente”. Las emisiones se
6
Ibid. p. 48
7
Ibid.
8
Ibid.
Quiere decir que si uno trabaja con la noción de discurso, tiene que
establecer dónde va a poner el corte, corte que va a fundar el discurso como
un todo, ya que solamente el discurso como un todo es lo que permitirá leer
las oraciones.
El famoso corte de sesión breve, lacaniano, que es típico en nuestra práctica,
¿qué busca hacer? Producir un efecto nuevo de sentido. Eso es el canon, lo
que decimos todos todo el tiempo. En función de qué, ¿para qué? De una
oración que hemos escuchado y que a la “atención flotante” del analista le
resultó sorprendente. Ahora, ¿es válido leer una oración fuera de discurso?
Las oraciones, ¿valen per se? ¿Es verdad que las oraciones valgan per se?
La interpretación en la práctica analítica, ¿qué posibilidades de existencia
tiene? Por ejemplo, ustedes, ¿tienden o no a dejar que transcurran bastantes
entrevistas antes de hablar y decir algo más o menos jugado al paciente? ¿O
interpretan de primera mano? ¿Dejan pasar varias entrevistas? ¿Por qué?
Para que hable, sí, pero dejar que hable no cura a nadie. Hablar no es nada,
ni siquiera es un concepto, no estamos trabajando con “hablar”, estamos
trabajando con discurso. Discurso es una unidad. El corte debe producir
algo, una unidad que sea de discurso. ¿Qué virtud tiene producir ese corte
que genera esa unidad? Que es el contexto en el cual se pueden leer las
oraciones que están implicadas adentro. Dejamos pasar un montón de
entrevistas antes de intervenir, porque estamos tratando de establecer el
contexto. Siempre cuento el mismo chiste: “Me voy a separar” le dice un
amigo al otro. Y el amigo le responde “¡Por fin, hacés bien, te engaña desde
hace años!”. Y el primero aclara: “No, de mi socio, me voy a separar de mi
socio…” ¿Qué pasó? El amigo interpretó en función de la oración sin saber
siquiera de lo que el otro estaba hablando. ¿Qué le faltó? ¡El contexto
discursivo! Te vas a separar de quién, por qué, para qué me lo contás a mí,
etc. Todo eso, en el sistema freudiano no entra, ¿por qué? Porque en el
sistema freudiano el decir solamente es una expresión de los contenidos
interiores, es como un oráculo, como una bocca di leone pero funcionando al
revés: en lugar de tragarse los mensajes, es una boca de la cual salen
mensajes, y el analista, como una pitonisa, interpreta eso que sale, que son
frases. Pero habría que ver si justamente nuestra práctica no está invalidada
si la entendemos como una práctica de interpretar oraciones. Si nosotros
interpretamos oraciones, si es así como interpretamos, me parece que ni
siquiera tenemos pensado el problema de por qué los psicoanálisis son tan
largos.
¿Por qué son tan largos los análisis? “Por el goce, o sea, la fijación libidinal,
o sea, la pulsión, o sea, el cuerpo”. Pero si sacamos el cuerpo y aceptamos
que no todo lo que pasa en el mundo sea por el cuerpo biológico, si no
explicamos todo con el goce y el cuerpo, la pregunta sería ¿por qué dura
tanto un análisis? ¿Se han hecho esta pregunta alguna vez? Me parece que
ha llegado la hora de que nos lo preguntemos, porque todos nuestros
enemigos se quejan de eso. Todos nuestros enemigos, la primera queja que
9
Ibid. p. 58
Edith Tage Muler: te hago una pregunta, vos esto ¿lo estás criticando?
Porque por un lado hay una lógica en contextulizar para poder armar el
discurso, para poder hacer una intervención; pero por otro lado, los enemigos
dicen ¿Por qué tanto tiempo? Entonces, ¿ellos dicen cualquier cosa, o son
más vivos que los analistas que necesitan tanto tiempo para armar el
discurso?
