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ESCLEROSIS LATERAL AMIOTRÓFICA (ELA)

FERIA DE LA NEUROCIENCIA

PRESENTADO POR:

EIMY MARIANA QUIÑONEZ GONZALEZ (20171157985)


LIZETH DAYANA CUBILLOS CAMACHO (20171157171)
KATHERINE PEÑA CHAVARRO (20171155299)
LAURA VALENTINA REYES CUENCA (20171157499)
JUAN MIGUEL MONTAÑEZ PATIO (20171154556)
ADRIANA LUCIA LOPEZ CONDE (20171157708)
NAYELI VALENTINA VILLALBA (20171156681)

PRESENTADO A:
ALFREDIS GONZÁLEZ HERNÁNDEZ

UNIVERSIDAD SURCOLOMBIANA
PROGRAMA DE PSICOLOGÍA
NEUROCIENCIAS
NEIVA
2018
ii

CONTENIDO

INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………….1

PRINCIPALES CONCEPTOS TEÓRICOS…………………………………………..3

DESCRIPCIÓN DE LA ACTIVIDAD………………………………………………13

CONCLUSIONES……………………………………………………………………16

ARTÍCULOS CIENTÍFICOS………………………………………………………...19

REFERENCIAS COMPLEMENTARIAS…………………………………………...20
1

INTRODUCCIÓN

El presente trabajo comprende una propuesta basada en sustentar el comportamiento normal o


patológico atendiendo al funcionamiento de las estructuras cerebrales vistas en clase de
neurociencias y sus correspondientes funciones, los procesos psicológicos básicos y complejos a
partir de su substrato biológico, y el aporte de las neurociencias con el conocimiento sobre el
tema elegido: Esclerosis lateral amiotrófica (ELA) brindando a los espectadores, estudiantes y
docentes en el X Encuentro Surcolombiano de Psicología aportes coherentes que permitan llevar
una visión general y clara de cómo la neuropsicología y las neurociencias intervienen en
enfermedades de este tipo.
La esclerosis lateral amiotrófica (ELA) es una enfermedad del sistema nervioso
caracterizada por una degeneración progresiva de las neuronas motoras en la corteza cerebral, las
motoras inferiores (células del asta anterior de la médula espinal y sus homólogas en el tallo
cerebral) y las motoras superiores o corticoespinales (o células de Betz, localizadas en la quinta
capa de la corteza motora cerebral y cuyas prolongaciones descienden por la vía piramidal para
hacer sinapsis con las neuronas motoras inferiores).
La consecuencia de esto es una debilidad muscular que avanza hasta la parálisis,
extendiéndose de unas regiones corporales a otras. Amenaza la autonomía motora, la
comunicación oral, la deglución y la respiración. Provoca una parálisis progresiva de toda la
musculatura y conduce al paciente a una incapacidad con la completa preservación de las
funciones mentales, la sensibilidad, la motilidad ocular y el control de esfínteres. El paciente
necesita cada vez más ayuda para realizar las actividades de la vida diaria, se vuelve más
dependiente y habitualmente fallece por insuficiencia respiratoria en un plazo de 2 a 5 años,
aunque en el 10% de los casos la supervivencia es superior.
En el daño selectivo de la ELA se destacan, sobre todo, el proceso de excitotoxicidad
mediada por glutamato, el estrés oxidativo, el daño mitocondrial, las alteraciones en el
citoesqueleto y en el transporte axoplásmico y los fenómenos de neuroinflamación y
autoinmunidad. Algunos de tales procesos podrían modularse mediante fármacos de potencial
aplicación para frenar el curso patológico.
Como consecuencia de la afectación de la motoneurona superior pueden presentarse
además: espasticidad, hiperreflexia y signos patológicos como el de Babinski y labilidad
emocional, también conocida como risa y llanto espasmódicos. Además en un paciente de ELA,
las áreas afectadas por neurodegeneración se caracterizan por la acumulación de células
microgliales y astrogliales hipertróficas. Hay signos bioquímicos de activación microglial y
existe una moderada infiltración de leucocitos, sobre todo de linfocitos T8 y T4. Tal respuesta
inflamatoria puede tener consecuencias ambivalentes: por un lado, sirve de defensa o protección
(al circunscribir el daño infligido); por otro, puede incrementar el daño neuronal y auto-perpetuar
el proceso lesivo.
Aunque la esclerosis lateral amiotrófica siempre se ha presentado como una enfermedad
exclusivamente motora, se han encontrado diversos estudios que han mostrado la existencia de
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síntomas cognitivos que pueden manifestarse antes, durante o después de los síntomas motores y
que serían compatibles con una demencia frontotemporal. Habitualmente esta enfermedad cursa
sin demencia, no obstante un 50% puede presentar alteraciones psicológicas y conductuales;
además aproximadamente un 10 a 15% pueden presentar signos de demencia frontotemporal y en
más del 35% de los casos se detectan signos de deterioro cognitivo.
La ELA lleva un proceso gravemente de discapacidad y mortalidad, produce un fuerte
impacto psicológico tanto en el que la padece como en los que están cerca de ella; presentándose
una serie de reacciones emocionales que demandan modificaciones y, por tanto, intervención,
atención, asistencia y apoyo emocional. El apoyo familiar, social y de equipo va a amortiguar el
impacto del estrés, asociado al diagnóstico y evolución de la enfermedad, atenuando los efectos
de aquellas formas in-adaptativas de afrontamiento capaces de conducir a comportamientos de
riesgo que agravan el problema.
El tratamiento de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) continúa siendo un gran reto, a
pesar de que las primeras descripciones de esta enfermedad las realizó Charles Bell hace más de
170 años y de ensayarse numerosos tratamientos durante todos estos años.
Sin embargo, el tratamiento rehabilitador es apenas abordado y su utilidad con estos
pacientes continúa motivando contro-versia. Algunos ensayos plantean que el tratamiento
rehabilita-dor multifactorial permite mantener a los pacientes con un nivel funcional óptimo el
mayor tiempo posible y ayuda a prevenir las complicaciones propias del desuso de los músculos
y la inmovilización. Por la misma línea se han encontrado tratamientos relacionados con
Logopeda que permite una comprensión de la correlación entre lenguaje y la ELA. También
señalan que hasta que no se encuentre el tratamiento curativo de la ELA, la rehabilitación
multifactorial permanece como la mejor esperanza para mejorar la salud y la supervivencia en
estos pacientes.
Por otro lado existen estrategias terapéuticas para la ELA, entre ellas se encuentran la
terapia génica y celular (permite reemplazar células perdidas o proveer un soporte funcional a las
células dañadas para prevenir su degeneración posterior). El empleo del ARN de interferencia
(ARNi) para disminuir o abolir la expresión de un gen específico ha dado resultados
prometedores en modelos experimentales.
No existe tratamiento curativo de la enfermedad. No obstante, La administración de
riluzol ha demostrado clínicamente un retraso de pocos meses en la evolución de la enfermedad y
el mejoramiento de la calidad de vida; El riluzol es un compuesto farmacológico que pertenece a
la familia de los benzotiazoles, el cual posee un efecto neuroprotector a través de un complejo
mecanismo de acción que incluye varios procesos pre y postsinápticos, como la inhibición de la
liberación del glutamato, el bloqueo de los receptores de aminoácidos excitatorios en los cuerpos
celulares, la inactivación de los canales de sodio dependientes de voltaje en terminaciones y
cuerpos neuronales y la estimulación de una vía de transducción de señal, dependiente de la
proteína G .
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PRINCIPALES CONCEPTOS TEÓRICOS

