Filosofia de la ciencia
por Jost Diez
Las leyes en ciencia
Las leyes cientificas hacen referencia a regularidades naturales no accidentales.
¢Dénde radica su necesidad?
“Fiza aero nabamos detos
(conceptos eientificns. La clencia usa
Jos concaptos para deseribir hechos par-
ticularesyformularTeyes. Por empl, he-
‘eos partiulares son los que quedan des
crits por entinciados eomo «Venus sigue
tuna trayeetoriaelipticay o «Bsta barra de
Ilgrro se ha dilatado al exlentarseo. Pero,
si Ta ciencia solo hiciese afirmaciones
particulares, no ser‘a muy interesante:
selimitarfa a elaborarlstados de fenome-
nos. La ciencia ace algo més: formula hi-
patesisy eyes las cuales combina después
‘en conjunts mas amplins o teorias. Ast,
‘con los conceptos de fuerza, masa y dss
taneia se formula la ley de la gravitacion
de Newton, F= Gry
En ocasiones se sala palabra hips.
tesis para referirse a las conjeturas
‘in no confirmadas, mientras que
se reserva el término ley para las
‘que ya lo estén. También cabe
distinguir entre el enunciado
legaliforme, esto es, la form
Tacion lingtistica de Ta ley, y el
contenido 0 hecho que sucede en.
Tanaturaleza y que queda descrito
porese enunciado. Para simpliticar,
no tendremos en cuenta aqui estas
distinciones.
Heehas estas precisiones, podemos
preguntarnos: équé es una ley? La des-
cripel6n de la trayectoria de Venus no
cenuneia una le, sino un hecho particu-
Jar, En cambio, enuncladas como ley de
sravitaci6n, (1) «Los planetas se mueven
en trayectorias elipticas con el Sol en uno
de sus foeas 0 (2) «Los metales se dila-
tan al calentarse> sf expresan leves. Las
Jeyes corresponden a cierto tipa de hectios
senerales, expresados mediante enuicia-
dos también generates de la forma «dios
Jos... son.» «A todos los... sometidos a
Jes suoede..»,eleétera.
aor qué decimos que las eyes corres-
ponden a hechos generales «de cierto
tipo»? Porque no toda regularidad es una
ley natural. Por ejemplo, (3) «Ningin
{58 INVESTIGACION Y CIENCIA, mayo 2016.
soltero esta easado», (4) «Todo trigngulo
tiene res laos», (9) «Todas las monedas
que tengo ahora en mi bolsillo derecho
som doradas» 0 (6) «Siempre que muere
tmave, después nace un mamffer> expre-
san hechos generale, Pero, a diferencia
de Cy @), no correspondien a leyes. La
‘diferencia reside en. que los hechos ge-
nerales deelarados en (1) y (2) contienen
cierta clase de necesita natural, mientras
que el esto, o bien no contienen ninguna
neeesidad, como sucede en (5) y (6), 0 la
que encierran no es una necesidad de la
naturaleza, como oeurre en (3) ¥ (4).
Los emuneiados (6) y (6) refieren he-
hos generales que no suceden necesa-
riamente. Suceden, por asi decitlo, por
casualidad: no hay ninguna conexi6n
necesaria entre el antecedente y el con-
secuente, Las monedas que tengo abort
nmi bolsilio son de hecho doradas, pero
podsfan no serlo. Yes un hecho que, tras
‘mori un ave, siempre nave un mamifero,
pero podfa no sueeder asi (hastarfa con
(que se extingulesen los mamtferos). Se
‘rata de regularidades aceidentales, ea
rentes de necesidad. Por otro lado, en (8)
¥en (4) sf se da una conexidn necesaria
‘etre antecedente y consecuente, pero esa
nnecesidad no es natural, sino linghstica:
der oer deta dela
‘iene noi de oreo
su verdad se deriva de To que significan
Jas palabras. Decimos en estos casos que
se trata de verdades anatiticas, semaine
eas 0 conceptuate; su negneion es una
‘contradiecién conceptual
Si volvemos a (1) y (2), veremos que,
aunque no se trata de enunciados acci-
‘entelmente verdaderos, sino nevesarise
‘mente yerdaderos, tampoco son analitica:
‘mente verdaderas. Las palabras planeta,
trayeetoria,eipseyfoco podria significar
Jo mismo y, si el mundo fuese diferente,
(1) podefa ser falsa, Es decir, las negacion
nes de (1) (2) no son contradicciones
toneepluales. De hecho, signiicando lo
isto esus palabras, durante siglos se
Denso que los planetas se comportaban
de otra manera. Ast pues, aunque se
‘ata de generalizaciones necessria-
‘mente verdaderas, no son anallti-
ceamente verdaderas, sino nomo-
igicarnente (de nomos, ey en
sriego) verdaderas. Son leyes de
Ja naturaleza; necesarias en vir
tud de cbmo es esta.
