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ESTADO DE TABASCO

El nombre se originó por ser el lugar donde convergen las


actividades socioeconómicas y políticas, y porque el municipio se
encuentra situado en la parte central de la entidad.
Tabasco (Speaker Icon.svg escuchar) es uno de los treinta y un
estados que, junto con la Ciudad de México, forman los Estados
Unidos Mexicanos. Su capital y ciudad más poblada es
Villahermosa.
Está ubicado en la región sureste del país, limitando al norte con el
golfo de México (océano Atlántico), al este con Campeche, al sureste con
Guatemala, al sur con Chiapas y al oeste con Veracruz.34 Con 24,738 km² es el
octavo estado menos extenso —por delante de Estado de México, Hidalgo,
Querétaro, Colima, Aguascalientes, Morelos y Tlaxcala, el menos extenso—. Fue
fundado el 7 de febrero de 1824.
Escudo
Es el mismo que identifica al estado.
Reseña Histórica
Debido a la creciente pobreza, epidemias, y sobre todo a los continuos ataques de
los piratas ingleses posesionados de la isla del Carmen, la mayoría de los habitantes
de la villa de Santa María de la Victoria, fundada por el conquistador Hernán Cortés
en la desembocadura del río Grijalva en lo que hoy es el municipio de Centla,
decidieron abandonar ésta y buscar tierra adentro un sitio más seguro para
asentarse; así el 24 de junio de 1557, llegaron al pequeño caserío de pescadores
denominado Tres Lomas, ubicado en la margen izquierda del río Grijalva, donde
fundaron una nueva población con el nombre de San Juan Bautista de Tabasco.
En 1564, Diego de Quijada, alcalde mayor de Yucatán, Cozumel y Tabasco, trazó y
dio posesión oficial de las tierras de este nuevo asentamiento al que denominó como
villa de Carmona a semejanza de su lugar natal en Andalucía. El trazo comprendía
a las actuales calles de Madero, Reforma, Lerdo y otras del centro de la ciudad,
incluyendo la plaza principal o plaza de armas donde se construyó la primera iglesia.
Hacia 1596-1598 el rey de España Felipe II, aprobó la fundación denominándola
villa Hermosa de San Juan Bautista y le otorgó el escudo de armas que hasta la
fecha identifica al estado de Tabasco.
No obstante que Santa María de la Victoria, siguió siendo oficialmente la capital de
la provincia, villa Hermosa se había convertido en un centro comercial más seguro y
el principal puerto de Tabasco. Los pocos españoles que permanecían en la
fundación cortesiana, hartos del saqueo y los desmanes de los piratas, solicitaron a
la corona española a principios del siglo XVII, el traslado de los poderes de la
provincia a villa Hermosa.
Aprobada esta petición, el 24 de junio de 1641 se realizó el traslado de los poderes.
La nueva sede del gobierno colonial fue llamada villa de San Juan Bautista de
Villahermosa.
Con los últimos colonos mariavictorianos llegó a San Juan Bautista la imagen de la
Virgen de la Victoria, máximo símbolo religioso de la primera fundación española en
tierras continentales de América que ahora llegaba su fin; esa imagen había sido
venerada por los conquistadores luego de vencer a los nativos tabasqueños en la
histórica batalla de Centla en marzo de 1519.
Una de las primeras construcciones que ordenó el alcalde mayor Simón Rodríguez,
fue el fortín de La Encarnación en lo que hoy es el parque de Los Pajaritos (esquina
de las calles 5 de Mayo y Zaragoza), para resguardar los intereses reales de los
ataques de los corsarios ingleses que seguían incursionando en las costas del golfo.
A principios de 1677, la villa de San Juan de Villahermosa fue atacada y saqueada
por los piratas por lo que la sede del gobierno colonial fue trasladada al distrito de La
Sierra, permaneciendo en Tacotalpa más de un siglo.
