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Introducción:

Establecer como las culturas y sus prácticas atraviesan las lógicas tecnológicas -sonoras,
visuales, cinematográficas, multimedia- en su búsqueda de incluir los eventos, los procesos,
los actos y las cotidianidades sociopolíticas, económicas y sociales de una sociedad
determinada y determinar cómo operan los valores universales de la película Chicas Pesadas
para que este pueda trascender las barreras culturales e influenciar el comportamiento de las
adolescentes bogotanas que se encuentran en el Bachillerato, teniendo en cuenta diferentes
instituciones educativas de carácter laico y religioso.
Teniendo en cuenta la constante exposición multimediática a estereotipos de belleza y
comportamiento -retratados en películas como Chicas Pesadas- que viven los jóvenes, ¿cómo
permiten las culturas mainstream dejar ver o influenciar unas lógicas y unos
comportamientos de las niñas bogotanas de colegios privados entre 8° y 11° grado?

Recuento del proceso:

Para no sentir que la película chicas pesadas se está tomando de forma arbitraria se realizó
un sondeo a 5 estudiantes de grado octavo y de grado once, acerca de las 10 películas
americanas de géneros TEEN más taquillera en los últimos años. Y estos fueron los
resultados.

1. American pie.
2. Pitch perfect.
3. Proyect x.
4. Spring Breakers.
5. Todas contra él.
6. Triunfos robados.
7. LOL.
8. Chicas pesadas.
9. El crucero de las locas.
10. Eurotrip.
Pregunta:
De estas 10 películas, cual es la más conocida para ti y porque?

Respuestas:
 Julie Brand.
 Colegio Cafam.
 Grado 11.
 Edad 16.
 Estrato 4.
 “triunfos robados.” “yo practicaba porras, por eso mismo me identifique con la
película”.

 Angie López Sánchez


 Colegio Cafam
 Grado 11
 Edad 17
 Estrato 3
 “chicas pesadas” “la vi muchas veces por caracol”

 Sara Valentina Caicedo


 Centro J.R adoratrices
 Grado 8
 Edad 13
 Estrato 4
 “chicas pesadas” “la pasan muy seguido en televisión y además es muy graciosa”

 Luna María Robayo


 Centro J.R adoratrices
 Grado 8
 Edad 13
 Estrato 4
 “Eurotrip” “me encanta esa película, es muy graciosa”

 Natalia Vega Amaya


 Centro J.R adoratrices
 Grado 8
 Edad 14
 Estrato 4
 “chicas pesadas” “la vi muchas veces e incluso Regina estuvo de moda”
Objeto de estudio:
Los valores universales que le permiten a la película Chicas Pesadas ser un contenido
mainstream en el cual se ven o pretenden ser representadas las prácticas culturales de las
jóvenes estudiantes de bachillerato de colegios privados en Bogotá, Colombia. Se analizarán
dos grupos. El primero está conformado por 5 estudiantes de grado Octavo del colegio Centro
Juvenil Religiosas Adoratrices. Mientras que el segundo y último grupo comprende a 5
estudiantes del grado Undécimo del Colegio Cafam.

Objetivos específicos:
1. Definir si el tratamiento de los valores de la justicia, respeto, verdad, amistad y
autoestima en la película Chicas Pesadas concuerda con la realidad de las estudiantes
de bachillerato en los colegios de Bogotá, Colombia.
2. Determinar cómo el consumo de productos mainstream influye en la consolidación
de la ética y los valores en las jóvenes bogotanas de colegios privados.

Preguntas de investigación:
I.
En el actual contexto global de sociedades de la información, cómo son percibidos los valores
y las éticas en las jóvenes estudiantes de bachillerato de colegios privados en Bogotá; cómo
se hace posible que las culturas mediáticas -a través de películas como Chicas Pesadas-
puedan determinar valores que se hacen universales para los jóvenes.

II.
Teniendo en cuenta la constante exposición multimediática a estereotipos de belleza y
comportamiento -retratados en películas como Chicas Pesadas- que viven los jóvenes, ¿cómo
permiten las culturas mainstream dejar ver o influenciar unas lógicas y unos
comportamientos de las niñas bogotanas de colegios privados entre 8° y 11° grado?

III.
Los valores y las éticas de una sociedad ya no son determinadas por las instancias
tradicionales (Estado, educación y religión) sino que ahora son puestas y legadas a las
culturas mediáticas.

