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50 LA RED POSTAL DE COLOMBIA


PRIMERA EDICIÒN VENCE 27-MAY-2018

malas costumbres, buenos pensantes


El Bohemio

9 72250 32459
contenido
ABRIL 2018

critica
literaria
resenas

literatura
creativa
cuentos y poema s

analisis
literario
entrevistas

entretenimiento
pa s a t i e m p o s
En estos días conocí una de las múltiples personalidades que componen nuestra enrevesada e intrin-
cada sociedad, como si no fuera tan compleja después de todo. La bohemia, la gente bohemia, el arte
bohemio, es un estilo de vida intelectual, apasionada, impetuosa y franca, muy atenta a los detalles
porque los ama y con un espíritu libre y creador. Me entró demasiada curiosidad esta cultura tan
extrovertida que, en seguida, dediqué mi tiempo a “Googlear” imágenes de personas de esta
c o r r i e n t e .

Bellas féminas con accesorios naturales y ropa diseñada al estilo gitano, con grandes gorros
negros, muy distinguidos; collares de grandes cuentas redondas y ganchitos dorados; personas con
un “look” despreocupado y sencillo, pero a la vez elegante, marcando el estilo, la mayoría con
gorros redondos (algunos con boinas), pañuelos rodeando el cuello, mayormente con chaquetas
oscuras y camisa blanca o neutral. A todo esto, vi poca referencia a las artes y la literatura, pero
entre esas pocas migajas de la bohemia intelectual y romántica, encontré una que atrapó mi aten-
ción y me enamoré más de la idea bohemia.

Muchas veces vemos este término y no sabemos en realidad qué significa. El punto es que este
concepto, a veces algunos lo infieren, y otros sencillamente le dan una mala interpretación. Así fue,
que, al ver esa imagen, despertó este interés en mí por este estilo tan particular y reservado de
todos los demás existentes. Percibí cierta conexión con lo que plasmaba dicha fotografía, pues creí
haber encontrado el vocablo con el que podría referirme a mi forma de ser. Buscando, encontré en
la web la siguiente definición: “Una persona bohemia es romántica, idealista, vive al margen del
común denominador de la sociedad y no le interesa su estatus social. Posee sensibilidades hacia lo
verdaderamente bello de la vida por más sencillez que las mismas evoquen, aprecia las marcadas
sinfonías musicales y las mágicas pinceladas de las obras artísticas, disfruta una conversación con
el prójimo o alguien que guste de la prosa. Es alguien que se deleita en los análisis filosóficos, tiene
estilos y modismos propios. Es también, aquel que se encuentra rendido en el desorden de ideas que
impulsen sus metas personales y estima espontaneidad al expresarse.”

Como tal, es ser amante de la vida y llevarla llanamente. Pero no. Ser bohemio no implica alcanzar
la perfección, ni estar cercano a su alcance. Es la clase artística por decirlo así, con ciertos valores
y pasiones interiores. Todo esto lo vi en aquella muchacha que posaba con frescura en la foto. Solo
piensen: liberal, atenta a las letras, al raciocinio, al arte, sencilla… un ser en búsqueda de emocio-
nes agradables y de sensaciones profundas. Y, de alguna manera, el movimiento de defensa del
medio ambiente puede ser visto como bohemio. Pues, sin duda alguna, tiene un sentido de sacrifi-
cio, pureza, misión y de renuncia.
Eso significa para mí. Eso significa para nosotros.

Sean bienvenidos a nuestra revista.


Grupo de editores de El Bohemio.
Isabela Herrera Duque
Nacida el 11 de Octubre del 2002, Cali, Valle del Cauca. Esta adolescente de 15 años, ha aportado a la
creación de la revista literaria El Bohemio, con la autoría de ‘La princesa del sol’ y del análisis
de una de las obras más conocidas de Gabriel García Márquez: ‘El coronel no tiene quien le escriba’.
Entre sus grandes pasiones se encuentran: leer, escribir, estudiar, así como también, el
cine y compartir con sus amigos. No es de las personas que creen en estereotipos y siempre busca
marcar una diferencia.

Manuela Montero Muñoz

Nacida el 18 de Febrero del 2002 en la ciudad de Cali, Valle del Cauca. Esta adoles-
cente de 16 años, ha aportado a la creación de la revista literaria El Bohemio, con la
autoría del cuento fantástico ‘¿A dónde se fue la sombra?’ y de la reseña literaria
titulada ‘Canción de Navidad’. Entre sus pasiones se encuentran: la moda, el diseño y las
manualidades. Tiene una personalidad muy creativa, y tiene la virtud de percibir ideas
desde ángulos y perspectivas diferentes.

Ana Sofía Mesa Cardona

Nació el 5 de Noviembre del 2002 en Cali, Valle del Cauca. Ella participó en la creación de
la revista El Bohemio desde una perspectiva creativa sin dejar de lado la formalidad.
Conocida por el amor y el arte y su mentalidad libre, escribió cuentos como ‘El
hombre vestido de lila’ y el poema ‘La madre de todo’ que la representa en su totalidad.
Sus pasiones son la lectura, la escritura, el cine y el teatro; todas afines al acto recreativo
que le permite tener una pizca de bohemia en su personalidad. En ella se refleja que
una persona responsable no siempre tiene que ser cuadriculada ni aburrida y que
los estereotipos n siempre se aplican de igual forma en cada ser.

Juan Alberto Castro Granada

Nacido el 13 de Noviembre del 2001 en la ciudad de Pereira, Risaralda. Este jóven


de 16 años, ha aportado a la creación de la revista literaria El Bohemio, pues a pesar
de sus grandes habilidades y pasión por las ciencias exactas, tiene autoría de los textos
Un ‘Sinvergüenza de siete suelas’, ‘Soy’, ‘¿Por qué la cambiaría?’, ‘Existir sin estar’ e
‘Infidelidad, amor y un accidente’. Sus grandes pasiones son el fútbol y las mate-
máticas, en las cuales ejerce un dominio excelente. Por otro lado, es muy extrovertido,
carismático e interactivo, pues sus profesores concuerdan en que en él; “inteligente” y
“atento” no son sinónimos de “retraído” y “tranquilo”. Sus estudios iniciaron
en el Colegio Diana Oese, desde grado transición, hasta el día de hoy, donde cursa en
grado noveno.
Gabriela Arevalo Herrera

Nació el 13 de Junio del 2002, en Cali, Valle del Cauca. Con 15 años, es una joven apasionada por la
lectura, el arte y las ciencias sociales. Actualmente, cursa noveno grado en el Colegio Bilingüe
Diana Oese. Amante de los buenos debates, aporta a la creación de la revista literaria El Bohemio
con el ensayo titulado ‘Feminismo letrado: el empoderamiento femenino en la literatura’. Así
mismo, entrevista a los renombrados escritores Amparo Romero y Medardo Arias, en búsque-
da del fundamento tras su profesión y estilo de vida.

María Paula zuluaga Nieto

Nació el 18 de marzo del 2002 en la ciudad de Cali, Valle del Cauca. Desde sus cinco años estudia en
el colegio Bilingüe Diana Oese. Es apasionada por el arte: danza, actuación, poesía, fotografía,
entre muchas otras. En la revista El Bohemio publicó dos poemas titulados ‘La Sucursal’, donde
busca transmitir el amor hacia su cuidad y ‘El sendero’, una pequeña reflexión sobre la vida.
También aportó ‘Cine: arte o industria’, una reseña sobre el séptimo arte. Actualmente, María Paula
cursa grado noveno.

Johnattan David Ochoa Sanjuan

Nació el 28 de julio del 2002 en la ciudad de Cali, Valle del Cauca. Desde pequeño, mostró interés
y gusto por laliteratura. A los ocho años de edad, ya escribía cuentos fantásticos. Le apasiona el cine,
la actuación y la fotografía. Le gusta de igual manera la computación, y a la fecha ha desarrollado un
papel importante en la edición y grabación de varios videos académicos. Aportó a la revista El
Bohemio, análisis críticos de textos como ‘El Matadero’. Le divierte salir con amigos, ver pelícu-
las, leer buenos libros e ir al gimnasio en sus tiempos libres. No piensa seguir con el estilo
de vida ‘común’ que viven todos. Estudia desde los siete años de edad en colegio Bilingüe Diana
Oese, y actualmente se encuentra cursando el grado noveno.

Delfina Pilar Farías

Nació el 13 de Septiembre del 2001 en la ciudad de La Plata, provincia de Buenos Aires de


la república de Argentina. Desde temprana edad, ha fijado sus estudios colegiales tanto en Europa
como en Suramérica. Tiene gran interés por los idiomas, la literatura y las políticas internacio-
nales. Ha aportado a la creación de la revista El Bohemio con la autoría de ‘Cosificación de cosificar
la palabra cosa’ y de las reseñas tituladas ‘Sobre héroes y tumbas’ y ‘Martín Fierro’. En el ámbito
artístico; sostiene una enorme afición por la danza contemporánea, clásica y jazz. En 2015
ingresó a grado sexto en el colegio Bilingüe Diana Oese y actualmente está cursando noveno.
El Bohemio
Colegio Bilingue Diana Oese
are a editorial arte
JOHNATTAN OCHOA VALERIA CARDONA A.
EDISION Y DISEÑO
JUAN ALBERTO CASTRO
ANA SOFIA MESA
MANUELA MONTERO
JUAN JOSE MESA
ISABELA HERRERA DR. FOTOGRAFIA
ANA SOFIA MESA DELFINA FARÌAS
DIRECTORA GRAFIA, ARTE Y DIBUJO
MARIA PAULA ZULUAGA
GABRIELA AREVALO
DELFINA FARIAS

DIRECCION publicidad yJOHNATTAN


redes sociales
OCHOA
JOHNATTAN OCHOA
GABRIELA AREVALO RELACIONES PUBLICAS Y PROYECTOS
DELFINA FARIAS ESPECIALES
JUAN ALBERTO CASTRO
GABRIELA AREVALO
Directora de Lanzamiento
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Directora de Finanzas y administracion

produccion
Dirreccion : Cra 7 #10-250
Casa Editorial Del Bohemio
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CALI - COLOMBIA
Es más que probable que seas un adicto a la palabra “cosa”. Quien sabrá, tal vez hasta un esclavo.
De cualquier manera, esta tiene utilidad para absolutamente todo, pero a su vez para nada en con-
creto. Es decir, se apodera de la identidad de infinidades de objetos, acciones y sensaciones, pero
de cualquier manera te deja sumido en la indefinición. “Tengo una cosa rara en el estómago”,
“sentí una cosa en la piel”, “se interpuso una cosa enorme en el camino”, “la cosa no es decir

RESEN AS
sino hacer”, “tenemos muchísimas cosas por concretar”. ¿Qué cosa? ¿Un avión? ¿Una gota de
agua? ¿Molestar al profesor? ¿Asesinar al vecino? Esta palabra suplanta cualquier significado,
pero no hila fino.

Si bien hablar de la ‘cosa’ puede ser producto del habla corriente, no es menos cierto que su uso exagerado
puede causar disgusto. Aquellos que utilizan este vocablo con mucha frecuencia demuestran con claridad
su falta de recursos para hablar correctamente. Por tanto, cuando alguien no se acuerda del nombre de una
persona, un objeto o un hecho, con rapidez asombrosa dice: “¿Cómo se llama…?” Y luego de un silencio,
expresa: “…es que la ‘cosa’ o (aún peor) el ‘coso’…” ¡La palabra ‘cosa’ no se escapa de nadie! Los políticos
se pierden en sus ‘cosas’, los economistas, también; y por supuesto, aquellos que, supuestamente, deben
manejar bien el lenguaje: los locutores de radio y las presentadoras de televisión juegan constantemente
con el idioma, aunque todos quedemos cosificados… Y es que resulta que cosa significa todo.
Y si no pues pongamos nuestra atención a la RAE donde cosa es “Todo lo que tiene entidad, ya sea corporal o
espiritual, natural o artificial, real o abstracta” ya que, con esa definición, sin dudarlo, queda en los primeros
puestos del ranking de las palabras más empleadas en nuestra cotidianidad.

Yo, públicamente, reconozco mi adicción a este término. Y lo que es peor: he comprobado que la plaga se ha
apoderado de miles de personas. Millones, supondría. Y si no, escucha a tu alrededor. Escúchate a ti mismo, de
paso. Pues no hay excusas para que no nos invadan estos términos sin relleno, aparecen hasta desde los ángulos
más inesperados. Las ‘cosas’ como tal, están en un nivel superior. Para cuando tratas caer en cuenta ya han
llenado tu boca y tratas de buscar urgentemente un sinónimo que se resista surgir.
Obsérvalas, escúchalas y verás con certeza mi consideración. Por ello, insisto: si deseas transmitir y comunicar
tu proyecto con acierto, trata de evitar el uso de la palabra ‘cosa’. Por más que tenga una gran extensión semán-

RESEN AS
tica, estoy segurísima que tendrás otra en tu repertorio mucho más adecuada. Cuídalo, porque es vital ser breve
en tus intervenciones, y emplear el vocabulario correcto te ayudará a que los demás comprendan de un modo
más certero la aptitud en tus intervenciones e ideas. Puesto que, con el continuo uso de la misma, expandirá
aún más en pleno ‘cosismo’ al que nos exponemos diariamente por refugiarnos a la sencillez y simplicidad en
vez de fomentar nuestro ser con un léxico complejo.
En conclusión, no se trata de ser purista, pues es evidente que el idioma es un ser vivo, pero pongamos cada
tema en su lugar: llamemos cosas a los objetos, y personas a las personas. De cualquier forma, tengo que reco-
nocer que la palabra en ocasiones es perfecta y difícilmente sustituible, pues claramente, ¡hay cosas que simple-
mente son cosas!