Luego de la firma del Plan de Iguala donde se reconoce la Independencia de México
el 24 de febrero de 1821, del general Antonio López de Santa Anna, comandante en
jefe de la 11ª. división del ejército libertador de Alvarado, Veracruz, comisionó al
capitán Juan Nepomuceno Mantecón Almonte para libertar a los tabasqueños del
gobierno español. La acción desarrollada por el ejército independentista no encontró
trabas en el camino a la capital tabasqueña, pues la guarnición del gobierno colonial
había huido a la villa del Carmen, Campeche, de modo que el 7 de septiembre hizo
su entrada triunfal a Villahermosa, ocupando los cuarteles nuevo y viejo, y la plaza
de la Constitución donde se juró la Independencia de México. Juan Nepomuceno
quedó al frente del gobierno y convocó en noviembre de ese mismo año, a elegir el
ayuntamiento de la capital, conforme a la Constitución de 1812.
Hasta entonces, la provincia de Tabasco dependía políticamente de Yucatán, por lo
que se propuso al Congreso Constituyente que Tabasco tuviese diputación
provincial, siendo aceptada la petición el 22 de noviembre de 1822.
Considerando que en Villahermosa se localizaban las autoridades, la cultura y el
comercio, por decreto del Congreso, el 4 de noviembre de 1826 la capital de Tabasco
se elevó a la categoría de ciudad con el nombre de San Juan Bautista.
Desde el inicio de la Independencia, la lucha por el poder desencadenó una serie
de batallas que tuvieron como escenario principal la capital del estado. Aunado a los
conflictos políticos llegaron las devastadoras enfermedades epidémicas como el
cólera morbus, el sarampión y la viruela, que diezmaron la población sanjuanense;
varios de esos episodios fueron descritos con gran realismo por el famoso viajero
Federico Maximiliano Barón de Waldeck, quien se quedó atrapado en esta capital al
imponerse un cordón sanitario que evitaría la propagación del cólera hacia otras
partes del país; Waldeck fue testigo asimismo de un sangriento combate en San
Juan Bautista entre federalistas y centralistas, episodio ganado por los primeros y
que se conoce en la historia como la “guerra de los Maldonado”.
Un ataque mal calculado por las fuerzas republicanas tabasqueñas al mando del
capitán Lorenzo Prats, dejó sin protección a Jonuta, lo que fue aprovechado por los
intervencionistas para tomarla y desde ahí comenzar el avance hacia la capital
tabasqueña.
Uno de los colaboradores franceses fue el cubano Eduardo González Arévalo, quien
al frente de un contingente formado por mercenarios mexicanos y martinicos, se
enfiló hacia Jonuta con la finalidad de lograr adeptos para la causa francesa. De esta
localidad situada a orillas del caudaloso río Usumacinta y a bordo de un vapor, se
dirigió a San Juan Bautista, ciudad a la que abrió fuego el 18 de junio de 1863.
La supremacía bélica de los invasores se impuso luego de un nutrido combate que
duró alrededor de 8 horas. Las diezmadas tropas defensoras tuvieron que replegarse
hacia la Sierra y la Chontalpa, dejando la capital en manos de los franco traidores.
Al conocerse la noticia de la toma de San Juan Bautista por las fuerzas
intervencionistas francesas, en la villa de Cárdenas se levantó en armas el coronel
Andrés Sánchez Magallanes y en Comalcalco, Gregorio Méndez Magaña, quienes
junto con Lino Merino Marcín en la región de la Sierra y los hermanos Eusebio y
Cornelio Castillo Zamudio en Jalapa y Pichucalco, se dieron a la tarea de reorganizar
las fuerzas republicanas para combatir al invasor.
La victoria republicana en el Jahuactal, Cunduacán, el 1º. de noviembre de 1863,
fue el estímulo para la lucha por la recuperación de la capital del estado. El coronel
Gregorio Méndez luego de reunificar las fuerzas liberales y hostilizar con tácticas de
guerra de guerrillas a los invasores, emprendió la marcha hacia San Juan Bautista.
La batalla fue difícil teniendo que pelearse casa por casa, calle por calle y manzana
por manzana de la ciudad; fueron días en extremo difíciles, pero el valor de los
defensores mexicanos excedió al de los intervencionistas, de tal manera que el 27
de febrero de 1864 lograron expulsar la escuadra francesa y a sus aliados de la
capital del estado de Tabasco.
Hacia 1870 dos partidos, los radicales y los progresistas se disputaban el poder, a
lo largo de más de una década, estos grupos escenificaron en San Juan Bautista
una serie de enfrentamientos armados que mantenían en zozobra la población de la
capital.
