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CONTRATO DE SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA

PRESENTADO POR:

MARÍA ELISA MORÓN BAUTE


MARÍA FERNANDA RAMIREZ GARCIA

PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA


FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS
BOGOTÁ D.C.
2002
2

TABLA DE CONTENIDO

pág.

INTRODUCCIÓN 6

CAPITULO I

NOCIONES DE RESPONSABILIDAD CIVIL 8

1. GENERALIDADES 8
1.1 CONCEPTO DE RESPONSABILIDAD 8
1.2 ELEMENTOS DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL 11
1.2.1 La Culpa 12
1.2.1.1 Clases de Culpa Contractual 13
1.2.2 El Daño 14
1.2.2.1 Requisitos del daño 14
1.2.3 El Nexo Causal o Relación de Causalidad 15
1.3 FUENTES DE LA RESPONSABILIDAD CIVIL 15
1.3.1 Responsabilidad Civil Contractual 15
1.3.2 Responsabilidad Civil Extracontractual 17
1.4 CLASIFICACIÓN 27
1.4.1 Responsabilidad Civil Contractual 27
1.4.2 Responsabilidad Civil Extracontractual 28
1.5 DIFERENCIAS ENTRE RESPONSABILIDAD CIVIL
CONTRACTUAL Y RESPONSABILIDAD CIVIL
EXTRACONTRACTUAL 28

CAPITULO II

DE LA RESPONSABILIDAD MÉDICA 31

2.1 RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL 31


2.1.1 Noción 31
2.2 RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA 35
3

2.2.1 Noción 35
2.2.2 Antecedentes 44
2.2.3 Responsabilidad Contractual y Responsabilidad
Extracontractual del Médico 51
2.2.4 Otras Clases de Responsabilidad en las que Puede Incurrir el
Médico 53
2.3 RESPONSABILIDAD DE LOS AUXILIARES DE
LA MEDICINA 58
2.4 REGULACIÓN LEGAL 63
2.5 POSICIÓN DE LA JURISPRUDENCIA Y LA DOCTRINA 84

CAPITULO III

CONSIDERACIONES GENERALES DEL CONTRATO DE


SEGUROS 122
3. GENERALIDADES 122
3.1 NOCIÓN 122
3.2 ELEMENTOS ESENCIALES 123
3.2.1 El Interés Asegurable 124
3.2.2 El Riesgo Asegurable 126
3.2.3 La Prima o Precio del Seguro 129
3.2.4 Obligación Condicional del Asegurado 131
3.3 CARACTERÍSTICAS 132
3.3.1 Consensual 132
3.3.2 Bilateral 133
3.3.3 Oneroso 133
3.3.4 Aleatorio 133
3.3.5 Ejecución Sucesiva 134
3.3.6 Intuito Personae 134
3.3.7 De Adhesión 135
3.3.8 Mercantil 135
3.3.9 Típico 135
3.3.10 Principal 135
3.3.11 Indivisible 135
3.3.12 De Ubérrima Fe 136
3.4 CLASIFICACIÓN 136
3.4.1 Según el Código de Comercio 136
3.5 PARTES DEL CONTRATO DE SEGUROS 138
3.5.1 El Asegurador 138
3.5.2 El Tomador 139
4

3.6 OBLIGACIONES QUE NACEN DEL CONTRATO DE


SEGUROS 141
3.6.1 Obligaciones a cargo del Tomador, Asegurado
o Beneficiario 142
3.6.2 Obligaciones a cargo del Asegurador 153
3.7 EXTINCIÓN DEL CONTRATO DE SEGUROS 157

CAPITULO IV

CONTRATO DE SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL


PROFESIONAL MÉDICA 159

4.1 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL


PROFESIONAL 159
4.1.1. Noción 159
4.1.2 Ubicación 160
4.1.3 Ámbito de Aplicación 160
4.1.3.1 Definición de Profesional 161
4.1.3.2 Cobertura del seguro de Responsabilidad
Civil Profesional 162
4.1.4 Función del Seguro de Responsabilidad
Civil Profesional 164
4.1.5 Siniestro 164
4.1.6 Prescripción 167
4.2 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL
MÉDICA 169
4.2.1 Noción 169
4.2.2 Relación entre Responsabilidad Civil Médica y el Seguro de
Responsabilidad Civil Médica 170
4.2.3 El Aseguramiento del Médico 172
4.2.4 Partes del Contrato de Seguro 176
4.2.5 Relación entre las Partes del Contrato de Seguro 177
4.2.6 Elementos 179
4.2.6.1 El Riesgo Asegurable 180
4.2.6.1.1 La Conducta Asegurable 182
4.2.6.1.1.1 Clases de Conductas Asegurables 182
4.2.6.1.1.2 Conductas no Asegurables 185
4.2.6.1.1.3 Culpa Grave como Caso Especial 186
4.2.6.1.2 El Daño Asegurable en la Responsabilidad Civil Médica 189
4.2.6.1.3 Nexo Causal 192
4.2.6.2 El Interés Asegurable 193
4.2.6.3 Prima o Precio del Seguro 195
4.2.6.4 Obligación Condicional del Asegurado 198
4.2.7 Elementos Especiales del Aseguramiento Médico 200
4.2.8 Delimitación Temporal de la Cobertura del Seguro 203
5

4.2.8.1 Criterios de Delimitación Temporal 205


4.2.8.1.1 Criterio del Hecho Generador o Causal 205
4.2.8.1.2 Criterio de la Ocurrencia del Daño 206
4.2.8.1.3 Criterio de la Reclamación 206
4.2.8.1.3.1 Cláusula Claims Made 207
4.2.8.1.3.2 Cláusula Mixta 207
4.2.8.1.3.3 Cláusula Claims Made con Cláusula de Retroactividad 207
4.3 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA EN OTROS
PAÍSES 209
4.3.1 Estados Unidos de América 210
4.3.2 España 213
4.3.3 Francia 216
4.3.4 Bélgica 217
4.3.5 Canadá 218
4.3.6 Argentina 221
4.3.7 Brasil 223
4.3.8 Chile 225
4.3.9 Uruguay 227
4.3.10 Paraguay 229

CONCLUSIONES 231

ANEXOS 234

BIBLIOGRAFIA 251
6

INTRODUCCION

La responsabilidad que puede derivarse de las diferentes actuaciones

profesionales y el desarrollo de un mecanismo efectivo para evitar un eventual

detrimento patrimonial derivado de la obligación de indemnizar todos los

perjuicios que el profesional haya ocasionado en el ejercicio de su oficio, son

preocupaciones importantes del mundo moderno no solo por las implicaciones

sociales que plantea sino por las diversas posibilidades de aplicación.

En nuestro ordenamiento jurídico privado existe una herramienta diseñada

para proteger el patrimonio frente a amenazas de acciones judiciales por

actuaciones profesionales: Se trata del contrato de responsabilidad civil

profesional, que en el caso de los profesionales de la salud presenta

características especiales en razón a que el ejercicio médico se da en un

esquema de relación jurídica con el paciente, en donde el paciente es

poseedor de una serie de derechos derivados de su dignidad de ser humano, y

al mismo tiempo es poseedor de derechos como consumidor que demanda

servicios de salud. De otra parte, los profesionales de la salud están

advertidos de la problemática que los afecta y tienen mayor conciencia de los


7

peligros a que se exponen cuando trabajan sin un seguro de responsabilidad

profesional. Estas consideraciones justifican plenamente la existencia de un

seguro de responsabilidad médica y plantea la necesidad de modernizar la

legislación colombiana en el tema.

La metodología utilizada en el presente trabajo de tesis consistió en estudiar

de manera general la responsabilidad civil y el contrato de seguro para luego

profundizar en la responsabilidad médica y su aseguramiento. El desarrollo por

capítulos se presenta de la siguiente manera: El primer capítulo examina los

conceptos generales de la responsabilidad civil; el segundo capítulo profundiza

en la responsabilidad civil médica; el tercer capítulo ilustra algunas

consideraciones del contrato de seguro, y el último capítulo desarrolla los

aspectos más importantes del seguro de responsabilidad civil médica.

Esperamos que este trabajo de tesis sirva como medio de consulta básico para

aquellas personas interesadas en el tema, pues recoge los conceptos y

criterios actualizados que se están aplicando en el mundo sobre el contrato de

responsabilidad civil médica.

Por último, queremos invitar a las personas con experiencia relacionada a

enriquecer el presente trabajo con base en el conocimiento que tienen de la

realidad colombiana, para que en el futuro inmediato pueda cumplir sus

cometidos de beneficio académico y social.


8

CAPITULO I
NOCIONES DE RESPONSABILIDAD CIVIL

1. GENERALIDADES

A continuación se estudiará el tema de la Responsabilidad Civil, de una

manera general debido a que no es el principal objetivo de este trabajo. El

propósito de este capítulo es ubicar al lector dentro del marco de la

Responsabilidad Civil, para luego, abordar el tema de la Responsabilidad Civil

Profesional y su correspondiente Seguro.

1.1 Concepto de Responsabilidad Civil

La responsabilidad, según el Diccionario de la Lengua Española, es “la

obligación de reparar y satisfacer un daño”.

El término responsabilidad implica una relación entre personas, una que causa

un daño y otra que lo sufre. El daño puede ser patrimonial, por ejemplo, en los

bienes del individuo; o en su persona, libertad, honor, afectos, creencias,

donde se estaría frente al daño extrapatrimonial.


9

La responsabilidad se divide en:

Responsabilidad Moral. Responde a tendencias religiosas o espirituales,

donde Dios y la conciencia son patrones determinantes, este tipo de

responsabilidad es una noción puramente subjetiva, es una responsabilidad

interior. Para determinar la existencia de responsabilidad moral hay que

analizar el estado anímico de la persona, tal como lo expresan los autores

Henri y León Mazeaud en su libro Tratado Teórico y Práctico de la

Responsabilidad Civil Delictual y Contractual.

El problema de la responsabilidad moral es el pecado. Se es responsable

moralmente cuando, ante Dios, si es creyente, y ante la propia conciencia tan

sólo, si se es ateo, se debe responder por un acto o una abstención. “Ahora

bien, Dios y la conciencia nada reprochan al que ha obrado de buena fe y con

suficiente atención; ése no es responsable moralmente”.1

Responsabilidad Jurídica. Es la obligación que tiene una persona de reparar

un daño que le ha causado a otro. La responsabilidad en términos jurídicos

trasciende al campo externo de la persona, en donde la conciencia pierde

importancia y se responde por hechos, actos o conductas que atentan contra

el orden social o que causan peligro.

1
MAZEAUD, Henri y León. Tratado teórico y Práctico de la Responsabilidad Civil
Delictual y Contractual. Buenos Aires: Ediciones Jurídicas Europa-América, 1961. p. 4
10

La responsabilidad jurídica a su vez se divide en:

Responsabilidad Penal. Es la obligación de asumir las consecuencias

jurídicas que resultan de la violación de bienes jurídicamente tutelados por la

ley penal. La misma ley penal determina las conductas generadoras de

responsabilidad penal y sus respectivas sanciones.

Según el Diccionario Básico de Términos Jurídicos Legis, la Responsabilidad

Penal “es el sometimiento del autor o participe de un hecho punible a las

consecuencias jurídicas de la infracción de la ley penal. Se es penalmente

responsable cuando por acción u omisión se ha realizado una conducta

delictiva o contravencional.”2

Responsabilidad Civil. “Es la obligación de reparar el daño causado a una

persona, sea por culpa, sea, en ciertos casos determinados por la ley, por el

riesgo resultante de la actividad del responsable.”3

La responsabilidad civil supone la existencia de un daño que una persona

causa a otra, en donde la víctima podrá únicamente pedir la reparación de ese

daño en particular.

Consagración Legal. Artículo 2341 Código Civil Colombiano define la

responsabilidad civil extracontractual como: “El que ha cometido un delito o

2
MADRID-MELO G., Mario. Diccionario Básico de Términos Jurídicos. Bogotá:
Editorial Legis, 1994. p. 457
3
CAPITANT, Henri. Vocabulario Jurídico. Buenos Aires: Ediciones Depalma, 1961. p.
489
11

culpa, que ha inferido daño a otro, es obligado a la indemnización, sin perjuicio

de la pena principal que la ley imponga por culpa o delito cometido”.

En los artículos 1602 y siguientes del C. C, se regula el tema de la

responsabilidad civil contractual. Artículo 1604 hace referencia a la

responsabilidad civil contractual: “El deudor no es responsable sino de la

culpa lata en los contratos que por su naturaleza solo son útiles al acreedor; es

responsable de la leve en los contratos que se hacen para beneficio recíproco

de las partes; y de la levísima en los contratos en que el deudor es el único

que reporta beneficio.

El deudor no es responsable del caso fortuito, a menos que se haya constituido

en mora (siendo el caso fortuito de aquellos que no hubieran dañado a la cosa

debida, si hubiese sido entregada al acreedor), o que el caso fortuito haya

sobrevenido por su culpa.

La prueba de la diligencia o cuidado incumbe al que ha debido emplearlo; la

prueba del caso fortuito al que lo alega.

Todo lo cual, sin embargo, se entiende sin perjuicio de las disposiciones

especiales de las leyes, y de las partes.”

1.2 Elementos de la responsabilidad civil

Los elementos que resultan de la responsabilidad civil ya sea contractual o

extracontractual, son tres: la culpa, el daño o perjuicio y el nexo causal entre

culpa y daño.
12

1.2.1 La culpa: Este elemento lo han definido varios autores.

Planiol, la define: “es la violación de una obligación preexistente”.4

Colin y Capitant precisan que: “la culpa no es otra cosa que un error de

conducta, una falta de actitud que normalmente se precisa según el tipo

abstracto del hombre recto y seguro de sus actos”.5

Ripert, dice que: “todo atentado a la integridad de la persona o de su

patrimonio, constituye culpa”.6

Para los hermanos Mazeaud, la culpa es “un error de conducta en que no

habría incurrido una persona advertida y prudente, colocada en las mismas

circunstancias externas en que obro el autor del daño”7

Para Rafael Duran Trujillo la culpa es: “el acto imprudente de acción o

abstención que causa un perjuicio”.8

“La culpa y la inejecución en los contratos, son dos conceptos distintos, en

donde la primera es un elemento de la responsabilidad extra contractual y la

segunda es tenida como un requisito esencial de la responsabilidad en los

contratos. La culpa hace pues relación a la acción o abstención causados por

4
El autor hace mención en su obra a la definición de Planiol. DURAN, Trujillo Rafael.
Nociones de responsabilidad civil. Bogotá D.C.: Temis. 1957 p. 66
5
El autor hace mención en su obra a la definición de Colin y Capitant. DURAN, Trujillo.
Ob. Cit. p. 66
6
El autor hace mención en su obra a la definición de Ripert. DURAN, Trujillo. Ob. Cit. p.
66
7
MAZEAUD Henri y León y Tunc André. Tratado Teórico y Práctico de la
Responsabilidad Civil delictual y Contractual. Tomo I, Vol. I. Buenos Aires. 1977. p. 52
8
DURAN, Trujillo Rafael. Nociones de responsabilidad civil. Bogotá D.C.: Temis. 1957.
p. 67
13

un error de conducta, la inejecución se refiere a la culpa y al perjuicio. La

inejecución es un fenómeno objetivo, material y la culpa es un acto conciente

que depende de la voluntad del causante.”9

1.2.1.1 Clases de culpa contractual

En materia de culpa contractual el artículo 63 del Código Civil Colombiano

acoge una división tripartita. Divide la culpa en culpa grave, culpa leve y culpa

levísima:

“La ley distingue tres especies de culpa o descuido. Culpa grave, negligencia

grave, culpa lata, es la que consiste en no manejar los negocios ajenos con

aquel cuidado que aun las personas negligentes o de poca prudencia suelen

emplear en sus negocios propios. Esta culpa en materias civiles equivale al

dolo. Culpa leve, descuido leve, descuido ligero, es la falta de aquella

diligencia y cuidado que los hombres emplean ordinariamente en sus negocios

propios. Culpa o descuido, sin otra calificación, significa culpa o descuido leve.

Esta especie de culpa se opone a la diligencia o cuidado ordinario o mediano.

El que debe administrar un negocio como un buen padre de familia, es

responsable de esta especie de culpa. Culpa o descuido levísimo es la falta

de aquella esmerada diligencia que un hombre juicioso emplea en la

9
DURAN, Trujillo. Ob. Cit. P. 67
14

administración de sus negocios importantes. Esta especie de culpa se opone

a la suma diligencia y cuidado.”10

1.2.2 El daño: Es el menoscabo a una facultad jurídica11 de un tercero, que

lo priva total o parcialmente de un derecho patrimonial.

Para que nazca la obligación de indemnizar derivada de un contrato, se

requiere no sólo el incumplimiento del deudor sino un perjuicio causado por

ese incumplimiento.

1.2.2.1 Requisitos del daño

El daño o perjuicio debe reunir ciertos requisitos para que sea objeto de

indemnización o reparación pecuniaria y para que sea estimado como tal. El

daño debe ser cierto, actual y directo.

 Debe ser Cierto: “El perjuicio es cierto, cuando aparece consumado y

definitivo, efectivo y real en el momento de liquidarse.”12

La certeza del daño debe ser absoluta, para que el daño sea resarcible.

10
Artículo 63 Código Civil Colombiano
11
Facultad Jurídica: Es toda posibilidad de obrar, que tiene una persona en el derecho
privado y que es permitida por la ley.
12
DURAN Trujillo, Ob. Cit., p.91
15

 Debe ser actual: “El perjuicio debe ser actual y también puede ser

futuro, pero debe haber certeza del daño. La actualidad del perjuicio hace

relación a su existencia en el pasado y en el presente.”13

 Debe ser directo: El perjuicio debe tener como única causa el

incumplimiento de un contrato.

1.2.3 El nexo causal o relación de causalidad Entre el motivo de la

inejecución del contrato y el perjuicio o daño causado, debe existir una

causalidad directa para que pueda configurarse responsabilidad civil

contractual o extracontractual.

1.3 Fuentes de la Responsabilidad Civil

1.3.1 Responsabilidad Civil Contractual

La fuente de la responsabilidad civil contractual es el incumplimiento de las

obligaciones emanadas de un contrato y que además genere un daño al

acreedor; para determinar el alcance de la obligación del deudor y su

incumplimiento, se acude al criterio propuesto por el tratadista René

Demogue, que distingue entre obligaciones de medios (obligationes de

13
DURAN Trujillo, Ob. Cit. p. 91
16

moyens) y las obligaciones de resultado (de rèsultat). La clasificación de

obligaciones de medios y de resultados es conocida desde hace muchos años

por la jurisprudencia colombiana, en cabeza de la Corte Suprema de Justicia

con la Sentencia del 5 de Marzo de 1940 y luego reiterada en Sentencia del

12 de septiembre de 1985.

“Esta clasificación se endereza a determinar cuándo hay o no inejecución de

obligaciones y el papel que desempeña el caso fortuito, cuestiones estas que

son fundamentales para valorar la responsabilidad que compete al deudor por

la referida inejecución.”14

1.3.1.1 Las Obligaciones de Medios

Una obligación es de medios “cuando el deudor solamente ha de poner éstos

con la diligencia requerida para el logro de un resultado cuya realización él no

garantiza.”15

Un ejemplo de obligaciones de medios es la del médico, el particular acude a

su consultorio, con la esperanza de obtener su curación, el galeno debe cuidar

a su paciente sin que tenga que responder por la curación de este, el

resultado no se puede garantizar.

14
OSPINA, Ferandez Guillermo. Régimen General de las Obligaciones. Bogotá D.C.:
Editorial Temis. 1988. p. 27.

15
OSPINA, Fernández. Ob. Cit. p. 27
17

1.3.1.2 Las Obligaciones de Resultado

Una obligación es de resultado “cuando la obtención de este queda incluida en

el objeto de aquella.”16 Es el caso del vendedor, que tiene la obligación de dar

la cosa vendida, en un contrato de compraventa.

El tratadista Demogue introdujo esta clasificación, con base en la

consideración del objeto de cada contrato. En este sentido, si el objeto existe o

se espera que exista, el deudor puede obligarse a un resultado: Dar, hacer o

no hacer algo.

1.3.2 Responsabilidad Civil Extracontractual

La doctrina y la jurisprudencia colombiana, guiados por los textos positivos

que regulan este tema, han estipulado como fuentes de la responsabilidad

civil extracontractual las siguientes:

1.3.2.1 Por el hecho propio

“Es el hecho directo producto de la actividad personal de los individuos.” 17 O

como lo expresa el tratadista Guillermo Martínez Rave: “Es la consagración

del antiguo y determinante principio del derecho <quien causa un daño debe

indemnizarlo>”. La responsabilidad civil extracontractual originada por el

16
OSPINA, Fernández. Ob. Cit. p. 27
17
SANTOS, Ballesteros Jorge. Instituciones de responsabilidad civil. Tomo I. Bogotá
D.C.: Javegraf, 1996. p.156
18

Hecho Propio, se le conoce como responsabilidad personal y se le ha llamado

también responsabilidad civil extracontractual simple, para distinguirla de la

responsabilidad que se causa en el hecho de ajeno o por el hecho de las

cosas, que se clasifican dentro de la responsabilidad civil extracontractual

compleja.

La responsabilidad civil extracontractual originada por el Hecho Propio se

encuentra regulado en los artículos 2341 y 2345 del Código Civil

Colombiano. Del primer artículo en mención18 se infieren los elementos de la

responsabilidad civil por el hecho propio o responsabilidad directa. Los

elementos son:

 Daño

Culpa

Nexo Causal

La consecuencia normal para todo aquel que ha cometido delito o culpa

infiriendo daño a otro, es la obligación de indemnizar a la victima, quien tendrá

la carga probatoria de demostrar la culpa del deudor o causante del daño,

porque ésta no se presume, y probar también el daño y el nexo causal.

El Artículo 2343 del C.C. consagra la transmisibilidad de la responsabilidad

personal, haciendo civilmente responsable, no sólo al sujeto o sujetos que

18
Artículo 2341 Código Civil Colombiano: “El que ha cometido un delito o culpa, que
ha inferido daño a otro, es obligado a la indemnización, sin perjuicio de la pena principal
que la ley imponga por culpa o delito cometido”.
19

causaron el daño, sino que instituye expresamente la transmisibilidad de la

responsabilidad a sus herederos.19

En la responsabilidad civil extracontractual causada por el hecho propio, el

régimen aplicable de responsabilidad es el de la Culpa Probada, es decir, para

que se constituya este tipo de responsabilidad el perjudicado debe probar la

culpa del causante “y cuando ésta no se da, se rechaza o se desconoce la

solicitud del perjudicado sobre la correspondiente indemnización.” 20 Este

régimen es aceptado por la doctrina y la jurisprudencia colombiana, basados

en el análisis del articulo 2341 de nuestro Código Civil.

1.3.2.2 Por el hecho ajeno

Es el hecho producto de la actividad de terceros, con respecto a los cuales

existe una relación de dependencia o cuidado. Es denominado también

responsabilidad civil extracontractual por el hecho de terceros.

Su consagración legal se encuentra en los artículos 2346, 2347, 2348, 2349 y

2352 del Código Civil Colombiano, en donde los artículos 2347, 2348 y 2349

establecen algunos casos, que según la doctrina colombiana, tienen carácter

enunciativo.

19
Artículo 2341 Código Civil Colombiano: “Es obligado a la indemnización el que hizo
el daño y sus herederos...”
20
MARTINEZ Rave, Gilberto. La responsabilidad civil extracontractual en Colombia.
Medellín: Editorial Diké. 1993. p. 167
20

Casos:

Artículo 2347: “Toda persona es responsable no sólo de sus propias acciones

para el efecto de indemnizar el daño, sino del hecho de aquellos que

estuvieren a su cuidado. Así, los padres son responsables solidariamente del

hecho de los hijos menores que habiten en la misma casa. Así el tutor o

curador es responsable de la conducta del pupilo que vive bajo su

dependencia y cuidado. Así, los directores de los colegios y escuelas

responden del hecho de los discípulos mientras están bajo su cuidado, y los

artesanos y empresarios del hecho de sus aprendices o dependientes, en el

mismo caso. Pero cesará la responsabilidad de tales personas si con

autoridad y el cuidado que su respectiva calidad les confiere y prescribe, no

hubieren podido impedir el hecho.”

Artículo 2348: “Los padres serán siempre responsables del daño causado por

las culpas o los delitos cometidos por sus hijos menores y que conocidamente

provengan de mala educación o de hábitos viciosos que les han dejado

adquirir.”

Artículo 2349: “Los amos responderán del daño causado por sus criados o

sirvientes, con ocasión del servicio prestado por éstos a aquellos; pero no

responderán si se probare o apareciere que en tal ocasión los criados o

sirvientes se han comportado de un modo impropio que los amos no tenían


21

medio de prever o impedir empleando el cuidado ordinario y la autoridad

competente; en este caso recaerá toda responsabilidad del daño sobre dichos

criados o sirvientes.”

El fundamento de la responsabilidad por el hecho ajeno o responsabilidad

indirecta es la violación de una obligación de vigilancia o cuidado por parte de

la persona que va a responder. La conducta o hecho de un tercero vincula al

responsable porque existe una garantía ante el perjudicado, quien no esta

obligado a arrogarse las consecuencias patrimoniales de hechos cometidos

por terceros. “La persona encargada de la vigilancia o cuidado de otras,

garantiza que los daños ocasionados por éstas, serán indemnizados.”21

En la responsabilidad civil extracontractual causada por el hecho ajeno, el

régimen de responsabilidad aplicable es el de la presunción de Culpa, ésta

presunción está en favor del perjudicado porque no tiene que probar la culpa

ya que esta se presume. Para desvirtuar la presunción de culpa, basta que el

responsable pruebe la debida diligencia exigida. No es necesario romper el

nexo causal.

1.3.2.3 Por el hecho de las cosas

Es el hecho de las cosas animadas o inanimadas, sobre las cuales hay una

obligación de custodia o guarda. “En este tipo de responsabilidad no está

21
MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 173
22

presente esa vinculación del sujeto responsable con una actividad personal

suya”22.

“Se menciona hecho de las cosas por cuanto el término hecho señala una

actividad material, no referida a ninguna voluntad o elemento subjetivo incluido

en el término acto. Por lo tanto los hombres pueden ejecutar hechos o actos,

en cambio los animales y las cosas solamente hechos.”23

Los dueños de las cosas deben responder por los daños que con ellas se

produzcan, debido a que éstos, si bien tienen derechos y prerrogativas, asi

mismo tienen la responsabilidad en todos los hechos dañosos que con ellas se

causen.

Su regulación se encuentra en los artículos 2350, 2351, 2353, 2354, 2355 y

2356 Código Civil Colombiano, en donde la ley establece una lista de casos,

en los cuales puede originarse responsabilidad y que pueden clasificar en dos

grupos:

Responsabilidad que nace por los hechos de las cosas animadas

En este grupo se hace referencia al hecho de los animales, los cuales tienen

vida y capacidad para desplazarse y actuar sin necesidad de mediación u

órdenes del hombre.

22
SANTOS. Ob. Cit., p. 157

23
MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 193
23

Los animales se han dividido en dos categorías:

1- Los animales domésticos: “entendiendo por tales aquellos que han sido

puestos por el hombre a su servicio y que le prestan utilidad.” 24 Nuestra

legislación en el artículo 2353 del C.C. regula la responsabilidad generada por

los hechos de los animales domésticos.

2- Los animales fieros o salvajes: “ entendiendo por tales aquellos que no han

sido domesticados y por lo tanto no son dominados por el hombre.” 25 El

Código Civil Colombiano en el Artículo 2354 hace referencia a la

responsabilidad generadapor los hechos de estos animales.

Artículo 2353: “El dueño de un animal es responsable de los daños causados

por el mismo animal, aún después que se haya soltado o extraviado, salvo que

la soltura, extravío o daño no puedan imputarse a culpa del sueño o del

dependiente encargado de la guarda o servicio del animal.

Lo que se dice del dueño se aplica a toda persona que se sirva de un animal

ajeno; salva su acción contra el dueño si el daño ha sobrevivido por una

calidad o vicio del animal, que el dueño con mediano cuidado o prudencia,

debió conocer o prever, y de que no le dio conocimiento.”

24
MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 197
25
MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 197
24

Artículo 2354: “El daño causado por un animal fiero, del que no se reporta

utilidad para la guarda o servicio de un predio, será siempre imputable al que lo

tenga; y si alegare que no le fue posible evitar el daño, no será oído.”

Responsabilidad que nace por los hechos de las cosas inanimadas

Las cosas inanimadas, no tienen vida, ni capacidad de moverse por si solas;

tienen que ser impulsadas y actuar por disposición del hombre.

“En el caso de las cosas inanimadas, se ha hecho una división que permite

estudiar independientemente lo que sucede con daños ocasionados por ruina

de edificios o cosas que caen de ellos y los que son ocasionados por otras

cosas.”26

Daños ocasionados por la ruina de edificios

Artículo 2350 “El dueño de un edificio es responsable de los daños que

ocasione su ruina, acaecida por haber omitido las reparaciones necesarias, o

por haber faltado de otra manera al cuidado de un buen padre de familia. No

habrá responsabilidad si la ruina acaeciere por caso fortuito, como avenida,

rayo o terremoto. Si el edificio perteneciere a dos o más personas pro indiviso,

se dividirá entre ellas la indemnización, a prorrata de sus cuotas de dominio.”

26
MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 199
25

Artículo 2351 “Si el daño causado por la ruina de un edificio proviniere de un

vicio de construcción, tendrá lugar la responsabilidad prescrita en la regla 3ª

del art. 2060 27


Responsabilidad por las cosas que caen de un edificio.

Artículo 2355 “El daño causado por una cosa que cae o se arroja de la parte

superior de un edificio, es imputable a todas las personas que habitan la

misma parte del edificio y la indemnización se dividirá entre todas ellas, a

menos que se pruebe que el hecho se debe a culpa o mala intención de alguna

persona exclusivamente, en cuyo caso será responsable esta sola.”

En la responsabilidad civil extracontractual causada por el hecho de las cosas,

se le aplica el régimen de presunción de Responsabilidad. En donde se

presumen la culpa y el nexo causal, pero el presunto responsable podrá

liberarse si desvirtúa el nexo causal demostrando una causal de exoneración,

que son fuerza mayor, caso fortuito, culpa exclusiva de la víctima o el hecho de

un tercero.

27
Artículo 2060 C.C., regla 3ª: “si el edificio perece o amenaza ruina en todo o en parte,
en los diez años subsiguientes a su entrega, por vicio de la construcción o por vicio del
suelo que el empresario o las personas empleadas por él hayan debido conocer en
razón de su oficio, o por vicio de los materiales, será responsable el empresario; si los
materiales han sido suministrados por el dueño, no habrá lugar a la responsabilidad del
empresario sino en conformidad al artículo 2041, inciso final”. El articulo que debió
citarse es el 2357.
26

1.3.2.4 Por actividades peligrosas

Esta regulada por el artículo 2356 del Código Civil Colombiano 28-29 Toda

actividad social lleva implícita la posibilidad del riesgo o peligro para los

asociados, pero esto no implica que este tipo de actividad quede enmarcada

dentro de las actividades peligrosas. La actividad peligrosa es aquella en

donde el peligro virtual se manifiesta y exterioriza al generarse un proceso

propio y espontáneo que escapa a todo control del hombre, en donde puede

existir un peligro eventual. “ La actividad peligrosa para que sea así

considerada exige una apreciable, intrínseca y objetiva posibilidad de causar

un daño, en donde la peligrosidad debe existir con anterioridad a la generación

del perjuicio, ya que lo que se mide es la conducta humana que no sopesa el

peligro”.30

“La responsabilidad por el hecho de otro y la responsabilidad por el hecho de

las cosas, dentro de la cual se encuentra la responsabilidad por actividades

peligrosas, son excepcionales por no provenir el daño de la actividad personal

28
Artículo 2356 Código Civil Colombiano: “Por regla general todo daño que pueda
imputarse a malicia o negligencia de otra persona, debe ser reparado por ésta.
Son especialmente obligados a esta reparación:
1º El que dispara imprudentemente un arma de fuego;
2º El que remueve las losas de una acequia o cañería........
3ª El que obligado a la construcción o reparación de un acueducto.....”
29
En sentencia de Casación Civil. 29 de agosto de 1986. G.J. Tomo CLXXXIV. Nº 2423,
pp. 231, la jurisprudencia ha establecido que el texto legal hace una referencia implícita
a cualquier actividad que se repute peligrosa. Los numerales de este artículo son
ejemplos de actividades peligrosas no taxativos.
30
SANTOS. Ob. Cit., p. 159 y 160
27

de los individuos sino de presunciones de culpa que la ley establece contra la

persona responsable: «la ley presume la culpa de ésta, sin la cual el daño no

se hubiera cometido»”.31

En el caso de las actividades peligrosas, el régimen de responsabilidad

aplicable es el de Presunción de responsabilidad, donde el responsable

solamente se exonera demostrando caso fortuito, fuerza mayor, culpa

exclusiva de la víctima o hecho de un tercero.

1.4 Clasificación

La responsabilidad jurídica civil se clasifica en responsabilidad civil contractual

y responsabilidad civil extracontractual. Esta clasificación tradicional ha

prevalecido durante mucho tiempo, pero ahora intenta entrar en crisis, pues los

elementos constitutivos y sus diferencias tienden a desaparecer, y a demás es

cuestionada, en la medida que lo importante es que los daños causados a la

víctima sean reparados en su totalidad; sin importar el tipo de responsabilidad

de que se trate.

1.4.1 Responsabilidad Civil Contractual. “Es aquella que resulta por el

incumplimiento total o parcial de la obligación nacida de un contrato.”32

31
SANTOS. Ob. Cit., p. 156

32
MADRID-MALO G. Ob. Cit. p 457
28

Si el deudor incumple con su obligación o la cumple indebidamente, puede

causar un daño a su acreedor o contratante y en este caso surgirá para el

deudor o causante del daño una nueva obligación: Reparar el daño causado

por su incumplimiento.

1.4.2 Responsabilidad Civil Extracontractual. “Es aquella responsabilidad

en que incurre una persona por todo daño que cause a otra por su culpa,

negligencia o imprudencia”33

En este caso el causante adquiere la obligación de indemnizar

patrimonialmente a la persona perjudicada con el hecho dañoso y cabe anotar

que entre el causante y el perjudicado no existe ninguna relación jurídica

anterior. Este tipo de responsabilidad se conoce también como

responsabilidad delictual.

1.5 Diferencias entre responsabilidad civil contractual y responsabilidad

civil extracontractual.

1.5.1 Según el vínculo jurídico:

En la responsabilidad civil contractual, existe un vínculo jurídico contractual

previo entre las partes.

33
CAPITANT, Henri. Ob. Cit. p 489
29

En la responsabilidad civil extracontractual, no existe ningún vínculo jurídico

anterior entre el causante del daño y la víctima; éste se crea cuando se

produce el daño derivado del delito.

1.5.2 Según a la constitución en mora:

La mora es el retardo culposo en el cumplimiento de una obligación.

El principio general en la responsabilidad civil contractual, “es menester

constituir en mora al deudor para que pueda demandársele indemnización de

perjuicios, a menos que la obligación sea de no hacer, en cuyo caso aquélla se

debe desde el momento de la contravención.”34

En la responsabilidad civil extracontractual, el deudor no debe constituirse en

mora, porque es innecesaria; debido a que el incumplimiento del deber jurídico

genera un perjuicio en la víctima, y su autor está en mora de indemnizar el

perjuicio de pleno derecho.

1.5.4 Según la culpa:

De acuerdo con lo establecido en el artículo 1604 del Código Civil Colombiano,

en la responsabilidad civil contractual, “la culpa admite graduaciones, se

34
ALESSANDRI, Rodríguez Arturo. De la Responsabilidad Civil Extracontractual en el
Derecho Civil. Santiago: Imprenta Universal. 1891. p. 49
30

distinguen culpa grave, culpa leve y culpa levísima” y la responsabilidad se

determinará según el beneficio que las partes obtienen del contrato, así:

 Culpa grave: en donde la utilidad es sólo para el acreedor. Por ejemplo el

contrato de depósito.

 Culpa leve: la utilidad o beneficio es para la dos partes, es recíproca. Por

ejemplo el contrato de compraventa.

 Culpa levísima: el deudor es el único que reporta utilidad. Por ejemplo el

contrato de comodato.

En la responsabilidad civil extracontractual, hay un solo grado de culpa

entendida como: “error de conducta en la que no hubiera incurrido una persona

prudente y diligente, colocada en las mismas condiciones del autor del daño”.
31

CAPITULO II

DE LA RESPONSABILIDAD MÉDICA

2.1 RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL

2.1.1 Noción

Antes de entrar a definir concretamente qué es la responsabilidad civil

profesional, es conveniente precisar qué es un profesional.

Profesional: Según los hermanos Mazeaud, profesional “es aquella persona

que frente a la sociedad realiza una actividad habitual y presta y ofrece sus

servicios. El profesional, es una persona dotada de conocimientos, pericias o

saberes que, por lo habitual, están respaldados por la ostentación de un título

acreditativo de la idoneidad para el desempeño de su función”.35

“Cuando con su conducta profesional, el titulado ocasiona un daño que afecta

el patrimonio material y moral de una persona asume la responsabilidad civil,

35
MARTINEZ-CALCERRADA, Luis. La responsabilidad civil profesional. Madrid:
Editorial Colex. 1999. p. 21.
32

que no es más que la obligación de indemnizar, compensar patrimonialmente,

todos los perjuicios que con su conducta haya ocasionado el profesional en el

ejercicio de su oficio”.36

O como lo expresa Luis Martínez – Calcerrada: “la responsabilidad civil

profesional, cuyo nomen aboca, sin más, a la que contraen o se atribuye a

aquellas personas que en el ejercicio de su quehacer profesional y,

precisamente por eso, incurren en un ilícito o infringen un precepto que

produce consecuencias perjudiciales para una persona.”37

La responsabilidad civil del profesional, se compromete cuando se incumple

con un deber jurídico a su cargo que trae como consecuencia un daño; es

importante, determinar frente a cada actividad los deberes jurídicos a cargo

del profesional, para así establecer los daños y el alcance de la

responsabilidad que conlleva el incumplimiento de los mismos.

La responsabilidad civil profesional puede ser contractual o extracontractual.

Será contractual, si las consecuencias del hecho se suscitan por el

incumplimiento o el cumplimiento tardío o inoportuno de un contrato de

prestación de servicios. El profesional al celebrar un contrato de prestación de

servicios, se compromete con el cliente a cumplir las obligaciones derivadas

del mismo, ya sean las que expresamente se pactaron o las que son de la

naturaleza del contrato y se entienden incorporadas así no se indiquen

36
MARTINEZ Rave, Ob. Cit. p.487
37
MARTINEZ-CALCERRADA. Ob. Cit. p. 22
33

expresamente, como también lleva implícitas las obligaciones esenciales de

cada actividad profesional.