FARÍAS, Delfina: El cosismo de cosificar la palabra cosa.


Para revista El Bohemio, 2018.
El éxito del cine es una cuestión muy interesante, pues está unido al acto de sociabilizar, divertir y cultu-
rizar inherente al ser humano. La curiosidad alimenta un manantial de experiencias sensoriales ilimita-
das. Es así que, a través del bien llamado séptimo arte, podemos conocer innumerables mundos, tanto
imaginarios como reales. Todos nuestros sentidos se activan para capturar de la gran pantalla aquello
que creemos, queremos, nos asusta o nos cautiva.
Es casi mágico y fetichista querer conservar en nuestra retina la satisfacción visual de la proyección.
Películas que recordamos días, semanas, años, que forman parte de nuestra vida y hacemos nuestras se
apoderan de nosotros y nos permiten destacar la presencia de un genio creador, un fenómeno sobrenatu-
ral al que admiramos y rendimos tributo fielmente en cada nueva obra concebida.
En el texto ‘Cine: Arte o Industria’, escrito por Ruth Del Prado Sandoval, se justifica que el séptimo arte
puede ser visto de dos maneras; la primera: el cine como industria o negocio; y la segunda: el cine como
una expresión artística. A partir de ello, Ruth afirma que no todo cine es arte y no todo arte es cine. Esto
significa que pueden existir grandes producciones con un buen contenido artístico o películas indepen-
dientes con un gran éxito en las taquillas. A través de su lectura, se puede identificar la precisión y certe-

RESEN AS
za en la narración, cuya finalidad es la de manifestar los orígenes y principios del cine relacionado tanto
con el arte como la industria.
El texto fue escrito en un ambiente universitario en un contexto auténtico donde se emplea un léxico
complejo y bien estructurado.
Cine: Arte o Industria está partido en cuatro secciones que Del Prado utiliza para exponer y definir ambos
conceptos. Nos introduce en la lectura estableciendo la finalidad de su redacción a través de la explica-
ción de cómo empezaron las productoras del cine y cómo fueron creciendo hasta llegar a ser lo que son
hoy en día.
alternativo y lo minimalista, es arte y lo restante es industria. Ruth establece cómo nacen personas del
séptimo arte han sido producto de la basura que no han conseguido empañar de su esplendorosa carrera.
Luego, nos sumerge en el mundo cinematográfico como movimiento artístico y contextualiza al lector con las
diferentes doctrinas que han influenciado este género. Por medio de este escrito, se desmonta la idea genera-
lizada de que lo en definitiva, el cine es una industria muy importante. Brinda labores a miles de personas
y a su vez mueve mucho el interés monetario conforme en nuestra sociedad.
Pero, también existe el cine influenciado en arte en el siglo XX. No obstante, no se podría definir con certeza que
todo cine es arte, aunque toda obra cinematográfica tenga una identidad cultural. Están aquellas películas pési-
mas, trágicas, admirables y graciosas, pero todas ellas simplemente son una representación simbólica que nace
de nuestra forma de interpretación.

En el mundo, se trata de hacer cine, y a


su vez llenar las salas. No todas las pelí-
culas logran llegar a la mayor audiencia
que sus productores estiman, por tanto,
se realizan películas comerciales porque
debemos comprender al cine como parte
de la industrialización cultural: que es un
negocio.
En conclusión, considero que Ruth por

RESEN AS
medio de su escrito logró instaurar su
pensamiento con certeza de que en esta
sociedad prima una imagen espectacular,
fugaz y sin contextualización, en la que el
arte cinematográfico ha ganado enteros a
favor de esas demandas.
Pues es por ello que el cine actual no es
más que un arte industrializado en la era
de la globalización, del consumismo más
feroz y de la inmediatez en la que vivi-
mos. Pero todavía no ha perdido ese
resplandor exquisito que le protege y lo
consuma como el séptimo arte que es.

ZULUAGA, María Paula: Reseña de El ci ne: arte o industria.


Para revista El Bohemio, 2018.
Francisco Valiente
es un casanova del siglo XXI.
Destacado por ser un refinado villano y
farsante con un ego desorbitante que tiene la
capacidad de deslumbrar a eruditos, seducir mujeres y ser el
recuerdo de cada una que ha desvirgado, saquear a los ricos, engañar a los
listos y corromper a la política. Todo esto digno de su
propio beneficio. Sin embargo, a pesar de anhelarlo, sigue
insatisfecho, pues aquello que plenamente es de su impor-
tancia, no lo tiene: su primer amor. Es de esta forma en la
cual la autora nos plantea un juego literario, donde no nos
da todas las cartas del juego del protagonista, sino que nos
da las fichas de un rompecabezas que solo se descubre su
solución hasta llegar al final del libro, donde la ficha más

RESEN AS
importante de la vida de Francisco es finalmente hallada:
Alma.
Con una narrativa llena de sensualidad, pasión erótica y
humor, Memorias de un sinvergüenza de siete suelas sitúa
al lector frente a la narración de tres flujos de sentimien-
tos muy marcados y singulares que lo llevan a asistir a un
entierro que cogrega a las personalidades sociales, y polí-
ticas, más importantes del lugar, y despierta odio y
amores por igual y sin disimulo.
De todas formas, lo que no es imaginado, es que él también las está viendo y escuchando, por
lo cual tendrá mucha voz en su propio entierro, pues responde a la realidad de la vida misma.
A través de su lectura aparece la voz de Morgana, la esposa. Ella es quien trasmite el odio y rencor. Luego
surge la de Alma, la eterna amante, representando el máximo amor: todo lo justifica y lo perdona. Y por
supuesto, la de él. En este triángulo amoroso los sueños, la pasión, el odio y el erotismo son llevados al
límite. El adulterio y la frustración, los engaños y las dobles vidas, los egos y miedos, el triunfo y fracaso son
narrados por la autora con ironía y un gran sentido del humor. Sobre todo, la narración de las distintas
voces, recaen bajo la influencia de sus propios sentimientos y emociones en una misma historia: la de este
sinvergüenza casanova.
Ángela Becerra, autora de Alma abierta, De los amores negados (2003) y El penúltimo sueño (2005), abando-
nó la mitad de su vida laboral en Colombia en el sector de comunicación para enfocarse en su gran afición:
la literatura. Es así como, por medio de esta obra, ella narra la típica historia del niño pobre y sin recursos
que pone los ojos en la niña rica y perfecta, que terminará por llevarlos por caminos en los que sólo encon-

RESEN AS
trarán sufrimiento. Por lo tanto, es a partir del dolor que le produce el hecho de nunca poder tener a Alma,
que Francisco empieza a hacer uso de toda su inteligencia y su encanto físico para convertirse en el hombre
rico y poderoso, cuya muerte tiene un impacto inmediato en toda Sevilla.
Para concluir en un análisis profundo, cada uno de los protagonistas profundizará en los ángulos más ínti-
mos y descubrirá cómo la frustración, la sed de venganza y el resentimiento los han ido consumiendo con el
único fin de conservar las apariencias que han ido tapando su corazón de sentimientos. Por más que esta
transcurra en España, lo realmente interesante es lo universal que se siente, ya que puede ser una historia
que ocurra tanto en el ‘allá’ como en el ‘aquí’, debido a que se basa en el sentimiento más influenciador y
poderoso de todos los existentes: el amor.

CASTRO, Juan Alberto: Reseña de Memorias de un sinvergüenza


de siete suelas.
Para revista El Bohemio, 2018
EL
Han pasado 174 navidades desde que se publicó ‘Canción de Navidad’, novela que ha
sido traducida a múltiples idiomas y adaptada a un sinnúmero de formas, cautivando
en cada una de ellas a lectores, cinéfilos y cineastas por igual; de ahí su carácter
inmortal. La mezcla de comedia y terror es un tema axial en todo el mundo de fanta-
sía de Dickens; mundo que nunca se aleja demasiado de la sombra de la muerte. Cier-
tamente algunas de las escenas más brillantes y divertidas basan su humor y patetis-
mo en esa consciencia permanente de la mortalidad.

CANTICO
Este libro tiene la capacidad de transportar a sus lectores al mundo en el siglo XIX,
principalmente a lo que era el Reino Unido durante la época victoriana; período mar-
cado por el capitalismo industrial en el que se presenciaron grandes injusticias socia-
les sufridas por las clases sociales menos favorecidas. Dickens, conmovido por la gran
cantidad de niños que vivían en la miseria y trabajaban en condiciones terribles,
planeó publicar un panfleto político, pero cambió de opinión, ya que se dio cuenta de
que la forma más efectiva de hacer llegar a una mayor cantidad de población sus preo-
cupaciones sociales sobre la pobreza y la injusticia era escribiendo una profunda

DE
historia navideña y así se concibió ‘Canción de Navidad’.
Canción de Navidad es un acierto de tono, el cual se establece en los primeros párra-

RESEN AS
fos del relato: “Es el tío solterón, alegre y bonachón que se sienta al otro lado del
hogar para contar un cuento en un día festivo”. La broma de “no turbar la sabiduría
de nuestros mayores con mis manos pecadoras” no da una idea del tono que emplea-
rá el narrador. La historia continua con este estilo coloquial, salpicada de bromas,
chistes y descripciones tan precisas que dan una impresión abrumadora de la proxi-

NAVIDAD.
midad del narrador.
La obra posee unas características a resaltar, tanto estructurales como de carácter
implícito. Como dijo John Mil, un importante filósofo, político y economista inglés:
“Después del egoísmo, la principal causa de insatisfacción ante la vida es la falta de
cultivo intelectual”. Considero que esta frase recopila todo lo que buscaba Dickens en
su obra. Esto era permitirle al lector un análisis psicológico de la moral humana que
se reflejaba en distintos aspectos que van desde el egoísmo has ta la generosidad, sin
dejar nunca de cultivar su aspecto intelectual.

MONTERO, Manuela: Resena de El Cantico de navidad.


Para revista El Bohemio, 2018
Quizá los olores evoquen el privilegio de la invisibilidad. Antes del tacto,
sucede el olor, como mensajero de una esencia que sabe desaparecer en el
aire y ser agente de un gran poder. La seducción que despliega el olor es
implacable: se instala en nosotros y sella su poderío en los tejidos de la
memoria. Por esta razón, ‘El perfume’ es un clásico que cualquier persona
letrada y aficionada con la lectura debe tener entre su colección, así no sea
su estilo de narración. El autor tiene una magia especial: consigue sumer-
girte de lleno desde la primera página a través de sus descripciones muy
detalladas, pero nada tediosas.
Inicia con la historia de Jean-Baptiste Grenouille: uno de los hombres más
imponentes y abominables de la historia, pero grotesco y repulsivo a los
ojos de las mujeres. Es, gracias a su prodigioso sentido del olfato, el mejor
elaborador de perfumes de todos los tiempos y percibe todos los olores del
mundo.
Desde fragancias que todos conocemos y que sabemos reconocer en cuanto aparecen, hasta aromas que el
olfato humano no es capaz de captar y que nosotros nunca hemos experimentado. Todos ellos, están perfec-
tamente identificados en este libro, y tan bien descritos que el lector no tiene ningún problema a la hora
de imaginárselos.
En cuanto a la sinopsis del relato, se centra en la psicología del protagonista, en su evolución personal y en
el porqué de sus actos. Deja un buen sabor de entrada, la historia siempre te incita a leer más y más, pero
llega a un punto en la cual se vuelve pausada y los acontecimientos se dan paulatina y sosegadamente; como
con la aparición de Grenouille en el relato como ermitaño. Además, las descripciones eternas de la vida en
las montañas no son de mucha relevancia, pues, aunque aporten en gran parte al desarrollo de la historia
y del personaje, se pudo haber redactado con menor precisión para evitar la desmesurada extensión de
páginas (sin bajarle el nivel de la narrativa ni poniendo en juego el desenlace de esta misma).