€COmo reconocer que una Be
neralizaeién verdadera es una ley?
1 rasgo principal de las generaliza~
ciones analiticamente verdaderas es
relativamente sencillode entender: basta
con saber el significado de tas palabras
para reeonocer su verdad. Pero (1) y (2)
1 sou ast; se puede entender fo que d=
con sin saber si son verdaderas 0 no, E80
facilta Ta distincién entre tas leyes ¥ las
regularidades analiticas, Pero Zeémo di-
fereneiarlas de las regularidades acciden-
tales? £Cémo saber sun enuneiado como
‘Todos los esnes son blancos» se refiere
‘uma ley o@ un accidente?
‘Aunque se trata de una euestiOn com
pleja, hay algunos rasgos que, inuitiva-
mente, distinguen laley natural de a ge
neralizacion accidental, Dos de ellos som
la capacidad predictiva y la capacidad
explieativa.
Si estamos dispuestos a predecit nue-
vos casos sobre la base de casos anterio-103, entonees es que consideramos que la
-generalizacién n0 es casual, sino nomol6-
‘ica. Supongaros que todas las monedas
{que tengo ahora en mi bolsilio derecho
son doradas. éApostaria el leetor a que
Ja préxima que introduzea en mi bolsllo
también ser dorada? Sila respuesta es
negativa, ¢s porque considera que dicha
regularidad es accidental, no producto de
tuna ley. Suponga ahora que la regularidad
{de «Todas las piezas de cobre pulido son
‘doradas» ha sido constatada siempre. Es-
‘aria dispuesto a apostar a que la proxima
pieza de cobre pulido que encuentre sera
dorada? Si 1a respuesta es afirmativa, ¢s
porque considera que esa regufaridad no
es accidental, sino nomologica.
En segundo lugar en la medida.en que
estemos dispuestos a user una regularidad
para dar explicaciones, la estaremos consi-
derando nomol6giea, no accidental, Ante
la pregunta «Por que esta pieza de metal
ces dorada?», la respuesta «Porque est en
‘mi bolsillo derecho y todas las monesas
que tengo alli son doradas» no parece
tuna buena explicacion. En eambio, algo
como «Porque es de cobre pul y todas,
las piezas de cobre pulido son doradas»
sf que lo parece. Ello se debe a que eonsi-
deramos que «Todas las piezas de cobre
pulido son doradas» corresponde a una
ley, mientras que «Todas las momeedas de
‘mi bolsillo derecho son doradas» parece
roferit a un mero aceidente.
Existen varios tipos de leyes. Las leves
‘que Tlamamos eetrietas, como la ley de
lagravitael6n, no presentan excepciones:
siempre que se da el antecedente, ocurre
el consecuente. Pero no todas las leyes son
de este tipo. Por ejemplo, que la ingesta
de barbitrieos va acompafiada de som-
nolencia no constituye una correlacién
accidental: hay una conexi6n genuina
centre una cosa yTa otra. Sin embargo, no
es clerto que siempre que alguien ingiere
Darbitiricos sufra somnolencia. Ocurre
asien condiciones normales, pero tal vez
no sea el caso si, por ejemplo, también se
than tomado estimulantes.
“Tales correluciones son nomolbeleas;
son leyes, pero no estrictas. Reciben el
nombre de leyes ceteris paribus, que sig-
nifica «en condiciones normales» (Iite-
ralmente, «cuando todo To demas sigue
gual»), o leyes ep. Se pueden esquemati=
zr ast: «Todos Ios. som, 6P, 0 0 «Siem
pre que... entonces, ep, ..». Muchas de las
leyos catidianas son leyes ep. La ingesta
de analgésicns redime el dolor, pero solo
‘en condiciones normales. También que os
rmetales se expanden al calentarse sueede
solo en condiciones normales a presiones
extremas podria no ocutrir).