Por regla general, las obligaciones contractuales que adquieren los

profesionales son obligaciones de medio, es decir que no exigen la obtención

un resultado exitoso de las gestiones o actividades profesionales. Los

profesionales se comprometen a poner todos sus conocimientos, habilidades y

experiencias, pero no se comprometen a obtener un resultado con las

gestiones. El acto médico se cumple a cabalidad siempre que el médico haga

lo correcto (sin importar si alcanza el resultado querido), o lo incumple si no

actúa con la propiedad que la ciencia exige. La diferencia existente entre la

obligación de medios y obligaciones de resultados constituye el criterio que se

usa para determinar cuál es el alcance de la obligación a cargo del deudor. En

consecuencia, permite determinar cuándo hay incumplimiento.

El incumplimiento constituye el hecho o acto culpable que debe acreditarse al

igual que el daño y nexo causal para que se genere Responsabilidad Civil. En

las obligaciones de resultado, habría incumplimiento cuando no se obtenga

resultado, esto hace presumir la responsabilidad de quien adquirió el

compromiso y por tanto el perjudicado se liberaría de la carga procesal de

demostrar la culpa del causante del daño. En este caso el deudor debe

responder por la indemnización; en el caso de las obligaciones de medio si no

se obtiene el resultado esperado no habría incumplimiento no teniendo el


34

deudor el deber responder en todos los casos por la indemnización, debido a

que éste se puede exonerar de ella demostrando diligencia y cuidado.

El médico se compromete a emplear todos los medios a su alcance para

efectuar un procedimiento (médico o quirúrgico), actuando con apoyo en sus

conocimientos, su adiestramiento técnico y su diligencia y cuidado personal

para curar o aliviar los efectos de la enfermedad, sin poder garantizar los

resultados, previa advertencia de los posibles riesgos y complicaciones

inherentes al mismo.

La responsabilidad civil profesional será extracontractual, cuando por

cualquier evento, no existe un acuerdo de voluntades con el cliente38 o con sus

parientes para la prestación del servicio.

Un ejemplo puede ser el abogado que tiene que atender una defensa de oficio

que es impuesta por un funcionario público sin que medie la voluntad del

defendido.

38
Que en la mayoría de los casos es paciente, al ser tan frecuentes los casos en que
los médicos tiene que pestar sus servicios de urgencia a personas que llegan en estado
de inconciencia o cuando son llevados por nnterceros que no tienen ninguna relación
con ellos.
35

2.2 RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA

2.2.1 NOCIÓN

Como lo expresa el autor Gilberto Martínez Rave, en su libro “La

responsabilidad Civil Extracontractual en Colombia” El ACTO PROFESIONAL,

“es la conducta profesional que genera el resultado dañoso, es el hecho

generador de responsabilidad; ya sea contractual o extracontractualmente.”39

El hecho generador de responsabilidad en la actividad médica es conocido

como ACTO MEDICO, que puede darse por acción o por omisión. El acto

médico comprende todas aquellas actividades que profesionalmente deben

cumplirse en relación con la atención que debe brindarse al paciente y se

define como: “una forma especial de relación entre personas; por lo general

una de ellas, el enfermo, acude motivada por una alteración en su salud a otra,

el médico, quien está en capacidad de orientar y sanar, de acuerdo a sus

capacidades y al tipo de enfermedad que el primero presente.”40

La Corte Suprema de Justicia en 1985 señalo: “ ... cuando de responsabilidad

civil se trate por ejercicio profesional de medico, ella puede ser contractual

cuando se origina en el cumplimiento de un contrato, o extracontractual si nace

de un hecho que perjudica a otro sin que exista vinculo jurídico entre quien

causa el daño y quien lo sufra, debiéndose en ambas situaciones responder

39
MARTINEZ Rave. Ob.. Cit. P. 112
40
GUZMÁN, Mora Fernando. El acto médico: consideraciones esenciales. Tomado de
la página en Internet: http://www.medspain.com/ant/n10_mar00/Actomed.htm.
36

por la conducta irregular, igual que en todos los campos de la actividad

humana”.

La Ley 23 de 1981 por la cual se dictan normas en materia de ética medica,

establece en su articulo quinto “que la relación medico paciente se cumple por

decisión voluntaria y espontánea de ambas partes, por acción unilateral del

medico en caso de emergencia, por solicitud de tercera persona o por haber

adquirido el compromiso de atender a personas que están a cargo de una

entidad privada o publica”.

“Igualmente cabe señalar que los elementos de la responsabilidad, es decir la

conducta, el daño y el nexo de causalidad son ... comunes en ambos

ámbitos”.41

El acto médico tiene tres momentos diferentes, y son :

 El diagnóstico: “es la actividad encaminada a conocer, descubrir las

causas que originan el malestar, la enfermedad o la necesidad de servicios

profesionales del paciente”.42

En otras palabras, el diagnóstico es la opinión del médico obtenida de la

observación directa o de laboratorio, del paciente.

Los errores, imprudencias, la impericia y la negligencia generalmente se

presentan en esta etapa, y una falla en el diagnóstico puede ser la causa de un

41
YEPES RESTREPO, Sergio. La responsabilidad civil medica Medellín Biblioteca
Jurídica Diké. 4ª edición 1996, Pág.52

42
MARTINEZ RAVE. Ob. Cit. p. 492
37

fracaso en toda la actividad profesional con ese paciente; por eso es necesario

que el médico sea lo más diligente posible en el diagnóstico y practique

previamente todos los exámenes y pruebas necesarias para determinar el

mejor tratamiento o para recurrir a otros profesionales especializados si las

circunstancias exigen mayores conocimientos.

 El tratamiento: "Conocida la enfermedad o el trastorno que motiva el

acercamiento del paciente al médico, es necesario acertar en el tratamiento

que se le va a dar al paciente. Se necesita precisar cuáles son las

actuaciones, procedimientos o mecanismos que se van a utilizar para

encontrar la curación y recuperación del paciente o para proteger su salud”.43

El tratamiento es la segunda etapa del acto medico, conocida también como

etapa terapéutica en donde se buscan las diversas formas de tratamiento para

la enfermedad, es también de gran importancia, por eso el médico debe

adoptar el mecanismo adecuado, como por ejemplo la cirugía, o el tratamiento

terapéutico a base de drogas, o terapias que permitan la recuperación del

paciente; es aconsejable que el médico haga conocer al paciente la situación,

el procedimiento, los riesgos y molestias que se puedan generar.

43
MARTINEZ RAVE. Ob. Cit. p. 492
38

 El postratamiento: “es el conjunto de medidas encaminadas a

completar la terapéutica para reincorporar al individuo a su entorno personal y

social.”44

“Es aquella etapa posterior a la cirugía o a la terapia, que exige el control,

cuidado, seguimiento, vigilancia a lo que se vaya dando después”. 45

La negligencia, el error o el descuido en cualquiera de las tres etapas del acto

médico, puede generar responsabilidad civil, es decir, puede originar para el

profesional médico la obligación de indemnizar todos los daños o perjuicios

que se ocasionen.

Otra fuente de Responsabilidad Civil médica es la Falta de Información a los

pacientes sobre los procedimientos médicos que se les va a llevar a cabo de

ahí nace el concepto de consentimiento informado, él cual, “se establece

rotundamente como derivada de la dignidad de la persona, en el Convenio

relativo a los Derechos Humanos y a la Biomedicina, conocido como Convenio

de Oviedo, suscrito el 4 de abril de 1997, que establece:

"Una intervención en el ámbito de la Sanidad sólo puede efectuarse después

de que la persona afectada haya dado su libre e inequívoco consentimiento.

Dicha persona deberá recibir previamente una información adecuada a cerca

de la finalidad y la naturaleza de la intervención, así como sus riesgos y

44
GUZMÁN, Mora. Ob. Cit. Página de Internet:
http://www.medspain.com/ant/n10_mar00/Actomed.htm.
45
MARTINEZ RAVE. Ob. Cit. p. 492
39

consecuencias. En cualquier momento, la persona afectada podrá retirar

libremente su consentimiento."”46.

Para evitar que se presenten responsabilidades civiles por falta de información

los Españoles crearon “una norma que estableciese pautas claras de

unificación de los elementos, cantidades y formas de la información y, por lo

que aquí importa y resumidamente, destaca:

- De qué debemos informar:

Un formulario escrito de consentimiento informado debe respetar, al menos, los

siguientes criterios de información:

a. Naturaleza de la intervención: en qué consiste, qué se va hacer.

b. Objetivos de la intervención: para qué se hace.

c. Beneficios de la intervención: qué mejoría espera obtenerse.

d. Riesgos, molestias y efectos secundarios posibles, incluidos los

derivados de no hacer la intervención.

e. Alternativas posibles a la intervención propuesta.

f. Explicación breve del motivo que lleva al sanitario a elegir una y

no otras.

g. Posibilidad de retirar el consentimiento de forma libre cuando lo desee.

46
Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet:
http://www.aeds.org/respprofesi1.htm
40

- Cuánta información hay que dar:

Más específicamente, en relación a la información sobre riesgos en los

formularios escritos de consentimiento informado, debe ser la siguiente:

a. Consecuencias seguras de la intervención.

b. Riesgos típicos de la intervención: aquellos cuya producción deba

normalmente esperarse, según el estado y conocimiento actual de la ciencia.

c. Riesgos personalizados: aquellos que se derivan de las condiciones

peculiares de la patología o estado físico del sujeto, así como de las

circunstancias personales o profesionales relevantes.

d. Contraindicaciones.

e. Disponibilidad explícita a ampliar toda la información si el sujeto lo

desea.

- Cuándo debe utilizarse la información escrita

Sería conveniente especificar algunos criterios que indiquen cuándo una

intervención es susceptible de tener formulario escrito de consentimiento

informado. Podrían ser los tres siguientes, vinculados todos ellos a las

peculiaridades del procedimiento diagnóstico o terapéutico en cuestión:


41

a. Aquellos procedimientos que sean invasores requieren el uso de

formularios de consentimiento informado. El problema es definir qué se

entiende por procedimiento "invasor".

b. Aquellos procedimientos diagnósticos o terapéuticos que supongan

riesgos e inconvenientes, notorios y previsibles, no inherentes a la actuación

clínica (perse), que repercutan de manera importante en las actividades de la

vida cotidiana.

c. Cuanto más dudosa sea la efectividad de un procedimiento diagnóstico

o terapéutico más necesario es desarrollar cuidadosos procesos de

información y consentimiento y, por tanto, más necesario el uso del soporte

escrito.

- Destinatarios de la información.

En principio, el destinatario de la información es el propio paciente o usuario o

la persona legitimada para recibirla. Se presumirán legitimados a estos efectos

sus familiares más próximos y los acompañantes en el momento de la

admisión en el hospital, si así lo autorizó el paciente. En el caso de menores o

incapaces se recurrirá a la figura del representante o pariente más próximo y,

cuando así lo exijan las leyes para determinados supuestos especiales, se

informará, si es preciso, al propio juez (por ejemplo en los supuestos de

internamiento psiquiátrico involuntario).


42

- Excepciones o límites a la información.

Hay que reconocer determinados límites al deber de información que pueden

sistematizarse de la siguiente manera:

a) Situaciones de urgencia.

A tenor de lo expuesto en el artículo 10.6.c de la LGS y el artículo 8 del

Convenio sobre Derechos Humanos y Biomedicina, entendemos que el deber

de informar, así como la exigencia del consentimiento, ceden sólo en aquéllas

situaciones en que "la urgencia no permite demoras por poderse ocasionar

lesiones irreversibles o existir peligro de fallecimiento", es decir, cuando el

paciente no está en condiciones de recibir la información y/o de prestar su

consentimiento ni es posible acudir a sus familiares. Esto rige estrictamente

por el período de tiempo en que concurra tal situación, de modo que, tan

pronto como se haya superado, debe informarse inmediatamente al paciente,

según se ha dicho con anterioridad.

b) Pronóstico fatal.

El pronóstico, tal como ha señalado la doctrina, lejos de excluir el deber de

informar constituye una manifestación importante de este deber y, en principio,

es un derecho que corresponde a todo enfermo que quiera conocer su

verdadero estado de salud. Otra cosa distinta es que este supuesto concurra

con una renuncia del destinatario, expresa o tácita.

c) Información claramente perjudicial para la salud del paciente


43

En este supuesto es ineludible la valoración de los valores en conflicto, para lo

cual parece recomendable el asesoramiento del Comité Asistencial de Ética.

Este requerimiento es especialmente conveniente cuando la situación descrita

concurre con el deseo expresado por el paciente de conocer su verdadero

estado de salud. Debe hablarse aquí de necesidad terapéutica.

d) Renuncia del destinatario.

La renuncia a ser informado expresa o tácitamente, mediante hechos

concluyentes, ha sido tradicionalmente admitida por la doctrina como un

supuesto de excepción o límite efectivo al deber de información.

Recogiendo este criterio, el artículo 10.2 del Convenio sobre Derechos

Humanos y Biomedicina consagra tal excepción o límite al decir que "deberá

respetarse la voluntad de una persona a no ser informada", debiendo quedar

este extremo debidamente documentado.

- Responsabilidad de informar.

La responsabilidad de informar incumbe al médico responsable del paciente,

sin perjuicio de la que corresponde al médico que practica la intervención

diagnóstica o terapéutica al realizar las especificaciones adecuadas sobre la

técnica concreta.
44

Otros profesionales sanitarios, tales como los profesionales de enfermería,

pueden y deben participar en el proceso de información clínica del paciente,

aunque dentro del ámbito de su función propia en el proceso de atención.” 47.

2.2.2 ANTECEDENTES

A través de la historia, sin importar de qué parte del mundo estemos hablando,

siempre los médicos han tenido que responder por sus actuaciones ante su

pueblo o tribu, dependiendo de sus creencias, formas de vida y religiones.

La responsabilidad Civil, en su aspecto general nace como sucedáneo de la

venganza privada, no existía el concepto indemnización sino el concepto de

venganza. Quien sufría el daño tomaba venganza sin limitación, luego vino la

ley del Talión imponiendo límites y proporcionalidad entre el daño y la

venganza.

La venganza evoluciona con la indemnización o pago por parte del que causó

el daño, pero no era obligación ofrecerla ni aceptarla. Luego si fue obligatorio

ofrecer la suma de dinero como indemnización, si la víctima aceptaba estaba

renunciando a la ley del Talión y cuando se excluye la venganza nace, el

concepto de RESPONSABILIDAD.

47
Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet:
http://www.aeds.org/respprofesi1.htm
45

Los indios Taínos originarios de Quisqueya hoy conocida como Republica

Dominicana, entregaban el arte de curar al “Behique, médico brujo, shaman

caracterizado por ser el miembro más sabio de la tribu, encargado de curar a

los enfermos, y que había recibido el conocimiento ancestral de todas las

plantas y sustancias medicinales, y métodos de sanación”48, él debía

responder al pueblo por sus actuaciones, poniendo en peligro hasta su propia

vida cuando realizaba lo que la gente consideraba como mala praxis, debido a

que si “el Behique dejaba morir al enfermo, debía ser apedreado hasta morir

por los familiares del fallecido”49.

El Doctor Luis Alberto Kvittko, secretario general de la World Asociation of

Legal Medicine y secretario general permanente de la Asociación

Latinoamericana de Medicina Legal y Deontología Médica e Iberoamericana de

ciencias Forenses, en su articulo “antecedentes históricos de los procesos por

Responsabilidad Profesional médica y la mala praxis en el ejercicio de la

medicina legal” relata que el Código Penal Chino, se refirió a la responsabilidad

médica diciendo: “él médico únicamente debía responder cuando no aplicaba

su conocimiento, su criterio y las reglas de su arte, es decir, cuando no había

observado el principio general de prudencia y diligencia, que es el relativo a la

existencia o no de responsabilidad de medio. Determinaba también que se

48
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Seguro de Responsabilidad Civil por Mal Praxis
Médica. Revista chilena de Derecho de Seguros. AIDA año 2 numero 4 Santiago de
Chile de 2000, Pág. 20
46

debía nombrar peritos médicos para que consideraran el caso y dieran su

asesoramiento a los jueces. También diferenciaron entre las lesiones que se

podían provocar en el cuerpo, la salud y los casos de muerte.

Condenaban a los médicos a indemnizar por muerte o por lesiones dejadas

en su paciente que los inhabilitaba físicamente.”50

Tal vez este sea el compendio normativo mas parecido al que tenemos hoy en

día a la hora de determinar la responsabilidad y castigar al médico por su mala

praxis.

Ciertos antecedentes de la responsabilidad civil médica, se encuentran en el

DERECHO ROMANO, que según la Autora María Isabel Núñez Paz, “entre los

pueblos de la antigüedad quizá sea el romano el que más valora la salud.”51

En el derecho romano también se reflejó el pensamiento de la responsabilidad

por incumplimiento de una obligación de resultado, pero un poco más

depurada, pues los romanos atribuían la responsabilidad al médico cuando

habiendo procedido bien, los resultados no fueran los esperados.

49
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 20
50
KVITTKO, Luis Alberto. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0005.html
51
NUÑEZ PAZ, María Isabel. La responsabilidad de los médicos en el derecho romano.
Gijón: Gráficas Apel. 1996. p. 14
47

La “relación medico-paciente se desarrolla ampliamente en los textos romanos

dentro del ámbito de los contratos y más concretamente de las acciones de

buena fé”52.

En el caso del FUERO JUSGO las cosas fueron distintas, pues aquí la ley

revestía a la familia del afectado, con el derecho de hacer con el médico lo que

ellos quisieran, era una forma de hacer justicia. Algunos piensan que esta

sanción solo era aplicada cuando el médico abandonaba al enfermo, pero no

hay mucha claridad al respecto. Lo que sí se puede establecer es que el

médico era responsable por la mala ejecución de su oficio y que la pena o

sanción en ocasiones quedaba en manos de los familiares del afectado.

Desde la época de la República (años 509-530 A.C.) en el derecho Romano se

tienen referencias de la actividad médica. Con la Lex Aquilia de damno que

data del año 286 A.C. que basada en criterios de responsabilidad objetiva

pretendía determinar quién debía soportar las consecuencias del resultado

dañoso.

“El examen de los textos en los que se aborda la responsabilidad del médico

constituye un elemento interpretativo básico para apreciar los diversos matices

del concepto de culpa, desde la relación causal a la negligencia, desde la

impericia a la valoración de la conducta y sus causas de justificación. Las

llamadas acciones útiles y ad exemplum van a ser un instrumento

52
NUÑEZ PAZ. Ob. Cit. Pág. 88
48

enormemente flexible para introducir nuevos comportamientos en el marco de

la responsabilidad extracontractual.”53

La Lex Aquilia que hace referencia a los daños causados por el médico a un

esclavo en cuanto objeto del patrimonio de un hombre libre. Este no es único

caso de responsabilidad civil médica, es solo un punto de partida, como lo

pauta el Digesto en el título I:

“Sicuti medico imputari eventus mortalitatis non debet, ita quod per imperitiam

commisit imputari ei debit: praetextu humanae fragilitatis delictum decipientis in

periculo homines innoxium esse non debet”54

“Al médico se le imputa el resultado dañoso cuando actúa imperite. Se

considera reprobable la conducta de aquel que con el pretexto de la fragilidad

natural pone en peligro la vida de los hombres. La aparición del término

delictum en el texto55 puede servir para recordar que la responsabilidad

extracontractual tiene su origen precisamente en el marco de determinadas

conductas delictivas”.56

53
NUÑEZ PAZ, Ob. Cit. p. 88
54
NUÑEZ PAZ. Ob. Cit. p. 89. D. 1, 18,6,7
55
La autora hace referencia a la Lex Aquilia
56
NUÑEZ PAZ. Ob. Cit p. 89
49

“La relación médico-paciente se desarrolla ampliamente en los textos romanos

dentro del ámbito de los contratos y más concretamente de las acciones de

buena fe.”57

El código del REY HAMMURABI dedica por lo menos nueve de sus artículos a

las faltas y castigos para los médicos, pero esta compilación va mas allá de

consagrar la responsabilidad médica, pues diferencia la responsabilidad civil

de la responsabilidad penal, atribuyéndole a la primera una sanción económica

y a la segunda, una pena más gravosa, que podía llegar hasta la mutilación de

las manos del médico si éste era cirujano.

Un ejemplo de lo anterior es “Si un médico abre a alguien una gran herida con

un cuchillo de bronce y lo mata, o si vacía a alguien una cavidad con un cubillo

de bronce y le deja sin ojo, se le deberán cortar las manos”58.

Otro de los aportes del Código Hamurabi de 2392 A. de C. es la consagración

del contrato o pacto entre el médico y el paciente, donde se establecía que el

primero realizaría su labor a cambio de unos beneficios económicos que

podían ser pagados en dinero o en especie por el paciente o por sus

familiares.

Sobre lo consagrado en este código el doctor Juan Fernando Cobo expreso:

“se manifiesta que en el Código de Hammurabi había indemnización cuando el

cirujano –me imagino que entonces no tendría este calificativo- cometía una

57
NUÑEZ PAZ. Ob. Cit p. 90
58
Formación en Responsabilidad Profesional. Tomado de la página de Internet:
http://www.aeds.org/responsa1.htm
50

negligencia en su labor, dejando en el cuerpo del paciente, por ejemplo, unas

tijeras –también supongo que en aquel tiempo el nombre tijeras no existía;

pero hay tienen ustedes ya un principio de seguro de responsabilidad civil” 59.

ALEJANDRO MAGNO, creó bajo su gobierno una especie de responsabilidad

por el incumplimiento de una obligación de medios para el médico, debido a

que éste sólo era responsable cuando abandonaba libre y voluntariamente a

un enfermo, caso en el cual su castigo era la crucifixión.

Primer juicio por responsabilidad medica en América

Como resultado de una investigación histórica, el Doctor Luis Alberto Kvitko

descubre el primer caso de responsabilidad médica en América, que acaeció

en la ciudad de Córdoba; Argentina, el 26 y 27 de julio de 1598. Cuando un

comerciante español, llamado Valenzuela, se presenta ante el capitán y

gobernador de Córdoba denunciando que un licenciado, Téllez de Rojo, le

había tratado nueve de sus esclavos por estar enfermos, de los cuales habían

fallecido cinco. Téllez de Rojo exigió la indemnización por la muerte de cada

esclavo debido a la mala praxis del médico pues todos fallecieron, porque en

lugar de darles calor, como necesitaba su patología

59
COBO. Juan F. Seguros y Reaseguros (conferencias), memorias de la cuarta
Conferencia Hemisférica de Seguros. Pág. 180.
51

por tener un dolor y una puntada de costado, les había dado frío y prescribió

que les hicieran dos sangrías por día cuando no les tenia que hacer ni una por

año.

2.2.3 Responsabilidad contractual y responsabilidad extracontractual del

médico

Como se expuso anteriormente en la noción de responsabilidad civil

profesional, ésta podrá ser contractual o extracontractual, por lo tanto esta

clasificación le es aplicable a la actividad médica.

La responsabilidad contractual del médico, “es la que se deriva del

incumplimiento de un contrato por parte del médico, que vincula al paciente, y

presupone, por tanto, que aquel acudió al médico como cliente particular, o

bien como miembro de una organización de naturaleza pública o privada”.60

Algunas de las características del contrato de prestación de servicios médicos

son:

 Es un contrato intuito personae, es decir, es un acto de confianza,

donde el paciente escoge al médico, en donde las partes están claramente

identificadas.

60
MARTINEZ-CALCERRADA. Ob. Cit. p. 294
52

 Es un contrato rescindible, donde cualquiera de las partes puede

terminar el contrato. Pero con la limitación de que el médico no podrá hacerlo,

cuando ello suponga un abandono que haga peligrar la vida del paciente.

 Es un contrato consensual, es decir, que para su perfeccionamiento se

requiere sólo el consentimiento de las partes.

 Es un contrato de tracto sucesivo. En donde el cumplimiento del

contrato esta diferido a través del tiempo de su vigencia.

 Es un contrato bilateral porque las dos partes del contrato se obligan

recíprocamente.

Es un contrato oneroso, porque el objeto del contrato es el beneficio de

ambos contratantes.

La responsabilidad extracontractual del médico, tiene lugar cuando entre el

médico y el paciente no ha mediado ningún acuerdo de voluntades previo, así

“cuando, según las circunstancias, no se trata de asistencia médica con base a

un contrato ni cuasicontrato, las consecuencias perjudiciales de esa asistencia

ha de regularse por la responsabilidad civil extracontractual”.61

Se considera que la regla general es la responsabilidad civil contractual del los

médicos y que la extracontractual se da excepcionalmente.

61
MARTINEZ-CALCERRADA. Ob. Cit. p. 296
53

Según la doctrina existen algunos eventos de responsabilidad civil

extracontractual y a manera de hipótesis plantea varias situaciones:

 Cuando el médico atiende en casos de urgencia.

Cuando el paciente esta inconsciente y no media voluntad.

 En el caso de un potencial suicida que se rehúsa a recibir atención

médica.

 Cuando el paciente es llevado por un tercero con el cual no tiene ninguna

relación.

2.2.4 Otras Clases de Responsabilidad en las que puede Incurrir El

Médico

2.2.4.1 Responsabilidad Penal : Se genera esta responsabilidad personal del

profesional médico que ocasiona el daño cuando su acción u omisión lesiva

está tipificada en el Código Penal como constitutiva de un DELITO o de una

FALTA.

Por tanto para que una actuación médica genere responsabilidad penal es

imprescindible que tal conducta esté tipificada como tal en el código Penal y

que en el mismo se describa como delito o falta


54

Nuestro Código Penal consagra “una serie de comportamientos denominados

delitos que, en caso de ser cometidos por algún individuo, lo hacen merecedor

de penas, generalmente privativas de la libertad”.

Las normas penales son igualmente aplicables a cualquier profesional de la

salud cuando su conducta se adecue a uno de los tipos descritos en la ley, por

lo que la Corte Suprema de Justicia ha dicho que “la profesión medica cuyo

objeto es cumplir una función social, implica obligaciones de carácter ético y

profesional para quienes la ejercen, de tal manera que su trasgresión delictiva

y culposa puede dar lugar a sanciones penales o civiles, según que aquella

configure una conducta tipificada por la ley penal o quede circunscrita a la

responsabilidad civil. En consecuencia el medico tiene el deber de poner todo

su cuidado y diligencia siempre que atienda a sus pacientes con el fin de

procurar su curación o mejoría, así que cuando por negligencia, descuido u

omisión cause perjuicios en la salud de aquellos, incurrirá en una conducta

ilícita, que será calificada por el juez según su magnitud, desde la simple culpa

hasta la mas grave, para así mismo imponer al demandado la respectiva

condena a indemnizar a la victima del daño causado, sin perjuicio de las

sanciones penales a que haya lugar”62”.

“La comisión por parte de los profesionales médico de delitos o faltas genera

una personal responsabilidad penal del profesional y si de ésta se derivan

daños también la responsabilidad civil y por tanto su obligación indemnizatoria.

62
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA, 1985.
55

Es decir que la ejecución de un hecho descrito por el Código Penal como delito

o falta obliga a quien lo realiza a la reparación de los daños y perjuicios

causados en la comisión de ese delito o falta.

La responsabilidad penal es una responsabilidad personal y ello implica que la

sanción (condena) penal prevista solamente puede ser cumplida por la

persona que de forma directa es autor del delito o la falta. No obstante si de la

comisión del delito o la falta se generan daños en las personas o bienes

responde de la indemnización de dichos daños (a parte de la penal)

directamente el responsable penalmente y otros en virtud a distintas

relaciones.

Por tanto, ... el médico responderá de la sanción penal y su entidad

aseguradora (si tuviera concertada una póliza de responsabilidad civil)

afrontará el pago de la indemnización por las lesiones ocasionadas.”63.

Ahora, “dentro de los delitos en que puede incurrir un medico se encuentra el

homicidio, no tanto en su modalidad de intencional, como si en su hipótesis

culposa, la cual puede surgir cuando el paciente muere durante un acto médico

debido a imprudencia, negligencia, impericia o violación de reglamentos.

Cabe anotar también que cuando el médico mata a su paciente, para poner fin

a intensos sufrimientos provenientes de lesión corporal o enfermedad grave e

63
World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la
Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet:
http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp4.htm#admin
56

incurable, lo induce eficazmente al suicidio o le presta una ayuda efectiva para

su realización, estará incurriendo en delito.

Otro delito aplicable seria el de las lesiones personales que son de diferentes

clases, a saber, deformidad, perturbación funcional síquica, y perdida

anatómica o funcional de un órgano o miembro.

Por otra parte, el aborto es un delito previsto por la ley penal tanto para la

mujer como para la persona que se lo cause, además de que pueden producir

otro tipo de lesiones.

Seria también posible eventualmente el delito de falsedad en documentos, en

los casos en que el médico e incluso el paciente, borren, cambien, destruyan u

oculten una determinada historia clínica.

Debemos mencionar finalmente que el derecho debe desarrollarse acorde con

los nuevos descubrimientos y procedimientos médicos, regulándolos de

acuerdo a los intereses jurídicos, por lo que debe auxiliarse de aquellos que

tienen especiales conocimientos para poder hacer una legislación acorde con

la ciencia y la practica”.64

2.2.4.2 Responsabilidad administrativa o falla del servicio: “Los

particulares tendrán derecho a ser indemnizados por las Administraciones

Públicas correspondientes de toda lesión que sufran en cualquiera de sus

64
YEPES RESTREPO, Sergio. La responsabilidad civil medica Medellín Biblioteca
Jurídica Diké. 4ª edición 1996, Pág.32 y 33
57

bienes o derechos, salvo en los casos de fuerza mayor, siempre que la lesión

sea consecuencia del funcionamiento normal o anormal de los servicios

públicos.

Por tanto los pacientes usuarios de la sanidad pública que sean dañados por

actos médicos se entienden que son dañados por actos de la administración y

por ello ésta debe indemnizarlos siempre y cuando el daño sea efectivo,

evaluable económicamente e individualizado con una persona o grupo de

personas y no tenga el particular el deber jurídico de soportar el daño. Por

ejemplo el sometimiento voluntario a un tratamiento experimental de efectos

desconocidos.

La responsabilidad patrimonial de la Administración engloba pues a los actos

de los profesionales médico sanitarios que trabajan a su servicio y la

indemnización de los daños”.65 Esto es lo que llamamos en Colombia

responsabilidad del Estado por falla del servicio.

2.2.4.3 Responsabilidad ético-disciplinaria: La Ley 23 de 1981 y su decreto

reglamentario del mismo año regulan el tema de ética médica en Colombia,

pues la ética “paso de ser una responsabilidad moral a una jurídica, al ser la

65
World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la
Responsabilidad Médica: daño. Tomado de la página de Internet:
http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm
58

conducta examinada por un Tribunal del Estado mediante un procedimiento

legal y con sanciones que producen efectos externos.”66

“La responsabilidad ético-disciplinaria se aplica exclusivamente a quienes

tienen titulo de médicos, no pudiendo por tanto imputarse a estudiantes de

medicina, enfermeras o personas jurídicas como clínicas o sociedades.

Es una responsabilidad personal e intransferible ya que solo puede juzgarse al

galeno por sus propios actos y no puede extenderse a sus herederos.

No es susceptible de desistimiento, transacción ni conciliación por el carácter

in enajenable e indisponible que tienen sus contenidos éticos.

El juzgador es el Tribunal de Ética Médica, la sanción es de carácter

disciplinario y surge de la violación de alguna de las normas de la Ley 23 de

1981 o de su reglamentación, sin consideración a los antecedentes o a la

personalidad del infractor, ya que se trata de un derecho de acto y no de

autor"67.

2.3 RESPONSABILIDAD DE LOS AUXILIARES DE LA MEDICINA

La responsabilidad de los médicos no solo se genera “por hechos propios sino

por la de aquellas personas de las que se deba responder, y que puede

abarcar tanto daños derivados de la organización del trabajo horizontal, esto

es, en los casos de trabajo en equipo médico las que se deriven del propio

66
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit Pág.22
67
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág.23 y 24
59

funcionamiento del equipo cuando no pueda aislarse la responsabilidad de

cada participante (cirujano y anestesista, como caso paradigmático), que en

principio responden independientemente con base al principio de

especialización y competencia, como las derivadas de la organización del

trabajo vertical (médico, personal o auxiliar), en el que la responsabilidad

puede alcanzar jerárquicamente al médico aún cuando quepa aislar la

responsabilidad del auxiliar, si éstos traspasan el límite de su respectiva

competencia y se extienden a proporcionar cuidados estrictamente médicos.

Para deslindar este tipo de responsabilidades se hará una breve incursión en

las competencias de estos profesionales”68.

En la medicina de hoy “la distribución del trabajo se produce tanto en sentido

horizontal, en el que se producen relaciones entre iguales, basadas en la

independencia, en la complementariedad y en la igualdad, como en sentido

vertical, en el que el principio jerárquico se impone al de competencia, dando

lugar a relaciones subordinadas, en las que ciertamente cada miembro del

equipo debe confiar en que el personal auxiliar realice las tareas que le son

propias, pero siempre reservándose y siendo responsable el facultativo de las

tareas de control, instrucción y vigilancia y, desde luego, de la parte esencial

de su actuación profesional o que no podrá delegar en absoluto en personal

auxiliar”69.

68
Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet:
http://www.aeds.org/respprofesi1.htm
69
Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet:
http://www.aeds.org/respprofesi1.htm
60

Puede existir responsabilidad civil del personal de enfermería o de los

auxiliares de la medicina cuando, “en el ejercicio de sus funciones propias

incurra en negligencia, descuido o falta de atención, e incluso cuando cometa

indebidamente funciones propias del médico. Pero responderá éste en el caso

de que el daño al tercero se haya debido a su despreocupación en las

funciones de control y vigilancia o cuando encomiende o permita que el

personal de enfermería traspase los límites de su competencia profesional”70.

Para poder establecer la mala praxis de estos profesionales, habrá que acudir

a la determinación de sus funciones, las cuales son primordialmente: “ las de

cumplir la terapéutica prescrita por los facultativos encargados de la asistencia

así como aplicar la medicación correspondiente, auxiliar al médico en las

intervenciones quirúrgicas, practicar las curas de los operados y prestar los

servicios de asistencia inmediata en casos de urgencia hasta la llegada del

médico, observar y recoger los datos clínicos necesarios para la correcta

vigilancia de los pacientes, realizar las anotaciones que les correspondan,

realizar sondajes, disponer los equipos de todo tipo para intubaciones,

drenajes, y vendajes así como preparar lo necesario para una asistencia

urgente, así como prestar la asistencia a los pacientes en la esfera de su

competencia”71.

70
Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet:
http://www.aeds.org/respprofesi1.htm
71
Formación en Responsabilidad Profesional, Tomado de la página de Internet:
http://www.aeds.org/respprofesi1.htm
61

2.4 REGULACION LEGAL

La profesión de la medicina, es tal vez la actividad que más se contempla en

las distintas leyes y códigos del país, pero de forma dispersa y poco coherente

con la realidad actual.

El desarrollo legislativo de la medicina comienza en la colonia con la

expedición del primer Protomédico de Juan José Cortes en 1635, que tenia

como fin crear acciones para refrenar el abuso de médicos y evitar la presencia

de intrusos en esta profesión.

En 1801 se crea la Policía Médica, la cual tenía como objetivos el

reconocimiento de los médicos a través de la certificación del titulo, la

realización de exámenes a los médicos extranjeros con títulos dudosos, las

visitas anuales a las boticas, el reconocimiento de los hospitales y las

diligencias médico legales.

En la época de la República aparecen nuevas leyes que regulan la actividad

médica. En 1841 se dicta la Ley que reglamenta el ejercicio de la profesión de

la medicina y que consagro una lista de los médicos autorizados para ejercer, y

en 1844 la Ley de los deberes de los miembros de la escuela de medicina, por

otro lado en 1846 aparece una Ley que fija los honorarios que pueden cobrar

los médicos autorizados para ejercer esta profesión, es decir los que aparecen

en la lista de la Ley de 1841, además establece unos casos especiales en los

cuales se pueden fijar unos valores diferentes a los honorarios.


62

En 1929 aparece la Ley 35 de este año que reglamenta la profesión de la

medicina y establece quienes pueden ejercerla.

La Ley 67 de 1935 consagra la responsabilidad penal y civil de los médicos en

el ejercicio de su profesión cuando ocurría algún perjuicio al paciente por su

culpa, pero esta Ley no tuvo la importancia que se quería pues el doctor

Alfonso Cardona explicó en 1942 que la Ley 67 era inoperante, ya que se

necesitaba un código positivo que estableciera con claridad cuando incurría el

médico en culpa y cuando no, es decir cuando era responsable.

En 1957 aparece en Colombia un decreto ley que sin mucha variedad respecto

al resto del compendio legislativo pretendió establecer las clases de

indemnizaciones que tenían que pagar los médicos cuando estos eran

hallados responsables.

Existe otras leyes y decretos que también “han tratado la reglamentación de la

practica médica como la Ley 25 de 1935, y el decreto 281 de 1954, la Ley 14

de 1962, y la Ley 23 de 1981 pero se encuentran desactualizados con relación

a las abundantes normas expedidas por diferentes gobiernos con objetivos

políticos y de cobertura como la Ley 10 de 1990, la Ley 60 de 1992, y la Ley

100 de 1993, descuidándose en gran parte la labor importantísima que

desarrollan los profesionales de la salud, y entre ellos, los médicos”. 72

72
PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez,
Gaceta numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5
63

La Ley 23 de 1981 y su decreto reglamentario 3380 del mismo año, incluyen

aspectos de ética médica y sus sanciones. Pero esta que ha venido rigiendo el

ejercicio de la medicina por más de 20 años a quedado desueta debido que a

través del tiempo se han presentado avances tecnológicos, científicos y

cambios normativos principalmente los introducidos por la Constitución de

1991, en relación con los derechos fundamentales de las personas. Otro

cambio de gran influencia ha sido la creación del sistema de Seguridad Social

Integral que cambió el concepto de la práctica de la prestación de los servicios

médicos en el país.

El Doctor Juan Ramón Castañeda opina que la Ley 23 de 1981 “es tal vez el

único código de ética médica que sea vuelto Ley en algún país, pero

lamentablemente no se aplica, o se diluye su aplicación, por diferentes

circunstancias como la carencia de recursos, el desconocimiento de la norma o

el acto voluntario de desconocer la Ley en procura de intereses creados por las

circunstancias que enfrenta el médico o sus intermediarios”73.

La Constitución Política de Colombia en él articulo 49 dice: “La atención de la

salud y el saneamiento ambiental son servicios públicos a cargo del Estado. Se

garantiza a todas las personas el acceso a los servicios de promoción y

recuperación de la salud.

73
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. De la Responsabilidad Médica. Revista Derecho &
Medicina. Pág. 2b
64

Corresponde al Estado organizar, dirigir y reglamentar la prestación de

servicios de salud a los habitantes y de saneamiento ambiental conforme a los

principios de eficacia, universalidad y solidaridad.....”.