1. ESCLEROSIS
Endurecimiento de tejidos debido al aumento anormal y progresivo de células de tejido
conjuntivo que forman su estructura. (Astrid Lorena, 2006)
2. AMIOTRÓFICA
Relacionado a la atrofia de los músculos’ (pérdida de músculos); es la degeneración más grave de
las motoneuronas, ya que provoca una progresiva paralización de los músculos que intervienen
en la movilidad, el habla, la deglución y la respiración. (Astrid Lorena, 2006).
3. FENOTIPOS DE ELA
FENOTIPO CARACTERÍSTICAS

Clásica Síntomas de inicio involucra extremidades superiores e inferiores con afectación de


motoneurona superior e inferior

Bulbar Se presenta con disfagia y/o disartria, atrofia y fasciculaciones de lengua

Flail arm Caracterizada por debilidad proximal y atrofia de las extremidades superiores

Flail leg Caracterizada por debilidad distal y atrofia de las extremidades inferiores

Piramidal Signos prominentes de motoneurona superior, con signos de motoneurona inferior menos
evidentes pero presentes

Respiratorio Se presenta con compromiso respiratorio desde el inicio, manifestada por ortopnea o disnea

Motoneurona Clínicamente y electrofisiológicamente con compromiso de motoneurona inferior


inferior pura

Motoneurona Clínicamente con compromiso de motoneurona superior


superior pura

4. MOTONEURONA
Controlan los movimientos de los músculos voluntarios y causan que las neuronas motoras
superiores (que se originan en la parte superior del cerebro) y las neuronas motoras inferiores
(originadas en la parte inferior del cerebro y de la médula espinal) se empiecen a desintegrar,
impidiendo que puedan llevar mensajes químicos y nutrientes esenciales que necesitan los
músculos para su normal funcionamiento. (Astrid Lorena, 2006).
5. NÚCLEOS GRISES BASALES
Conjunto de masas de sustancia gris situado dentro de cada hemisferio cerebral; compuesto por
el núcleo caudado, núcleo lenticular (Globo pálido más putamen), claustro, cuerpo estriado
(núcleo caudado mas núcleo lenticular), neoestriado (núcleo caudado más putamen) y el cuerpo
amigdalino. (Astrid Lorena, 2006).
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6. AUTOSÓMICO RECESIVO
En este patrón de herencia el fenotipo que caracteriza al alelo recesivo se encuentra codificado un
gen cuyo locus se encuentra ubicado en alguno de los autosomas o cromosomas no determinantes
del sexo. Se transmite en una forma que puede ser predicha sin tener en consideración el sexo del
descendiente. (Astrid Lorena, 2006).
7. AUTOSÓMICO DOMINANTE
Por este mecanismo una determinada característica heredable se transmite en una forma que
puede ser predicha sin tener en consideración el sexo del descendiente. Además para que esta
característica heredable se exprese basta con que el descendiente reciba el gen de uno solo de sus
progenitores. (Astrid Lorena, 2006).
8. HIPERREFLEXIA
Exaltación o aumento de los reflejos osteotendinosos (sobre- sensibles), se genera por lesiones en
la médula espinal. (Astrid Lorena, 2006).
9. PLANTAR EXTENSOR DE BABINSKI
Extensión dorsal del dedo gordo del pie y generalmente acompañado de la apertura en abanico
de los demás dedos en respuesta a la estimulación plantar del pie. (Astrid Lorena, 2006).
10. PARAPOPSIA
Muerte celular programada debido a la degeneración granulovacuolar . (Astrid Lorena, 2006).
11. PICNOSIS
Transformación del núcleo de la célula consistente en una condensación de la cromatina. El
núcleo se vuelve homogéneo y se colorea uniformemente, debido a la muerte del núcleo. (Astrid
Lorena, 2006).
12. NEURONOFAGIA MICROGLIAL
Consiste en la penetración de las células nerviosas por células neuróglicas jóvenes. (Astrid
Lorena, 2006).
13. GLIOSIS REACTIVA
Es el indicador histopatológico más importante de lesión del sistema nervioso central;
contribuye en la cicatrización en el SNC a través de la proliferación de células gliales en regiones
lesionadas con la participación de fibroblastos. (Astrid Lorena, 2006).
14. AMILOIDE
Proteína fibrosa compleja que está compuesta por proteínas acumuladas en una estructura
específica que se deposita entre las neuronas de distintos tejidos y órganos del cuerpo en una
situación patológica. (Astrid Lorena, 2006).
15. TAUTOPATÍA
Utilizar los medicamentos alopáticos y convertirlos en homeopáticos. (Astrid Lorena, 2006).
16. POLIALELISMO
Mutaciones que generan distintas versiones de un gen. (Astrid Lorena, 2006)
17. VALINA
Aminoácido esencial que pertenece al grupo de los aminoácidos ramificados. Hace efectivo el
balance del nitrógeno positivo, estimula la secreción de insulina, evita el catabolismo muscular y
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la degradación del músculo, activa la generación de nuevos tejidos, mejora la absorción celular
de glucosa e incrementa la producción de la bilis para proteger el hígado y la vesícula biliar.
(Astrid Lorena, 2006)
18. ALANINA
Ácido 2-aminopropanoico; es un componente básico de las proteínas de los seres vivos.
Desempeña un papel en el reconocimiento del sustrato o especificidad, particularmente en las
interacciones con otros átomos no reactivos e interviene en el metabolismo de la glucosa. (Astrid
Lorena, 2006).
19. HAPLOTIPOS
Conjunto de variaciones del ADN o polimorfismos que tienden a ser heredados juntos
(combinación de alelos). (Astrid Lorena, 2006).
20. EXCITOTOXICIDAD
Una de las primeras teorías propuesta como mecanismo patogénico de la ELA fue la
excitotoxicidad mediada por glutamato. Los niveles suprafisiológicos de este neurotransmisor
inducen el influjo de calcio al interior neuronal, el cual activa cascadas de señalización que
finalmente conllevan a la muerte celular. Se han observado niveles incrementados de este
neurotransmisor en el líquido cefalorraquídeo de pacientes con ELA.
Este incremento puede ser el resultado de una afectación en la recaptación del
neurotransmisor, que a su vez puede provocar la inactivación o pérdida de sus transportadores.
Más de la mitad de los pacientes con ELA muestran una pérdida funcional dramática del
transportador de glutamato EAAT2, que puede ser el resultado de un procesamiento aberrante del
ARNm en estos pacientes. Por otro lado, se ha demostrado que el tratamiento con antagonistas
del receptor de glutamato tipo AMPA en el ratón transgénico para SOD1 mutante puede
prolongar su supervivencia.41 Sin embargo, se han cuestionado los mecanismos excitotóxicos
como iniciadores de la patología porque se vuelven relevantes tardíamente en la enfermedad.
(COLELL, 2005)
21. ESTRÉS OXIDATIVO
Se ha observado que el sistema nervioso central es más susceptible al daño celular debido a la
producción de especies reactivas del oxígeno y del nitrógeno que otros tejidos. La aparición de
productos oxidativos indicadores del daño en proteínas, el ADN y los lípidos ha sido reportada
en pacientes con ELA, tanto en médula espinal como en otras regiones del sistema nervioso
central. Tal es el caso de niveles incrementados de 8-hidroxi-2’-deoxiguanosina (8-OHdG,
marcador de daño al ADN), hemoxigenasa-1 (proteína modificadora de malondialdehído), y de
3-nitrotirosina. Similares resultados se obtuvieron en el modelo de ratón transgénico de
sobreproducción de SOD1 mutada.
La administración de antioxidantes en este modelo ha probado ser beneficiosa ya sea
retrasando el inicio de la enfermedad, prolongando la supervivencia o ambas, como por ejemplo
el extracto de la planta Gingko biloba. Varios estudios han abordado la relación entre el riesgo a
padecer ELA y la exposición ambiental a metales. Los niveles de cobre tienden a aumentar a
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medida que progresa la enfermedad, indicando una desregulación en su metabolismo y


