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Cucurbitaceae
A la familia de las Cucurbitaceae pertenecen cerca de 760 especies, distribuidas tanto
en el Viejo como en el Nuevo Continente. Tienen aparato vegetativo herbáceo, muchas
veces trepadoras, o leñoso. Una importante característica anatómica es la presencia de
haces fibrovasculares en el tallo que son de tipo bicolateral, es decir provistos de 2
zonas floemáticas en la madera, una interna y otra externa.
Subtribu Benincaseae
Género Citrullus
Especie vulgaris
La raíz:
Sus raíces son axonomorfas o raíz con eje principal, además pueden poseer raíces
adventicias como, en el pepino o zapallo y la sandia.
Tallo:
Los tallos son herbáceos (blandos y verdes), tendidos, trepadores, largos; con zarcillos
caulinares, cuyo extremo del zarcillo puede ser bífido o trífido (según este hendido en
dos o tres partes). El tallo es cilíndrico, asurcado longitudinalmente, muy peloso; los
pelos inclinados, cortos y finos son muy brillantes. Debido a la poca consistencia del
tallo el crecimiento de la planta transcurre por el suelo apoyándose en todos los tallos.
Hojas:
Flores:
Fruto:
Es una baya particular llamada pepónide grande con placenta carnosa y epicarpio
quebradizo, generalmente liso, de color forma y tamaño variables, con la pulpa mas o
menos dulce y color que va del rosa claro al rojo intenso.
La polinización es entomógama.
Importancia económica
Las Cucurbitaceae son muy importantes desde el punto de vista económico, en cuanto a
que presenta una serie de especies muy difusamente cultivadas para la alimentación
humana. Entre éstas podemos hablar del melón de agua (Citrullus lanata), de origen
paleotropical; el pepino (Cucumis sativus); el melón (Cucumis melo); el zuquini
(Cucurbita pepo) y la calabaza (Cucurbita maxima).