De dicha constitución, se derivan leyes especiales, o generales, normas, y

proyectos que aún cuando no sean leyes, son documentos que tiene como fin

regular el ejercicio médico y establecer sus funciones y campo de operación,

para así poder determinar su responsabilidad a la hora de ejercer su oficio.

Con el avenimiento de la Ley 100 de 1993, se presentaron muchos cambios en

materia de prestación de servicios médicos, al igual que en el tema de la

responsabilidad medica, es por eso que hay que ver con mayor énfasis el

punto de “la responsabilidad médica individual y en equipo, así como la de los

establecimientos de salud y por ende de la responsabilidad del Estado, que al

producirse un cambio en la relación médico- paciente y en la intermediación de

las entidades de salud en la prestación de los servicios médicos y de

asistencia social, se ve fuertemente involucrada”74.

La ley ha recibido criticas, como su poca profundidad a la hora de referirse a la

relación médico-paciente, pues esta relación “debe basarse en la libre

escogencia que el paciente hace de su médico… cosa que resulta casi

imposible puesto que el enfermo tiene que aceptar la imposición de la entidad

correspondiente. De manera, que el especialista escogido no se ha elegido en

razón del prestigio, idoneidad y modelo de trabajo, sino que se viene

74
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Ob. Cit. Pág. 2b
65

interfiriendo el derecho de escogencia de un acto libre, por una imposición que

muchas veces no satisface a unos ni a otros”75.

Existe en Colombia un gran número de propuestas que se han convertido en

ley de la República como otras que no llegaron a serlo, pero que de todas

formas hacen parte del desarrollo legislativo de nuestro parlamento en los

últimos años. A continuación haremos un breve recorrido por las leyes y

proyectos archivados relacionados con el campo del ejercicio de la medicina

en Colombia desde la nueva Constitución Política de 1991 hasta nuestros días:

2.4.1 LEYES EXPEDIDAS

2.4.1.1 REGLAMENTACIÓN DE LAS ESPECIALIDADES DE LA

PROFESIÓN DE MEDICINA.

LEY 6 DE ENERO 16 DE 1991

POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA ESPECIALIDAD MEDICA DE

ANESTESIOLOGIA Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES.

PROYECTO: 95 de 1987

ORIGEN: Cámara

75
REY FORERO, Eduardo. Responsabilidad en la Psiquiatría. Revista Derecho &
Medicina. Volumen 4 # 35. Julio 2001 Pág. 3b
66

En esta ley se establece a la anestesiología como una especialidad de la

medicina, y por el riesgo potencial al que están expuestos se considera de alto

riesgo y con un tratamiento laboral especial.

Solo podrán practicarla quienes de acuerdo con esta ley cumplan con los

requisitos exigidos para su práctica en Colombia.

Se creó por medio de esta ley el Comité Nacional del Ejercicio de la

Anestesiología, el cual tiene como una de sus funciones vigilar y controlar el

ejercicio de estos especialistas.

Con el Proyecto de Ley 104 de 1997 propuesto por la entonces ministra de

salud la Doctora Maria Teresa Forero, se buscó modificar parcialmente la ley

en mención, por medio de la inclusión de otras disposiciones para su ejercicio

y la responsabilidad de éstos en su práctica.

LEY 657 DE JUNIO 7 DE 2001

POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA ESPECIALIDAD MÉDICA DE LA

RADIOLOGÍA E IMÁGENES DIAGNOSTICAS Y SE DICTAN OTRAS

DISPOSICIONES.

PROYECTO: 82 de 1999

ORIGEN: Cámara

Con el Proyecto de Ley 115 de 1998 comienza la idea de reglamentar la

especialidad de radiología, propuesto por el honorable senador Mario Uribe


67

Escobar, pero este fue archivado durante las sesiones de la cámara de

representantes. Posteriormente esta iniciativa fue retomada, tramitada, y

aprobada como Ley de la Republica.

La Ley 657 establece el objeto y la competencia de esos especialistas, sus

derechos y deberes, al igual que el órgano que los regula.

En su articulo 17 consagra la responsabilidad profesional del radiólogo de la

siguiente forma: “En materia de responsabilidad profesional, los médicos a los

que hace referencia la presente ley, estarán sometidos a los principios

generales de la responsabilidad a los profesionales de la salud”.

2.4.1.2 REGLAMENTACIÓN DE POFESIONES AFINES A LA MEDICINA.

LEY 36 DE ENERO 6 DE 1993

POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE BACTEROLOGO Y

SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES.

PROYECTO: 067 de 1992

ORIGEN: Senado

La bacteriología a pesar de no ser una especialización de la medicina guarda

gran relación con ella por dedicarse ambas al área de la salud.

Esta ley fue presentada al Congreso por el honorable senador Gustavo Dajer,

con el fin de establecer los requisitos necesarios para poder desarrollar esta
68

profesión en el país, y se constituyo el Colegio Nacional de Bacteriología, el

cual estará encargado entre otras cosas de regular el buen ejercicio de estos

profesionales.

LEY 2 66 DE ENERO 25 DE 1996

POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE ENFERMERIA EN

COLOMBIA Y SE DICTAN OTRAS DISPOSIONES

PROYECTO: 48 de 1995

ORIGEN: Senado

En él artículo primero se establece que “la presente ley reglamenta el ejercicio

de la profesión de enfermería, define la naturaleza y el propósito de la

profesión, determina el ámbito del ejercicio profesional, desarrolla los principios

que la rigen, determina sus entes rectores de dirección, organización,

acreditación y control del ejercicio profesional y las obligaciones y derechos

que se derivan de su aplicación”.

Esta ley fue propuesta por la honorable senadora Maria Del Socorro

Bustamante, y fue analizada por la Cámara de Representantes mediante el

Proyecto de Ley 222 de 1995.


69

LEY 372 DE MAYO 28 DE 1997

POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE OPTOMETRÍA EN

COLOMBIA Y SE DICTAN OTRAS DISPOSICIONES.

PROYECTO: 127 de 1996

ORIGEN: Senado

Propuesta por la entonces ministra de salud la doctora Maria Teresa Forero de

Saade, busco la regulación de la profesión de optometría y el sujetamiento de

estos especialistas a la ley.

Estableció la creación del Consejo Técnico Nacional Profesional de la

optometría, con el objeto de regular el servicio prestado por estas personas.

Lo más importante de esta ley, es que estableció detalladamente los campos

de acción de esta profesión y por lo tanto facilita el trabajo a la hora de

determinar las responsabilidades de éstos en la ejecución de sus funciones.

LEY 376 DE JULIO 4 DE 1997

POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE FONOUDIOLOGÍA Y

SE DICTAN NORMAS PARA SU EJERCICIO EN COLOMBIA.

PROYECTO: 98 de 1996

ORIGEN: Cámara

La primera vez que se trato de establecer los linimientos básicos que deben

cumplir los profesionales de esta rama de la salud fue 1992 por medio del
70

Proyecto de Ley 107, propuesto por el honorable representante José Fernando

Castro, pero este fue archivado.

En esta Ley se definían los parámetros para establecer quienes son

fonoaudiologos, y el ámbito de aplicación de esta carrera.

Se creo la Asociación Colombiana de Fonoaudiologia y Terapia de Lenguaje,

con el objeto de regular la profesión y su ejercicio.

LEY 528 DE SEPTIEMBRE 14 DE 1999

POR LA CUAL SE REGLAMENTA LA PROFESIÓN DE FISIOTERAPEUTA Y

SE DICTAN NORMAS PARA SU EJERCICIO EN COLOMBIA.

PROYECTO: 184 de 1998

ORIGEN: Senado

Propuesta por el honorable senador Hernando Pinedo Vidal.

La ley en mención trata sobre los requisitos necesarios para ejercer la

profesión de fisioterapia en Colombia.

Por otro lado establece la competencia de estos profesionales y sus

responsabilidades a la hora de la ejecución de su trabajo.


71

2.4.2 PROYECTOS DE LEY ARCHIVADOS

Fueron muchas las iniciativas de los honorables congresistas que resultaron

archivadas durante esto últimos años, pues a partir de la nueva Constitución

Política creció el ímpetu por desarrollar campos como el de la medicina, tan

necesarios en la vida moderna, para no dejar desamparadas a las personas

que requerían los servicios de estos profesionales y que resultaban

perjudicados por estos en el ejercicio de su labor.

Con el Proyecto de Ley 201 de 1992 propuesto por el Senador Gustavo

Rodríguez Vargas comienza una larga cadena de iniciativas que tenían como

fin la reglamentación de las especialidades de los médicos en Colombia. En

1994 con el Proyecto 102 el mismo senador se encargaría de volverlo a

presentar a su comisión pero una vez mas fue rechazado y archivado en

plenaria por no creerse necesario. El Senador Luis Guillermo Vélez Trujillo en

1996 recogería esa iniciativa con el proyecto, pero una vez mas sería

archivado.

Fueron varias las áreas de la medicina que fueron objeto de iniciativas y que

no llegaron a ser leyes, pero que es importante mencionar para conocer el

desarrollo legislativo desde la nueva Constitución Política hasta nuestros días:

1. PROYECTO DE LEY 161 DE 1992, Con el cual se reglamenta un

proceso único de habilitación del oficio del DENTISTA.


72

2. PROYECTO DE LEY 105 DE 1992, por la cual se reglamenta la

profesión de FONOUDIOLOGIA-TERAPIA DE LENGUAJE y se dictan otras

disposiciones para su ejercicio en el país, senador ponente José Fernando

Castro Caicedo.

3. PROYECTO DE LEY 159 DE 1996, Por medio de la cual se reglamenta

la especialidad de NEUROLOGÍA en Colombia y se dictan otras disposiciones,

Senador ponente: Fermín Ovalle Isaza.

4. PROTECTO DE LEY 217 DE 1997, por medio del cual se reglamenta la

especialidad odontológica de cirugía MAXILOFACIAL y se dictan otras

disposiciones, Senadora ponente Consuelo Durán de Mustafa.

5. PROYECTO DE LEY 184 DE 1998, por medio de la cual se reglamenta

la profesión de FISIOTERAPIA, senador ponente Hernando Pinedo.

6. PROYECTO DE LEY 144 DE 1998, por la cual se reglamenta él la

especialidad médica de RADIOLOGÍA E IMEGENES DIAGNÓSTICAS,

senador ponente Mario Uribe Escobar.


73

7. PROYECTO DE LEY 238 DE 2000, por medio de la cual se reglamenta

la TERAPIA RESPIRATORIA y se dictan otras disposiciones, Senador ponente

Luis Javier Castaño.

8. PROYECTO DE LEY 241 DE 2000, por medio de cual se reglamenta la

ocupación de PARAMÉDICO y se dictan normas complementarias,

representante ponente William Vélez.

9. PROYECTO DE LEY 158 DE 2001, con la cual se reglamenta las

especialidades HEMATOLÓGICAS y ONCOLÓGICA clínica y pediátrica,

senador ponente José Jaime Nicholls.

10. PROYECTO DE LEY 176 DE 2001, La Cámara de Representantes

pretendió con este proyecto reglamentar la especialidad médica de la CIRUGÍA

PLÁSTICA, mediante normas que determinaban su naturaleza en relación con

otras especialidades, disposiciones que aluden a su servicio, funciones y

derechos de los especialistas, así como normas sobre organización y control

de la especialidad.

Existen tres proyectos que ameritan nuestra atención por tratar directamente

del tema que estamos estudiando, pero que al igual que los otros proyectos
74

también quedaron archivados, pero no por esto pierden su importancia y

relevancia en la vida actual.

1. PROYECTO DE LEY 144 DE 1998 con el cual se trató de reglamentar el

EJERCICIO DE LA PROFESIÓN MÉDICA en Colombia propuesto por el

Ministro de Salud de ese año el Doctor Virgilio Galvis Ramírez, él cual fue

archivado. Este proyecto fue retomado en 1999 por el honorable senador Luis

Eduardo Vives con él numero 160 DE 1999.

El proyecto de ley tenía como objeto “dictar las normas relativas al ejercicio

profesional de la medicina, definir la naturaleza y el propósito de la profesión

médica, determinar el ámbito del ejercicio profesional, desarrollar los principios

que la rigen, señalar sus entes rectores, de organización, acreditación y control

del ejercicio profesional y las obligaciones que se derivan de su aplicación”.

En la exposición de motivos el Doctor Virgilio Galvis Ramírez explica que: “el

desarrollo normativo de la medicina ha sido escaso con relación a los cambios

que se han producido a nivel social, educativo, científico y tecnológico, y el

avance de estos aspectos rebasan los reglamentos y disposiciones,

necesitándose actualizar y compenetrar todo ese desarrollo con la realidad

existente a través de una regulación integral.

Es así como este proyecto de ley se propone regular la medicina en general y

sus especialidades, y es de evidente urgencia para la salud de los

colombianos, por cuanto la falta de regulación integral de ellas, impide lo que


75

puede denominarse un control de calidad en el servicio médico y no existe una

ley actualizada que precise los elementos necesarios para practicar la

medicina o especialidades de manera idónea...”.

2. PROYECTO DE LEY 125 DE 1999, por medio de la cual se establecen los

principios que regulan la RESPONSABILIDAD DE LOS PROFESIONALES DE

LA SALUD, propuesto por el honorable representante Jorge Giraldo Serna,

este proyecto fue archivado.

“Los profesionales de la salud solo serán responsables de los daños causados

en el ejercicio de su profesión por dolo o culpa grave, sin perjuicio de que

puedan exonerarse demostrando ausencia de culpa o causa extraña” 76, con

este articulo se busco establecer un marco de acción para que el juez

determinara en que casos existe o no responsabilidad del médico.

Un punto importante de este texto es el que se refiere al consentimiento

informado, él cual “debe obtenerse en forma libre y consciente; debe otorgarse

de manera clara, expresa, sencilla, y por escrito, permitiéndole al informado

conocer la clase de tratamiento o procedimiento que se pretende efectuar, los

riesgos y complicaciones previstos de acuerdo a las condiciones clínico

patológicas del paciente, la existencia de otros tratamientos o procedimientos

76
PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES,
Articulo 1, Jorge Giraldo Serna.
76

con sus posibles implicaciones, y todos los demás aspectos que de acuerdo

con la naturaleza y características del caso deban ser informados”77.

Por otro lado, el proyecto recoge lo establecido por la jurisprudencia y la

doctrina durante muchos años al consagrar: que “salvo disposición legal

especial o pacto expreso en contrario, el profesional de la salud, en ejercicio de

su profesión adquiere obligación de medio, no de resultado” 78. A demás “la

responsabilidad del profesional no ira mas allá del riesgo previsto,

entendiéndose éste como el referido a la situación clínico-patológica del

paciente en cada situación específica, de acuerdo con la lex artis vigente al

momento de los hechos, y no por la descripción general de riesgos de las

ciencias de la salud”79.

La prescripción será de dos años contados a partir del hecho causal, sin

perjuicio de la vigencia de normas especiales sobre prescripción o caducidad

que establezcan términos menores, lo cual es un error, pues este tiempo es

demasiado corto para que se presenten las secuelas de una mala actuación

médica.

El articulo octavo consagra: “Excepto los casos de urgencia o en los que no

fuera posible, a la realización de tratamientos médicos y procedimientos

quirúrgicos debe anteceder el consentimiento informado por parte del paciente

77
PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES,
Parágrafo del articulo octavo, Jorge Giraldo Serna.
78
PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES,
Articulo 2, Jorge Giraldo Serna.
79
PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES,
Articulo 3, Jorge Giraldo Serna.
77

o de sus representantes legales. Si este es menor de edad, salvo que se trate

de procedimientos médicos de carácter altamente invasivo e irreversible que

tengan incidencia en el desarrollo futuro del menor, el consentimiento

otorgado por sus representantes legales será valido, siempre que se trate de

un consentimiento cualificado y persistente, y se garanticen sus derechos a la

vida, la integridad personal, la autonomía y al libre desarrollo de la

personalidad”80.

Es importante tener claro que el “consentimiento debidamente otorgado

eximirá de responsabilidad al medico por la concreción del riesgo, que

teniendo el deber y la forma de prever de acuerdo a la lex artis, haya

informado”81, es decir, que una vez sea informado el paciente de los posibles

riesgos que corre en el actuar médico, éste queda exonerado de la

responsabilidad que se pueda generar de esa atención.

El consentimiento cualificado y persistente es aquel que “implica la

comprensión de las posibilidades, límites y riesgos de los actuales

tratamientos, así como su otorgamiento en forma reiterada y por etapas de

acuerdo al tratamiento o procedimiento de que se trate”82.

80
PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES,
Articulo 8, Jorge Giraldo Serna.
81
PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES,
Articulo 8, Jorge Giraldo Serna.
82
PROYECTO DE LEY NUMERO 125 DE 1999 CAMARA DE REPRESENTANTES,
Articulo 8 parágrafo, Jorge Giraldo Serna.
78

El representante Jorge Giraldo Serna planteó en esa oportunidad que “este

proyecto de ley busca actualizar la normatividad legal ante los nuevos

fenómenos planteados y ante los nuevos parámetros constitucionales,

recorriendo la jurisprudencia de los últimos años de tal forma que el ejercicio

de estas profesiones se dé ante un mejor marco de seguridad jurídica”.

Sin lugar a dudas este proyecto de ley es de los más importantes tramitados

en el congreso, pues recoge tanto la jurisprudencia de nuestro país como la

doctrina internacional sobre el tema.

3. PROYECTO DE LEY 214 DE 1998 DE LA CAMARA DE

REPRESENTANTES, por el cual se dictan normas en materia de ÉTICA

MÉDICA, propuesto por la ministra de salud Maria Teresa Flores. En 1996

también se intentó determinar las normas en materia de ética médica con el

proyecto de ley 135.

Retomado en el 2001 con el proyecto de ley 62, por el cual se dictan normas

ÉTICO DISIPLINARIAS para el ejercicio de la medicina en Colombia, realizado

por el honorable senador Carlos Corsi Otalora.

Este proyecto de Ley tenía como fin actualizar a la Ley 23 de 1981, la cual se

encuentra desactualizada con respecto a los acontecimientos jurídicos que ha

vivido el país durante la década de los noventa y los años del dos mil.
79

2.4.3 TEXTO DEFINITIVO DEL PROYECTO DE LEY 173 DE 2001

APROBADO POR EL SENADO

En el 2001 fue presentado al senado por el honorable senador Eduardo

Arango Piñeres, el PROYECTO DE LEY 173, por el cual se establecen los

principios que regulan la RESPONSABILIDAD DE LOS MÉDICOS y se dictan

otras disposiciones para el ejercicio de la profesión médica en Colombia. Este

proyecto no se ha convertido aún en Ley de la república, pero si fue aprobado

su texto definitivo en sesión plenaria del día 13 de diciembre de 2001, y solo

falta la sanción presidencial.

El objeto del proyecto según el texto, es la delimitación de la responsabilidad

de los profesionales de la salud y el desarrollo de los principios básicos

aplicables a éstos.

Las obligaciones de lo médicos son por regla general de medios y

excepcionalmente de resultado, así lo confirma este proyecto en su articulo 11

cuando expresa: “... Los médicos sólo serán responsables de los daños

causados en el ejercicio de su actividad y ella se entenderá que es gestión de

medio y no de resultado”83.

83
PROYECTO DE LEY NUMERO 1173 DE 2001 SENADO, Articulo 11, Eduardo Arango
Piñeres
80

Respecto a la responsabilidad de los galenos el texto consagra: que “la

responsabilidad del profesional de la salud no irá más allá del riesgo previsto,

entendiéndose éste como el referido a la situación clínico patológica del

paciente en cada situación específica, de acuerdo con la Lex Artis vigente al

momento de los hechos y no por la descripción general de riesgos de las

ciencias de la salud...”84.

Al respecto el Doctor Eduardo Rey explica: “de acuerdo con el proyecto la

responsabilidad no irá más allá del riesgo previsto para cada situación clínica

de acuerdo con la Lex artis”85. Entendiendo como riesgo previsto: “aquel que

se corre con la sujeción a las normas que rigen la ciencia y el arte médicos, y a

la prudencia, pericia y diligencia exigibles al médico de acuerdo con las

condiciones clínico-patológicas del paciente y las circunstancias de modo

tiempo y lugar en que se desarrollo el acto médico”86.

El proyecto en un principio contemplaba “la prescripción a los dos años por las

acciones y daños causados con ocasión del ejercicio de su profesión”87, ahora

establece que: “las acciones de responsabilidad éticas, disciplinaria, fiscal, civil

o administrativa de los médicos y de los profesionales de la salud, en general,

que se llegaren a presentar con oportunidad del acto médico o del ejercicio de

su profesión, prescribirá según los términos previstos por las normas legales

84
PROYECTO DE LEY NUMERO 1173 DE 2001 SENADO, Articulo 11, Eduardo Arango
Piñeres.
85
REY FORERO. Eduardo. Responsabilidad de los Médicos. Revista Derecho &
Medicina. Junio 2001.Bogotá Pág. 3b
86
REY FORERO. Eduardo. Articulo Cit. Pág. 3b
87
REY FORERO. Eduardo. Articulo Cit. Pág. 3b
81

correspondientes”88. Cambio que consideramos muy valido, ya que muchos

doctrinantes anotaron “que este tiempo es demasiado corto, pues, hay ciertos

casos en los que el daño aparecen mucho tiempo después, como en las

enfermedades de evolución lenta (hepatitis b, SIDA, etc.)” 89, opinión que

compartimos, por lo que pensamos que es improcedente para el paciente

contar con un término de prescripción tan corto como el que se propuso en

esta oportunidad.

En cuanto a los perjuicios, estos se regirán por las tablas o tarifas de

indemnización previamente establecidas y vigentes para el sistema de

seguridad social. Es decir que cuando se presenten perjuicios en un paciente

como consecuencia del ejercicio de la actividad médica, éstos serán resarcidos

de acuerdo a tablas preestablecidas.

2.4.4 SOCIEDAD COLOMBIANA DE ANESTESIOLOGIA Y

REANIMACIÓN

En la XLI Asamblea General de la Sociedad Colombiana de Anestesiología y

Reanimación “SCARE”, reunida en Manizales en Agosto de 1991, aprobó las

normas mínimas de anestesiología, las cuales fueron posteriormente

analizadas y aprobadas por el Comité Nacional del ejercicio de la

Anestesiología; el cual es un organismo de alto nivel conformado por los

88
PROYECTO DE LEY NUMERO 1173 DE 2001 SENADO, Articulo 12, Eduardo Arango
Piñeres.
89
REY FORERO. Eduardo. Articulo Cit. Pág. 3b
82

representantes de SCARE, Ministerio de salud, Superintendencia de salud y

ASCOFADE.

Hacemos referencia a este tema, por considerar que si bien este compendio

normativo no es una Ley de la República, si tiene como fin regular el

comportamiento del médico anestesiólogo y brindar mayor seguridad a los

pacientes, pues su desconocimiento y posterior violación desencadenaría

responsabilidad civil del galeno.

2.4.4.1 GRUPO DE TRABAJO 8 DE LA IV ASAMBLEA ORDINARIA

SOBRE RESPONSABILIDAD PROFESIONAL.

La Confederación Médica Latinoamericana y del Caribe se creo en 1997 y está

integrada por 14 países: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile,

Ecuador, El Salvador, Haití, Honduras, Paraguay, Puerto Rico, Uruguay y

Venezuela.

La Declaración de la Confemel sobre la Responsabilidad Legal en el ejercicio

de la Medicina, aprobada en diciembre de 1999 en Cartagena, Colombia,

consagra determinaciones como las siguientes:

a) “Constituye un motivo de preocupación la existencia de muy elevados

plazos en la prescripción en materia de responsabilidad civil del médico. Se


83

entiende que tales normas legislativas no se adecuan a la realidad actual y que

determinan costos adicionales innecesarios al sistema de salud”90.

b) “La posibilidad de litigar sin costo en el fuero civil es uno de los factores que

estimula la formulación de reclamos judiciales injustificados contra los médicos.

Tal situación se revela como preocupante en países como Argentina y Brasil,

mereciendo el apoyo de Confemel los reclamos de los médicos de estos

países en cuanto a que el litigio sin costo se someta a los siguientes principios:

que el reclamo sea patrocinado por un Defensor Público; que las pericias sean

realizadas por entidades públicas; que se regule con suficiente rigor el

otorgamiento de este beneficio”. 91

d) “Se debe propender a que los montos de las indemnizaciones por

responsabilidad médica se establezcan con criterios realistas, en especial los

referidos al daño moral”92.

e) “En tanto la adecuada formación de pregrado y postgrado es un elemento

decisivo en la prevención de la mala praxis médica, se observa con suma

90
Preocupa El Marco Legal De Varios De Los Países . Grupo De Trabajo 8 De La Iv
Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet:
http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm
91
Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv
Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet:
http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm
92
Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv
Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet:
http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm
84

preocupación la descontrolada proliferación de escuelas de medicina en varios

países de la Región”93.

f) “Si bien se reconoce universalmente que las fallas en la relación médico-

paciente son una de las claves en la generación de demandas por

responsabilidad médica, la Asamblea de Confemel llama la atención sobre la

existencia de fallas éticas en la relación interprofesional entre los médicos, las

que frecuentemente son el origen de juicios por presunta responsabilidad

profesional de médico”94.

g) “Se debe estimular, desde las instituciones médicas, formas de protección

contra las demandas por mala praxis”95.

2.5 POSICION JURISPRUDENCIAL DE LA CORTE SUPREMA DE

JUSTICIA

Como nota preliminar al tema de jurisprudencia de la Corte Suprema de

Justicia, estimamos pertinente hacer las siguientes consideraciones:

93
Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv
Asamblea Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet:
http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-grupo8.htm
94
Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea
Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-
grupo8.htm
95
Preocupa el Marco Legal de Varios de los Países. Grupo De Trabajo 8 De La Iv Asamblea
Ordinaria. Tomado de la pagina de Internet: http://www.smu.org.uy/confemel/as0012-
grupo8.htm
85

La responsabilidad del Estado por falla del servicio médico es un tema

especifico del Derecho Administrativo. Por ésto nos limitaremos a hacer una

breve exposición de la posición adoptada por el Consejo de Estado sobre el

particular, por considerar que éste guarda relación con el objeto de este

trabajo.

La responsabilidad por falla del servicio consiste “en afirmar que la

ausencia de la prestación de un servicio estatal o la deficiencia en la misma

que genera un daño, da lugar a la responsabilidad directa del estado”96. En

este orden de ideas, se origina una obligación de “resarcimiento a favor de los

ciudadanos cuando se presenta una falla en algún servicio prestado por el

ente estatal”97.

Este régimen de responsabilidad estatal se aplica a los profesionales de la

salud al servicio del Estado, cuando por su indebida práctica médica se

ocasionan daños a los pacientes, por considerarse en este evento, que los

galenos son funcionarios del Estado.

En Sentencia de Octubre 29 de 1990 el Consejo de Estado así lo expreso:

“De esta forma, al comprobarse por la declaración del médico mismo que a
la lesionada no se le practicó el examen preanestésico, que por lo general
cosiste en información verbal simplemente, lo cual por si excluye que se
tratará de un examen especializado de muy alto costo, la sala no puede
menos que declarar que está probada la Falla o Falta del servicio, y que como
consecuencia directa de ella se produjo el daño, esto es, la parálisis, hecho
que se encuentra debidamente acreditado, ya que por demás subsiste y es de
carácter permanente o irreversible”.

96
VIDAL PERDOMO, Jaime. Derecho administrativo. Bogotá, Ed. Temis, 1987. 9º ed.
97
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 125.
86

Es importante analizar en este punto, la diferencia que existe en la culpa por

responsabilidad civil contractual o extracontractual, y la culpa que genera la

responsabilidad por falla en el servicio médico. En esta última “no se

requiere necesariamente probar que la culpa individual del agente, sino que

basta probar que hubo una falla en el servicio, la cual puede inclusive

catalogarse como “anónima”, según los principios del derecho

administrativo”98. Por lo tanto lo que tiene que probarse es una irregularidad

en la prestación del servicio médico independientemente del análisis de la

conducta del galeno que la realizó. Esto configura un tratamiento jurídico y

procesal distinto para la responsabilidad del médico que actúa como

funcionario del Estado, ya que se regirá por los principios del derecho

administrativo.

El Consejo de Estado ha dicho que:

“Así se absuelva al agente autor material del daño, esta circunstancia no es


obstáculo para considerar que el hecho generador del perjuicio, si constituye
una Falla del Servicio, porque como lo tiene repetido la jurisprudencia de esta
Corporación, la responsabilidad del Estado es objetiva, anónima, basta que se
acredite que el perjuicio se produjo como consecuencia de la prestación de un
servicio a cargo del Estado”99.

98
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 129.
99
Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s.c., Oct. 29, 1990.
87

En la responsabilidad médica por falla del servicio la culpa se presume, es por

ésto que quien reclama perjuicios sólo tiene que probar el daño y el nexo

causal con la prestación del servicio, pues como lo expresó el Consejo de

Estado en sentencia del 24 de agosto de 1992: “ en la falla del servicio médico

se presume uno de los tres supuestos de esa responsabilidad (los otros, como

se sabe, son el daño y la relación de causalidad)” .

Respecto al consentimiento informado100 el mismo Tribunal recientemente

expresó que éste “debe ser ilustrado, idóneo y concreto, previo, y que su

prueba corre a cargo del demandado, en atención a la situación de privilegio

en se encuentra fácticamente, para procurar la verdad dentro del proceso”

pues este debe cumplir todos estos requisitos expresados por el Consejo para

que exonere de toda responsabilidad al médico, y en este caso al Estado.

En la evolución jurisprudencial sobre la responsabilidad por el servicio médico

asistencial, exigía al aportar la prueba de la falla para la prosperidad de sus

100
Consentimiento Informado: en la relación médico-paciente, este último debe tener
claridad y certeza al manifestar su consentimiento expresamente, sea de manera personal o,
a través de una persona que tenga su representación legal para hacerlo, o la más allegada; y
este consentimiento será válido en la medida que se obtenga de una persona bien informada.

El médico igualmente tiene la obligación de mantener informado al paciente, la cual debe ser
suministrada en forma completa y precisa. El consentimiento debe referirse exclusivamente a
tópicos inherentes a la salud del paciente, además no requiere de determinadas formalidades,
pero esta premisa tiene una excepción en materia de trasplante de órganos, tema regulado en
la legislación colombiana, al señalar que el consentimiento otorgado por el paciente, en uno de
tales eventos, debe ser consignado en un escrito (Decreto 1171 de 1989, artículo 33).
88

pretensiones. Posteriormente, en sentencia de octubre 24 de 1990, la Sala

consideró, que el artículo 1604 del Código Civil, debía ser aplicado también en

relación con la responsabilidad extracontractual y en consecuencia, la prueba

de la diligencia y cuidado correspondía al demandado en los casos de

responsabilidad médica.

La presunción de falla del servicio médico, que con esta posición

jurisprudencial se acogió, fue reiterada en la decisión del 30 de junio de 1992,

pero con una fundamentación jurídica diferente, la cual hacia referencia a la

posibilidad en que se encuentran los profesionales, dado su conocimiento

técnico y real, por cuanto ejecutaron la respectiva conducta, de satisfacer las

inquietudes y cuestionamientos que puedan formularse contra sus

procedimientos.

La responsabilidad del Estado por los servicios médicos, se rige por el régimen

de la falla presunta, luego sólo bastará probar los anteriores elementos, para

que se configure esta clase responsabilidad.

La jurisprudencia se refiere a la Falla del servicio y su procedencia, así:

“...Una intervención quirúrgica por sencilla que sea lleva implícito un


riesgo y por tanto, debe hacerse previa información de estado físico y
psíquico del paciente...”101

101
Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s.c., Oct. 24, 1990.
M.P. Gustavo de Greiff Restrepo
89

La Jurisprudencia en lo referente a la Falla del servicio médico, señala:

“...Al médico no se obliga a realizar el hecho preciso y determinado


consistente en el resultado de sanar al enfermo, pero sí se obliga a
realizar y aún garantiza otros hechos no menos precisos y determinados,
a saber, la sucesión de actos en que consiste un tratamiento médico con
miras a obtener el resultado deseado...”.102

Con respecto a la falla presunta del servicio médico, la Jurisprudencia señala:

“...Ahora bien, por norma general le corresponde al actor la demostración


de los hechos y cargos relacionados en la demanda. Sin embargo, con
mucha frecuencia se presentan situaciones que le hacen excesivamente
difícil, cuando no imposible, las comprobaciones respectivas, tal el caso d
las intervenciones médicas, especialmente quirúrgicas, que por su propia
naturaleza, por su exclusividad, por la privacidad de las mismas, por
encontrarse en juego intereses personales o institucionales etc., en un
momento dado se constituyen en barreras infranqueables, para el
paciente, para el cuidado común obligado procesalmente a probar
aspectos científicos o técnicas profesionales sobre los cuales se edifican
los cargos que por imprudencia, negligencia o impericia formula en el
ejercicio de una determinada acción judicial, contra una institución
encargada de brindar servicios médicos u hospitalarios.

Sin duda, resultaría más beneficioso para la administración de justicia en


general, resolver esta clase de conflictos, si en lugar de someter al
paciente, normalmente el actor o sus familiares, a la demostración de las
fallas en los servicios y técnicas científicas prestadas por especialistas,
fueron éstos, los que por encontrarse en las mejores condiciones de
conocimiento técnico y real por cuanto ejecutaron la respectiva conducta
profesional, quienes satisficieran directamente las inquietudes y
cuestionamientos que contra sus procedimientos se formulan.

Podrán así los médicos exonerarse de responsabilidad y con ello los


centros clínicos oficiales que sirven al paciente, mediante la
comprobación, que para ellos, se repite, es más fácil y práctica, de haber
actuado con la eficiencia, prudencia o idoneidad requeridas por las
circunstancias propias al caso concreto, permitiéndole al juzgador un

102
Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s.c., Agosto 16,
1989. M.P. Gustavo de Greiff Restrepo
90

mejor conocimiento de las causas, procedimientos, técnicas y motivos


que llevaron al profesional a asumir determinada conducta o tratamiento.

Esta, por lo demás, es la orientación moderna de algunas legislaciones,


que pretenden en los casos de las profesionales liberales atribuir a éstos
la carga de la prueba de haber cumplido una conducta carente de culpa.

Precisamente, en relación con el tema comentado y su consagración en el


“ Proyecto de unificación de la legislación civil y comercial” de Argentina,
el profesor Augusto M. Morello en su obra “La prueba. Tendencias
Modernas”, Editorial Platense-Abeledo-Perot, 1991, páginas 84 y 85
escribe: “1. En consonancia con las ideas hoy predominantes, se ha
desplazado el eje de referencia hacia el consumidor jurídico-quien es el
que recaba la tutela jurisdiccional- más que colocarlo en el vértice del
operador (juez o abogado) del fenómeno litigioso involucrado.

2.Responde solidariamente a la más conveniente función razonablemente


posible, del lado del consumidor e, igualmente, del lado del profesional
accionado, con los concurrentes beneficios para el órgano destinatario de
la prueba.

Si como con acierto se ha puntualizado, en principio y como regla, no es


otro que el médico y no el enfermo el que mejor conoce “cuál fue la
situación al comienzo de la atención, qué terapia era la más conveniente
de acuerdo con el diagnóstico, que dificultades se presentaron, con qué
medios técnicos disponían, cuáles fueron las causas probables de la
frustración, qué rol le culpo a la entidad sanatorial”, la norma insinuada
recoge esa evidencia de la situación real para reglamentarla en la
asignación de un deber de cooperación (carga) que no significa, de por sí,
atribuir culpa en el obrar del médico en el caso...”103.

El Consejo de Estado acerca de la falla presunta en los servicios médicos

oficiales, expuso:

“...Como se observa, la nueva jurisprudencia, que implica un


trascendental avance en este campo, consagra en forma más técnica la
noción de falla presunta. Y aunque esta especie del género falla del
servicio se asemeja en cierta forma a la noción que se ha venido

103
Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Julio. 30, 1992.
M.P. Daniel Suárez Hernández
91

aplicando como tal con esa misma denominación (en los eventos de
lesiones o muertes causadas por las armas de dotación oficial o por
vehículos automotores o líneas de conducción de energía), estima la Sala
que debe hacer algunas precisiones, porque entre una y otra existen
motivos diferenciales. Así:

Mientras en el evento de la responsabilidad por falla del servicio médico


oficial se presume dicha falla, es decir se presume uno de los tres
supuestos de esa responsabilidad ( los otros, como se sabe, con el daño
y la relación de causalidad). En el evento de los daños producidos por las
cosas por las cosas o actividades peligrosas, ya no juega la falla o la
conducta irregular de la administración, sino sólo el daño antijurídico
(C.N., art. 90) produciéndose así más que una presunción de falla, una
responsabilidad...” 104.

Responsabilidad Administrativa. Con la Constitución Política de 1991, se

consagra la cláusula general de responsabilidad del Estado, sustentada en el

artículo 90, en donde se abre paso a la posibilidad de que el Estado repita

contra sus funcionarios cuando éste es condenado por responsabilidad de

alguno de ellos, pero esta responsabilidad debe ser consecuencia de una


105
conducta dolosa o gravemente culposa . Con esto el médico que actúa

dentro de alguna de estas dos conductas responderá ante el Estado, como

consecuencia de la acción de repetición que se genera después de haberse

condenado al Estado por falla del servicio médico.

104
Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Agosto 24,
1992. Expediente 6754 M.P. Carlos Betancur Jaramillo.
105
Artículo 90 C.P.: El Estado responderá patrimonialmente por los daños antijurídicos que el
sean imputables, causados por la acción o la omisión de las autoridades públicas.
En el evento de ser condenado el estado a la reparación patrimonial de uno de tales daños,
que haya sido consecuencia de la conducta dolosa o gravemente culposa de un agente suyo,
aquel deberá repetir contra este.
92

Esta cláusula general de responsabilidad extracontractual del Estado, tiene dos

elementos característicos: la existencia de un daño antijurídico y que sea

imputable al Estado.

Una definición sobre esta responsabilidad la señala el autor Gustavo Mora

como: “el incumplimiento en el funcionamiento normal del servicio, que

incumbe a uno o varios agentes de la administración, pero no imputable a ellos

personalmente. Ese incumplimiento debe examinarse a la luz del nivel medio

que se espera del servicio, variable según su misión y según las circunstancias,

estructurándose la falla, cuando éste se presta por debajo del nivel”.106

Competencia. Siguiendo el artículo 78 del C.C.A. “ Los perjudicados podrán


demandar, ante la jurisdicción de lo contencioso administrativo según las reglas
generales, a la entidad, al funcionario o a ambos. Si prospera la demanda
contra la entidad o contra ambos y se considera que el funcionario debe
responder, en todo o en parte, la sentencia dispondrá que satisfaga los
perjuicios la entidad. En este caso la entidad repetirá contra el funcionario por
lo que le correspondiera.”

