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TABLA DE FOTOGRAFIAS
TABLA DE ILUSTRACIONES
INDICE DE TABLAS
3.3 GEOLOGÍA
Las condiciones geológicas del sitio del proyecto fueron extraídas mediante información
perteneciente a INGEOMINAS, Universidades, Servicio Geológico Colombiano, Agencia
Nacional de Minería, Agencia Nacional de Hidrocarburos y levantamiento en campo como
información directa.
Tras un periodo de erosión y posterior trasgresión marina de aguas poco profundas, con etapas
de circulación abierta y restringida, se depositaron sobre las rocas metamórficas, en
discordancia angular, gravas finas, arenitas, lodos, limos y calizas, durante el Devónico hasta el
Carbonífero que actualmente representan las Areniscas de Gutiérrez, las Lutitas de Pipiral y a
las Capas Rojas del Guatiquia. A finales del Carbonífero estas unidades sufrieron levantamiento
de bloques, plegamiento y fallamiento que afectaron tanto el Grupo Quetame como las rocas del
Grupo Farallones, posiblemente relacionados con los movimientos orogénicos de finales del
Paleozoico.
Algunos bloques estuvieron emergidos y sirvieron de fuente de aporte, al igual que material de la
zona del escudo. En las zonas cercanas al mar se depositaron lutitas negras y algunos guijos
provenientes de las mismas Brechas de Buenavista y de otras áreas levantadas que representan
la base de las Lutitas de Macanal. La cuenca permaneció estable, y se depositó una secuencia
monótona de lutitas negras localmente con desarrollo de pirita y lentes calcáreos incluidas en la
Formación Lutitas de Macanal. El mar continuó en transgresión de una manera continua desde
el Berriasiano hasta el Aptiano. En el Albiano se presenta una regresión que permite la
deposición de la Formación Une. Posteriormente se registró una nueva transgresión continua
hasta el Maastrichtiano, tiempo este último que tuvo influencia deltaica. De esta manera se
depositó una secuencia de más de 4.000 m, que representa de base a techo a las formaciones
Cáqueza, Fómeque, Une, Chipaque y Palmichal. Las formaciones de Cáqueza, Fómeque y Une
presentan cambios laterales de facies hacia el Borde Llanero, se torna más arenosas y menos
lutíticas.
La cobertura está constituida por capas del Terciario, que se depositaron esencialmente durante
el Paleoceno, en un ambiente de llanura aluvial con desarrollo de pantanos cenagosos que
originaron las Arcillas de El Limbo. Durante el Eoceno medio las condiciones cambiaron; se
produjeron levantamientos y hundimientos rápidos, con sedimentación de tipo fluvial e influencia
marina-lagunar, representados por la Formación Arenisca de El Limbo.
Rocas del Oligoceno y Mioceno no se conocen en el área de estudio, debido posiblemente a que
esta parte de la región del Borde Llanero correspondía a bloques levantados como producto del
fallamiento intenso que estuvo sometida. El Plioceno temprano corresponde a un tiempo en
donde ocurrieron los primeros fallamientos, levantamientos y plegamientos de la Orogenia
Andina que es la causante del emplazamiento de la Cordillera Oriental. A finales de esta
Orogenia se depositan conglomerados que incluyen desde bloques hasta guijos de cuarcita,
arenita y lodo en matriz arcillosa de la Formación La Corneta, la cual no muestra evidencias de
efectos tectónicos, a diferencia de las unidades que le infrayacen en discordancia.
La Ilustración 3.2 muestra la conformación actual del territorio colombiano. La Cuenca de los
Llanos Orientales está conformada por el Piedemonte Llanero, la Llanura Fluvial Deltaica y la
Planicie Aluvial.
Con el término Grupo Quetame se hace alusión a las rocas metamórficas que afloran entre la
localidad de Guayabetal y el sur del río Guamal. La referencia original de este grupo
corresponde a Hettner (1892), quien se refirió a rocas algo metamórficas, situadas por debajo del
Cretácico, en la región de Quetame. Posteriormente, fue redefinido por Campbell & Bürgl
(1965), para mencionar rocas metamórficas de bajo grado, constituidas por filitas, cuarcitas y
pizarras, que afloran sobre la carretera Bogotá-Villavicencio, en el Macizo de Quetame. Estos
autores no establecieron la posición estratigráfica, posiblemente por la complejidad tectónica de
la región. En el área aflora en forma de una faja de dirección suroeste noreste, con su mejor
exposición entre las localidades de la quebrada Susumuco, Guayabetal y el cañón del río
Blanco.
En el presente trabajo estas divisiones han sido modificadas parcialmente de Ulloa et al.
(1988), y se utiliza para ello el término litodema, que hace alusión a rocas de alto
metamorfismo, en las cuales generalmente no se cumple con la ley de superposición
estratigráfica (North American Commission on Stratigraphic Nomenclature, 1983).
Ulloa et al. (1988) se refieren a este conjunto para indicar una secuencia de cuarcitas y filitas
de colores verdes y habanos, que afloran entre la quebrada Naranjal y la Falla Jabonera.
En el presente trabajo se denomina así a una sucesión de cuarcitas de grano medio a fino que
alternan con filitas grises verdosas y que afloran en el sector de la Vereda San Cristóbal
(Cuadricula E-6).
El espesor estimado en los cortes geológicos es de unos 1.000 m, aunque podría ser mayor si
se tiene en cuenta que el contacto con el Cretácico Inferior es discordante y hacia las veredas
de San Pablo y San Cristóbal está afectado localmente por la Falla de Servitá.
Ilustración No 3. 3 Columnas generalizadas del Precámbrico y Paleozoico en el Macizo de Quetame sector Guayabetal – Villavicencio. Tomado y
modificado de Ulloa et al. 1988.
Se utiliza este nombre para denominar una sucesión monótona de metamorfitas que aflora en
los alrededores del río Guamal, constituida esencialmente por metalimolitas de color gris
oscuro a azulosas que afloran sobre el río y su afluente la quebrada Agualinda al nor-noroeste
de la población de Guamal. Esporádicamente se intercalan con metaarenitas de color gris
claro. Petrográficamente esta secuencia se ha clasificado como una filita micácea
microplegada, texturalmente lepidoblástica ligeramente granoblástica, en la que se pueden
apreciar superficies S0, S1 y S2, constituida por biotita, moscovita, grafito, limonita, turmalina,
cuarzo, epidota y venas de cuarzo. En ocasiones, sobre la filita micácea se preservan dos
superficies, la inicial de estratificación y la superficie metamórfica de foliación.
En el sitio de la Meseta (cuadrícula E-5) este litodema se pone en contacto con las Cuarcitas y
Filitas de San Cristóbal (PEqsc), sin que se haya establecido su relación estratigráfica, aunque
por su grado de metamorfismo, un poco menor; podría ubicarse dentro de la secuencia
metamórfica, en su parte más alta.
Este conjunto toma el nombre del caserío de Guayabetal; ocupa la mayor extensión dentro de
la plancha estudiada, y su mejor exposición se presenta entre la quebrada Susumuco al
oriente y Chirajara, Guayabetal, Loma, Jabonera, hasta la Vereda Naranjal al occidente.
Macroscópicamente en el sector de Chirajara corresponde a Filitas de color verde y morado
con intercalaciones de cuarcitas; en el sector entre Guayabetal y la Vereda Naranjal
(cuadrículas A-5, 6 y 7) se presentan filitas de color verdoso a crema con algunos niveles de
cuarcitas. Localmente constituyen filitas grises oscuras como las que afloran sobre el
carreteable que conduce a la Vereda El Engaño, frente a la unión de la quebrada San Marcos
con el río Blanco (cuadrícula A-6). Igualmente, en la Vereda San Antonio (cuadrícula A-3) se
presenta una ventana constituida esencialmente por filitas de tono verdoso, generalmente
meteorizadas, que se han asumido como pertenecientes a este litodema. En general, la
foliación predominante es N 50° E, aunque localmente están deformadas por efectos
tectónicos.
En los alrededores de Villavicencio, hasta las cabeceras de los caños Carrillo (Parrado) y
Grande (cuadrículas B-10, C-9), afloran cuarcitas de grano medio a fino de color gris azuloso y
filitas verdosas que se han considerado como pertenecientes a este conjunto. Por otra parte,
los conjuntos PEq4 y PEq1, mencionados por Ulloa et al. (1988), entre el sector del Puente La
Balsa y la población de Guayabetal, al norte del área, se han incluido dentro de esta
secuencia, por presentar a grandes rasgos características petrográficas similares.
La unidad está afectada al oriente por un sistema de fallas de cabalgamiento que la ponen en
contacto con el Cretácico y entre ellas la más importante se denomina Falla de Río Grande
(planchas 266-III-B, 266-III-C), que se considera como la continuación sur de la Falla de
Servitá. Al occidente, las fallas de Cristales y Río Chiquito ponen a la unidad en contacto con
sedimentitas del Devónico-Carbonífero. Igualmente está afectada por fallas de dirección
noroeste, entre las cuales se destacan las de El Deseo, El Tabor, El Engaño y Palermo. Estas
fallas parecen continuar en la misma dirección fuera del área de la plancha.