Patrick Süskind consiguió un gran éxito internacional gracias a su


novela El Perfume (1985), obra traducida a más de 46 idiomas y que le
supuso convertirse en un auténtico superventas en prácticamente todo
el mundo. En 2006, el director Tom Twyker llevó la novela al cine en
una película del mismo nombre. El hecho de usar el olfato como tema a
explotar en el libro es ingenioso al ser el único sentido no explorado en
ninguna novela como lo fue en la escrita por Suskind, agregándole que
la perspectiva con la que fue abordada el texto fue acertada al darle al
lector una experiencia única y mágica a través de la retorcida mente de
Grenouille.
Por otra parte, fue interesante como se normalizaron y hasta se volvieron románticos elementos que
generalmente son alarmantes, como lo fue el asesinato provocado por Jean-Baptiste de la víctima
hallada el día de los incesantes fuegos artificiales. La forma seductora y fascinante en la que el autor
lleva al lector a la profunda reflexión del vacío existencial, las ansias de poder, la soledad, el problema
identitario del sujeto y otros muchos aspectos brotan de la obra de una manera discreta, pero a la vez
impactante, donde en cualquier caso no es difícil acabar sintiendo cierta compasión por este asesino
en serie tan castigado por la vida.
En conclusión, sería pertinente
mencionar que este libro puede
tener una trama sin trasfondo
para algunos lectores, pero
ninguno de ellos puede llegar a
afirmar que la forma en que la
novela está contada es de baja
calidad en cuanto al léxico y
retórica empleada. Este libro no
es un clásico solo porque sí; es
por el mérito que se gana ese
título ya que ha sido uno de los

RESEN AS
mejores ºbest-seller publicados
por la elevada inversión econó-
mica que se la ha dado a la porta-
da y no al contenido.

MESA, Ana Sofía: Reseña de El Perfume.


Para revista El Bohemio, 2018.
Era 1982. Un escritor hispano llamado Gabriel García Márquez, recibe el
premio Nobel de literatura por su obra “Cien años de soledad”; obra con
la cual popularizaría el estilo narrativo que él mismo patentó (por no
decir inventó) –el realismo mágico– estilo con el que trata diestramen-
te una realidad en la que los límites entre lo verdadero y lo fantástico se
desvanecen muy naturalmente. Es de aclarar que, en este texto, no pre-
tendo elogiar más a “Cien años de soledad”, pues considero que, con
justas razones, ha sido alabada lo suficiente. En cambio, pretendo anali-
zar, tal vez aplaudir, la maravillosa novela corta “El coronel no tiene
quien le escriba”; digo corta, no por simple arbitrariedad, puesto que el
propio García Márquez reconoció, tras escribirla, que era la más simple
de las novelas que había escrito sin dejar de expresar que tenía la con-
vicción de que era su mejor libro.
En su obra logra en tan solo 92 páginas plas-
mar la realidad de la vida en Colombia, con

RESEN AS
una estructura racional y mediante recursos
literarios que van desde la semántica a lo
gramatical, tales como el símil: “octubre es
como tener animales en las tripas”; la metá-
fora: “para los europeos, América del sur es
un hombre de bigotes, con una guitarra y un
revólver, -dijo el médico, riendo sobre el
periódico-”; la humanización: “el sol
maduró, pero ella no lo vio agonizar sobre
las begonias”; y la ironía: “-esta paciente
está mejor que yo-dijo- con un asma como ese
yo estaría preparado para vivir cien años”.
Hay un tiempo para dejar que las cosas sucedan, y un tiempo para hacer que las cosas sucedan. Pre-
cisamente el tiempo en el que ‘Gabo’, como narrador omnisciente, hace que las cosas sucedan entre
octubre de 1956 y enero de 1957. La historia se va relatando en tiempo pasado, presente y futuro. Da
saltos al pasado junto con los recuerdos de varios personajes. La mayoría de los hechos y acciones
ocurren en tiempo presente y las ilusiones trasladan a los personajes a una intuición de historia que
está narrada en futuro.
A través de los diferentes saltos de tiempo, se crea una historia de secuencia lineal, porque los
hechos, aunque tienen sintonía los del principio con el final y viceversa, van teniendo una secuencia
progresiva que es repetitiva, mas no cae en la monotonía.
El ambiente es polifacético, veraz, pues la historia transcurre en un pueblo pequeño; nunca se men-
ciona el nombre de este o de los personajes principales y en el que las personas viven resignadas a

RESEN AS
la tristeza de su entorno; no obstante, tiene imaginarios. Un ejemplo claro de esto es cuando el coro-
nel sueña que está en la batalla de Macondo, refiriéndose al pueblo de su novela “Cien años de sole-
dad”, y dice ver al Duque de Marlborough. Es válido manifestar que este ambiente polifacético fue
premeditado por el autor para alcanzar una atmósfera de sutil poesía.
Esta novela pertenece a un tipo de literatura premeditada que ofrece una visión de la realidad estáti-
ca y exclusiva según el mismo García Márquez, en la que plantea su perspectiva del sistema guberna-
mental; sin embargo, si se quiere ver desde un punto de vista diferente, esta obra llega a tocar temas
como el debilitamiento de la mente humana ante la inseguridad, que más tarde se refleja en la pérdi-
da de esperanza.

HERRERA, Isabela: Reseña de El coronel no tiene


quien le escriba.
Para revista El Bohemio, 2018.
Extraordinaria, magnífica, apocalíptica, caótica, enredada, trastornada, maquiavélica, surrealista,
demencial, mágica, terrorífica, insultante, heroica, fabulosa, inolvidable, inverosímil, imposible,
única y singular. Describiéndola con semejantes adjetivos, ¿se hacen una idea de la dimensión de
esta novela llamada “Sobre héroes y tumbas”? Supondría que sí, porque se me complica encontrar
las palabras oportunas para transmitir por escrito el “tsunami” de sensaciones que su lectura me
produjo.
Es que es sumamente difícil hablar de Sobre héroes y tumbas siendo uno de mis libros favoritos,
aunque no encuentro muy bien la razón; en contraste con mis otros títulos admirados, la obra de
Sábato no se dedica principalmente a estudiar con precisión la atormentada psicología de un per-
sonaje, ni narra las aventuras de ciertos jóvenes con una visión romántica de nuestro ser y existen-
cia. Por supuesto que no; este escritor no pierde su tiempo en ninguna de estas misiones literarias,
sencillamente, se las merienda a todas de un plumazo.

Sin embargo, Sábato tiene la

RESEN AS
particularidad de indagar e
introducirse en los conflictos
internos de sus personajes y
sobre todo de su país, ambos
llenos de contradicciones. Es así
entonces, que, en esta novela, se
narran múltiples historias que
distan de muchos años entre sí
y que poseen protagonistas
sumamente diferentes.
A pesar de sus múltiples argumentos, podemos decir que los hilos conductores de las tramas pueden
ser la general formación de Martín y la decadencia de la familia Vidal Olmos, que se unen mediante
pasajes ambientados entre los últimos años del primer peronismo en Argentina y la tormentosa relación
entre Fernando y Alejandra.
Por otro lado, además, que, a través del flashback, Sábato nos narra el origen de la nación. Ernesto nos
lleva a múltiples reflexiones y él mismo afirma que su obra es un testimonio de la problemática de aquel
mundo y dentro de su obra, se pueden hallar muchas referencias concretas a lugares o sucesos que
abarcan el periodo comprendido entre la época de Lavalle y la de Perón; pues su novela corresponde a
una realidad histórica que, al interponerse a la ficción, se fusiona, pero no pierde sus bases en ese terre-
no firme en el que se configura lo histórico. Y, consecuentemente, nos plasma a través de la locura y de
poder, cómo la sociedad va acrecentando sus partes más oscuras y aísla de la ciudad por más que perte-
nezca a ella expresando el vacío de la ciudad, que cuando se lee se siente fría y desoladora, y donde
pierdas el único afecto que preservas, terminas cayendo en este mundo de soledad y hielo que destruye

RESEN AS
a todos.

A medida que vamos avanzando nos encontramos con una trama diversa complicada, con varias escenas
donde el pasado y el presente se cruzan en la amplia biografía de una familia aristocrática que es inca-
paz de progresar. Por un lado, Martín y Alejandra que viven en una relación caótica incapaces de escapar
a un turbio destino: la predisposición de la familia de ella a la locura. Por otro, la historia de la sofocan-
te atmósfera en la que se debaten sus protagonistas. No obstante, estanos ofrece mucho más contenido:
cuenta la invención de una trama siniestra protagonizada por una ilegítima organización de ciegos, y,
además, la necesaria decisión de huir a la Patagonia en busca de una nueva oportunidad vital.
Aun así, Sobre héroes y tumbas es estrictamente porteña porque a la par de las descripciones de Martín
y Alejandra caminando por las calles y lugares únicos de Buenos Aires se unen los vaivenes y destinos
de multitudes de hombres y mujeres provenientes del mundo, quienes vieron en la gran ciudad el
futuro de los sueños por cumplir o la ruina de un final fatal, pero siempre con la melancolía propia de
aquellas tierras y sus héroes y sus tumbas.
RESEN AS
Además, radica en la interiorización del autor en la mente de los personajes,
cuyos compartimientos no son solamente aplicables a la sociedad en el ámbito
mundial, descendiendo no solo a las entrañas de la historia de su país, sino tam-
bién a la de todo el resto.
En conclusión, esta obra se erige como un clásico de la literatura universal, porque es eso lo
que tienen las grandes obras: valen por lo que son y por lo que trascienden, y esta trasciende
y demasiado. Por esta y mil y una otras razones, considero a Sábato como uno de nuestros
grandes autores, pese a quienes lo quisieran borrar de nuestro panorama literario.

FARÍAS, Delfina: Reseña de Sobre héroes y tumbas.


Para revista El Bohemio, 2018.
Tal como España tiene a su Quijote, lo tiene Argentina en versión de gaucho con espuelas, el facón, su
rancho y sus tierras, y este no pelea con gigantes molinos sino que lo hace por su identidad, su autonomía
y libertad, haciéndose valer como ser humano. Esa liberación que pretende alcanzar Quijote, es la de poder
expresarse, que le permitan fantasear sin bajarlo a tierra. Rústico y primitivo, rozado apenas por la blandu-
ra y el prestigio de la civilización, ¿cómo exigiríamos a Martín Fierro que se comportase a todas horas como
el Caballero? No es una caricatura de Don Quijote, ni una pretensión francamente “quijotesca”: pero tiene
el aire y cae de lleno en la tradición española.
Así fue como en 1872 apareció por
primera vez este quijote disminuido en
una narrativa de José Hernández titula-
da El gaucho Martín Fierro y no habría
error si se plantea que tanto en la Ida

RESEN AS
como en la Vuelta, está escrita en versos
octosílabos.
Hernández vio que el verso octosílabo
era el que predominaba de manera
rotunda en el canto del gaucho. Canta
porque hay en él cierto impulso moral,
algo de ritmo que domina en su organi-
zación, y que lo lleva hasta el extremo
de que todos sus refranes adamente a
como se la ha pronunciado, y en este
sentido toda escritura es siempre trai-
ción), ha de diferenciarse el territorio
donde la lengua constituye el volumen
casi total de la vida, de los otros en que
el uso de la escritura, por estar más En este contexto, el gaucho se incorpora al ejército de
difundido, trabaja de contragolpe forma forzada para defender de los indígenas a la frontera
sobre el habla. argentina, tiempo después huye y entabla una relación de
Esta obra ha sido considerada como amistad con Cruz. Retrata las tragedias de un hombre sen-
referente de la poesía gauchesca, cillo obligado a revelarse contra la injusticia en la pampa
con el tiempo, adquirió carácter de bonaerense donde se verá condenado a la miseria, perse-
clásico, fue traducida a varios idio- cución y soledad.
mas y se consolidó como uno de los Cabe preguntarse si existió realmente un hombre como él,
textos más sobresalientes de la más allá del personaje literario, y la respuesta es afirmati-
literatura argentina donde se va. Sí, el personaje Martín Fierro es el reflejo de muchos
evidencia las diferencias entre los hombres de carne y hueso, que sufrieron casi todas las
pobladores rurales y los habitantes penurias que cuenta el mismo.
Pero el Martín Fierro no fue escrito por casualidad, sino

RESEN AS
de las ciudades, y aborda temáticas
vinculadas a la política. que nace como respuesta a otra obra literaria argentina:
Facundo de Domingo Faustino Sarmiento. En éste, el
autor instala lo que se conoce como “civilización y barba-
rie” en referencia a quienes formaban parte de la socie-
dad civilizada y eran los bárbaros que interrumpían e
impedían el desarrollo de modelo de país que Sarmiento
tanto anhelaba. Pero, ¿quiénes eran los inadaptados, los
que formaban parte de la barbarie? Los gauchos eran para
el autor el mal que imposibilitaba el progreso de la
Argentina, quienes evitaban que la cultura europea de
Francia e Inglaterra se pueda aplicar plenamente en la
sociedad. Sarmiento ubica al gaucho como el malo que
debía de ser exterminado.
En cambio, la civilización que se radicaba en las ciudades, en especial Buenos Aires, era la gran espe-
ranza para que el país pueda tener el pleno desarrollo y la modernidad. En este relato se puede apre-
ciar de forma muy clara quienes son los ganadores y buenos y aquellos que debían perder por viles
y malvados. Con respecto a lo anterior, la literatura argentina, a través de los años, muestra y cuenta
las luchas por obtener el poder y a partir de ello ser el más ganador: tanto política, social y económi-
camente.
Con sus cargos de poeta, periodista, contador, taquígrafo, soldado, comerciante, estanciero y político,
José Hernández, consiguió un gran eco para sus propuestas con su poesía. Autodidacta que gracias a
sus numerosas lecturas definió sus ideas políticas y entró en contacto con el estilo de vida de los gau-
chos mientras vivió en las pampas argentinas. De 1852 a 1872, defendió que las provincias no debían
permanecer ligadas a las autoridades centrales, establecidas en Buenos Aires. José tomó parte en la
última rebelión gaucha, la de López Jordán, que finalizó en 1871 con la derrota de los gauchos. A su

RESEN AS
regreso en 1874, fundó el periódico Revista del Río de la Plata, en el que defendió el proyecto de fede-
ralización con su cargo de diputado provincial, por el cual Buenos Aires se convirtió en capital.
En cuanto a la obra, se puede apreciar cómo el ser humano realiza acciones desmedidas, desalmadas,
pensamientos y estrategias para salir triunfante y de esa forma ocupar el primer puesto, el puesto
ganador. Por tanto, no es seguro si los que ganan son siempre buenos o malos o si los que pierden
son en su totalidad buenos o malos. Lo que sí es verdadero es la construcción propia, con convicción,
que lo seres humanos tienen de ver la vida y a partir de ello determinar cuál es el triunfo valedero.