La respectiva acción se instaurara ante la Jurisdicción Contenciosa

Administrativa, puesto que, una de las partes es una entidad pública que presta

servicios médicos, por ende, es competencia exclusiva de la jurisdicción

contenciosa administrativa.

La Jurisdicción de lo Contencioso administrativo no ésta instituida para fallar


controversias científicas, lo cual consta en el siguiente fallo:

106
GUZMÁN MORA, Fernando la Práctica de la Medicina y la ley. Editorial Biblioteca Jurídica
DIKE, Medellín, 1996. 1 Ed. Pág.158
93

“...Saber si un tratamiento ha sido bien o mal ordenado, si no hubiere sido


preferible otro, si tal operación era o no indispensable, si hubo o no
imprudencia al arriesgarla, habilidad o no al ejecutarla, si este o aquel
instrumento, según este o aquel procedimiento no habría resultado mejor,
son cuestiones científicas a debatirse entre médicos y que no pueden
constituir casos de responsabilidad civil ni caer bajo el examen de los
tribunales, pero ello no es así desde el momento en que los hechos
reprochados a los médicos salen de la clase de los que, por su
naturaleza, están exclusivamente reservados a las dudas y discusiones
de la ciencia, desde el momento que se complican de negligencia,
ligereza o ignorancia de cosas que necesariamente deben saber...”107.

La acción de Reparación Directa, es la acción idónea para entablar una

demanda ante la Jurisdicción Contenciosa administrativa, consagrada en el

artículo 86 Modificado por la Ley 446/98, Art.31 que reza:

Acción de reparación directa. “La persona interesada podrá demandar


directamente la reparación del daño cuando la causa de la petición sea un
hecho, una omisión, una operación administrativa o la ocupación temporal
o permanente de inmueble por causa de trabajos públicos o por cualquier
otra causa.

Las entidades públicas deberán promover la misma acción cuando


resulten condenadas o hubieren conciliados por una actuación
administrativa originada en culpa grave o dolo de un servidor o ex-
servidor público que no estuvo vinculado al proceso respectivo, o cuando
resulten perjudicadas por la actuación particular o de otra entidad
pública”.

107
Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Abril 18, 1994.
Expediente 7973 M.P. Julio Cesar Uribe Acosta.
94

Elementos estructurantes. Los elementos que se destacan en esta clase de

responsabilidad, son:

1. Una acción u omisión, que es el hecho dañoso a cargo del médico-

agente.

2. Un daño antijurídico, que aquel daño que el particular no tiene la

obligación de soportar y que implica un detrimento patrimonial.

3. Nexo causal entre la acción u omisión y el daño antijurídico, es una

relación causa efecto en la responsabilidad médica.

En el régimen de responsabilidad médica, se presume el cuarto elemento que

es la falla del servicio. Hay que tener en cuenta que, si bien se presume la falla

del servicio, se debe demostrar el vinculo entre el nexo causal y la falla del

servicio para que se configure la responsabilidad del Estado, porque sino se

rompería dicho nexo, y no habría sustento para acreditar la responsabilidad. El

presente caso lo señala:

“...Pero en el caso concreto no hay lugar a aceptar como probable el


hecho de que la menor murió como consecuencia de una deficiente
atención médica frente a la broncoaspiración sufrida, por la negligencia
del personal auxiliar del hospital porque aquí no fue imposible obtener
certeza de dicho vínculo por razones de la complejidad científica del caso
sino por la decisión de la misma parte demandante y en consecuencia, es
ésta y no las entidades demandadas quien debe soportar los efectos
negativos de la carencia probatoria.

En síntesis, aunque se presuma la falla del servicio de las entidades


demandadas, no es posible condenarlas a pagar los perjuicios sufridos
95

por los demandantes con la muerte de su hija, porque no se acreditó el


vinculo causal entre esta falla y el daño por razones imputables sólo a
estos...”108.

Hechas las anteriores consideraciones, pasamos a abordar el tema de la

Jurisprudencia de la CORTE SUPREMA DE JUSTICIA en materia de

Responsabilidad Civil.

2.5.1 Sentencia del 30 de octubre de 1915 (G.J numero 1282 y 1283)

No es precisamente sobre responsabilidad civil medica pero sí sobre un tema

que guarda mucha relación con éste, el cual tocaremos por ser la primera vez

que la Corte toma en consideración la relación médico-paciente y las posibles

consecuencias jurídicas que se puedan presentar entre ellos.

La naturaleza jurídica del contrato de prestación de servicios médicos no ha

sido tratado de una forma uniforme por la Corte Suprema de Justicia, pues ha

tratado de establecerlo sin éxito en muchas ocasiones. En esta oportunidad

estima que este contrato es un arrendamiento de servicios al que se le aplican

normas del mandato:

“La Corte observa que la asistencia de un facultativo a un enfermo constituye


una prestación de servicios en arrendamiento… pero esta clase de servicios,
esto es, los de profesionales y carreras que suponen largos estudios, sin dejar
de estar comprendidas en la nomenclatura y reglas legales establecidas en el
Capitulo 9º, Titulo 26, Libro 4º, del Código Civil, está asimilado, según
disposiciones de los artículos 2069 y 2144 del mismo Código, al mandato y se

108
Consejo de Estado. Sección 3ª. Sala de lo Contencioso Administrativo. s., Marzo 22, 2001.
M.P.Ricardo Hoyos Duque.
96

rigen tanto por las reglas de este contrato como por las relativas a
arrendamiento de servicios inmateriales… 109”.

2.5.2 Sentencia del 29 de marzo de 1923 (G.J.t XXX)

La Corte en esta sentencia sigue sosteniendo que la relación que surge entre

él médico y su paciente a la hora de prestarle los servicios médicos es un

contrato de arrendamiento de servicios inmateriales asimilado al mandato:

“Esta doctrina esta de acuerdo con la disposición del articulo 2069 del Código
Civil, sobre arrendamiento de servicios inmateriales en relación con él articulo
2144, disposición que esta en el Titulo sobre mandato, y que versa sobre
servicios de profesionales y carreras que suponen largos estudios”110.

Pero la Corte en esta jurisprudencia agrega que:

“La fijación de servicios médicos debe hacerse, a falta de convenio, por la


costumbre establecida, y en su defecto por avaluó pericial, en lo cual entra
indudablemente la fijación que hace el Juez, de acuerdo con la facultad que
tiene para estimar la prueba pericial, con lo que no choca lo dispuesto en los
artículos 2054 y 2143 del código citado”111.

2.5.3 Sentencia del 7 de diciembre de 1923 (G.J. t XXX)

Esta sentencia comienza por diferenciar entre la consulta y el tratamiento, y las

obligaciones que se desprenden de cada una de estas relaciones médico-

paciente.

“El médico atendió al enfermo no en mera consulta, sino en tratamiento


completo de la enfermedad, el cual, como es bien sabido en la práctica
profesional, exige las visitas domiciliares, más o menos frecuentes, según sea
mayor o menor la gravedad del enfermo o más o menos lento el progreso de
curación”112.

109
SENTENCIA DEL 30 DE OCTUBRE DE 1915. Corte Suprema de Justicia, Pág. 204
110
SENTENCIA DEL 29 DE MARZO DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 52
111
SENTENCIA DEL 29 DE MARZO DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 52
112
SENTENCIA DEL 7 DE DICIEMBRE DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 238
97

En otro aparte la Corte se refiere al mismo tema diciendo:

“... el tratamiento en conjunto de una enfermedad se aprecia de ordinario,


según el uso profesional, en un mayor valor del que tienen visitas aisladas,
pero jamás en uno menor”113.

2.5.4 Sentencia del 29 de octubre de 1930 (G.J.t. XXXVIII)

En esta jurisprudencia se sigue desarrollando el tema del contrato de

prestación de servicios médicos y se determina que un médico no tiene qué

probar que pertenece a un determinado gremio profesional para que se le

aplique él articulo 2144 del Código Civil, sino que basta que esta sea de

aquellas que requieren largos estudios para que no se necesite pruebas:

“En concepto de la Corte, para la aplicación del citado articulo 2144 no es


preciso acreditar que el individuo que ha prestado los servicios es miembro de
determinado gremio profesional, sino que basta inquirir si la profesión es de
aquellas que suponen largos estudios, punto este que se resuelve en
abstracto, o sea sin necesidad de prueba: no hay porqué exigirlas para saber,
por ejemplo, que la ingeniería, la medicina y la abogacía se hallan en
semejante caso”114.

El Doctor Juan Castañeda explico: “la practica médica se encuentra incluida

dentro de las llamadas profesiones liberales y por razones inherentes a ella no

puede quedar fuera del ámbito de la responsabilidad civil, máxime teniendo en

cuenta el principio fundamental de la igualdad de los individuos ante la ley”115.

113
SENTENCIA DEL 7 DE DICIEMBRE DE 1923. Corte Suprema de Justicia, Pág. 239
114
SENTENCIA DEL 29 DE OCTUBRE DE 1930. Corte Suprema de Justicia, Pág. 243
115
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 2b
98

2.5.5 Sentencia del 5 de marzo de 1940 (G.J.t XLIX)

Es tal vez la primera sentencia colombiana que toca el tema de la

responsabilidad civil profesional en que incurren los médicos cuando

desarrollan su profesión.

La Corte Suprema de Justicia en esta sentencia encuadra a la medicina dentro

de las profesiones liberales, y por tal razón establece que las relaciones que se

dan entre él médico y su paciente son actos jurídicos que llevan envueltos un

su ejecución la responsabilidad civil del profesional.

“Las relaciones jurídicas entre este y su cliente no están circunscritas


únicamente a una actuación pasajera y fugaz, sino que trasciende a la órbita
más amplia de la responsabilidad”116

Por otro lado, la responsabilidad profesional del médico que consagra esta

jurisprudencia es siempre contractual, aun cuando los servicios médicos que

se presten al paciente sean por cortesía, es decir gratuitos.

“La responsabilidad del médico es contractual, no solo en la convención


ordinaria, en donde los cuidados se dan mediante una prestación de
honorarios, sino también en los contratos resultantes de las relaciones de
confraternidad o cortesía donde los cuidados se dan sin contraprestación de
dinero”117.

La obligación profesional del médico por regla general es de medios, es decir

que el galeno solo esta obligado a utilizar todos sus conocimientos que él

116
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 117
117
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116
99

posea en pro de la recuperación de su paciente, pero no se obliga ha

recuperarlo.

“El facultativo esta obligado a desplegar en pro de su cliente los


conocimientos de su ciencia y pericia y los dictados de su prudencia sin que
pueda ser responsable del funesto desenlace de la enfermedad que padece su
cliente o de la no curación de éste”118.

Ahora, puede haber eventos en los cuales el médico asume una obligación de

resultado, como es el caso de las intervenciones quirúrgicas con fines

estéticos, en donde el profesional se compromete a dar un resultado.

“Pueden haber casos en que el médico asume una obligación de resultado,


como la intervención quirúrgica en una operación de fines estéticos. Algunos
expositores sostienen que, salvo estipulación en contrario, él medico en ese
caso esta vinculado a una operación de resultado”119.

La responsabilidad del médico no es ilimitada, ni motivada por cualquier cosa,

sino que exige además la certidumbre de la culpa, y la gravedad, es decir, que

para que exista responsabilidad civil profesional médica es necesaria la

demostración de la culpa cometida por él medico y la gravedad de ésta,

además debe existir una relación de causalidad entre el acto imputado al

médico y el daño sufrido; con ésto comienza ha estructurarse la doctrina y

consagración jurisprudencial de la culpa probada en este tema.

“El médico no será responsable de la culpa o falla que se le imputan sino


cuando haya una relación de causalidad entre su acto y el daño sufrido por el
cliente, o cuando esa culpa o falta haya sido la determinante del perjuicio
causado”120.

118
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 118
119
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116
120
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116
100

El Doctor Yépez Restrepo considera, que el criterio de la Corte no es del todo

acertado cuando establece: que “la responsabilidad... exige no sólo la

certidumbre sino también la gravedad”121, pues existen varias razones que

determinan lo contrario:

“Primero por que el contrato de servicios médicos reporta beneficios para

ambas partes, y por ello se debe responder no sólo de la culpa grave, sino

también de la leve, de acuerdo a las normas vigentes en nuestro

ordenamiento”122.

“Segundo porque dada la importancia de la vida y la integridad personal es

conveniente exigirle al médico una mediana y máxima diligencia en su

accionar, como si se tratara de la labor de sus propios asuntos”123.

“Y tercero, porque se desprotegería ostensiblemente a la víctima, la cual

estaría en una situación de indefensión procesal, al tener que demostrar una

culpa de gran entidad”124.

Con la consagración de la culpa probada como base para resolver los casos

de responsabilidad civil del médico se descarta el pensamiento de otros

doctrinantes sobre que la actividad médica es peligrosa, ya que esta tesis

121
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116
122
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 71
123
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 71
124
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 71
101

“seria inadmisible desde el punto de vista legal y científico125” y por lo tanto

haría “imposible el ejercicio de la profesión”126.

La carga de la prueba en esta sentencia la tiene el demandante, y el médico

tanto en la responsabilidad contractual como extracontractual, en caso de que

existan perjuicios, puede proponer a su favor su actuación diligente o el

descuido, desobediencia o imprudencia del paciente, como también la fuerza

mayor y el caso fortuito, descartándose así la presunción de culpa en contra

del médico.

“Al demandante incumbe probar esa relación de causalidad, o en otros


términos, debe demostrar los hechos de donde sé desprende aquella”127.

Finalmente y por vía de doctrina la Corte Suprema de Justicia estableció: que

“no siempre que el profesional médico incurre en la culpa es necesario la

intervención de peritos médicos para establecerla, puesto que pueden existir

casos en que no se trate de un asunto de técnica médica, sino de una culpa

independiente de ésta, como sería que por un descuido o negligencia del

médico encargado de una clínica donde estuviera a su cuidado un enfermo

enloquecido por la fiebre se escapara de éste y se arrojara desde una de las

125
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 119
126
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 119
127
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 119
102

ventanas del edificio y se matara o lesionara. En este caso un concepto

médico no sería necesario, podrían bastar declaraciones de testigos” 128.

En otro aparte la Corte Expresa:

“La apreciación de la culpa imputada al médico, en unos casos requiere la


estimación de una cuestión técnica de orden médico y en otras esa estimación
no es necesaria”129.

Por otro lado, “uno de los inconvenientes prácticos de los dictámenes en

responsabilidad médica, es que los peritos se parcializan a favor del médico en

virtud de un supuesto colegaje, lo cual en vez de favorecer la medicina lo que

hace es perjudicarla encubriendo los malos profesionales”130.

2.5.6 Sentencia del 14 de marzo de 1942 (G.J. numero 1941 y 1942)

Comencemos por anotar que el caso de la sentencia en referencia es de

responsabilidad del estado por culpa de uno de sus agentes, pero fue conocido

por la Corte Suprema de Justicia por que en esta época no existía el Consejo

de Estado, y por lo tanto la Corte conocía de estos temas.

“En el caso de autos la conducta del médico Sarmiento, manifiesta y


gravemente contradictoria y negligente, compromete su responsabilidad y, por
ende, la del Estado a cuyo servicio estaba”131.

128
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 120
129
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 120
130
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 72
131
SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 920 Y
S.S.
103

En otro aparte la Corte dice:

“Es este un caso típico de mal funcionamiento de un servicio, falta por la cual
debe responder civilmente quien acciona por medio de sus agentes o
dependientes, tal servicio”132.

El caso es claro, un perro callejero muerde a un soldado, y este es remitido

donde él médico para que le dé el tratamiento pertinente, pues el perro era

desconocido por todos y desapareció después del hecho, por lo tanto se

desconoce su salud. El médico no realiza el tratamiento preventivo de mal de

rabia y el soldado muere como consecuencia de la enfermedad que sufría el

perro, como consecuencia de ésto el médico es hallado responsable de la

muerte del soldado por negligencia.

Al respecto la Corte dice:

“Tratándose de un mal de tan terribles consecuencias de no evitarlo en


oportunidad por medio del tratamiento preventivo que la ciencia aconseja,
bastaba la simple sospecha –no, la seguridad- de que el animal que mordió a
Valencia estuviese afectado con esa enfermedad, para que la prudencia del
médico se hubiese hecho conocer, aconsejando la inmediata aplicación de tal
tratamiento al paciente, tanto más si de esta aplicación no resultaba a éste
ningún daño, en caso de no estar enfermo el animal que lo mordió”133.

La Corte con esta sentencia cambia la posición que venía adoptando en años

anteriores respecto al tema de la culpa en la responsabilidad civil médica, pues

invoca como fundamento de derecho en este caso el articulo 2356 del Código

132
SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 938
133
SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937
104

Civil sobre actividad peligrosa, es decir que la Corte pasa de la posición de la

culpa probada, a la tesis de considerar la actividad médica una actividad

peligrosa en donde se presume la culpa.

“Esa conducta del doctor Sarmiento, manifiesta y gravemente contraria y


negligente… (artículos 2341,2347,2349 y 2356 del Código Civil)”134.

Existe otro punto importante en esta sentencia, y es el error en el diagnóstico o

en el tratamiento, ya que la Corte en este tema determinó la importancia del

reconocimiento, comprobación y aceptación de un tratamiento en el campo de

la ciencia. Mal haría la jurisprudencia al establecer responsabilidad al médico

cuando un tratamiento que aún presenta controversias por su efectividad, o no

cumpla el fin para el cual fue aplicado, siendo este caso una causal de

exoneración de culpa.

“El error de diagnóstico o de tratamiento puede disminuir y aún excluir la culpa


y la responsabilidad por parte de un médico, cuando se trate de casos que aún
permanezcan dentro del campo de la controversia científica…”135.

Pero, más adelante reafirma la presunción de culpa que existe en los casos

como la mal de rabia en donde la ciencia tiene ya suficientes conocimientos y

no es irracional presumir que un médico debe saber cual es el tratamiento

adecuado y que debe aplicar a su paciente so pena de incurrir en negligencia.

“… como el presente –el mal de rabia- la ciencia médica tiene ya


suficientemente estudiados y conocidos, de suerte que ha presumirse que un
facultativo competente y diligente no puede ignorar, en presencia de uno de

134
SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937
135
SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937
105

estos casos, lo que le corresponde hacer para salvar la vida del paciente que a
su saber y diligencia confía”136.

Respecto al tema del error en el diagnóstico o en el tratamiento El Doctor Juan

Ramón Castañeda opinó: “el respeto a la prescripción de un médico debe ser

total, pues debe suponerse que prescribe con base en sus conocimientos para

tomar las decisiones y asumir las repercusiones de responsabilidad que

acarrea un documento como la receta, fórmula o prescripción”137.

Por otro lado, explica que lo “anterior implica que el médico debe conocer

profundamente y suficientemente lo que prescribe o receta”, porque de lo

contrario será responsable por mal diagnóstico; ahora, cuando lo que hace es

prescribir “un medicamento a sabiendas de que hay mejores disponibles y no

lo hace saber a sus pacientes... no solo se tipifica como negligente sino que

incurre en mala práctica”138.

2.5.7 Sentencia del 14 de octubre de 1959 ( G.J numero 2217)

Si bien la Corte Suprema de Justicia reconoce en esta sentencia que la

responsabilidad del médico para con su paciente es contractual, agrega que la

responsabilidad nacida de los daños causados al paciente genera

responsabilidad extracontractual del médico para con los familiares de éste

cuando se presenten como terceros en dicho contrato, es decir, como víctimas

por los daños cometidos al familiar. Al respecto Laleu dice: “La responsabilidad

contractual del médico que descansa en una convención es evidentemente

136
SENTENCIA DEL 14 DE MARZO DE 1942. Corte Suprema de Justicia, Pág. 937
137
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. De La Prescripción Médica. Revista Derecho &
Medicina. Registro Medico. Volumen 4 · 38. Octubre 2001. Pág. 3b
106

inaplicable en caso de daño causado a tercero”139. Savatier también expresó:

“Bien que la responsabilidad del médico es normalmente contractual ella puede

ser delictual frente a terceros, especialmente a los parientes de la víctima”140.

Sobre el tema la Corte a dicho lo siguiente:

“La doctrina ha aceptado que éstos pueden ejercer la acción de


responsabilidad contractual o extracontractual según ocupen él puesto de su
causante a quien se incumplió con la… o se presenten como extraños a dicha
convención, pero como víctimas por él impacto material o moral del hecho
causante del daño, es decir, del deceso… desde luego los principios anteriores
son extensivos a todo contrato cuyo incumplimiento pueda perjudicar a un
tercero”141.

Por otro lado, la Corte afirma que la actividad médica, es decir los tratamientos

aplicados por éstos son actividad peligrosa, en la cual existe una presunción

de culpa en contra del facultativo, la cual tiene que desvirtuar probando que

existió caso fortuito, fuerza mayor o culpa exclusiva de la víctima o de un

tercero.

“… y que los tratamientos médicos implican actividad peligrosa a la luz de la


doctrina sobre él articulo 2356 del C.C”142.

En otro aparte de la sentencia la Corte dice:

“Es aplicable él articulo 2356 del código civil por tratarse de actividades
peligrosas. Debe indagarse de la presunción de culpa que milita contra él,
frente a quienes aparecen como terceros al contrato de hospitalización”143.

138
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b
139
LALOU. Heri. Traite Practique de la Responsabilite civile. Librarie Dalloz, Paris 1955,
Pág. 296
140
SAVATIER. Rene. Traite de la Responsabilite civil. Droit & Jurisprudence, Paris 1951,
tome I, Pág. 386
141
SENTENCIA DEL 14 DE OCTUBRE DE 1959. Corte Suprema de Justicia, Pág. 758
142
SENTENCIA DEL 14 DE OCTUBRE DE 1959. Corte Suprema de Justicia, Pág. 762
143
SENTENCIA DEL 14 DE OCTUBRE DE 1959. Corte Suprema de Justicia, Pág. 762
107

Es importante anotar que si bien no hace un análisis sobre el tema, la Corte sí

estableció en esta sentencia al recoger el pensamiento de Lalou que el médico

director de clínica responde por las enfermeras y enfermeros que tiene bajo

sus ordenes, de la siguiente forma: “… El caso del médico director de clínica

que tiene bajo sus ordenes los enfermeros y enfermeras que él mismo ha

escogido. Estos enfermeros y enfermeras son evidentemente sus

dependientes en el sentido del articulo 1384 del código civil”144; que trata sobre

responsabilidad indirecta extracontrato.

2.5.8 Sentencia del 3 de noviembre de 1977 (G.J. numero 2398)

La sentencia trata sobre el incumplimiento de un contrato de asistencia técnica

y financiera para el cultivo de tomates, pero es analizada por nosotros en este

trabajo, por que en ella la Corte mediante un ejemplo de responsabilidad

médica establece que la carga de la prueba pasa ha ser del facultativo al tratar

el daño como consecuencia directa del incumplimiento de una obligación.

“Es el médico a quien corresponde demostrar, ora que no pudo continuar


prestándolos por fuerza mayor, o caso fortuito, ora que aún el supuesto de
haberlos prestado hasta ultima hora el paciente hubiera fallecido de todos
modos”145.

Aparece un tema que hasta ahora no había sido tratado, y es la reclamación

de los perjuicios por parte de los herederos cuando el paciente muere por

responsabilidad del galeno, en esta jurisprudencia la Corte consagra que

tienen derecho a reclamar y además que ellos sólo tienen que denunciar,

144
LALOU. Ob. Cit. Pág. 300
145
SENTENCIA DEL 3 DE NOVIEMBRE DE 1977. Corte Suprema de Justicia, Pág. 332
108

porque es al médico a quien le corresponde probar que la víctima no falleció

por su culpa.

“Si el paciente fallece, valga de nuevo el ejemplo, y sus herederos afirman que
el médico obligado a tratarlo suspendió o disminuyo sus servicios desde
determinado momento, no pueden exigírsele que demuestren que el
fallecimiento de su causante se produjo precisamente por la supresión o
disminución del tratamiento”146

Al igual que en otras sentencias la Corte considera que por regla general las

obligaciones que contraen los facultativos con sus pacientes son obligaciones

de medios y no de resultado, por tal razón ellos no se obligan “a sanar el

enfermo, sino a ejecutar correctamente el acto o serie de actos que, según los

principios de su profesión, de ordinario deben ejecutarse para conseguir el

resultado. El haber puesto estos medios, con arreglo a la ciencia y a la

técnica, constituye el pago de esta clase de obligaciones”147.

Al respecto el Doctor Tamayo Jaramillo dice que: “lo que hace que el médico, a

pesar del papel activo que desempeña en la ejecución del contrato, sólo tenga

una obligación de medios, radica en que, por más que controle la ejecución del

contrato de todas maneras hay una serie de fuerzas físicas y biológicas que

influyen en el resultado, hasta el punto de que el médico solo tiene unas

limitadas probabilidades de lograr la curación, que es el objeto del acreedor, es

decir por el paciente”148.

146
SENTENCIA DEL 3 DE NOVIEMBRE DE 1977. Corte Suprema de Justicia, Pág. 332
147
SENTENCIA DEL 3 DE NOVIEMBRE DE 1977. Corte Suprema de Justicia, Pág. 332
148
TAMAYO JARAMILLO, Javier. Culpa Contractual. Bogotá, Editorial Temis, 1990. Pág. 198
109

2.5.9 Sentencia del 12 de septiembre de 1985 (G.J numero 2419)

“La profesión médica, cuyo objeto es cumplir una función social, implica
obligaciones de carácter ético y profesional para quienes la ejercen, de tal
manera que su transgresión delictiva o culposa pueda dar lugar a sanciones
penales y civiles, según que aquella configure una conducta tipificada por la
Ley penal o quede circunscrita a la responsabilidad civil”149.

Frente a esto, el Doctor Juan Ramón Castañeda en su articulo “De La

Responsabilidad Médica” concluyó “que el médico tiene el deber de poner todo

su cuidado y diligencia siempre que atienda o intervenga a sus pacientes con

el fin de procurar su curación o mejoría, así que cuando por negligencia,

descuido u omisión causa perjuicio en la salud de aquellos incurre en una

conducta ilícita, que será calificada por el juez, según la magnitud, desde la

simple culpa hasta la más grave, para así mismo imponer al demandado la

respectiva condena o indemnizar a la víctima del daño causado, sin perjuicio

de las sanciones penales a que haya lugar”150.

Esta sentencia, ratifica la reiterada jurisprudencia de la Corte Suprema de

Justicia que consagra las obligaciones de los médicos en el contrato de

servicios profesionales como de medios y no resultado.

“Con relación a las obligaciones que él medico asume frente a su cliente, hoy
no se discute que el contrato de servicios profesionales implica para el galeno
el compromiso sino exactamente de curar al enfermo, sí al menos de
suministrarle los cuidados concienzudos solicitados y conformes con los datos
adquiridos por la ciencia…”151

149
SENTENCIA DEL 12 DE SEPTIEMBRE DE 1985. Corte Suprema de Justicia, Pág. 763
150
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b
151
SENTENCIA DEL 12 DE SEPTIEMBRE DE 1985. Corte Suprema de Justicia, Pág. 764
110

Por otro lado, abandona la posición sentada por esta misma Corte en

jurisprudencias anteriores con relación al tema de que la responsabilidad civil

profesional medica es una actividad peligrosa, y retoma el pensamiento

francés, que afirma que la responsabilidad médica es contractual o extra

contractual, según la naturaleza, y por lo tanto la culpa hay que probarla.

Castañeda afirmó: “la Corte Suprema de Justicia en el año 1985 se refirió al

tema de la responsabilidad civil del médico, y estableció que ésta puede ser

contractual o extracontractual;... de allí se pude concluir que el médico podrá

incurrir en responsabilidad civil por daños eventuales que ocasione a sus

pacientes por omisión o exceso en los tratamientos y procedimientos

quirúrgicos, que generalmente están precedidos por la celebración de un

contrato de servicios médicos y en algunas ocasiones de la simple intervención

unilateral del médico en razón de sus deberes”152.

Este mismo autor en otro artículo llamado “De La Prescripción Médica” afirmó:

“la actividad del médico debe realizarse (exista o no contrato), según unas

directrices comprendidas en las normas ético-médicas ya anotadas y por esta

razón sus deberes y obligaciones son los mismos tanto en el plano contractual

como en el extracontractual”153.

La carga de la prueba vuelve al paciente que sufre los perjuicios, por lo tanto

es él quien debe probarlos ante el juez si quiere su resarcimiento.

152
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b
153
CASTAÑEDA F. Juan Ramón. Articulo Cit. Pág. 3b
111

“El médico tan solo se obliga a poner en actividad todos los medios que tenga
a su alcance para curar al enfermo; de suerte que en caso de reclamación,
este deberá probar la culpa del médico, sin que sea suficiente demostrar
ausencia de curación”154.

2.5.10 Sentencia del 26 de noviembre de 1986 (G. J. numero 2423)

Esta sentencia tiene un gran valor en el desarrollo jurisprudencial colombiano,

pues por primera vez la Corte Suprema de Justicia se refiere directamente a

las cirugías estéticas, es decir desarrolla el tema y lo aplica a un caso

concreto.

“Por lo que a la cirugía estética se refiere, o sea cuando el buscado con la


intervención es la corrección de un defecto físico, pueden darse situaciones
diversas que así mismo tendrán consecuencias distintas respecto de la
responsabilidad del cirujano. Así las cosas, deberá establecerse cual fue la
obligación que contrajo el cirujano con su paciente, para deducir si el fracaso
de su operación le hace o no responsable”155.

Las obligaciones que contraen los galenos en los contratos de prestación de

servicios continúan siendo por regla general de medios, y en casos

excepcionales como las intervenciones quirúrgicas con fines estéticos donde

se asegura el resultado la obligación del médico serán de resultado.

“Cuando en el contrato hubiere asegurado un determinado resultado si no lo


obtiene será culpable y tendrá que indemnizar a la víctima, salvo que se den
los casos de exoneración previamente mencionados de fuerza mayor, casos
fortuito o culpa de la perjudicada. Pero, sí tal resultado no se ha asegurado
expresamente, cuando se alcanza, el médico quedará sujeto a las reglas
generales sobre culpa o ausencia de esta”156.

Es por esto, que a diferencia de los otros médicos, el cirujano plástico tiene

una mayor responsabilidad con el paciente, pues él se compromete a dar un

154
SENTENCIA DEL 12 DE SEPTIEMBRE DE 1985. Corte Suprema de Justicia, Pág. 407
155
SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 359
156
SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 360
112

resultado, el cual es esperado por todos. Al respecto el Doctor Coiffman opina:

“que en la cirugía estética existe un concepto más riguroso en cuanto al

pronóstico de cada caso: el super resultado es esperado por el paciente, por

los familiares o por unos y otros, quienes deben estar bien preparados y

conocer claramente las limitaciones que pueden acompañar los resultados

deseados: Cuando falta esta preparación, existe insatisfacción que se podría

transformar en un proceso contra el médico”157, ésto es lo que se conoce como

consentimiento informado.

Respecto a este tema el Doctor Yépez Restrepo opinó: “el paciente acude al

médico no porque tenga alguna enfermedad que lo aqueje, sino porque desea

mejorar su aspecto estético en virtud del cambio de alguna parte de su cuerpo,

rostro, etc. Por esta razón no se está hablando de una curación del paciente,

sino de realizar un cambio estético en la persona que al ser preciso y

determinado se constituye en un resultado, el cual es convenido al celebrar el

contrato de servicios médicos”158.

Se dice entonces que “en general la obligación asumida por el facultativo

especializado en cirugía estética es de resultado, ya que de no prometer un

resultado feliz el paciente no se sometería al acto quirúrgico o tratamiento” 159.

157
COIFFMAN, Felipe. Texto de Cirugía Plástica Reconstructiva y Estética. Barcelona Editorial
Salvat. 1986.
158
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 77 y 78
159
BUSTAMANTE ALSINA, Jorge. Teoría General de la Responsabilidad Civil. Pág. 407
113

La Corte con relación a la naturaleza jurídica del contrato de prestación de

servicios médicos después de muchos cambios concluye en esta sentencia

que es un contrato sui generis al predicar, “sin hacer calificación alguna, que al

contrato médico de prestación de servicios profesionales le eran aplicable”160:

“Las normas del titulo XII del libro cuarto del Código Civil, sobre efectos de las
obligaciones y no las relativas a la responsabilidad extracontractual…”161.

El contrato que se celebra entre el médico y su paciente sigue siendo de

prestación de servicios profesionales, pero en esta jurisprudencia el

pensamiento de la Corte con respecto a la carga de la prueba cambia, pues

pasa de tenerla el demandante, al médico, es decir que es al galeno a quien le

toca desvirtuar la culpa, ya que existe en su contra una presunción de culpa,

la cual desvirtuara probando su diligencia y cuidado a la hora de realizar su

labor, o alguna causal de exoneración como “fuerza mayor, caso fortuito o

culpa de la perjudicada”162.

Son muchas las “posibilidades que tiene el profesional de la medicina para

exonerarse de la responsabilidad, la cual pretende imputársele a través de un

proceso judicial. Esto lo confirma la Corte al decir que “el demandado podrá

exonerarse de responsabilidad demostrando ausencia de culpa, por haber

160
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia, Pág. 10
161
SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 360
162
SENTENCIA DEL 26 DE NOVIEMBRE DE 1986. Corte Suprema de Justicia, Pág. 360
114

puesto todo el cuidado que el caso requería, caso fortuito, fuerza mayor o

culpa del paciente por no haber cumplido las prescripciones” 163.

2.5.11 Sentencia del 12 de julio de 1994 (G.J. numero 3656)

Con esta sentencia se buscó consolidar la tesis francesa de la culpa probada

en nuestro país para los casos de responsabilidad civil médica, de ahí que la

sala de esta corte afirme que: “Para que esta culpa sea idónea en su

responsabilidad es necesario que sea imputable al profesional o institución

médica correspondiente y que además sea la causa eficiente de los perjuicios

que se ocasionen al paciente, esto es, igualmente indispensable que exista

relación de causalidad entre la primera y los últimos”164.

También se reiteró que para que exista responsabilidad civil médica es

necesario que se configuren los tres elementos de la responsabilidad: culpa del

médico, el daño y la relación de causalidad.

“Responsabilidad contractual se encuentre plenamente probados, conforme a


derecho, los elementos que la estructuran, como son la culpa contractual, el
daño y la relación de causalidad; y que sólo puede el juez acudir al arbitrium
judicium o potestad discrecional judicial para fijar el quántum o cuantía del
daño moral”165.

163
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit. Pág. 73
164
SENTENCIA DEL 12 DE JULIO DE 1994. Corte Suprema de Justicia. Tomado de la pagina de
Internet: http://www.legis.com.co
165
SENTENCIA DEL 12 DE JULIO DE 1994. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de
Internet: http://www.legis.com.co
115

Es importante recoger un tema que si bien ha sido tratado por la Corte desde

1915, también es cierto que hasta esta sentencia lo presenta con tanta

claridad, y es el tema de los perjuicios que se le causan al paciente como

consecuencia de la culpa del médico, por esto creemos relevante transcribir el

pensamiento de la sala:

“Dentro de estos perjuicios resultan indemnizables tanto los materiales como

los morales. Los primeros comprenden tanto el daño emergente como el lucro

cesante (Art. 1613 del C.C.), que en este evento asumen características

particulares. Porque el daño emergente, como la pérdida que sufre el paciente

por haberse cumplido imperfectamente el servicio médico profesional, si bien

no comprende el deterioro y disminución psicofísica en la salud humana, por

su carácter estrictamente extrapatrimonial, no es menos cierto que sí contiene

las pérdidas consecuenciales de este daño corporal valorables

económicamente, como serían la reducción y pérdida de la capacidad laboral

(que importa y tiene incidencia más bien para el lucro cesante), los gastos

hospitalarios, quirúrgicos, terapéuticos; rehabilitación, gastos de transporte,

etc. De otra parte, el lucro cesante, como aquella ganancia o provecho que se

deja de percibir precisamente por el daño ocasionado al cuerpo y a la salud,

estaría representado por la supresión o reducción temporal o indefinida (hasta

que ella subsista) de los ingresos, por efecto de la eliminación, reducción o

transformación (en caso de rehabilitación para otro trabajo) de la capacidad

laboral, así como de algunos que específica e inequívocamente se hayan

dejado de percibir. Y por último, esta Corporación siguiendo la doctrina


116

universal en el punto, estima que por referirse este contrato en su esencia y

ejecución a la salud de la persona humana, es posible de manera excepcional

(lo que no ocurre generalmente cuando se trata de cosas o bienes) que el

incumplimiento del servicio médico profesional sea causa concurrente tanto de

los daños materiales mencionados como de daños morales en el paciente.

Como consecuencia del primero se produce de manera autónoma de manera

independiente (sic) dolores, padecimientos, aflicciones y afectaciones como

individuo y ser social, todos ellos constitutivos de lo que se denomina el daño

moral, evento en el cual deberá indemnizarse”166.

Aparece en la doctrina el termino áleas, él cual hace referencia a los

imprevistos físicos y biológicos que se pueden presentar durante el desarrollo

de un tratamiento u operación. La presencia de estos áleas es lo que justifica

que la obligación del médico sea de medios y no de resultados. Al respecto

opinó la Doctora Domínguez: “por lo general las jurisprudencias, tratan de

separar en el interior del contrato médico lo que depende del álea propia de la

enfermedad, donde no existirá más que una obligación de medio, ya que

cuando el álea se ausenta, la obligación se vuelve de resultado” 167. Con esto

queremos precisar que en esta jurisprudencia también se sigue el pensamiento

anotado por la Corte durante varios años, sobre la obligación del médico.

166
SENTENCIA DEL 12 DE JULIO DE 1994. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina de
Internet: http://www.legis.com.co

167
DOMÍNGUEZ DE MORA, Olga Victoria. Responsabilidad Médica en la Legislación y
Jurisprudencia Nacionales. Tesis. Pontificia Universidad Javeriana. 1983. Pág. 36
117

2.5.12 Sentencia del 30 de enero de 2001

Con esta sentencia la sala civil de la Corte recoge el pensamiento emitido por

ella durante los últimos años y determina que es lo que esta vigente en la

responsabilidad civil de los médicos por la prestación del servicio profesional.

A pesar de que la Corte durante algunos años acogió la tendencia de calificar

la responsabilidad del médico como actividad peligrosa (entre 1959 y 1942), en

el 2001 reconfirma lo emitido en 1940, sobre la demostración de la culpa, es

decir, que él médico se presume inocente hasta que no se demuestre que

actuó con culpa y que por lo tanto es responsable.

Al respecto la Corte expresó:

“Tratándose de responsabilidad civil de los médicos por la prestación del


servicio profesional, desde hace algún tiempo, la Corte ha venido predicando
que ésta es una responsabilidad que se deduce mediando la demostración de
la culpa, independientemente de que la prestación indemnizatoria tenga causa
contractual o extracontractual”168.

