Sistema de Universidad Abierta y a Distancia Licenciatura en Psicología
MODULO: Psicología Teórica de Elección II Panorama Actual en el Campo de las
Necesidades Educativas Especiales
A través de los cursos previamente llevados en el área de Necesidades Educativas Especiales, ha sido lamentable no encontrar información vasta acerca de lo que se está haciendo en este campo en México. Mucha de los conceptos, estrategias de intervención, investigaciones y demás, provienen de otros países como Estados Unidos y España. Lo anterior resulta preocupante, pues pareciera que los temas de integración y necesidades educativas especiales, en años pasados, y los de inclusión y barreras para el aprendizaje actualmente, sólo fueran términos obligados a utilizar por las políticas educativas para intentar estar a la par de otros lugares del mundo, y no fueran objetivos claros, ya no sólo del sistema educativo, sino de la sociedad en general. Por otro lado, hace falta concientizar a la sociedad para una aceptación y consideración en todas las áreas de aquellas personas que requieren de ciertos apoyos para una vida más digna, no sólo con infraestructura y adecuaciones viales, educación de calidad y actividades recreativas, sino también en la esfera laboral: donde tengan más oportunidades de encontrar empleos bien remunerados que les permita, en lo posible, gozar de autonomía.
Es decepcionante encontrarse con leyes y normas que sólo se quedan en un
cúmulo de palabras que no permiten informar con claridad y sencillez a la mayoría de las personas sobre el área de inclusión. Así mismo, es desalentador que mucho de lo que habla la psicología enfocada al área de las Necesidades Educativas Especiales sea sólo teorías y paradigmas. Da la impresión de que se estuviera tratando un tema utópico, que sólo se queda en páginas y no hay una aplicación propia y real dentro del entorno educativo, pues no todos los niños con estas características están siendo educados y no todos los niños inscritos en las escuelas están siendo atendidos conforme a sus necesidades y estilos propios de aprendizaje.
Es importante que América Latina en general y México en particular, se
enfoquen de una manera más comprometida al área de las Necesidades Educativas Especiales, no sólo con contribuciones filosóficas acerca del derecho inherente del ser humano a la educación, sino en una investigación aplicada que tenga como objetivo mejorar los aprendizajes de cada uno de los alumnos de acuerdo al propio contexto cultural. Tal como menciona Rodríguez (2005), la investigación es una tarea que se ve influenciada por el contexto económico y político donde se desarrolla; probablemente esta sea la causa principal por la que no hay mucha proliferación dentro del campo en el territorio mexicano. Si bien es cierto que, por la naturaleza propia y características únicas de cada sujeto, es imposible contar con un manual o con unas directrices propias para cada una de las necesidades educativas, sin embargo, las líneas de investigación en el campo debieran estar orientadas a encontrar información que pudiera dar resultados en beneficio del alumnado y del profesorado.
Pese a lo anterior, se están realizando investigaciones en torno a las
creencias y percepciones que tienen los docentes del aula regular con integración de niños con NEE respecto a las mismas. El trabajo de Muñoz (2009), es un ejemplo de ello, el cual fue llevado a cabo en escuelas de educación regular en Chile. La investigación trajo como resultado que los docentes que tienen a su cargo a niños con dificultades para el aprendizaje, muestran diferentes percepciones y actitudes respecto al avance y posible éxito de éstos. Por ejemplo, algunos de ellos demuestran una especie de compasión y sobreprotección que no permite que el alumno se desenvuelva más ampliamente y que desarrollo su potencial. Por el contrario, también existen profesores que muestran una actitud de indiferencia, rechazo y bajas expectativas hacia este tipo de alumnos, lo que trae consigo no integración del alumno. Ambos tipos de profesores coinciden en que los alumnos con estas características deben estar siendo atendidos en aulas especiales. Esta investigación se realizó en cuatro centros educativos a partir de observación no participante y entrevista para la recolección de la información.
Otra vertiente en la investigación de las Necesidades Educativas Especiales
es aquella que se enfoca en los resultados de un programa determinado. Aunque la tendencia actual es hablar de inclusión y no de segregación, es interesante aprender acerca de las consecuencias que tuvieron los programas de integración a largo plazo en los alumnos. Ejemplo de ello habla el estudio cualitativo llevado a cabo por López (2014), donde a partir de entrevistas realizadas a cuatro estudiantes, diagnosticados con incapacidad intelectual leve, que en su momento recibieron educación en aulas especiales, se indagó acerca del éxito que tuvieron en su proyecto de vida de cada uno de aquéllos. Se encontró que los cuatro estudiantes coinciden en que el programa integrativo tuvo repercusiones negativas y de discriminación, influyendo en su autoestima al sentirse rechazados por no contar con las mismas oportunidades que los otros estudiantes considerados como “normales”. En estas personas se encontró que en un principio tenían la expectativa de lograr estudios universitarios como los demás niños; sin embargo, con el paso del tiempo y al sentirse comparados con los demás alumnos, fueron perdiendo las esperanzas de lograr sus metas. Ambos sujetos califican la experiencia educativa como negativa.