FARÍAS, Delfina: Reseña de El gaucho Martín Fierro.


Para revista El Bohemio, 2018.
Miguel, un niño con poco más de once años, recibe, a cambio de un regalo que le entrega a su
amiga, el amuleto más valioso como muestra de su amistad. Ocurre que, todos los días, Miguel lo
conserva como si fuese lo más preciado que tiene, guardándolo siempre en un lugar seguro, y
poniéndoselo a la vista para que su amiga vea que en verdad lo valora. Hasta que, un día, su amiga
le pregunta dónde lo tiene. Él, sin palabra alguna que contestar, tartamudea que se le olvidó en
su casa, pero, de igual forma, se encuentra a “sano y a salvo”. Sin saber qué hacer y tratando de
asegurarse a sí mismo de que el amuleto se encuentra en su cuarto, se distrae en sus clases. Al
llegar a casa, desorganiza todo el cuarto sin encontrar señal alguna. Preocupado, sin saber qué
hacer, y ya alcanzado un nivel de desesperación intensa, por así llamarlo de alguna forma, aparece
por arte de magia un pequeño duendecillo que se hace llamar Trastolillo y dice resolver su apuro.
De esta forma nace una gran amistad entre Miguel y Trastolillo, quienes pasan por aprietos que
parecen no tener salida, hasta logros que ambos han disfrutado.
La historia se podría carac-
terizar como un cuento
fantástico, ya que, si bien
habla de duendes y poderes
que no existen en el mundo

RESEN AS
real, la historia, al princi-
pio, si bien empezamos a
leer, transcurre en un
ámbito totalmente cotidia-
no, con un chico que va
todos los días a la escuela,
teniendo amigos y siendo
detallista como un niño
bueno de su edad. Tanto en
la escuela como en la casa
todo parece ser normal,
hasta que, a la vida del
niño, llega un duende, que
dícese de tener poderes que
nadie tiene y totalmente
confidenciales a tener una
buena relación con él.
Aquí, la historia cambia su rumbo, de una manera casi que drástica, ya que, hasta las clases
empiezan a ser diferentes; esto debido a que Trastolillo le da una especie de ayuda a Miguel,
por no decir “chancuco” para ayudarlo a ser mejor estudiante, o eso es lo que supone.
La vida no cambia para las demás personas a su alrededor, sino para él mismo, porque, des-
pués del acontecimiento del duende, de igual forma, todas las personas que rodean al joven
actúan de igual manera.
Como en una ciudad cualquiera la sociedad gira en torno a sus labores y quehaceres de todos
los días. Pienso que Isabel Córdoba maneja la sociedad de alguna manera poco evidente, ya
que no le da tanta importancia al momento de relatar y parece ser algo más bien secundario.
De igual forma, sería casi imposible decir que, por lo menos, no juega, aunque sea una vez
en el relato, un papel importante. La sociedad en este cuento no trata de llamar la atención
ni de participar continuamente, puesto que Miguel siempre cuenta con la misma actitud de
principio a fin de la historia, y ninguna persona es afectado por la misma. Es decir, en algu-
nas novelas, los personajes se ven obligados a cambiar; cambiar su aspecto psicológico y
hasta a veces físico, dado que es muchas veces la sociedad encargada de discriminarlos
dejándolos sin duda alguna de que lo que están haciendo, no lo están haciendo correctamen-
te, más que todo para ellos. Por ello, creo que, en el cuento, es mejor dejar de un lado la

RESEN AS
llamada “sociedad” y centrarse más en su relación con su nuevo amigo y todas las desventu-
ras por las que ambos pasan.
Cuando se trata de crear un personaje con poderes del “otro mundo”, para muchos, no es
un trabajo complejo; no es la excepción para la autora, y es que es impresionante la labor
que se nota al hacer a este nuevo personaje, el duendecillo. Y es este mismo es el que le da
ese rumbo diferente a la historia, el que le da pie al lector a seguir interesado por el cuento,
y, de esta manera, tratar de convencerlo de que está leyendo un relato bueno, sin dejar de
un lado de que se trata de algo infantil, y está más bien dedicado a los niños. Por ello, es
evidente el trabajo que le da la autora al notar que, evidentemente, se dirige especialmente
a ellos, cuando se trata de, por ejemplo, duendes y hadas que, tal vez, en novelas para adul-
tos no encontraremos.
La autora, dejando al lado un poco la historia, deja algunos valores importantes que desea
transmitir, evidenciando su obra, a los niños. Valores como la tenacidad, al nunca darse por
vencido por lo que uno quiere y tanto anhela, pues Miguel jamás se detuvo hasta saber
dónde dejó su amuleto, y más allá de eso lo que verdaderamente significaba. La honestidad,
ante todo, en vista de que, al pasar los días, le comentó todo a su amiga quien le había rega-
lado el valioso amuleto, y esta lo ayudó por su sinceridad ante el hecho, sin importar que
lo encontrasen o no.
La manera en la que la autora trata de sumergir al pequeño lector en su mundo, es increíble
y no tiene crítica desde el punto infantil. Es impresionante, como, por ejemplo, en una clase
se ve evidenciado la atención que se le pone al profesor para que, al momento de preguntar
algo, lo sepas, y te quedes con esa satisfacción de que lograste contestar algo correctamente,
o al menos, creo que así lo ve un niño de esa edad.
Todo esto, y desde su relación con sus amigos hasta con la de su mamá, se ve influenciado en
un lenguaje cotidiano, pues, a muchos niños les pasa, que hacen cualquier desorden por
encontrar algo que buscan, y, al final, lograr ver que, uno, no encontraron lo que buscaban
y dos, el cuarto quedó hecho un desastre y la mamá castigará por los hechos. Es el desespero
por Miguel organizar el cuarto rápido, y a la vez encontrar su amuleto, de verdad se siente y
hace ver que uno es el que debe hacer algo al respecto y de una forma casi que sin pensarlo
dos veces.
Es triste el hecho de pensar que, aunque la obra sea buena, por categorizarla en algún con-
texto, la mayoría de argumentos a favor se vean caídos por lo siguiente. No se trata de un
texto argumentativo, pero desde el punto de vista de muchos, no me parecería para nada
correcto, en muchas páginas, utilizar términos tan avanzados y un léxico tan amplio que
dudo un niño sepa. A veces, toda una novela, todo lo que va a suceder, se centra en la primera

RESEN AS
frase.
Esta es la que atrapa, y en la cual el lector decide si sigue o no, con su lectura. No es una
novela, pero es inédito el hecho de que el libro empiece de una forma, que, ningún niño
quiera seguir leyendo. La frase como: “La dama del otoño, inflaba sus carrillos de viento frío”
usa términos tan metafóricos, que hacen que cualquier joven, no se interese más por el libro.
Aun así, el relato deja la valiosa enseñanza de que hay que cuidar lo que se tiene, que no valo-
ramos las cosas hasta que las perdemos. Que hay que luchar hasta el final por lo que se
quiere. Que a veces, lo interesante y lo difícil puede que sea divertido, y que un misterio sin
resolver, es y siempre será, el mejor pasatiempo que sea pueda tener.

OCHOA, Johnattan: Socio-crítica de El acertijo de oro.


Para revista El Bohemio, 2018.
Indignado por la situación bélica, si es que es apropiada llamarla así, que padece la Argentina,
Esteban Echeverría escribe El matadero; desde algún refugio fuera de Buenos Aires. Elabora
entonces una obra vibrante, organizado en torno de un recurso didáctico: un caso perturbador
le sirve de ejemplo para denunciar la situación de barbarie que domina el país. El matadero
representa a la federación rosista; esto porque El Matadero de la Convalescencia funciona igual
que el sistema político que impone Juan Manuel Rosas; inclusive con sus mismos personajes.
Es este gobierno el que aterroriza a la mayoría de la población entre los años 1829 a 1852, y
es específicamente este terror el que usaría Echeverría para escribir El Matadero; de ahí radica
la importancia que tiene en la cultura argentina.
Sin lugar a dudas, Echeverría, fiel a sus principios, da a su escrito la forma que el contenido le
exige; no altera su pensamiento por acomodarlo a un molde determinado. En consecuencia, no
podemos dudar de que, buscando el tipo textual más adecuado a su idea, ha barajado las
distintas opciones que el sistema literario de aquel entonces le ofrecía y que no ha encontrado

RESEN AS
ningún modelo, pues el resultado de este proceso es un texto original; según se afirma desde
1871, cuando Juan María Gutiérrez lo da a conocer en el primer tomo de la Revista del Río de
la Plata. En general, la crítica ha tendido a considerarlo el primer cuento realmente "argenti-
no", cuento en su totalidad, pero no en sus partes; un artículo de costumbres atípico; un artí-
culo de costumbres que deviene en cuento; en definitiva, un texto híbrido. Pero el texto se pre-
senta como una unidad, a la que hay que analizar tal cual es, porque en ella está cifrado el
mensaje poético.
Partamos de algo: todo escritor por más que pretenda ser original, no crea de la nada. Este
repite, modifica. Puede buscar una forma nueva pero su búsqueda siempre se halla en el con-
texto histórico de lo ya conocido. Gabriel García Márquez no pudo haber escrito Cien años de
soledad sin Macondo, o Vargas Llosa La ciudad y los perros sin el colegio militar Leoncio Prado.
Es por ello que su obra refleja tan bien un cuadro de costumbres de su país. Su narrativa críti-
ca, que forma parte del relato a través de sus opiniones, lucha por defender la igualdad e inter-
preta cualquier privilegio como un atentado contra ella; por eso dice:
“cosa extraña que haya estómagos privilegiados y estómagos sujetos a leyes inviolables y que la Iglesia
tenga la llave de los estómagos”, para remarcar el modo en que se operaba políticamente en esos años;
utilizándose la fuerza brutal física y por lo tanto desconociendo la razón.
Es un narrador testigo, busca permanente la complicidad ideológica del lector por medio de la utiliza-
ción de la ironía. El autor se personifica en el joven Unitario, quien siempre mantiene una actitud digna
y desafiante ante las crueldades de los Federales. Echeverría tiene la intención de mostrarle al lector que
aquel clima polarizado y violento no era bueno para el país y que Argentina tenía que encontrar una
alternativa más semejante al de los unitarios y jóvenes del país.
En El matadero están contenidas muchas otras significaciones, aparte de iniciar el realismo y la narra-
ción argentina modernos. Están contenidos elementos que marcan líneas permanentes en el proceso de
conformación de la literatura argentina.
Puede decirse que las principales característi-
cas de toda la literatura nacional y sus proble-
mas más eminentes salen de allí, o, mejor
dicho, como El matadero no tuvo circulación,

RESEN AS
que ha percibido intensos aspectos de la pro-
blemática nuestra y los ha expresado antes que
nadie. Tal por ejemplo es la relación de nuestra
cultura con la europea; la cuestión de una
literatura nacional confeccionada a partir de un
esquema previo de la realidad; la perspectiva
dualista de la realidad; el papel que cumple el
intelectual frente a la desconcertante realidad,
y otras cuestiones no menos pertinentes y per-
manentes. En suma, es una de las piezas mayo-
res de la literatura, y fundamental en los oríge-
nes del género.

OCHOA, Johnattan: Reseña de El matadero.


Para revista El Bohemio, 2018.
“No deseo que las mujeres tengan mas poder que los hombres, sino que tengan mas poder
sobre ellas mismas” Mary Shelley

¿Feminista? Las imágenes que corren a la mente de muchos incluyen a una mujer masculina, rabio-
sa, odia-hombres, asexuada, paranoica, excesiva, furiosa y exagerada. La mujer que no se depila, la
que no expresa suavidad, la que destila una especie de veneno resentido. ¿Una feminista literata?
Pausa. En la época en la que vivimos, sí. No siempre. Por buenos motivos. ¿Pero de dónde viene la
dicotomía? ¿Por qué se ha instalado de forma tan reticente la idea de que la feminista es la antítesis
de las letras?

Feminismo. No hay palabra más cargada de espinas. Para hablar sobre un término tan tergiversado
y malinterpretado hay que desenmarañar algunas de las muchas informaciones falsas que existen;
ofrecer unas definiciones más simples. El feminismo busca, sobre todas las cosas, que exista una

RESEN AS
igualdad de posibilidades para mujeres y hombres. No que las mujeres quieran ser igual a los hom-
bres en características. En condiciones, en derechos, sí.
Se trata también de un movimiento que cambia según el momento al que responde y que ayuda a
entender lo que significa e implica ser mujer en ese momento —lo que pasó en los sesenta no es
igual a lo que está pasando en la época actual (aun cuando existan hilos que los conecten)—. Para
hablar de feminismo hay que hablar del momento y del lugar. Hacerlo permite ver, además, cómo y
por qué el feminismo se ha relacionado con la literatura.

