Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
1. HIGIENE Y SALUD
Higiene es el arte de conservar la salud, el sistema de principios y reglas para preservarla. Estos
principios y reglas deben aplicarse en todos los momentos de la vida diaria y por tanto también
en la actividad física.
Higiene no sólo significa limpieza, sino que es un concepto más amplio que hace referencia a la
prevención de todo comportamiento nocivo para el individuo y su entorno. Esta prevención se
concreta en una serie de hábitos higiénicos.
Para conocer los principales hábitos higiénicos que te ayudarán a preservar la salud, sobre todo
ante la práctica de actividad física, debes diferenciar dos ámbitos principales: la higiene personal
y la higiene pública.
Higiene de la piel:
La piel es un órgano de secreción constante de distintas sustancias, como el sudor, la grasa o los
restos de epidermis. Cuando todo ello se une al polvo del exterior, el resultado es la suciedad.
Si ésta no se elimina del cuerpo, se crea un campo de cultivo para los gérmenes o parásitos que
desarrollan enfermedades.
Una ducha diaria es recomendable para mantener muy limpia la piel del cuerpo. Pero debemos
lavarnos cada vez que nos ensuciemos o sudemos más de lo normal.
Las manos son la zona del cuerpo que más se ensucia y, por lo tanto, es la que más a menudo
debemos lavar. Cuando te dispongas a comer o tengas que tocar alimentos, lávate muy bien las
manos.
Actitudes.
Después de practicar ejercicio físico hay que limpiar la piel, porque se ha sudado. Si las
instalaciones lo permiten, lo que hay que hacer es ducharse o lavarse el cuerpo, sin esperar a
que el sudor se seque, porque podría provocar resfriados, además de mal olor.
Actitud. Después de ducharte, antes de salir al exterior, sécate bien el cuerpo y el pelo.
La higiene bucal:
La boca es uno de los órganos del cuerpo con mayor riesgo de sufrir infecciones y enfermedades,
ya que es una puerta abierta al exterior. Los dientes, además tienen una forma y disposición que
favorece la acumulación de restos de comida o de otras sustancias, lo que comporta un alto
riesgo de contaminación.
Es muy importante mantener limpia la boca continuamente. Por ello se recomienda lavarse los
dientes cada día por la mañana cuando nos levantamos, y después de cada comida.
El vestir.
La ropa:
La ropa que llevamos encima debe estar limpia, sobre todo la que está en contacto con la piel,
especialmente la ropa interior, para evitar irritaciones y otros problemas de la piel.
Actitudes. Después de sudar o de ducharte no te vuelvas a poner la misma ropa, porque el sudor
volvería a tu piel y no te serviría de nada haberte lavado.
La ropa, además de cómoda, ha de ser la adecuada a la temperatura ambiental. Nos ha de
proteger del frío y permitir la ventilación si hace calor. Pero en todos los casos la ropa tiene que
favorecer la transpiración.
Cada tipo de ropa está pensada para una actividad concreta. En general la ropa deportiva está
pensada para hacer deporte y la ropa de calle para ir por la calle.
El calzado:
El calzado debe cumplir los mismos requisitos que hemos mencionado para la ropa: cómodo, de
materiales que permitan la transpiración de la piel y flexibles.
Para ir a la clase de educación física necesitamos el siguiente material: camiseta de algodón,
pantalones cortos o bermudas, chándal, zapatillas con suela de goma y calcetines (para evitar
lesiones en los pies).
La seguridad.
En la clase de educación física hay que seguir unas normas de seguridad. A continuación, te
presentaremos las más importantes:
En el instituto:
No hay que utilizar nunca los aparatos gimnásticos si el profesor está presente. Estos aparatos
pueden provocar caídas o golpes si no se saben utilizar correctamente.
No debemos colgarnos de las porterías de balonmano o de fútbol, porque se pueden romper.
Nunca subas a una canasta de baloncesto ni a los postes de voleibol.
El material como las pelotas “medicinales” las pesas, los aparatos de lanzamiento de atletismo,
los palos o Sticks de Floorball o los bates de beisbol constituye un peligro en manos inexpertas,
tanto para quien los manipulan como para los demás compañeros.
Para hacer educación física hay que llevar los cabellos bien sujetos. Además de molestarte a ti
mismo pueden constituir un peligro si se enredan en los dedos de alguien o en los objetos que
manipules.