Se denomina así a la unidad definida por Ulloa et al. (1988) como Conjunto PEq2, para
diferenciar una alternancia de cuarcitas de grano grueso, color blanco, metaconglomerados
constituidos por fragmentos de cuarcitas, filitas y esquistos y una secuencia de filitas moradas,
que afloran en los alrededores de la quebrada Susumuco, (cuadrícula A-8).
Esta unidad se reconoció un poco más al noreste hasta la loma El Capricho, donde la Falla de
Río Blanco la pone en contacto con las Areniscas de Gutiérrez y las Lutitas de Pipiral
(cuadrícula A-9). En algunos rodados de metaconglomerados se observan venas penetrativas
cuarzosericíticas de formas irregulares, que indican efectos dúctiles. La secuencia se
encuentra parcialmente replegada posiblemente por efectos de la Falla Susumuco.
En el área de estudio, autores como Renzoni (1968) definen y hacen referencia a las
formaciones Areniscas de Gutiérrez, Devónico de Pipiral y Capas Rojas del Guatiquía, que en
el presente trabajo se consideran como unidades del Grupo Farallones en su extremo
suroeste.
Nombre dado inicialmente por Renzoni (1965), con base en cuatro columnas levantadas en las
quebradas Palmarito, Cobre, San Marcos y Naranjal (Ilustración No 3. 2), localizadas entre las
poblaciones de Gutiérrez y Guayabetal. Define la unidad como una secuencia constituida por
Esta unidad también fue reconocida al occidente de la plancha, cerca al nacimiento del río
Grande, donde la formación se observa muy fracturada como resultado del fallamiento
ocurrido en el sector. En el extremo suroccidental fue diferenciada mediante interpretación
fotogeológica, donde hace parte de una serie de pliegues anticlinales y sinclinales.
Su espesor se estima con base en los perfiles geológicos en unos 700 m. Regionalmente
suprayace en discordancia el Grupo Quetame (Ilustración No 3. 3). Su edad es considerada
por diferentes autores como del Devónico. En el presente estudio se asume para las
Areniscas de Gutiérrez, una edad del Devónico medio y de acuerdo con el reporte de Arias et
al. (1990), en la región de Caño Negro, al noreste de Villavicencio, con base en la fauna
colectada y clasificada por Forero, (comunicación escrita, 1990) quien determinó en la unidad
suprayaciente Zaphrentis chemugensis y Zapherensis sp. como del Frasniano (Devónico
El término Pipiral se debe a Hubach (1945), para hacer relación a unos esquistos de colores
rojos, en parte también verdosos y de areniscas cuarcíticas rojas, considerando esta
secuencia como el conjunto superior del Quetame, cuya localidad procede de la carretera
Quetame a Villavicencio.
Hacia el sureste, en la Vereda Manzanares, predominan las arcillolitas grises oscuras, con
algunos niveles laminares y otros masivos. Al noreste de la plancha, hacia la Vereda río
Chiquito, se encuentra con algunas intercalaciones de areniscas arcillosas de grano fino a
medio, localmente fosilíferas.
La edad de esta unidad ha sido considerada por De La Espriella & Cortés (1984), como del
Devónico medio. Arias et al. (1990), de acuerdo con fauna colectada en el Caño Negro, cerca
de Villavicencio, y clasificada por Forero, como Zaphrentis chemugensis y Zaphrensis sp. la
consideran como de edad Devónico Superior (Frasniano), edad que se acepta en el presente
trabajo.
Descrita inicialmente por Renzoni (1968), para referirse a una sucesión que en su base se
inicia con 150 m de arenisca gris, a veces calcárea, le siguen 150 m de arenisca verdosa que
al tope alterna con areniscas y lutitas rojas y abigarradas; por encima siguen 250 m de
areniscas y lutitas rojas, le suprayacen 50 m de calizas y areniscas calcáreas a las cuales se
le superpone un conglomerado rojizo con intercalaciones de arenisca roja, gris y verde que
aflora entre la quebrada Moreno y el puente Abadía, sobre el río Guatiquía. Al occidente de la
plancha, sobre el río Clarín, el mismo autor reconoce una secuencia con características
similares, que en el presente trabajo se considera perteneciente a la misma unidad. Trapp
(1968) asignó a esta misma secuencia el nombre de Formación Servitá, para referirse a la
sección aflorante entre Pipiral y la loma de Servitá (cuadrícula A-9). En el presente estudio se
describe esta unidad en el sentido de Renzoni (1968).
En el área fue reconocida en diferentes sitios: hacia el norte de la plancha, entre la quebrada
Pipiral y la finca La Reforma (cuadrícula A-9), está constituida por limolitas de color grisáceo a
rojizo, con intercalaciones de arenitas de grano fino, de color gris verdoso. En el Alto de
Portachuelo, sobre su ladera sureste, se observó parcialmente; sin embargo, las capas rojas
incluyen allí lentes de arenitas de grano grueso a conglomerados finos de cuarzo. En el
mismo sitio, sobre la quebrada El Engaño, está afectada por la falla del mismo nombre. Más
al oriente, consta de limolitas y arenitas de color rojizo y hacia el techo de calizas cristalinas
grisáceas. En este sector la unidad está suprayacida parcialmente por las Brechas de
Buenavista y afectada por las fallas de Servitá y La Reforma.
En la franja occidental, la unidad fue identificada desde el río Blanco hasta los nacimientos del
río Grande (Planchas 266-I-A-B). A pesar de que en esta parte la unidad está afectada por
fallas con desarrollo de anticlinales y sinclinales, se pudo establecer a grandes rasgos, que la
secuencia está constituida hacia la parte inferior por una alternancia de limolitas y arenitas, de
tono rojizo a verdoso, con un espesor superior a los 400 m. La parte superior está conformada
por una serie de calizas (Pcgc), de color grisáceo, que hacen parte de una estructura sinclinal,
afectada en su parte oriental por la Falla El Clarín. Se ha calculado un espesor aproximado de
200 m. Se anota que la parte suroeste de la plancha fue cartografiada básicamente mediante
fotointerpretación y tiene mínimo control de campo.
Teniendo en cuenta la litología, que incluye sedimentitas rojas con intercalaciones de calizas,
se considera un ambiente de depósito continental con influencia marina.
El contacto con las lutitas de Pipiral se ha argumentado como de carácter transicional; sin
embargo, en la gran mayoría de afloramientos, este contacto se encuentra fallado. El límite
superior, con las Brechas de Buenavista, es discordante (Ilustración No 3. 4). En ocasiones se
pone en contacto fallado tanto con rocas del Grupo Quetame como con las del Cretáceo
Inferior.
Con base en los perfiles geológicos se ha estimado un espesor cercano a los 2.500 m. Arias
et al. (1990), en el sector de Caño Negro, ubicado unos 30 km al noreste de Villavicencio,
reportan fauna, analizada por Forero, como Derbyia Crass var. subcircularis, Linoproductus
cf.L. prattenianus, Syringothiris carteri, Anthracospirifir occiduus y Phicodothyris sp. que
corresponden al Misisipiano superior-Pensilvaniano medio.
Término propuesto por Renzoni (1968), para designar una secuencia de brechas y
conglomerados de posible origen local, correlacionable con la parte basal del Grupo Cáqueza
o la parte baja eo-mesozoica de lo que Segovia (1963), denominó Grupo La Ardita. Dorado
(1990) realizó un estudio detallado y concluye que estas brechas en su segmento inferior, son
el resultado de “avalanchas” de detritus y corrientes cargadas de fango, depositadas en un
ambiente continental cerca al mar (Ilustración No 3. 5). El segmento superior, con origen en
un ambiente marino somero por el contenido faunístico, lo considera como del Titoniano.
De esta manera se considera el segmento superior, definido por Dorado (1990), como el
resultado de los aportes de las brechas propiamente dichas, que en su momento se
depositaron en una ambiente marino poco profundo, de circulación restringida, que originaron
una alternancia de lodolitas negras con niveles de conglomerados, areniscas líticas y limolitas
ligeramente calcáreas que conforman, en esta región, la parte inferior o basal de la Formación
Lutitas de Macanal, incluida en el Grupo Cáqueza (Ilustración No 3. 6).
Ilustración No 3. 5 Esquema del ambiente de formación de las Brechas de Buenavista. Tomado y modificado de Dorado (1990).
En el área de estudio, la secuencia aflora hacia la parte norte de Villavicencio y conforma una
franja de dirección sur-noreste, de aproximadamente 20 km de longitud, con rasgos
topográficos sobresalientes. Las mejores exposiciones se observan en las quebradas La
Argentina y Grande y cuchilla de Buenavista, (cuadrículas B-9, 10, C-9).
El tamaño de los guijos y cantos varía de algunos milímetros hasta diámetros superiores al
metro. Estratos como tales no fueron observados, podría ser por la misma razón del origen
del depósito. El espesor total de la unidad se considera variable, se estima de 110 a menos
de 80 m. Reposa discordantemente sobre el grupo Quetame, en su conjunto. Cuarcitas y
Filitas de Guayabetal de igual manera sobre las Capas Rojas del Guatiquía hacia el noreste de
la loma de Servitá. Su límite superior con el Grupo Cáqueza se considera como discordante.
