UNIVERSIDAD EVANGÉLICA BOLIVIANA

Carrera de Teología
Libros Históricos
Unidad # 3 - Tema # 1. El reino unido.
I. Introducción.
Luego de haber sido aceptada la solicitud de establecer un rey para el pueblo de Israel comienzan
las crónicas de los mandatos de una serie de reyes y/o gobernantes. Básicamente cuatro son los
personajes centrales en el relato histórico del reino “unido” en Israel; la referencia aquí nos lleva
a la consideración de una división que llegaría a suscitarse años
más adelante (más propiamente en el reino de Roboam 931 a.C.)
a manera de cumplimiento del juicio interpuesto por Dios a causa
de la rebelión de su nación. Los personajes a los cuáles hacemos
referencia son Saúl, David y Salomón su hijo, y con ellos el profeta
Samuel quien guio los asuntos espirituales hasta David (pero sin la ascensión de éste al trono,
aunque elegido fuera).
La cronología en relación al reino unido nos propone aproximadamente 120 años (Desde el reinado
de Saúl hasta Salomón) y se detalla a continuación:
La monarquía:
 Saúl (Primer rey sobre todo Israel (1050 – 1010)
 David (Quien toma el lugar de Saúl) (1010 – 970)
 Salomón (sucesor de David) (970 – 931)

II. El reino de Saúl

El reino unido comenzó con Saúl y esta unidad no se vio alterada en toda la gestión del primer rey
de Israel. Los capítulos 9 y 10 de 1 de Samuel registran los eventos relacionados con la elección de
Saúl como rey de Israel. Como ya ha sido observado, Saúl tuvo un buen inicio, él es descrito como
un joven con humildad y sin ostentaciones, de corazón sencillo y dispuesto al servicio. Los
siguientes capítulos en cuanto a este joven rey, declaran los eventos en su reinado, sus guerras,

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las comisiones de Jehová para con él, pero, lamentablemente, nos van mostrando que poco a poco
este rey se fue apartando de Dios y su perfecta voluntad.
Se estima que una de las faltas más graves cometidas por
el hijo de Cis, fue la que la misma Biblia expone:
“Así murió Saúl por su rebelión con que prevaricó contra
Jehová, contra la palabra de Jehová, la cual no guardó…”
(1 Crónicas 10.13)
La rebelión de Saúl contra Dios fue el incumplimiento a cuántas órdenes Dios mismo le había dado,
la más recordada fue la desobediencia en cuanto a los amalecitas (1 Samuel 15), donde deshonró
a Dios poniendo a un lado todas las indicaciones dadas. De muy pocos hombre en la Escritura Dios
se ha expresado “me pesa haber puesto por rey a Saúl” (1 Samuel 15.11).
Si bien es cierto, el reinado de Saúl fue por cuarenta años, no podemos afirmar si hizo alguna
buena obra o continuo su mal camino. Al final de sus días Saúl es muerto es batalla de una manera
penosa y deshonrosa.

III. El reino de David

Tal y cual alguien haya dado la vuelta a la página en una historia de similar manera David, el que
tomó el lugar de Saúl, vino a cambiar la historia penosa de un mal reinado anterior. A éste David
se le conoce como “el varón conforme al corazón de Jehová”
y esto básicamente hace toda la diferencia entre Saúl y
David.
Aunque David no era el favorito entre los candidatos para
reinar en Israel Dios quiso escogerlo, y lo hace de una
manera especial, éste David, siendo el ultimo de ocho
hermanos, fue ungido como el nuevo rey de Israel. Lo curiosos en esta parte de la historia es que
David fue ungido rey estando Saúl vivo aún, este significó para el primer un tiempo de espera
mientras llegaba el ocaso de Saúl. Desde que David es ungido (1 Samuel 16) hasta que oye de la
muerte de Saúl (2 Samuel 1) es muy probable que David haya esperado aproximadamente diez a
doce años antes de ser reconocido y proclamado rey (2 Samuel 5.4).

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Para David este periodo fue de aprendizaje y preparación, y en él éste se mostró de buen corazón,
humilde, respetuoso de las ordenanzas de Dios y de las autoridades establecidas. Sin duda alguna,
David supo conducirse y prepararse para la enorme responsabilidad que le estaba siendo asignada.
Sin duda una de las cualidades de David fue la sensibilidad y humildad ante las disposiciones de
Dios, sean mandamientos, reprensiones, encomiendas, así mismo consultar a Dios para obtener
su guía, David siempre se mostró obediente y dispuesto.
No todo fue color de rosa en el reinado de David, éste fue
un hombre de guerra y estuvo expuesto a las angustias y
temores de la batalla pero Dios siempre le daba la victoria;
una faceta oscura de David fue su pecado de adulterios, la
historia nos cuenta cómo esto hombre de Dios cedió a la
tentación de tomar una mujer ajena, lo cual significó para
él un castigo doloroso y ejemplar.

IV. El reino de Salomón

Fue Salomón quien sucedió a David, si bien Salomón no fue el primogénito de David, fue la elección
de Dios quien lo instituyó como tercer rey de Israel.
Salomón comenzó de manera acertada su mandato, tal vez mejor inicio no pudiera hacer existido.
Se cuenta que Salomón, luego de ser proclamado rey, tuvo un
sueño mediante el cual Dios le habló invitándole a pedir lo que
él quería, Salomón acertó en su petición ya que no pidió para
sí o según su deseo sino lo hizo de forma consecuente y
responsable solicitando sabiduría para ejercer de mejor
manera el cargo que llevaba a cuestas.
Como sus antecesores también Salomón reinó cuarenta años (1 Reyes 11.42). Éste no fue un
hombre de guerra sino de estrategias de gobierno y de sabias decisiones en la mayoría de los
casos. Muchos capítulos se ocupan describiendo su grandeza, sabiduría y riquezas, el reino de
Israel en su tiempo alcanzó reconocimiento y esplendor.

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Así como en sus antecesores Salomón se vio enfrentado consigo mismo
y, en parte, por su humana condición cometió serios errores. Al pasar
el tiempo Salomón fue poco a poco desviando su corazón de Dios, no
le fue suficiente su sabiduría puesto que cayó en idolatría, su corazón
se enalteció y a pesar de las amonestaciones de Dios él no quiso
escuchar. Su pecado consistió en unirse de manera irregular a muchas
mujeres, éste le significó honrarlas a ellas más que a Dios, y por ser
extranjeras les complacía en todo lo que ellas pedías, hasta el punto de abandonar la adoración a
Dios.
Fue por esta razón que el reino llegó a desestabilizarse siendo así Saúl el último soberano en el
reino unido, puesto que la división en dos partes (Reino del Norte y reino del Sur) de la nación fue
por su causa, aunque esto se dio lugar en el reinado de su hijo Roboam.