Ahora, la Corte no desconoce que existe un riesgo potencial en la prestación

de los servicios médicos por parte del facultativo, pero explica que esto no

hace que la actividad médica se torne peligrosa, pues, “los fundamentos éticos,

científicos y de solidaridad”169lo justifican y lo hacen necesario para el

bienestar del paciente:

“Ciertamente, el acto medico y quirúrgico muchas veces comporta un riesgo,


pero éste, al contrario de lo que sucede con la mayoría de las conductas que la
jurisprudencia ha signado como actividades peligrosas en consideración al

168
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
169
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
118

potencial riesgo que generan y al estado de indefinición en que se colocan los


asociados, tiene fundamento ético, científico y de solidaridad que lo justifican y
lo proponen antológica y razonablemente necesario para el bienestar del
paciente, y si se quiere legalmente imperativo para quien ha sido capacitado
como profesional de la medicina, no sólo por el principio de solidaridad social
que como deber ciudadano impone él articulo 95 de la Constitución, sino
particularmente, por las implicaciones humanísticas que le son inherentes, al
ejercicio de la medicina…”170.

Las obligaciones de los médicos continúan siendo de medios por regla general,

y excepcionalmente de resultados, igualmente se les sigue aplicando el

principio de la carga de la demostración de la culpa del médico sin la condición

de la gravedad, que en una época se exigió, pues ésta “graduación hoy en día

no puede aceptarse, porque aún teniendo en cuenta los aspectos tecnológicos

y científicos del acto profesional médico, la conducta sigue siendo enmarcable

dentro de los limites de la culpa común, pero, si duda alguna, sin perder de

vista la profesionalidad...”171.

La Corte agrega que en el caso de la distribución de carga de la prueba “lo

fundamental está en identificar el contenido y alcance del contrato de

prestación de servicios médicos celebrado en el caso concreto, porque es este

contrato especifico el que va a indicar los deberes jurídicos que hubo de

asumir el médico, y por contera el comportamiento de la carga de la prueba en

torno a los elementos que configuran su responsabilidad y particularmente de

la culpa, por que bien puede suceder, como en efecto ocurre, que el régimen

170
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
171
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
119

jurídico específico excepcione el general de los primeros incisos del articulo

1604 del Código Civil, conforme lo autoriza el inciso final de la norma”172.

Acerca de la naturaleza jurídica del contrato de prestación de servicios,

después de muchos cambios, la Corte en esta sentencia establece que es un

contrato multiforme o proiforme, o variable, es decir, “un contrato que

enabstracto no se puede clasificar”173, por que es necesario verlo referido a un

caso concreto para poder determinar su naturaleza.

Al respecto la Corte consagra:

“... no se puede clasificar, como ahora lo entiende la Corte, dada la falta de


una regulación especifica del mismo, por que en concreto, es decir teniendo en
cuenta la relación efectivamente ajustada, bien pudiera configurarse como uno
u otro contrato de los típicamente previstos por la Ley: arrendamiento de
servicios, confección de obra, mandato, de trabajo, etc., o un contrato atípico,
o si se quiere sui generis”174.

Al respecto el Doctor Fernández Costales expreso: “la naturaleza jurídica del

contrato de servicios médicos vendrá determinada por la actividad o tipo de

asistencia facultativa que realice en cada momento, hecho que guarda intima

conexión con las especialidades médicas, siendo necesario analizar cada una

de ellas y en función del contenido técnico de las mismas”175.

172
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
173
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
174
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
175
FERNÁNDEZ COSTALES, Javier. El Contrato De Servicios Médicos. Madrid. Edición Civilistas
S.A. 1988. Pág. 69
120

Ahora, es importante anotar que en ésta jurisprudencia se establece que no es

“dable, ni prudente, sentar precisos criterios de evaluación probatoria”176, pues

la Corte reconoce que cada caso concreto determinará los elementos que le

permitan “identificar cuál fue realmente la prestación prometida, para a partir

de ella proceder al análisis del comportamiento del profesional de la medicina y

así establecer la relación de causalidad con el daño sufrido por el paciente, por

que definitivamente el médico no puede responder sino cuando su

comportamiento, dentro de la estima profesional, fue determinante del perjuicio

causado”177.

El Doctor Sergio Yepes se refirió así sobre esta sentencia: “la Corte Suprema

de Justicia dictó en Colombia, en enero de 2001, una sentencia en la cual,

aunque se habla de la carga dinámica de las pruebas, se señala que

corresponde al paciente demostrar los elementos que configuran la

responsabilidad, esto es, el daño y el nexo de causalidad y en especial la culpa

del médico” 178


; con esto, trata de demostrar que la “culpa continua siendo,

entonces, uno de los aspectos centrales de la responsabilidad profesional del

176
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
177
SENTENCIA DEL 30 DE ENERO DE 2001. Corte Suprema de Justicia. . Tomado de la pagina
de Internet: http://www.legis.com.co
178
YEPES RESTREPO. Evolución jurisprudencial de la prueba de la culpa médica. Revista
Derecho & Medicina. Pág. 5b
121

médico”179, y que “la teoría tradicional de la responsabilidad civil basada en la

culpa probada, por lo menos en el examen individual de la conducta del

médico ha resistido la aparición de teorías de responsabilidad objetiva y

continua vigente en nuestros días”180.

179
YEPES RESTREPO, Sergio. Articulo Cit. Pág. 5b
180
YEPES RESTREPO, Sergio. Articulo Cit. Pág. 5b
122

CAPITULO III

CONSIDERACIONES GENERALES DEL CONTRATO DE SEGURO

3. GENERALIDADES

En este capítulo se estudiarán algunos de los aspectos más importantes del

contrato de seguro, de una manera general y sencilla, con el fin de situar el

tema de la responsabilidad civil profesional dentro del contexto del contrato de

seguro, pero sin hacer un estudio exhaustivo de los mismos.

3.1 Noción

Según CAPITANT el contrato de seguro es: “el contrato por el cual un

asegurador, mediante el pago de una prima o una cotización, se obliga a pagar

al asegurado o al beneficiario convenido una indemnización, capital o renta, en

caso de producirse un riesgo determinado.”181

181
CAPITANT. Ob. Cit., p. 505
123

Según Joseph Hemard, “el seguro es una operación por la cual una parte, el

asegurado, se hace prometer, mediante una remuneración, la prima, para él o

para un tercero, en caso de realización de un riesgo, una prestación por otra

parte, el asegurador, que tomando a su cargo un conjunto de riesgos, los

compensa conforme a las leyes de la estadística.”182

En las definiciones anteriores se pueden identificar algunas nociones básicas

del contrato de seguro, como por ejemplo los sujetos que intervienen en este

contrato (asegurador, asegurado y beneficiario) o la prima y lo más importante

su objeto: el traslado del riesgo.

Consagración Legal. La ley de nuestro país no trae una definición de

contrato de seguro. El Artículo 1036 de el Código de Comercio solamente

enumera las características de dicho contrato.

3.2 ELEMENTOS ESENCIALES

Según el artículo 1045 del código de comercio son elementos esenciales del

contrato de seguro: 1. El interés asegurable; 2. El riesgo asegurable; 3. La

prima o precio del seguro y 4. La obligación condicional del asegurador.

182
El autor hace mención en su obra a la definición de Joseph Hemard. OSSA GOMEZ, J. Efrén.
Teoría General del Seguro. El Contrato. Tomo II. Bogotá: Editorial Temis. 1991 p. 2.
124

Estos elementos son concurrentes, si faltara uno de ellos el contrato de seguro

no producirá efecto alguno.

3.2.1 El Interés Asegurable

Según Isaac Halperin: “se entiende por interés asegurable la relación lícita de

valor económico sobre un bien cuando se halla amenazada por un riesgo.” 183

El Dr. J. Efrén Ossa respecto del interés asegurable dice que “es el objeto del

contrato de seguro. Y, por lo mismo, uno de sus elementos esenciales. Puede

definirse como la relación económica, amenazada en su integridad por uno o

varios riesgos, en que una persona se halla consigo misma o con otra persona,

o con otras cosas o derechos tomados en sentido general o particular”184.

“En los artículos 1083 (para seguros de daños) y 1137 (para seguros de

personas) del código de comercio se hace referencia al interés asegurable

condicionado por la posibilidad de afectación de una relación jurídica de

contenido patrimonial cuando ocurra un siniestro.”

Artículo 1083 C.Co “Tiene interés asegurable toda persona cuyo patrimonio

pueda resultar afectado, directa o indirectamente, por la realización de un

riesgo. Es asegurable todo interés que, además de lícito, sea susceptible de

estimación en dinero.”185

183
HALPERIN. Ob. Cit. p. 21
184
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 73
185
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 63
125

El concepto de interés asegurable en los seguros de daños es muy amplio, y

el artículo 1083 trae una “definición con la cual quedan cubiertos todos los

supuestos de daño patrimonial: la lesión del interés económico sobre una cosa

corporal o incorporal concreta, mueble o inmueble, llámese interés de dueño,

de usufructuario, de comunero (seguros reales), o la lesión del patrimonio en

su unidad financiera como conjunto y confrontación de los derechos y las

obligaciones, por eventual incremento del pasivo a cargo del asegurado

(seguros patrimoniales), o la frustración, por el siniestro, de una seria y

razonable expectativa de lucro (lucro cesante).” 186

Artículo 1137 C.Co. “Toda persona tiene interés asegurable: 1. En su propia

vida. 2. En la de las personas a quienes legalmente pueda reclamar

alimentos, y 3. En la de aquellas cuya muerte o incapacidad pueden aparejarle

un perjuicio económico, aunque éste no sea susceptible de una evaluación

cierta....”

Según el tratadista J. Efrén Ossa, el interés asegurable en los seguros de

personas es muy difícil de encuadrar, debido a su naturaleza peculiarísima. “la

ley Colombiana, empero mantiene su fidelidad al interés asegurable en los

seguros de personas, como elemento esencial del contrato.”187

186
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 74
187
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 83
126

3.2.2 El Riesgo Asegurable

Es el segundo elemento esencial del contrato de seguros.

La ley define el riesgo como “el suceso incierto que no depende

exclusivamente de la voluntad del tomador, del asegurado o del beneficiario, y

cuya realización da origen a la obligación del asegurador.”188

“O sea, en otros términos, que lo único que escapa al ámbito del riesgo es el

acto vinculado a la voluntad del asegurado mediante una dependencia

exclusiva. Y que puede tener ese carácter, el carácter de riesgo.”189

Ámbito del Riesgo Asegurable:

 En el riesgo asegurable el suceso debe ser incierto: El riesgo se

caracteriza por ser Futuro e Incierto. “O sea que el riesgo se halla enmarcado

entre los dos linderos: la imposibilidad y la certeza.... No constituye riesgo el

hecho físicamente imposible, que en la teoría de las probabilidades se

presenta por el número cero (0). Ni el hecho cierto que, como tal, ha de

suceder fatalmente y que, en la misma teoría se representa por el número uno

(1).”190

188
Artículo 1054 del CCO.
189
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 94
190
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 94
127

“ La incertidumbre del suceso ha de ser objetiva. Refiriéndose,

precisamente, al art. 1054 del C. de Co., ha dicho la Corte: <fluye del texto

trascrito que el riesgo asegurable debe ser incierto objetivamente y, además,

futuro. Los hechos ya acontecidos, por ser ciertos y. Por ende no ser futuros,

ya no entrañan riesgo asegurable de conformidad con la ley. Como tampoco la

incertidumbre cuando es subjetiva.191> La incertidumbre subjetiva, la que solo

existe en la conciencia de las partes (tomador y asegurador), respecto de un

hecho que pudo o no tener cumplimiento.”192

 El Suceso, además de incierto, no debe depender exclusivamente de

la voluntad del tomador, asegurado o beneficiario: “A la luz de la

doctrina moderna y de las leyes que la desarrollan, la intervención de la

voluntad humana en la gestación de un hecho -con tal que sea futuro e

incierto- no lo despoja necesariamente de su fortuidad, ni destruye por tanto,

su naturaleza de riesgo asegurable. Basta que no se identifique en ella su

causa exclusiva.”193

191
Sentencia del 5 de noviembre de 1998, Sala de Casación Civil. Corte Suprema de Justicia.
192
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 94
193
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 97
128

La doctrina en armonía con la legislación anterior, no admitía que en el

concepto de riesgo interviniera la voluntad del hombre; a diferencia de nuestro

código actual que en su artículo 1054194, que si acoge esta situación

 La realización del riesgo da origen a la obligación del asegurador: En

principio, el asegurador adquiere una obligación condicional que “depende de

un acontecimiento futuro, que puede suceder o no,” 195


o como lo expresa el

tratadista J. Efrén Ossa: “Obligación que, mientras se halla en estado de

indemnidad, mientras esconde un daño meramente potencial, es apenas una

obligación condicional..... Realizado el riesgo, configurado el siniestro (art.

1075) –que es el riesgo en estado de daño- nace ipso facto, por ministerio de

la ley (art. 1054), la obligación actual del asegurador, la de pagar la prestación

asegurada conforme a las estipulaciones del contrato y a los principios legales

que la gobiernan”196

 El suceso incierto no es riesgo si su realización depende de la

voluntad exclusiva del tomador, asegurado o beneficiario: Cuando la

realización del evento asegurado, dependen exclusivamente de la voluntad del

194
Artículo 1054 C. De Co: “Denominase riesgo el suceso incierto que no depende
exclusivamente de la voluntad del tomador, del asegurado o del beneficiario, y cuya realización
da origen a la obligación del asegurador.
195
Artículo 1530 C.C.
196
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 99
129

tomador, del asegurado o del beneficiario; éste no generará riesgo por la falta

de incertidumbre.

“No es concebible el seguro sobre un evento cuya realización dependa de la

sola voluntad del interesado.”197

3.2.3 La Prima o Precio del Seguro

El tercer elemento esencial del contrato de seguro, de acuerdo con el artículo

1045 del C.de Co. Num. 3, es “la prima o precio del seguro”, la cual se puede

definir como “la contraprestación que persigue el asegurador por la asunción

del riesgo; como la asunción del riesgo es la contraprestación que persigue el

asegurado que paga la prima.”198

El artículo 1047 C. de Co. Num. 8 la póliza debe contener “la prima o el modo

de calcularla y la forma de su pago”

“El seguro no puede concebirse técnica y económicamente sin los aportes de

la comunidad asegurada cuya acumulación permita al asegurador atender al

pago de las prestaciones a que den origen los eventos asegurados. Ni el

respectivo contrato se concibe jurídicamente sin una contraprestación a cargo

197
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 99
198
SOLER ALEU, Amadeo. El nuevo contrato de seguro. Buenos Aires: Editorial Depalma. 1969.
p. 81
130

del tomador que sirva de causa a la obligación del asegurador. El seguro es

un contrato oneroso (C. De Co., art. 1036).”199

Desde la perspectiva técnico-económica, la prima hace parte de un proceso

complejo, que según la clase de riesgo y el ramo del seguro, “se inicia con la

determinación de la tasa pura (loss rate), pasa por la del recargo

administrativo (expense rate) e, integrados estos en la tarifa, habida cuenta de

la suma asegurada y la duración del seguro, culmina con su aplicación a cada

contrato específicamente considerado. De ahí los conceptos de prima pura y

prima comercial” 200.

La prima pura es la medida exacta del riesgo asumido, “es el valor

matemática del riesgo asegurado que, calculado sobre un conjunto numeroso

de intereses del mismo género vinculados a determinada cartera, debe

suponerse suficiente para cubrir siniestros. Mas la prima pura no basta. La

operación económica del seguro reclama, además del fondo adecuado para

atender a las eventuales necesidades de los asegurados, otros ingredientes

que permitan preservar la integridad financiera de la organización, saber: la

promoción, la colocación, la administración......”201.

199
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385
200
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385
201
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385
131

La prima comercial es la prima pura más unos recargos, es la que se le cobra

al asegurado y figura en las pólizas; “es la que cuenta, finalmente, como

elemento esencial del contrato de seguro.”202

3.2.4 Obligación condicional del asegurador

Para el Dr. J Efrén Ossa, la obligación principal del asegurador no es solo la de

asumir el riesgo sino es la de pagar la indemnización en caso de ocurrir el

evento que la condiciona, además afirma que nuestra legislación acoge la

teoría de la prestación pecuniaria, en la medida que la obligación condicional

del asegurador se concreta en el pago de la indemnización.

“El asegurado paga una prima porque recibe la promesa de ser indemnizado,

conforme a las condiciones del contrato, a la ocurrencia del suceso sobre el

que versa la protección del seguro. Tal es en términos jurídicos, la causa de

su obligación.”203 El pago de la prima es la justificación de la obligación

condicional a cargo del asegurador.

3.3 CARACTERISTICAS

202
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. p. 385
132

El artículo 1036 del Código de Comercio204 enumera algunas de las

características del contrato de seguro.

3.3.1 Consensual: para su perfeccionamiento se requiere sólo el

consentimiento de las partes sobre los elementos esenciales del contrato.

Antes de la expedición de la Ley 389 de 1997 el contrato de seguro era

solemne, en la medida que para su perfeccionamiento se requería además del

acuerdo de voluntades el cumplimiento de ciertas solemnidades o formalidades

especiales. La formalidad requerida era la expedición de la póliza por parte

del asegurador.

Actualmente la póliza es un factor de prueba o como lo manifiesta el artículo

1046 del Código de Comercio:

“El contrato de seguro se probará por escrito o por confesión.

Con fines exclusivamente probatorios, el asegurador está obligado a entregar

en su original, al tomador, dentro de los quince días siguientes a la fecha de su

celebración el documento contentivo del contrato de seguro, el cual se

denomina póliza, el que deberá redactarse en castellano y firmarse por el

asegurador.”

3.3.2 Bilateral: un contrato es bilateral, “cuando las partes contratantes se

obligan recíprocamente.”205

203
OSSA G. Ob. Cit. p. 426
133

El contrato de seguro es bilateral, “en la medida en que en todo caso surgen

de él obligaciones para las partes entre las que se concluye: En efecto, ab

initio, el asegurador debe hacer entrega de la póliza al tomador, y nace para

éste la obligación de pagar la prima.”206

3.3.3 Oneroso: según el artículo 1497 C.C, un contrato es oneroso, “cuando

tiene por objeto la utilidad de ambos contratantes, gravándose cada uno a

beneficio del otro.”

3.3.4 Aleatorio: Artículo 1498 C.C “el contrato oneroso es conmutativo,

cuando cada una de las partes se obliga a dar, o hacer una cosa que se mira

como equivalente a lo que la otra parte debe dar o hacer a su vez; y si el

equivalente consiste en una contingencia incierta de ganancia o pérdida, se

llama aleatorio”

“El contrato oneroso recibe el nombre de aleatorio si la materia está constituida

de un hecho eventual o fortuito, de modo que el equivalente es una

contingencia incierta de pérdida o beneficio.”207

3.3.5 Ejecución sucesiva: es un contrato cuyo cumplimiento esta diferido a

través del tiempo de su vigencia.

204
Articulo 1036 C. de Co: “El seguro es un contrato consensual, bilateral, oneroso y de ejecución
sucesiva.”
205
Artículo 1496 C. C.
206
BARRERA TAPIAS, Carlos Darío. Los seguros y el derecho civil. Bogotá: Javegraf. 1991. p.
13
207
MADRID-MALO G. Ob. Cit. p. 123
134

En los contratos de ejecución o tracto sucesivo el cumplimiento de las

obligaciones a cargo de las partes se harán periódicamente.

Aparte de las características enunciadas por el código de comercio, diferentes

autores agregan las siguientes características:

3.3.6 Intuita personae: El contrato intuito persona es aquel que se celebra

teniendo en cuenta la calidad de las partes.

La ley precisa sobre la consideración del asegurador y sobre el asegurado, en

donde “el asegurador mira más a la condición moral del asegurado que a la

sustancia o calidades de la cosa asegurada.”208

3.3.7 De Adhesión: El contrato posee unas condiciones pre establecidas

fijadas por una de las partes, la más fuerte, y que son aceptadas por la otra

parte debido a la necesidad de celebrar el contrato. La aceptación de la parte

adhesiva no es totalmente libre, en la medida que no puede ésta discutir

libremente ciertos puntos o cláusulas del contrato que está aceptando.

En el contrato de seguro la regla general es que sea de adhesión.

208
OSSA G. Ob. Cit. p. 42
135

3.3.8 Mercantil: Según el artículo 20 del C de Co. Num. 10: “son mercantiles

para todos los efectos legales: .... 10. Las empresas de seguros y la actividad

aseguradora.”

Si en un contrato una de las partes es comerciante el contrato es mercantil y

reglamentado por la ley comercial.

3.3.9 Típico: es el contrato que está regulado por la ley.

3.3.10 Principal: el contrato es principal, cuando subsiste por sí mismo

sin necesidad de otra convención.209

3.3.11 Indivisible: “El carácter de indivisible del contrato de seguros aparece

confirmado a la luz de la legislación colombiana. En efecto: “el pago

fraccionado de la prima no afecta la unidad del contrato de seguro, ni la de los

distintos amparos individuales que acceden a él”. (artículo 1069 C.Co.).”210

209
Artículo 1499 del C.C.
210
OSSA G. Ob. Cit. p. 44
136

3.3.12 De Ubérrima buena fe: las partes del contrato de seguro deben actuar

de buena fe. “En los preliminares del contrato, en su desenvolvimiento

sucesivo y en su ejecución, el asegurador debe encomendarse a la lealtad del

asegurado, de cuya honestidad y de cuya prudencia depende, por modo casi

exclusivo, el equilibrio de la relación económico-jurídica que los vincula.”211

El obrar de buena fe es una característica tan importante, que su trasgresión

está castigada con la imposición de drásticas sanciones, como lo es por

ejemplo la caducidad.

3.4 CLASIFICACION

3.4.1 Clasificación según el Código de Comercio

El Código de Comercio Colombiano en el Libro IV, título V, capítulos II y III,

clasifica el contrato de seguro en: Seguros de daños y Seguros de personas.

3.4.1.1 Seguros de daños: “Estos seguros implican protección contra un

perjuicio patrimonial en la acepción económica-jurídica de este vocablo.

“Dentro de las notas jurídicas de este tipo de seguros se puede destacar que el

interés asegurable es concebido solo en su sentido económico como

“susceptible de estimación en dinero”. Con respecto al principio de la

211
OSSA G. Ob. Cit. p. 44
137

indemnización, se aplica la correlatividad entre la prestación a cargo del

asegurador y el importe real del perjuicio sufrido por el asegurado.” 212

Los seguros de daños se clasifican en seguros reales y en seguros

patrimoniales

Los seguros reales “son aquellos que versan sobre cosas muebles o

inmuebles, determinadas o determinables, amenazadas en su integridad física

o en la integridad jurídica de los derechos radicados en ellas.”213

Los seguros patrimoniales son los que “protegen la integridad del patrimonio

económico contra el detrimento eventual que pueda afectarlo

desfavorablemente y que tanto puede originarse en una disminución del activo

como en un aumento del pasivo.”214

3.4.1.2 Seguros de personas: “Según definición de Isaac Halperin los

seguros de personas garantizan el pago de un capital o una renta cuando se

produce un hecho que afecta la existencia, salud o vigor del asegurado;

212
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 61
213
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 61
214
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 62
138

generalmente terminan en un pago de dinero, pero las prestaciones están

subordinadas a hechos atinentes directamente a la persona del asegurado.”215

3.5 PARTES DEL CONTRATO DE SEGURO

Según el artículo 1037 de C.Co, son partes del contrato de seguro el

asegurador y tomador.

3.5.1 El Asegurador

El numeral 1 del mencionado artículo define que el asegurador: “es la persona

jurídica que asume los riesgos, debidamente autorizada para ello con arreglo a

las leyes y reglamentos.”

Nuestra legislación se inclina por la tesis del asegurador-empresa, ya que este

debe ser una persona jurídica, sometida a un régimen especial.

El asegurador debe constituirse bajo la figura de sociedades anónimas

mercantiles o de asociaciones cooperativas según el artículo 53 del EOSF,

además el asegurador debe estar sometido al control y vigilancia de la

Superintendencia Bancaria216 esto se debe a la influencia del mercado

asegurador en el comercio, a demás deben contar con un capital mínimo y una

organización técnica contable.

215
HALPERIN, Isaac. Lecciones de seguros. Buenos Aires: Ediciones Depalma. 1989. p. 11
216
Art. 46 C. de Co. “Objetivos de la Intervención: Conforme al artículo 150 numeral 19 literal d) de
la Constitución política, corresponderá al Gobierno Nacional ejercer la intervención en las
139

“La tesis del asegurador-empresa, original del tratadista italiano VIVANTE, a

todas luces es la más conveniente porque lo complejo de la actividad

aseguradora hace que resulte casi imposible su adecuado ejercicio por

personas naturales. Es por ello por lo que al obligarse a la constitución de una

persona jurídica se puede exigir una serie de requisitos mínimos de orden

técnico, administrativo y legal que permitan la suficiente confianza de los

asociados para la celebración de contratos de seguros, y, además, porque

solamente la actividad empresarial aseguradora puede garantizar la seriedad y

estabilidad que requiere la protección que ofrecen,...”217

3.5.2 El Tomador

El numeral 2º del artículo 1037 del C.Co define al tomador como “la persona

que, obrando por cuenta propia o ajena, traslada los riesgos.”

El tomador puede ser cualquier sujeto de derecho, es decir cualquier persona

natural o jurídica, nuestra legislación no exige ningún requisito para poder

trasladar un riesgo propio o de un tercero.

Nuestra legislación reconoce 3 figuras que intervienen en el desarrollo del

contrato frente al asegurador, aunque en estricto sentido, de acuerdo con la

actividades financieras, aseguradora, y demás actividades relacionadas con el manejo


aprovechamiento e inversión de los recursos captados del público,....”
217
LOPEZ BLANCO, Hernan Fabio. Contrato de seguro. Bogotá: Dupré Editores. 1999. p. 86
140

disposición contenida en el Artículo 1037 del C. De Co., solamente son partes

el tomador y el beneficiario.

Tomador: “es la persona que celebra el contrato con el asegurador y puede

hacerlo por cuenta propia o por cuenta ajena.”218

Asegurado: “Es la persona titular de un interés que, de verse afectado con un

siniestro, puede sufrir un perjuicio patrimonial.”219

Beneficiario: “es la persona que recibe la indemnización en el caso de la

ocurrencia del siniestro previsto al contratar.”220

Generalmente la persona del tomador coincide con la persona del asegurado y

con la del beneficiario, pero en ocasiones pueden ser 3 personas diferentes,

ya que estas calidades pueden estar desmembradas en diferentes personas.

El asegurado y el beneficiario, cuando son personas distintas del tomador, no

son partes.

3.5.2.1 Seguro por cuenta propia

Cuando el interés, que constituye el objeto del contrato, esta radicado en la

persona del contrayente, es decir el tomador, el seguro es por cuenta propia.

Aquí el asegurado es el propio contrayente o tomador.

218
MEILIJ, Gustavo. Manual de seguros. Buenos Aires: Ediciones Depalma. 1987. p. 35
219
LOPEZ BLANCO. Ob. Cit. p. 89
220
MEILIJ. Ob. Cit. p. 35
141

3.5.2.2 Seguro por cuenta ajena

Cuando el interés, que constituye el objeto del contrato, se radica en la

persona de un tercero y no en la persona del tomador, el seguro es por cuenta

ajena. En este caso el asegurado es una persona diferente al contrayente.

“El tomador del seguro bien puede estipularlo por cuenta de un tercero del

cual no tenga poder para representarlo (art. 1038 del C. de Co.), y el

asegurado puede ratificar lo acordado aun después del siniestro, en razón de

que el contrato sigue existiendo mientras el tercero no exprese su voluntad de

aceptación o rechazo.”221

El tercero puede ratificar o rechazar el contrato; y desde el momento en que el

asegurador reciba la noticia de la ratificación o el rechazo, releva al tomador

del cumplimiento de las obligaciones derivadas del contrato, ya que éste está

obligado por ley a cumplir personalmente las obligaciones derivadas del mismo

(art. 1038 C.de Co inc. 1º).

3.6 OBLIGACIONES QUE NACEN DEL CONTRATO

El Contrato de seguro se caracteriza por ser un contrato bilateral, del cual

resultan obligaciones recíprocas para las partes y su incumplimiento genera

sanciones.

221
LOPEZ BLANCO. Ob. Cit. p. 91
142

3.6.1 Obligaciones a cargo del tomador, asegurado o beneficiario

3.6.1.1 Precontractuales

Antes de perfeccionarse el contrato, se realizan diferentes actuaciones que

generan obligaciones o responsabilidades, y el deber que le concierne al

tomador en la etapa precontractual es uno solo; el deber de declarar el estado

del riesgo.

3.6.1.1.1 La declaración del estado del riesgo

Esta obligación está regulada en el Artículo 1058 C. de Co. que dice: “El

tomador está obligado a declarar sinceramente los hechos o circunstancias

que determinan el estado del riesgo, según el cuestionario que le sea

propuesto por el asegurador.....”

“Es fácil advertir que esa obligación no emana del contrato, puesto que debe

ejecutarse con anterioridad a él, como una condición básica para el

otorgamiento del consentimiento del asegurador. El seguro es un contrato

peculiar. El asegurador no puede asumir los riesgos, sin conocer antes su

extensión, vale decir el grado de peligrosidad que ellos encierran. Y la fuente

natural de ese conocimiento no es otra, no puede serlo (si se considera que la

gradación del riesgo responde a un complejo de circunstancias de orden


143

objetivo y subjetivo), que el tomador mismo, a quien ordinariamente hay que

suponer en contacto directo con la relación asegurable.”222

El tomador o asegurado debe declarar sinceramente las diferentes

circunstancias o hechos que conforman el estado del riesgo, esta declaración

puede hacerse ciñéndose a un formulario o cuestionario previamente

preparado por el asegurador o sin la necesidad de este por medio de la

declaración espontánea del estado del riesgo. En la práctica el uso del

formulario para el cumplimiento de esta obligación precontractual es el sistema

más utilizado y como lo expresa el doctrinante J. Efrén Ossa: “es más técnico y

más jurídico.”223

El ya mencionado artículo 1058 dispone también que: “La reticencia o

inexactitud sobre hechos o circunstancias que, conocidos por el asegurador, lo

hubieran retraído de celebrar el contrato, o inducido a estipular condiciones

más onerosas, producen la nulidad relativa del seguro. Si la declaración no se

hace con sujeción a un cuestionario determinado, la reticencia o la inexactitud

producen igual efecto si el tomador ha incubierto por culpa, hechos o

circunstancias que impliquen agravación objetiva del estado del riesgo. Si la

inexactitud o la reticencia provienen de error inculpable del tomador, el contrato

no será nulo, pero el asegurador sólo estará obligado, en caso de siniestro, a

pagar un porcentaje de la prestación asegurada, equivalente al que la tarifa o

la prima estipulada en el que contrato represente respecto de la tarifa o la

222
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 325
223
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 325
144

prima adecuada al verdadero estado del riesgo, excepto lo previsto en el

artículo 1160. Las sanciones consagradas en este artículo no se aplican si el

asegurador, antes de celebrarse el contrato, ha conocido o debido conocer los

hechos o circunstancias sobre que versan los vicios de la declaración, o si, ya

celebrado el contrato, se allana a subsanarlos o los acepta expresa o

tácitamente. ”

“El consentimiento del asegurador es otorgado con base en la declaración del

estado del riesgo. Y debe ser exento de todo vicio para que el contrato de

seguro sea válido.”224

“Tanto la reticencia o inexactitud “pueden ser intencionales (por provenir de

dolo o culpa grave), culposas (por provenir de culpa leve o levísima) o

inocentes (por provenir de error inculpable). Su origen en otras palabras,

incide sobre la naturaleza de la sanción,...puede ser la nulidad relativa o la

reducción proporcional de la prestación asegurada en caso de siniestro.”225

Tanto la reticencia como la inexactitud de las manifestaciones sobre el estado

del riesgo, pueden ser relevantes o irrelevantes, estas últimas son las

inexactitudes o reticencias carentes de influencias en la vida del contrato, y

serán relevantes si los hechos o circunstancias omitidos o inexactamente

declarados: “1) eran o debían ser conocidos por el tomador o por su

representante”226 “2) si los hechos o circunstancias encubiertos, por acción u

224
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 326
225
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 330
226
Artículo 834 C..de Co.
145

omisión, eran de tal naturaleza que hubieran influido en el consentimiento del

asegurador o en las condiciones de su otorgamiento.” 227 Las sanciones para

las inexactitudes o reticencias relevantes son: a- la nulidad relativa y b-

reducción proporcional de la indemnización.

3.6.1.2 Obligaciones durante la ejecución del contrato

3.6.1.2.1 Mantener el estado del riesgo

Esta obligación es una extensión de la obligación precontractual de declaración

del estado del riesgo consagrada en el artículo 1058 del C. de Co., y es

abordado con mayor precisión en el artículo 1060 del citado estatuto.

Artículo 1060 C.de Co.: “El asegurado o el tomador, según el caso, están

obligados a mantener el estado del riesgo. En tal virtud, uno u otro deberán

notificar por escrito al asegurador los hechos o circunstancias no previsibles

que sobrevengan con posterioridad a la celebración del contrato y que,

conforme al criterio consignado en el inciso 1º del artículo 1058, signifiquen

agravación del riesgo o variación de su identidad local. La notificación se hará

con antelación no menor de diez días a la fecha de la modificación del riesgo,

si ésta depende del arbitrio del asegurado o del tomador. Si le es extraña,

dentro de los diez días siguientes a aquel en que tengan conocimiento de ella,

227
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 331
146

conocimiento que se presume transcurridos treinta días desde el momento de

la modificación. Notificada la modificación del riesgo en los términos

consignados en el inciso anterior, el asegurador podrá revocar el contrato o

exigir el reajuste a que haya lugar en el valor de la prima. La falta de

notificación oportuna produce la terminación del contrato. Pero sólo la mala fe

del asegurado o del tomador dará derecho al asegurador a retener la prima no

devengada. Esta sanción no será aplicable a los seguros de vida, excepto en

cuanto a los amparos accesorios, a menos de convención en contrario; ni

cuando el asegurador haya conocido oportunamente la modificación y

consentido en ella.”

“La obligación de mantener el estado del riesgo que la ley impone al tomador-

asegurado o al tomador o al asegurado, según el caso, se traduce en una

carga de información cuya infracción o cuya oportuna observancia tienen

señalada influencia en la vida del contrato.”228

El artículo 1060 del C. de Co. impone al asegurado, tomador o beneficiario la

carga de información que comprende: a- los hechos o circunstancias que

signifiquen agravación del riesgo o, b- variación de su identidad local.

Estas variaciones o cambios pueden depender o no de la voluntad del

asegurado, tomador o beneficiario la ley obliga a que éste dé aviso al

asegurador de cualquier situación que agrave el estado del riego.

228
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 368
147

Si la modificación al estado del riesgo es voluntaria, se entiende que el

asegurado o tomador tiene conocimiento del mismo, en este caso la

notificación a la aseguradora debe hacerse “con antelación no menor de diez

días a la fecha de la modificación del riesgo.”229

Si la modificación es involuntaria, la notificación debe hacerse “dentro de los

diez días siguientes a aquel en que tengan conocimiento de ella.

Conocimiento que se presume transcurridos treinta días desde el momento de

la modificación.”230 Es decir, la notificación se debe dar dentro de los diez

días siguientes en que tuvo conocimiento o debió haberlo tenido.

3.6.1.2.2 Pago de la prima

Esta obligación que corresponde al tomador, “es una obligación que nace con

el contrato, en el cual encuentra su fuente,”231 y está consagrado en el artículo

1066 del C. de Co.

Artículo 1066 C. de Co. Modificado. L. 45/90, art. 81: “Término para el pago de

la prima. El tomador del seguro está obligado al pago de la prima. Salvo

disposición legal o contractual en contrario, deberá hacerlo a más tardar dentro

del mes siguiente contado a partir de la fecha de la entrega de la póliza o, si

fuere el caso, de los certificados o anexos que se expidan con fundamento en

ella.

229
Artículo 1060 del C. de Co.
230
Artículo 1060 del C. de Co.
231
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 395
148

2.6.1.2.3 Cumplir con las Garantías

Según el artículo 1061 del C. de Co.: “Se entenderá por garantía la promesa

en virtud de la cual el asegurado se obliga a hacer o no determinada cosa, o a

cumplir determinada exigencia, o mediante la cual afirma o niega la existencia

de determinada situación de hecho.”

Siguiendo el esquema del Dr. J. Efrén Ossa, los atributos esenciales de las

garantías son:

a- “La garantía supone una declaración del tomador (afirmativa o negativa)

que, consignada en la proposición de seguro o incorporada en el clausulado de

la póliza, debe entenderse determinante del consentimiento del asegurador. O

una obligación o carga que contraen el tomador o asegurado en virtud de un

contrato.”232

b- “La garantía debe tener relación con el riesgo asegurado. La doctrina ha

dicho que “el rasgo característico de la garantía, como condición del contrato,

que la distingue de otras condiciones, es que ella dice relación al riesgo.”.... De

no existir esa relación, por remota que sea, la institución de las garantías, que

la ley ha concebido como instrumento de protección del asegurador y del

seguro mismo, se convertiría en venero de abusos.”233

232
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 358
233
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 358
149

c- “La garantía debe constar por escrito. Aparecer consignada “la garantía

deberá constar en la póliza o en los documentos accesorios a ella.” (art- 1061

inc 2º).”234

d- “La garantía debe cumplirse estrictamente.”235 Como lo expresa el artículo

1061 del C. de Co. Inc. 3º: “La garantía, sea o no sustancial respecto del

riesgo, deberá cumplirse estrictamente. En caso contrario, el contrato será

anulable. Cuando la garantía se refiere a un hecho posterior a la celebración

del contrato, el asegurador podrá darlo por terminado desde el momento de la

infracción.”

3.6.1.2.4 Declarar los seguros coexistentes

Según el Artículo 1093 del C. de Co. “El asegurado deberá informar por

escrito al asegurador los seguros de igual naturaleza que contrate sobre el

mismo interés, dentro de los diez días a partir de su celebración. La

inobservancia de esta obligación producirá la terminación del contrato, a

menos que el valor conjunto de los seguros no exceda el valor real del interés

asegurado.”

234
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 359
235
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 360
150

3.6.1.3 Obligaciones con ocasión del siniestro

3.6.1.3.1 Evitar la extensión y propagación del siniestro y proveer al

salvamento de las cosas aseguradas

El artículo 1074 del C. de Co. impone al asegurado la carga de evitar la

extensión y propagación del siniestro y de proveer al salvamento de las cosas

aseguradas:

Artículo 1074: “Ocurrido el siniestro, el asegurado estará obligado a evitar su

extensión y propagación, y a proveer al salvamento de las cosas aseguradas.

El asegurador se hará cargo, dentro de las normas que regulan el importe de la

indemnización, de los gastos razonables en que incurra el asegurado en

cumplimiento de tales obligaciones.”