(Ilustración No 3. 4).
A partir del contenido faunístico del segmento superior, edad Titoniano superior reportado en
Dorado (1990) y considerado en el presente trabajo como base del grupo Cáqueza, se
sugiere, para las Brechas de Buenavista, una edad pre-titoniana superior. Se considera,
además, que estas brechas podrían ser equivalentes a los niveles conglomerático K1-K3 de
Renzoni (1965), e igualmente a los niveles inferiores de las Calizas del Guavio, de Ulloa &
Rodríguez (1976).
La referencia original corresponde a Hubach (1957), para referir una secuencia constituida por
areniscas cuarcíticas, arcillas esquistosas, esquistos, lutitas negras y un conglomerado
cuarcítico basal, que aflora en la carretera Bogotá-Villavicencio entre el puente sobre el río
Cáqueza y la población de Quetame. Renzoni (1968) lo subdividió en cinco conjuntos, de los
cuales tres constituyen la parte basal y los demás a la parte media y superior, en facies
arcillosas y arenosas respectivamente. Ulloa et al. (1988) la dividen en tres unidades: Brechas
de Buenavista, Lutitas de Macanal y Arenisca de Cáqueza.
Definida por Ulloa & Rodríguez (1976), sobre el cañón del río Batá, para referirse a lodolitas
negras, micáceas, compactas y con intercalaciones de arenitas cuarzosas de grano fino y de
color gris oscuro y niveles de calizas.
Suprayace a la anterior unidad, una sucesión monótona de lodolitas negras con esporádicas
intercalaciones de arenitas oscuras ferruginosas, calcarenitas y delgadas capas de yeso. En
general las lodolitas son físiles y contienen minerales micáceos y abundante pirita, la cual al
meteorizarse forma grandes costras de óxido de hierro. Todo el conjunto es fosilífero y se
encuentran amonitas, bivalvos y restos de plantas.
Es importante anotar que la distribución areal de las Lutitas de Macanal, hacia el suroeste,
está limitada por la Falla Palermo; a partir de dicha falla, y en el mismo rumbo, esta unidad no
fue reconocida. Lo anterior sugiere que el labio occidental de dicha falla, en el sector de la
Vereda Manzanares, conformaba un paleoalto y que de acuerdo con la edad planteada para
las Brechas de Buenavista, impidió el avance del mar Titoniano-Berriasiano en dicha dirección.
Con este término, Hubach (1957) designó al conjunto superior de una secuencia que aflora
entre el puente de Cáqueza y la población de Quetame, cuya localidad tipo está ubicada en
los altos de la población de Cáqueza, constituida, en la parte inferior, por arenisca cuarcítica
calcárea; hacia la parte media, por lutitas y arenisca cuarcítica, y en la parte superior, por
arenisca y conglomerado fino. Renzoni (1965) designa esta sucesión como Formación Altos
de Cáqueza. Ulloa & Rodríguez (1976), en la región del Guavio, Cuadrángulo K-12, hace
equivalente el Miembro Arenisca de Almeida, de la Formación Areniscas de las Juntas, con
esta unidad.
En el área de estudio, la formación aflora en forma de una faja angosta de dirección noreste-
suroeste desde el noreste de Villavicencio hasta un poco al sur de la cuchilla San Juan, donde
hace parte de un cierre sinclinal (cuadrículas D-5, D-6).
Litológicamente se distingue por constituir una secuencia de arenita de cuarzo de grano medio
a ligeramente conglomerático, de color blanco, gris a amarillento por meteorización. Algunas
intercalaciones de limolitasde tono grisáceo, separan los estratos areníticos, que alcanzan
hasta 3 m de espesor, algunos de los cuales presentan estratificación cruzada planar. La
característica dominantemente arenítica de la unidad en la región del Borde Llanero, difiere
notablemente de la descrita en la sección tipo de Cáqueza, arriba mencionada, donde la
presencia de lodolitas negras a grises es más abundante (Ilustración No 3. 7).
En el presente trabajo, aunque esta unidad se hace equivalente con la secuencia descrita en
la localidad tipo, es posible sugerir que la Arenisca de Cáqueza, que incluye lo cartografiado
en el área de la Plancha como Formaciones Fómeque y Une, pudiera corresponder a los que
se ha establecido como Formación Une en la localidad del mismo nombre. Esta hipótesis hay
que revisarla con la búsqueda elementos estratigráficos que den una claridad al respecto. Los
afloramientos que existen entre los alrededores de Villavicencio y el río Guayuriba podrían,
mediante un estudio estratigráfico detallado, mostrar aspectos tanto faunísticos como
relaciones del medio de depósito, que permitan aclarar realmente esta incertidumbre.
Las Areniscas de Cáqueza, en esta región, descansan concordantemente sobre las Lutitas de
Macanal e infrayacen transicionalmente a la Formación Fómeque. Al norte de Villavicencio la
falla de El Mirador las pone en contacto con el Grupo Quetame. Mediante apreciaciones de
campo y con base en algunos cortes geológicos, se ha estimado su espesor aproximadamente
en 500 m. Ulloa et al. (1988) calculan cerca de 400 m en la región de Buenavista. Para esta
unidad y con base en datos paleontológicos, tales como la determinación de Choffatella
sogamosae (Karsten), en Julivert, 1968, O. (Subastieria) aff. Sulcosus (Pavlow & Lampluhg),
Trigonia aff. Ornata d’ Orb., (Bürgl, 1961), se ha considerado como la edad Hauteriviano.
Ilustración No 3. 7 Esquema facial de las Unidades Pre-Cretácicas y Cretácicas del Borde Llanero Sector Cáqueza-Villavicencio.
Descrita inicialmente por Hubach 1931 (en Julivert, 1968), para referir una secuencia de
esquistos piritosos, caliza cristalina y areniscas cuarcíticas que se ubican principalmente hacia
la parte baja de la unidad, que afloran en la carretera Bogotá-Villavicencio.
Los afloramientos de una secuencia de limolitas y arcillolitas de color gris a pardo amarillento,
oxidadas, con esporádicos nódulos ligeramente calcáreos e intercalaciones de arenitas finas
de cuarzo con matriz arcillosa, que se observan al pasar el puente del río Guatiquía, en
dirección noreste a partir de Villavicencio, con un espesor aproximadamente de 80 m, se han
asimilado tentativamente como equivalentes a esta unidad (Ilustración No 3. 4). Como se
anotó previamente es necesario establecer un estudio que clarifique sus relaciones
estratigráficas; mientras tanto, en el presente trabajo la Formación Fómeque se acepta tal y
como ha sido definida en su localidad tipo.
Dentro del área de estudio la unidad se extiende hacia el suroeste, pasa por los alrededores
de los ríos Ocoa y Guayuriba, y conforma una faja muy angosta, de relieve suavemente
ondulante. Más hacia el suroeste fue diferenciada fotogeológicamente hasta la cuchilla San
Juan, (cuadrículas E-5, D-6), donde hace parte de un cierre sinclinal.
La referencia original de la Formación Une corresponde a Hubach (1957), para decribir una
secuencia que aflora sobre la carretera Bogotá-Villavicencio, entre las poblaciones de
Chipaque y Cáqueza, constituida casi exclusivamente de arenisca, en bancos gruesos,
separados por esquistos delgados, endurecidos y como guía presenta un lente de antracita en
la parte alta de la unidad. El espesor de la unidad es de 500 m.
Los contactos con las unidades infra y suprayacientes, Fómeque y Chipaque, repectivamente,
se consideran concordantes. Se estima, con base en los perfiles geológicos, un espesor
superior a los 500 m en el sector del Borde Llanero (Ilustración No 3. 3) y aproximadamente de
1.000 m al sur de la población de Gutiérrez, en el Alto de Correderos.
La edad de esta formación ha sido discutida con base en análisis de fauna por Bürgl (1957),
quien cita en la parte alta de la secuencia, Mantelliceras brazoense Bose y Acanthoceras cf.
Ospinae (Karsten), considerada como del Cenomaniano, mientras que Campbell (1962) la
refiere al Albiano con base en Lyelliceras pseudolyelli Parona & Bonarelli, Hypacanthoplites
colombianus (Riedel) colectados en la carretera de Une a Fosca. Esta unidad fue depósitada
en una mabiente deltaico con influencia marina. (Ulloa & Rodríguez, 1976).
La referencia original corresponde a Hubach (1945), para referir una sucesión de lutitas entre
las que se encuentran bancos de calizas, arenisca y caliza arenosa. Posteriormente fue
redefinida por Renzoni (1965), quien considera su techo hasta la base de la arenisca Dura.
Aquí se describe en el sentido de Renzoni (1965).
Nombre propuesto por Ulloa & Rodríguez (1976), para referir una sucesión de arenitas y
conglomerados finos con intercalaciones de lutitas, que afloran en la quebrada Palmichal
(Cuadrángulo K-12).
