Hoy es un día muy especial para todos.

Comenzamos a
despedirnos de los amigos al tiempo que recibimos nuevos
amigos que ya mañana se estarán despidiendo también.
Parece contradictorio, pero las cosas cambiaron del día a la
noche. Estuvimos hasta tarde, pero ya están todos
desayunando. Los chicos visitantes siguen maravillándose de
cosas que ojalá fueran comunes para ellos. Lamentablemente
no es así. Gracias a los tantos años de corrupción y de
marginalidad a la que un gran número de argentinos fueron
sometidos, es que un pequeño grupo de niños se sorprende
de estar comiendo ensaladas de frutas, jugos varios, leche
con todo tipo de cereales y suplementos vitamínicos de los
cuales nunca habían tenido noticia. Solo unos mates con pan
de ayer. Será la Argentina justa que quieren nuestros
Gobiernos? Hoy asume su segunde mandato la Sra.
Presidenta Cristina Fernández Vda. de Kirchner. Alguna vez
se acercará a estos niños? Sabrá que existen? Se animará a
tocarlos, a abrazarlos? A llevarlos a su casa de descanso en
la Patagonia y darles alojo sin que haya medios de
comunicación (La TV Pública, 6. 7. 8 )? No lo creo. Yo sí lo
hago y nadie conoce de mi existencia.
Allá ellos. Acá nosotros, disfrutando de un hermoso día.
Rodeados de felicidad, aunque sea temporal, pero
disfrutando de la vida y sin preocuparnos de lo que la alta
sociedad piense de mis “malas costumbres” para con los
pobres. Que se ahoguen en sus fortunas. Yo dejo que naden
en la mía. Todo lo material perece. Las buenas acciones
quedaran siempre en mi corazón hasta el día de mi muerte.
Moriré sabiendo que pude hacer feliz a un grupo de
“compatriotas” sin que nadie se enterase a través de ningún
medio público. Y moriré feliz sabiendo que he dejado estas
enseñanzas a mis hijos. Eso me hace vivir feliz, eso es saber
en qué gastar mi dinero, sin fijarme en la cuenta. Porque el
resultado de esa cuenta no interesa. Solo ver la felicidad en
los rostros de esos niños paga todo lo que pude haber
gastado. No fue un gasto, fue una inversión.

Así pensaba Markus...