No hay que llevar joyas no objetos duros en los cabellos, en las manos o en el cuello, por
seguridad de quien los lleva y para no hacer daño a los demás.
En el instituto:
El edificio escolar, con sus instalaciones (lavabos, laboratorios, talleres, biblioteca, instalaciones
deportivas), es nuestro lugar de trabajo. Si está en buenas condiciones, trabajamos mejor y más
a gusto.
El equipamiento deportivo (cestas, porterías, redes, aparatos,) y los materiales de la clase de
educación física (pelotas, raquetas, etc.) deben utilizarse adecuadamente y siguiendo unas
normas que dará tu profesor.
Debes utilizar el material y las instalaciones como si fueran tuyos, y siempre para las actividades
a las que se destinan. Debes vigilar no romper las cosas y no utilizarlas de manera que puedas
dañar a alguien. Trata con respeto lo que es de todos.
En lugares públicos:
Las instalaciones que encontramos por la calle (bancos, fuentes o luces), lo mismo que edificios
de servicios públicos (museos, centros deportivos), existen para que todo el mundo pueda
beneficiarse de ellos. Por lo tanto, debemos utilizarlos correctamente. Debes dejar los lugares
públicos tan limpios como estaban antes de tu llegaras. Utiliza las papeleras.
Contaminación ambiental:
El medio natural es muy sensible a las agresiones externas. El humo de los coches y de las motos,
las basuras en el campo, y los productos que se vierten en los ríos y el mar son agente principal
de contaminación del medio natural. Debemos recoger las basuras y llevárnoslas, y también
evitar echar nada en el agua.
2. ALIMENTACION
¿Qué es la alimentación?
A la hora de escoger alimentos hay que tienes en cuenta la cantidad, lo que aportan al
organismo y si son necesarios o perjudiciales. Alimentarse es una necesidad fisiológica que
el niño precisa para su desarrollo intelectual y motor.
LOS NUTRIENTES:
Proteínas
Son los ladrillos necesarios para crecer y reparar daños en el cuerpo.
Se encuentran en las carnes (de res, aves, de cacería), pescado, mariscos, crustáceos,
huevos, leche, quesos, embutidos (mortadela, salchichas, salchichón), granos como las
caraotas, frijoles, arvejas, lentejas.
Carbohidratos
Nos dan energía y calor para movernos y desarrollar todas las actividades diarias. Son de
origen vegetal.
Se encuentran en los cereales: maíz, trigo, arroz, sorgo y sus productos (harinas, pastas)
tubérculos o verduras: papa, ñame, apio, yuca, ocumo, ocumo chino, mapuey, batata;
plátano; azúcar (blanca o morena), miel y papelón, granos como las caraotas de todos los
colores, arvejas, lentejas, garbanzos, frijoles, quinchonchos.
Grasas
Son la fuente más concentrada de energía para nuestro cuerpo y cerebro. Participan en
diferentes funciones específicas y forman parte de los tejidos del cuerpo y de algunas
vitaminas y hormonas. Son fuente de calorías para los niños, pero los adultos deben
consumirla con moderación.
Se encuentran en las carnes rojas, piel del pollo, leche, mantequilla y queso, aceites
vegetales (de girasol, maíz, ajonjolí, algodón), margarina, aguacate, aceitunas, algunas
semillas como el maní, merey, pistacho, almendras, nuez.
Vitaminas
Ellas son las vitaminas A, D, E, K, C, complejo B y el ácido Fólico.
Cumplen funciones esenciales para el organismo. Ayudan en el proceso de
transformación de energía y favorecen el sistema de defensa del cuerpo contra las
enfermedades.
Se encuentran en casi todos los alimentos en especial en las frutas, hortalizas y alimentos
de origen animal.
Minerales
Entre los principales minerales se encuentran: calcio, hierro, yodo y el zinc.
Ellos participan en diversas funciones específicas y forman parte de los tejidos del cuerpo
(Ej.: el calcio forma y mantiene los huesos y dientes; el hierro forma parte de la sangre).
Los minerales intervienen en el crecimiento, reproducción del ser humano, la función
muscular, entre otros.
Se encuentran principalmente en los alimentos de origen animal.
Fibra
La fibra ayuda a expulsar las heces con facilidad, previene el cáncer de colon y reduce el
colesterol en la sangre.