A.E.: ni tanto, ni tanto, lo que digo es que cuando ellos nos dicen que
tardamos mucho, la pregunta es qué pensamos nosotros de nuestros 10, 12,
15 años de análisis. ¿No creen que llegó la hora de pensarlo? Freud,
cuando llegó al primer tratamiento de 10 años se preguntó por qué diablos
tardó tanto. Eso sucedió en 1902. Ahora, los análisis duran 20 ó 30 años y
nosotros ni nos preguntamos. Una razón de por qué se tarda tanto podría ser
porque algunos análisis no van a ningún lugar, son los fracasos. Pero los
buenos análisis, los que concluyen… supongamos que hubiera un análisis
que llegue a buen puerto, y que haya habido cura de la neurosis –
supongámoslo también. ¿Por qué habitualmente no dura 3, 6, ó 10 meses?
Si se tratara de una oración…
Yo he escuchado a analistas decir que ellos escuchan la fórmula del
fantasma en la primera entrevista… ¿y por qué esos análisis duran 15 años
entonces? Me da la impresión de que el análisis de discurso empieza a
brindarnos herramientas para poder empezar a pensar estos problemas.
Porque si para nosotros se trata de una práctica del análisis de una oración,
tras otra oración, tras otra oración, no contamos con ninguna lógica para
pensar el problema.
Lacan es un autor de los pocos que hizo un hincapié muy fuerte en el análisis
finito y en un cambio radical de posición de quien termina un análisis y
adviene como tal el analista. Ese corte, ¿cómo es posible de ser pensado?
Si uno escuchase un testimonio de pase, ¿qué tendría que escuchar? Mi
impresión es que ahora contamos con una noción que nos permite pensar
qué se podría escuchar: un discurso. Y sería la unidad mayor que englobaría
a todos los decires. Pero nosotros no teníamos hasta ahora cómo pensar el
conjunto de los decires, ya que para nosotros era uno, luego otro, luego otro,
luego otro.
En esta comodidad de no pensar el problema, la dirección de la cura quedó
dicha como “que siga hablando”. Pero que la dirección de la cura sea “que
siga hablando” me parece una estafa de la peor índole, porque la gente habla
sin análisis. La gente habla hasta por los codos y me parece que hasta habla
más fuera del análisis que en el análisis. Con lo cual, la dirección de la cura
jamás podría ser “que siga hablando”. La gente habla, no son mudos.
Entonces, me parece que con discurso comenzamos a tener una noción que
nos empieza a permitir trabajar tanto con unidades mayores de la oración, en
coherencia discursiva –que en Freud no la hay. ¿Cuál es el esquema de la
organización discursiva en Freud? La red de neuronas bien investidas del
“Proyecto…”, ¿recuerdan? El punto 14 del “Proyecto…”, como una red 10.
Con una red que tiene esta forma, arborificada, ¿se puede armar un
discurso? No, porque es asintótica en todos los sentidos, siempre podrá
continuar. Por eso los análisis tienden a infinitarse, porque hoy dice una
cosa, yo interpreto otra, mañana dice otra cosa, yo le interpreto otra… ¿Por
qué esa interpretación? “Porque se me ocurrió, no sé de dónde lo saqué…”
es la típica “posición analítica”. Siempre se puede seguir diciendo algo, pero
¿todo sirve? Me parece que hay una forma ahora de poder pensarlo, hay un
concepto para poder pensarlo, más aún, nos dice que el discurso es una
unidad englobante de oraciones que puede ser leída según distintas
disciplinas. Y entonces podríamos pensar si alguna de esas disciplinas
pudiese ser pensada como analítica o no.
“…es decir, dando cuenta del hecho de que el discurso es usado, como acción, en los
procesos de la comunicación.12
“Es obvio que una teoría del discurso no sería completa sin una explicación de las
funciones sociales del discurso en la comunicación.13
ustedes, ¿cómo toman “discurso del amo”? En “discurso del amo”, el “del” es
la conjunción de “de” y “el” y está entonces en juego el “de” genitivo. ¿En
qué forma hay que entender el genitivo? El “discurso del amo”, ¿en qué
sentido? Me parece que el “discurso del analista” hay que tomarlo como
aquello que caracteriza al analista. Con lo cual, Lacan produjo una tipología
de discursos que caracteriza al analista, al universitario, a la histérica y al
amo. Esas son funciones sociales. Quizás entonces, lo que hizo Lacan fue
una tipología de las funciones sociales del discurso en la comunicación. O
quizás sea una tipología de las funciones sociales del discurso no en la
comunicación sino, por ejemplo, respecto del saber. Quizás Lacan podría
estar produciendo una tipología de discursos en función de establecer cuáles
son las funciones sociales en relación al saber: hay amo, hay profesor, hay
histérica y hay analista, que serían las cuatro funciones sociales.