Por esto, es necesario tener en cuenta el recorrido histórico que ha realizado el feminismo y enten-
der cómo la misoginia y el patriarcado han hegemonizado la literatura. Las mujeres, a lo largo de la
historia, han quedado relegadas a quehaceres del hogar. Frente a la escasa autoridad intelectual que
se les concedía, tuvieron que enfrentar múltiples conflictos para finalmente acceder al escenario
literario. La conquista de derechos permitió un mayor acceso y empoderamiento a través de la pala-
bra.
En términos de literatura escrita por mujeres, esta pretende una apropiación del lenguaje a través de la
escritura, en la búsqueda de una identidad propia que no esté en función del orden masculino. Según
Lucia Guerra Cunningham, la literatura femenina es “el proceso interior de la adquisición de una identi-
dad”. Esta autora en su texto ‘Silencios, disidencias y claudicaciones: los problemas teóricos de la
nueva critica feminista’, establece que la escritura de la mujer se adentra y se asimila a un espacio
intertextual predominantemente masculino; así, ubica los “elementos de una visión del mundo subor-
dinada a través de márgenes, vacíos, silencios, inversiones y mímicas con un valor subversivo” y tam-
bién renovador.
Los hombres han tenido amplias libertades y Que la literatura y el feminismo se sientan contra-
posibilidades desde hace siglos. Si se mira el rios se debe, en parte, a que los medios ayudaron a
gran esquema histórico que nos precede, las fabricar un estereotipo. Y para hacerlo recurrieron
mujeres llegaron a esas libertades de manera a la versión más sensacionalista; efectivamente, el
muy reciente. Hay choques y desniveles. Hay tipo de feminista radical que también ha habido (así
poderosas transformaciones. Hay cambios en como existen posturas radicales en cualquier parti-

RESEN AS
cómo se relacionan los sexos, en cómo pueden do político o en una fe religiosa). La imagen que se
comportarse las mujeres. Pero vale la pena regó es compatible con un segmento del feminismo
cuestionarse por qué el feminismo ha sido radi- que sí fue radical, furioso y a veces desmedido.
cal en algunos momentos, por qué buscó En los sesenta, por ejemplo, cuando las mujeres del
fórmulas masculinas, por qué ha tenido que feminismo estaban – como la raza negra, la juven-
salir a la calle a exigir y por qué ciertos tud y otras minorías – sumergidas en el torbellino
momentos más que otros han hecho que exis- de nuevos paradigmas que rechazaban el glamour
tan feministas que no estén tan deseosas de de la élite, en un momento en el que estaban recla-
participar en los asuntos de la apariencia e mando cosas como el derecho a decidir sobre su
intelectualidad. El feminismo quiso romper capacidad para tener hijos, era lógico que las muje-
que lo único que una mujer podía ser era una res no salieran a la calle con tacones, excesivamente
visión bonita. arregladas.
Por esto, la historia de la literatura femenina es
un recorrido también por la historia de las
libertades e inhibiciones de las mujeres.
Estos ejemplos sirven para demostrar que cada También es necesario entender que,
momento del feminismo, además, coincide al final, se trata de la posibilidad, de
inevitablemente con el espíritu estético que lo elegir, si se desea o no, participar en
rodea. Por eso, en los ochenta, cuando muchas los asuntos del escribir cultivado.
ganancias del feminismo se habían establecido, El empoderamiento femenino tiene
teóricas de mirada feminista comenzaron a que ver con ese movedizo y complejo
abogar por la idea de que no había nada más terreno que es la autenticidad. Sin
subversivo que la escritura femenina, que podía embargo, hombres y mujeres, la
ser una forma incluso de contrariar la lógica nuestra es la era del feminismo inte-
uniforme de lo masculino. lectual. Donde la mujer empoderada
puede incluir en su forma de femini-
Las mujeres del hoy son las que más gozan de dad los quehaceres de la cultivación
los logros del feminismo. Tanto que muchas, estilística. Otro de los grandes mitos
aunque disfrutan de todos sus frutos, se rehú- que deben romperse urgentemente
san a relacionarse con la palabra que tanto sobre el feminismo: la literatura sí

RESEN AS
repele por el exceso de mitos y estereotipos. puede hacer parte de sus lenguajes
Hoy, sin embargo, es la era en que una mujer libres.
puede proclamarse feminista, empoderada,
libre, e incluir en ese proyecto de vida los goces
del leer. Nuevamente, la literatura nos señala
aspectos importantes de lo femenino en la
actualidad.
Pero, sin duda, una de los retos de la mujer
empoderada del hoy, la hija de todas las posibi-
lidades que logró el feminismo, es precisamen-
te el cómo usar la literatura, las letras, la cultu-
ra, y todos los asuntos de la intelectualidad
para que sean una extensión de su poder y no ARÉVALO, Gabriela:
una debilidad. Feminismo letrado:
el empoderamiento femenino en la literatura.
Para revista El Bohemio, 2018.
Inspiración bella, Se podría decir que eres una pobre abusada.
pasajera, inoportuna. Todos te buscamos, siempre nos das si te encontra-
Inspiración efímera, mos.
que te deja amargura. Hasta el mismo Dios abusó de ti,
Inspiración corta, preciosa y hermosa, creó el mundo del que ahora puedo escribir.
de ti salen todas las cosas.
Te encuentras en las montañas,
Los artistas ruegan por tenerte, te encuentras en el mar.
eres la musa universal. En una taza de café,
Quieres estar, pero no puedes. y en las noches de soledad.
Quieres ayudar a los demás.
Hasta luego inspiración.
El segundo en que te vas Te veo en unos días.
se siente un vacío inmenso, Cuando tenga una idea

POEMAS
Ya que me llevas a lo alto que no pueda concretar,
y me tiras desde el cielo. ya que tú, siendo musa universal,
Pero que golpe tan hermoso llegas cuando menos te quiero,
ese que me doy. y te vas cuando te anhelo más.
Es el golpe del ingenio,
creación y amor.

Inspiración delicada, noble y gentil.


Yo que te quiero
y tú que ya te quieres ir.
Inspiración, tú eres la musa universal,
ya que, sin ti,
nada podría siquiera existir.

MESA, Ana Sofía: La madre de todo.


Para revista El Bohemio, 2018.
Estoy enamorada de ti
de tu alegría,
de tu carisma, Y por la novena debo pasar,
de tu amabilidad. pues es ahí donde todos los sabores están,
como el incomparable chontaduro con miel y sal,
Todos hablan de ti o el delicioso pandebono que caliente está.
de tus mañanas en Pance, Definitivamente, lo que se ve aquí,
de tus mágicas tardes en San Antonio, no se ve en ningún otro lugar.
y de tus deslumbrantes noches en Juanchito.
Apenas llega la noche,
¿Qué más puedo pedir? la salsa suena,
Si eres mi orgullo más fuerte, Mi gente se alegra,todos aquí queremos bailar.

POEMAS
mi felicidad está en ti. Hasta la madrugada se vuelven los pies,
pues aquí se canta y se baila a la vez.
Tus mañanas me cantan esperanza,
me dan vida, Cualquiera que te conozca,
me motivan a devorarme todo el resto del día. queda encantado contigo,
es por eso que abres tus brazos
Tus tardes soleadas, a todos tus amigos.
con la brisa que viene del Mar,
simplemente me motivan a no dejar de caminar. Mi cielo, mi sucursal,
estoy completamente enamorada de ti,
crecer y vivir a tu lado

ZULUAGA, María Paula: Mi sucursal.


Para revista El Bohemio, 2018.
En un mundo donde los sentimientos ya no existen, las risas son mitos y los romances cosa
del ayer; donde pronunciar la palabra “amor” es un tabú y tan solo pensar en sentirlo más
que un delito; donde esas frases como “estar juntos por siempre” se desmoronan, y otras
como “nunca te dejare”, se las lleva el viento. Porque las cosas cambian, el tiempo fluye y
la sociedad avanza o, al menos, eso es lo que nos hace pensar. ¿Pensar? Bueno, no en este
caso.
Me presento: soy #3. No sé mi verdadero nombre. No conozco a mi familia ni gran parte de
mi historia; aunque, bueno, nadie por aquí sabe mucho. Ninguno de nosotros sabe de dónde
vino ni a donde pertenece; solo sabemos que somos un ‘error’, o así nos llaman Los Modifi-
cadores. Lo que ellos no sabían era que yo soy un caso aparte.
Les contaré mi historia y cómo todo esto comenzó: después de millones de años de guerra y
conflicto entre los humanos, tantas fallas y delitos, tanto dolor e injusticia, los humanos
llegaron a la simple conclusión de que ellos eran su mayor depredador; que, así como ellos

CUENTOS
levantaron civilizaciones, construyeron un pasado y crearon culturas, serían los encargados
de acabar con tantos años de esfuerzo, y que, cuando no encontraran qué más destruir, se
darían cuenta que se habían conducido a su propia destrucción. La respuesta a todo esto fue:
los sentimientos, ya que todos se han dejado llevar alguna vez por ellos. Un grupo de cientí-
ficos llamados Los Modificadores fueron los encargados de encontrar una solución a esto;
que sería tan fácil como decir que, sin sentimientos, ninguno se dejaría llevar por su instin-
to y crear una sociedad ideal sería solo cuestión de tiempo. Así fue como, ante la sed de
poder, el mundo accedió a esto sin saber el futuro que le esperaba.
El plan fue rápido, aunque un poco loco. Todo se basaba en suprimir emociones. ¿De qué
manera? No lo sé y creo que nunca lo sabré. Lo único que tengo claro es que conmigo no
pudieron. Yo fui uno de los primeros intentos, pero, como todo en esta vida, existen fallas,
y este experimento no sería la excepción.
Mi caso fue un poco complicado: al intentar
suprimir los sentimientos algo salió mal, y
una falla en el sistema causó que los senti-
mientos extraídos no llegaran al punto de
destruirse; en vez de esto tomaron un rumbo
diferente y se quedaron guardados en la
sombra de mi cuerpo, y a pesar de que en
este proceso perdí gran parte de mi memo-
ria, lo que sí sabía en ese momento era que
tenía que escapar. Así fue como escabullén- todo lo que había tenido que pasar para llegar a nuestra
dome entre los pasillos y huyendo de las guarida; fue cuando empezamos a pensar que podía haber
miradas, logré salir de ese horrible lugar, muchas más sombras corriendo peligros afuera en las
donde por última vez había sido yo comple- calles: peligro al que nos tendríamos que enfrentar para
to. salvarlas a ellas. ¿Qué podría ocurrir si nos atrapaban? La

CUENTOS
Después de escapar decidí esconderme en las verdad es que nadie sabía la respuesta y no queríamos averi-
alcantarillas, así nadie me encontraría; pero, guarlo porque sobraba decir que no sería nada bueno.
al parecer, las mentes con miedo son muy Decidimos dividirnos las tareas y así, mientras unos descan-
predecibles, porque con el pasar de los saban, protegían nuestro escondite o vigilaban al enemigo,
meses de estar sin nadie llegaron más som- los demás podíamos ir en busca de más sombras. La mayoría
bras de todos los tamaños: unas rotas y otras de las veces no encontramos a nadie, pero nos dimos cuenta
lastimadas, unas no hablaban, a otras les de que, al salir a explorar el mundo, muchos de nuestros
faltaban partes, pero todas sabíamos que sentidos traían recuerdos que pensábamos estaban extintos
estaríamos seguras en ese lugar y al menos ya para nosotros. Así fue como unas cuantas sombras, a
nos tendríamos las unas a la otras. Solo fue pesar de estar incompletas, lograron recuperar recuerdos
cuestión de tiempo para que nos conociéra- como nombre y cuerpo; de hecho, a algunos de nosotros,
mos mejor. Después de eso el cariño y el cosas como olores, nos podían transportar a momentos vivi-
aprecio que nos teníamos se fueron dando dos antes de ser ‘una falla’. Después de tanto esfuerzo y ya
solos. Pero un día, una de ellas nos contó sin esperanzas de encontrar a más de nosotros, las búsque-
das se convirtieron en excursiones para recolectar pistas del
pasado con las que cada uno podría recrear su historia.
Un buen día escuchamos un escán- Con el pasar del tiempo nos dimos cuenta de que #7, muchas
dalo durante una de nuestras bús- veces, faltaba a sus turnos de vigilancia sin razón alguna y nadie
quedas. Al darnos cuenta de que sabía a dónde iba. Un día decidí seguirla sin saber qué esperar y
eran Los Modificadores, a todos nos me di cuenta de que ella también salía, sin saber qué buscaba.
invadió el miedo; pero en medio de Decidí preguntarle a dónde iba y su respuesta fue breve: “a
todo había algo extraño: una voz donde mi memoria necesite”, y ahí fue donde comprendí que sus
pidiendo ayuda. Efectivamente era recuerdos venían de experiencias y que al estar tanto tiempo en
otra sombra a la cual debíamos contacto con el mundo había llenado su mente de momentos. Le
ayudar, aunque sabíamos que era pregunté también por su historia y qué pensaba hacer con ella.
muy peligroso y que refugiarla En ese momento fue donde me confesó que un día había visto de
podría significar atraer al enemigo, lejos a su humano del cual había sido separada, y que pensaba
teníamos que hacerlo. Yo decidí encontrarlo otra vez para poder juntarse. Lo difícil de la situación
armarme de valor y salir al rescate, era que su humano estaba en los laboratorios, y entrar ahí podría
lo cual fue nada fácil. significar una muerte segura. Verla hablar de esa forma, su pasión

