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Fisiopatología y Clínica de las disfonías por estrés mecánico.

Introducción:
La voz es la herramienta sonora de gran participación en la
comunicación humana. Morrison et cols., (1996); Stemple et cols., (2010)
señalan desde una mirada integral, que la voz es un fenómeno complejo y
dinámico, donde mediante diferentes acciones y ajustes en los sistemas
respiratorio, de fonación y resonancia se pueden producir infinitas
combinaciones de intensidades, frecuencias y calidades de sonido, todo esto
en un contexto en particular donde se logra expresar emociones, ideas y
sentimientos.
Ahora bien, si analizamos mas minuciosamente la producción vocal ésta
realizada gracias a la oscilación biomecánica que se ponen en movimiento
por estrés mecánico, producida por la presión ejercida en los pulmones, en
estricto rigor, ésta actividad normal de la fisiología vocal no afectaría la
estructura del tejido de los pliegues vocales, pero, existen ocasiones donde la
laringe presenta cambios temporales o permanentes de su tejido como
resultado del estrés mecánico, teniendo como consecuencia un desequilibrio
en la producción vocal.
Verdolini et cols., (2008) señala, que existe un estrés de impacto aumentado
en los pliegues, asociado a la alta presión subglótica con fuertes
intensidades, generando un aumento en la vibración. También puede existir
estrés por excesivas tensiones y estiramientos de los pliegues vocales
cuando están en posición de fonación; Por otro lado, el instrumento vocal se
puede ver comprometido por accidentes o hechos externos como la
iatrogenia.
¿Es posible tener un control para que éste estrés no afecte a la actividad
vocal?, ¿Cómo podemos prevenir desencadenar una alteración en los
pliegues vocales por estrés mecánico?; La importancia de este ensayo recae
en las alteraciones producidas por el estrés mecánico, ya sea por estrés
vibratorio, postural, aerodinámico o accidental, desde un punto de vista
integral basado en la mirada de autores referentes.
Desarrollo:
Al presentar que el estrés mecánico puede producir una alteración en
la composición de los pliegues vocales producto del aumento en la actividad,
podríamos deducir que existe un limite entre lo fisiológico y lo patológico en la
ejecución vocal.
Gray, Titze & Luskc. (1987) plantean que generalmente se cree que ciertos
tipos de crecimiento en la superficie de los pliegues vocales son resultado de
repetidos y prolongadas colisiones de harta fuerza entre los tejidos del
pliegue vocal opuesto, logrando así alteraciones por estrés vibratorio como lo
son, los nódulos, el pólipo de la cuerda vocal, la policorditis, la hemorragia de
los pliegues vocales, el sulcus de cuerda vocal, entre otros. Generalmente se
aprecian síntomas vocales como, ronquera, disminución del rango tonal
superior, fatiga vocal, logrando incluso la perdida total de la voz, dejando a la
persona imposibilitada para comunicarse a través de lenguaje oral. Muchas
de estas alteraciones son producidas por un mal hábito, como el abuso y
sobre esfuerzo vocal generados por gritos severos, también pueden resultar
de una mala técnica en el canto, compensando aspectos vocales estilísticos
con estrés vibratorio. Es de gran importancia saber controlar y conocer a
través de las sensaciones, cuando y cuanto estrés se debe ejercer al
momento de fonar, sin causar una alteración.
Jackson (1928) señala que en el proceso de fonación se puede presentar una
tensión, estiramiento y compresión del tejido, cuando los pliegues vocales
están aducidos, listos para fonar. Esto es llamado tensión postural. Jackson (
1992) plantea que personas que hablan usando una voz forzada, pueden
desencadenar una úlcera de contacto, patología ocasionada por estrés de
impacto. Este sería otro grupo de alteraciones producidas por hábitos vocales
inadecuados por el hablante, ya que debido al exceso de tensión en la
fonación se genera una desconfiguración del tejido de los pliegues. Los
resultados acústicos perceptuales de éstas alteraciones son similares o de
menor gravedad que los efectos en las alteraciones por estrés vibratorio.
Existe por otro lado, un tipo de estrés mecánico producido por agentes
externos, como por ejemplo, un accidente automovilístico, o un acto médico
dañino como una iatrogenia, en éste grupo se pueden presentar hemorragia
de los tejidos laríngeos, fractura o dislocación de cartílagos, ocasionando
diversas alteraciones vocales y respiratorias según el grado de lesión. Existe
el caso del granuloma por entubación, producido por iatrogenia al momento
de insertar el tubo endotraqueal y permanecer el tiempo que el paciente
requiera ventilación artificial.
Conclusión:
Mediante este análisis, podemos inferir que existen alteraciones vocales
producidas cuando el proceso de estrés mecánico es ejecutado de manera
excesiva, sobrepasando el umbral fisiológico de la fonación. Y que muchas
de estas alteraciones son evitables, como por ejemplo disminuyendo hábitos
vocales perjudiciales como lo es el exceso de intensidad vocal producidas por
estrés de impacto; con esto es posible reducir el riesgo a presentar una
desconfiguración en el aparato fonador. Ingo R. Titize (1994) plantea que un
pliegue vocal normal, podría ser capaz de actuar como “válvula de seguridad”
al aumento de estrés mecánico, evitando alteraciones. Pero en base a esto,
queda la proyección de detectar cual es el límite entre lo fisiológico y lo
amenazante, en relación al estrés. ¿Cómo podemos detectar a través de las
sensaciones cuanta presión debemos ejercer en una vocalización?. Como
plantea Titze (2004) , la habilitación de la voz es mas que reparar una voz y
restablecerla a su estado normal; es un proceso de construcción y
fortalecimiento de la persona para satisfacer sus necesidades específicas,
teniendo en cuenta que se debe intervenir de manera integral, no
enfocándonos netamente en la patología sino en el individuo, sus
necesidades y su rol en contexto.

Referencias Bibliográficas:
- Ingo R. Titze. Mechanical Stress in Phonation. Journal of Voice Vol. 8,
No.2, pp 1994, New York.
- Katherine Verdolini, Ingo R. Titze. Vocology The Science and Practice
of Voice Habilitation , 2012.
- Morrison, M., Rammage, L., Nichol, H., Pullan, B., May, P. & Salkeld,
L. (1996). Tratamiento de los trastornos de la voz (1ra ed.). Barcelona:
Masson.

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