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Neutralización con álcali.

Hoy en día, el método más común para la neutralización de grasas y


aceites es la neutralización con solución de soda cáustica. En el transcurso de la reacción, los
jabones y el agua se forman a partir de los ácidos grasos libres de la siguiente manera:

A presión normal, esta reacción procede completamente de izquierda a derecha a temperaturas de


60 - 85 ° C. Los jabones formados se pueden dividir trabajando de derecha a izquierda a una presión>
30 bar. La división de jabón con ácidos minerales (véase el Capítulo 7.2.7) es más común. La
neutralización se puede realizar de forma discontinua, semicontinua o continua. En todos los casos,
el aceite calentado se pone en contacto con la solución de soda cáustica.

La solución acuosa de jabón se separa y el aceite se lava y se seca.

Pardun (1979) informó sobre ensayos de neutralización con amoníaco. El proceso, sin embargo, no
tuvo éxito en la práctica. La cantidad de lejía alcalina que es necesaria para la neutralización, casi
exclusivamente solución de sosa cáustica, se determina mediante la titulación del aceite
inmediatamente antes de la neutralización. Esto generalmente no se hace en el laboratorio, sino en
el piso de la fábrica. A partir del resultado de la titulación, los operadores de la planta pueden leer
la cantidad requerida de soda cáustica de las tablas. Dependiendo de la fuerza de la lejía (a menudo
en unidades de Baume, abreviatura Be), se aplica un exceso de 5-25% para garantizar la
neutralización completa (figura 7.5). En los Estados Unidos, todavía existen algunas plantas antiguas
en las que el aceite se neutraliza a 20-30 ° C (neutralización en frío). Sin embargo, este proceso está
desapareciendo gradualmente. Debido a la diferente composición de las grasas de los ácidos grasos
de diferente peso molecular, la cantidad de soda cáustica requerida para la neutralización también
es diferente (Tabla 7.1). La cantidad L (en litros) de solución de lejía N-normal necesaria para
neutralizar 1 TM de aceite puede calcularse de la siguiente manera:

Si se debe calcular la cantidad C (kg) de soda cáustica, NaOH, se deben agregar 40 N en el numerador
y 1000 en el denominador, lo que da como resultado lo siguiente:
En esta fórmula, se usa un peso molecular promedio para propósitos prácticos. Debido a los
diferentes pesos moleculares promedio de diferentes aceites y grasas y sus diferentes densidades
específicas (véase el Capítulo 2.3.2.3), que ingresan la fórmula a través del porcentaje de FFA, se
calculan diferentes cantidades de soda cáustica para la neutralización de diferentes grasas (Tabla
7.2). Baume es una medida antigua para la densidad (0 Baume es equivalente a la densidad de una
solución al 10% de cloruro de sodio y 60 Be corresponde a una densidad de 0,745; véase también la
Fig. 7.6).

Se puede ver que las cantidades de lejía necesarias para neutralizar los aceites vegetales comunes
son todas del mismo orden de magnitud y que solo las grasas de palma (láuricas) y de colza con alto
contenido de ácido erúcico (ya no son comunes) difieren sustancialmente. Por lo tanto, es posible
cubrir todo el espectro con dos números de bloque. Para garantizar la neutralización completa, se
debe usar un exceso de lejía. La Tabla 7.3 muestra los factores que influyen en este exceso. La
aplicación de exceso de lejía es limitada porque algunos efectos son positivos, pero pueden volverse
fácilmente negativos. Por ejemplo, el contacto intenso de la lejía con el aceite es positivo, por un
lado, para mantener el exceso de lejía pequeña; por otro lado, el peligro de formación de emulsión
aumenta con una mayor velocidad de agitación. Porque las emulsiones son difíciles de romper y
causar problemas en producción, es más eficiente al final para aumentar la cantidad de lejía. Se
necesita menos lejía en exceso para los ácidos grasos insaturados porque los jabones de los ácidos
grasos insaturados son líquidos y no arrastran a la lejía (Rudischer 1959).

Después de la separación del jabón, el aceite se lava con agua hasta que esté libre de jabón y se seca
al vacío. La neutralización es seguida por (interesterificación, si es necesario) blanqueamiento y
desodorización. En los viejos tiempos, también era bastante común neutralizar el aceite usando cal
sin cal en lugar de soda cáustica. Se considera fraudulento agregar lima sin laminar a los crudos con
un FFA por encima de la especificación a fin de reducir el contenido de FFA, llevándolo de nuevo
dentro de los límites de la especificación. Además, este proceso perjudica al cliente que recibe el
aceite debido a los sedimentos de sedimentos, que son difíciles de eliminar, se depositan en tanques
de almacenamiento de petróleo. Si los aceites son difíciles de refinar con técnicas de neutralización
comunes, se puede incluir una etapa de ebullición de vidrio de agua de soda. Los silicatos que
precipitan se unen a las partículas no deseadas. La ebullición del vidrio soluble se lleva a cabo a
temperaturas de 100 a 105 ° C y demora entre 15 y 30 minutos. Las cantidades aproximadas de
energía requeridas para los procesos de neutralización comunes por tonelada de petróleo son las
siguientes: proceso discontinuo, 150 kg de vapor y 4 kwh de energía eléctrica; proceso centrífugo,
85 kg de vapor y 13 kwh de energía eléctrica.

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