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Ante todo, saludar a todos mis compañeros del Foro y a continuación procedo a
responder las interrogantes planteadas.
1. ¿Qué acciones crees que debe desarrollar el Estado, para promover que los directivos
y servidores civiles tengan una conducta acorde con los valores públicos?
Para esta interrogante resulta importante señalar que nuestro país ha vivido una serie de
experiencias las cuales han quebrantado las más profundas raíces socio-económicas y sobre
todo las culturales, como en la década de los 90 encaminado por el autoritarista Alberto
Fujimori; mismas que han desencadenado numerosos cambios en lo político, sometiendo a
las Instituciones Públicas y a los servidores públicos a numerosas pruebas.
Los servidores civiles deben de fomentar, partiendo de ellos, el actuar con ética y con la
verdad. Esto quiere decir, que se debe generar un cambio de actitud por parte de los
Servidores Civiles, traducido en la formulación de nuevas estrategias de políticas públicas, más
acorde a las necesidades y exigencias de la sociedad en su conjunto y la influencia del entorno
Regional, Nacional e Internacional. Adicionalmente, desde casa se debe de preparar a los más
pequeños para accionar con libertad, y que desarrollen una identidad inédita de la que puedan
ser capaces de tomar decisiones en lo largo de su vida.
Por otro lado, podemos considerar como norma piloto, el código de la ética, es decir, como un
indicador del cual nos guie sobre lo que es correcto y no como algo de lo que es obligado a
cumplir, a su vez, es necesario considerarla como una norma institucional de carácter
constructivo, es decir, que funciones como subconsciente ante cualquier prueba en el ejercicio
de la función pública.
Para finalizar, el Servidor Civil, en el cumplimiento de dicho código ético, debe ser entendido no
por temor o castigo, sino propia conveniencia y por respeto al deber así como a las funciones
encomendadas.
Es fundamental, entender que la reflexión nos permite solidarizarnos, tomar conciencia y tener
discernimiento ético sobre nuestras acciones; es decir, sólo una sociedad con sentido solidario
hace posible la implementación de políticas sociales que buscan una igualdad de oportunidad
para todos y cada uno. Sin este apoyo de todos los sectores de la sociedad resulta llanamente
imposible disminuir la pobreza cultural, porque la solidaridad significa renunciar a unos
intereses frente a otros más urgentes, no cediendo a la presión de las demandas políticas sino
priorizando las necesidades sociales.
Es así como, los funcionarios, gracias a ello podrán poner en práctica los valores éticos, que
son producto de las experiencias al momento de reflexionar (pienso y luego hago), y son
puestas en marcha a través del discernimiento.