Ocurrido el siniestro, es obligación del asegurado participar en la extinción del

mismo como también evitar su propagación, el asegurado debe atenuar en lo

que esté a su alcance y posibilidad, que el siniestro no se extienda más allá de

lo que puso ser; “la indiferencia del asegurado, al iniciarse el siniestro,

prevalido de la existencia del seguro, es jurídicamente incompatible con la

buena fe que debe presidir la ejecución de todo contrato.” 236 La ley pretende

que la conducta del asegurado no sea pasiva, que por el contrario sea una

conducta diligente y activa, que “frente al peligro que amenaza sus intereses,

236
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 412
151

el asegurado reaccione de igual modo que si ellos no estuvieran

asegurados.”237

3.6.1.3.2 Dar aviso oportuno de la ocurrencia del siniestro

Esta carga la impone al asegurado el artículo 1075 del C. de Co. que dice:

“El asegurado o el beneficiario estarán obligados a dar noticia al asegurador de

la ocurrencia del siniestro, dentro de los tres días siguientes a la fecha en que

lo hayan conocido o debido conocer. Este término podrá ampliarse, mas no

reducirse por las partes.

El asegurador no podrá alegar el retardo o la omisión si, dentro del mismo

plazo, interviene en las operaciones de salvamento o de comprobación del

siniestro.”

“Importa a la ley que el asegurador tenga información oportuna del hecho que

da origen a su obligación principal, esto es, de la “realización del riesgo

asegurado” (art. 1072). Es la que permite, en ejercicio de sus facultades

preventivas, identificar las circunstancias del siniestro (lugar, tiempo, modo);

conocer, por percepción directa, sus causas y evaluar, así sea tentativamente,

la magnitud de sus efectos.”238

237
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 412

238
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 414
152

3.6.1.3.3 Declarar la coexistencia de seguros

Esta obligación, “debe entenderse como una carga específica que obliga la

responsabilidad del asegurado con ocasión del siniestro y que es distinta de la

que, en igual sentido, debe cumplir durante la vigencia del contrato.”239

El deber de declarar los seguros coexistentes, es impuesta al asegurado por el

artículo 1076 del C. de Co. que reza: “Sin perjuicio de la obligación que le

impone el artículo 1074, el asegurado estará obligado a declarar al asegurador,

al dar la noticia del siniestro, los seguros coexistentes, con indicación del

asegurador y de la suma asegurada. La inobservancia maliciosa de esta

obligación le acarreará la pérdida del derecho a la prestación asegurada.”

La carga del art. 1076 debe cumplirse con ocasión al siniestro, y su

inobservancia, en este caso trae como consecuancia la caducidad.

Hay coexistencia de seguros cuando se reúnen las siguientes condiciones:

1. Diversidad de aseguradores

2. Identidad del asegurado

3. Identidad del interés asegurado, y

4. Identidad de riesgo.

3.6.1.3.4 Demostrar la ocurrencia del siniestro y la cuantía de la pérdida

De acuerdo con lo establecido por el artículo 1077 del C. de Co.

“Corresponderá al asegurado demostrar la ocurrencia del siniestro, así como la

239
OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 416
153

cuantía de la pérdida, si fuere el caso. El asegurador deberá demostrar los

hechos o circunstancias excluyentes de su responsabilidad.”

Con la ocurrencia del siniestro, es el asegurado o beneficiario, quien sufre el

menoscabo patrimonial, y es éste quien debe demostrar tanto la ocurrencia del

siniestro, como su cuantía, al momento de formular su reclamación al

asegurador. Además debe demostrar la existencia y exigibilidad de la

obligación a cargo del asegurador.

3.6.2 Obligaciones a cargo del Asegurador

3.6.2.1 Obligación de entregar la póliza

El artículo 1046 del C. de Co. hace referencia a la obligación del asegurador de

entregar la póliza.

Artículo 1046 Modificado. L. 389/97, art. 3º. “El contrato de seguro se

probará por escrito o por confesión. Con fines exclusivamente probatorios, el

asegurador está obligado a entregar en su original, al tomador, dentro de los

quince días siguientes a la fecha de su celebración el documento contentivo

del contrato de seguro, el cual se denomina póliza, el que deberá redactarse

en castellano y firmarse por el asegurador. La Superintendencia Bancaria

señalará los ramos y la clase de contratos que se redacten en idioma

extranjero.

PAR.—El asegurador está también obligado a librar a petición y a costa del

tomador, del asegurado o del beneficiario duplicados o copias de la póliza.”


154

3.6.2.2 Devolver la prima no devengada

“La de devolver parte de la prima percibida es también una obligación strictu

sensu que la ley impone al asegurador en determinados casos en que, a falta

de interés asegurable o de riesgo asegurable o de uno y otro o merced al

designio unilateral de las partes o a su voluntad concorde, cesa la

responsabilidad del asegurador o se torna menos onerosa. La devolución

debe hacérsela al tomador dado que, conforme a la norma legal (art. 1066),240

es quien ha debido pagar la prima.”241

La ley consagra ciertos casos en los cuales el tomador tiene acción judicial

para hacer efectiva la obligación de devolver la parte no devengada de la

prima, y los casos son:

 Artículo 1060 inc. 4 Terminación del seguro. “La falta de notificación

oportuna produce la terminación del contrato. Pero sólo la mala fe del

asegurado o del tomador dará derecho al asegurador a retener la prima no

devengada.”

240
ART. 1066.—Modificado. L. 45/90, art. 81. Término para el pago de la prima. El tomador del
seguro está obligado al pago de la prima. Salvo disposición legal o contractual en contrario, deberá
hacerlo a más tardar dentro del mes siguiente contado a partir de la fecha de la entrega de la
póliza o, si fuere el caso, de los certificados o anexos que se expidan con fundamento en ella.
241 OSSA GOMEZ. Ob. Cit. p. 429
155

 Artículo 1065 Disminución de la prima. “En caso de disminución del

riesgo, el asegurador deberá reducir la prima estipulada, según la tarifa

correspondiente, por el tiempo no corrido del seguro, excepto en los seguros a

que se refiere el artículo 1060, inciso final.”

 Artículo 1071 inc 2 y 3 Revocación del contrato. “En el primer caso, la

revocación da derecho al asegurado a recuperar la prima no devengada, o

sea, la que corresponde al lapso comprendido entre la fecha en que comienza

a surtir efectos la revocación y la de vencimiento del contrato. La devolución se

computará de igual modo, si la revocación resulta del mutuo acuerdo de las

partes. En el segundo caso, el importe de la prima devengada y el de la

devolución se calcularán tomando en cuenta la tarifa de seguros a corto plazo.”

 Artículo 1091 Exceso asegurado. “El exceso del seguro sobre el valor

real del interés asegurado producirá la nulidad del contrato, con retención de la

prima a título de pena, cuando de parte del asegurado haya habido intención

manifiesta de defraudar al asegurador. En los demás casos podrá promoverse

su reducción por cualquiera de las partes contratantes, mediante la devolución

o rebaja de la prima correspondiente al importe del exceso y al período no

transcurrido del seguro.”

 Artículo 1107 inc. 2 Transferencia del interés asegurado. “La extinción

creará a cargo del asegurador la obligación de devolver la prima no

devengada.”
156

 Artículo 1109 Pérdida por causas ajenas al amparo. “Se producirá

igualmente la extinción del contrato, con la obligación a cargo del asegurador

de devolver la prima no devengada, si la cosa asegurada o a la cual está

ligado el seguro, se destruye por hecho o causa extraños a la protección

derivada de aquél. Si la destrucción es parcial, la extinción se producirá

parcialmente y habrá lugar así mismo a la devolución de la prima respectiva.”

 Artículo 1137 inc. 3 Seguros sobre la vida de incapaces o en los que

falta interés asegurable. “En defecto del interés o del consentimiento

requeridos al tenor de los incisos que anteceden, o en caso de suscripción

sobre la vida de un incapaz absoluto, el contrato no producirá efecto alguno y

el asegurador estará obligado a restituir las primas percibidas. Sólo podrá

retener el importe de sus gastos, si ha actuado de buena fe.”

 Artículo 1159 Revocación del seguro de vida a solicitud del asegurado.

“El asegurador no podrá, en ningún caso, revocar unilateralmente el contrato

de seguro de vida. La revocación efectuada a solicitud del asegurado dará

lugar a la devolución del saldo del valor de cesión o rescate.”

3.6.2.6 Obligación de pagar la indemnización o prestación


Asegurada
Según el artículo 1045 del C. de Co. Es elemento esencial del seguro la

obligación condicional del asegurador. Acaecida o cumplida la condición, ésta

nace a la vida jurídica y es plenamente exigible después que se haya cumplido

con la obligación de demostrar la ocurrencia del siniestro y la cuantía de la


157

pérdida por parte del tomador (asegurado) según lo dispuesto por el artículo

1077 del C. de Co.

La oportunidad para el pago de la indemnización, según lo dispone el artículo

1080 del C. de Co. es “dentro del mes siguiente a la fecha en que el

asegurado o beneficiario acredite, aún extrajudicialmente, su derecho ante el

asegurador de acuerdo con el artículo 1077.”

3.7 EXTINCIÓN DEL CONTRATO DE SEGURO

El contrato de seguro puede terminarse o extinguirse por diferentes causales, a

saber:

2.7.1 Vencimiento del plazo.

2.7.2 Con el pago total de la indemnización.

2.7.3 Por acuerdo entre las partes

2.7.4 Por Revocación. Artículo 1071 C.de Co.

2.7.5 Por destrucción o pérdida de la cosa asegurada. Artículo 1086 y

1109 C.de Co.

2.7.6 Por la terminación sanción. Artículo 1061, 1066, 1068, C de Co.


158

2.7.7 Por nulidad absoluta. Artículo 1129 C de Co. (Especial para el

seguro de Responsabilidad Civil Profesional)

2.7.8 Por falta de un elemento esencial. Artículo 1045 y 1137


159

CAPITULO IV
CONTRATO DE SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL
MÉDICA

4.1 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL

4.1.1 NOCIÓN

Consagración legal. El Artículo 1127 del C. de Co. Estipula que “El seguro de

Responsabilidad impone a cargo del asegurador la obligación de indemnizar

los perjuicios patrimoniales que cause el asegurado con motivo de

determinada responsabilidad en que incurra de acuerdo con la ley y tiene como

propósito el resarcimiento de la víctima, la cual, en tal virtud, se constituye en

el beneficiario de la indemnización, sin perjuicio de las prestaciones que se le

reconozcan al asegurado. Son asegurables la responsabilidad contractual y la

extracontractual, al igual que la culpa grave, con la restricción indicada en el

artículo 1055.”
160

4.1.2 UBICACIÓN

El Código de Comercio Colombiano establece una clasificación del contrato de

seguro, que permite ubicar el seguro de responsabilidad civil profesional, en un

orden jerárquico, donde cada clase de seguro forma parte de la modalidad

inmediatamente superior, hasta llegar a la noción más general del seguro, así:

Seguros

Seguros de Daños

Seguros Patrimoniales

Seguro de Responsabilidad Civil

Seguro de Responsabilidad Civil Profesional

El fin que se persigue con el seguro de responsabilidad civil profesional, es

cubrir la responsabilidad que pueda pesar sobre el asegurado, proveniente de

circunstancias que se presentan en el desarrollo de su actividad profesional y

de las cuales sea civilmente responsable. Está referido a daños ocasionados

en el desarrollo de su actividad profesional.

4.1.3 AMBITO DE APLICACIÓN

De acuerdo con el artículo 1127, el seguro de responsabilidad civil, “tiene como

propósito el resarcimiento de la víctima, la cual en tal virtud, se constituye en el

beneficio de la indemnización... ” Busca la protección de la víctima de los


161

daños que pueda sufrir cuando tenga su origen en la denominada “culpa

profesional” que es una de las manifestaciones de la culpa. Protege también el

patrimonio del civilmente responsable pues de no existir el seguro, sería su

patrimonio el que se afectaría como consecuencia de la responsabilidad civil.

Por culpa profesional, podemos entender aquélla en la que incurre una

persona que ejerce una profesión, al faltar a los deberes especiales que ella

impone. Se trata de una infracción típica concerniente a ciertos deberes

propios de esa determinada actividad. Todo individuo que ejerce una profesión

debe poseer los conocimientos teóricos y prácticos propios de la misma y

aplicarlos de manera cuidadosa y diligente.

4.1.3.1 Definición de Profesional

Como ya lo habíamos anotado anteriormente profesional “es aquella persona

que frente a la sociedad realiza una actividad habitual y presta y ofrece sus

servicios. El profesional, es una persona dotada de conocimientos, pericias o

saberes que, por lo habitual, están respaldados por la ostentación de un título

acreditativo de la idoneidad para el desempeño de su función”.242

De esta manera, la expresión profesional se asocia con la persona que ha

cursado una carrera universitaria o, como dice el Código Civil, “El que realice

largos estudios”. Esta persona ofrece y presta sus servicios a la comunidad; y

242
MARTINEZ-CALCERRADA, Luis. La responsabilidad civil profesional. Madrid: Editorial Colex.
1999. p. 21.
162

la comunidad celebra contratos para obtener la prestación de sus servicios,

puede exigir que éste cumpla diligentemente con sus obligaciones y que

responda por los daños causados.

4.1.3.2 Cobertura del seguro de responsabilidad civil profesional

Antes de analizar la cobertura que ofrece el seguro de responsabilidad civil

profesional, vamos a enunciar algunas notas características de este contrato

en particular, que nos ayudará más adelante, a precisar el alcance de su

cobertura.

 Es un seguro Multidisciplinar: “Inciden sobre él una serie de materias, de

carácter jurídico, sociológico, estadístico..., que de alguna manera, como en el

caso del derecho, nos trazan un esquema previo, que va a orientar de forma

decisiva el desarrollo de esta disciplina.”243

 Es un seguro amplio: “Bajo las sencillas y minimizadas siglas del RC se

esconden una variadísima gama de modalidades de aseguramiento, que van

desde la esfera privada de cualquier individuo hasta los más complejos riesgos

industriales.”244

243
LOPEZ-COBO, Claudio I. El Seguro de Responsabilidad Civil. Fundamentos y Modalidades.
Madrid: Comercial Impresora. 1988 p. 20
244
LOPEZ-COBO Ob. Cit. p. 20
163

 Es un seguro moderno: “Este seguro es una consecuencia directa,

aunque no inmediata, de la evolución de la práctica mercantil y de la

Revolución Industrial de los siglos XVII y XIX.”245

 La responsabilidad civil no es un concepto estático: “Por el contrario,

es algo permanentemente ligado a los cambios y necesidades sociales y a los

criterios jurisprudenciales del momento.”246

La finalidad del seguro de responsabilidad civil profesional, es preventiva,

busca evitar que el patrimonio del asegurado resulte afectado como

consecuencia de la responsabilidad derivada de su ejercicio profesional. El

ámbito de aplicación de este tipo de seguro es muy amplio, porque se puede

pactar para cualquier caso, salvo aquellos en los que el asegurado no sea

legalmente hábil para ejercer la profesión o cuando la profesión no goza de la

tutela del Estado. Esto de acuerdo con el artículo 1129 del C. de Co. Que

establece que: “será nulo, de nulidad absoluta, el seguro de responsabilidad

profesional cuando la profesión y su ejercicio no gocen de la tutela del Estado

o cuando, al momento de celebrarse el contrato, el asegurado no sea

legalmente hábil para ejercer la profesión”247.

245
LOPEZ-COBO Ob. Cit. p. 21
246
LOPEZ-COBO Ob. Cit. p. 21
247
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Responsabilidad
Civil Profesional. Tesis. Pontificia Universidad Javeriana. 1995. Pág. 85
164

4.1.4 FUNCIÓN DEL SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL

PROFESIONAL

El seguro de Responsabilidad Civil Profesional contiene todos y cada uno de

los elementos y características propias del seguro de Responsabilidad Civil,

diferenciándose en la clase de daño que genera la responsabilidad del

asegurado, pues es un daño que se origina como consecuencia del ejercicio

de una actividad profesional, de hay la importancia de este seguro, ya que

persigue la asunción del riesgo por parte de una aseguradora con el fin de

indemnizar a la víctima en el evento de que se cause un daño en el

desempeño o ejercicio profesional del agente.

4.1.5 SINIESTRO

El Código de Comercio en su artículo 1072 define el siniestro como “la

realización del riesgo asegurado”248; pero determinar el momento en que se

produce la realización del riesgo no es fácil en la práctica, y más cuando se

trata de un seguro de Responsabilidad, en donde el siniestro “consistirá en el

daño que dio lugar a la responsabilidad”249, por esto el “tema de la

identificación del daño en este seguro ha dado lugar a grandes discusiones

doctrinales. Así como es sencillo identificar el siniestro con el incendio en el

seguro de este nombre (o en el de granizo, o robo, o rotura de cristales), en el

de la responsabilidad civil cabe discutir si el siniestro coincide con el hecho

248
Articulo 1072 C. Co.

249
GARRIGUES, Joaquín. Contrato de Seguro Terrestres. Imprenta Aguirre. Madrid. 1982. Pág.
369
165

jurídico de la reclamación del perjudicado, o con el hecho de haber cumplido el

asegurado su obligación de indemnizar al tercero”250.

Las distintas tesis de la doctrina confluyen en dos teorías principales, que se

pueden dividir en “la que sostiene que el siniestro coincide con el hecho

dañoso, del que nace la responsabilidad; la que afirma que no hay siniestro

hasta que el tercero perjudicado no haya hecho su reclamación”251.

En Colombia el Código de Comercio no toma un criterio único, sino que mezcla

estas dos teorías para establecer cuándo se entiende ocurrido el siniestro, por

ésto en el articulo 1131 de este mismo código se consagra lo siguiente: “en el

seguro de responsabilidad se entenderá ocurrido el siniestro en el momento en

que acaezca el hecho externo imputable al asegurado, fecha a partir de la cual

correrá la prescripción respecto de la víctima. Frente al asegurado, ello ocurrirá

desde cuando la víctima le formula la petición judicial o extrajudicial”252.

¿Pero cuando se da el hecho externo imputable al asegurado en la

responsabilidad civil profesional? Si tenemos en cuenta que “no siempre

concurren todos los elementos de la responsabilidad en un mismo

momento…”253, pues pueden presentarse “dentro de un lapso de tempo más o

menos largo”254; podemos entender que de ésta determinación dependerá que

250
GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 369 y 370
251
GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 370
252
Articuló 1131 C. Co.
253
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.59 y 60
254
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.59 y 60
166

el “evento del cual el asegurado es civilmente responsable se encuentra o no

cubierto por un determinado contrato de seguros…”255.

Al respecto, la Comisión Redactora en su exposición de motivos expreso:

“La Comisión ha querido (Art. 951) dar solución a algunos problemas que

suscita la noción de siniestro en el seguro de responsabilidad civil. Y por eso

ha dicho que el siniestro se encuentra ocurrido desde el momento en que se

registre el hecho externo imputable al asegurado. Pero ha agregado, al mismo

tiempo, que la responsabilidad del asegurador no podrá hacerse efectiva sino

cuando el damnificado o sus causahabientes formulen su reclamación judicial

o extrajudicial, con lo cual se da solución a los problemas atinentes a la

vigencia de ese contrato, a la fecha desde la cual empieza a contarse el

término dentro del cual el asegurado debe notificar el siniestro, al momento

que marca la iniciación del lapso de prescripción de la acciones, etc.”256.

“De lo que concluimos que la intención del legislador fue entender por

ocurrencia del siniestro la realización del hecho imputable al asegurado,

momento en el cual nace la obligación del asegurador (Schuld), pero

condicionar dicha obligación a la presentación de la víctima en cuyo caso ésta

255
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 60
256
ACTAS de la COMISIÓN REDACTORA. Exposición de Motivos. OSSA GOMEZ, Efrén. Tomo II.
El Contrato. Págs. 593 y 594
167

se torna exigible (Haftung), momento a partir del cual corre prescripción

respecto del asegurado”257.

Pero “frente a la víctima la obligación del asegurador es completa (Schuld y

Haftung) desde el momento de la ocurrencia del hecho, momento a partir del

cual el damnificado puede ejercer su acción directa contra el asegurador para

obtener el pago de la indemnización”258.

4.1.6 PRESCRIPCIÓN

Los Doctores Rafael Gamboa, Carlos Darío Barrera y José Fernando Torres

explican en su análisis: La Prescripción en el Contrato de Seguros que “el

problema de la determinación del momento desde el cual corre o debe correr él

termino de la prescripción de la acción del asegurado o beneficiado contra el

asegurador, derivada del seguro de responsabilidad civil, ha suscitado fuertes

controversias en la doctrina y la jurisprudencia, no solo en Colombia sino en

otros países”.

Por ésto el nuevo Código Civil trae una norma especial 259 que regula el

momento a partir del cual comienza a correr los términos de prescripción,

disipando de esta forma las dudas que se tenían sobre el tema.

257
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 62
258
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 62
259
Articulo 1131: “En el seguro de responsabilidad se entenderá ocurrido el siniestro en el
momento en que acaezca el hecho externo imputable al asegurado, fecha a partir de la cual
correrá la prescripción respecto a la victima. Frente al asegurado ello ocurrirá desde cuando la
victima le formula la petición judicial o extrajudicial”.
168

“Así las cosas, las cosas la prescripción de la obligación del asegurado frente a

la víctima se regirá por las normas que reglamentan la responsabilidad civil. El

asegurador sólo podrá ser demandado en ejercicio de la acción directa si el

termina de la prescripción establecido en el Código de Comercio en el articulo

1081 no se ha cumplido, contado a partir del acaecimiento del hecho externo

imputable al asegurado, según lo establece el Art. 1131 C. Co.

La prescripción del derecho del asegurado contra el asegurador, está sujeta a

los términos del artículo 1080 del C. Co pero la prescripción empieza a correr

desde el momento en que la obligación se torna exigible, esto ocurre según lo

preceptuado por él articulo 1131, a partir de la reclamación judicial o

extrajudicial del damnificado o de sus causahabientes”260.

Es tal vez este punto el que mayores problemas a generado a las empresas

aseguradoras Colombianas, pues con lo consagrado en la norma se amplió de

una forma significativa el tiempo de reclamación directa de la víctima, lo que

hace que las reaseguradoras no muestren interés en de seguros de

responsabilidad civil médica, debido a que el tiempo de prescripción se

encuentra suspendido hasta el día en que la víctima presenta la reclamación al

asegurado.

260
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 87
169

Actualmente en el mundo, el mercado ofrece las pólizas con cláusulas Claims

Made, las cuales exigen que la reclamación sea efectuada durante el período

de vigencia de la póliza independientemente del momento de la ocurrencia del

hecho, para evitar los seguros long tail. En Colombia con el artículo 4 de la

Ley 389 de 1997261 se abrió la posibilidad de suscribir contratos de seguros de

responsabilidad con cláusulas Claims Made.

4.2 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL MÉDICA

4.2.1 NOCIÓN

Con el seguro de responsabilidad civil médica se transfiere la responsabilidad

que se genera como consecuencia de la mala praxis del médico, de una

persona física o jurídica, hacia una institución que dispone de mayores

recursos financieros, conocida como aseguradora, para la pronta atención de

indemnizaciones requeridas. El seguro de responsabilidad médica trasmite al

público, la idea de que la persona que los atiende, es decir el profesional esta

protegido y por lo tanto ellos también, por esto tanto médico como quien

261
ARTICULO 4, Ley 389 De 1997. Cobertura del Seguro de Manejo y del de Responsabilidad:
“En el seguro de manejo y riesgos financieros y en el de responsabilidad la cobertura podrá
circunscribirse al descubrimiento de pérdidas durante la vigencia, en el primero, y a las
reclamaciones formuladas por el damnificado al asegurado o a la compañía durante la vigencia, en
el segundo, así se trate de hechos ocurridos con anterioridad a su iniciación.
Así mismo, se podrá definir como cubiertos los hechos que acaezcan durante la vigencia del
seguro de responsabilidad siempre que la reclamación del damnificado al asegurado o al
asegurador se efectúe dentro del termino estipulado en el contrato, el cual no será inferior a dos
años.
Parafrago: El Gobierno Nacional, por razones de interés general, podrá exceder lo dispuesto en el
presente artículo a otros ramos de seguros que así lo ameriten”.
170

requiere sus servicios, es decir, el paciente, se sienten confiados en el ejercicio

de la profesión.

Cabe anotar, que todos los planteamientos antes descritos en el seguro de

responsabilidad civil profesional son aplicables a el contrato suscrito por los

médicos con las compañías aseguradoras.

4.2.2 RELACIÓN ENTRE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA Y EL

SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL

“El seguro de responsabilidad civil surge como una necesidad inherente al

ejercicio profesional actual, generando la seguridad de que los posibles daños

y perjuicios causados en el ejercicio profesional podrán ser resarcidos, o al

menos paliados. Pero esa seguridad que el profesional cree tener, a veces se

ve truncada por la falta de un adecuado entendimiento acerca del seguro de

responsabilidad civil y de las condiciones de la póliza que se ha pactado, que

en mas de una ocasión puede dejar a la clínica, hospital o profesional,

asumiendo directamente los riesgos que en su momento procuro trasladar a la

compañía aseguradora”262.

Frente al interés público de que todo daño sea reparado, surge la necesidad de

trasladar los riesgos a un tercero, en este caso a un asegurador, que los

262
MIRANDA SUAREZ. Francisco Ob. Cit. Pág. 21 y 22
171

asuma a cambio del pago de una cantidad de dinero, denominada prima. Este

fenómeno ha generado un nuevo escenario en materia de reparación integral

del daño.

El aumento de las condenas por concepto de la responsabilidad civil de los

médicos, clínicas u hospitales, permite entender el incremento en la

contratación de seguros para cubrir los daños que aquellos puedan ocasionar.

Entonces, “el seguro de responsabilidad profesional actúa en el campo

patrimonial del asegurado, siendo en principio una herramienta valiosa y eficaz

en aras de evitar el riesgo patrimonial involucrado. Decimos en principio, pues

la agravación de los riesgos, y el auge en materia de responsabilidad medica,

han obligado a los aseguradores y reaseguradores, a revisar las cláusulas y

modalidades de los seguros de responsabilidad civil, que pueden resultar en

contradicción con los elementos esenciales que informan el contrato de

seguros, generando dudas acerca del alcance de la autonomía de la voluntad

en este ámbito, y provocando situaciones a veces contrarias a los derechos del

propio asegurado”.263

263
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 24
172

4.2.3 EL ASEGURAMIENTO DEL MÉDICO

Es curioso como los avances de la medicina, contrastan con el notable

incremento de las demandas y denuncias de pacientes insatisfechos en la

búsqueda de un resarcimiento económico y social pues, poner todos los

medios al alcance del paciente para intentar paliar su enfermedad, empieza a

no ser suficiente: ahora se busca la garantía en el resultado.

El resultado de las demandas por responsabilidad que termina en la condena

del médico ha aumentado en un 40% cada año, de aquí nace la verdadera

necesidad de contratar un seguro de responsabilidad civil como medida de

atenuación al impacto contra el patrimonio de los médicos. En este sentido,

no se debe buscar sólo una póliza que garantice una serie de amparos para

las actuaciones profesionales, sino un completo paquete que se adapte a las

necesidades, y que tengan como objeto fundamental crear seguridad en el

ejercicio de la profesión médica.

Para determinar qué es el aseguramiento médico es conveniente precisar

algunos aspectos:

Medicina: “Es la ciencia, arte y profesión que reúne el conjunto de

conocimientos y procedimientos organizados de acuerdo con el método

científico que permite aplicarse para la promoción de la salud, prevención,

diagnóstico de la enfermedad; terapeuta y rehabilitación del ser humano y


173

mejorar los patrones de vida de la colectividad, y su entorno, en el contexto del

proceso salud, enfermedad y muerte”264.

Ejercicio de la medicina: “Aplicación de medios y conocimientos científicos,

saberes y disciplinas cuyo fin es la promoción de la salud, y la prevención,

diagnóstico de la enfermedad; tratamientos y rehabilitación del enfermo desde

el punto de vista biológico, mental y social mediante actividades y actos

médicos ejecutados por personal idóneo debidamente capacitado para tal fin

conforme a su formación de pregrado y/o postgrado y adecuado a las

necesidades sociales del país. Este puede ser independiente, institucional,

público, y privado; y puede ser ejecutado individualmente o por equipos de

salud. El campo del trabajo médico-asistencial puede ser general o

especializado”.265

Acto médico: “Conjunto de acciones producto de los conocimientos y método

científico que constituyen la medicina, se aplican por él médico autorizado para

ejercerla, se orienta a la promoción de la salud y la prevención, diagnóstico,

tratamiento y rehabilitación de la enfermedad”.266

264
PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta
numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5
265
PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta
numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5
266
PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta
numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5
174

Médico: “El médico es la persona a quien legalmente se le ha otorgado él titulo

de médico previa formación a nivel universitario y quien se compromete a

ejercer su profesión con principios humanísticos, éticos y científicos. El médico

se compromete a utilizar todos los medios a su alcance para efectuar el acto

médico con apoyo en sus conocimientos, su adiestramiento técnico y su

diligencia y responsabilidad para mantener la salud y tratar o aliviar los efectos

de la enfermedad, previa información de los posibles riesgos y complicaciones

inherentes al acto médico.”267

El seguro de responsabilidad médica cubre la responsabilidad profesional del

asegurado derivada del ejercicio de su profesión médica, y la de sus

empleados que ejerzan una profesión médica, médica auxiliar, o farmacéutica,

y que por su culpa, ya sea por negligencia o impericia, causen daños

corporales o inclusive la muerte a sus pacientes.

Así mismo, ampara la responsabilidad civil legal por los daños que causen a

terceros en sus bienes o en sus personas, que se deriven por el uso, posesión

o mantenimiento de inmuebles, de aparatos y tratamientos médicos con fines

de diagnóstico o terapéutica, y de equipos de medicina nuclear y materias

radioactivas empleados para el desarrollo de dichas actividades médicas.

También ampara los gastos de defensa si es presentada una demanda en

contra del asegurado, como por ejemplo las primas por fianzas judiciales en

garantía del pago de las sumas reclamadas, así como, el pago de las

267
PROYECTO DE LEY NUMERO 144 DE 1998 SENADO, Virgilio Galvis Ramírez, Gaceta
numero 303, 27 de noviembre de 1998, Pág. 5
175

cauciones o de las primas de las fianzas que deban otorgarse como caución

para que alcance su libertad preparatoria, provisional o condicional durante un

proceso penal o civil, que se siga en su contra.

El Seguro de Responsabilidad Civil para Profesiones Médicas, está dirigido a

médicos titulados de cualquier especialidad, asociaciones, institutos y grupos

de colegios médicos.

En los últimos años se ha presentado un incremento en las demandas, pero

estas no están directamente relacionadas con la existencia de un Seguro sino

con el progreso social, médico y jurídico que desde hace algún tiempo se viene

poniendo de manifiesto. Social porque el paciente no se resigna ya a los

problemas de salud y ve con más certeza la posibilidad de reclamar por los

perjuicios sufridos, y de obtener por ello una compensación económica en el

caso de que se pruebe la ocurrencia del daño; progreso médico porque la

protección a la salud cuenta cada vez con técnicas más complejas y

sofisticadas, pero también peligrosas que, por una parte, propician una

exigencia quizás excesiva de los pacientes en este progreso y, por otra,

generan mayores riesgos, a lo que habría que añadir que el progreso técnico

ha desdibujado la relación humana entre profesional y paciente,

desapareciendo la figura del profesional, cada vez más considerado como un

técnico; y progreso jurídico, ya que la responsabilidad del profesional médico

no se basa sólo en la negligencia o mala práctica sino en la contravención de

los derechos de los pacientes positivizados jurídicamente.


176

4.2.4 PARTES DEL CONTRATO DE SEGUROS

Según el Código de Comercio “son partes en el contrato de seguros:

1. El asegurador o sea la persona jurídica que asume los riesgos

debidamente autorizada para ello con arreglo a las Leyes y reglamentos, y

2. El tomador o sea la persona que, obrando por cuenta propia o ajena,

traslada los riesgos”268.

Existen otras personas que sin ser parte del contrato de seguro de

responsabilidad civil médica, intervienen en el contrato, estas son los

interesado, los cuales pueden ser:

4.2.4.1 El Asegurado: Que es “la persona que tiene interés asegurable en el

riesgo que traslada. Es, como lo decía el articulo 635 del antiguo Código de

Comercio, la persona que queda libre del riesgo, naturalmente dentro de la

relatividad del concepto de indemnización”269.

4.2.4.2 Beneficiario: “Quienes como tales, no intervienen en la formación del

contrato (a menos que tenga la calidad de “asegurados” y “tomadores” en el

seguro de daños y aún en los de personas sobre riesgo de la muerte), pero

268
ARTICULO 1037 C.Co.
269
BUSTAMANTE FERRER, Jaime. URIBE OSORIO, Ana Inés. Principios Jurídicos del Seguro.
Colombo Editores. Bogotá. 1994. Pág. 61
177

han de percibir el valor del seguro, en caso de siniestro, ajustado naturalmente

con arreglo a sus condiciones y límites”270.

4.2.5 RELACIÓN ENTRE LAS PARTES DEL CONTRATO DE SEGURO

4.2.5.1 Relación Asegurado – Asegurador

Esta relación nace bajo el amparo del contrato de seguros, por lo tanto la

responsabilidad que se derive de él será contractual, salvo, que se dé el daño

por el incumplimiento del contrato, caso en el cual la responsabilidad será

extracontractual.

Hay que tener en cuenta que en este tipo de seguros el tomador es el mismo

asegurado, pues es su “integridad patrimonial la que pretende ser resguardada

mediante la contratación del seguro”271. No siempre el tomador es el mismo

asegurado en otro tipo de contrato de seguro.

4.2.5.2 Relación Asegurador – Víctima

Con la Ley 45 de 1990 nace para la víctima la acción directa contra el

asegurador, ya que antes de esta Ley la víctima tenía que demandar al

asegurado y éste llamaba en garantía al asegurador.

270
OSSA GÓMEZ, Efrén. Teoría General del Seguro. El Contrato. Tomo II. Editorial Temis.
Bogotá. Págs. 12 y 13
271
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Obra Citada. Pág. 72
178

La acción directa esta consagrada en él articulo 1133 del nuevo Código de

Comercio de la siguiente forma: “En el seguro de responsabilidad civil los

damnificados tienen acción directa contra el asegurador…”272.

“Para acreditar su derecho ante el asegurador de acuerdo con él articulo 1077,

la victima en ejercicio de la acción directa podrá en un solo proceso demostrar

la responsabilidad del asegurado y demandar la indemnización del

asegurador”273, pero antes deberá acreditar él o sus causahabientes que sí

existió la responsabilidad del asegurado; por otro lado, si no lo hace en el

mismo proceso se tendrá que esperar “el resultado de éste para poder entrar a

resolver las pretensiones contra el asegurador, nacidas del contrato de

seguro”274.

4.2.5.3 Relación Asegurado – Víctima

Según Peirano Facio: “el sentido común se niega a admitir la existencia de un

daño que debe ser soportado por quien no ha contribuido a su realización,

debe darse necesariamente, cierta relación entre el daño causado y la

conducta de la que esta llamado a responder por el mismo” 275, de ahí que se

necesite que el daño soportado por la víctima tenga origen en el desarrollo de

la actividad profesional del asegurado.

272
Articulo 1133 C. Co.
273
Articulo 1133 C. Co.
274
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.82
275
PEIRANO FACIO, Jorge. Responsabilidad extracontractual. Tercera edición. Bogotá, Editorial
Temis, 1981. Pág. 401
179

La relación que se presenta entre la víctima y el asegurado no se deriva del

contrato de seguro, por éste vínculo jurídico podrá ser contractual o

extracontractual, pero siempre se regirá por las normas aplicables a la

responsabilidad civil, pues se trata de relaciones independientes pero conexas,

ya que de una depende la exigibilidad de la otra, es decir, que debe existir

previo a la relación victima – asegurado.

Cuando se trata de eventos previamente excluidos o se excede el monto del

valor asegurado, estamos frente a unos casos donde se presenta

responsabilidad por parte del asegurado pero no responde el asegurador, esto

quiere decir, que no siempre que el asegurado cause un daño a la víctima

como consecuencia de su actividad responde la aseguradora. Por otro lado,

también es posible que el asegurador esté obligado a responder sin que medie

culpa del asegurado, tal es el caso de las demandas temerarias.

4.2.6 ELEMENTOS

La responsabilidad de un médico no puede ser evaluada por un magistrado

con el mismo criterio que se aplica a un conductor que atropella a una persona

y le produce distintos daños, pero desafortunadamente la mayoría de países

incluyendo Colombia, no cuentan con una normatividad especifica para los

médicos, sino que son juzgados de acuerdo a la norma general de

responsabilidad civil.
180

En el amito de la responsabilidad civil, para determinar la culpa de un

ciudadano en un acto cualquiera, el Código Civil establece como un criterio

rector el comportamiento de un Buen Padre de Familia. Para establecer si

existe la responsabilidad de un médico no se puede manejar con el criterio de

un buen padre de familia, sino que se debe partir de la base que el médico es

una persona que tiene, o debe tener, un conjunto de conocimientos técnicos,

que debe aplicar a cada caso, y cuando al aplicarlos mal produce un daño,

evidentemente hay que juzgarlo de una manera distinta. No obstante ello,

también en materia de responsabilidad medica, se tiene que utilizar criterios

generales, como son la imprudencia, la impericia, la negligencia o la violación

de ciertas leyes o reglamentos.

Por ello puede decirse que el seguro de responsabilidad civil profesional

médica merece un tratamiento específico y diferenciado en el campo general

de la responsabilidad civil profesional, entre otras circunstancias por la

especialidad del riesgo que se asume.

4.2.6.1 EL RIESGO ASEGURABLE

“El riesgo es la eventualidad de verificar un acontecimiento incierto.

El riesgo asegurable es, pues, la eventualidad que llegue a verificarse el

acontecimiento incierto previsto en el contrato de seguro: un acontecimiento

susceptible de ocasionar un daño... una consecuencia económicamente


181

desventajosa cuya realización ha de obligar al asegurador a cumplir su

prestación indemnizatoria”276.

El Código de Comercio define el riesgo como “el suceso incierto que no

depende exclusivamente de la voluntad del tomador, del asegurado o del

beneficiario, y cuya realización da origen a la obligación del asegurador” 277.

Este riesgo varía dependiendo del tipo de seguro, por esto en los casos del

seguro de responsabilidad civil “el riesgo está constituido, precisamente, por la

eventualidad del nacimiento de una responsabilidad civil” 278, entonces, el

riesgo en estos casos “consiste en la posible responsabilidad civil en que, por

aplicación de las normas legales, puede incurrir el asegurado por acción u

omisión, no dolosa, que le obligue a reparar el daño causado”279.