CUENTOS
Con mucho cuidado, me deslicé entre las y firmeza ante esto, hizo que, sin darme cuenta, me
calles y los edificios, hasta poder ubicarme enamorara cada día más de ella. Le contamos al resto
en un lugar donde la otra sombra me pudo del grupo el plan para entrar a los laboratorios, y, a
ver y comprendió que debía seguirme. Des- pesar de que al principio nadie estaba seguro, termi-
pués de llegar a la guarida y estar a salvo, la naron aceptando.
nueva sombra nos contó lo que sabía de su #7 se conocía los caminos de los laboratorios casi que
vida. Ella era #7. Lo que más me sorprendió de memoria, y, gracias a ella, fue fácil llegar a donde
de ella no fue su habilidad de recordar clara- necesitábamos entrar; pero las cosas no iban a ser tan
mente la mayor parte de su historia como fáciles. En el momento que #7 iba a entrar a la cabina
humano completo, sino que, al contrario de donde su humano reposaba, las alarmas se activaron y
los demás, ella no tenía miedo. Pasaban los fue capturada. Ninguno de nosotros sabía a donde la
días y #7 me intrigaba cada vez más; no sé llevaban ni qué le harían; pero sabíamos que debía-
por qué, pero lo hacía, y muy bien de hecho. mos esperar lo peor.
Todos tomamos caminos distintos en busca de una salida; aun así, yo no era capaz de dejar a #7. Así que
me devolví por ella. Sin conocer el camino, llegué a otras partes y descubrí que los únicos que tenían un
acceso seguro a las bóvedas de seguridad máxima, que era donde se encontraba #7, eran los humanos. Así
que intenté recordar todo los que ella me había enseñado e hice mi mayor esfuerzo por recordar; solo logré
traer a mi mente algunas cosas, pero creo que fueron suficientes para identificar a mi humano, ya que, al
pasar enfrente de las cabinas de humanos, un instinto me llevó directo al mío, aunque siempre me lo había
imaginado diferente.
Entré en él y todo el mundo se veía de forma nueva, Ya en nuestros cuerpos, nuestra memoria
pero sabía que, si no me daba prisa, jamás volvería a volvió a estar completa y supimos qué debería-
ver a #7. Fue fácil llegar a donde ella; nadie sospe- mos hacer. Así que volvimos al laboratorio y
chaba nada. Bastó ingresar unos códigos de seguri- llegamos hasta las oficinas principales donde
dad que sabía de memoria y pronto estuvo libre. Ella descubrimos que las emociones nunca habían
se adelantó a buscar a su humano el cual yo no cono- sido destruidas realmente; en vez de eso, esta-
cía. Quedamos de vernos en la calle donde nos ban guardadas en unos pequeños cofres los

CUENTOS
encontramos por primera vez, aunque sin saber cuales escondimos entre la ropa y nos dirigi-
cómo nos reconoceríamos. Esperé en esa calle unas mos a ponerlos en los cuerpos. ¿Cómo sabría-
cuantas horas, sin saber qué le había ocurrido. mos a dónde pertenecía cada uno? La verdad
Cuando me decidí a volver, di la vuelta y me topé con no lo sabíamos, pero si todo esto me había
alguien que nunca había visto, pero que sabía no era enseñado algo era que eso era lo que menos
igual a los demás. Bastó con mirar sus ojos y saber importaba, que lo importante era lo que
que era #7. Nos reconocimos al instante, aunque, se estaba por adentro. Al poco tiempo todos
encontraba en un cuerpo que yo jamás había espera- fueron despertando y estaban dispuestos a
do y, supe, por su forma de mirarme, que pensaba lo pelear por lo que era suyo, la libertad. Así fue
mismo acerca de mí, pero, ¿qué importaba? Si real- como todos logramos salir del laboratorio. Los
mente nos queríamos, no tenía nada qué ver en Modificadores, al darse cuenta de esto, sabían
donde estuviera; por dentro seguiría siendo la que no había forma de arreglar las cosas, así
misma sombra de la cual me enamoré. Nos dimos un que huyeron. Nadie sabe a dónde fueron, pero
abrazo que para mí pudo haber durado toda la vida era seguro que jamás volverían.
hasta que recordamos a los demás. MONTERO, Manuela: ¿a dónde fue la
sombra?
Caminando,
me encuentro con los frutos de
Es curioso caminar en un sendero los árboles,
tan rocoso como este, algunos tan deseables,
y no son realmente las piedras mi pero no son más que mera
preocupación, apariencia.
son mis pies al caminar en ellas. Lo curioso,
Debo abrirlos siempre todos,
es cómo las sentían mis
unos pocos son igual por dentro
La curiosidad se apodera de mí, pies.
y por fuera,
pues estoy caminando en un sende- Unas me rayaban como
reflejando así el árbol que los
ro tan luminoso, dagas,
cultiva.
internamente sintiéndolo una pero otras pasaban desaper-
oscuridad completa. cibidas,
Mi mayor curiosidad durante
formando un sendero que
este recorrido,
Hay tantas sonrisas y miradas a mi no me dolería.
es cuándo acabará este sendero,

POEMAS
alrededor, porque puedo sentirlo, mas no
todas tan reconfortantes y falsas Era necesario sentir ese
verlo,
como las luces en este sendero. dolor en mis pies,
pues han dejado cicatrices
A veces siento un abismo,
Es curioso, que siempre veré.
pero no son más que una torre
muy curioso, Las rocas percibidas real-
de piedras
pensar que estoy acompañando, mente no me acompañan,
que yo mismo he creado.
cuando en realidad, pueden que estén ahí, pero
Son simplemente unas rocas
camino este sendero pasan por ignoradas,
fingiendo ser el fin.
en plena soledad. no han marcado mi paso,
Tal vez no vea el final,
no han marcado mi camino,
pero estoy segura que esta
Me pregunto por qué tuve que pisar simplemente han sido un
oscuridad
esas piedras, estorbo.
para siempre no podrá durar.
pero ahora sé que tienen sentido.
ZULUAGA, María Paula: El sendero.
Para revista El Bohemio, 2018.
Le había pedido ya a mi esposa que me Hoy, Luis irá con el hijo de John, su
acompañara, pero, claro, desde hace cuatro mejor amigo, a Cine. Ya estoy cansado
años que no sale conmigo; solo le gusta reci- de él. Ojalá se muriera. Lo único que
bir presentes de mí y salir con su mejor no me permite dejarlo es su dinero;
amiga o con su primo. Aunque en verdad la dinero en cantidades que tiene y que,
amo y siempre he querido y le daré lo mejor hace 4 años, he gastado a gusto. Estoy
como mi buena economía lo permite; le doy cansado de escuharlo decir “Isabel, te
todo mi amor y no debo esperar nada a amo”, cuando no creo amarlo de
cambio; al fin y al cabo, de eso se trata el verdad. Está sonado el celular. Debe
amor. Le pregunto acerca de la salida y, como ser él. “A las 7 paso por ti, estoy ansio-
era de esperarse, dijo una vez más: “Luis, voy so por verte, Richie”. Le dije a mi
a salir con mi primo, ve con alguien más”. esposo que saldría con mi primo.
Recurriré a pedir el acompañamiento de Comenzaré a maquillarme para estar
John Rodriguez, mi mejor amigo, pues hace lista a las 7.

CUENTOS
mucho que no lo veo; sin embargo, había ido
varias veces a mi casa en busca de mi presen- Ya estábamos llegando a Platillos Voladores, uno de los
cia pero, lastimosamente, no había estado yo mejores restaurantes de Cali. Quería sorprenderla.
en tales ocasiones. “Richie, mi Richie, decirte así por amor. Expresar qué
decirte Richie. Para mi significa riqueza, la riqueza que
Recibí un mensaje de Luis Allende: “John, sal eres para mí” -dijo ella. Yo, sonrojado, le di un beso en
conmigo mañana, tengo dos entradas para la mejilla. Pensé en mi hijo y en Luis. En este momento
cine y nadie ha querido aceptar mi invita- ya han de estar saliendo de cine para ir a comer. Por otro
ción.” No quería; solo quería estar con mi lado, recordé esa vez en que la conocí en Unicentro:
amada, la mujer de mis ojos, con quien había estaba en Falabella, con su esposo, quien, inocente, se la
estado ya saliendo por 3 años, Isabel García. presentó a mí, su mejor amigo; lo que no supo es que
Le ofrecí la invitación a mi hijo, quien entre miradas, nos dimos a conocer ese amor que senti-
mañana deberá tomar cuidado porque su mos a primera vista. Le hablé una vez más sobre el
madre, mi exesposa, se ausentaría hasta el divorcio con su marido, pues la quería solo para mi, y
domingo. Aceptó y pensé: había sido fácil darle la vida que se merece; pero ella negó con su
quitarlo del camino hacia mi cena con Isabel. cabeza.
Me dijo que no tenía el dinero suficiente para darle la vida que su esposo le daba a pesar de la escasez de
amor que sentía por él. Solo siento rabia. Sé que ella en verdad lo quiere. Quiero llegar ya al restaurante.
Iré lo más rápido que pueda; al fin y al cabo si me encuentro en un choque con un carro y muero, sé que
no podré tener posesión sobre mi amada; pues no soy suficiente para ella. Si muere ella no importa, pues,
si no la tengo yo, nadie lo hará.
También le comenté sobre la pésima relación que mantenía con mi
La película en cine estuvo muy
padre, pues, no compartíamos mucho porque, como lo sospechaba,
interesante: Furia de titanes.
salía siempre con su amante de quien aún no tenía conocimiento de su
Iremos a comer pizza en Domi-
identidad; algo de lo que por lo visto, él no se había enterado. Ya esta-
no’s según me dijo Allende. Qué
mos llegando, faltan solo 3 cuadras. Quiero bajar del carro y respirar
bien que salí con él. Él ha sido
algo de aire fresco; esta conversación me descompuso anímicamente.
alguien que siempre me ha dado
No es fácil que mi padre tenga una amante y que no me deje tener
atención y con quien salgo
conocimiento de ella. Además de eso, tampoco me hace sentir bien que
cuando a mi padre, John, le toca
prefiera salir con ella; a pesar de que dice que me ama, siento que no
cuidarme, y de quien siento un
es así, pues, pone a su amante por encima de mí. Veo que se aproxima

CUENTOS
afecto paterno; a pesar de que no
un carro rápidamente, “cuidado Luis con ese auto, viene muy rápido”,
sea mi pariente. Estuvimos
le digo.
hablando sobre mis notas en el
Solo escucho personas gritando “llamen una ambulancia” y “¡mar-
colegio: le conté acerca de lo
quen el 1,2,3, rápido!” Miro a mi lado y veo a Richie con sangre y
duro que era responder por
vidrios del parabrisas en todo su rostro. ¡Dios mio! Me muero si algo le
trabajos y tareas que dejaban en
sucede. Despierto y escucho solo sirenas. “Ya estamos llegando al hos-
noveno grado, pero, que, a pesar
pital señorita, resista” -dice una voz; de seguro es un paramédico.
de todo, en 3 meses pasaría en
Vuelvo a despertar, esta vez en un hospital. De seguro es el Hospital
‘limpio’ a grado décimo.
Universitario.
“¿Señorita, cómo se siente?” -me pregunta.“Doctor, ¿sabe algo de Richie, digo de John? John Rodriguez?
Cómo está él? Y por favor, llame a mi esposo, no debo mentirle más; él siempre ha querido lo mejor para
mí y yo solo lo he engañado con su mejor amigo. Pero eso fue hasta hoy; yo a él lo amo” -le digo desespera-
damente. “Señorita, lo llamaremos, pero lamento decirle que el señor Rodriguez está a punto de morir. Y
debo darle la noticia de que su hijo iba en el carro contra el que colisionó, y ha fallecido por una hemorra-
gia arterial vascular.” No puede ser. Mi esposo había salido con él, ¿estará vivo?. Tengo sueño, mucho
sueño.
Espero que mi esposo esté bien y
que él no se sienta mal por las
muertes ocurridas; al final, no
merecía un hombre tan bueno como
él, una mujer infiel como yo, ni un
amigo desleal como John. Los pár-
pados me pesan. “Código azul” dice
una voz, pero quiero dormir, y nada
más importa.