Se encuentra en los alimentos de origen vegetal como hortalizas (zanahoria, tomates,
lechugas, pepino), frutas (melón, patilla, naranja, manzana), granos (caraotas, arvejas,
lentejas, frijoles), verduras (yuca, apio, nañe, batata) y cereales integrales.
a. Prevenir complicaciones.
Antes de nada, se debe velar por la seguridad de la persona accidentada,
ofreciéndole la ayuda necesaria para salvarle la vida y evitar que se produzcan más
accidentes.
b. Examen previo.
Examinar inmediatamente las funciones vitales de la persona, es decir, si tiene
pulso, si respira y si está consciente. - Si la persona accidentada se encuentra
inconsciente, hay que comprobar su documentación para identificarla y saber si
sufre alergias o enfermedades. - Se evalúan las posibles lesiones mediante las
explicaciones de la persona accidentada o por la observación del cuerpo de la
víctima.
c. Actuar inmediatamente.
Pedir ayuda, lo más rápido posible, avisando a los servicios médicos, a la policía
o a cualquier persona que nos pueda ayudar.
Si las lesiones son graves, se debe mantener a la persona herida inmóvil,
tumbada y caliente, y hay que aflojarle la ropa para que respire sin dificultad,
mientras se espera que lleguen los servicios médicos.
Si la persona accidentada vomita, se le colocará la cabeza de lado y si tiene
convulsiones, hay que evitar que se provoquen lesiones más graves.
Si las lesiones no son graves, se pueden llevar a cabo las primeras curas, como
limpiar las heridas, enfriarlas, inmovilizar la zona o transportar a la persona para
que pueda ser tratada.
Es muy importante transmitir tranquilidad a la persona herida informándole de
que los servicios médicos están a punto de llegar. En este sentido, no debemos
dejar que se vean las heridas graves para evitarle, así malestar, preocupaciones
o angustia.
d. El transporte
Si hay que trasladar a la persona accidentada y está consciente, existen diversas
formas de transporte, dependiendo de los medios y del tipo y la gravedad de la
lesión.
Después de dar todas estas informaciones, esperaremos instrucciones sobre los primeros
auxilios que hay que aplicar al herido o heridos mientras llega la ayuda.
Ante una emergencia, tan importante es saber qué hay qué hacer como saber qué NO hay que
hacer. Para no empeorar la situación, se deben retener unas cuantas normas. Muchas de éstas
son la negación de las que hemos expuesto anteriormente, pero recordaremos algunas porque
son de vital importancia.
“Más vale prevenir que curar”. Este dicho es una de las normas básicas de la salud. El
conocimiento de los primeros auxilios es una necesidad básica para minimizar las consecuencias
de los accidentes o, incluso, para evitar la muerte. Ahora bien, todo el mundo estará de acuerdo
en que es mucho mejor evitar situaciones o comportamientos de riesgo tanto en lo que se
refiere a la prevención de accidentes como a la prevención de enfermedades. A continuación,
nos fijaremos en algunas normas generales de prevención:
a. En la vida diaria.
• Hay que circular con prudencia en moto o coche, siguiendo las medidas de seguridad
obligatorias: casco o cinturón.
Entre las enfermedades infecciosas merece prestar especial atención al SIDA, producida por un
virus (VIH), que afecta al sistema inmunológico del organismo humano y, en condiciones
determinadas, es muy contagiosa. En general, se deben evitar los siguientes comportamientos
de riesgo o vías de contagio:
• Relaciones sexuales sin preservativo con personas infectadas, tanto de tipo homosexual
como heterosexual;
• Contacto sanguíneo de cualquier tipo con una persona seropositiva: transfusiones de
sangre, intercambio de agujas o de jeringuillas, cepillos de dientes, máquina de afeitar,
etc.
Si parece que las vías de contagio son muy claras, también lo son las vías de no contagio. El
contacto de la piel, el sudor, la saliva o el aire que respira una persona seropositiva no
comportan ningún riesgo de contagio.
Ya sabes que, como norma general para prevenir lesiones durante la práctica de actividad física,
se debe realizar un calentamiento específico para cada actividad. Hay que conocer los aspectos
de seguridad más importantes y tener en cuenta el nivel técnico y de condición física de cada
cual para afrontar las dificultades que comporta.
En la naturaleza, el riesgo de accidente es mucho más elevado y, por tanto, debemos conocer
algunas normas de prevención:
5.1. ATLETISMO
5.2. GIMNASIA
5.3. VOLEY