“En muchos sentidos tal explicación debe ser la base de una seria teoría del discurso,
dada la afirmación trivial de que la lengua, el uso de la lengua y el discurso son
fenómenos sociales14.
¿Escucharon lo que para Van Dijk es trivial? “Trivial” se usa muchas veces en
ciencia para referirse a lo obvio, lo prácticamente evidente. La lengua, el uso
de la lengua y el discurso son fenómenos sociales. Sin embargo, para el
psicoanalista no son fenómenos sociales. Para el psicoanalista, la lengua y
el uso de la lengua son la expresión que hace alguien de sus contenidos
interiores en la sesión analítica, a la sanfasón. En la sesión analítica se
considera que ni siquiera le habla a alguien. Observen que ahí hay un
problema muy fuerte y es que para el psicoanalista la lengua no es una
función social.
El libro de Van Dijk que estoy recomendando son conferencias que tienen
agregados atrás, un anexo de 1980 y un anexo del año 2005. Con lo cual, él
retoma esas conferencias tan prematuras que dio y presenta el estado de la
disciplina 10 y 30 años después. En el anexo del 2005 dice así:
Otra idea que es importante pensar: el discurso no tiene plural, no hay plural
de discurso, lo que hay es tipos de discurso. Pero el fenómeno discurso es
un único fenómeno. Es difícil pensarlo, pero es interesante.
“Discurso versus oración. El discurso constituye una unidad lingüística formada por
una sucesión de oraciones. (…)
Discurso versus lengua:
1) la lengua definida como sistema de valores virtuales se opone al discurso, al uso
de la lengua en un contexto particular que filtra estos valores y puede suscitar otros
nuevos. Estamos muy cerca de la oposición saussuriana lengua/habla…18
un valor en plus y Lacan piensa esta función con la plusvalía: valor en plus.
¿Recuerdan qué decía Marx respecto del capitalismo? ¿Estaba a favor o en
contra? A favor, ya que era algo a ser superado. De ninguna manera Marx
suponía que el capitalismo fuera peor que el feudalismo. El capitalismo,
según Marx, debía ser superado para que sus beneficios se repartieran entre
todos y se repartieran de manera justa. Porque ¿qué sucede en el
capitalismo? Que ese plus de valor que las máquinas son capaces de
producir se lo roban unos a otros. Lo que dice Marx es que eso debe
repartirse entre todos, especialmente con los que la producen: devolver la
plusvalía al obrero. El objeto a, es plus. Es un plus, no un minus. Pero en el
lacanismo leído a la freudiana, siempre se entiende como si fuera un minus,
como una pérdida.
discurso
S1 S2 (A)
$ a
resto de esta operatoria, que nunca es negativo
“El análisis del discurso es, en efecto, una disciplina situada en un punto de cruce: el
discurso integra por un lado dimensiones sociológicas, psicológicas,
antropológicas…, y por el otro se encuentra en el corazón mismo de estas
disciplinas…”19
“Situado en el punto de cruce de las ciencias humanas, el análisis del discurso es muy
inestable. Existen analistas del discurso más bien sociólogos, otros más bien
lingüistas, otros más bien psicólogos.”21
“Es posible distinguir, no obstante, algunos grandes polos: 1) los trabajos que
inscriben el discurso en el marco de la interacción social; 2) los trabajos que
privilegian el estudio de las situaciones de comunicación lingüística, y por lo tanto el
estudio de los géneros de discurso; 3) los trabajos que articulan los funcionamientos
discursivos según las condiciones de producción de conocimientos o según
posicionamientos ideológicos; 4) los trabajos que ponen en primer plano la
organización textual o la detección de marcas de enunciación.22
Les hago una pregunta: ¿qué surgió primero? ¿El discurso psicoanalítico o
los cuatro discursos? Al discurso psicoanalítico Lacan lo produce en el
Seminario 16 y los cuatro discursos en el 17. Con lo cual, podríamos pensar
que los cuatro discursos son el marco para pensar el discurso psicoanalítico,
no las relaciones sociales.
