Todas las y los jóvenes mexicanos se formen como

ciudadanos libres, participativos, responsables

e informados, capaces de ejercer y defender sus
derechos y participar cabalmente en la vida social,
económica y política de México.

Es decir, personas capaces de procurar su desarrollo

personal, laboral y familiar, para mejorar su entorno
social y natural, y continuar con su formación
académica y profesional, en un mundo diverso y en
constante cambio.

Toda egresada y egresado de la educación

obligatoria desarrollará estas habilidades
a lo largo de su trayectoria escolar.

Es necesario replantear el papel

de la escuela, redefinir los procesos
de aprendizaje, las habilidades
y los conocimientos que las y los
estudiantes requieren en el siglo XXI.

Esta visión servirá como brújula para orientar los

esfuerzos de docentes, madres y padres,
estudiantes, autoridades, comunidad y sociedad.

Los beneficiarios de la Secretaría de Educación Pública pueden copiar, distribuir, exhibir y representar el presente material
siempre y cuando reconozcan y citen la obra.