favoreciendo la generación del estrés oxidativo. (COLELL, 2005).
22. NEUROINFLAMACIÓN
En contraposición con la esclerosis múltiple (EM), enfermedad en la que los fenómenos
inflamatorios acaecen en cualquier territorio del sistema nervioso central, se suponía que en la
esclerosis lateral amiotrófica, una enfermedad degenerativa, los fenómenos inflamatorios
revestirían escasa relevancia. Pero los resultados de la investigación cuestionan tal aserto. De
hecho, la neuroinflamación constituye un elemento principal de la patogenia de la ELA, del
Parkinson y del Alzheimer. En las dos últimas enfermedades neurodegenerativas el fenómeno
inflamatorio es mucho más sutil. Por neuroinflamación hemos de entender la invasión del
sistema nervioso de leucocitos circulantes y la activación de la microglía.
Para amortiguar los efectos dañinos de la neuroinflamación, se recurre a inhibidores de la
COX-2, del TNFα o de la activación microglial como la minociclina, que mejoran los síntomas y
prolongan la vida de ratones transgénicos con ELA, según ha demostrado J. P. Julién, de la
Universidad McGill. Stanley Appel ha detectado la presencia circulante de anticuerpos contra
canales de calcio en enfermos de ELA esporádica. Se supone que los anticuerpos podrían activar
los canales, facilitar la entrada de calcio en la neurona y exacerbar los mecanismos excitotóxicos
y el daño neuronal. Por desgracia, los ensayos clínicos realizados con terapia inmunosupresora
no se han mostrado eficaces para el tratamiento de la ELA. (COLELL, 2005).
23. MUTACIONES DE LA SOD1
Ignoramos por qué las mutaciones de la enzima cobre-zinc superóxido dismutasa (SOD1) están
asociadas a ELA familiar. La SOD1 es una proteína de 17 kilodalton que contiene un átomo de
cobre y otro de zinc. Esta enzima antioxidante cataliza la conversión de superóxido (O2 – ) en
peróxido de hidrógeno (H2 O2 ) y oxígeno molecular (O2 ). Se han descrito hasta hoy más de
100 mutaciones de la SOD1 vinculadas a ELA familiar. En algunos casos disminuye la actividad
enzimática, en otros no se altera y en unos terceros se ve incrementada dicha actividad.
La SOD1 mutada tiende a agregarse en el citosol y provocar un efecto tóxico. Los
agregados aparecen en neuronas y en astrocitos; a menudo contienen chaperonas (proteínas con
actividad restauradora de la estructura proteica) o ubicuitina. No está muy claro el modo por el
cual los agregados inducen la citotoxicidad. Sabemos que la formación de agregados proteicos en
el citoplasma activa el proceso de disolución celular, promueve la activación del sistema
ubicuitina-proteosoma e insta la captación de chaperonas. (COLELL, 2005).
24. TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO
El riluzol es el único fármaco que ha demostrado prolongar la supervivencia de los pacientes con
ELA; por tanto, debe prescribirse lo antes posible con el fin de prolongar los estadios iniciales de
la enfermedad en los que el paciente disfruta de una calidad de vida mejor. La dosis que ha
demostrado ser eficaz es de 100 mg/día, repartida en dos tomas. Los efectos secundarios más
frecuentes son la astenia y las náuseas. Algunos autores recomiendan asociar al tratamiento una
combinación de vitaminas antioxidantes y creatina, aunque no existe ningún estudio doble ciego
y con placebo que haya demostrado la utilidad de estas sustancias. (F. Orient-López, 2006).
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La American Academy of Neurology considera demostrado que el riluzol prolonga la


