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La cultura del Atajo (Mokus)

La cultura del atajo de la que habla Mokus, plantea que los Colombianos nos saltamos
las normas, violamos la ley (para lo cual siempre tenemos una justificación o excusa),
hacemos cosas que aunque pueden legítimas son moralmente incorrectas. Pensamos
solo en nuestro propio beneficio, sin importarnos el “bienestar común”.

Por eso nos saltamos la fila o buscamos amigos en ellas, para no tener que esperar
nuestro turno. Evadimos impuestos con la excusa de “que todos lo hacen” o que igual
se roban la plata. Nos parqueamos en zonas prohibidas o buscamos siempre la
manera de “sacar provecho o beneficio de cualquier situación”

Algunos llaman a esto “tener malicia indígena” es decir ser lo suficientemente hábiles
para obtener lo que queremos, evadiendo normas o la autoridad.

Frente a esta idea de la cultura del atajo, la idea es que escriban su postura personal,
teniendo en cuenta lo que uds. Ven en sus espacios de trabajo, con compañeros,
amigos o con personas conocidas.

Cómo se evidencia la cultura del atajo en sus contextos cotidianos?

Esta cultura del atajo se evidencia como un comportamiento muy usual en la sociedad
actual, donde de lo incorrecto se obtiene un fin correcto; debido a una típica acción,
que con lleva a un resultado exitoso, partiendo de un mal ejemplo o mal testimonio,
que implico un mal sometimiento a las disposiciones que regulan la vida de nuestra
sociedad.

Evidentemente, por los afanes, las facilidades y la misma jactancia superior del ser, en
obtener importancia entre los demás, hace que las personas caigan en esta actitud
repetitivamente, aun llegando a acostumbrar la conciencia y perdiendo el criterio del
cuestionamiento a la razón, a lo bueno y a lo malo del proceder.

Repentinamente desde el despertar del hombre con razón, su instinto hace asumir sus
propias responsabilidades desde el comienzo del día; situaciones en la cuales con
lleva, a estar en momentos donde el hogar, en el colegio, el trabajo o en el medio
social, las mismas personas buscan beneficios en su vida cotidiana para poder tener
privilegios propios y en pocas ocasiones para otros también. Estos beneficios muchas
veces están relacionados a escenarios donde se busca la forma de ahorrar recursos,
dejar de asumir menos responsabilidades, obtener triunfos por méritos de otros, etc..
Permitiendo que esta conducta ilegal genere excusas y se vuelva un reproche que nace
como impulso, de quien aún apenas prepara su razón y conocimiento para asumir el
mundo donde ha llegado.

De lo anterior visualizamos algunos ejemplos, tal vez lo más comunes , como no pagar
transporte público, aun teniendo como hacerlo; hacer que los demás te gasten aun
teniendo como poder adquirir las cosas por ti mismo; faltar al trabajo con el pretexto
de estar enfermo, pero enfermo del guayabo de la fiesta del día anterior; obtener
créditos y méritos con trabajos y esfuerzo de otros solamente por orgullo; saltarse la
fila de una entidad bancaria por ahorrar tiempo , excusa de la pereza de estar en esa
situación por no organizar bien el tiempo; ganar dinero con facilidades aun
engañando las personas extrañándoles sus recursos del esfuerzo de sus manos, con
excusas de hacerlos participes de incrementos a dimensionados de su recursos
financieros , caso conocido colombianamente como pirámides multiniveles; y estos
son pocos casos de la lista de como una sociedad que en los últimos años se ha
acostumbrado a ver los logros, el esfuerzo e inteligencia, en su mayoría adquiridos por
trampa o tumbando a los demás; como la mejor excusa de salir con la frente en alto
como se pueda, sin percatarse que se está volviendo deshonesto. Y al final terminamos
con una condición humana fuera de valores, normas y reglas; que deforma, destruye
pero no construye.

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