Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Las presentes notas contienen un desarrollo general de los contenidos teóricos dictados
para el curso de Planeamiento Urbano y Regional de la Escuela Profesional de Ingeniería
Civil de la Universidad José Carlos Mariátegui. Este esquema general se ve complementado
por un conjunto de actividades Prácticas y seminarios. El texto tiene un carácter orientativo
y es completado con bibliografía básica, con el cual el estudio adquiera su real dimensión.
En este breve lapso histórico, la presión de la urbanización sobre las ciudades dará cabida
a numerosos pobladores que se asentarán legal o ilegalmente, planeada o
desorganizadamente, con o sin dotación de servicios; pero que inevitablemente estarán
presentes ahí en un futuro próximo.
Este material intenta proporcionar información organizada que oriente el enfoque y solución
de problemas urbanos generales, estructurándola para hacerla accesible y de fácil manejo
para personas involucradas en decisiones urbanas (administración, obras públicas, gestión
urbana, etc.); así como para estudiantes y profesionales que trabajan con el propósito de
dar soluciones específicas a la problemática de la planificación urbana y paisajística.
INTRODUCCIÓN
EL CONCEPTO DE PLANIFICACIÓN
Desde un punto de vista técnico, "la Planificación puede ser considerada como un
proceso que se lleva a cabo dentro de los límites previstos por la política y la
administración, a través del cual se hacen más racionales las decisiones referentes a
los fines y métodos de las grandes organizaciones. En otras palabras puede decirse que
es el proceso que conduce hacia la definición y esclarecimiento de las metas de una
organización para luego reducirlas a programas y métodos específicos de acción. Desde
el punto de vista ideológico, la Planificación puede considerarse como un medio para el
logro de cierta medida de auto dirección en la evolución del sistema social; esto es, que
se trata de un instrumento para obtener un importante grado de dominio sobre el destino
del Hombre".
Varios autores, han tratado de definir el carácter y/o elaborar argumentos de justificación
de la Planificación. Aguirre, por ejemplo, advierte que en un país capitalista dependiente,
tras la idea de Planificación está el reconocimiento de que la libre operación de las
fuerzas del mercado no conduce automáticamente a una asignación óptima de los
recursos productivos, ni lleva en consecuencia al ritmo más rápido del crecimiento del
ingreso ni a su mejor distribución.
LA PLANIFICACIÓN URBANA.
En general vamos a entender a la Planificación urbana como una escala o nivel dentro
de la Planificación general, con las especificidades propias del objeto de estudio: la
ciudad.
Nivel Nacional: entendiendo como tal aquellos planes que se elaboran teniendo como
marco de referencia para su análisis y aplicación el espacio geográfico nacional,
dependiente de la Secretaria de Planeamiento de la Nación. Como así también las
actividades socio económicas que en ese espacio se efectúan.
Nivel Regional: se trata de planes elaborados para una determinada porción geográfica
de un territorio nacional o supra-nacional , definida como tal mediante alguna variable o
conjunto de variables que le confieren carácter de homogeneidad o de heterogeneidad,
o alguna comunidad de objetivos a los infinitos puntos que contiene la mencionada
porción territorial.
De acuerdo a ello, corresponde a nivel micro regional considerar tres sub niveles: el
local, el metropolitano y el conurbano.
Como nivel local, puede entenderse aquel proceso que está orientado a considerar el
núcleo urbano como una unidad histórica en su crecimiento y desarrollo. Otro tanto
ocurre respecto a su unidad administrativa ya que se trata de un núcleo aislado, sin
ningún contacto físico con núcleos periféricos o aledaños. Contrariamente a este caso,
cuando se consideran los fenómenos de conurbación o metropolización, no se está en
presencia de núcleos unitarios (ni física ni administrativamente).
EL TIEMPO EN LA PLANIFICACIÓN
Pero la responsabilidad y competencia última respecto del planeamiento urbano son los
municipios los que tienen la responsabilidad de ordenar urbanísticamente su municipio.
Es capital respecto del planeamiento municipal en todos sus estadios ya que, en efecto,
es él quien debe asumir la elaboración del planeamiento de su término municipal y quien
lo ha de aprobar inicial y provisional-mente, sometiéndolo a la aprobación definitiva de
la Comunidad Autónoma. Ésta ejerce, a su vez, un papel coordinador respecto del
planeamiento urbano y vigila y garantiza el cumplimiento de la normativa urbanística
vigente. Asimismo, el Municipio es el responsable de la aprobación de los instrumentos
que desarrollen el planeamiento de nivel municipal, si bien la elaboración de los mismos
puede ser hecha, según los casos, directamente por el Municipio, en colaboración con
entidades públicas o privadas, (gestión mixta) o bien redactada directamente por éstas.