Marco Teórico:
Influencia de los productos mainstream en las jóvenes adolescentes.
Las películas mainstream se convierten en un punto de partida para que las jóvenes
adolescentes generen sus propios códigos y expresiones culturales que las diferencian de
los demás grupos poblacionales.
Las adolescentes se encuentran en un proceso de auto descubrimiento y en la búsqueda de
su identidad. En medio de esa transición son influenciadas por un grupo de agentes culturales
y mediáticos que surgen en la década de los 60s cuando “los adolescentes emergen, por
primera vez, como un grupo distinto en lo que al consumo se refiere, con su propia cultura y
sus propios códigos” (Martel, p. 53, 2012).
Lo anterior se convierte en una gran oportunidad que no se puede desaprovechar, así que las
industrias estadounidenses comienzan a generar contenidos masivos, los cuales son dirigidos
a adolescentes y toda la familia en general. Estos contienen una serie de valores y conductas
que son aceptadas, adoptadas e imitadas y además cuentan con una serie de factores tales
como la música, las locaciones y las emociones que se evidencian en las películas.

En la película Chicas Pesadas se ven evidenciados varios valores, pero para este estudio se
tendrán en cuenta bajo la perspectiva de que “para sobrevivir hay que encajar” (Chicas
Pesadas, 2004) los siguientes:
● Justicia: “Es dar a cada quien lo que se merece, según sus obras” (Instituto Técnico
Superior de Cintalapa).
● Respeto: “Es reconocer, apreciar y valorar a mi persona, así como a los demás, y a
mi entorno. Es establecer hasta dónde llegan mis posibilidades de hacer o no hacer,
como base de toda convivencia en sociedad” (Nuevo Léon Unido).
● Amistad: “Es el afecto o estimación entre las personas que les permite establecer
vínculos de convivencia más estrechos” (Instituto Técnico Superior de Cintalapa).
● Verdad: “Es la conformidad o acuerdo de lo que se dice con lo que se siente, se piensa
y se hace” (Instituto Técnico Superior de Cintalapa).
● Autoestima: “La autoestima es un término evaluativo que se puede utilizar para
describir cómo se siente una persona con respecto a su autoconcepto. El autoconcepto
representa la información que uno posee sobre sí mismo” (Gobierno de La Rioja,
2005).

El éxito de la película como tal y de su influencia sobre jóvenes alrededor del mundo se debe
al esfuerzo que hacen los productores para darle al contenido una stickiness o ‘pegajosidad’
que cautiva a la audiencia. Además al momento de lanzar la película los estudios se esfuerzan
por hacer un cattle drive1 para asegurar que el público objetivo realmente consuma el
contenido. Chicas Pesadas fue estrenada en los Estados Unidos el 30 de abril del 2004
después de alfombra roja realizada el día 19 del mismo mes. En Colombia la película no fue
presentada en cines sino que ha sido programada en canales de televisión por cable.

El gran impacto que tienen estas películas en las jóvenes adolescentes es producto de las
estrategias de producción y mercadeo de los estudios. El lanzamiento y la producción de cada

1
Cattle Drive: hace referencia a la invasión de los medios por parte de los contenidos generados
por las grandes industrias cinematográficas.
película requiere de tres criterios básicos, “la edad (más o menos de 25 años), el género
(hombre o mujer) y por último el color (blanco o non-white)” (Martel, 2012). Luego de
estudiar los tres criterios básicos se realizan unos focus groups, que consisten en hacer un
estudio cualitativo, con preguntas concretas, como a su vez se realiza un estudio cuantitativo
para tener claro cuál será la audiencia y así conocer el grado de aceptación que pueda tener
la película.

A través de estos contenidos ‘pegajosos’ los grandes estudios como Universal (productora
de Chicas Pesadas) pretenden nombrar las realidades de sus audiencias, en nuestro caso las
jóvenes adolescentes que asisten a colegios privados en Bogotá.

Para las películas se busca emplear historias basadas en la vida real que permiten que los
espectadores se identifiquen con ellas. “Todo está destinado para transformar un simple
producto en recuerdos, en experiencias y en estilos de vida” (Martel, 2012), logrando
involucrar e inmortalizar de una u otra forma este contenido mainstream marcando a
generaciones enteras.