“…3) los trabajos que articulan los funcionamientos discursivos según las
condiciones de producción de conocimientos”, me parece que a esto sí
corresponden los cuatro discursos de Lacan. Por ejemplo, ¿cuál es la
función del discurso histérico? Introducir el saber, son las formas de producir
conocimiento. ¿Y el discurso del amo? Robar el plus producido por el
esclavo. ¿El universitario? La forma de concebir mediante el dominio del
saber la producción de estudiantes. Para Lacan hay plusvalía en la posición
del estudiante.
M→ →A
discurso amo discurso analítico
→
↑ ↓
←
discurso analítico. Les advierto que es muy razonable. Habrán visto que
Lacan articuló esta función de amo al inconsciente. Habría que ver si no será
psicoanalítico partir del supuesto de que a esta función S 1 se le supone un
sujeto. Quizás la posición analítica sea que a ese saber (S 1) se le supone un
sujeto ($). Entonces, quizás los cuatro discursos no tipifiquen a los discursos
en general –cosa que ya sabemos que es imposible desde el análisis de
discurso. El discurso es un fenómeno, y los tipos de discurso son todas las
clasificaciones que ese fenómeno pueda recibir, que necesariamente serán
múltiples, porque discurso es un punto de entrecruzamiento de todas las
ciencias humanas, que ahora pasan a ser perspectivas del análisis de
discurso: sociológicas, psicológicas, antropológicas, psicoanalíticas, etc. Si
hubiese una que fuera psicoanalítica, entonces podríamos decir que habido
discurso, el psicoanálisis postula que desde la posición… les había
preguntado por el genitivo, ¿recuerdan? Cuando decimos “discurso del amo”
¿estamos hablando de algo que posee el amo o de algo que tipifica al amo?
Cuando decimos “el burro del herrero”, que es el ejemplo del diccionario,
¿qué estamos queriendo decir, que el herrero es un arado, un animal, o que
él posee un burro? Es el problema del genitivo, que puede ser objetivo o
subjetivo. Cuando decimos “discurso del amo” ¿qué estamos diciendo? Que
tipifica al amo, no que el amo posee un discurso. Sería ridículo suponer que
alguien poseyera un discurso, ya que un discurso es algo que nadie puede
poseer. Lamentablemente, todavía en psicoanálisis se puede suponer que
alguien posee un inconsciente, esa barbaridad se puede decir, pero es
imposible suponer que alguien posea un discurso. Porque el discurso es una
de aquellas cosas que no puede estar sino “entre”, no son de la índole del
“Uno”.
Cuando decimos “discurso del analista” o “discurso analítico”, ahí hay una
sorpresa. Porque cuando se dice “no hay análisis” respecto de un caso, por
ejemplo, si pensamos en la entrada en análisis en función de una decisión
que queremos tomar, por ejemplo, el uso del diván, se puede sostener que el
pasaje a diván es una función derivada de un diagnóstico de un estado de
situación que sea la entrada en análisis. ¿Estamos de acuerdo en eso? Bien.