Si bien la investigación mencionada en líneas arriba refiere a los resultados
de un programa de integración, también pueden llevarse a cabo investigaciones de esa naturaleza para medir los frutos a corto plazo de las nuevas tendencias en atención a la diversidad. Es importante hacerlo porque permite reorientar los programas en caso de que los resultados no estuvieran teniendo el efecto esperado. Ejemplo de ello es el estudio llevado a cabo por González, Ruiz y Delgado (2011) respecto a los efectos de un programa de intervención temprana de lectoescritura en niños con dificultades de aprendizaje. Considerando que son frecuentes los problemas para la adquisición de la lectoescritura en muchas de las dificultades de aprendizaje, y que esto genera un bajo rendimiento académico y la deserción escolar, se llevó a cabo un programa de intervención temprana en niños españoles en edades de 5 a 7 años, con el objetivo de adelantar la lectoescritura y contribuir al desarrollo fonológico. El diseño fue longitudinal; los resultados obtenidos se compararon con niños que no tuvieron la instrucción temprana, encontrándose que los primeros tuvieron un mejor desarrollo en la adquisición de la lectoescritura en la etapa escolar. Este estudio concuerda con otros que se han realizado en otras lenguas, concluyendo que la intervención temprana es una herramienta de prevención para las dificultades de aprendizaje. Aquí es importante mencionar que, para llevar un programa de intervención temprana con el objetivo de prevenir dificultades de aprendizaje, es necesaria una atención a los niños desde edades tempranas y una comunicación entre varios profesionales. Por ejemplo, una buena evaluación médica es importante porque contribuye a encontrar déficits en el desarrollo neurológico de los niños. No obstante, no se trata sólo de dar un diagnóstico y de determinar causas, los profesionales médicos deben orientar acerca de las áreas de oportunidad, con el objetivo de que los educadores y los especialistas en educación especial puedan orientar estrategias adecuadas para cada dificultad en específico. No todas las dificultades pueden pronosticarse desde el área clínica, existen otras que sólo se detectan cuando el niño entra en contacto con el ambiente escolar. Por ello se requiere padres y cuidadores conscientes de lo beneficioso que es la educación temprana, pues si un niño que ingresa al preescolar en edades tempranas, tiene la posibilidad de que los educadores puedan detectar alguna necesidad, y de esa manera encontrar alguna estrategia e implementar un plan que prevenga otras dificultades en edades y cursos escolares más avanzados.
Siguiendo con los programas de intervención y sus efectos, también se
encuentran aquellos que se enfocan a los programas de tutoría entre iguales, como el de Moliner, Moliner, Ribés y Trilles (2015), que analizaron los resultados de un programa entre pares con el objetivo de fomentar la inclusión intercultural. Aquí la meta no era enfocarse en dificultades de aprendizaje, sino en los diferentes contextos culturales de los que provienen los niños. Los resultados demostraron que hubo más socialización y además se fomentó la lectura, conocimiento de palabras nuevas en todo el grupo, lo que trajo consigo un buen clima de grupo, participación de las familias para preparar las lecturas y el trabajo colaborativo.
Otra de las temáticas que interesan actualmente en el campo de las
Necesidades Educativas Especiales, es el de la autoestima. Trabajos como el de Amaro (2015), se enfocan en orientar actividades para que los niños conscientes de sus Necesidades Educativas Especiales, fomenten su autoestima a través de prácticas artísticas. También es de interés analizar el grado de autoestima en los padres de niños con discapacidad, pues se considera que un ambiente familiar saludable también es importante para el desarrollo de los niños, tal como se muestra en el estudio de Sánchez (2015) desarrollado en Perú.
Las investigaciones antes mencionadas han abordado algunas líneas de
investigación de la psicología en el campo de las Necesidades Educativas Especiales. Como puede observarse, el interés se centra tanto aspectos sobre la evaluación de programas de integración desde la perspectiva del alumno, investigaciones sobre el entorno emocional tanto de la familia del niño como de éste, sobre estrategias de inclusión, intervención temprana para evitar riesgos futuros y creencias y expectativas de los docentes respecto a los niños con Necesidades Educativas Especiales. Los temas son muchos y tanto se parte del paradigma cualitativo como del cuantitativo, así como el paradigma investigación- acción.