‘Una euastién debatida es si las leyes
ep son irreducibles a si, mas Dien, cons
tituyen versiones simpliicadas de leyes
estrietas en las que desconocemos parte
del antecedents, Asi Ia ley «Todos los 4
son, ep, Bv, constituiria una version pro
visional de la ley estrita «Todos los que
son ala vez A y ? son también B>, de la
{que desconocemos parte del antecedente,
or ejemplo, «Fumar en exceso produce,
ep, edncers eorresponderia a una ley no
estreta trasTa que habrfa otra que sfl0 es:
», etoétera
‘También se dehate si las Teyes estadis-
ticas corresponden a relaciones probebi
listicasirredueibles oi, mas bien reflejan
‘nuestra desconecimiento de algunos fac-
tores. Por ejemplo, «Al menos el 80 por
clento de los fumadores intensivos de
larga duracion desarrolla enfermedades
respiratorias» expresarfa una correlacion,
nomolégiea estaistiea. Pero, si conociése
_mos mejor las condiciones de los sujetos,
podrfamos formularla de modo absolut,
no estadistico: «La totalidad de quienes
faman en exceso y cummplen tales y eua-
les condiciones desarrollan enfermedades
respiratorias
No obstante, aunque lo anterior pueda
‘uncionar para una gran cantidad deleves
probabilisticas, no queda claro que pueda
aplicarso a todas. Numerosos fldsofos de-
finden que las leyes de la mecénica cu
tica son irredueiblemente probabilistias:
‘no expresan un deseonocimiento parcial,
sino relaciones necesarias, «brutas», de
la naturaleza, Este constituye uno de los
aaspectos més misteriosos y debatidos de
Ja mecainica cuantica.
Coneluiremos con la meneién de una
cuestion més filosdfica, relativaa las eyes
naturales: éd6nde radica su necesidad? £A
‘qué nos referimos cuando hablamos de
1a nevesidad natural? En el mundo ob-
sservamos fenémenos y vemos que unos
siguen a otros, pero no vemos conexiones
necesarias entre ellos. Tanto en el caso de
Ia muerte de las aves y el nacimiento de
Jos mamiferos como et ede la expansi6n
€e los metales, 1o que observamos es 10
‘mismo: primero oeurre una cosa y luego
‘tra, Consideramos que en el segundo hay
tuna necesidad de la que el primero carece,
pero no vemos dicha nocesidad.
Los empirstas radicales, como David
Hume, sostienen que en el mundo hay
fenémenos y regularidades. Sin embar-
0, no consideran que haya regularidades
que, ademas, tengan adherida una pro-
piedad a la que podamos lamar «ece-
sidad, Lo que denominamos leyes son
meras regularidades que, entre todas las
disponibles, tomamos para constru Ios
sistemas predictivos mds simples y exi-
‘tnsos, Las leves serian las «regularidades
{que pertenocen al mejor sistema predic-
tivo» (Dest system account).
Pero cpor qué funciona mejor un sis-
tema predictivo con unas regularidades
que con otras? Para el realista, de ins-
piracion aristotélica, esto dltimo carece
4e explicacién a menos que supongamos
que el mundo contiene en sf mismo tales
neeesidades (weausas», 6 como queramos
Tamarlas) Por tanto, nuestras leves cien=
Lifeas funcionaran mejor cuanto mas se
aprosimen a esas necesidades naturales,
En la ciencia ideal ~a la que quiz no se
Tlegue nunea, pero la que continuamente
nos vamios acercando, las leyescaptariin.
‘exactamente esas necesidades. Al emy
rista, en eamblo, todo esto le parece mala
rmetafisica, Yel debate continda. I
PARA SABER MS
Phioephicl foundation fps. Caran,
ase Books, 46
Philenoply of natural since .G.Hempe.
Pree al 65
Thestrucureofscienc, Nap Hace
bing,
Fundamento de loa dla lee. Dix
{YCUL Moulins, 3c, el 208,
ENNUESTRO ARCHIVO
sles dela rari, Geery Cin en
aye 206
Pd cin xp ts? els 7amora
Bonilnen i, reo de 20,
Les eancptscetics se Diezon ye,
tro 204,
Mayo 2016, IavestaconyClenlaes 88