En el marco de una cultura latinoamericana que es híbrida y denota un contexto donde se


comunican prácticas y hábitos de todas partes del mundo, es definitivo que las jóvenes
adolescentes se desenvuelven solventemente dentro de diferentes series de valores. Así las
adolescentes bachilleres bogotanas adaptan y adoptan la cultura de sus colegios y de los
contenidos a los que son expuestas, como Chicas Pesadas, convirtiéndose en anfibios
culturales.

Según Antanas Mockus, el anfibio cultural “es quien se desenvuelve solventemente en


diversos contextos y al mismo tiempo posibilita la comunicación fértil entre ellos, es decir
transporta fragmentos de verdad (o de moralidad) de un contexto a otro” (pg. 127, 1994).

Las niñas que son expuestas a los productos mainstream de los grandes estudios de
Hollywood como Universal entienden esa realidad así como podrían entender la realidad de
un colegio católico o tradicional bogotano en el que se imparten una serie de valores
representativos de la cultura local.

Es interesante analizar cómo esas dos realidades al parecer opuestas se entrelazan, se hibridan
y se comunican dentro de la figura del anfibio cultural. Mockus habla de una característica
fundamental para ese anfibio cultural y es el “camaleonismo”.

El camaleón es “quien se adapta miméticamente a los sistemas de reglas vigentes en cada


contexto” (Mockus, pg. 127, 1994). Desde nuestro punto de vista, esas niñas se convierten
en “camaleones” que se mueven de un contexto de valores de su colegio a un contexto de
productos mainstream donde la realidad se presenta desde la perspectiva cultural
norteamericana.

Dejando a un lado el aspecto moral que según Mockus hace al “camaleonismo” un fenómeno
indeseable, se hace necesario un análisis profundo del movimiento cultural que viven las
nuevas generaciones al verse inmersos en dos ámbitos culturales diferentes al mismo tiempo.

Hipótesis:
I.
Las películas mainstream como Chicas Pesadas son un punto de partida para que las jóvenes
estudiantes bachilleres de colegios privados en Bogotá generen sus propios códigos y
expresiones culturales que las diferencian de otros grupos sociales. Según Frédéric Martel
“La palabra mainstream, difícil de traducir, significa literalmente ‘dominante’ o ‘gran
público’, y se emplea generalmente para un medio, un programa de televisión o un producto
cultural destinado a la gran audiencia” (pg. 22, 2012).

Por medio de las imágenes, el lenguaje, los personajes y la trama Chicas Pesadas se ha
convertido en una de las películas más famosas con temática escolar. En ese medio se hace
evidente la separación de los estudiantes por grupos jerarquizados lo que genera una
constante tensión y rivalidad que desemboca en el matoneo, la intolerancia y la
discriminación.

A través de frases como: “Siento que todos estén tan celosos de mí, pero no puedo evitar ser
tan popular” y “En el mundo de las chicas toda pelea es a traición” se crean estereotipos y
roles sociales que las jóvenes bogotanas recrean en sus dinámicas sociales dentro y fuera del
colegio.

Dentro de la película Chicas Pesadas encontramos varios grupos sociales como: las plásticas
-chicas populares, bonitas, con un alta autoestima y creídas-, los nerds -jóvenes aplicados e
inteligentes que participan de actividades académicas-, los sexualmente activos -estudiantes
promedio con novio o novia-, los afroamericanos, los asiáticos y los desadaptados -los chicos
o chicas con actitudes no normativas-.

Al trasladar esas categorías a los colegios privados bogotanos encontramos tres grupos:
1. Las populares: las chicas que más sobresalen dentro de sus compañeras por su
atractivo físico, su participación en actividades artísticas como bailes y coros, y sobre
todo, por su facilidad para hablar con los chicos.
2. Las nerds: estudiantes sobresalientes desde el punto de vista académico pero que
cuentan con serios problemas a la hora de relacionarse con sus compañeras. Por ende,
son foco de matoneo y rechazo por parte de las demás estudiantes.
3. Las niñas promedio: aquellas que no caben dentro de ninguna de las categorías
anteriores.

Cada uno de estos grupos impone a sus miembros ciertos parámetros de conducta, de vestido,
de habla, de gustos y de preocupaciones, perfilando así el estilo de vida y los hábitos
culturales de las niñas en cuestión.

II.
Las adolescentes bogotanas estudiantes de bachillerato en colegios privados se desenvuelven
solventemente en dos contextos culturales, de valores y de prácticas diferentes, razón por la
cual pueden considerarse como anfibios culturales. Para Antanas Mockus el anfibio cultural
“es quien se desenvuelve solventemente en diversos contextos y al mismo tiempo posibilita
la comunicación fértil entre ellos, es decir transporta fragmentos de verdad (o de moralidad)
de un contexto a otro” (pg. 127, 1994).