La psicología como ciencia de interfase entre las ciencias sociales y las
ciencias naturales se hace necesaria para atender el área del as Necesidades Educativas Especiales, pero no es única. Requiere de la aportación de las otras disciplinas para obtener resultados que beneficien a los alumnos con NEE. La ciencia psicológica tiene la gran ventaja de conocer gran parte del lenguaje que se manejan en las otras ciencias, lo que le permite una buena comunicación multidisciplinar. No obstante, esta misma ventaja se vuelve una especie de confusión: no hay una actividad propiamente delimitada del campo de acción e investigación de la ciencia psicológica en esta área, lo que trae como resultado no encauzarse a unas pocas líneas de investigación, sino por el contrario, abarcar muchos temas, sin tener una secuencia ordenada de algunos en particular. Si bien es cierto son muchos los aspectos los que interesan dentro del área de la atención a las personas con Necesidades Educativas Especiales, pero también es importante seguir pocos rumbos para que haya continuidad en la investigación y por ende, resultados comprobados que puedan aplicarse para mejorar la vida de las personas. Además, no hay actividades claras y específicas de acción del psicólogo del campo de las NEE como otros profesionales relacionados en el campo como son los médicos, los fisioterapeutas, los trabajadores sociales y los educadores; pareciera que la psicología sabe “de todo un poco, pero a la vez de nada”. No obstante, esa misma característica la convierte en un puente de comunicación entre las otras disciplinas, lo cual es beneficioso, pero es necesario comenzar a delimitar ciertas áreas para que haya una formación definida para los futuros psicólogos de esta área. Aún así, hablando de esas dificultades, el psicólogo es una figura necesaria para la atención de ese sector de la población, pues su formación en el estudio de la conducta humana contribuye para estudiar detalladamente en muchos de los aspectos, a las personas con NEE, a sus familiares y a la sociedad que rodea a éstos. De tal manera que haya una evaluación detallada acerca del comportamiento del alumno tanto en el aula, la casa y su entorno social. Así mismo, una evaluación de los otros agentes como los familiares, los maestros, las instituciones y la sociedad. Con una evaluación completa pueden proponerse programas de intervención exitosos en los niveles educativos, sociales y laborales. La idea no es sólo enseñar, sino educar para la plena inclusión social.
Además de intervenir directamente en el niño y la familia de éste, es el
psicólogo la persona indicada para contribuir a la educación de la sociedad en la aceptación de las personas con NEE. Se requieren de programas concienciadores sobre la inclusión de todas las personas, y es ahí donde el psicólogo puede proponer estrategias para informar a los demás. También, es el psicólogo el que debe trabajar con los familiares para la aceptación de los hijos con características especiales. Un entorno familiar sano solo se da cuando todos los miembros están en condiciones favorables, y ese entorno familiar sano es necesario para que los niños se desarrollen adecuadamente.
Importante también es el psicólogo para trabajar con los docentes, pues
muchos de ellos todavía esta permeados de ideas segregadoras, están convencidos de que no pueden atender a personas con discapacidad. Al parecer se debe a una falta de información que conlleva a los educares a un miedo hacia las Necesidades Educativas Especiales. Es arduo el trabajo que se tiene que hacer en este aspecto, pues muchos de los docentes en servicio fueron capacitados bajo el enfoque de la integración, de la atención especializada. Aunado a ello, siguen concibiendo a la educación como un medio para transmitir los conocimientos acumulados durante los siglos. No ven a la escuela como el medio para enseñar a los alumnos a aprender. Por ello es difícil que tengan buenas expectativas sobre el alumnado con Necesidades Educativas Especiales.
En realidad, el Campo de las Necesidades Educativas Especiales es muy
amplio y muy difícil de definir. A partir de lo aprendido en los semestres anteriores he podido observar que hay mucho trabajo por desarrollar, pero también hay muchas limitaciones. Pareciera que no hay la información suficiente, y eso es debido a que hay un número casi infinito de necesidades educativas, pues aunque muchas características se engloben en una determinado déficit o dificultad, las variables del ambiente en el que se desenvuelve un niño configuran las cosas de manera distinta. Debo confesar que, pensaba en un principio que iba a encontrar información específica sobre como intervenir en niños con Síndrome de Down, en niños de espectro Autista, en niños con TDHA, etc. No obstante, descubrí que las necesidades son muchas y que por ello los módulos no son suficientes en tiempo para abordar cada una, por lo que el psicólogo enfocado en esta área debe ser un profesional que tenga gusto de la investigación, que continuamente debe actualizarse sobre los nuevos programas de intervención y sobre alternativas de evaluación. El psicólogo del área de las NEE, debe ser un profesional que tiene que buscar información específica para ayudar a una determinada persona, pues no hay recetas específicas, debido a que cada individuo es único en el universo, configurado por su contexto.