Sus principales afloramientos se encuentran en la Vereda Loma del Pañuelo, cerca a la salida
del río Guayuriba a las llanuras orientales. Consta de una serie de areniscas cuarzosas, de
grano medio, grueso a conglomerático, de color blanco amarillento, relativamente friables, en
capas hasta de 3 m de espesor, con intercalaciones de arcillolitas grises, especialmente hacia
su parte media y superior. En las areniscas se observa estratificación cruzada paralela,
impregnaciones de asfaltita que en esta región son comunes, al igual que la presencia de
icnofósiles. En el área es posible separar algunos niveles geomorfológicos, que en este
trabajo dado su carácter regional no se diferencian.
Con base en algunos perfiles geológicos, se ha estimado un espesor cercano a los 600 m
(Ilustración No 3. 4). De acuerdo con sus características litológicas se puede decir que esta
unidad de depósito en un ambiente marino cercano a la playa.
La edad para esta formación ha sido establecida por Diana Gutiérrez con base en Ostrea
abrupta D’Orbigny como del Cretácico Superior (Ulloa & Rodríguez, 1976). Pulido (1980)
reporta para esta unidad, mediante análisis palinológico de una muestra colectada en el sitio
La Recebera, entre San Juan de Arama y el río Güejar, una edad Campaniano-Maestrichtiano.
La referencia original fue dada por Hubach 1941 (en van der Hammen, 1960), para describir
unas arcillas esquistosas grises y verdes con intercalaciones de areniscas y mantos de
carbón, que afloran unos 2 kilómetros al noroeste de El Morro, sobre el río Cravo Sur.
En el área de la plancha aflora en la Vereda Loma del Pañuelo (cuadrícula D-7), y hace parte
del denominado Sinclinal El Arenal donde, según cortes geológicos, alcanza un espesor
superior a los 250 m. (Ilustración No 3. 4). Está caracterizada morfológicamente por originar
una topografía suavemente ondulada, producto de su carácter dominantemente lodolítico.
En general, esta unidad está compuesta por arcillolitas de colores gris, verde, a veces con
tonos violáceos. Es frecuente observar algunas intercalaciones de arenitas medias de cuarzo,
de color blanco tono amarillento, con espesores hasta de 3 m. La unidad se superpone
concordantemente con los estratos del Grupo Palmichal y su contacto con las Areniscas de El
Limbo se puede considerar como paraconcordante con base en las diferencias de edades.
Esta unidad se ha considerado como depositada en un ambiente pantanoso a lagunar marino
(Ulloa & Rodríguez, 1976).
En el presente trabajo se tomaron algunas muestras para análisis palinológico, sin que se
reportara alguna información sobre palinoformos. Van der Hammen (1957) considera esta
unidad equivalente a la Formación Los Cuervos (Norte de Santander) y considera una edad
del Paleoceno.
Hubach (1941) (en van der Hammen, 1960) designa con este término una secuencia de
areniscas conglomeráticas, areniscas y arcillolitas que afloran unos 2 kilómetros al noroeste de
El Morro sobre el río Cravo Sur.
Aflora parcialmente en la Vereda San Pablo y forma parte del núcleo del Sinclinal El Arenal.
En general, se observó sobre el carreteable que conduce a la Vereda El Pañuelo cerca al sitio
El Arenal.
Nombre propuesto por Ulloa & Rodríguez (1976), para representar una serie de gravas
interestratificadas con limolitas que afloran sobre la quebrada La Corneta, próximo a la
localidad de Nazaret.
3.3.2. GEOMORFOLOGÍA
A nivel general y condicionado por la escala de trabajo empleada para el área de estudio se
destacan las unidades las unidades geomorfológicas tales como las de origen estructural –
denudacional sobre los paisajes de montaña y lomerío; las unidades de origen fluvial y coluvial
sobre los paisajes de piedemonte y altiplanicie, como también las unidades de origen fluvial
Como su nombre lo indica, este paisaje corresponde a las áreas localizadas sobre las
montañas del flanco Oriental de la Cordillera Oriental, con relieve abrupto, escarpado y muy
disectado, donde la fuerte actividad tectónica, ha afectado las extensas y potentes secuencias
de rocas sedimentarias del Cretácico y Terciario expuestas sobre el flanco Este de la
Cordillera Oriental. Allí se han desarrollado grandes estructuras plegadas falladas y
erosionadas, con pendientes estructuras, espinazos, escarpes, lomas y colinas; geoformas
que hacen parte de origen estructural – denudacional, desarrolladas sobre rocas
sedimentarias expuestas sobre el flanco Este de la Cordillera Oriental.
3.3.3.1.1 Escarpes
Están representados por grandes paredes casi verticales con decenas y centenas de metros
de altura producto de la acción de la acción de la erosión geológica, generalmente los
escarpes se desarrollan sobre las contrapendientes de las secuencias rocosas duras del
Terciario con granulometría variable, desde grueso a fino, en capas muy plegadas y
fracturadas. Se han diferenciado dos tipos de escarpes, los escarpes mayores con paredes
superiores a 500 metros de altura y los escarpes menores con alturas inferiores a 500 metros
de altura.
Esta unidad se encuentra localizada sobre los dos flancos de una amplia y extensa
estructura de tipo sinclinal asimétrico, cuyo eje sigue a la Quebrada Aguazula, al sur
del río Cravo Sur y a las quebradas Cortadera y Guanara.
Sobre el sector más occidental del área se encuentran escarpes mayores localizados
entre los ríos Charte y Pauto, siguiendo a lo largo de las márgenes izquierda y derecha
de las quebradas Agua Blanca y La Tablona respectivamente.
El segundo mayor escarpe, se encuentra formando una pared que bordea una franja al
SW de Yopal y se prolonga hasta la Quebrada La Niata. Esta unidad se desarrolla
sobre la contrapendiente de una potente secuencia homoclinal que hace parte del
flanco oriental de un amplio sinclinal.
Estas geoformas, son muy comunes en áreas donde afloran rocas sedimentarias
plegadas, falladas y afectadas por procesos de erosión geológica. Generalmente se
desarrollan dos tipos de formas, una sobre la dirección de la pendiente estructural y la
otra sobre la contrapendiente, generando escarpes de diferente altura. En la mayoría
de los casos los espinazos son asimétricos, pero se dan casos donde son simétricos y
homogéneos en su configuración.
Como su nombre lo indica, este paisaje se desarrolla en la zona de transición entre la montaña
y/o el lomerío con la planicie aluvial, se caracteriza por el cambio abrupto de la pendiente de
muy fuerte a casi plana y es el lugar donde suceden muchos fenómenos hidrológicos,
geomorfológicos y geológicos, siendo en este último aspecto temático la base de identificación
de grandes fallas que validan las evidencias de la actividad neotectónica desarrollada en
sectores propios de este tipo de paisaje.
Las principales características de este tipo de paisaje dentro del área de estudio radica en su
localización comprendida entre los 350 y 500 m.s.n.m., con una precipitación de 2500 mm y
temperatura de 24 °C, presenta relieve plano a ligeramente ondulado, con pendiente menor de
12% y generalmente coincide con la parte inicial de los ápices de los abanicos como el de
Yopal.
Los depósitos de los abanicos, se han desarrollado como producto de las sucesivas y
frecuentes descargas de materiales de diferente granulometría, procedentes de la erosión,
transporte y acumulación de sedimentos, especialmente durante las crecientes de tipo fluvio –
torrencial de los ríos que drenan desde la parte alta de la zona montañosa y luego son
descargados sobre la parte baja y plana de la planicie.
Corresponde a geoformas de origen fluvial, desarrolladas sobre el área del piedemonte y está
claramente afectada por fenómenos de neotectónica, dadas las evidencias de deformación
sobre los depósitos del Cuaternario de origen fluvial limitados por fallas activas. En el caso de
la Loma La Serpiente los sedimentos del Cuaternario han sido deformados desarrollando una
loma elongada de varios kilómetros de longitud con pendientes fuertes.
Este paisaje ha sido originado como producto del levantamiento neotectónico de antiguas
superficies de origen aluvial, conformadas por depósitos de abanicos y terrazas con relieve
plano ubicadas inmediatamente en la zona de transición entre el pie del sistema montañoso y
la zona del piedemonte y actualmente ocupan posiciones altas, se destacan las geoformas de
mesas, mesetas abanicos y niveles de terrazas antiguas disectadas y erosionadas, que en
otro tiempo fueron producto de la acumulación de sedimentos sobre una superficie de la
antigua planicie aluvial ligeramente inclinada con pendiente menor del 12% y limitada por
escarpes o taludes de terraza que posteriormente fueron afectadas por procesos erosivos. La
mayoría de las geoformas que hacen parte de este paisaje están constituidas por materiales
de origen fluvio – torrencial y fluvio – coluvial procedentes de la cordillera y acumulados hacia
la parte baja, dando origen posteriormente a formas planas levantadas y basculadas por
efecto de los movimientos neotectónicos. Estas superficies están afectadas por procesos de
erosión regresiva activa, que gradualmente van modificando el aspecto de cada una de las
geoformas, quedando finalmente relictos como testigo de estas superficies que en otra época
hacían parte integral de una antigua planicie aluvial de piedemonte, dándole la apariencia
actual del paisaje.