En todo caso el papel del Municipio es fundamental y tiene la responsabilidad completa
de su ordenación y desarrollo urbanístico. Para la práctica de esta competencia los
Municipios necesitan disponer de unos medios económicos, administrativos y técnicos
en consonancia con las actividades urbanísticas a ejercer. La legislación urbanística ha
ido previendo que los Municipios dispongan de esos medios
Cuadro extraído de. Bazant, Ian “Manual de criterios de diseño urbano”. Ed Trilla.
México.
TENDENCIAS CARACTERÍSTICAS ANTE EL PLANEAMIENTO
En efecto, por un lado, los ciudadanos van tratando de realizar actuaciones en la ciudad
según su interés particular. Algunas ciudades surgen y van creciendo sin ordenación
prefijada según decisiones aisladas de personas o de grupos y, además las ciudades
van configurándose, en gran parte, por estas iniciativas individuales que, con el tiempo,
tienden que ser reguladas en algún modo con objeto de que no se produzcan conflictos
o perjuicios entre los diversos vecinos.
Por otra parte, siempre han existido en las sociedades ciertos individuos o grupos con
suficiente poder que, con sus decisiones e influencias, han ido marcando la forma en
que las ciudades se han ido generando o se van transformando. En unos casos se trata
de intervenciones ajenas a las preocupaciones del pueblo (caso de los palacios, por
ejemplo) pero en muchos casos coinciden con los intereses de una clase dominante
(caso de los ensanches o de las grandes obras de vías urbanas) o interpretan un
empeño generalizado de poblar y colonizar un territorio (caso de las bastidas
medievales, las ciudades americanas o, Brasilia). Así, ha existido de siempre una
voluntad de ir construyendo la ciudad por impulsos racionalizadores. En efecto, la
creación de gran parte de las ciudades ha respondido a una decisión presidida por un
orden y unas normas previamente establecidas, es decir, siguiendo un plano que
respondía a unos principios teóricos de orden religioso, moral y estético y a otros
prácticos de orden territorial y ambiental. Esta apuesta por la planificación se consagra
en los dos últimos siglos bajo el convencimiento científico de la necesidad de orientar la
historia a través de la razón.
DIFICULTADES DE LA PLANIFICACIÓN URBANA ACTUAL
La fragmentación espacial, con falta de una autoridad única que pueda decidir y llevar
a cabo la planificación.
Todo ello lleva a una situación caracterizada por una politización creciente de
planificación y, en general, a una confianza ciega en los mercados. Con ello, se
abandona el objetivo de la planificación de crear una sociedad mejor en todos los
aspectos de la integración territorial.
Ante todas estas circunstancias, nos encontramos en esta última década del siglo con
un panorama harto incierto, cultural, social y económicamente, que tiene unas
manifestaciones más relevantes e inseguras cuanto mayor es el nivel de la ciudad. A
cuantos se preocupan por la ciudad les incumbe lograr superar esta cortedad de miras
y de anhelos y de recuperar los grandes valores que deben presidir la convivencia
urbana.
Observamos que los modos de intervenir en estas situaciones urbanas son muy
variados y tienen lugar continuamente bien de forma más o menos espontánea bien
respondiendo a una actitud metódica. En general se suele admitir que para intervenir en
la ciudad con objeto de dar solución a los problemas existentes y a los previsibles se
recurre al planeamiento urbano como forma de plasmar y hacer pública la ordenación
adecuada de todas las soluciones urbanas.
2. Tiene que existir una intención de preparar y llevar a la realidad una ordenación que
atienda a dichos problemas urbanos.
3. Cuáles son los medios de que se dispondrá y en qué lapso de tiempo se irá dando
solución a los diferentes problemas planteados.
Como síntesis de las ideas expuestas de modo general conviene reiterar que el
planeamiento urbano debe tratar de ser:
En los puntos anteriores se han considerado algunas variables que hacen al análisis e
identificación de enfoques teóricos de la planificación, Obviamente se puede como se
señaló al comienzo realizar otras consideraciones sobre variables que en muchos casos
aparecen explicitadas en planes de diferentes sectores o niveles; este es el caso de
aspectos tales como la clasificación de lo que podemos entender como recursos dentro
de los objetivos de optimización de los mismos. En efecto, la clasificación de recursos a
utilizar dentro del relevamiento, proposición de objetivos, y restantes etapas del proceso
de planificación, suele presentar algunas discrepancias o diferencias cuando se
analizan distintos planes y/o enfoques. No obstante se ha considerado que tales
discusiones no se encuentran implícitas dentro de los objetivos de este capítulo y Por
tal razón solamente se estima conveniente dejar planteada tal consideración, dado que
se 6a entendido que las distintas clasificaciones o enfoques referentes a recursos,
puede demandar un tratamiento específico y extenso.
Bibliografía consultada
RAMOS, José Luis (1985) "Planificación Urbana y Regional. Teoría y Práctica". Faud.
UNC
TRAPERO, Juan José (1999) "La Práctica del Planeamiento urbanístico en España".
Ed. Síntesis.