supervivencia en aquellos enfermos que reúnen los requisitos exigidos en los dos estudios
clínicos publicados y recomienda su uso en pacientes que cumplen los criterios de El Escorial, es
decir, que síntomas de menos de cinco años de evolución, una capacidad vital mayor del 60% y
que no sean portadores de traqueostomía. En el resto de los casos, la decisión de realizar
tratamiento farmacológico queda a criterio del médico especialista.
25. TRATAMIENTO SINTOMÁTICO
Es fundamental el conocimiento, tratamiento y seguimiento periódico de toda la sintomatología
asociada a la evolución de la ELA, tanto en lo que respecta a los síntomas principales: debilidad,
disfagia (se pone de manifiesto por la presencia de tos al comer, atragantamientos, abundante
mucosidad o regurgitación de líquidos por la nariz), disartria (en algunos casos está originada por
la debilidad de la musculatura orofacial y por la atrofia de la lengua y los labios, mientras que en
otros es una complicación derivada de la espasticidad), insuficiencia respiratoria (suele
desarrollarse como consecuencia de la progresión natural de la enfermedad -debilidad de los
músculos respiratorios- o de forma aguda desencadenada por una infección pulmonar o por una
neumonía por aspiración, siendo más rara su presentación como primer síntoma).
Entre otro está: espasticidad (músculos tensos y rígidos. Los reflejos suelen ser más
fuertes o exagerados y esta afección puede interferir con la actividad de caminar, el movimiento
o el habla) , fasciculaciones (Contracciones musculares menores o incontrolables de un grupo
muscular abastecido por una sola fibra nerviosa motora), sialorrea(La salivación excesiva en la
boca puede ocasionar babeo y atragantamiento en los pacientes con disfagia), labilidad
emocional - Cuando se cambia rápida y abruptamente el estado emocional. Resulta habitual en
los pacientes con afectación bulbar y pseudobulbar. Además de informar a la familia de que se
trata de un proceso derivado de la enfermedad de base, y que no tiene relación alguna con que el
hecho de que el paciente se encuentre deprimido y/o tenga un trastorno conductual, el tratamiento
de la labilidad con fármacos antidepresivos como la amitriptilina -además puede mejorar la
sialorrea- o los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina puede actuar positivamente
sobre la sintomatología (F. Orient-López, 2006) -.
Por último las alteraciones neuropsicológicas, estas alteraciones de funciones
relacionadas directa o indirectamente con el lóbulo prefrontal (evocación de categorías, atención
focalizada y abstracción verbal) y en particular con las cortezas dorsolaterales y premotoras
suelen observarse en la exploración neuropsicológica. Una cuestión que cabe plantearse es si
estos enfermos, en el caso de que no presentaran un deterioro tan profundo desde el punto de
vista neurológico, se deteriorarían más desde el punto de vista neuropsicológico, como reflejo de
la afectación cortical prefrontal; esa cuestión queda pendiente de la realización de estudios
longitudinales, con todos los problemas metodológicos que existen en el estudio y tratamiento
neuropsicológico de pacientes con ELA.(F. Orient-López, 2006)
26. TRATAMIENTO REHABILITADOR
El objetivo primordial del tratamiento neurorrehabilitador consiste en prolongar la capacidad
funcional, promover la independencia y ofrecer al paciente la mayor calidad de vida posible. Así,
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desde el punto de vista neurorrehabilitador, en la ELA pueden diferenciarse tres fases clínicas
con diferentes estadios, en los cuales el tratamiento aplicado y los objetivos perseguidos varían
en función de la situación clínica del paciente, la tolerancia de éste al tratamiento y la previsión
evolutiva. (F. Orient-López, 2006)
Primera fase: paciente independiente. En un primer estadio, el enfermo sólo presenta
una debilidad leve y/o sensación de torpeza. En esta fase, el tratamiento rehabilitador consiste en
realizar ejercicios que mantengan los balances articulares y potencien la musculatura no
deficitaria, y evitar los ejercicios que aumenten la fatiga.
En un segundo estadio, el paciente puede deambular, aunque presenta una debilidad
moderada y puede tener dificultad o ser dependiente para realizar determinadas actividades como
subir escaleras, levantar los brazos por encima de la cabeza, abrocharse la ropa, etc. En esta fase,
el tratamiento rehabilitador tiene como objetivo mantener en la medida de lo posible la fuerza
muscular, así como evitar la atrofia por desuso, mantener los balances articulares y evitar las
retracciones musculotendinosas. La terapia ocupacional en esta fase resulta útil para asesorar
sobre posibles cambios que faciliten y/o aumenten la autonomía del afectado. Puede ser necesaria
también la prescripción de ortesisantiequina, bastones ingleses, etc.
En un tercer estadio, el paciente tendrá capacidad de deambulación solamente en
distancias cortas y será más dependiente para las actividades básicas de la vida diaria. En esta
fase, el objetivo primordial de la rehabilitación será intentar mantener la máxima independencia
funcional.
Los pacientes con ELA tienen una baja tolerancia al ejercicio y se fatigan con facilidad.
Bajo esta premisa no son eficaces los ejercicios resistidos intensos ni las largas sesiones de
fisioterapia. Es mejor, realizar sesiones cortas, en varios momentos del día.
Primordialmente se debe establecer el grado de intensidad de los ejercicios a realizar,
sabiendo que tanto la inmovilidad como el ejercicio extremo no son beneficiosos. (Miranda,
2010)
Segunda fase: paciente parcialmente dependiente. En esta fase podría diferenciarse un
cuarto estadio, en el que el enfermo todavía es capaz de deambular en trayectos cortos, aunque
prácticamente se mantiene en silla de ruedas. Pueden presentarse también artralgias y
retracciones articulares.
En un quinto estadio, la debilidad muscular es entre moderada y grave y el paciente
necesita ayuda para las transferencias. Pueden aparecer úlceras por presión y retracciones
articulares secundarias al déficit de movilidad. En este momento es fundamental empezar a
instruir a la familia del enfermo sobre los cuidados que éste necesita (cambios posturales,
movilizaciones pasivas, etc.), así como sobre las ayudas técnicas que pueden mejorar su calidad
de vida (camas clínicas, cojines y colchones antiescaras, grúas para transferencias, etc.).
Tercera fase: paciente totalmente dependiente. En esta fase el afectado necesita
movilizaciones pasivas para evitar la estructuración de las deformidades articulares. También se
pone de manifiesto clínicamente la disfagia neurógena, inicialmente abordable modificando la
textura de los alimentos y utilizando espesantes para la ingesta de líquidos, pero que
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posteriormente acaba con la alimentación por sonda nasogástrica o por gastrostomía. También se
manifiestan los trastornos del lenguaje (disartria), que se intentan mejorar utilizando elevadores
del paladar, amplificadores de voz y sistemas de comunicación alternativa en las últimas fases.
Asimismo debe plantearse la necesidad de realizar asistencia ventilatoria no invasiva con
mascarilla nasal o, si es necesario, la práctica de una traqueostomía para soporte ventilatorio
mecánico. (F. Orient-López, 2006)
En todas estas fases es fundamental, además de brindar apoyo psicológico al paciente, no
descuidar el apoyo y la atención al cuidador principal y/o cuidadores, ya que su salud psicológica
puede verse afectada de manera adversa por el esfuerzo y el estrés, además de sufrir una serie de
riesgos que, probablemente, le llevarán a sentirse menos comprometido con el deber de practicar
conductas saludables para sí mismo (uno de los aspectos señalados por los cuidadores como
generadores de estrés es la falta de tiempo para ellos mismos).
En la fase terminal, el enfermo se encuentra prácticamente inmóvil y depende de los
demás para todas las actividades básicas de la vida diaria. Pasa la mayor parte del tiempo
encamado o, en el mejor de los casos, en una silla de ruedas a la que no puede transferirse sin
ayuda. Se alimenta por sonda de gastrostomía y presenta una capacidad vital respiratoria baja,
con dificultad para la eliminación de las secreciones respiratorias y, por la avanzada disartria,
para comunicarse. Muchas veces tiene dolor, ya sea por la presión sobre determinadas zonas de
protrusión ósea, por rigidez articular o por espasticidad. El asesoramiento a la familia es esencial
para que sepa cómo actuar, y es importante evitar que todo el peso asistencial recaiga
exclusivamente sobre un cuidador.
Una enfermedad como la ELA –que se presenta con un pronóstico tan sombrío y en la
que no suele existir un daño importante de las capacidades cognitivas del afectado, que asiste a
todo el drama del desarrollo evolutivo de esta enfermedad–, constituye sin duda alguna un gran
reto, tanto desde el punto de vista asistencial como bioético.(F. Orient-López, 2006)
27. ALTERACIONES COGNITIVAS
La prevalencia estimada de deterioro cognitivo (DC) en ELA es muy variable (10-75%)57,58,
debido a distintos métodos de selección de pacientes, de evaluación y tamaño muestral. El DC se
ha correlacionado con pérdida de sustancia gris en regiones frontales, parietales y límbicas en
estudios con RM cerebral y se describen anormalidades en sustancia blanca fronto-temporal en
pacientes con ELA sin demencia.(Patricia Lillo, 2014)
● Disfunción ejecutiva
El 50% de casos puede presentar disfunción prefrontal y 10-15% cumple criterio para DFT. Este
déficit ha sido correlacionado con hipometabolismo o disminución del flujo sanguíneo cerebral
en lóbulos frontales en estudios con FDG-PETy SPECT (single
photonemissioncomputedtomography) respectivamente. El déficit más prominente es la
reducción de la fluidez verbal, correlacionada con activación reducida en giros frontal-medio-
inferior y giro cingulado anterior en RM funcional (fMRI). También se han reportado trastornos
en la atención (paced auditory serial addition test-PASAT); memoria de trabajo (serie de dígitos
en orden inverso); planificación (Torre de Hanoi)y flexibilidad cognitiva (Test de clasificación
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de cartas de Wisconsin-WCST), capacidad de inhibición y toma de decisiones (Iowa