En la parte inferior del área de influencia directa del proyecto minero se identifica este tipo de
paisaje (Ver fotografías 3.7 y 3.8).
Fotografías No 3. 5 y No 3. 6 Vista del río Negro, aguas abajo del paisaje de piedemonte.
Estos depósitos se encuentran asociados a ambas márgenes de los principales ríos y se han
desarrollado como producto de su fuerte dinámica, durante los periodos de lluvias, es decir
cuando se presentan oscilaciones del nivel base de los ríos. Posteriormente se desarrollaron
varios niveles de terrazas en diferentes posiciones dentro de la zona de estudio, algunos de
los niveles de terrazas se encuentran levantados con respecto a los demás niveles, pero en la
Esta unidad corresponde a una parte de la unidad anterior, cuya superficie fue
levantada y basculada, pero posteriormente sometida a fuertes procesos de disección
y erosión profunda, a tal punto que allí se han desarrollado pequeños valles
intermitentes.
Se da este nombre al paisaje desarrollado en forma natural por procesos tectónicos y/o
orogénicos, cuyo relieve no supera los 500 m.s.n.m. y se encuentra bastante disectado por la
acción de las aguas de escorrentía superficial así como por la acción de procesos erosivos y
movimientos de remoción en masa.
Las unidades de origen estructural – denudacional, son aquellas que han sido desarrolladas
como producto de la acción combinada de fenómenos tectónicos, seguidos por la acción de
procesos erosivos causados por la acción de agente exógenos que han actuado bajo la
influencia de la fuerza de gravedad, para dar como resultado el modelado de las geoformas
que constituyen el paisaje actual.
Esta unidad se encuentra localizada a todo lo largo del frente montañoso dentro del
área de estudio, en transición hacia el piedemonte y/o la planicie aluvial, se caracteriza
por presentar una serie de lomas alargadas y disectadas, como resultado de procesos
erosivos desarrollados sobre secuencias de rocas arcillosas con intercalaciones de
areniscas conglomeráticas que forman esporádicos niveles de escarpes en varias
direcciones y que han sido labrados por la disección del drenaje.
Corresponde a la unidad de mayor extensión localizada entre los ríos Tua y Cusiana,
siguiendo el eje del Anticlinal de La Florida. También se le encuentra al norte del río
Cusiana ocupando parte del eje del Sinclinal de Zapatosa.
Esta unidad se encuentra constituida por las rocas de la Formación Caja la cual
presenta una composición hacia su base principalmente de arcillolitas, mientras que
hacia la parte media se localizan areniscas conglomeráticas, arcillolitas y limolitas y
hacia el techo conglomerados y arcillolitas.
Esta unidad se encuentra localizada sobre la margen izquierda del río Cusiana, más
exactamente entre el río Cusiana y el río Chiquito, allí se presentan colinas bajas
desarrolladas en rocas sedimentarias de la Formación Caja, compuestas por
arcillolitas, areniscas y limolitas intercaladas.
En este caso particular los sedimentos producidos por la erosión en la parte alta, son luego
transportados y depositados a lo largo y ancho de los valles estrechos encajonados, como
producto de la acción de la dinámica fluvial de los ríos que vienen a distribuirse a través de la
planicie aluvial del piedemonte y la extensa llanura aluvial con nivel de terraza.
Esta unidad se caracteriza por el intenso remoldeado debido al constante cambio del curso de
los ríos, lo que ha dado como resultado la presencia de extensas sucesiones de bancos y
bajos. En general en esta unidad se presentan esteros y problemas de erosión reticular.
En la parte más baja cerca al río Meta, la terraza aluvial fluvio – deltaica está influenciada por
depósitos eólicos que generan médanos, escarceos y zurales.
Corresponde a los depósitos aluviales que están localizados hacia las márgenes de los
ríos principales y secundarios, como producto de la acumulación sobre la antigua
planicie de inundación divagante y que hacen parte de la vega baja, o en algunos
casos de los niveles más bajos de las terrazas aluviales asociadas a las dos márgenes
de los ríos principales.
3.3.3. Geotecnia
3.4.1. Suelos
Suelos conformados por diques y bajos, contenidos en la llanura aluvial de desborde, toman
forma de camellones curvados, presentan una morfología plana cuyas pendientes no superan
el 3%. Presentan buen drenaje; son tierras dedicadas a la ganadería extensiva con predominio
de pastos naturales y presentan bajo desempeño en la agricultura de subsistencia.
Suelos de relieve plano cóncavo, con ligeras pendientes de 0-3%, son suelos muy
superficiales, presentan drenaje pobre y son susceptibles de encharcamiento frecuente, por lo
que existe presencia de zurales bien definidos. Son suelos utilizados para la ganadería
extensiva.
PVcap: Esta unidad se sitúa sobre abanicos antiguos del piedemonte, las principales
limitaciones de uso de esta unidad son la pobreza en nutrientes, altos contenidos de
aluminio y presencia de capas pedregosas.
3.4.2.1. Climatología
3.4.2.1.1. Precipitación.
Villavicencio tiene un clima tropical. En la mayoría de los meses del año en Villavicencio hay
precipitaciones importantes. No es solo una corta estación seca, pero no es eficaz. La
clasificación del clima de Köppen-Geiger es Am. La temperatura media anual en Villavicencio
se encuentra a 25.5°C. La precipitación es de 3.856 mm al año.
El mes más seco es enero, con 51 mm. 529 mm, mientras que la caída media en mayo. El
mes en el que tiene las mayores precipitaciones del año.
Fuente: CLIMATE-DATA-ORG
3.4.2.1.2. Temperatura
En Villavicencio la temperatura depende de la altura, la cual varía desde 200 a 3.700 m.s.n.m.
registrándose temperaturas desde los 25.5°C promedio anual en la Llanura hasta los 6 °C en
la cordillera. La temperatura también guarda cierta relación con la precipitación, de manera
que los meses más calurosos son aquellos en que la lluvia es menor, en
especial febrero y marzo, en 2015 enero era el mes de verano pero lo más raro era que
durante ese mes era solo lluvias. En los cuales la temperatura máxima sobrepasa en la zona
urbana los 35 °C, y los meses más frescos son aquellos considerados como los meses más
lluviosos, en enero, mayo y julio siendo la temperatura máxima alrededor de 29 y 32°C.
El mes más caluroso del año con un promedio de 26.7°C de febrero. El mes más frío del año
es de 24.6°C en el medio de junio.
El brillo solar es de unas 1.200 horas al año, lo que indica que el sol sale entre 6 y 7 horas
diarias, la precipitación pluvial alcanza los 5.062 mm de agua, promedio anual. El régimen
anual para el vector viento, tiene como sentido predominante la dirección NE y NW y está
asociado a la dinámica de los vientos Alisios, con valores de velocidad media anual de 7,2
El área de estudio presenta un clima tropical, recibe directamente la radiación solar a lo largo
del año. Adicionalmente la precipitación, la humedad de la atmósfera y la poca variación de la
verticalidad de los suelos, inciden en la conformación de ecosistemas particulares de sabana y
humedales del oriente, los cuales son refugio de importantes cantidades de individuos
faunísticos y florísticos. Se clasifica entonces dentro de un clima de tipo Cálido Húmedo y
Cálido Seco.
Ilustración No 3. 18 Parámetros climáticos promedio de Villavicencio
El área de influencia del proyecto, presenta valores mínimos de presión sonora, debido a la
presencia baja a nula de agroindustria. Tampoco se encuentran fuentes fijas de emisión
atmosférica.
Se genera dispersión de material particulado debido al tránsito vehicular por vías sin
pavimentar.
Desde el punto de vista geomorfológico y de hidráulica fluvial, los cauces que recorren el
municipio de Villavicencio, son ríos torrenciales de montaña, trenzados que presentan
divagación de cauces, socavación de orillas, alta tasa de arrastre de materiales desprendidos
por la actividad de fallamiento que caracteriza a Villavicencio y que en la época de lluvias
aumentan su caudal intensificando el proceso de gradación de las orillas desprotegidas.
El río Negro nace en la Cordillera Oriental, el material geológico está conformado por lutitas,
pizarras y esquistos cloríticos; estás características unidas a los procesos actuales de
escurrimiento difuso, movimientos en masa y desprendimiento de rocas provocan una mayor
degradación que la convierte en una cuenca erosionada.
Las características hidrométricas observadas por CORMACARENA durante un año dan los
siguientes resultados: Caudal máximo 731 m³/seg, mínimo 30 m³/seg y medio 150 m³/seg.
Este río sirve de límite con Villavicencio pasando por Loma de San Juan, Loma del Pañuelo, el
Rosario, Las Margaritas, San Cayetano y San José de las Palomas principalmente.