Y supongamos que decimos que no, que no hay análisis, cuando decimos
eso, ¿de quién creemos fundamentalmente que estamos hablando? Del
paciente. Con lo cual, nosotros tendemos a decir que hay o no análisis en
función del paciente. Hay que ver qué demanda, puede demandar
psicoterapia, apoyo, ayuda. Entonces, cuando decimos “discurso analítico”
¿qué estamos diciendo? Cómo se posiciona el analista. Con lo cual,
“discurso del amo” es del analista. ¿Qué significa? Significa suponer para
esta dialéctica [S1→S2], esta función [$] y calcular este resultado [a], pero ya
es hecho desde el analista. El discurso-amo es la operatoria del inconsciente,
o sea, “vengo a verlo porque estoy todo el día que pongo la piedra y que saco
la piedra”. “¿Y por qué lo hace?”, “No tengo ni la menor idea”. O: “me siento
culpable porque creo haber matado a mi padre”, un caso de Freud. “Ah, y su
padre ¿cuándo murió?”, “No, mi padre vive…”, “Ah, y entonces por qué se
siente culpable de haberlo matado si está vivo?”, “¡Es por eso que vengo a
verlo! No sé por qué pienso eso.” ¿Por qué piensa eso? ¿Cómo lo diría la
persona? “Se me impone”. Entonces, hay una función de dominio. ¿Cómo
“La cura tiene que ir en el sentido de que el individuo se pregunte acerca de lo que le
ocurre, cómo reacciona consigo mismo y con los otros.
y joderse. Porque si no, ¿para qué hacerlo responsable? Si hay que hacerse
responsable es por alguna que uno se mandó, por la renuncia al deseo. Pero
uno, ¿por qué renunció al deseo? Para evitarse el sufrimiento. “Con lo cual,
si usted no quiere pagar por un lado, tendrá que pagar por el otro.” ¿Ven el
discurso yoico? Aunque se lo llame “sujeto”… se refieren a un individuo.
Más aún, podría ser algo que como lo supone uno, se lo puede ofrecer al otro
para que el otro también lo suponga. Se le puede ofrecer al paciente la
suposición del sujeto. “¿Y si supusiésemos que eso querría decir algo, qué
podría querer decir eso?”, “No sé”, “Ya sé que no sabe, pero trabajemos
juntos a ver si podemos calcular, por contexto, qué podría querer decir eso.”
Si podemos calcular lo que quiere decir, también podríamos calcular quién lo
está diciendo y a quién se lo podría estar diciendo. Quizás fueron personas,
o no, quizás fueron instituciones de adopción donde esta persona se crió.
Pero entiendan que se trata de una posición que uno asume. Con lo cual,
discurso del amo no es ni histórico ni tipifica todo tipo de discurso, sino que
una vez producido el discurso psicoanalítico… Yo creo que el Seminario 16
requiere de un punto de partida que es “supongamos que hay discurso
psicoanalítico”, es condición sine qua non, porque no está demostrado que
haya una forma de pensar a los discursos tipificados de tal manera que en
esa tipificación uno sea dicho “discurso analítico”, que es el que sostiene el
analista. De ser así, ¿cuáles serían los otros de ese? ¿Se entiende cómo
empezó Lacan? Lacan llegó a que hay discurso psicoanalítico. ¿Y por qué
dijo discurso psicoanalítico? Porque la ciencia para pensar las
conversaciones, el sujeto de la enunciación, los enunciados, los significantes,
las referencias, etc. es el discurso. Entonces Lacan dijo que hay discurso
psicoanalítico. Pero si lo hay, ese discurso, al ser discurso está dentro de un
contexto. ¿Cuáles son los discursos que le hacen de contexto al discurso
psicoanalítico? Y Lacan dice que necesariamente tiene que ser el punto de
arranque: “me pasa algo que no quiero que me pase y no puedo evitar que
me pase”, podríamos decir que es un comienzo por impotencia. Pero si uno
está impotente frente a eso, eso ¿cómo es respecto de uno? Más potente,
me domina, función de dominancia. Depende de cómo nosotros nos
posicionemos frente a esa posición de dominancia… porque una posición
podría ser la de enseñarle al paciente, como la terapia cognitivo-conductual,
donde le explican al paciente que lo que les pasa es por esto, esto y lo otro, y
para salir del problema tendrá que hacer esto, esto y esto otro. El terapeuta
cognitivo sabe, porque para enseñar tiene que saber.
Ahora, si la posición en cambio es la de suponer un sujeto, podría ser que yo
tampoco sepa cuál es el asunto en juego acá. De hecho, si lo supongo es
porque no lo conozco. Con lo cual, me parece que efectivamente hay
“discurso de la ciencia”, Lacan lo dice muchas veces, Lacan dice muchas
veces discurso y dice que hay discurso de todo: discurso de Freud, “mi
discurso” (el de Lacan), ¿el discurso de Lacan sería un tipo de discurso?