Ahora, refiriéndonos al tema de nuestra tesis “El Seguro de Responsabilidad

Civil Profesional Médica”, podemos decir, que al igual que en los demás

seguros de responsabilidad, debemos establecer los elementos que configuran

esta responsabilidad para así delimitar el riesgo asegurable:

276
STIGLITZ Y STIGLITZ. Seguro Contra la Responsabilidad Civil. Abeledo-Perrot. Buenos Aires.
Argentina. 1991. Pág. 207
277
Articulo 1054 C. Co.
278
STIGLITZ Y STIGLITZ. Ob. Cit. Pág. 208
279
GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 361
182

4.2.6.1.1 LA CONDUCTA ASEGURABLE

El doctor Sergio Yépez Restrepo explica que es más adecuado hablar de

conducta por que ésta “además de la intención y la imprudencia, comprende

también el incumplimiento de la obligación que adquiere el médico que aunque

por regla general es de medios, en ciertos casos puede ser de resultados”280.

Entonces, se requiere de una conducta dañosa para que exista

responsabilidad civil del médico y por lo tanto, entre a responder la

aseguradora como la persona jurídica que asumió el riesgo. Esta conducta

puede ser “un hecho positivo: acción por comisión o un hecho negativo: acción

por omisión.”281.

4.2.6.1.1.1 CLASES DE CONDUCTAS ASEGURABLES

Es asegurable todo acto u omisión cometidos en el ejercicio de una actividad

profesional médica por el facultativo. Las conductas del médico que son objeto

del seguro de responsabilidad civil médica serán:

280
YEPES RESTREPO, Sergio. La Responsabilidad Civil Médica. Biblioteca Jurídica Dike, Primera
edición, Medellín 1992, Pág. 35
281
MOSSET ITURRASPE. Jorge. Responsabilidad Civil del Medico. Editorial Ábaco de Rodolfo
Depalma. Buenos Aires, 1986. Pág. 166
183

Negligencia: “se traduce en la no aplicación de las técnicas médicas y los

procedimientos terapéuticos cuando éstos son conocidos por el facultativo y, a

pesar de ello, no los utiliza en su accionar, agravando la salud del paciente”282.

Impericia: “Consiste en la falta de habilidad o de capacidad profesional para

realizar un determinado tratamiento o una operación y que lo conduce

culposamente al fracaso”283.

Imprudencia: “Se presenta con una conducta temeraria que se realiza sin

diligencia y sin el cuidado debido y que ocasiona un daño en la salud del

paciente que hubiera podido preverse y evitarse”284.

Violación del reglamento: “Podemos indicar que las normas de ética médica

ordenan deberes de cuidado en el campo médico y los mismos estudios

profesionales señalan pautas y tratamientos a seguir según el tipo de

enfermedad de que trate. En cuanto a ésto, la simple violación del reglamento

conllevaría la responsabilidad en el evento en que se produjera un daño debido

a la no observación de los deberes y las pautas indicadas por la ciencia

médica y que se denomina Lex artis”285. Estos daños en principio no son

282
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 36
283
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 36
284
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 37
285
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 37 y 38
184

cubiertos por las pólizas de seguro de responsabilidad civil médica, al respecto

póliza de Suramericana consagra:

“Exclusiones: 1.11os daños a causa de la inobservancia o la violación de una


obligación determinada impuesta por reglamentos o por instituciones emitidas
por cualquier autoridad así como la violación de estipulaciones contractuales, a
no ser que ni el asegurado ni la persona con funciones directivas hayan
actuado dolosamente ni hayan permitido una actuación dolosa de los demás
empleados”286.

Incumplimiento Contractual: “Este dependerá de la obligación que asume el

médico al tratar un paciente que a veces puede ser de medios y en ocasiones

de resultado. La obligación será de medio cuando el galeno debe emplear la

diligencia y el cuidado debidos en el tratamiento o en la intervención, sin estar

obligado a conseguir la curación efectiva; y será de resultado, cuando la

prestación del médico consiste en obtener un especifico propósito o un

determinado efecto”287. Pero la mayoría de las pólizas de seguros no

responden por la responsabilidad civil del médico derivada de una cirugía

plástica o estética, a no ser que esta tenga como fin la reconstrucción después

de un accidente o la corrección de anomalías congénitas.

Omisión: “Cuando un profesional no asiste a un paciente y por esa abstención

se causa un daño en la salud de éste la responsabilidad es la misma ya que se

tiene el deber jurídico de impedir el resultado, no evitarlo pudiendo hacerlo

equivale a producirlo”288.

286
POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana
287
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 38
288
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 39
185

Es importante anotar, que la medicina no es una ciencia exacta y por lo tanto

se pueden presentar eventos en los cuales, a pesar de haberse dado un

tratamiento adecuado los resultados no son los esperados, ésto debido a que

no todos los organismos son iguales y se comportan de la misma forma frente

a una misma enfermedad; por lo tanto, seria ilógico pensar que los médicos

tuvieran que responder por estos casos. Otro punto relevante en este tema es

el relacionado con la Lex Artis, pues existen momentos donde el tratamiento

reconocido se ve revaluado frente a uno nuevo que ofrece mejores resultados

pero talvez no tiene la aceptación y reconocimiento del otro. Aquí la ley

permite que el galeno aplique el nuevo tratamiento a su paciente con la

autorización de éste, sin que el no obtener los resultados produzcan

responsabilidad del médico y por lo tanto una obligación a la empresa

aseguradora.

4.2.6.1.1.2 CONDUCTAS NO ASEGURABLES

El Código de Comercio establece que “el asegurador podrá, a su arbitrio,

asumir todos o algunos de los riesgos a que estén expuestos el interés o la

cosa asegurada, el patrimonio o la persona asegurado”289, por lo tanto, las

partes podrán pactar todas las exclusiones que estimen convenientes y las que

la Ley dispone como obligatorias.

289
Articulo 1056 C. Co.
186

Son exclusiones establecidas por la Ley:

El Dolo: no es asegurable por ningún motivo, “ya que quien a través del

ejercicio de su profesión posee intención de dañar a otro... no puede pretender

indemnidad, pues sería legalizar el delito y perdería el contrato de seguros su

característica de aleatorio”290.

Provocación Intencional del Siniestro: según lo dispuesto por el artículo

1055 del Código de Comercio “los actos meramente potestativos del tomador,

asegurado o beneficiario” no constituyen un riesgo asegurable por desvirtuar la

eventualidad del riesgo asegurable. Al respecto Efrén Ossa dijo que: “No es

concebible el seguro sobre un evento cuya realización dependa de la sola

voluntad del interesado”291.

4.2.6.1.1.3 CULPA GRAVE COMO UN CASO ESPECIAL

Al llegar al tema de la culpa grave en los seguros de responsabilidad civil

Rubén Stiglitz dice que nos encontramos frente a un tema “ininteligible, oscuro,

ambiguo, por no decir incomprensible”292. Y es que, este tema ha sido motivo

de controversia para la doctrina durante muchos años, por las distintas

apreciaciones que del él hacen los tratadistas.

290
GHERSI. Carlos A. Responsabilidad por Prestación Médico Asistencial. Biblioteca Jurídica Diké.
1° edición colombiana. 1993. Pág. 311
291
EFRËN, Ossa. Ob. Cit. Pág. 99
292
STIGLITZ, Rubén. TRIGO REPRESAS, Félix. El Seguro Contra la Responsabilidad civil
Profesional del medico, Editorial Astrea, Buenos Aires, 1983, Pág. 50
187

Es por eso que, el artículo 1055293 establece expresamente que el dolo al igual

que la culpa grave y los actos meramente potestativos del tomador, asegurado

o beneficiario son inasegurables, para evitar controversias.

Pero él articulo 84 de la Ley 45 de 1990294 hizo una excepción ha esta norma,

al consagrar que la culpa grave sí es un riesgo asegurable en los seguros de

responsabilidad civil. Entonces, tratándose el seguro de responsabilidad civil

médica una especie del anterior, podemos decir que en este seguro se puede

cubrir la culpa grave de los médicos en el ejercicio de su profesión, siendo

apreciada ésta bajo el criterio del “buen profesional” y no del buen padre de

familia, como es la regla general.

Tenemos que, por disposición de la Ley cuando las partes no estipulan

expresamente en el contrato de seguros que éste no cubre la culpa grave, se

entenderá que esta cubierta por la póliza, según lo establecido por él articulo

1127 del Código de Comercio, algunos sostienen esta posición, pero otros

afirman que se requiere pacto expreso en el sentido de incluirla.

Para concluir, Nicolás Barbato expone que la culpa grave “reviste en el seguro,

características particulares”295, que la hacen diferente de la que se aplica en el

293
Articulo 1055 C, Co: “El dolo, la culpa grave y los actos meramente potestativos del tomador,
asegurado o beneficiario son inasegurables. Cualquier estipulación en contrario no producirá
efecto alguno; tampoco lo producirá la que tenga por objeto amparar al asegurado contra
sanciones de carácter penal o policivo”.
294
Articulo 84 de la Ley 45 de 1990: “El seguro de responsabilidad... son asegurables la
responsabilidad contractual y la extracontractual, al igual que la culpa grave, con la restricción
indicada en el artículo 1055”.
295
BARBATO, Nicolás, Culpa Grave y Dolo en el Derecho de Seguros. Editorial Hamurabi, Buenos
Aires, 1988. Pág. 123 y 124
188

derecho civil, pues “está formulada con una función que responde a la técnica

especifica del seguro que requiere la delimitación del riesgo para poder

funcionar eficazmente”296.

Otro tema que genera aún más controversia es él referente a la culpa grave

asimilable al dolo, pues aquí las posiciones son variadas y en Colombia la Ley

no tiene una posición sobre el tema.

Al respecto, compartimos la idea del Doctor Barbato, en que la culpa grave

asimilable al dolo no puede ser amparada por ningún seguro, incluyendo el de

responsabilidad civil, pues esto produciría “una intensificación desorbitada del

riesgo”297.

¿Pero cuando se produce culpa grave asimilable al dolo en el seguro de

responsabilidad civil profesional del médico?

“Cuando el nivel de omisión de las diligencias de acuerdo a la naturaleza de la

obligación, las circunstancias de persona, tiempo y lugar, indiquen que su

utilización ha sido un grado exorbitante de ignorancia o descuido que colocan a

la situación de riesgo asegurable, en certidumbre de provocación del daño

indemnizable”298, estaremos hablando de la culpa asimilable al dolo.

296
BARBATO, Nicolás. Ob. Cit. Pág. 125
297
BARBATO, Nicolás. Ob. Cit. Pág. 123
298
GHERSI. Carlos A. Ob. Cit. Pág. 312 y 313
189

4.2.6.1.2 EL DAÑO ASEGURABLE EN LA RESPONSABILIDAD CIVIL

MÉDICA

Uno de los requisitos de todo seguro es la existencia de un daño, pero éste en

el caso del aseguramiento de la responsabilidad civil médica presenta unas

connotaciones que lo distinguen de la generalidad, pues, como ya hemos

explicado antes, la responsabilidad de los profesionales de la medicina

requiere para su análisis y juzgamiento, un tipo de estudio especifico, debido a

que no es lo mismo determinar la responsabilidad de una persona normal que

la del médico en ejercicio de sus funciones.

Al respecto Trigo explica: “... para apreciar la culpa profesional no se puede

recurrir al modelo del bonus pater familiae, o sea el hombre prudente y

diligente, muy por el contrario, acá será necesario acudir al arquetipo del “buen

profesional”; y así como se exige a los deudores comunes que pongan en el

cumplimiento de sus obligaciones “todos los cuidados de un buen padre de

familia”, cabrá pretender del deudor “profesional” que ponga en el

cumplimiento de la suya “todos los cuidados del buen profesional de su

especialidad” ya que no puede compararse con el hombre medio prudente y

diligente a quien actúa en un orden de cosas en que posee evidentemente

conocimientos o aptitudes superiores al grado medio, sea o no un

profesional”299.

299
TRIGO REPRESAS, Félix A. Ob. Cit. Pág. 45
190

Podemos distinguir tres tipos de daños, según ellos tarden en manifestarse:

Daño de Manifestación Instantánea: “Esto es, aquellos daños causados por

una acción u omisión imputable que se manifiesta en su totalidad en forma

inmediata”300.

Daño de Manifestación Gradual: “Esto es, aquellos causados por una acción

u omisión imputable que se pone de manifiesto no en forma inmediata, sino

gradualmente”301.

Daños de Manifestación Diferida: “Esto es aquellos que entre la acción u

omisión imputable y la manifestación del daño existe un prolongado lapso de

tiempo”302.

Estableceremos los requisitos del daño que se asegura tratándose de los

médicos.

A. Daño efectivo: “El daño ocasionado en el paciente ha de ser efectivo y es

efectivo el DAÑO REAL (no la molestia), CONCRETO, PRESENTE (no el

futuro), COMPROBABLE (no el hipotético).

300
SATELER A. Ricardo. La Delimitación Temporal del Período de Cobertura de los Seguros de
Responsabilidad Civil. Revista chilena de Derecho de Seguros. AIDA año 2 numero 4 Santiago de
Chile de 2000. Pág. 7
301
SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 7
302
SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 7
191

Se indemnizan los daños personales (muerte, lesiones físicas o psíquicas),

como los morales (entorno afectivo), ocasionados por el actuar negligente de

los profesionales. Son indemnizables los daños ocasionados por la

organización sanitaria (falta de camas, falta de especialistas en los servicios de

urgencias, instrumental en mal estado, etc.) y los ocasionados por los actos

médicos propiamente dichos. Es indemnizable no solamente el daño

inminente, la valoración concreta de lo dañado (lesiones determinadas) y la

disminución patrimonial ocasionada sino también el daño compuesto por lucro

cesante, es decir lo que se deja de ganar como consecuencia del daño

irrogado. Se pretende la reparación integral de los daños ocasionados”.303

B. Daño evaluable económicamente: “La valoración económica del daño

tiene como fin eludir aquellos que no sean significativos y que consistan en

meras molestias”304, es de dos tipos:

* Daños personales”: (muerte, lesiones físicas o psíquicas): se cuantifican y

reparan atendiendo a los gastos de hospitalización y asistencia médica

recibida hasta la recuperación y a una cantidad que se determina atendiendo a

303
World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad
Médica: daño. Tomado de la página de Internet:
http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm
304
World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad
Médica: daño. Tomado de la página de Internet:
http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm
192

la edad, ingresos profesionales, expectativas de trabajo fundadas, etc., del

paciente”305.

* Daños morales”: (lesiones que sufre el entorno socio-familiar del lesionado):

se cuantifica atendiendo a las lesiones producidas en las relaciones afectivas

familiares del paciente y su valoración dependiendo del criterio del tribunal.”306.

4.2.6.1.3 NEXO CAUSAL

Existe responsabilidad médica tan solo si los daños reclamados son

consecuencia directa del actuar médico o de la omisión de aquellas acciones

precias por los profesionales médicos correspondientes, pues debe existir

una relación indudablemente firme y directa entre el daño ocasionado y la

acción u omisión médica, es decir, entre él diagnóstico y/o tratamiento médico

aplicado y el daño, entre el diagnóstico y tratamiento medico omitido y el daño;

entonces se indemnizaran los daños ocasionados por la evolución de una

enfermedad que pudo evitarse mediante la aplicación de un tratamiento

médico adecuado y se indemnizarán los daños ocasionados por la aplicación

de un tratamiento médico inadecuado.

305
World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad
Médica: daño. Tomado de la página de Internet:
http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm
193

La Corte al respecto ha dicho:

“En los litigios sobre responsabilidad médica debe establecerse la relación de


causalidad entre el acto imputado al médico y el daño sufrido por el cliente. Por
lo tanto, el médico no será responsable de la culpa o falta que se le imputa,
sino cuando éstas hayan sido las determinantes del perjuicio causado”307.

El asegurador sólo responderá por el médico en los eventos en que éste

produzca un daño al paciente “como consecuencia de su acción o de omisión,

ya sea que exista un contrato válidamente celebrado entre las partes, o no

exista ningún vinculo jurídico entre ellas”308.

4.2.6.2 EL INTERES ASEGURABLE

Se entiende por interés asegurable “la relación lícita de valor económico sobre

un bien cuando se halla amenazada por un riesgo”309.

Ahora, establecida “la naturaleza del seguro de responsabilidad civil como

seguro contra daños, la presencia de un interés es necesaria, como

presupuesto del seguro. Habrá que investigar en qué consiste la relación que

es inherente a todo seguro contra daños. En el seguro de responsabilidad civil

esta relación será la que liga a toda persona con su patrimonio y no con cosas

determinadas de ese patrimonio, porque el siniestro, esto es, la asunción de

una deuda de responsabilidad, grava todo nuestro patrimonio como conjunto

306
World Wide Hospital. Instituto Europeo de Medicina Virtual. Requisitos de la Responsabilidad
Médica: daño. Tomado de la página de Internet:
http://www.worldwidehospital.com/h24h/legresp3.htm
307
SENTENCIA DEL 5 DE MARZO DE 1940. Corte Suprema de Justicia, Pág. 116
308
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 34.
194

de relaciones jurídicas de valor económico. El interés consistirá por tanto, aquí

en la conservación de la integridad del patrimonio, expuesto al riesgo de ser

disminuido por la relación de eventos dañosos que hagan surgir a cargo del

asegurado la obligación de resarcir el daño”310.

Entonces, el interés asegurable en los seguros de responsabilidad civil

profesional del médico será al igual que en los seguros de responsabilidad civil

“la relación susceptible de valoración económica, entre una persona y su

patrimonio entero”311, por ser éste un seguro contra daños.

El interés asegurable por regla general es el que determina el monto del valor

asegurado, pues dependiendo de lo que se ponga en riesgo, así será el monto

asegurado. Pero esta relación pierde toda proporción cuando nos encontramos

frente a un seguro de responsabilidad, ya que en estos eventos sólo podrá

determinarse el valor asegurado una vez se realice el riesgo. Es por eso que

en estos seguros “la obligación del asegurado frente al tercero es teóricamente

ilimitada e indeterminada al momento de celebrarse el contrato. Sin embargo el

asegurador puede limitar su responsabilidad hasta el monto de la suma

309
HALPERIN, Isaac. Ob. Cit. Pág. 21
310
GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 364
311
GARRIGUES, Joaquín. Ob. Cit. Pág. 366
195

asegurada, y el valor de la prima se establecerá de conformidad con dicha

suma”312.

La limitación que hace el asegurador de su responsabilidad en los seguros de

responsabilidad no es del todo cierta, pues el Código de Comercio establece

“que el asegurador responderá, además, aún en exceso de la suma asegurada

por los costos del proceso que el tercero damnificado o sus causahabientes

promuevan en su contra o la del asegurado,...”, con lo que se confirma que en

estos seguros no es posible establecer un tope a las indemnizaciones antes de

que se produzca el siniestro, aún en los eventos en que se establece un valor

máximo asegurado.

4.2.6.3 PRIMA O PRECIO DEL SEGURO

Es la “contraprestación que persigue el asegurador por la asunción del

riesgo…”313.

Concebida la prima como “el precio del seguro, la prestación que debe pagar el

asegurado a trueque de la promesa de una contraprestación eventual (la

indemnización de la perdida o daño o el pago de la suma asegurada en un

caso de siniestro), la prima esconde un contenido económico íntimamente

vinculado a su significación técnica y a su naturaleza jurídica. Porque sin ella

312
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág. 49
313
SOLER ALEU, Amadeo. Ob. Cit. Pág. 81
196

(o sin la cotización que es su equivalente en la organización mutualista), el

seguro carecería de viabilidad, algo más, sería inconcebible”314.

Entonces, al ser el seguro un contrato oneroso, requiere necesariamente de la

existencia de un pago por parte del tomador al asegurador como

contraprestación a la asunción del riesgo. Pero este riesgo puede variar en el

seguro de responsabilidad civil del médico, pues no todas las áreas de la

medicina tienen el mismo nivel de peligrosidad en su aplicación, por ésto el

precio o prima del seguro dependerá de la rama de la salud asegurada.

La Doctora María Cristina Isaza sostiene que las normas generales que

“regulan el pago de la prima son iguales para todo el seguro, y la diferencia

radica en los sistemas de tarifación para determinar el valor de la prima que

son por naturaleza variables y disímiles, según se trate de una u otra actividad,

de los riesgos subjetivos, de las condiciones particulares de cada asegurado.

No caben aquí las tarifas uniformes, generales, puede decirse que la tarifación

es, en principio, individual”315.

Respecto a este tema, la experiencia ha demostrado que algunas

especialidades médicas son más propensas a generar responsabilidad, por

314
OSSA GÓMEZ, Efrén. Teoría General del Seguro. Tomo I. La Institución: Editorial Temis.
Bogotá. 1988. Pág. 49
315
ISAZA DE BARVO. Maria Cristina. PALACIOS. Myriam. RINCÓN. Ángela. Ob. Cit. Pág.52
197

esto los neurocirujanos y de los obstetras, son quizás los más judicializados

por mala praxis, de ahí que muchas compañías de seguros les apliquen unas

tarifas más altas respecto a las otras áreas de la medicina. Por lo tanto,

“puede cometer mala praxis un dermatólogo como un neurocirujano, el tema es

que la exposición al riesgo de un neurocirujano y de un obstetra es mayor que

la de un dermatólogo u otras especialidades que están dentro de la categoría

uno, y que no tienen, ni por semejanza, la misma peligrosidad de ejercer la

profesión”316, y en consecuencia las aseguradoras son mas rígidas a la hora de

calcular la prima para ellas.

Un ejemplo claro de esto se da en la ciudad de Nueva York, en la cual “la

primera categoría era justamente neurocirujanos, la segunda obstetras y los

anestesiólogos, están en un cuarto o quinto nivel de riesgo, dado que a través

de los programas de gerenciamiento que se realizan comúnmente en otros

países se ha logrado disminuir el riesgo de la anestesiología” 317, lo mismo ha

sucedido en Colombia, según la compañía FEPASDE, los anestesiólogos han

pasado de ser los mas demandados a los menos comprometidos en los casos

por mala praxis debido a las regulaciones tanto del estado como de

organismos internacionales y por lo tanto su prima del seguro ha bajado.

316
KVITKO, Luis Alberto. Ob. Cit. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html
198

4.2.6.4 OBLIGACION CONDICIONAL DEL ASEGURADOR

La obligación condicional del asegurador en el contrato de seguro de

responsabilidad civil del médico es igual a la de las demás pólizas, pues

comprende tanto la asunción del riesgo, como el pago de la indemnización en

el evento en que se presente el siniestro.

La asunción del riesgo como ya hemos visto antes lo hace a cambio de un

pago que para estos efectos se conoce como prima, y que genera en él el

nacimiento de una obligación condicionada, es decir, el asegurador se obliga a

que una vez sucedido él “el acontecimiento futuro”318, o sea “configurado el

siniestro (Art. 1075) –que es el riesgo en estado de daño- nace ipso, por

ministerio de la Ley (Art. 1054), la obligación actual del asegurador, la de pagar

la prestación asegurada conforme a las estipulaciones del contrato y a los

principios legales que la gobiernan”319, Entonces, mientras el riesgo “se halle

en estado de indemnidad, mientras esconde un daño meramente potencial, es

apenas una obligación condicional…”320.

La importancia de la indemnización en el seguro de responsabilidad civil

médica, radica en devolver al hombre su integridad física y moral, cuando se

presenta un daño como consecuencia de la ejecución de la profesión del

médico, es por esto, que “cuando alguno de esos bienes aparece dañado, el

317
KVITKO, Luis Alberto. Ob. Cit. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html
318
Articulo 1530 C.C. “Es obligación condicional la que depende de una condición, esto es, de un
acontecimiento futuro, que puede suceder o no”.
319
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. Pág. 99
199

hombre de hoy piensa de inmediato en la superación del perjuicio, en recobrar

la salud, la integridad, la capacidad, la aptitud perdida o en parte. Y si tal

posibilidad aparece inalcanzable, o a la menos dificultosa, cae en la cuenta de

su derecho a una compensación económica”321, que en este caso la puede

satisfacer la aseguradora.

Se busca entonces con la indemnización la “reparación del menoscabo que

sufre la víctima y ante esto la primera opción es procurar devolverle la salud al

perjudicado si es posible… en ultima instancia hacer la indemnización integral

de todos los perjuicios…”322.

Son indemnizables los daños orgánicos y psíquicos, como también los gastos

de hospital, drogas, y médicos, etc., “que se hubieran sufragado, así como

también los perjuicios materiales por no haber desempeñado sus labores

normales durante la recuperación. Tampoco puede dejarse de lado los

perjuicios morales que son comunes en la anormalidad orgánica, tales como

sentirse enfermo, no poder realizar las funciones físicas y el miedo a morir

producido por el estado del organismo. Además de los perjuicios morales

existe otro perjuicio extrapatrimonial proveniente de los atentados contra la

320
EFRÉN, Ossa. Ob. Cit. Pág. 99
321
MOSSET ITURRASPE. Jorge. Ob. Cit. Pág. 220
322
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 41.
200

integridad personal, el cual se denomina daño fisiológico y consiste en la

pérdida de las actividades vitales y placenteras de las personas”323.

4.2.7 ELEMENTOS ESPECIALES DEL ASEGURAMIENTO MEDICO

La responsabilidad civil del médico tiene un sinnúmero de conceptos propios

de esta rama de la salud, que es necesario conocer para poder establecer en

que casos se presenta responsabilidad y en que casos no, pues de esto

depende la intervención de la aseguradora.

La iatrogénia: “ha sido definida como el ámbito de aquellos casos en que se

produce un daño, como consecuencia de la gestión inculpable debida a un

error excusable del médico. Esto se puede traducir así: cuando para salvar un

mal mayor se produce un mal menor el médico es absolutamente excusable de

culpa; o sea, cuando realiza una determinada intervención quirúrgica, que sea

como fuere tiene secuelas menores, el médico no puede ser inculpado de ese

tipo de daño, considerando que en realidad para realizar esa intervención que

le salva de una secuela muy importante, le produce una consecuencia

menor”324.

323
YEPES RESTREPO, Sergio. Ob. Cit., Pág. 41.
324
GRILLE, Antonio. La Responsabilidad Médica en el Uruguay. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html
201

El consentimiento informado: Se presenta cuando “indiscutiblemente se

tiene que informar al paciente que va a ser sometido a determinado acto

médico, intervención quirúrgica, o tratamiento especial, y el médico tiene

también la obligación de informarle las consecuencias eventualmente positivas

que puede tener ese tratamiento, y las negativas, para que a su vez el paciente

evalúe entre una cosa y otra, y en definitiva decida. Esa es la función esencial

del consentimiento informado. En cierto modo el médico endosa la

responsabilidad que tiene como médico para realizar determinado acto y las

probables consecuencias negativas al propio paciente, quien evalúa si le

conviene someterse a ese acto médico, esa intervención quirúrgica o

tratamiento, con las eventuales consecuencias positivas que le informa el

médico, o si prefiere continuar como está y evitar las posibles consecuencias

negativas que ese acto le puede producir”325.

El error de diagnóstico: “El médico indiscutiblemente en una de sus

actuaciones más rápidas tiene que determinar el diagnóstico de la patología.

Este diagnóstico puede ser equivocado o no; en el primer caso sin duda se

maneja con los elementos imprescindibles que tiene y puede equivocarse.

Pero en materia de culpa, el error de diagnóstico sustancialmente puede ser

excusable o inexcusable. Es decir, puede ser un error en el que en realidad el

médico se equivoque porque ha incurrido en impericia o en imprudencia, o

325
GRILLE, Antonio. Ob. Cit . Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html
202

puede ser que a pesar de adoptar todas las medidas imprescindibles para

llegar a ese diagnóstico, en situaciones de cierta anomalía, no lo determine

concretamente”326.

Obligación de medio o de resultado: “Es posible que el médico en ciertos

casos le asegure a su paciente que específicamente su obligación será la de

curarlo. Esa no es en esencia la obligación del médico, sino poner todos sus

conocimientos a disposición del paciente a los efectos de obtener, en lo

posible, su mejoría, pero jamás le puede asegurar, de ninguna manera, la

sanidad total de la patología que tiene. Por eso se dice que en principio la

obligación del médico es una obligación de medios. Es decir, hacer todo lo que

pueda. En cambio, la obligación de resultado implica estrictamente obligarse a

que en efecto el médico lo va a curar”.327

La obligación de seguridad: “Otro de los elementos que con el tiempo se

han ido depurando en este tipo de juicios por responsabilidad médica es la

llamada obligación de seguridad. Ésta se le imputa sustancialmente a las

clínicas médicas; las doctoras Szafir y Venturini explican que: "Hay quienes

erróneamente llegan a la conclusión de que siempre está incita en un contrato

mutual una cláusula de seguridad, que tiñe de tinta el resultado", es decir que

326
GRILLE, Antonio. Ob. Cit. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html
327
GRILLE, Antonio. Ob. Cit. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0003.html
203

siempre las instituciones clínicas de asistencia médica tienen una obligación de

resultado en el sentido de mejorar totalmente al enfermo. Esta obligación de

seguridad vinculada al contrato de asistencia médica". Esta obligación de

seguridad comprende ciertas circunstancias en que el paciente que entra por

una patología determinada sale por otra. Por ejemplo, un paciente que ingresa

por cualquier patología y en el tratamiento se cae de una camilla y se fractura,

ahí hay una obligación innegable por parte de la clínica médica porque esa

persona, además de la patología que tenía, puede salir con la secuela de una

fractura que no fue por lo que ingresó. Esto no implica que exista en la realidad

una especie de responsabilidad objetiva, y esto nos lleva de la mano a algo

que se da con cierta frecuencia: las infecciones hospitalarias.

4.2.8 DELIMITACION TEMPORAL DE LA COBERTURA DEL SEGURO

“La delimitación temporal de la cobertura del seguro dice relación con el

periodo de tiempo durante el cual el seguro producirá sus efectos, esto es,

generara derechos y obligaciones para las partes, entre ellas la obligación

esencial del asegurador de asumir los riesgos amparados por la póliza. Lo

normal, en materia de seguros es que haya una simultaneidad entre el hecho

dañoso y sus consecuencias, como ocurre en materia de accidentes

automovilísticos, incendios u otros, pero la naturaleza de determinados

siniestros, como aquellos propios de la responsabilidad médica, provocan

generalmente una falta absoluta de simultaneidad entre la acción u omisión

generadora de responsabilidad, y su manifestación y posterior reclamo. La


204

particularidad de los seguros de responsabilidad civil de médicos es que en

ellos suelen darse distintos momentos, normalmente no coincidentes en el

tiempo: la causa del siniestro (acción u omisión), el daño derivado del mismo

(manifestación), y la reclamación (acción pro indemnización) suelen surgir en

distintos estados en el tiempo”328.

El jurista español, Claudio López-Cobo, señala “que en el ámbito de la

responsabilidad civil se observan con frecuencia situaciones dañosas en las

que se quiebra de una parte la simultaneidad hecho-daño, y de otras, la

inmediatez de la manifestación de sus consecuencias, ha clasificado los daños

en: inmediatos, progresivos o continuos, iniciales o sobrevenidos y diferidos o

de manifestación diferida, entendiendo precisamente por estos últimos,

“aquellos en los que entre la acción u omisión del sujeto y la manifestación de

las consecuencias dañosas media un cierto periodo de tiempo”.329

Los daños diferidos son “manifestados mas allá de un periodo razonable de

tiempo, pero imputado retroactivamente en sus consecuencias a la fecha de

ocurrencia, es un elemento que escapa plenamente al control técnico y

financiero del asegurador, resultando imposible establecer su precio y

provisión y con una potencialidad muy acusada para provocar fuertes

desequilibrios en la economía de las entidades aseguradoras”. 330

328
MIRANDA SUAREZ. Francisco Ob. Cit. Pág. 25
329
LOPEZ-COBO. Claudio, Ob. Cit. Pág. 29
330
LOPEZ-COBO. Claudio, Ob. Cit. Pág. 32
205

La existencia de plazos de prescripción mayores a la vigencia de las pólizas o

periodos de cobertura, implican en principio la obligación del asegurador de

mantener siniestros abiertos por el periodo de prescripción legal, y la

necesidad de mantener reservas técnicas para responder de eventuales

reclamos posteriores a la vigencia de la póliza; esto obligó a los aseguradores

a revisar las condiciones y modalidades de la cobertura.

El Doctor Carlos Ghersi también se refiere al tema de la cobertura del seguro

de responsabilidad civil del médico y explica “que uno de los graves problemas

que se presentan en el seguro de responsabilidad médica, está demarcado por

el acaecimiento de la causa siniestro y la manifestación externa del siniestro a

través del daño”331.

4.2.8.1 CRITERIOS DE DELIMITACION TEMPORAL

Se han formulado diversos criterios de delimitación temporal de la cobertura

del seguro:

4.2.8.1.1 Criterio del Hecho Generador o Causal

También conocido como actino comitted basis, “conforme al cual son objeto de

cobertura las consecuencias dañosas, cuya causa o hecho generador tenga

lugar entre las fechas de inicio y término de la cobertura, con independencia de

la oportunidad cuando se manifieste o reclame el daño”332.

331
GHERSI. Carlos, Ob. Cit. Pág. 313
332
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26
206

4.2.8.1.2 Criterio de la Ocurrencia del Daño

Criterio de la ocurrencia del daño o Loss Ocurrence Basis o per Occurrence,

“conforme al cual se considera como siniestro los daños que sobrevengan o

se manifiesten entre la fecha de inicio y término del periodo de cobertura,

siendo indiferente la fecha de la causa previa o hecho generador, o de aquellas

en que se formalice la reclamación; y”333

4.2.8.1.3 Criterio de la Reclamación

Criterio de la reclamación o claims made basis. “Conforme a él se cubren las

reclamaciones recibidas por el asegurado durante la vigencia de la póliza, con

independencia de la fecha del hecho generador o de la manifestación del

daño”334.

Como consecuencia a la ocurrencia de los siniestros tardíos, se sustituyó el

criterio de los ocurrence basis, por el claims made basis. Este último comenzó

a ser considerado por los aseguradores como un medio necesario de

seguridad frente a los siniestros diferidos o de consecuencias prolongadas

(Long tail risks).

333
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26
334
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26
207

Podemos distinguir tres posibilidades de cláusulas sentadas sobre la

ocurrencia del daño, que hacen tres tipos de pólizas distintas:

4.2.8.1.3.1 Cláusulas Claims Made: propiamente dicha son “aquellas que

sólo requieren que la reclamación sea efectuada durante el período de

vigencia de la póliza”335. Entonces, “el asegurador está obligado a indemnizar

sólo si la reclamación del tercero perjudicado se produce estando la póliza en

vigor o dentro de un período adicional para reclamaciones, no siendo esencial

por tanto el momento en que se produjo el evento dañoso, ni el momento en

que el daño se manifestó, sino sólo el momento en que se formulo el

reclamo”336.

4.2.8.1.3.2 Cláusulas Mixtas: son “aquellas en que se requieren que tanto el

hecho generador como la reclamación se tengan durante el período de

vigencia de la póliza. Esta cláusula equivale a la póliza sobre la base

ocurrencia más claims made”337.

4.2.8.1.3.3 Cláusula Claims Made con cláusula de retroactividad (cláusula

sunrise) y/o de Cobertura Extendida (cláusula subset): “esta cláusula exige que

el hecho generador haya ocurrido durante el período de vigencia de la póliza o

el período de retroactividad (cláusula sunrise) y/o que la reclamación se

335
SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 11
336
SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 12
337
SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 11
208

efectué durante el período de vigencia de la póliza o durante el período de

cobertura extendida”338.

El siguiente ejemplo muestra la forma de aplicación de los criterios ya

comentados en el ámbito de la profesión médica. “Supongamos que un

profesional médico ha contratado una póliza de seguro de responsabilidad civil

profesional, vigente a contar del 1 de enero de 1998 y con vencimiento el 31 de

diciembre de 1998. En diciembre de 1998, efectúa una intervención quirúrgica

a un paciente, en el curso de la cual, en forma accidental, y sin precaverse,

secciona parcialmente un nervio, a consecuencia de lo cual el paciente, varios

meses después, comienza a perder lentamente la movilidad de una de sus

extremidades. El profesional, quien en 1998 había suscrito una póliza de la

compañía A, a partir del 1 de enero de 1999, y hasta el 31 de diciembre de

1999, contrata una nueva póliza, esta vez con la compañía B. El año 2000, y

dado que el profesional estima que su siniestralidad era baja, buscó otra

compañía C, y contrato una póliza mas barata. La paciente busca consejo legal

y finalmente reclama extrajudicialmente al médico en enero del año 2000”339.

Bajo el primer criterio, esto es, el hecho generador o causal, el siniestro

debiese de quedar cubierto por la compañía A. Conforme al segundo de los

criterios enunciados, el de la ocurrencia del daño, el siniestro debería ser

cubierto por la compañía B, y finalmente conforme al tercero de los criterios

338
SATELER A. Ricardo. Ob. Cit. Pág. 11
339
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 27
209

enunciados, el siniestro debiera ser cubierto por la compañía C. Pero como

veremos, puede que a pesar de todo ello, el siniestro quede sin cobertura y él

sea el propio profesional el que deba asumir las indemnizaciones

procedentes”.340

4.3 SEGURO DE RESPONSABILIDAD CIVIL MÉDICA EN OTROS PAÍSES

A pesar que la historia nos demuestra que el concepto de responsabilidad no

es extraño para los pueblos de la antigüedad, también es cierto que es

relativamente reciente la toma de conciencia sobre la responsabilidad civil

profesional del médico y por consiguiente el auge del derecho indemnizatorio

en este campo. Tal vez el cambio de pensamiento se ha producido como

consecuencia de la progresiva consideración del médico como un profesional y

no como un mago o hechicero, y que los resultados de sus intervenciones

dependen de agentes externos a ellos como Dioses o simplemente de la

suerte.

Un punto desfavorable de la evolución del seguro de responsabilidad civil

médica es el fenómeno de la reclamación, que ha sido desbordante en todos

los países en los cuales se ha establecido, por esto se han ideado diversas

formas de contrarrestarlo y de hacer de él un derecho bien ejercido. El sistema

340
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 26 y 27
210

más común es el de desplazamiento de responsabilidad, que consiste en

acudir a algunas de las diversas pólizas de seguro que se ofrecen en el

mercado.

4.3.1 ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA

Hoy en día, son sin duda los Estados Unidos de América los que encabezan

los listados de reclamaciones de seguros de responsabilidad civil profesional

médica en el mundo. Ejemplo de ésto es que en 1995 según fuentes de la

American Medical Association, 5 de las 10 mayores indemnizaciones

decretadas judicialmente en EE.UU. se impusieron a los médicos, o sistemas

de salud, siendo la indemnización media durante ese año US $500.000, un

40% mayor que 1994.