Es el río más importante del sector y se forma de dos afluentes principales, el río Blanco que
nace en el cerro de Paila y el Negro que nace en el Páramo Chamizal. El río confluye a 6 km.
aguas debajo de la población Rincón de Pajure. Sobre la hoya de este río se localizan las
mayores intensidades de lluvias, superiores a 7500 mm al año.
De acuerdo con los resultados de análisis de las muestras tomadas por Saneamiento
Ambiental, el agua está bacteriológicamente contaminada, presentando 910 microorganismos
por milímetro de agua, siendo no apta para consumo, dado que sobre pasa los valores
admisibles según el Ministerio.
Para el ganado se emplean los humedales naturales que se encuentran al interior de las
haciendas, los cuales son usados principalmente en la época de invierno, por ser el período en
el cual estas áreas almacenan agua.
En el proyecto minero, se realizó análisis de calidad aguas arriba y aguas abajo del polígono
definido por el Contrato de Concesión N° 18651.
Los métodos analíticos utilizados como referencia para el desarrollo de los ensayos de
laboratorio son reconocidos nacional e internacionalmente y están basados en “Standard
Methods for the Examination of Water and Wastewater” Edición 22ND 2012. Los cuales son
sometidos a pruebas de validación, según las indicaciones presentadas en el Procedimiento
Interno Estandarización de Métodos Analíticos “PGL-EMA-01”.
Esta área presenta niveles importantes de precipitación durante casi todo el año, el agua lluvia
por la escasa pendiente y teniendo en cuenta el material rocoso de los depósitos, percola a
profundidad manteniendo el nivel freático de los acuíferos existentes. En época de estiaje el
nivel superficial del agua o espejo de agua disminuye pero a profundidad el nivel freático se
mantiene.
III. Rocas (III1) Acuíferos menores con recursos locales y limitados en rocas
granulares o ígneas a metamórficas terciarias a jurásicas y en depósitos no
fisuradas que consolidados de ambiente lacustre, marino y deltaico.
forman acuíferos (III2) Complejos ígneo-metamórficos consolidados y fracturados
insignificantes por terciarios a precámbricos con baja a ninguna productividad de agua
porosidad primaria subterránea, fuentes termales asociadas a la tectónica local.
con recursos
limitados o sin
recursos.
3.4.4.1. Flora
El estudio de impacto ambiental para el proyecto Hormigón Andino S.A. con Contrato de
Concesión N° 18651 se ubica en la Región de la Orinoquía, departamento del Meta, municipio
de Villavicencio, a unos 28 km aproximadamente del casco urbano y abarca una superficie de
328,4557 hectáreas.
Las diferencias en el uso del suelo, diversas comunidades vegetales o en diferentes estados
sucesionales, se tomaron como sitios de observación. En estas zonas, se realizaron
3.4.4.1.2. Composición
Para evaluar la composición de una comunidad florística existen dos formas básicas: a través
de transectos o parcelas y a través de recorridos, los muestreos tienen en cuenta una sección
del bosque y a través de los resultados obtenidos se puede inferir acerca de la composición
del lugar.
Muestreos: Selección de los sitios. Los sitios de trabajo son lo suficientemente representativos,
es decir que a través de la información obtenida de ellos se pudo tener una idea más amplia
de lo que sucede en el polígono del contrato de concesión.
En este caso es importante destacar que se trata de un diagnostico general, es decir qué hay,
cuánto hay y, en qué estado se encuentra. Para la selección de los sitios de muestreo se tuvo
en cuenta los diferentes tipos de cobertura que se presentan en el área de influencia, pues la
composición florística y los grupos dominantes varían según el grado de madurez,
intervención, topografía y variantes ambientales.
En muchos casos a primera vista se observa que el bosque o el fragmento son homogéneos,
pero una vez se entra, se ven las deferencias en su estructura debido a diversas
circunstancias.
El trabajo se inició con recorridos por el área que permitieron ver el sitio, sus distintos tipos de
cobertura, y posibles puntos de muestreo. Una vez seleccionados los sitios se procedió a la
aplicación de la metodología de campo para la evaluación florística. El método rápido de
evaluación es el propuesto por Gentry en 1982, el cual es aplicable a todo tipo de cobertura
boscosa.
En este caso se hicieron diez transectos de 50 x 2 metros, totalmente en línea recta; en cada
uno de ellos se registraron todos los individuos con diámetro a la altura del pecho (DAP a 1.3
metros de altura) mayor o igual a 10 cm, se registraron también las especies, su altura y se
identificó el ejemplar por lo menos hasta morfotipo.
La información obtenida en este muestreo (0.1 Ha.) comprendió: número de especies, altura
media, diámetro medio, área basal (el área que ocupa cada uno de los individuos en el área
muestreada), número de especies por estrato, rangos de alturas y diámetros, etc. En el mismo
transecto se evaluaron los grados de epifitismo, regeneración (número de plántulas y juveniles
de especies arbóreas y arbustivas).
fecha: 21/02/15
NOMBRE DE PREDIO: Laberinto T-4
1 Lacre Vismia guianensis 8 0,17 0,02269 0,109
2 Lacre Vismia guianensis 10 0,12 0,01130 0,068
3 Guamo Inga sp 10 0,28 0,06154 0,369
4 Lacre Vismia guianensis 6 0,13 0,01327 0,048
5 Balso Ochroma sp 9 0,17 0,02269 0,123
6 Guayabete Psidium caudatum 10 0,11 0,00950 0,057
7 Balso Ochroma sp 14 0,21 0,03462 0,291
9 Dormidero Abarema sp 8 0,1 0,00785 0,038
10 Arrayan Myrcia sp 10 0,1 0,00785 0,047
11 Pomarroso Eugenia jambos 4 0,1 0,00785 0,019
12 Balso Ochroma sp 15 0,12 0,01130 0,102
13 Tuno Bellucia grassularioides 8 0,11 0,00950 0,046
NOMBRE ALT.COM
No NOMBRE DAP (m) AB (M²) VOL(M³)
CIENTIFICO (m)
NOMBRE DE PREDIO: Laberinto fecha: 21/02/15 T-5
Yopo Piptadenea
1 1 0,01 0,00008 0,000
blanco apacifolia
2 Dormidero Abarema sp 3 0,02 0,00031 0,001
3 Dormidero Abarema sp 6 0,03 0,00071 0,003
Yopo Piptadenea
4 6 0,04 0,00126 0,005
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
5 5 0,05 0,00196 0,006
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
6 7 0,06 0,00283 0,012
blanco apacifolia
7 Guayabete Psidium 2 0,07 0,00385 0,005
NOMBRE ALT.COM
No NOMBRE DAP (m) AB (M²) VOL(M³)
CIENTIFICO (m)
fecha: 21/02/15
NOMBRE DE PREDIO: Laberinto T -6
1 DormideroAbarema sp 3 0,01 0,00008 0,000
2 Arrayan Myrcia sp 2 0,02 0,00031 0,000
3 Arrayan Myrcia sp 2 0,03 0,00071 0,001
4 Balso Ochroma sp 5 0,04 0,00126 0,004
Shefflera
5 Yagrumo 5 0,05 0,00196 0,006
morototoni
Shefflera
6 Yagrumo 3 0,06 0,00283 0,005
morototoni
Bellucia
7 Tuno 3 0,07 0,00385 0,007
grassularioides
8 Dormidero Abarema sp 3 0,08 0,00502 0,009
Vismia
9 Lacre 4 0,09 0,00636 0,015
guianensis
10 Dormidero Abarema sp 3 0,10 0,00785 0,014
Psidium
11 Guayabete 5 0,11 0,00950 0,028
caudatum
NOMBRE ALT.COM
No NOMBRE DAP (m) AB (M²) VOL(M³)
CIENTIFICO (m)
NOMBRE DE PREDIO: Laberinto fecha: 21/02/15 T-7
1 Dormidero Abarema sp 7 0,13 0,01327 0,056
2 Dormidero Abarema sp 5 0,11 0,00950 0,028
Bellucia
3 Tuno 12 0,10 0,00785 0,057
grassularioides
Yopo Piptadenea
4 20 0,38 0,11335 1,360
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
5 18 0,51 0,20418 2,205
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
6 16 0,52 0,21226 2,038
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
7 16 0,52 0,21226 2,038
blanco apacifolia
Bellucia
8 Tuno 4 0,11 0,00950 0,023
grassularioides
Yopo Piptadenea
9 20 0,38 0,11335 1,360
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
10 20 0,42 0,13847 1,662
blanco apacifolia
11 Dormidero Abarema sp 8 0,22 0,03799 0,182
12 Dormidero Abarema sp 6 0,23 0,04153 0,149
13 Dormidero Abarema sp 7 0,12 0,01130 0,047
14 Dormidero Abarema sp 5 0,11 0,00950 0,028
Bellucia
15 Tuno 12 0,10 0,00785 0,057
grassularioides
16 Dormidero Abarema sp 14 0,44 0,15198 1,277
Bellucia
17 Tuno 12 0,10 0,00785 0,057
grassularioides
NOMBRE ALT.COM
No NOMBRE DAP (m) AB (M²) VOL(M³)
CIENTIFICO (m)
NOMBRE DE PREDIO: Laberinto fecha: 21/02/15 T-9
Psidium
1 Guayabete 8 0,10 0,00785 0,038
caudatum
Psidium
2 Guayabete 9 0,10 0,00785 0,042
caudatum
3 Dormidero Abarema sp 6 0,23 0,04153 0,149
4 Dormidero Abarema sp 7 0,12 0,01130 0,047
5 Dormidero Abarema sp 6 0,12 0,01130 0,041
Vismia
6 Lacre 6 0,13 0,01327 0,048
guianensis
7 Yopo Piptadenea 18 0,25 0,04906 0,530
NOMBRE ALT.COM
No NOMBRE DAP (m) AB (M²) VOL(M³)
CIENTIFICO (m)
fecha:
NOMBRE DE PREDIO: Laberinto T - 10
21/02/15
Bellucia
1 Tuno 12 0,10 0,00785 0,057
grassularioides
2 Dormidero Abarema sp 5 0,11 0,00950 0,028
Bellucia
3 Tuno 4 0,11 0,00950 0,023
grassularioides
Yopo Piptadenea
4 20 0,42 0,13847 1,662
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
5 18 0,28 0,06154 0,665
blanco apacifolia
Yopo Piptadenea
6 16 0,35 0,09616 0,923
blanco apacifolia
Psidium
7 Guayabete 10 0,08 0,00502 0,030
caudatum
8 Balso Ochroma sp 14 0,21 0,03462 0,291
Vismia
9 Lacre 15 0,12 0,01130 0,102
guianensis
10 Arrayan Myrcia sp 8 0,20 0,03140 0,151
11 Dormidero Abarema sp 7 0,12 0,01130 0,047
3.4.4.1.3.1. Estructura
Para determinar la estructura del bosque se tuvieron en cuenta los siguientes aspectos:
Entre los grupos dominantes en este tipo de bosques se encuentran plantas de las
familias: Mimosaceae, Fabaceae, Hypericaceae, Myrtaceae, Anacardiaceae,
Simarubaceae, Araliaceae, Melastomatáceas, Verbenáceas, Ericáceas y presencia de
especies como: Yarumos, yopo blanco, dormidero, Balsos, etc.