GamblingTask- IGT). (Patricia Lillo, 2014)
● Memoria
Un metanálisis evidenció alteración en la memoria visual inmediata y diferida, y la memoria
verbal inmediata. La disfunción prefrontal sería la causa del déficit del recuerdo diferido. La
severidad del trastorno se correlacionaría con hipoperfusiónfrontotemporal y talámica en SPECT.
(Patricia Lillo, 2014)
28. PROCESAMIENTO EMOCIONAL Y COGNITIVO SOCIAL
Pacientes con ELA bulbar tienen dificultad para reconocer rostros y estímulos amenazantes a
través de rostros (asociado a daño en la amígdala) y tienden a evaluar imágenes afectivas más
positivamente que los controles, neutralizando aquellas imágenes extremas y evaluando las
neutras como más emocionantes. Un estudio con RM funcional demostró una mayor activación
en el giro supramarginal derecho en pacientes con una sensibilidad alterada a claves sociales y
emocionales. También se han reportado déficits en la Teoría de la Mente y detección del
sarcasmo. (Patricia Lillo, 2014)
El hallazgo más frecuente es la disminución de fluidez verbal y anomia que puede
evolucionar a mutismo. Existen también ecolalia, perseveraciones y expresiones estereotipadas.
Los déficits en fluidez lexical y nominación por confrontación se han correlacionado con
activación alterada del área de Broca y regiones temporales, parietales y occipitales. La presencia
de afasia progresiva no fluente y/o apraxia del habla es más frecuente en pacientes con ELA
bulbar -con disartria espástica o mixta espástica-fláccida-.(Patricia Lillo, 2014).
29. ELA Y LA DEMENCIA FRONTOTEMPORAL
Una de las afirmaciones que están habituados a utilizar los neurólogos cuando explican a un
paciente o a sus familiares la enfermedad, es que la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), no
afecta a las vías sensitivas ni a la inteligencia de los pacientes. Luego los pacientes aprenden en
carne propia que las molestias articulares o tendinosas provocadas por manipulaciones, posturas
o traumatismos puede pasar, en ocasiones, a un doloroso primer plano. Con la capacidad
intelectual pasa lo mismo.
Aunque la ELA es el ejemplo más claro de enfermedad degenerativa del sistema motor, a
lo largo de la evolución la familia puede ir observando cambios, a menudo sutiles, pero en
ocasiones francos, de modificación del carácter o incluso deterioro intelectual.
Frecuentemente el paciente disminuye su fluidez verbal, utiliza menos palabras, le cuesta
ser preciso al comunicar sus ideas o las repite en exceso. Muchos de estos síntomas, pueden ser
atribuidos a la dificultad para articular las palabras, tan típico de esta enfermedad cuando afecta a
los músculos de la garganta o de la fonación, o a la depresión del ánimo, tan frecuente en estos
pacientes. Pero, en ocasiones, a estos síntomas se añaden cambios sutiles de las relaciones
sociales, con indiferencia emocional y falta de afecto por los familiares, despreocupación por la
higiene o por la imagen personal, distracción fácil o rigidez mental. A veces esto se relata como
que “se ha vuelto más tozudo”, o como cierto” desapego” para los que le rodean.
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En ocasiones es una conducta compulsiva que se manifiesta en las compras o en la