Durante los primeros años del régimen porfirista continuó la inestabilidad política en
Tabasco; hubo sublevaciones y revueltas que impidieron su pacificación; sin
embargo, pudieron llevase a cabo obras de interés, como la introducción del
alumbrado eléctrico, la instalación de una línea telegráfica y varias vías férreas; así
también se dio gran impulso a la educación.
El 3 de febrero de 1916 siendo gobernador el general Francisco J. Múgica, desde la
villa de Teapa expide el decreto 111, con el que restituye a la capital del estado su
antiguo nombre de Villahermosa, como hasta la fecha se le conoce.
El 27 de febrero de 1917 se proclama en Villahermosa la nueva Constitución Política
de la República, y el 10 de marzo de 1919, toma la protesta como primer Gobernador
Constitucional al general Carlos Greene Ramírez.
Luego de una balacera en el Congreso donde murieron varios diputados y
funcionarios del gobierno estatal, el Senado de la República declaró desaparecidos
los poderes el estado y el gobernador Greene junto con el presidente municipal de
Centro fueron aprehendidos y llevados presos a la Ciudad de México.
En 1924, durante la llamada rebelión delahuertista, Villahermosa fue un importante
bastión de este movimiento; durante los 6 meses que ésta ciudad estuvo en manos
de los rebeldes, la población fue testigo de un sinnúmero de asesinatos políticos, la
escalada sangrienta se prolongaría más allá de la rebelión sin cabeza, a lo largo del
período conocido como el garridismo donde se gestó el movimiento anticlerical más
radical que haya padecido Tabasco. Una balacera en la céntrica calle Juárez de
Villahermosa que costó la vida a varios jóvenes estudiantes marcó el fin de esta
etapa al desconocerse los poderes del estado en 1936.
En 1956 el poeta y etnólogo Carlos Pellicer fundó en Villahermosa el museo de La
Venta con las más importantes piezas colosales de la cultura olmeca; ese mismo
año, el presidente Adolfo Ruiz Cortinez inauguró la carretera circuito del golfo que
une a Villahermosa con el resto del país.
Durante el gobierno de Carlos A. Madrazo Becerra, la capital del estado avanzó
como nunca antes en materia de urbanización; fue construido el malecón de la
ciudad con lo que el problema de las inundaciones que se padecían anualmente se
redujo a las áreas suburbanas; la ciudad se embelleció con monumentos, jardines,
parques, avenidas, fuentes, se construyó la ciudad deportiva y la universitaria;
Villahermosa recibió un impulso para situarse entre las más modernas y pujantes del
país.
A partir de 1970 el desarrollo de la industria petrolera nacional generó un impacto
inesperado en la ciudad de Villahermosa que en unos cuantos años empezó a verse
rebasada por su desmesurada población que exigía más y mejores servicios. Al
finalizar esa década se inició la construcción del complejo urbanístico Tabasco 2000,
que marcaría el inicio de un nuevo rostro para la capital tabasqueña.
A partir de entonces, Villahermosa ha logrado un desarrollo urbanístico inusitado;
los servicios con que cuenta la colocan a la vanguardia en la región sureste del país
de la que es puerta de entrada, y es una eficiente prestadora de servicios.
Festividades
Desfile de carros alegóricos, un evento de la Feria Tabasco.
La presentación de las embajadoras de los 17 municipios da inicio a los eventos de
preferia.
Participantes en la danza del Pochó durante el Carnaval de Tenosique.
Feria Tabasco
La fiesta más importante del estado es la Feria Tabasco que se realiza entre los
meses de abril y mayo; y cuyos primeros antecedentes datan de 1786 y ya más en
forma desde 1880, siendo instituida oficialmente en 1928 por el exgobernador Tomás
Garrido Canabal. Esta festividad es de tipo comercial, turística, artística e industrial.
Desde 1953 se realiza también, en conjunto con las exposiciones, el Baile de
Embajadoras; en el cual 17 muchachas (las embajadoras) representan a sendos
municipios en una competencia por el título de la Flor más Bella de Tabasco. Durante
la feria, se celebra un desfile de carros alegóricos por las calles de Villahermosa,
cada carro se adorna con motivos alusivos a los municipios y en ellos, las
embajadoras pasean por la ciudad ataviadas con trajes típicos. Lo mismo sucedía
sobre las aguas del Grijalva, donde se realiza el desfile de los barcos alegóricos
igualmente adornadas frente al malecón de Villahermosa.