Son la reserva más grande de alimento para la fauna del interior del bosque; su
densidad y diversidad están asociadas al estado del bosque, las cuales presentan un
número abundante de individuos con alturas inferiores a 0,5 m que generan una
cobertura densa y protectora del horizonte orgánico del suelo.
Este bosque está muy intervenido por el hombre, presenta poca densidad de fustales
(árboles con DAP menores de 1O cm), pero con una alta capacidad de regeneración
ya que Ia poca cobertura que brindan las copas de los árboles, permite el crecimiento
de nuevas plantas como el guamo (Inga sp) ,bijao (Colathea sp), platanillo (Heliconia
sp), cajeto (Rhnrea flavercscens), palma común (Dictocarium sp), bajagua (Cossía
reticulata), pata de vaca (Bauhicnia picta), caucho (Sapium sp) y guásimo (Guasuma
umbifolia) entre otras que conformarán nuevamente el bosque de galería. Las especies
más frecuentes observadas fueron: El lechoso (Psuudolmedia sp), garrapatos (Hirtella
sp), anime (Protium sp).
c) El estrato medio o latizal: Está compuesto por árboles de menor porte, arbustos y/o
arbolitos suprimidos por el estrato dominante; corresponden a un estadio temprano de
sucesión con alturas que oscilan entre 2 y 5 m de altura y diámetros entre 5 y 9 cm.
En este estrato abundan las enredaderas, las cuales no permiten el paso de luz al
sotobosque y dificultan el tránsito de personas. Se observan helechos, ortiga y
ejemplares de cordoncillo.
h) Epífitas: Son plantas que crecen sobre otras plantas, sin obtener de ellas más que
apoyo y sostén; entre ellas se observan, bromelias, anturios, helechos, musgos,
líquenes y otros grupos.
Nombre No.
%
común Árboles
Yopo
27 18,75
blanco
Dormidero 44 30,56
Lacre 17 11,81
Tuno 16 11,11
Arrayan 9 6,25
Guayabete 15 10,42
Hobo 2 1,39
Guamo 3 2,08
Pomarroso 1 0,69
Balso 7 4,86
Palo
1 0,69
blanco
Yagrumo 2 1,39
TOTAL 144 100,00
300
250
200
150
100 %
50
0 No. Árboles
Fuente: EMS de Colombia S.A.S. – 2015 Fuente: EMS de Colombia S.A.S. – 2015
8
P1 ARB
7
6 P2 ARB
5 P3 ARB
4 P4 ARB
3
2 P5 ARB
1 P6ARB
0 P7 ARB
P8 ARB
P9 ARB
%
Yopo blanco 8 10
Dormidero 10 10
Lacre 8 10
Tuno 9 10
Arrayan 7 10
Guayabete 9 10
Hobo 2 10
Guamo 2 10
Pomarroso 1 10
Nombre
Pres No. Sub
común
12
10
6 Frecuencia Absoluta
Pres
4 Frecuencia Absoluta
No. Sub
2
La especie dormidero (Abarema sp) está presente en cada subparcela inventariada, mientras
que el guayabete (Psidium caudatum) y el tuno (Bellucia grassularioides).se encuentran en el
90% de la subparcelas.
FRECUENCIA RELATIVA
Nombre
FR
común
Yopo blanco 12,90
Dormidero 16,13
Lacre 12,90
Tuno 14,52
Arrayan 11,29
Guayabete 14,52
Hobo 3,23
Guamo 3,23
Pomarroso 1,61
Balso 6,45
Palo blanco 1,61
Yagrumo 1,61
TOTAL 100,00
Fuente: EMS de Colombia S.A.S. – 2015
Ilustración No 3. 27 Frecuencia Relativa
Palo blanco
Hobo
Balso
Yagrumo
Lacre
Guamo
Arrayan
Yopo blanco
Pomarroso
Dormidero
Tuno
Guayabete
Fuente: Libro Plantas utiles de la cuenca Fuente: Libro Plantas utiles de la cuenca
de la Orinoquia. de la Orinoquia.
Nombre común AB %
Yopo blanco 4,50 51,32
Dormidero 1,68 19,18
Lacre 0,25 2,87
Tuno 0,15 1,77
Arrayan 0,58 6,68
Guayabete 0,40 4,56
Hobo 0,24 2,69
Guamo 0,37 4,24
Pomarroso 0,01 0,09
Balso 0,38 4,30
Palo blanco 0,12 1,37
Yagrumo 0,08 0,94
TOTAL 8,760 100,00
Fuente: EMS de Colombia S.A.S. – 2015
El yopo blanco (Piptadenea apacifolia), representa la especie con mayor Área Basal,
seguida del dormidero (Abarema sp) y el arrayan (Myrcia sp.).
AB
10.00
5.00
0.00 AB
DOMINANCIA RELATIVA
DOM
Nombre común
REL
Yopo blanco 51,32
Dormidero 19,18
Lacre 2,87
Tuno 1,77
Arrayan 6,68
Guayabete 4,56
Hobo 2,69
Guamo 4,24
Pomarroso 0,09
Balso 4,30
Palo blanco 1,37
Yagrumo 0,94
DOM REL
60.00
50.00
40.00
30.00
20.00
10.00
0.00 DOM REL
Tuno
Hobo
Dormidero
Guamo
Yagrumo
Balso
Yopo blanco
Lacre
Arrayan
Pomarroso
Palo blanco
Guayabete
I.V.I = Abundancia relativa (%) + Frecuencia relativa (%) + Dominancia relativa (%)
INDICE VALOR
IMPORTANCIA
Nombre común IVI
Yopo blanco 82,970
Dormidero 65,863
Lacre 27,583
Tuno 27,396
Arrayan 24,215
Guayabete 29,491
Hobo 7,302
Guamo 9,551
Pomarroso 2,397
Balso 15,615
Palo blanco 3,677
Yagrumo 3,939
IVI
Yopo blanco
Dormidero
Lacre
Tuno
Arrayan
Guayabete
Hobo
Guamo
El siguiente cuadro muestra el volumen calculado por especie, en arboles >10 cm de DAP:
ESPECIES Vol %
Yopo blanco 41,250 72,86
Dormidero 7,125 12,58
Lacre 1,432 2,53
Tuno 0,687 1,21
Arrayan 0,940 1,66
Guayabete 0,610 1,08
Hobo 1,251 2,21
Guamo 1,281 2,26
Pomarroso 0,019 0,03
Balso 1,654 2,92
Palo blanco 0,180 0,32
Yagrumo 0,188 0,33
total 56,617 100
En lo relacionado con volumen por familia se encontro lo siguiente: El 42% del volumen lo
aportan las Mimosaceae, el 8% las Fabaceae.