CASTRO, Juan Alberto: Infidelidad, amor y


un accidente. CUENTOS
Para revista El Bohemio, 2018.
A 400.000 millones de años luz del planeta tierra, se encontraba una
pequeña extraterrestre llamada Zafiro. Ella vivía sola en un pequeño
planeta amarillo, que, a pesar de ser un paraíso tropical, para ella era
el lugar más aburrido que pudiera existir. Zafiro pensó que había que-
dado sola en este lugar después de que sus padres, quienes solían ser
reyes del sol (el cual era millones de veces más grande que el que
vemos hoy), salieran con su pueblo a una expedición de agujeros
negros. Lo ideal era que ella marchara a la par de la aldea, pero cuando
todas las naves estaban listas para despegar, y todos los extraterrestres
estaban a punto de emprender el viaje, Zafiro recordó que había olvi-
dado en su habitación su amuleto. Aquel precioso amuleto concedido
por su abuelo antes de fallecer. Por lo tanto, sin pensarlo dos veces, de-
cidió ir tras él ya que estos eran sumamente especiales para la realeza,
por el brillo que el esplendor del sol en ellos impulsaba. Ella intentó

CUENTOS
constantemente anunciarles a sus padres que iba a descender de la
nave; sin embargo, tanto era su desespero y prisa que no notó que el
zumbido perturbador de la nave no había permitido que sus padres la
escucharan; de hecho, que nadie lo hizo.
Próximo a su casa, la ciudad estaba tan sola que aceleró el paso por el
miedo que le estimulaba. Cuando llegó, todo era tan extraño, ya que,
al estar todo empacado, era complicado identificar dónde se ubicaban
sus cosas. El tiempo corría y ella subía y bajaba escaleras, destapó y
movió cajas. Una vez que lo halló, recordó que debía darse prisa para
regresar a la nave. De repente, Zafiro se asomó por la ventana y vio que
las naves imperiales se alejaban. No lo podía creer. A medida que las
naves se retiraban la luz del sol disminuía, hasta que tan solo brillaba
el lugar por donde pasaba Zafiro.
Corriendo e inundada por el miedo de jamás volver a ver, no solo a su
familia, sino a cualquiera de su especie, no había reparado que se dirigía
hacia un cráter. Inesperadamente, Zafiro cayó y se golpeó tan fuerte la
cabeza que desplomó en un profundo sueño que transcurriría por días.
Con el pase del tiempo, despertó en una extraña casa, no muy colosal,
mucho menos confortante, pero de todas formas ella solo quería saber
cómo había llegado a pisar ese terreno extraño para sus ojos. Así que,
recorrió la casa y se encontró con un marciano, alto, delgado y con unas
gafas un poco extrañas. Pero, ¿cómo era esto posible?, pensó Zafiro.
—Buenos días, su majestad—dijo el marciano.
—Buenos días, ¿cómo se llama usted?
—Mi nombre es Tom.
—Hay algo que no entiendo Tom… ¿cómo llegué aquí? o ¿por qué sigue

CUENTOS
usted aquí?
—Bueno, es una larga historia. En mi casa, diseñé una máquina para
encontrar otras formas de vida inteligente, pero las primeras veces que
intenté mostrárselo al resto de
las personas, me tomaron por loco y de tanto insistir con mis planes descabellados, decidieron
que yo no debería formar parte de ese viaje que emprendieron. Como ya sabía que pasaría, y
sabiendo que sin la familia real el planeta no tendría luz; diseñé unas cuantas lámparas para
poder ver y pasear por la ciudad. Hace dos noches pude reconocer algo radiante y me dirigí hacia
él. ¡Vaya sorpresa! No sabía que sería usted, su majestad. La encontré y observé la profundidad de
su herida. Sin duda creí pertinente traerla a casa y curarla. Pero, en fin, mi pregunta es: ¿cómo
está usted aquí si su familia se fue?
—Todo fue una equivocación—respondió.
Zafiro le contó a Tom todo lo sucedido y él le dijo que podría haber una forma de comunicarse con
sus padres desde la estación principal ubicada en el centro de la ciudad. Al otro día, fueron hasta
la estación e intentaron comunicarse con la nave imperial.
Luego de unos arreglos en el sistema, Tom logró hacer que la comunicación funcionara y así Zafiro
pudo detallarle a sus padres lo ocurrido. Como respuesta, le aclararon que faltaban varios días

CUENTOS
para su regreso. Repentinamente, se escuchó un estruendo donde estaban los padres de Zafiro.
Unos minutos después, les informaron que la nave había sufrido un accidente y toda la familia real
había fallecido. Zafiro quedó devastada y su luz se empezó a desvanecer suavemente, hasta que el
planeta quedó en completa oscuridad. Todos los demás planetas que estaban alrededor de este
empezaron a sufrir bajas de temperatura a una velocidad extraordinaria, tanto, que fue solo cues-
tión de horas para que todo y cada uno de ellos quedara sumergido en una era de hielo.
Consecuentemente, Zafiro se enfermó. Tom se dedicó a cuidarla día y noche, hasta que, con su
amor y cuidados, logró recuperarse. Prontamente, los habitantes volvieron a su planeta. No logra-
ban reconocer su alrededor, ya que, lo recordaban como una fuente de luz inagotable, que, al
parecer, se estaba apagando. Todos otorgaron sus condolencias a la princesa y se ofrecieron a
hacer lo que fuera necesario para ayudar.
CUENTOS
Fue de esta manera, que los amuletos de todos los miembros de la familia real fueron traídos a ella y
brillaron juntos, más que nunca. Zafiro decidió que todos en la galaxia merecían un recuerdo de sus
padres, así que tomó los amuletos y los partió en mil pedazos. Con ayuda de Tom, puso cada pedazo en
un punto de la galaxia y los llamó “estrellas”, de modo que, todas las noches que ella marchase de su
planeta, podría recorrer la galaxia e ir encendiendo los trozos de amuletos que iluminarían a todos. Y en
lo más alto, un trono iluminaría a todos los demás planetas durante el día, con más poder que nunca bau-
tizando a su planeta como la estrella mayor.

HERRERA, Isabela: La princesa del sol.


Para revista El Bohemio, 2018.
Me mantengo firme incluso cuando estoy cayendo.
Y es que quizá esté decayendo, ¿y qué?, sigo con vida.
Me alisto para dejar que la lluvia corra abajo en mi rostro,
pues mis lágrimas crearon el mar en el que ya no encuentro aire,
y, aun así, navego en él.
Pues, este solitario velero, solo en el mar de lágrimas seguirá adelante.

No obtener el premio mayor, no es perder.


No ganar es mi firma en el contrato permanente que tengo, de que aun intento.
Y es que aún me acometo,
pues en metamorfosis siempre estoy conmigo mismo,
consumiendo a la persona que aspiraba ser.

POEMAS
Y, ¿por qué habría yo de elegir otro sendero?
¿A qué lo cambiaría?
¿Por qué habría de cambiar el cielo?
¿A qué recrearía el azul perfecto de este?
¿Para qué cambiarlo?

Podría trasladar mi mente a otro cuerpo,


pero este será también de carne.
Cortar las esquinas del laberinto me lleva hacia donde quiero,
Pero, esto es una prueba real, ¿cómo voy a llegar allá?
Hace falta imperfección para la perfección de este trayecto.
Y la perfección, ¿a qué la cambiaría?

CASTRO, Juan Alberto: ¿Por qué la cambiarías?


Para revista El Bohemio, 2018.
No soy ni de aquí, ni soy de allá; no tengo una
lengua materna, tampoco cultura propia, no
soy de ella, ni soy mío. Solo soy un respiro de
aire caliente que se sublima en la noche fría;
que solo existe en el momento y es notado
apenas antes de desaparece.

POEMAS

CASTRO, Juan Alberto: Soy.


Para revista El Bohemio, 2018
Realidad difusa en inventos del viento,
clima helado y cielo nublado,
propuestas a viajar más allá
o de estar mucho más cerca de acá.

¿Para qué intentar más?


¿Para qué mirar hacia atrás?
Para qué hablar, si es sabio callar.
Cruda verdad si el cielo dejó de brillar,
falta tiempo y sobran lástimas;
que lastiman, que crean heridas.
Tú te pudres, tú te hundes.
Te acompaño hasta la puerta,
pero no te acompaño;

POEMAS
toco el timbre y te engaño.

Adiós a la cordura, adiós a la ternura.


Bienvenida las ataduras y locuras,
accedan a la verdad por la cualidad
de mirar y no esperar.
Haz que todo pase lentamente,
siempre hay que estar.
No mueras, no respires,
no vivas, no llores.
No existas.

CASTRO, Juan Alberto: Estar sin existir.


Para revista El Bohemio, 2018
El hombre vestido de lila muy peculiar era. Como lo dice su nombre lila todo su armario solía ser. Este hombre
también le gusta jugar con magia negra, ¡y qué divertido le parecía! Así era su vida todos los días, aunque mise-
rable e infame frecuentaba ser; pero, con su asombroso viaje, se vuelve todo patas al revés.
En la casa más recóndita del bosque de China, se encontraba un bebé recién salido del vientre; la casa es peque-
ña pero muy bien decorada, se siente el frío del ambiente. El niño llora y llora muy fuerte, hay dos cadáveres en
el piso: uno con sangre en la frente, al lado de este está la madre ya que el parto que acaba de tener la dejó en
el piso desangrada.
Pobre infante llorón, es imposible evitar que nació. Pues el hombre vesti-
do de lila, a duelo con la esperanza, protegió a su hijo de las cosas malas.
Todo comenzó el día en el que el hombre vestido de lila en la cárcel termi-
nó. Mató a la primera persona que miserable lo volvió. Era el hombre de
lunar morado que odiaba con su ser. No sintió arrepentimiento y esto lo
asustó; pero al hombre vestido de lila de todas maneras no le importó. El
hombre vestido de lila a otro hombre conoció: era enigmático y misterio-
so y eso le gustó. El hombre misterioso le dijo cómo su vida arreglar, pero
el hombre vestido de lila dijo que no le gustaba gritar. Entonces el
hombre misterioso le ofreció una manera más fácil, pero un gran precio
tenía que pagar, pues la magia negra del hombre misterioso era muy difí-
cil de generar. El hombre vestido de lila pasó un año haciendo su plan y
ahorrando dinero para poder regresar al día que todo comenzó, el día que
la raíz de todos sus problemas nacio.
“Estoy listo”—dijo el hombre vestido de lila al hombre misterioso que
listo estaba también para decir el conjuro que lo ayudaría a volver. Dijo
algunas palabras en alguna lengua extraña y sintió que cayó en una
cómoda cama, pero de un momento a otro se levantó tirado en una mon-
taña alta, que de nieve llena estaba. El hombre vestido de lila se extrañó
al no sentir frío ni tampoco calor. Era inmune a todo, hasta al dolor.
Entonces el hombre vestido de lila de la montaña se tiró.
Él pensó que el golpe duro debía ser pero no sintió una gota de aflicción, él siguió su camino y hacia Xikou se
dirigió. Buscó un bosque bonito en el cual se pensaba hospedar y así si plan maestro comenzar.
Compró unas cuantas cosas antes de empezar; revisó los diarios, almanaques y demás. Compro peróxido de
hidrógeno para el piso lavar, unas mudas de ropa y artículos para limpiar.
Compró una Diaojiaolou, una casa artificial; están hechas de madera y unas cuantas cosas más. La casa era
pequeña pero muy bien decorada.

El hombre vestido de lila miserable ya no estaba. El hombre


vestido de lila ahora quedarse quería, encontraría una nueva
vida y hasta tal vez una chica. El hombre misterioso mucho
tiempo lo espero y al ver que no volvía, mucho se enojó. Le
mandó un mensaje de paloma y el hombre vestido de lila lo
ignoró. Entonces el hombre misterioso su venganza planeó.
El hombre misterioso amenazó al hombre vestido de lila: le
dijo que sin el favor que más tarde le pediría, a la cárcel lo

CUENTOS
devolvería. El hombre vestido de lila el favor tuvo que hacer
pues era demasiado fácil, y claramente se lo iba a complacer.
Pobre hombre vestido de lila, no sabía lo que iba a generar,
pues el hombre misterioso el efecto mariposa nunca le llegó
a explicar. Lo único que le pidió fue que se casara con una
mujer, la que él eligiera, no importó quién, pero un hijo tenía
que hacer.
El hombre vestido de lila, una hermosa esposa consiguió, era
la mujer de zapatos blancos, que feliz lo volvió. ¡Qué vida tan
hermosa la que el hombre vestido de lila tenía! Y más hermo-
sa sería cuando su esposa su hijo tendría.
Los nueve meses pasaron, felices eran los dos, los pajaritos
cantaban ¡qué vivan los tórtolos! El día del parto arribó y el
hombre misterioso apareció, se veía arrugado como uva pasa,
pero con una sonrisa se presentó.
¡Qué viva el niño! Misterioso gritó, y sacando una daga al hombre vestido de
lila mató. La madre en el piso acabó y sin ninguna ayuda médica lentamen-
te murió. El niño era feo y desagradable, un lunar morado tenía, pero el

CUENTOS
hombre misterioso cuidaría de él, ya que este, para su venganza crucial iba
a ser.
Todo terminó el día en que el hombre vestido de lila a su padre mató y en
la cárcel terminó. Allí encontró a su abuelo y eso no le gustó. Su abuelo le
hizo la vida imposible al pobre señor, ya que el hombre misterioso al fin se
vengó.

MESA, Ana Sofía: El hombre vestido de lila.