La Feria Tabasco, tiene una duración de 10 días y recibió en el 2016 en total más de
dos millones de visitantes, lo que la coloca entre las tres más importantes del país
por el número de visitantes, expositores y atracciones.85
Festival Cultural Ceiba
En 2003 se instituyó el Festival Cultural Ceiba, que tiene como propósito la difusión
de la cultura y las Bellas Artes dentro del estado, así como la promoción de la
producción artística local hacia el resto del país.
El festival, se realiza cada año entre los meses de octubre y noviembre y cuenta con
la presencia de artistas y grupos teatrales tanto de México como de otros países
invitados. Dentro del evento, el Gobierno del Estado entrega la presea Savia del
Edén a personalidades destacadas en el ámbito cultural nacional e internacional.
Carnaval de Villahermosa
En Villahermosa se celebra año tras año antes del miércoles de ceniza el Carnaval
Villahermosa, en el que se realizan desfiles infantiles y de adultos, donde
encontramos comparsas de fantasía y de disfraz, carros alegóricos y un sin fin de
actividades, y que cuenta con la participación de comparsas provenientes de algunos
estados de la región como Veracruz, Campeche y Yucatán.
Carnaval de Tenosique
El mayor atractivo de la ciudad de Tenosique de Pino Suárez lo constituye su
Carnaval, al que sus habitantes consideran «el más raro del mundo» ya que tiene
raíces prehispánicas, y es el más famoso del estado. Se realiza desde finales de
enero hasta el Miércoles de Ceniza. Durante la festividad, los habitantes se avientan
harina y después presencian la famosa danza del Pochó. El Carnaval de Tenosique,
atrae no solo a turistas de la capital del estado y municipios cercanos, sino también
a personas de estados vecinos, quienes abarrotan los cuartos de los hoteles
existentes en la ciudad.
Festival de la ciudad de Villahermosa
El 24 de junio Villahermosa celebra el aniversario de su fundación, ya que
antiguamente era conocida como San Juan Bautista, y por este motivo, se lleva a
cabo durante el mes de junio, uno de los eventos culturales y artísticos más
destacados desde el año 2001 Festival de la Ciudad Villahermosa, que incluye
exposiciones fotográficas, conferencias, mesas redondas, eventos musicales y
artísticos con talento regional como internacional y se desarrolla en diferentes
recintos de la ciudad.
Indumentaria típica
El traje regional femenino: consta de una blusa blanca de cuello ovalado hasta los
hombros, lleva en los bordes de escote y mangas una tira bordada en punto de cruz
con motivos florales, sobre todo tulipanes (hibiscus rosa-sinensis) (flor representativa
del estado) y colores alegres sobre fondo oscuro. La falda es
amplia y terminada en olán muy plegado; adornada con motivos
florales (traje típico casual), en pie de falda del traje de gala que
puede ser blanca o azul se destacan o notan cuatro cintas de
colores (rojo, verde, amarillo y azul) cuyo significado hace tributo
a las cuatro regiones que dividen al estado; azul: región de los
ríos, rojo: región del centro, verde: región de la sierra, y amarillo:
región de la chontalpa. Se usan, como accesorios del vestuario,
un paliacate o pañuelo rojo colgado de la cintura; un rebozo de
color vivo en combinación con el de la falda; zapatos negros,
cerrados, de tacón bajo. El peinado es recogido hacia atrás en un moño adornado
por un lado con dos flores de tulipán una roja y la otra en color amarillo, y por el otro,
con cuatro peinetas de los colores de las regiones.
El traje regional masculino: sencillo, se compone de camisa y
pantalón blancos, botines y cinturón negros y un sombrero
chontal, de paja con cuatro picos. Lleva un pañuelo o paliacate
rojo al cuello. Adicionalmente, se incluyen un morral, un
machete al cinto y una cantimplora (o bush) llena de pozol
(bebida típica a base de maíz y cacao); los cuales se utilizan en
las faenas diarias en el campo.