Lacan utiliza discurso como cualquiera de nosotros, para todo. Pero
producido el discurso psicoanalítico, que es poner al psicoanálisis en función
asociada y derivada de las ciencias del discurso, ahí entonces podemos
empezar a pensar otra lógica. Y es cómo se produce una elucubración de
saber en el seno de la práctica analítica, que indique el recorrido de un
análisis. Pero me parece que con el discurso de la ciencia no nos metemos.
Les aclaro que no es tan claro que cuando Lacan dice discurso del amo no
sea: a) Aristóteles, Sócrates y Platón, o b) el amo de Hegel. De hecho, Lacan
habla de los dos. Más aún, ¿quién fue el filósofo que elevó a categoría
determinante la posición del saber en la dialéctica humana? Hegel. Es más
complejo de lo que yo lo digo, pero que sea más complejo me parece que
puede ser pensado así: Lacan no pudo leer el Diccionario de análisis del
discurso. ¿Por qué? Porque él lo hizo simultáneamente, en los mismos años.
El análisis de discurso como disciplina surge dos años antes de que Lacan
produjera el discurso analítico. Pero me parece que los cuatro discursos no
permiten hacer la maniobra propuesta como pregunta: que el discurso de la
histeria sea discurso de la ciencia. Me parece que la histeria, o la histérica –
yo prefiero “histeria”, pero Lacan dijo “histérica”, con género femenino- me
parece que está todo analizado desde la perspectiva del discurso analítico,
que es el primer paso dado por Lacan, porque es lo único que nos da
coherencia. Lo demás no tiene ninguna coherencia, habría que decir
respecto de lo demás que a Lacan se le ocurrió, probó, pero no clasifica a la
sociedad, no organiza siquiera todos los campos del saber. Por ejemplo, el
saber del chamán. Cuando uno lleva a la hija enurética a la bruja y la bruja
nos manda a calentar un ladrillo y ponerlo debajo de la cama; si le
preguntáramos cómo sabe ella que eso funciona ¿qué nos dice? “Yo lo sé y
no preguntes”. Hay otros tipos de saber que producen bastantes efectos…
mano a mano, la bruja y el psicoanalista, a efectos sumables, ¿quién gana?
La bruja, lejos. Quiere decir que hay otras modalidades de saber, y hay otras
modalidades en las que el saber produce efectos también. Nosotros estamos
trabajando con un determinado concepto de saber. ¿Cuál? El saber no
sabido.
eso cuando viene un paciente que dice que no se acuerda de nada ¿no
podemos hacer nada? ¿Qué le decimos cuando viene así? “Quédese
tranquilo, que lo que haga falta que venga, va a venir, tarde o temprano va a
venir”. Eso es una suposición, porque ya supone el saber ahí. Es un
posicionamiento.
“En lingüística, esta noción puesta en primer plano por G. Guillaume experimentó un
desarrollo fulgurante con la declinación del estructuralismo y el ascenso de las
corrientes pragmáticas.”24
Enunciación. Para nosotros es un paso dado por Lacan que el sujeto del
inconsciente sea el sujeto de la enunciación, ¿verdad? La noción con la que
Lacan opera de sujeto del inconsciente, y aclaremos algo: no puede ser
freudiana, porque Freud no supone un sujeto, Freud sabe que todos tienen
un inconsciente con determinados contenidos, Freud no supone un sujeto.