apetencia por el juego de azar. Como no hay alteraciones de la memoria, ni de la percepción de
lo que le rodea, el entorno más que pensar en una demencia piensa en un cambio de carácter
ligado al impacto de la enfermedad. Estos cambios intelectuales ocurren de forma más o menos
evidentes en el 35% de los pacientes de ELA y cuando cumplen criterios de Demencia los
neurólogos lo llaman Frontotemporal por los territorios cerebrales a los que afecta.
La identificación de esta enfermedad puede ser complicada, por lo comentado, y por la
dificultad de la exploración en fases avanzadas de la ELA. Por ello, una sospecha precoz y una
valoración psicológica adecuada, puede dar las claves del diagnóstico. El tratamiento vendrá
ligado a la comprensión de la existencia de demencia fronto-temporal, que hará posible el mejor
manejo afectivo del paciente, ya que no existen tratamientos farmacológicos.
Hasta un 10% de los pacientes con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) puede estar afectado por
demencia frontotemporal (DFT). Se ha descubierto que una de las causas es una mutación
genética presente en el 10% de los pacientes con ELA y en igual porcentaje de los pacientes con
DFT.
La mutación está localizada en el gen que provee las instrucciones para fabricar la
proteína C9orf72, que es muy abundante en el sistema nervioso. Hasta ahora se ha considerado
que la mutación provoca la generación de sustancias tóxicas para las neuronas, lo que influye en
el surgimiento y evolución de ambas condiciones.
Sin embargo, una nueva investigación publicada en la revista Nature Medicine, ha logrado
identificar los mecanismos específicos por los que esta mutación puede influir en la esclerosis
lateral amiotrófica y la demencia frontotemporal.
Los investigadores observaron que la mutación en el gen de la C9orf72 contribuye a la
muerte neuronal disminuyendo la cantidad de esta proteína que es codificada, lo que lleva a la
acumulación de otras proteínas tóxicas.
Pero el estudio fue a más y demostró que interviniendo en esos mecanismos patológicos
se puede evitar la neurodegeneración que caracteriza a ambas condiciones.
30. LA MUTACIÓN CONTRIBUYE A LA NEURODEGENERACIÓN DE DOS
FORMAS
Los investigadores crearon neuronas motoras derivadas de células obtenidas de la sangre de
pacientes con ELA, pero también de sujetos sanos. Recordemos que la degeneración de las
neuronas motoras es el signo más clásico de la ELA y la causa de los síntomas que vemos en los
enfermos. En el estudio, tras varios experimentos, los investigadores concluyeron que la
mutación en el gen hace que sea haploinsuficiente, es decir, que la proteína que se produce no es
suficiente. Esto tiene dos consecuencias fundamentales:
■ Por una parte, se acumulan los receptores de glutamato, una sustancia que en exceso
resulta muy tóxica a las neuronas motoras.
■ Y además, se altera la capacidad de eliminar las sustancias tóxicas que en sí misma
provoca la mutación.
12

Lo anterior sucede porque la proteína C9orf72 es importante en la formación de los lisosomas,


estructuras celulares encargadas de la digestión celular. Al afectarse la biosíntesis de lisosomas,
la capacidad de las células de lidiar contra sustancias tóxicas queda disminuida.
Si la falta de C9orf72 termina dañando las neuronas motoras, entonces elevar los niveles
de esta proteína es una estrategia terapéutica que, al menos a primeras, resulta atractiva. Los
primeros pasos ya los dio este equipo de investigación, que probó 800 compuestos buscando
aquel capaz de estimular la producción de C9orf72 o de imitar su función en el organismo.
Por el momento ya identificaron un buen candidato, denominado YM201636, que
contribuye a aumentar la supervivencia de las neuronas motoras. Los investigadores seguirán
buscando compuestos que sean capaces de impedir los efectos patológicos de la mutación, que se
considera la principal causa (conocida) de ELA y demencia frontotemporal.
31. LOGOPEDA
El Logopeda es el especialista que trabaja sobre el habla, la deglución y la comunicación en
general. Entre los tipos de ELA es el bulbar el que principalmente incide desde el primer
momento sobre las funciones de la comunicación, la deglución y la respiración. Cuando la ELA
actúa sobre los órganos articulatorios se da una disartría –problemas en la articulación de los
sonidos que evoluciona hacia la imposibilidad para el uso de la palabra o anartría–. Según los
expertos, es aconsejable iniciar la terapia incluso antes de la instauración de los síntomas con
vistas a evitar un deterioro superior a lo deseable. Se realizaran ejercicios respiratorios y su
aplicación a la voz, ejercicios de movilidad cervical y orofaríngea, trabajo articulatorio de voz y
de respiración. El tratamiento para los afectados de ELA nunca será de tipo rígido, ni duro; se
evitaran los esfuerzos que puedan provocar molestias o cansancio y siempre se encaminará hacia
el lenguaje funcional, a aquello que mejor sirva al afectado en cada momento. Además no todos
pueden realizar los mismos ejercicios, así que se deberán adaptar a las necesidades de cada
afectado. No es aconsejable realizar los ejercicios después de comer, se aconseja realizarlos antes
de desayunar o a media tarde. Hay que insistir en que el afectado no debe sentirse cansado a la
hora de realizar cualquier ejercicio o esfuerzo ya que el resultado sería más perjudicial que
beneficioso. (Susín, 2013)
13

DESCRIPCIÓN DE LA ACTIVIDAD

El objetivo general es dar a conocer conocimientos relacionados con la Esclerosis Lateral


Amiotrófica (ELA) y la intervención de las neurociencias y la neuropsicología en la Exposición
de Neurociencias 2018, que se lleva a cabo en el X Encuentro Surcolombiano de Psicología, En
donde por medio de actividades creativas y dinámicas interactuamos con los espectadores
permitiendo una perspectiva clara y divertida, encontrando la relación que se presenta entre la
enfermedad y las neurociencias.
Las actividades se desarrollarán en cuatro momentos: primero, la identificación y causa
de la ELA; segundo territorios afectados en ELA; tercero la intervención de las neurociencias en
la enfermedad; y por último ejercicios prácticos sobre el ELA.

1. Identificación y causa de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA)


En nuestro cuerpo, así como el de animales, plantas y bacterias existe un tipo especial de
electricidad que es esencial para su función, y que por ser la electricidad asociada a procesos
biológicos se llama "bioelectricidad”. En nuestro caso, la electricidad funciona con iones y
neuronas que trabajan a través de la sinapsis. Como ya conocemos en la esclerosis lateral
amiotrófica (ELA) se involucran la muerte de las motoneuronas; existen dos tipos de
motoneuronas: las motoneuronas corticales (o superiores) tienen sus cuerpos en la corteza
motora, que se ocupa de dar las órdenes para el movimiento, y sus largos axones viajan por la
médula espinal hasta hacer sinapsis con las motoneuronas medulares (o inferiores), que inervan
los músculos, tanto esqueléticos como viscerales, y les transmiten el mensaje de la corteza
motora, desencadenando el movimiento del cuerpo y de las vísceras. Cuando estas neuronas
mueren, los músculos no sólo no saben qué hacer, sino que se quedan sin el estímulo que los
mantiene vivos y activos. (Santos, 2015)
En esta actividad explicaremos cómo el EMG (instrumento encontrado en el laboratorio
de neurociencias) mide las señales que van de los nervios a los músculos y la actividad eléctrica
de estos últimos, para determinar si el patrón encontrado es congruente con el de la ELA, este
instrumento proporciona evidencia de degeneración de la neurona motora inferior y demostrar
signos activos de denervación en pacientes con esta enfermedad.