Artesanías
La expresión creadora de los artesanos tabasqueños de hoy proviene de la cultura
olmeca y de la cultura maya, quienes se establecieron en esta región.
Esta larga tradición de cerámica, escultura, tejido y labrado
se ha desarrollado con mucha intensidad, preservando la
memoria histórica del arte decorativo tabasqueño.
Destacan en la elaboración de artesanías los
siguientes municipios:
Nacajuca.- Las artesanías se elaboran principalmente en las comunidades
chontales de Tapotzingo, Arroyo, Tecoluta, Tucta,
Mazateupa y Taxco; una multitud de artículos de uso y
ornato, como petates, sombreros, abanicos, escobas,
canastos, cortinas, gorras, bolsos de mano, tiras bordadas,
adornos diversos de guano y joloche pintado, máscaras de
madera, cayucos en miniatura, así como también objetos de
cerámica y barro, flautas y tambores de diversos tamaños.
Centla y Tenosique.- En estos municipios se elaboran diversos artículos con pieles
exóticas de manatí, lagarto, peces víbora, tiburón, mono, iguana y ganado vacuno.
Los artículos más producidos son cinturones, bolsos de mano, billeteras, etc.
Jalpa de Méndez.- Se distingue por el labrado a mano de jícaras y la elaboración de
diversos objetos de alfarería.
Tacotalpa.- Desarrolla la elaboración de muebles y numerosos objetos de mimbre
(matusay) y canastos de bejuco.
Jalapa.- Principalmente se tallan cayucos en miniatura.
Centro.- Se trabaja el tallado de madera y hueso, los pirograbados y numerosos
objetos de alfarería, cerámica rústica, utilitaria y decorativa, pintada a mano; labrado
de hueso de pescado y de toro; se trabaja la piel de pescado. Se elaboran también
bushes y coladores.
Tenosique.- Se tallan máscaras de madera y se realizan figuras de joloche (hoja del
elote).
En casi todo el estado se utiliza la madera para fabricar cayucos, bateas y canaletes;
en cerámica: apastes, comales, ollas, tinajas, cajetes, sahumerios, incenciarios y
juguetería. Con fibras naturales de guano, jolotzín, cañita, carrizo, junco y bejuco se
elaboran bolsos de mano, sombreros, petates, cojines, mecapales, lámparas,
canastos y abanicos; estos trabajos ponen de manifiesto lo variado y valioso de la
artesanía tabasqueña.
Gastronomía
El pejelagarto asado, un platillo típico de la cocina tabasqueña.
Tradicionales tamales tabasqueños, envueltos en hoja de plátano.
La cocina regional tabasqueña es variada y extensa gracias a las antiguas recetas
mayas y chontales, a la gran cantidad de vegetales, frutas y animales existentes en
la entidad, así como a las plantas o hierbas (achiote, chaya, muste, perejil, epazote,
cilantro, chipilín, chile amashito, hoja de plátano o de tó) que le dan delicioso y
singular olor, color y sabor a los guisos típicos de la región.
Se caracteriza por la utilización de ingredientes y especies propios del estado y que
son difíciles de encontrar en las mesas de otros estados del país, incluso en las
regiones colindantes. En el acervo culinario tabasqueño destacan recetas como las
de tortuga en sangre, tortuga en verde, iguana al chirmol, pejelagarto asado, tamales
de chipilín y la bebida popular más conocida: el pozol, hecho a base de masa de
maíz y cacao; el cual es, a pesar de ser una bebida, la base de la alimentación de
los tabasqueños. Pozol con cacao, chorote, pozol blanco, o sea sin cacao, se puede
beber fresco (recién molido) o agrio (dejar la mezcla de cacao y masa unos 8 días
para que se fermente), esta bebida es la que caracteriza a los tabasqueños.
Al emblemático pejelagarto se le unen otras especies locales, como la hicotea y el
pochitoque, ambas tortugas; el armadillo y la iguana; cada uno de los cuales sirve
para preparar un platillo típico.
Sin embargo en la actualidad la caza, pesca, venta y consumo de especies como la
hicotea, pochitoque, iguana y armadillo, está prohibida por la ley ya que se
encuentran en la lista de especies en peligro de extinción.

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