Freud sabe que hay un inconsciente con contenidos y con deseos. Los dos
elementos, el saber y el deseo, que nosotros suponemos, Freud los da
adentro de alguien pero no supuesto sino sabido. ¿Queda clara esta
diferencia? Bien. Lacan articula el inconsciente de Freud a la noción de
sujeto. Me parece que lo hizo para desresponsabilizar. Habrán visto que
todo el psicoanálisis moderno va hacia la responsabilización, que el sujeto se
haga responsable. Seminario 17, pág. 81 de la edición en español, habla de
Freud. Cito a Lacan:
Me parece que hay una tensión permanente entre el Lacan no-freudiano, que
es el Lacan que se articula a las ciencias lingüísticas de su época, y nuestra
posición tan psicoanalítica-freudiana. Porque efectivamente, por ejemplo, de
las intervenciones de Freud de los historiales freudianos, que son un desastre
todas ellas, Freud mismo lo admite, hay una que es especialmente
desastrosa que es la dirección de la cura del caso Dora. Los lacanianos
aman la intervención de Freud que dice “Qué lugar ocupa usted en aquello de
lo que se queja”. Imagínense que ustedes atiendan a una chica de 17 años a
la cual su padre la intercambia con su amigote para encamarse con la esposa
del amigote… ¡es para los diarios, mínimo! Mucha gente se ríe de Dora,
como si no le hubiera pasado nada. ¡El padre la entrega al amigo para que el
amigo le entregue su esposa a él! Si recibieran a una chica así en la
consulta, y en la primera de cambios le dijeran: “¿Y vos qué culpa tenés en
todo esto, eh? Con esa minifalda… ¡Bien que te gusta el Sr. K!” ¡Es de locos!
24
Maingueneau, D. y Charaudeau P. Diccionario de análisis de discurso. Buenos Aires: Amorrortu. p. 179
25
Lacan, J. El Seminario. Libro 17. Buenos Aires: Paidós. 1992. pp. 81-82 [el subrayado es mío]
“La idea que puede hacerse de la enunciación oscila entre una concepción discursiva
y otra lingüística. Si se insiste sobre la enunciación como acontecimiento producido
en un tipo de contexto, así se lo aprehenda en la multiplicidad de sus dimensiones
sociales y psicológicas, se estará operando más bien del lado del discurso. Pero la
enunciación puede ser considerada también en un marco estrictamente lingüístico,
como conjunto de operaciones constitutivas de un enunciado, “conjunto de actos que
efectúa el sujeto hablante para construir, en un enunciado, un conjunto de
representaciones comunicables.””26
“Esto induce a O. Ducrot (1984, pág. 179) a definir la enunciación como “el
acontecimiento constituido por la aparición de un enunciado”, es decir, a
considerarla independientemente de todo autor.”28
Enunciador:
“Noción central para toda especie de lingüística y para todo análisis del discurso
inscriptos en el enfoque enunciativo. Tiene siempre un valor inestable, según las
relaciones que mantenga con nociones próximas como las de locutor, sujeto hablante
o punto de vista.”30
Les leo otra cosa: “Fuegos del Sur. Revista de psicoanálisis”. Ya con ese
título… Año 2, enero 2005, N° 23:
“La grieta en el Otro podría haber sido el título de este trabajo, pero para poder
hablar de la grieta en el Otro, quién mejor que el poeta”.
Cuando uno hace análisis de discurso, lo primero que tiene que preguntarse
es qué dice ese discurso. Y lo segundo que hay que preguntar es quién lo
dice.
Terminamos con esto:
“Las dificultades que promueve la noción de enunciador son insparables de las que
suscita todo aquello que gira alrededor de la subjetividad hablante.”31
“En efecto, a esta subjetividad se le asigna una variedad de estatutos: los de sujeto
productor efectivo del enunciado, sujeto organizador del decir, sujeto responsable del
acto de lenguaje, sujeto fuente de punto de visa, sujeto punto de origen de las
localizaciones deícticas, sujeto opuesto a otro sujeto en la alteridad fundadora del
intercambio lingüístico…”32
30
Ibid. p. 215
31
Ibid. p. 215
32
Ibid. pp.215-216
Les advierto que me parece que hoy, si el psicoanálisis llevó cierta delantera
en la interpretación de textos y discursos en la sociedad occidental, hoy
hemos perdido totalmente esa posición, ya hay otras disciplinas que han
hecho nuestro relevo y del sujeto de la enunciación ya no nos hacemos más
cargo nosotros. Se están haciendo cargo otros que ni siquiera admiten que
nosotros seamos quienes también participamos de esta lógica.
33
Ibid. p. 216
34
Ibid.
35
Ibid.