2. Territorios afectados en ELA


En esta actividad se demostrará con más detalle los mecanismos implicados en el daño neuronal
en ELA destacando entre los múltiples daños que se pueden presentar a nivel biológico: el
proceso de excitotoxicidad mediada por glutamato, el estrés oxidativo y los fenómenos de
neuroinflamación y autoinmunidad. Para ello realizaremos una maqueta que tendrá como
contenido la ilustración:
14

El cual explicaremos cada parte de esta manera: En el centro se representa una motoneurona que
recibe contactos sinápticos aferentes en el soma celular y dendritas (amarillo) y cuyo axón se
proyecta hacia el músculo (fibras musculares en rojo) a través de la sinapsis neuromuscular (4).
Algunas de las aferencias de la motoneurona (1, 2 y 3) son sinapsis glutamatérgicas, mientras que
otras utilizan neurotransmisores distintos (5). En condiciones normales, el glutamato contenido
en las vesículas se libera en los terminales presinápticos (1), interacciona con sus receptores en
las motoneuronas y desencadena una entrada moderada Ca2+ y Na+. El glutamato se retira presto
del espacio extracelular por la acción de transportadores de glutamato GLT1, instalados en la
membrana de las células de la glía astrocitaria (azul). El glutamato pasa así al interior de los
astrocitos. En situaciones de déficit de transportadores (2 y 3), sólo una pequeña parte del
glutamato liberado es reintroducido hacia la glía. Con ello se produce una permanencia y
difusión exageradas del exceso de glutamato en espacio extracelular y los receptores del
glutamato de la motoneurona están sobre estimulados. Ello conlleva una entrada exagerada de los
iones calcio y sodio hacia la motoneurona, que puede provocar su muerte. No obstante, un
desajuste iónico más moderado y permanente como el que seguramente ocurre en la ELA es
insuficiente para desencadenar la muerte neuronal rápida, pero conlleva el inicio de un proceso
degenerativo crónico y letal a largo plazo. Entre los mecanismos de daño celular que se activan
destacan el estrés oxidativo a partir de radicales libres (ROS) generados por las mitocondrias
alteradas. El retículo endoplasmático es otro orgánulo diana del daño excitotóxico suave
habiendo retención y agregación intratumonal de proteínas (8), lo cual activará procesos de
autofagia y formación de cuerpos de inclusión (9). Las proteínas mutadas (la SOD1) forman
agregados citosólicos (7) que, a su vez, atrapan otras proteínas necesarias para el funcionamiento
normal de la célula, con la disfunción consiguiente. Hay alteraciones en el citoesqueleto con
hiperfosforilación de sus subunidades proteicas (10), lo que repercute en el transporte
axoplasmático: se forman dilataciones axonales con estructuras retenidas en su interior o
esferoides axonales (11). La motoneurona alterada ejerce atracción sobre células microgliales
(verde) que se acercan a su superficie desplazando terminales sinápticos. Las células migrigliales
activadas producen mediadores que contribuyen al daño neuronal: COX-2, NO, TNFa o
Fas/FasL. También los astrocitos activados (azul) pueden contribuir al daño neuronal a través de
15

NGF, que interacciona con p75 neuronal, o a través del mediador FasL que interacciona con Fas
neuronal.(COLELL, 2005)
Para dicha maqueta se necesitará materiales como: tabla grande lisa, espuma, pinturas y
marcadores.
3. La intervención del Riluzol
El riluzol se encuentra aprobado como tratamiento coadyuvante de la ELA, busca prolongar la
vida o el tiempo hasta la instauración de la ventilación mecánica en este tipo de pacientes.
Los estudios clínicos han demostrado que Riluzol aumenta la supervivencia en pacientes
con ELA, que no han sido intubados para ventilación mecánica y sin traqueostomía. (Martínez,
2007).
En esta actividad por medio de fichas didácticas recrearemos los principales efectos del
riluzol en la neurona motora de la siguiente forma:

Explicando: En primer lugar, el riluzol puede incrementar el proceso por el cual los
astrocitos, células gliales que tienen función de soporte y nutrición de las neuronas, y también la
neurona presináptica (la que transmite el mensaje) captan el exceso de glutamato en la sinapsis
para prevenir la estimulación continua de la neurona motora (A). Además, el riluzol también es
capaz de inhibir el exceso de liberación de glutamato (B). Por último, el riluzol puede bloquear
las corrientes iónicas de sodio que incrementan la excitación de las neuronas (C). En conjunto,
todos estos fenómenos limitan la excitabilidad y previenen la muerte neuronal por
excitotoxicidad.(Santos, 2015).
Para esta actividad tendríamos que utilizar materiales como: cartón paja, tabla delgada y
lisa, pinturas, marcadores.
4. Ejercicios prácticos sobre el ELA
Esta actividad se basará de explicar de manera práctica por medio de material didáctico ejercicios
relacionados con: relación entre lenguaje y ELA, identificación de fases del ELA en el deterioro
motor y por último pruebas neuropsicológicas que permiten el estudio de las alteraciones
cognitivas en el ELA.
❖ Relación entre lenguaje y ELA
Los primeros estudios realizados en relación con la comunicación y el lenguaje en pacientes con
ELA, centraban su interés en el comportamiento motor del lenguaje, es decir, en el habla. Por
ello, muchas investigaciones se centraron en evaluar los componentes articulatorios, fonatorios y
respiratorios del habla, mencionando dos tipos básicos de trastornos: las disartrias que son
16

trastornos de articulación, y las disfonías, que son trastornos de la fonación. Para esta actividad
el espectador verá cómo se puede evaluar la disartria en ellos, a través de ejercicios de habla
silabeada.
EJERCICIO 1 EJERCICIO 2

Pronuncie sílaba a sílaba las siguientes palabras Pronunciaremos más fuerte la sílaba que está destacada

To-ro Pe-ce-ra Mi-cro-fo-no corona camarada rotuladores


Ma-no Ma-le-ta E-le-fan-te estufa campesino desconfianza
Ca-ja Pe-lo-ta Te-le-vi-sor maduro positivo paracaídas
Te-la Ji-fa-fa Fut-bo-lis-ta tozudo armónica refrigerador
Pe-ra Por-te-ro Pa-pe-le-ra tropezar amarillo matemáticas
Ba-jo Pa-la-bra De-sa-yu-no cuadrado indispuesto multiplicación
De-do Per-ce-be Se-ma-fo-ro tentempié nefrítico vocabulario
Ga-to Mon-ta-ña Es-ca-le-ra estruendo resistente felicidades
La-ta Be-lle-za A-cro-ba-ta ábaco guardarropa ortografía
sándalo automóvil inteligentes

❖ Identificación de fases de la ELA en el deterioro motor


En esta actividad se demostrara como se deteriora el funcionamiento motor de una persona que
padece esclerosis lateral amiotrofia en comparación con una persona
sana y con niveles de motricidad normal; se espera que los participantes
puedan discriminar las diferentes fases en cuanto a la afección
progresiva degenerativa del sistema motor.
Esta actividad consiste en que un voluntario de la feria de
neurociencias aplique su funcionamiento motor normal, debe sujetar una
especie de varilla y debe pasarla a través de un laberinto/pared
empleando su brazo; debe tener coordinación en cada movimiento para
evitar que la varilla toque las paredes del laberinto hasta llegar al final
de este, el estudiante podrá moverse hasta encontrar su estabilidad pero
solo debe emplear un brazo a la hora de realizar dicha acción. Al
finalizar la actividad se le informará al estudiante de las diferentes fases y que dependiendo del
avance de esta enfermedad los pacientes con ELA podrían o no realizar un ejercicio de tal
dificultad.