Por esto algunos aseguradores se encuentran renuentes nuevamente a dar

coberturas de malapractice médica como en la década de 1970/80 pues los

montos de las condenas se han incrementado en un 400% en los últimos diez

años. También se ha producido un aumento significativo en las decisiones de

jurados desfavorable a los médicos condenando por encima del millón de

dólares. Lo mismo ocurre con el costo de los arreglos extrajudiciales que han

aumentado en su monto promedio en el 65%. Por ejemplo, en Philadelphia en

el año 2000, condenó a cuatro médicos a pagar 100 millones de dólares por su

mala práctica en la ejecución de una operación en un recién nacido de 26

semanas. En Texas, se condenó en once millones de dólares a un médico por


211

la demora en diagnosticar un cáncer de testículos. En West Virginia, un jurado

trato de sobrepasar la limitación estatal del monto máximo de reclamo por

daños médicos a personas, que es de un millón de dólares, y acordaron entre

ellos que el monto de la condena debía ser de dos millones, a un paciente

cuya cirugía por reflujo esofágico se complicó.

En los Estados Unidos la regla general ha sido que los aseguradores suscriban

el riesgo de responsabilidad civil sobre la base Claims Made. Esta cláusula

provee de cobertura si el acto u omisión negligente es reclamada y notificada

al asegurador durante el periodo de vigencia de la póliza independientemente

de la fecha de ocurrencia.

Mientras que en las pólizas de ocurrencia el evento asegurado ésta vinculado

a la época del daño, en las pólizas Claims Made, el evento asegurado es la

reclamación en sí misma. En oposición a la póliza de ocurrencia, donde no hay

cobertura retroactiva, en las pólizas Claims Made no hay una cobertura

prospectiva.

En Estados Unidos, “si bien la jurisprudencia no es uniforme, existen

decisiones judiciales que rechazan las cláusulas en estudio. Se acostumbra

citar los casos Jones vs. Continental Casualty Company, y J.G. Link & Co. V.

Continental Casualty Co., este ultimo rechazando la cláusula Claims Made,

basado en la violación de las expectativas razonables de los asegurados.

Conforme a dicha doctrina, debe entenderse que el seguro brinda la cobertura


212

que una persona común, en el lugar del asegurado, hubiera creído que tenía,

luego de haber leído la póliza. De forma tal que si no obstante esa lectura, ante

la poca claridad o confusión en la forma de redacción de la póliza, el

asegurado hubiera creído que estaba cubierto (aunque la póliza dijese lo

contrario), se entendía que se encontraba amparado por el contrato de seguro.

La doctrina mencionada obedece a la realidad que el asegurado por una póliza

de Responsabilidad Civil, tiene una valedera, lógica y razonable expectativa,

en el sentido de esperar que si se produce un siniestro, la póliza de seguros

que contrató lo va amparar, independiente de la fecha en que se produzca el

reclamo”.341

A pesar de estas excepciones que “se han formulado a la póliza Claims Made

en los Estados Unidos, la mayor parte de las cortes han reconocido la validez

de las pólizas Claims Made toda vez que éstas han sido puestas en tela de

juicio ante los tribunales”.342

Pero siempre las cortes “han sido muy cuidadosas al llegar el momento de

juzgar las pólizas Claims Made puesto que han estado muy concientes que el

poner en duda la validez de la cláusula Claims Made tendría un efecto en el

interés publico puesto que se limitara la cobertura o bien las primas pueden

llegar a niveles que los hacen inaceptables para las empresas. En general la

jurisprudencia tiende a reconocer la validez de las cláusulas Claims Made y en

341
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 33
342
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 14
213

particular la reconoce cuando el consumidor tiene acceso a una explicación

clara de cuales son las limitaciones inherentes a una póliza Claims Made” 343

4.3.2 ESPAÑA

Él artículo 73 de la Ley del Contrato de Seguro de España define el seguro de

responsabilidad así: “el asegurador se obliga, dentro de los límites establecidos

en la ley y el contrato, a cubrir el riesgo del nacimiento a cargo del asegurado

de la obligación de indemnizar a un tercero los daños y perjuicios causados por

un hecho previsto en el contrato de cuyas consecuencias sea responsable el

asegurado, conforme a derecho”.

No existe en el derecho español una regulación separada y específica de la

responsabilidad profesional del médico con relación a la responsabilidad

profesional en general. Por otro lado la jurisprudencia en relación con la

responsabilidad médica hasta los años setenta fue muy escasa. En los últimos

años al crecer él numero de reclamaciones, la Jurisprudencia en este tema es

mucho más profusa, hasta el punto de que sólo en los últimos diez años ha

habido ocasión para variar la doctrina que establecen estas sentencias. Por

ejemplo ha ocurrido en materia de consentimiento informado, en que luego de

haberse sostenido durante algunos años que le correspondía al paciente

demostrar que había sido informado, hoy en día existe ya una doctrina

jurisprudencial asentada precisamente en el sentido opuesto, es decir que es

en todo caso el médico quien debe probar que si informó.

343
MIRANDA SUAREZ. Ob. Cit. Pág. 14
214

En España según la definición del contrato de seguro de responsabilidad civil y

sus características, surgirá la responsabilidad profesional del médico cuando

en el cumplimiento de sus obligaciones haya violado sus obligaciones, tanto

deriven de un contrato con el paciente, como de la asistencia que está

obligado a prestar en el desempeño de un puesto de trabajo público o privado.

Destaca pues el Tribunal Supremo las siguientes obligaciones del profesional

prestador de los servicios.

- La sujeción a la lex artis ad hoc.

- La obligación de actualización de conocimientos y de medios.

- La obligación de continuidad de los cuidados.

- La obligación de información.

- La obligación de cada médico de tener el material adecuado para

que el trabajo a realizar pueda efectuarse en condiciones normales de

diagnóstico y tratamiento, naturalmente que atendiendo a la modalidad de

ejercicio profesional.

- La obligación de mantener en correcto estado los medios

técnicos de que disponga, y de controlar su funcionamiento.

Como nos hemos podido dar cuenta en la legislación y jurisprudencia española

se cierran todas las puertas a la implantación de la responsabilidad objetiva en


215

la actividad médica, al respecto el Doctor Carlos M. Romero explica: “las

características de la actividad médica y el contexto social rechazan que tal vía

de concreción de responsabilidad civil puede ser trasladada al ejercicio de esta

profesión “344.

Por otro lado, se ha propuesto en España la creación de un Seguro Obligatorio

para los médicos, que cubra los riesgos que implica el ejercicio de esta

profesión, el cual tendría como principal beneficiado al propio facultativo, quien

podrá con esta póliza “trasladar así la carga patrimonial derivada de su

responsabilidad civil; pero ello no implicaría el peligro de cierta relajación en su

actividad que, por lo demás, podría ser valorada por la entidad aseguradora-,

al estar siempre abierta la posibilidad de su responsabilidad penal”345.

Otro beneficio que reporta esta póliza obligatoria es que este sistema

“implicaría un procedimiento de resarcimiento al paciente automatizado y

despersonalizado, con lo que se evitaría que el médico se sintiera perjudicado

en su prestigio e imagen profesional”346.

La pregunta que queda de esta idea es ¿quién responde por la carga

económica del seguro?, la respuesta no es simple, ya que hay que tener en

cuenta las implicaciones económicas que esto conlleva. El doctor Romero ha

dicho, que no debe descartarse que sea el propio Estado quien asuma

344
ROMERO CASABONA. Carlos M. El Médico Ante el Derecho- Responsabilidad Civil y Penal del
medico. Ediciones Ministerio de Sanidad y Consumo. Madrid. Primera edición. Pág. 117
345
ROMERO CASABONA. Carlos M. Ob. Cit. Pág. 118
346
ROMERO CASABONA. Carlos M. Ob. Cit. Pág. 118 y 119
216

parcialmente este gasto o los propios médicos, bien por sí mismos o a través

de la Organización Medica Colegial; pero de todas formas en nuestro parecer

esto traería consecuencias aún más gravosas que las económicas, pues los

médicos descuidarían sus obligaciones por no preocuparles ya las

indemnizaciones.

4.3.3 FRANCIA

Este país fue quizás el primero en consagrar que las obligaciones de los

médicos son de medios y no de resultados, pues con la posición acogida “...

desde 1936 por la Corte de Casación Francesa en el Fallo “MERCIER”, según

la cual el vínculo contractual del médico con el paciente no lo obligaba a

curarlo sino a brindarle cuidados conforme a los datos adquiridos por la

ciencia”347, muchos países incluyendo a Colombia han seguido su posición.

En Francia sea dado un gran avance en la doctrina y la jurisprudencia

alrededor del tema del seguro de responsabilidad médica y en especial de la

cláusula Claims Made. Ejemplo de este desarrollo son decisiones como las

siguientes:

“La Corte de Casación, ha señalado que las Compañías de seguros que

ampara al asegurado al momento de la ocurrencia del hecho daño, debe

brindarle cobertura con independencia de la fecha en que se produzca el

reclamo. En Sentencia de diciembre de 1990, se sostuvo que la cláusula

claims made crea para la compañía de seguros una ventaja desprovista de

347
YEPES RESTREPO. Articulo Cit. Pág. 5b
217

causa, y finaliza sentenciando que esta estipulación, en consecuencia, debe

ser reputada como no escrita. En Sentencia de abril de 1991, la misma Corte

se pronuncia señalando que el seguro debe cubrir los daños que sean

consecuencia de hechos generadores cometidos durante la vigencia del

contrato. Bajo la ocurrencia de hecho generador es preciso integrar no

solamente la ocurrencia del daño, sino también la falta de origen del mismo,

esto es, el hecho generador”348.

Respecto al tema de la responsabilidad del Estado por prestación del servicio

público hospitalario, el Consejo de Estado Francés, dictó en 1993 una

sentencia denominada fallo “Bianchi”, que consagro la responsabilidad médica

sin culpa, la cual se pretendió consagrar en materia civil a comienzos de 1999

a través “de un fallo de la Corte de París en el cual se indicó que existía para el

médico una obligación accesoria de seguridad, que lo obligaba a reparar el

daño causado al paciente aún en ausencia de falta”349.

Esta decisión causó gran revuelo en el sector médico y asegurador francés,

por las implicaciones que representaba ésta decisión, pero a finales del año

2000 la Corte de Casación Francesa descartó la aplicación de la teoría de la

responsabilidad médica sin culpa en el derecho privado.

4.3.4 BÉLGICA

348
MIRANDA SUAREZ. Francisco. Ob. Cit. Pág. 33
349
YEPES RESTREPO. Articulo Cit. Pág. 5b
218

Bélgica no ha desarrollado un seguro de responsabilidad civil específicamente

para el médico, sino que cubre los riesgos de su actuar bajo el seguro de

responsabilidad civil profesional general, bajo un interés de proteger al

asegurado, por esto la Ley del contrato de seguro que entró en vigencia en

junio de 1992, en la sección dedicada al seguro de responsabilidad civil,

impuso a los aseguradores la obligación de indemnizar los daños, incluso

cuando las reclamaciones fueran formuladas una vez vencida la póliza,

siempre que el evento dañoso tenga lugar dentro del periodo de duración de

las mismas, todo esto con el fin de proteger al asegurado.

El resultado práctico de esta Ley fue el aumento progresivo de las

reclamaciones. Es por ésto que la asociación de aseguradoras belga ha

reaccionado enérgicamente contra la norma legal y han tratado durante estos

años de modificarla sin éxito hasta ahora.

4.3.5 CANADÁ

La responsabilidad civil médica es manejada en Canadá desde el punto de

vista de las obligaciones inherentes al ejercicio del médico, por esto su

responsabilidad está íntimamente relacionada con la atención a sus pacientes.

Los deberes que se tienen en cuenta en la legislación canadiense y que son

motivo de reclamación cuando se infringen al respecto el doctor Joseph

Colángelo Abogado Especialista en Responsabilidad Civil explica cuales son

los deberes para un médico en Canadá:


219

Él deber de ejercer cuidado y cautela razonable: “la cautela que se puede

esperar de un médico razonablemente prudente, capaz y cuidadoso es

establecida por los estándares de la práctica que son desarrollados

periódicamente por la profesión médica. El desempeño de este, presupone que

el médico conoce los estándares de práctica y tiene la capacidad de aplicarlos

en el ejercicio de su profesión. La responsabilidad legal resulta cuando el

paciente puede demostrar que una violación del deber de usar cautela

razonable lo ha perjudicado”.350

El deber de avisarle al paciente sobre los riesgos del tratamiento: “En Canadá

los médicos tiene él deber de avisar los riesgos materiales de un tratamiento.

Los riesgos materiales son aquellos que son probables o materialmente

posibles. Un riesgo materialmente posible es el que, aunque no sea probable,

tendrá graves consecuencias si por alguna razón se hace realidad. La

responsabilidad legal a causa de no avisar convenientemente, es evidente

cuando el paciente puede demostrar que una persona razonable habría

rechazado el tratamiento propuesto, si el riesgo material le hubiera sido

revelado por él medico”.351

350
COLÁNGELO, Joseph. La Responsabilidad Profesional Médica en Canadá. Tomado de la
página de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
220

El deber de confidencialidad: “El medico no tiene derecho a revelar estos datos

a menos que lo requiera la ley o que el paciente le dé su consentimiento. En

circunstancias especiales, se le puede obligar a un médico a revelar a

instituciones públicas o a una víctima posible, información confidencial acerca

de un paciente, para evitar el riesgo o daño a terceros”.352

Canadá posee la ley sobre el consentimiento al cuidado médico, Health Care

Consent act. , de 1996, referente al consentimiento informado del paciente

cuando se somete a un tratamiento médico, y considera que debe ser dado en

los casos que determina esta ley, por que de lo contrario generan

responsabilidad para el profesional de la medicina

El paciente debe recibir información suficiente sobre:

La naturaleza del tratamiento

Los efectos benéficos y esperados del tratamiento.

Los riesgos materiales del tratamiento.

Las otras medidas posibles.

Las consecuencias probables de la falta de tratamiento.

La persona recibió las respuestas a sus pedidos de información.

351
COLÁNGELO, Joseph. La Responsabilidad Profesional Médica en Canadá. Tomado de la
página de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
352
COLÁNGELO, Joseph. La Responsabilidad Profesional Médica en Canadá. Tomado de la
página de Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
221

4.3.6 ARGENTINA

La historia del Seguro de Responsabilidad Profesional Médica o mala praxis en

la Argentina se ha desarrollado en tres períodos claramente identificables.

Pero fue sin duda “la resolución 15.517/80, la que abrió el camino,

cumplimentada luego por la resolución 16.115/81 que establece el modelo de

solicitud y posteriormente la resolución 16.680/82”353.

La primera etapa hace referencia a la época de introducción de este seguro al

mercado, donde eran ocho (8), los médicos que lo tomaron, por creerlo los

otros innecesario.

Otro de los problemas que enfrentaba este seguro para su masificación era sin

duda el hecho de exigir que el sujeto asegurado debía ejercer la profesión de

médico y actuar habitualmente en ella de acuerdo al artículo 21 de la Ley

17.132, el cual colocaba una serie de trabas al ejercicio profesional de los

médicos al exigir una autorización del Ministerio de Salud y Acción Social, que

se obtenía cumpliendo requisitos como: “ser profesor universitario por

concurso de la materia y en actividad”354. Al respecto el Doctor Ghersi opina:

“el problema es serio, pues limita –creemos que injustificadamente- la

posibilidad de cobertura, generando una situación de desigualdad ante la Ley,

por lo que entendemos que este requisito es inconstitucional, pues por sobre

353
GHERSI. Carlos A. Ob. Cit. Pág. 309
354
ARTICULO 21. Ley 17.132 inciso b. de la Argentina
222

todo debe pesar el carácter social del seguro, incluso no se compatibiliza con

el decreto 2284/90 de desregulación”355.

El segundo período comenzó cuando la profesión médica fue golpeada por la

realidad de las demandas. Con un incremento en la frecuencia y la severidad

de las mismas, entonces, los profesionales e instituciones cayeron en cuenta

de la necesidad de la cobertura y requirieron un producto que respondiera a

sus inquietudes. Pero por ese entonces la situación no era de las mejores: las

compañías debían conformarse con seguros de tipo Claims-made del mercado

reasegurador, que ofrecían una inadecuada cobertura y la imposibilidad de

ofrecer límites más elevados de responsabilidad.

La tercera instancia se inició cuando los aseguradores descubrieron la

complejidad de la administración del riesgo, y las demandas que ocurren en el

campo de la salud.

Con el crecimiento del mercado, resultó evidente que se debían desarrollar

coberturas especiales para distintas estructuras médicas, tales como

hospitales privados, centros de diagnóstico, programas de salud sindicales y

prepagas, centros de emergencia, etc; pero los aseguradores no estaban

preparados para enfrentar estas nuevas necesidades de la comunidad médica

y además carecían de personas con experiencia en seguros de RPM., por otro

lado, las compañías internacionales de reaseguro no estaban listas para

355
GHERSI. Carlos A. Ob. Cit. Pág. 310
223

arriesgarse en un mercado desconocido para ellas y crear un programa de

apoyo a las aseguradoras locales, no sólo respecto del reaseguro compatible

con el sistema jurídico del país, sino con los límites necesarios de la

responsabilidad, acompañado por experiencia suficiente como para poner en

marcha este programa. Se puede decir que la tercera etapa terminó en 1996,

cuando una empresa Argentina de seguros se alió con una consultora

norteamericana, especializada en seguros de RPM, y con una compañía

reaseguradora británica para formar una entidad local especializada en el

tema.

Actualmente, existen varias compañías que ofrecen seguros de RPM en éste

país, ya sea por medio del seguro Claims-made, o las pólizas de

responsabilidad médica del tipo ocurrencia; también poseen un reaseguro

sólido, posibilitando su funcionamiento correcto.

4.3.7 BRASIL

En Brasil el seguro de responsabilidad civil médica esta poco desarrollado,

debido a la falta de conocimiento sobre las condiciones de la póliza que son

ofrecidas a los médicos en el ejercicio de sus funciones y a las complejidades

de asumir el riesgo en un país donde la falta de experiencia de las compañías

aseguradoras locales respecto al seguro de responsabilidad civil médica es el

común denominador.
224

A pesar de no existir una cultura aseguradora por parte de los médicos, “desde

hace unos pocos años, los profesionales han iniciado una tibia y limitada

contratación de este tipo de seguros”356, y el índice de reclamos ha presentado

un crecimiento sostenido, lo que conlleva a que por lo menos “una de las 150

entidades registradas han asegurado al menos a algún médico o a alguna

institución prestadora de servicios”357, pero aún así el porcentaje de

profesionales asegurados es de apenas el 8%.

Por otro lado, en Brasil se presenta una diferencia legislativa con otros países

donde sí existe y ha sido exitoso la puesta en marcha de este cubrimiento. En

el derecho brasilero la responsabilidad médica fue regulada como

responsabilidad aquilina. “La culpa contractual es aquella que determina el

daño por falta de ejecución de un contrato, en tanto que la culpa aquilina es la

que deriva del acto ilícito, sin nexo jurídico que anteceda a la actuación

médica. Hay, realmente, entre el médico y el paciente un contrato de

prestación de servicios, su responsabilidad es contractual pero, no obstante,

figura en el derecho brasileño como actos ilícitos en casos de responsabilidad

médica”.358 Esto conlleva a que se haga difícil la prestación de un cubrimiento

356
CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de
Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
357
CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de
Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
358
BLOISE, Walter. Seguro de Mala Praxis Médica en Brasil. Tomado de la página de Internet:
http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
225

al médico en este país, pues el contrato exige al médico una gran

responsabilidad profesional.

En Brasil, solo dos compañías se han especializado en pólizas de

responsabilidad civil médica, son: SAOEZ de Porto Alegre y NOMBRE de San

Pablo, las cuales ofrecen básicamente seguros de responsabilidad médica

con cláusulas Claims Made. El tiempo de prescripción actualmente es hasta

20 años.

En conclusión, “la falta de una cultura del reclamo, los pocos juicios y la virtual

inexistencia de ofertas de seguros, indican que el mercado brasilero es aún

ínfimo”359, respecto a la póliza de responsabilidad civil médica.

4.3.8 CHILE

Chile en la actualidad maneja un tipo de seguro general para todas las

profesiones, es decir que los médicos para protegerse tienen que tomar el

seguro de responsabilidad civil profesional general; así lo explica el Abogado

Ricardo Peralta, director del Capitulo Chileno de la Asociación Internacional de

Seguros cuando se refirió al tema: “hasta ahora existe el Seguro de

Responsabilidad Civil, que ha aumentado de siete millones de dólares en 1997

a doce millones de dólares al 2000, pero se desconoce la póliza por

359
CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de
Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
226

responsabilidad civil médica por que el ítem no esta registrado en forma

individual en la superintendencia”.360 El abogado dijo también: “que el seguro

no tiene por objeto amparar el honor, orgullo, y buen nombre del profesional,

pero que incorpora la modernización, además de mejorar la cobertura”.361

Refiriéndose a la siniestralidad por mala praxis, el académico Pedro Zela, de

la facultad de Derecho de Chile, manifestó que va en aumento. Los pacientes

ya no se resignan frente al daño y piden indemnizaciones, pero éstas “no

llegan a reparar, sino que compensan por que el daño ya está causado”.

Además agregó que “en Chile no ha existido una verdadera explosión de la

responsabilidad civil médica por que el juicio civil es de larga tramitación y

porque las cuantías de las indemnizaciones por muerte y por lesiones son

bajísimas”.

Otro punto importante para comentar sobre Chile, es que la Asociación de

Aseguradores registrará una nueva póliza de responsabilidad médica ante la

Superintendencia de Valores y Seguros, que incluirá la cobertura del Daño

moral a los pacientes, como otro ítem a indemnizar en las reclamaciones.

360
Amplían seguro para médicos. Tomado de la página de Internet:
http://www.odontodos.net/noticias.htm
227

El Doctor Francisco Miranda Suárez, abogado con magíster en derecho

médico explica en su articulo “El nuevo proceso penal chileno y

responsabilidad médica” que: la reforma procesal penal que incluye las “salidas

alternativas contribuirán a un auge espectacular de la responsabilidad médica,

debido a que tipos penales culposos como la negligencia del médico,

constituyen terreno ideal para hacer operar tales mecanismos alternativos,

pues lejos de procurar la aplicación de una pena (la que no les interesa), los

querellantes buscarán una compensación monetaria. Asimismo, el Nuevo

Proceso Penal, oral y público, involucra un costo imagen de proporciones por

exposición pública, que ni el médico ni menos la clínica u hospital querrán

asumir. Si a ello agregamos en la etapa de investigación, la presión de la

propia víctima o del propio fiscal investigador, la conveniencia de una salida

alternativa al Juicio Oral es innegable”.

4.3.9 URUGUAY

Desde principios de los noventa se ofrece este tipo de seguros, pero la

experiencia en este país no ha sido muy provechosa para las aseguradoras, ya

que en el Uruguay hay alrededor de 12 mil médicos, y la cantidad de

asegurados no llega a 10%, o sea entre mil y 1.200 tienen este seguro.

Durante muchos años el Banco de Seguros del Estado (BSE) ejerció un

monopolio absoluto sobre el mercado Uruguayo, ofreciendo pólizas con

coberturas Claims Made únicamente para profesionales individuales, y con

361
Amplían seguro para médicos. Tomado de la página de Internet:
http://www.odontodos.net/noticias.htm
228

primas bastantes altas; pero hoy en día cuentan con otra compañía

aseguradora, Suramérica Surinvest SA. La cual, lanzo al mercado una póliza

que cubre tanto a profesionales como a las instituciones médicas, con

coberturas Claims Made y de Ocurrencia. Con el ingreso de Sudamérica al

competencia los costos de las primas han bajado de precio.

Los corredores de seguros del sindicato médico han establecido algunas

premisas para que el riesgo continúe siendo tan bueno como es y mejorarlo.

“Primero, la selección del riesgo, es decir una correcta suscripción del Seguro;

cuando viene el médico a contratar el Seguro hacer una buena historia de su

riesgo, ver qué experiencia siniestral tuvo, cuántos años de antigüedad tiene

en la profesión, si tiene personal a su cargo, cuántas horas trabaja, etcétera.

Eso permite hacer una composición de lugar, ayuda a elaborar estadísticas de

las cuales se sacan conclusiones, y además el profesional queda tranquilo ya

que ha cumplido con una serie de requisitos que no le dejan dudas en el

momento en que tiene un siniestro. La otra premisa fundamental es la difusión

y la prevención. Desde el punto de vista del Seguro, los reaseguradores tienen

una parte muy importante en este negocio, el Banco no fija las primas por

capricho, tiene un reasegurador que es el que le ayuda a contribuir en el éxito

o en el fracaso del negocio. Si bien es cierto que se han mejorado las

condiciones, nosotros pensamos que se pueden mejorar aún más, pero se ha


229

dado un paso importante respecto a lo que hasta hoy tenía el Sindicato

Médico”362.

El Doctor Antonio Grille, explica que “con respecto a la jurisprudencia también

en sus principios fue bastante disímil. No obstante estimo que hoy existe un

criterio genérico de los jueces para determinar, porque no es lo mismo que

quede sin un dedo un cirujano (al margen del daño material porque no va a

poder seguir ejerciendo su especialidad, le implica un tremendo dolor la

frustración de su carrera) que le amputen un dedo a un futbolista. También en

este aspecto indiscutiblemente tiene que haber una selección. En general, yo

diría que la jurisprudencia en este momento es bastante coherente”363.

4.3.10 PARAGUAY

Paraguay es quizás el país de sur América con el mercado más virgen en el

campo del seguro de responsabilidad civil médica, pues no existe una posición

definida respecto al tema de la responsabilidad médica, y el índice de reclamos

es tan bajo que podría decirse que no existe.

Las “compañías trabajan en este ramo bajo el esquema de diferenciación por

especialidad en el caso de los médicos y, según el tipo de actividad/ tamaño en

lo referido a prestadores institucionales de servicios de salud”364.

362
KVITTKO, Luis Alberto. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0023.html
363
KVITTKO, Luis Alberto. Tomado de la página de Internet:
http://200.51.176.173/smu/doctri/SDMD0023.html
364
CATALANI, Carlos. Praxis médica: análisis comparativo del Mercosur. Tomado de la pagina de
Internet: http://www.sanpacific.com.ar/RPNAntEsp.htm
230

El término de prescripción para reclamación es hasta 10 años, y el diseño de la

póliza que se ofrece en el mercado esta soportada en coberturas Claims Made.

Cabe anotar, que a pesar del poco desarrollo del seguro de responsabilidad

civil médica, en Paraguay existe por parte de la comunidad médica una gran

preocupación por el riesgo que representa para ellos ejercer su profesión sin

una cobertura apropiada, sumado a una posible evolución de la litigiosidad

como consecuencia del aumento de las reclamaciones, es por eso que a partir

de este año aseguradoras como: Segesa, El Sol de Paraguay y el Productor,

cuentan con un programa integral de seguros / reaseguros en Responsabilidad

Profesional.
231

CONCLUSIONES

1. La Medicina actual se encuentra en un avanzado nivel de evolución, pues

no solo se limita al estudio de cada cuadro clínico (enfermedad y sanación del

paciente), sino que se desarrolla como una medicina activa que busca

intervenir y actuar frente a la enfermedad de manera rápida, ayudada por los

avances tecnológicos. Esto implica una rápida toma de decisiones que en un

futuro podrán ser consideradas obsoletas a la luz de los avances que se

presenten con posterioridad.

Frente a esta situación, los médicos y entidades prestadoras del servicio de

salud se encuentran expuestos a riesgos de naturaleza médico legal, y a la

amenaza de tener que enfrentarse a las acciones judiciales que se intenten

contra ellos, viéndose en la necesidad de hacer frente a las consecuencias

patrimoniales adversas que ello conlleva. Por ésta razón concluimos, después

de haber realizado este trabajo, que resulta necesario difundir la figura del
232

legal del Seguro de Responsabilidad Civil Profesional, como mecanismo que

les permitirá afrontar las consecuencias patrimoniales de la responsabilidad

que podría derivarse de sus actuaciones en el ejercicio de actividad

profesional.

2. El tema de la protección del paciente, entendiendo al paciente como el

usuario del servicio médico, ha adquirido hoy gran importancia debido a la

política proteccionista del consumidor desarrollada por los Estados. Esta

situación ha llevado a que los profesionales tomen conciencia de que su

relación profesional con el paciente se desenvuelve dentro del marco jurídico

de la responsabilidad civil, en la que el paciente es poseedor de una serie de

derechos para obtener la indemnización de los perjuicios que pudiere llegar a

sufrir. La importancia dada hoy a los derechos del consumidor se ha

presentado como una consecuencia del reconocimiento de la dignidad del ser

humano, como poseedor de derechos para demandar servicios adecuados a

sus necesidades, principio que resulta plenamente aplicable cuando se trata de

la prestación de servicios médicos y actividades relacionadas con la salud.


233

3. El Seguro de Responsabilidad Civil Médica como tal, ha tenido un tímido y

limitado desarrollo en el mercado colombiano, pues son pocas las condenas en

los procesos judiciales que se llevan por mala praxis médica. La razón de esto

es la escasa cultura de reclamo con la que contamos en nuestro país. A esto

se agrega que no existen abundantes elementos sobre los cuales estructurar

un sistema de interpretación de las disposiciones aplicables tanto a la

responsabilidad civil del médico, como a las estipulaciones contractuales

consignadas en las pólizas de seguro de responsabilidad civil profesional, pues

la legislación y la jurisprudencia sobre el tema son escasas.

De lo anterior concluimos que es sentida la necesidad de contar con una

legislación clara y unificada sobre la Responsabilidad Médica, para que de ahí,

se pueda determinar cuáles son los riesgos de cubriría el Seguro de

Responsabilidad Civil Médica. Resulta evidente que esto contribuiría a facilitar

la solución de las controversias derivadas del contrato de prestación de

servicios médicos.
234

ANEXOS

COOMEVA

“Seguro de Responsabilidad Civil Médica Profesional

* Ventajas

El seguro de Responsabilidad Civil Profesional Médica protege el patrimonio

de los profesionales de la salud, en el evento de resultar responsables

civilmente en el desarrollo normal de las actividades profesionales.

Sorpréndase con las facilidades exclusivas que ofrecen para los asociados a

Coomeva.

Médicos generales, Especialistas, Cirujanos, Odontólogos, Ortodoncistas y

otras especialidades afines.

Coberturas

Responsabilidad Civil Profesional por:

- E&O (Errores y omisiones)

- Uso de Equipos

- Personal paramédico.
235

- Gastos de defensa en Proceso penal y civil.

Amparo adicional por daño moral (previa sentencia) “365

$ 100 $ 200
Tarifa por especialidad $ 50 MM
MM MM

Anestesiólogos
31.752 23.461 17.640
Ginecólogos

Cirugía Urología

Oftalmología y 24.045 14.288 12.678

Radiología

Otros Especialistas y
19.278 14.288 10.773
Médicos Generales

Odontólogos y
18.900 14.490 6.552
Ortodoncistas

Tarifa por especialidad $ 300 MM $ 500 MM

Anestesiólogos
31.752 43.500
Ginecólogos

Cirugía Urología
24.045 33.713
Oftalmología y Radiología

365
Clasificados COMEVA, Tomado de la Página de Internet:
http://www.coomeva.com.co/sys/sys_rcmedica.html
236

Otros Especialistas y
19.278 21.569
Médicos Generales

Odontólogos y
15.588 18.900
Ortodoncistas

SURAMERICANA

Suramericana ha diseñado un seguro que cubre la responsabilidad civil

profesional del médico, con él cual se amparan “las indemnizaciones que tenga

que pagar el Asegurado en razón de la responsabilidad civil profesional que le

sea imputable por un acontecimiento que cause daños personales, y que se

ocasionen como consecuencia de siniestros ocurridos durante la vigencia de la

póliza y causados directamente por el ejercicio de la profesión médica

legalmente habilitada para ejercerse y especificada en la carátula de la

póliza”366.

La póliza cubre las siguientes responsabilidades del médico asegurado:

“Imputable al Asegurado por actos u omisiones cometidos en el ejercicio de

una actividad profesional médica por personal médico, paramédico o médico

auxiliar al servicio y bajo la supervisión del asegurado.

Derivada de la sustitución provisional que del asegurado efectuara otro médico

que ejerza la misma especialidad que la del Asegurado, sin incluir la

366
POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana
237

responsabilidad civil profesional propia del médico sustitúyete.

En materia extracontractual por daños personales, derivada de la propiedad,

arriendo o usufructo de los predios de un consultorio, en las que se desarrollan

las actividades propias de la profesión de la médica materia de este seguro, y

que figuran en la carátula de póliza (predios asegurados).

Derivada de la posesión y el uso de aparatos y tratamientos médicos con fines

de diagnóstico o de terapéutica, en cuanto dichos aparatos y tratamientos

estén reconocidos por la ciencia médica y que no se encontraren

comprendidos en el amparo adicional de los riesgos especiales de esta póliza.

Imputable por daños personales a consecuencia del suministro de

medicamentos, drogas u otros materiales médicos, quirúrgicos o dentales de

acuerdo al numeral tercero de esta cobertura, siempre y cuando el suministro

sea parte necesaria de la prestación de servicios y los mencionados productos

hayan sido elaborados por el Asegurado mismo o bajo supervisión directa,

dentro de los predios asegurados, o los mencionados productos hayan sido

registrados ante la autoridad competente sin que en este caso quede cubierta

la responsabilidad civil productos del fabricante”.367

Entonces el amparo comprende: el pago de la indemnización que deba cubrir

el Asegurado; el pago de los gastos de defensa que asuma el Asegurado bajo

367
POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana
238

las condiciones de la presente póliza, pero “en ningún caso están cubiertas las

indemnizaciones que tenga que pagar el Asegurado por:

Dolo o culpa grave del tomador, asegurado o beneficiario.

Daño a las personas o a los bienes del cónyuge del Asegurado o de sus

parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad o

único civiles. La misma exclusión opera con respecto a los socios del

Asegurado, directores y representantes legales de la entidad asegurada.

Deslizamiento de tierra, fallas geológicas, terremotos, temblores,

asentamientos, cambios en los niveles de temperatura o agua, inconsistencias

del suelo o subsuelo, lluvias, inundaciones, erupción volcánica o cualquier otra

perturbación atmosférica o de la naturaleza.

El incumplimiento total, parcial, tardío o defectuoso de pactos que vayan más

allá del alcance de la responsabilidad civil del Asegurado (como también

responsabilidades ajenas, en las que el Asegurado, por convenio o contrato, se

comprometa a la sustitución del responsable original.

Daños a consecuencia de reacción nuclear, radiación nuclear, explosiones

nucleares o contaminación radiactiva...”.368

Los limites máximos de indemnización son:

“La responsabilidad de la SURAMERICANA de cubrir los daños y perjuicios

causados por el Asegurado y cuyas causas sea un mismo siniestro no podrá

368
POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana
239

exceder él limite fijado en la carátula de la póliza como limite por evento.

La máxima responsabilidad de la SURAMERICANA de cubrir dichos daños y

perjuicios causados por todos los eventos ocurridos durante la vigencia de la

póliza no podrán exceder el límite fijado en la carátula de la póliza como límite

global por vigencia.

Cuando en la cláusula o amparo adicional se estipule un sublímite por persona,

por unidad asegurada o por siniestro cuya cobertura es objeto de la cláusula o

amparo adicional, tal sublímite será el límite máximo de la indemnización.

No obstante, si las reclamaciones exceden en su monto la suma asegurada, la

SURAMERICANA solo responderá por los gastos del proceso contra la

SURAMERICANA o el Asegurado en proporción a la cuota que le corresponde

en la indemnización de las reclamaciones aun cuando se tratare de varios

procesos resultantes de un mismo acontecimiento. En tales casos, la

SURAMERICANA podrá eximirse de otras reclamaciones mediante el pago de

la suma asegurada y su participación proporcional en los gastos hasta

entonces causados”.369

ING COMERCIAL AMERICANA

“El Seguro de Responsabilidad Civil para Profesiones Médicas de

ING Comercial América - Seguros, da el respaldo económico al médico

asegurado y sus empleados, para resarcir los daños que ocasionen a sus

369
POLIZA DE RESPONSABILIDAD CIVIL PROFESIONAL PARA MEDICOS. Suramericana
240

pacientes o a terceros, en sus bienes o en sus personas, con motivo de su

actividad profesional.

Este seguro cubre la responsabilidad profesional del asegurado derivada del

ejercicio de su profesión médica, y la de sus empleados que ejerzan una

profesión médica, médica auxiliar, farmacéutica o laboratorista, y que por su

culpa, ya sea por negligencia o impericia, causen daños corporales o inclusive

la muerte a sus pacientes.

Así mismo, ampara la responsabilidad civil legal por los daños que causen a

terceros en sus bienes o en sus personas, que se deriven por el uso, posesión

o mantenimiento de inmuebles, de aparatos y tratamientos médicos con fines

de diagnóstico o terapéutica, y de equipos de medicina nuclear y materias

radioactivas empleados para el desarrollo de dichas actividades.

También ampara los gastos de defensa si es presentada una demanda en

contra del asegurado, como por ejemplo las primas por fianzas judiciales en

garantía del pago de las sumas reclamadas, así como, el pago de las

cauciones o de las primas de las fianzas que deban otorgarse como caución

para que alcance su libertad preparatoria, provisional o condicional durante un

proceso penal que se siga en su contra”.370

ST. PAUL COMPANY


241

Para la investigación del seguro de responsabilidad médica recibimos una

cooperación muy valiosa por parte de la compañía de seguros THE ST. PAUL

COMPANY sede Argentina, a través de su E-mail: info@respaldoseguros ,

quienes nos explicaron como funciona este seguro y los elementos que ellos

tienen en cuenta para asegurar un médico.

La información parte describiendo ¿qué es para ellos el seguro de

responsabilidad civil medica?, y dice que “es un seguro mediante el cual la

Aseguradora se obliga a mantener indemne al profesional por cuanto este

deba a un tercero en razón de la responsabilidad civil derivada del ejercicio

legal de la profesión”371. Dando a entender con esto que se protege el

patrimonio profesional del medico frente a la responsabilidad de responder a

un reclamo efectuado por una persona atendida por este y que en el desarrollo

de la actividad recibió un perjuicio.

Esta aseguradora brida a sus asegurados sin costo adicional los siguientes

beneficios:

Defensa penal.

Servicio de administración de riesgos

Asistencia medico-legal las 24 horas del día

Esta póliza esta dirigida a:

370
Tomado de página de Internet: http://seguros.ing-
comercialamerica.com/seguros/danos/danos_respcivil_profesiones.asp
371
Tomado de página de Internet:
http://www.respaldoseguros.com.ar/Productos_y_Servicios/Praxis_Medica/Cobertura/cobertura.ht
ml
242

Médicos, odontólogos y otros profesionales de la salud en forma individual.

Asociación de profesionales de la salud en forma colectiva.

Centros ambulatorios de diagnósticos y /o tratamiento.

Laboratorio de análisis clínico.

Cínicas y sanatorios privados.

Instituciones de medicina prepagada.

TABLAS DE ESTADÍSTICAS

A continuación presentaremos una somera información estadística sobre el

ramo de la Responsabilidad Civil en el mercado Colombiano


243
244
245
246
247
248
249
250

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