Las jóvenes bogotanas se desarrollan en un ámbito de valores católicos o más tradicionales


inculcado por el colegio, y por otra parte, están inmersas en las dinámicas culturales
estadounidenses gracias a las películas y contenidos mainstream que consumen
regularmente.

En nuestro caso se analizarán los valores de la justicia, el respeto, la verdad, la amistad y la


autoestima desde la perspectiva de la película Chicas Pesadas y desde los manuales de
convivencia de los colegios Centro Juvenil Religiosas Adoratrices, Cafam y demás
instituciones.

Las tensiones entre esas dos realidades opuestas hacen que las jóvenes adopten determinadas
conductas dependiendo del lugar donde se encuentran. Por tanto su comportamiento frente a
los profesores o directivas del plantel educativo puede diferir muchísimo a comparación del
trato que se dan entre compañeras.

A pesar de que la educación es una base primordial en el desarrollo cognitivo, social y ético
de todo ser humano, el poder que tiene la película Chicas Pesadas y los estereotipos de
comportamiento que presentan mayor influencia en las jóvenes bogotanas de colegios
privados. Es el sistema de valores norteamericano el que se impone ya que es reforzado
constantemente a través de toda la exposición a productos mainstream que tienen las
audiencias.
Matrices de análisis:

Los productos mediáticos que circulan alrededor del mundo se han convertido en un elemento
esencial para la construcción de la ética y los valores en la mayoría de países. Existen
películas, programas de televisión, canciones y todo tipo de espectáculos que dan cuenta de
una manera, de una cosmovisión estadounidense -que celebra la democracia, el
individualismo, la competencia- diferente a las tradiciones culturales de otras sociedades.

En el contexto latinoamericano históricamente los valores y la ética han tenido un carácter


netamente católico. Los ciudadanos de esta región del mundo, hasta hace poco, se guiaban
exclusivamente por lo valores cristianos pero la influencia externa no se ha hecho esperar y
hoy muchos latinos pueden ser considerados como anfibios culturales.

Dentro de este grupo se destacan los jóvenes ya que este es el grupo poblacional que está más
expuesto a los productos mainstream globales. A través de medios como la televisión, los
cinemas y, por supuesto, el internet los jóvenes en Bogotá y todo el mundo tienen la
capacidad de conocer casi cualquier contenido cultural producido en prácticamente cualquier
rincón del planeta.

Así es como las industrias culturales, en especial Hollywood, desde la década de los 60s se
han esforzado por producir contenidos dedicados a los jóvenes adolescentes. Películas como
Chicas Pesadas se han convertido en clásicos que han influenciado a generaciones enteras y
definitivamente han perfilado los comportamientos, los valores y la ética de sus espectadores.

Análisis parcial de resultados:

La primera hipótesis del proyecto buscaba analizar la influencia de los contenidos mediáticos
que circulan a nivel global. “Las películas mainstream, como Chicas Pesadas, son un punto
de partida para que las jóvenes estudiantes bachilleres de colegios privados en Bogotá
generen sus propios códigos y expresiones culturales que las diferencian de otros grupos
sociales”.

Según Frédéric Martel “La palabra mainstream, difícil de traducir, significa literalmente
‘dominante’ o ‘gran público’, y se emplea generalmente para un medio, un programa de
televisión o un producto cultural destinado a la gran audiencia” (pg. 22, 2012). Al
preguntarles a las niñas del grupo si ellas eran influenciadas por los comportamientos vistos
en esos productos mainstream todas respondieron afirmativamente.

Otro aspecto importante de la primera hipótesis del proyecto ¡Que valores tan pesados! era
comprender las relaciones entre grupos sociales dentro de las dinámicas escolares en la
ciudad de Bogotá. En primera instancia se supuso que la división social se daba en tres grupos
diferentes: las populares, las no-populares y las niñas promedio. En ese medio se hace
evidente la separación de los estudiantes por grupos jerarquizados lo que genera una
constante tensión y rivalidad que desemboca en el matoneo, la intolerancia y la
discriminación.