❖ Pruebas neuropsicológicas que permiten el estudio de las alteraciones cognitivas en el


ELA
Además de las zonas primarias motoras afectadas en la ELA, existen estudios que ponen de
manifiesto la presencia de un proceso degenerativo de gran parte del lóbulo frontal. Las
alteraciones de funciones relacionadas directa o indirectamente con el lóbulo prefrontal
(evocación de categorías, atención focalizada y abstracción verbal) y en particular con las
17

cortezas dorsolaterales y premotoras suelen observarse en la exploración neuropsicológica ( F.


Orient-López, 2006).
Las alteraciones cognitivas más relevantes que se presentan en pacientes con ELA son
disfunción ejecutiva, problemas atencionales, de memoria, lenguaje, dificultad de procesamiento
emocional y cognición social, cambios conductuales, estos se encuentran por el deterioro
cognitivo que se ha correlacionado con pérdida de sustancia gris en regiones frontales, parietales
y límbicas en estudios con RM cerebral y se describen anormalidades en sustancia blanca fronto-
temporal en pacientes con ELA sin demencia.
En esta actividad se explicará de manera prácticas dos de las pruebas que se pueden
desarrollar para evaluar las alteraciones cognitivas presentadas en pacientes con ELA:
1. Prueba del reloj: en pacientes con alteraciones cognitivas cuando presentan la enfermedad
se evidencian claras dificultades en la planificación y programación, el horario y el
minutero son de la misma metría, además se evidencia alteración en la distribución de los
números. Se presentará de forma manual al espectador para que realice la prueba y al
finalizar se le explicará cómo se evalúa y qué dificultades se podrían presentar.
2. Cubos de corsi: La memoria a corto plazo es un sistema que mantiene poca información
durante segundos; se subdivide en memoria inmediata si sólo mantiene la información, y
en memoria de trabajo, si además de mantener dicha información opera sobre ella de
manera simultánea. Una prueba que se ha utilizado ampliamente para evaluar la memoria
a corto plazo visoespacial es "los cubos de Corsi", la cual consiste en recordar secuencias
crecientes de toques de cubos. (M.A. Guevara, 2014).
3. Torre de hanoi: Las TOH constituyen una tarea de ejecución considerada como una
prueba de planeación, organización y programación visoespacial, de una secuencia de
movimientos y de atención y memoria de trabajo, que mide funciones ejecutivas. Esta
prueba necesita un buen recurso de memoria de trabajo, tanto para mantener las normas
como para anticipar movimientos en base a la predicción mental de configuraciones
intermedias, así como para mantener la meta final y el tipo de estrategias utilizado en
cada movimiento. Diversos estudios han mostrado que durante el procedimiento de las
TOH existe una prominente activación bilateral en prefrontales, cíngulo, corteza motora,
parietal y occipital (Schuepbach et al. 2002). La tarea de esta prueba consiste en lo
siguiente: se tienen tres torres, en una de ellas hay n discos de diferentes tamaños,
organizados de manera que el mayor esta debajo de los demás y así sucesivamente. El
problema consiste en mover todos los discos a otra torre, pero con la condición de mover
solo uno cada vez, los discos siempre tienen que estar en una de las torres y nunca se
puede colocar un disco mayor sobre uno menor.
18

CONCLUSIONES
Después de realizar la respectiva investigación sobre la Esclerosis lateral Amiotrófica
llegamos a las siguientes conclusiones:

 La ELA tiene una incidencia de 1 a 3 casos por cada 100000 personas. Ocurre con más
frecuencia en hombres y la edad de inicio es en promedio a los 56 años, aunque el rango
oscila entre los 20 a los 80 años.
 Aunque la ELA es un claro ejemplo de enfermedad degenerativa motora en su evolución
se puede ir observando cambios tanto en la modificación del carácter o incluso deterioro
intelectual.
 Usualmente es una enfermedad de aparición esporádica, pero el 10% de los casos puede
ser de carácter familiar, con una herencia autosómica dominante.
 La causa de ELA es aún desconocida, pero se ha logrado entender su patogénesis,
principalmente en el área de la genética debido a mutaciones cromosómicas.
 Debido a que no existe un método diagnóstico específico, debe tenerse una alta sospecha
clínica para realizar un diagnóstico temprano y proporcionar un tratamiento integral al
paciente.
 Solo existe un tratamiento aprobado por la FDA el cual se llama Riluzole (Rilutek). Este
medicamento prolonga la sobrevida en un 10% y disminuye moderadamente la progresión
de la enfermedad. Otros medicamentos están en etapa de estudio y no han sido probados
en humanos. Aun así la rehabilitación multifactorial permanece como la mejor esperanza
para mejorar la salud y la supervivencia en estos pacientes.
 La terapia física debe incluir el ejercicio aeróbico de bajo impacto, como caminar, nadar,
o andar en una bicicleta estacionaria, para fortalecer los músculos no afectados, mejorar la
salud cardiovascular, y ayudar a los pacientes a combatir la fatiga y la depresión.
 La esperanza de vida de las personas afectadas es de aproximadamente 3 años tras el
diagnóstico, aunque ese tiempo de vida puede ser superado como lo hizo el recientemente
fallecido Stephen Hawking. Normalmente la muerte sobreviene por parálisis respiratoria
o por una infección en los debilitados pulmones.
 La gran mayoría de las funciones neuropsicológicas afectadas con la ELA son aquellas en
las que el lóbulo prefrontal tiene un papel principal (evocación categorial, atención
focalizada y abstracción verbal).
 Los pacientes necesitan reestructurar su vida emocional para mejorar su bienestar. Ello
implica poseer un mejor conocimiento de sí mismo, intentar reestructurar su personalidad,
comportamientos y todo lo que se asocia con una reducción del estrés y una disminución
de las emociones negativas (ansiedad y depresión). Es allí donde se ve implicado de gran
importancia el apoyo familiar del paciente para que este tenga calidad de vida y se tenga
consciencia de lo que se padece, ya que necesitará cuidados de forma permanente a
medida que la enfermedad avanza, es necesario un ambiente tranquilo en donde se le
brinde bienestar y amor, ya que, esto amortiguará un poco el impacto del estrés, asociado
al diagnóstico y evolución de la enfermedad.
 Esta enfermedad cursa sin demencia, no obstante un 50% puede presentar alteraciones
psicológicas y conductuales; además aproximadamente un 10 a 15% pueden presentar
signos de demencia frontotemporal y en más del 35% de los casos se detectan signos de
deterioro cognitivo.
19

ARTÍCULOS CIENTÍFICOS

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