Acontecimiento señalado en la ley; si pues esta finalidad se alcanza, no existe

razón para conceder un salario doble; el aumento del salario tiene que provenir de
una prestación adicional de trabajo y si esta no existe, no puede aquel
aumentarse.

Nuestro Código de Trabajo al respecto establece en el art. 194 que si coincide el

día de Asueto con el Descanso Semanal, el trabajador tendrá derecho solamente
a su salario básico, pero también establece que si el trabajador labora en ese día,
tendrá derecho a la remuneración que establece el art. 192, es decir, al 100%, y
además al descanso compensatorio remunerado que le corresponde.

ANALISIS COMPARATIVO DE LAS TRES INSTITUCIONES RELATIVAS AL

REGIMEN DEL DESCANSO

SEMEJANZAS

En primer lugar, nuestra actual Carta Magna establece que las tres instituciones
consagradas en favor de los trabajadores son derechos, tal y como lo establece el
artículo 38 números 7,8 y 9. Esta tendencia surge a partir de la adopción de la
“Carta de Bogotá” y se ha plasmado en las constituciones, con las diferentes leyes
que han aparecido en la historia de la legislación laboral salvadoreña sobre el
tema y en los Códigos de Trabajo que nos han regido y los han desarrollado como
tales. Sin embargo cabría preguntarse por qué son derechos, lo cual podría verse
desde dos puntos de vista:

 De una forma objetiva: el derecho como tal es norma porque la misma ley lo
establece
 De una forma subjetiva: como facultad es decir como “una posibilidad de
acción autorizada por una norma jurídica”.1

En este caso se podría optar por ella o no, pero a diferencia de la anterior, las
normas jurídicas reguladas por el derecho laboral, en lo que concierne a los
derechos consagrados a favor de los trabajadores, no tienen la característica de
ser facultativos puesto que no pueden disponer libremente si los toman o no, ya
que tienen el carácter de ser imperativos como lo estipula el art. 52 de la
Constitución al enunciar que tales derechos son irrenunciables; ello obliga a que el
trabajador no pueda desistir de su ejercicio, incluso en el supuesto hipotético de
que él quiera laborar en esos días.

1
Torré Abelardo. Introducción al Derecho, Editorial Perrot, Buenos Aires, Pág. 189.
En segundo lugar, estos derechos implican una limitación a la jornada de trabajo
ya que como se dijo anteriormente, estas instituciones dan al individuo “la
oportunidad de sentirse como tal dentro de la sociedad, que deje de ser parte del
sistema de producción para transformarse en un ser libre y pensante, que
constituye el objetivo de la organización social y del derecho; en tal sentido, hay
diferentes formas tanto por la modalidad como por el tiempo, para el goce de tal
presentación, tales como: pausas dentro de jornadas de trabajo, pausas entre
jornadas de trabajo o descansos, entre semanas laborales o descansos
semanales y entre periodos anuales de trabajo o vacaciones anuales.

En tercer lugar, estas instituciones tienen como objetivo común, “en principio”, que
el trabajador reponga sus energías tanto físicas como mentales, ya que de esa
manera se contribuye no solamente al desarrollo y conservación del individuo, sino
que trasciende a la vida de la familia y, en general, a todas las actividades de
relación, con lo que resulta un factor importante del desenvolvimiento económico
de la sociedad2; por tanto tenemos que es el descanso el medio idóneo que
contrarresta la perdida de energías que produce la fatiga.

En cuarto lugar, tenemos como característica semejante entre estas instituciones,

que a pesar de que con ellas hay una suspensión de labores en un determinado
lapso, no se pierde la remuneración, puesto que así lo estipulan las normas
jurídicas tanto de carácter primario art.38 números 7,8 y 9 Cn. Como secundarios
Art. 174,177 y 194 CT. Ello es así puesto que en caso contrario, no se alcanzaría
el objetivo deseado si no se proporcionase al trabajador los medios económicos
imprescindibles para gozar del descanso; y crearía problemas y dificultades de
ese tipo, tanto para el trabajador como para su familia, y se anularía por completo
el motivo perseguido por el reposo.

Otra semejanza entre estas instituciones relativas al descanso es que, en caso de

violación a alguno de estos derechos, se impone una misma sanción y un mismo
procedimiento administrativo, los cuales están regulados en los artículos 627 y 629
CT, estableciéndose una multa hasta de quinientos colones por cada infracción.

Finalmente, otra semejanza entre dichas instituciones es en cuanto al tiempo de la

prescripción de las acciones del trabajador para reclamar el pago de esos
derechos, en el entendido de que la prescripción es un “Modo de extinguir
derechos y acciones por no haberse ejercido dichas acciones durante cierto lapso
de tiempo” como lo define en lo pertinente el art. 2231 C.; en ese sentido el art.
613 CT. Establece el plazo de “ciento ochenta días”, contados a partir de la fecha
en que debió de efectuarse el pago, para que prescriban esas acciones: en las

2
Ibid, Pág. 183.
vacaciones, antes que el trabajador las goce; y en el día de descanso y asueto, en
la fecha del pago de su salario, a menos que se pacte lo contrario.