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Ser maestro en tiempos de guerra

“Un educador (padre, mentor, familiar, maestro, hermano...) no es aquel que


educa académicamente ofreciendo datos ilimitados. Un educador es aquel que
encuentra un punto sensible en alguien que lo necesita para que pueda
transformar su vida para mejorar”.
Mariana Ludmila Cortés

En las siguientes líneas dejo constancia de mi experiencia como docente en lo


corrido del año 2010 en el Colegio Bello Oriente; el cual invita a toda la comunidad
educativa y educadora de la comuna nororiental específicamente a los asentados
en el barrio del mismo nombre y sus circundantes; apropiarse de la estrategia de
gobierno escolar denomina “autogobierno escolar”, como pilar fundamental de su
modelo pedagógico.

Partiendo de los conceptos de estudiantes y docentes podemos resaltar conceptos


claves como la corresponsabilidad, autoevaluación, co-evaluación,
autorregulación, derechos y deberes, potenciación de procesos; asi como el
debido seguimiento de éstos. En palabras más amplias pero no divagas de
estudiantes, “la percepción que como estudiante tengo del Colegio Bello Oriente,
que es la Institución más admirada por su gobierno escolar… un hogar
maravilloso, de enseñanzas multiplicadoras, que permiten a los estudiantes el
desarrollo de las potencialidades, el libre pensamiento y expresión…
En la que un día elegí estudiar y emprendí un nuevo horizonte de conocimientos
que luego empezaría a aplicarlos a mi comunidad”
Carlos Mario Ochoa
Estudiante 11º

Para otros tantos, como por ejemplo los docentes representa mucho más que el
trasmitir un saber especifico; es además contribuir al proyecto de persona con un
entendimiento y comprensión de modos de relación con el semejante, en el cual
alcancen un nivel de autonomía adecuado para asumir con responsabilidad los
actos propios, ejercitándolo en el acto democrático; desde lo evidenciado en el
aula de clase y que se proyecta en todos cada uno de los escenarios de la
cotidianidad.
Es a partir de lo anterior como podemos comenzar a dar respuesta a cuestiones
tales como: ¿Se fomenta ahí la vivencia ética, basa en la relación con “el otro”,
espejo de mi mismo? Lo cual es muy claro ya que el que es (por lo general, casi
siempre…) responsable y por decirlo de alguna manera se ajusta a los acuerdos
de una comunidad es un ser ético y viceversa.

¿Se reconoce y se vive en la comunidad escolar el principio de la igualdad


fundamental de todos? Esto es ampliamente sustentado por la frase clave del
estudiante de once grado, ya que allí en la ubicación geográfica de la institución
convergen diversas creencias políticas, religiosas, sociales, étnicas, etcétera y
encuentran un punto de encuentro en el colegio; para darle sinergia tanto a sus
particularidades para fortalecer el bien-estar y la sana convivencia en comunidad.

De este modo también se posibilita reconocer y vivir en la comunidad educativa,


educadora y social; el principio fundamental de la igualdad, promoviendo la
educación intercultural como medio para descubrir la riqueza de la diversidad, en
reconocer al otro como agente generador de conocimiento para formación como
ser-ciudadano, el ser-yo, el ser-social; del cual como “producto terminado o final”
se puede obtener un ser con compromiso social, capaz de ejercer formas
democráticas, que apelen al sentido de decisión y responsabilidad con el acto
propio, sin desconocer la existencia y autonomía del otro.

Un ejemplo muy claro y conciso de esto es el protagonismo que todos y cada uno
de los estudiantes tiene dentro de sus procesos académicos y convivenciales,
tanto al interior del aula de clase, como en los asuntos escolares fuera de ella y
que lo tocan de una u otra forma. Todo esto se encarna básicamente en las bien
llamadas “Juntas de Grupo”, conformadas por un presídete o presidenta, vice-
presidente o vice-presidenta y secretario o secretaria; elegidos por voto popular.
Los cuales tienen como misión principal, ser los facilitadores o mediadores de
situaciones adversas y no adversas al interior del aula de clase, siendo la segunda
instancia dentro del debido proceso en el caso de una dificultad, ya que las
dificultades deberán ser resueltas, en principio por las partes en conflicto
(estudiante-estudiante, estudiante-docente…). También se tiene la fortuna de que
los procesos formativos se lleven a cabo entre docentes y estudiante donde hay
una reciprocidad tanto del alcance de las competencias y su seguimiento de estas
a través de la bitácora individual como la de grupo, en la cual se realiza un
seguimiento juicio clase a clase, semana a semana, mes a mes y periodo a
periodo.

Todo esto permite transformar el contexto adverso en uno con opciones de vida
para seres críticos y con mayores herramientas de juicio para construir un
proyecto de vida más digno.

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