VOLUMEN POR
ESPECIES
Yopo blanco
Dormidero
Lacre
Tuno
Arrayan
Guayabete
Hobo
Guamo
Pomarroso
Balso
Palo blanco
Yagrumo
total
Familia VOL
Mimosaceae 42,5313
Fabaceae 8,0645
Hypericaceae 1,4320
Melastomataceae 0,6870
Myrtaceae 0,6292
Anacardiaceae 1,2510
Bombacaceae 1,65
Simarubaceae 0,18
Araliaceae 0,19
TOTAL 56,62
Mimosaceae
Fabaceae
Hypericaceae
Melastomataceae
Myrtaceae
Anacardiaceae
Bombacaceae
Familia ARBOLES %
Mimosaceae 30 20,833
Fabaceae 53 36,806
Hypericaceae 17 11,806
Melastomataceae 16 11,111
Myrtaceae 16 11,111
Anacardiaceae 2 1,389
Bombacaceae 7 4,861
Simarubaceae 1 0,694
Araliaceae 2 1,389
TOTAL 144 100,000
Las fabáceas o leguminosas son una familia del orden de las fabales, abarca árboles,
arbustos, además de hierbas perennes o anuales, fácilmente reconocibles por su fruto tipo
legumbre y sus hojas compuestas y estipuladas. A la familia de las Mimosaceae pertenecen
3.4.4.2. Fauna
Mamíferos: Son las especies más afectadas por la intervención antrópica, habiendo
sido desplazadas de su hábitat original, la mayor parte de estas han alcanzado el
estado de peligro de extinción, debido a la presión de caza, deforestación y ausencia
de programas de re-poblamiento.
CLASE AMPHIBIA
ORDEN ANURA
NOMBRE MÉTODO DE
FAMILIA ESPECIE GREMIO
COMÚN REGISTRO
Bufonidae Rhinella marina Sapo Observado Carnívoro
Pseudopaludicola
Rana vaquera Auditivo Insectívoro
llanera
Leiuperidae
Pseudopaludicola
Rana Observado Insectívoro
boliviana
Leptodactylus
Leptodactylidae Sapo picudo Observado Carnívoro
fuscus
Hypsiboas Información
Hylidae Rana platanera Insectívoro
crepitans comunidad
Reptiles: Son más representativos en la zona, por lo general están adaptados a las
matas de monte y bosque de galería, los cuales cada día son menos, a medida que se
potrerizan las cuencas y microcuencas.
NOMBRE
ORDEN FAMILIA ESPECIE
COMUN
Chelonoidis
Testudines Testudinidae Morroco
carbonaria
Squamata Iguanidae Iguana Iguana
Boa
Boide guio
constrictor
Elapidae Micrurussp Coral
Colubridae Tantilla sp Coral
De las especies de anfibios registradas para la zona ninguna se encuentra registrada dentro
de las categorías CITES, ni en la resolución 383 de 2010 expedida por el Ministerio de
Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, ni en la base de datos de Unión Internacional para
la Conservación de la Naturaleza.
El territorio del municipio de Villavicencio corresponde a una área de 130.084 Ha + 8.648 m2,
distribuidos en 5.454,98 Ha de suelo urbano (4,19% del área total) y 124.629,88 Ha de suelo
El municipio de Villavicencio cuenta con un total de 56 veredas, situación que implica múltiples
interrelaciones físico espaciales y urbano-rurales, según factores como la diversidad de
actividades económicas, grupos sociales e intereses sobre el territorio, donde se observa los
diferentes tipos de uso del suelo, factores de movilidad, relacionamiento funcional y
productivo, y la existencia de infraestructuras que inciden y soportan la dinámica económica y
social, que a su vez es soportada por la estructura natural.
De acuerdo con los registros oficiales del IGAC, se observa que el municipio de Villavicencio
en su área rural pasó de tener 9.624 unidades prediales para el año 2002, a registrarse un
total de 28.797 predios en el año 2012, es decir que en tan solo en 10 años se ha triplicado la
cifra de inmuebles rurales, en menor intensidad pero en la misma tendencia. Es preciso anotar
que son múltiples los factores que han motivado el alto nivel de fraccionamiento del suelo
rural, como se discrimina a continuación:
Otros factores sociales que inciden como la migración poblacional causada por
diferentes razones como el desplazamiento forzado y expectativas laborales.
3.5.4. Vivienda
Adobe
MATERIAL PARED
Zinc 7%
13% Ladrillo
Zinc
Adobe
Ladrillo
80%
MATERIAL TECHO
Concreto
Zinc 7%
33%
Concreto
Teja Eternit
Zinc
Teja Eternit
60%
MATERIAL PISOS
Mineral
7%
Cemento
Tierra
40%
13%
Cemento
Baldosa
Tierra
Mineral
Baldosa
40%
3.5.5. Salud.
Los usuarios que viven en las veredas del AID, reciben atención médica en Villavicencio,
teniendo en cuenta que en las veredas no existen infraestructuras que permitan prestar los
servicios de salud.
EXISTENCIA DE
MUNICIPIO INFRESTRUCTURA Observaciones
VEREDA DE SALUD
La población es atendida en puesto
0
LAS MERCEDES de Salud de la Cuncia y Villavicencio.
RIO NEGRITO 0
VILLAVICENCIO
0 Esta población recibe atención en
SURIA
Porfía y Villavicencio.
SAN LUIS DE
0
OCOA
FUENTE Y
VEREDA CAPTACION ASEO ALCANTARILLADO LUZ GAS
DE AGUA
La vereda
cuenta con un El sistema de
No existe un tratamiento
tanque de disposición final
de aguas residuales
almacenamiento para los residuos
domésticas, el sistema
de agua para sólidos en fincas
utilizado es a través de
beneficiar es a campo
Vereda La pozo séptico, esto en
viviendas del abierto o 95% 60%
Concepción algunas fincas, en otros
centro poblado. incineración. Los
predios es llevado por
El agua para las residuos son
canal o tubería hasta los
fincas es dispuestos en
potreros, contaminando
tomada de fosas para ser
ríos.
caños y quemados.
nacederos.
De acuerdo con la información suministrada por los presidentes de las JAC de cada vereda se
presentan las siguientes características:
Tabla No 3. 33 Vivienda y cobertura de servicios públicos de las veredas de AID para el Municipio de
Villavicencio
Fuente: Equipo consultor, encuestas y entrevistas con los presidentes de las JAC de cada vereda, 2013
El 80% de la población del sector rural dispone del servicio de acueducto. Debido a
estacionalidad en las viviendas la cobertura no ha sido aprovechada por la totalidad de los
usuarios, dado que se abastecen de fuentes de agua subterránea.
SERVICIO DE ACUEDUCTO
Sin Servicio
20%
Con
Servicio
Con
Servicio
80%
3.5.6.2. Alcantarillado.
Las veredas del AID no cuenta con el servicio de alcantarillado para los sistemas de
evacuación de aguas residuales; únicamente disponen de pozos sépticos para el vertimiento
de aguas servidas; además de que una pequeña porción de la población ha optado por verter
las aguas sin tratamiento directamente al rio, ocasionando un impacto tanto a la fuente hídrica
como a los usuarios del servicio ambiental que presta el rio.
La estructura de servicio eléctrico es prestada por la empresa Electrificadora del Meta, con
una cobertura del 100% en la zona rural, a excepción del asentamiento localizado en
cercanías al rio. Actualmente la población de estudio no cuenta con el servicio de alumbrado
público.
3.5.6.5. Telecomunicaciones.
Los operadores de celular CLARO, MOVISTAR y TIGO prestan sus servicios de comunicación
para los habitantes de las veredas del AID.
La señal de televisión permite captar los canales nacionales, según lo evidenciado en la visita
a campo.
3.5.6.6. Educación
El servicio de educación en la zona rural está limitado debido a que se presta únicamente el
nivel de escolaridad básica primaria, de modo que se ha notado la migración de los
estudiantes del sector rural hacia las instituciones del casco urbano, con el fin de culminar sus
estudios de básica secundaria y educación superior.
VEREDAS AREA DE
ESTABLECIMIENTO EDUCATIVO MUNICIPIO DE
ESTUDIO MUNICIPIO DE
VILLAVICENCIO.
VILLAVICENCIO.
Cuenta con el Colegio de las Mercedes hasta el grado 11,
LAS MERCEDES como mega colegio agropecuario en buen estado y
recientemente ampliado.
Cuenta con una escuela en regular estado, la gran
RIO NEGRITO mayoría estudian en el centro educativo de La
Concepción.
Cuenta con escuela rural y la infraestructura del Colegio
SURIA Las Palmas en cercanías del área urbana de Ciudad
Porfía.
No cuenta con establecimiento educativo, estudian en la
SAN LUIS DE OCOA
Cuncia.
La red vial rural en general se encuentra en regular estado, no existe señalización en las vías,
faltan puentes sobre caños que permitan el acceso a gran parte del sector.
3.5.7. Entrevistas a los habitantes de las veredas del área de influencia directa (AID).
La señora María
manifiesta que solo
cuentan con servicio de
luz.
El agua la adquieren
SERVICIOS
de las quebradas
PUBLICO
aledañas. En cuento a
salud y educación se
deben desplazar hasta
el Municipio de
Villavicencio