Para revista El Bohemio, 2018
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ENTREVISTA A MEDARDO ARIAS

1. ¿Cómo fueron sus comienzos en la escritura narrativa? ¿Como nace su gusto por las letras?

ENTREVISTAS
2. ¿Existe un horario propicio para escribir o cualquier momento del día es ideal?

3. La mejor y la peor parte de escribir.

4. ¿Cuáles son sus autores preferidos y a cuáles recomendaría leer?

5. Un libro que le haya marcado o gustado mucho el cual haya leído más de una vez.

6. Si tuviera que elegir un personaje de ficción de algún libro para sentarse a conversar, ¿a quién elegiría?

7. ¿Cual de todas tus obras es tu favorita? ¿Cuál ha sido la más difícil de escribir y por qué?

8. ¿Cuál considera usted es el mayor conflicto que tiene un escritor cuando desea publicar su obra con una
casa editorial por primera vez?

9. ¿Para quién escribe?


10. ¿Cuál considera es el papel del escritor en la realidad social colombiana?

11. ¿Cree usted que influyen las creencias políticas, sociales y filosóficas en el éxito o fracaso de una obra?

RESPUESTAS
1- En el colegio hice periódicos, dentro de lo que entonces se llamaba ‘Centro Cultural’; escribía poesía,
crónica. Luego, en 1987 la Universidad de Antioquia me otorgó el Premio Nacional de Poesía, por mi libro
‘Luces de navegación’. Entendí entonces que toda mi vida estaría signada por la literatura.

2- Escribo más que todo en las tardes-noches. Me encantaría hacerlo en la mañana, pero las jornadas de
lecto-escritura no me permiten disfrutar de esa primera luz de la mañana, la que pondero, porque creo es

ENTREVISTAS
la mejor; la más edificante.

3- Lo mejor de escribir es cuando vas cantando sobre las teclas, a un ritmo firme, preciso, con una poética
definida. Existe luego otra etapa que no es pertinente llamar peor, sólo que es el momento de la ‘carpinte-
ría’, la corrección general que debe ser rigurosa, exhaustiva, precisa.

4- Indudablemente Cervantes, siempre. No con ánimo académico sino con la posibilidad de divertirse. Quie-
nes no se han acercado al Quijote no sospechan cuánto humor, cuánta maravilla se puede encontrar ahí a
través de las palabras. Otro libro eterno es la Biblia; sabiduría pura para todos los tiempos, y ya pagana-
mente hablando, todos los libros de Hemingway, los de Mark Twain, Cortázar, Baudelaire, Rabelais, Alejo
Carpentier y esa maravilla que es ‘El perfume’ de Patrick Suskind, y El Anatomista, la novela de Federico
Andahazi.

5- Indudablemente ‘El viejo y el mar’ y ‘El coronel no tiene quién le escriba’, cuentos largos, más que nove-
las, de una gran perfección narrativa.
6- No es de ficción. Juan El Bautista. de lo difícil que es para un joven escritor empezar a publicar.
Creo que un novel escritor debe apoyarse en otros de mayor
7- ‘El chachachá del diluvio’; es una novela experiencia, poner a disposición su libro, pues muchos errores
que acaba de ser editada en España, y será pueden ser detectados con este sistema. Y no apurarse por
presentada en la Feria del Libro de Madrid publicar. Si tienes calidad, eso llega.
en este junio. Creo que es intensa y diverti-
da al tiempo, y señala una crítica general a 9- Aún no lo sé. Alguien me dicta y no sé quién es; soy una espe-
la manera como estamos tratando nuestro cie de medium que recibe a manera de descargas, imágenes,
planeta. Es optimista al tiempo. música, tramas. En ocasiones he experimentado esa sensación
No considero que haya obra difícil; si te de otredad leyendo mis propios textos. De algún lugar deben
sientas a escribir es para divertirte, para venir esos mensajes que en a ratos me parecen tan extraños,
gozar, no para sufrir. Lo que parece difícil como si no los hubiera escrito.
sencillamente se abandona. Todas mis

ENTREVISTAS
obras están insufladas por la emoción de 10- El papel de los escritores y de los intelectuales en la política,
estar vivo. en el entramado social de sus naciones, fue fundamental a trav-
v`´es de todo el siglo XX. Por vía de la palabra escrita muchos
8- Nunca he tentado editoriales; quizá pueblos llegaron al convencimiento que ese escritor tan lúcido,
debo empezar a hacerlo. Todos mis libros, tan brillante, también podría ser un buen presidente. Así ocu-
menos uno, son resultado de premios rrió con Rómulo Gallegos en Venezuela. Vargas Llosa quiso ser
literarios y/o publicaciones que me ha presidente del Perú, y a García Márquez trataron de convencerlo,
sido solicitadas. Imagino que debe ser des- infructuosamente, de ser candidato a la presidencia de Colom-
corazonador recibir una carta negativa de bia. No estoy en contra de los escritores que de pronto se sumer-
una editorial, como le ocurre a tantos gen en la política, pero creo que el primer deber de un escritor
escritores, algunos notables hoy, que es escribir, y escribir bien, no ser conductor de pueblos.
debieron enfrentar ese escollo. Creo que
publicar es un albur, también, y tiene que 11- Cuando alguien escribe, sabes quién es, de dónde viene; su
ver con la suerte. Tengo ya nueve o diez discurso puede ser ateo y su filosofía ninguna. Lo que importa es
publicaciones, pero soy consciente que sepa narrar; sea cuento, novela o poesía. Un escritor hoy es
un animal raro, un "outsider". Que la gente empiece a preferir
sus libros, es otro milagro de la existencia.
ESCRITOR MEDARDO ARIAS
Medardo Arias Satizabal {Isla de Buenaventura, 1956} es escritor, periodis-
ta, poeta e investigador.Fue corresponsal en Nueva York de la revista
colombiana Cambio desde 1998, bajo la dirección de Gabriel Garcia Mar-
quez. Es columnista del diario El Pais de Cali. En 1987 apareció su primera
obra en Colombia. Luces de navegación, que mereció el Premio Nacional de
Poesía de la Universidad de Antioquia. En dos ocasiones ha sido merecedor

ENTREVISTAS
del Premio Nacional del Cuento en Colombia. Es autor de, entre otras
obras, las novelas Jazz para difuntos y Que es un soplo la vida, las coleccio-
nes de cuentos El cangrejo amotinado, Esta risa no es de loco y Juego
cerrado, el poemario Las nueces del ruido o el estudio Palabra Afroameri-
cana, en el que compila doce ensayos acerca de autores afroamericanos.
Una investigación pionera sobre la literatura que se escribe en la costa del
Pacifico colombiano lo llevo a publicar la antología De la hostia y la bombi-
lla, el pacifico en prosa, convertido en texto de estudio en numerosas
universidades de los Estados Unidos y Europa.

ARÉVALO, Gabriela:
ENTREVISTADORA
Para revista El Bohemio, 2018.
ENTREVISTA A
AMPARO ROMERO
VÁSQUEZ

“Más allá de la palabra está lo inefable”

¿Qué concepción tiene de la poesía? Qué consejo les daría a los jóvenes poetas que están

ENTREVISTAS
¿Qué meta puede alcanzar este arte empezando?
y qué puede cambiar? Haría énfasis para que los jóvenes escribieran en las
La poesía me salva de la aflicción. circunstancias más bellas y en las más adversas, quizás
De todos los exilios: el poema para en las más terribles. Permitir que la palabra los ahonde y
avanzar en lo irreparable. Escribo los busque e interrogue; que la palabra los posea, sin
para no dejarme morir, para no límites, es decir, que se desborde la palabra en la página
estar ciega en medio de este estré- en blanco. Porque la poesía no es una moda o un estilo de
pito. La poesía desde antes del prin- vida o una circunstancia, la poesía es ese oficio solitario
cipio, cuando era el vacío, en el y único donde está involucrado el destino de quien escri-
instante mismo de la creación, be, y por supuesto, ahí, latente y explicito ese compromi-
desde aquella metáfora para crear so de vida: la responsabilidad, el prepararse, porque la
las aguas. Creo que la poesía busca existencia nos exige ser auto sostenibles, estudiar una
infinir, y desde su cosmogonía, carrera, ser exitosos. La poesía nos ofrece algo más, pero
transforma todo lo que toca. intangible. Nos permite habitar cada silencio, la orfan-
dad, la desconcertante realidad del mundo.
¿Cómo es su propio proceso a la hora de escribir poesía?
La escritura como un respiro, como el origen. Escribo hasta las tres o cuatro de la mañana, todos los
días. Vibro en una constante que no me da descanso. Corrijo, rompo mis escritos, hasta la saciedad, can-
tidades de hojas que van al cesto. Nunca me arrepiento de hacerlo. La idea es encontrar la palabra preci-
sa que simbolice ese encuentro con lo desconocido que me habita. La búsqueda de un camino, de una
verdad muy mía. Cada poema me indica la perseverancia, una manera secreta de hacer mi taller y mi
catarsis, de reconocer que cada trazo de tinta encierra el universo.

¿Qué poetas son sus referentes y autores de cabecera?


Los clásicos franceses, Margaret Yourcenar, Fernando Pessoa, T.S Eliot, Jorge Luis Borges, Álvaro Mutis,
Octavio Paz, Gaitán Durán, poetas rusos de la década de los años 50

A lo largo de su carrera ha logrado varios premios literarios, ¿considera que aquellos poemas que la
consagraron ganadora son sus mejores obras?

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Escribo y creo en mi obra. Nunca dudaría de la selección de un jurado. Cada libro en su momento es
crucial, cada poema conlleva unas confrontaciones existenciales y dialécticas que los hace amados por
el autor.

¿La poesía es hija de la inspiración o del trabajo?


La poesía: un don que cuando se descubre hay que horadarlo. Indispensable la perseverancia, el conoci-
miento, el fuego que hay en el espíritu y la materia. Recordar siempre que la lectura remite a la escritu-
ra, que, sino leemos, un día cualquiera el poema fenece, porque la poesía no subsiste tan sólo con el
sentir y el latir, el poeta tiene el deber de enriquecerla, de ahondar en los libros. Poeta que no tenga el
hábito de la lectura muy seguramente fracasara en su intento y, ante todo, hay que tener en cuenta esa
comunicación con la energía vital, con lo que somos y aspiramos ser, los nexos con la nada y la muerte
y la soledad del hombre. El amor y el erotismo, y la pregunta que agudiza la existencia misma. La
guerra, el hambre, las diferencias raciales, la naturaleza misma, los objetos.
¿Qué lugar ocupa, para una poeta como Un poema de otro autor que le guste mucho y por
usted, las lecturas en vivo? qué.
De vital importancia porque dignifican el La literatura está llena de poemas memorables. Un
oficio, porque el poema leído en voz alta se poema de Jorge Luis Borges: El oro de los tigres. Creo
dimensiona y porque la voz del hombre es el que los poemas no tienen una explicación posible,
sonido más hermoso, la vibración que toca y además casi nunca el poeta sabe por qué lo escribió.
nos conmueve. Escucharnos nos reivindica, Lo más probable es que hacía el interior del poema ya
nos ayuda a mejorar, ya que un poema leído no exista el tigre de bengala, será usted mismo o la
en voz alta es la sonoridad del ritmo que luz perdida. Usted podría ser el tigre. Me llama la
enlaza todo cuanta toca. atención esta dualidad.

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Último libro que leyó.
La sombrilla planetaria
Modernidad y postmodernidad en la cultura
del escritor Fernando cruz Kronfly

¿Cuando apareció la poesía en su vida?


En el libro La danza de los hilos publicado en el 2016, Premio Estímulos Universidad Javeriana y Alcal-
día de Cali, hay un poema donde comienzo a escribir desde mi nada, desde siempre y a través de los
siglos. Èsto para explicar mi oficio perdurable. Metafórico claro está, pero significativo sentirme así;
hilada y recocida la escritura a mi existencia.
Lo mejor y lo peor de escribir poesía.
Sin lugar a equivocarme el poema en mis cuadernos, en el libro de notas, detrás
de las puertas y de las cortinas. Al inicio de cada asignatura. Frases escritas en
el vapor que dejaba el agua caliente entre los espejos del baño de mis padres, en
la íntima soledad del cuarto donde existían monstruos y había fuego en la boca
de los perros. Repartida en los viajes, en las ausencias, a un paso de la muerte,
en el infierno de la guerra y de las enfermedades, en lo aciago del amor, en cada
lugar y en todas partes. El poema me aparta de muchos lugares y situaciones.
Paso días enteros sumida en mi ciclo de creación, dedicada de igual forma a la
escritura de cuento y ensayo. Como Gestora Cultural dirijo hace 23 Años La Fun-

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dación de Poetas Vallecaucanos y sus Noches Poéticas. Quizás alguien pueda
decir que el poema le arrebató mi presencia, quizás he estado perdida en una
enajenación constante, pero soy de carne y hueso y vivo con una intensidad que
marca mis pasos. Voy al cine, viajo, asisto a los conciertos, me gusta la fotogra-
fía, la pintura, estar con los míos. La poesía tan parecida a la felicidad, tan des-
concertante y al mismo tiempo tan amada.

ARÉVALO, Gabriela:
ENTREVISTADORA
Para revista El Bohemio, 2018.

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