Además es interesante ver que la percepción que las niñas tienen de ellas mismas, sus
compañeras y, en general, de las relaciones entre los grupos sociales que hacen parte de su
entorno es muy similar a la mostrada en la película en cuestión. Por ejemplo, al pedirles que
dibujarán cómo ven a una “chica popular” todas coincidieron en un estereotipo de cabello
largo, faldas o blusas cortas, zapatos altos y accesorios, algo muy similar al estereotipo
demostrado por las “chicas plásticas” de Chicas Pesadas.

Al contrario del estereotipo tan marcado para la “chica popular”, las respuestas de las niñas
frente a lo que es una “chica promedio” fueron muy ambiguas, y al preguntarles sobre las
“chicas no populares” ellas hablaron de unas niñas “nerds” o aplicadas y de otro grupo de
“fastidiosas”. Así vemos la primera diferencia con nuestra hipótesis y es que la hipótesis sólo
tenía en cuenta tres categorías sociales mientras que las niñas hablan de cuatro.

Cada uno de estos grupos impone a sus miembros ciertos parámetros de conducta, de vestido,
de habla, de gustos y de preocupaciones, perfilando así el estilo de vida y los hábitos
culturales de las niñas en cuestión.

Otra diferencia que tuvo el estudio empírico frente a la hipótesis de ¡Que valores tan pesados!
fue que las niñas creen que sus grupos no están jerarquizados. Sin embargo al preguntar más
acerca del por qué se dan tensiones entre los grupos sociales de su salón de clase las niñas
comentan que esos problemas son “naturales”, entonces podría pensarse en que esa
naturaleza proviene en un orden jerárquico. Definitivamente hay que ahondar mucho más en
esa línea de la investigación.

La segunda hipótesis del proyecto de investigación proponía que “las adolescentes bogotanas
estudiantes de bachillerato en colegios privados se desenvuelven solventemente en dos
contextos culturales, de valores y de prácticas diferentes, razón por la cual pueden
considerarse como anfibios culturales” y el estudio empírico realizado comprueba ese
supuesto.

Para Antanas Mockus el anfibio cultural “es quien se desenvuelve solventemente en diversos
contextos y al mismo tiempo posibilita la comunicación fértil entre ellos, es decir transporta
fragmentos de verdad (o de moralidad) de un contexto a otro” (pg. 127, 1994).
En el caso del colegio Centro Juvenil Religiosas Adoratrices de Bogotá se promueve una
educación basado en los valores y tradiciones católicos que son diferentes a los propuestos
en películas como Chicas Pesadas. Sin embargo todas las niñas del grupo sienten que esa
película se relacion con su realidad porque muchas de las situaciones con respecto a los
grupos sociales hacen parte de su cotidianidad.

Al preguntarles acerca de los valores que expone la película la mayoría de niñas comentó que
en vez de ver valores ven antivalores. Entonces encuentran una realidad completamente
diferente a la propuesta por su colegio en el cual hay normas y valores que cumplir mientras
que en la película esos límites no son tan visibles.

Definitivamente al analizar la respuesta de las niñas se da por sentado que si son anfibios
culturales porque responden a dos maneras diferentes de entender y explicar el valor y las
tradiciones dentro de un ámbito escolar. Así es como las niñas desarrollan la capacidad de
comportarse adecuadamente dependiendo del contexto en el cual se encuentran inmersas.
En el proyecto ¡Que valores tan pesados! la tercera hipótesis buscaba determinar el
porcentaje de estudiantes bogotanas que asumen comportamientos estereotipados dentro de
su colegio para evitar el matoneo por parte de sus compañeros.

En Centro Juvenil Religiosas Adoratrices se hizo evidente que la mayoría de niñas


consideraban que hacían parte de determinado grupo social porque les hacía sentirse bien.
Para entender ese comportamiento hay que analizar las siguientes variables:

1. Las niñas del grupo dicen hacer parte del promedio de la población estudiantil, por
ende no están en una posición vulnerable o son víctimas potenciales de matoneo.
2. Al preguntarles si piensan antes de actuar las niñas respondieron que sí lo hacen
porque se ponen en los zapatos de la otra y evitan lastimarla.
3. De una lista de frases célebres de la película se les preguntó a las jóvenes cuál las
representaba mejor y la mayoría escogió: “Sé que es una retardada social pero es mi
amiga”.

Lo anterior permite inferir que los valores de la amistad, solidaridad y camaradería están bien
desarrollados dentro de las niñas del colegio Centro Juvenil Religiosas Adoratrices de
Bogotá. Esos valores permiten el desarrollo de un ambiente mucho más feliz y ameno para
las estudiantes.
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