Concluyo que el Campo de las Necesidades Educativas Especiales es muy
amplio y que es casi imposible decidir sobre qué área falta renovar. la investigación se centra sobre muchos aspectos, lo que quiere decir que hay un interés sobre todas esas áreas. No obstante, creo que en la práctica las escuelas debieran considerar más como Necesidades Educativas Especiales aquellas que están ligadas a la conducta emocional. En el aprendizaje se requiere que el alumno esté con disposición para el mismo y muchas ocasiones esta disposición no está al cien por ciento debido a dificultades emocionales que están presentes en los alumnos, lo que trae como consecuencia bajo rendimiento escolar, además de poca socialización o de relaciones sociales no correctas en el aula. Pareciera que en las escuelas no se está poniendo atención a este detalle, no se está observando a los niños y jóvenes aislados, callados, aquellos que no perturban el ambiente escolar. Por otro lado, los alumnos con problemas de conducta son detectados por la presencia de incidentes en los que se ven involucrados, pero no se consideran del todo como alumnos con necesidades educativas especiales, aunque la conducta esté relacionada con las bajas calificaciones y con el desinterés en el aprendizaje. Creo que se debe tomar más en cuenta a los alumnos que atraviesan por dificultades emocionales.
Por último, como lo mencioné en un principio, en México debe trabajarse más
en esta área, pero no solo desde la psicología, sino que el Estado debe comprometerse más para ofrecer oportunidades de desarrollo a este tipo de personas. Los conceptos no sólo deben quedarse en el discurso, sino que deben verse reflejados en los apoyos materiales a las escuelas, en la contratación de equipos multidisciplinarios suficientes para atender las necesidades, en programas orientados a educar a la sociedad, en políticas que involucren a más empresas para ofrecer trabajos a personas con discapacidad, en seguimiento sanitarios a los niños que nacen, y también en recursos enfocados a la investigación en esta área. Es el Estado quien debe ofrecer el espacio para desarrollar al máximo esta área. Referencias Amaro, M. (2015). Desarrollando la autoestima a través de la Educación Artística para la paz y convivencia con niños y niñas de Necesidades Educativas Especiales. Revista de Estudios en Sociedad, 8, 47-52. Recuperado de https://revistaselectronicas.ujaen.es/index.php/RTC/article/view/3110/2482 González, M., Ruiz, I. y Delgado, M. (2011). Intervención temprana de la lectoescritura en sujetos con dificultades de aprendizaje. Revista Latinoamericana de Psicología, 43 (1), 35-44. http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120- 05342011000100003&lng=en&nrm=iso&tlng=es López, V. (2014). Discriminación y segregación: efectos de la integración escolar sobre los proyectos de vida de estudiantes egresados de escuelas municipales que participaron en proyectos de integración escolar. Revista Latinoamericana de Educación Inclusiva, 8 (2), 69-83. Recuperado de http://www.rinace.net/rlei/numeros/vol8-num2/art3.pdf Moliner, O., Moliner, L., Ribès, A. y Trilles, V. (2015). Análisis de los elementos de la tutoría entre iguales que posibilitan avanzar hacia la construcción de una escuela intercultural inclusiva y democrática. Revista Latinoamericana de Inclusión. 9 (2), 41-58. Recuperado de http://www.rinace.net/rlei/numeros/vol9-num2/art2.pdf Monzón, G. (2011). Asesoramiento hacia la escuela inclusiva y formación en centros. Revista Interuniversitaria de Formación de Profesorado, 70 (25), 111-126. Muñoz, X. (2009). Representaciones y actitudes del profesorado frente a la integración de niños con necesidades educativas especiales en el aula común. Revista Latinoamericana de Educación Inclusiva, 3 (1), 25-35. Recuperado de http://www.rinace.net/rlei/numeros/vol3-num1/art2.html Rodríguez, A. (2005). Investigación sobre Necesidades Educativas Especiales: ¿qué y cómo investigar en educación especial? Electronic Journal of Research in Educactional Psychology, 3 (5), 97-111. Sànchez, I. (2015). Diseño de la escala de autoestima en los padres de familia con hijos con NEE, distrito de los olivos, Lima (Tesis de licenciatura). Universidad Cesar Vallejo, Lima. Recuperado de http://repositorio.ucv.edu.pe/bitstream/handle/UCV/1175/Inga_SEL.pdf?sequence= 1&isAllowed=y