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SEMANA 2
Pruebas Psicológicas III
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Lea esto primero. UNIACC, semana 2
Introducción
I.Administración
B) Materiales para la aplicación del test: Diez láminas boca abajo en orden de
presentación (la primera lámina que está boca abajo sobre la mesa es la lámina
X); protocolo de localización, que consiste en una hoja que contiene impresas las
diez láminas en miniatura, donde se registra el lugar en el que vio su respuesta y
un cronómetro para registrar el tiempo entre que se da la consiga y en el que el
evaluado entrega una respuesta.
F) Segunda fase: Interrogatorio: Una vez que el evaluado haya visto las diez
láminas, comienza la fase de interrogación, la cual tiene como objetivo saber qué
área de la mancha utilizó y qué cualidades preceptuales lo guiaron para llegar a
ver lo que vio. Se le dice: “Usted me dijo (por ejemplo: una flor) ¿podría indicarme
dónde la vio y qué le hizo pensar en eso? También es posible solicitarle al sujeto
que describa lo que vio. Se debe interrogar todas las respuestas de cada lámina y
se debe obtener en cada una las cuatro categorías: área de localización (dónde lo
vio), determinante (por qué lo vio), categoría (contenido) y la calidad formal (qué
tan integrada y semejante a la realidad es lo que vio).
Las respuestas se registran en el protocolo. Debe marcar el lugar en el que fueron
vistas y se enumeran, partiendo con respuesta nº1 y así progresivamente.
Existe la posibilidad que el evaluado no entregue una respuesta en una
determinada lámina. Se recomienda esperar aproximadamente dos minutos y en
caso de que no logre dar respuesta (shock), se le retira la lámina y al final del test
se le vuelve a administrar la lámina y se le explica que se la entregan para ver si
logra ver algo ahora.
Fig. 1
Lámina I: De la Fantasía de Enfermedad: Quién soy.
Fuente: Bohn, 1979.
Fig. 2
Lámina II: De la Culpabilidad Sexual.
Fuente: Bohn, 1979.
Fig. 3
Lámina III: De la Normalidad en la Relación Social.
Fuente: Bohn, 1979.
Fig. 4
Lámina IV: Del Padre Edípico Terrorífico- Autoridad.
Fuente: Bohn, 1979.
Composición: Negro.
Tiempo de Reacción: Prolongado.
Popular: Piel.
Respuestas comunes: Monstruo, tronco, cabeza de animal, botas, etc.
Shocks: Común, generalmente es rechazada.
Fantasías: Temor y el deseo sexual; Prohibición del incesto; Necesidades de
dependencia. A veces despierta vivencias paranoides, culpa persecutoria ante la
autoridad.
Lámina V: De la Realidad.
Fig. 5
Lámina V: De la Realidad.
Fuente: Bohn, 1979.
Composición: Negro.
Tiempo de Reacción: Corto.
Popular: Murciélago, mariposa, ave.
Respuestas comunes: Figura humana, perfiles, bailarinas, tenazas, etc.
Shocks: No suelen haber fallos, en caso de que exista un shock es signo de
esquizofrenia. Podría ser un shock diferido por un desplazamiento de la angustia
despertada en la lámina anterior.
Fantasías: Mariposa lo femenino y el murciélago lo masculino.
Muestra la capacidad de ubicarse ante la realidad, de contactarse
adecuadamente con el mundo externo y poseer sentido común.
Fig. 6
Lámina VI: De la Heterosexualidad.
Fuente: Bohn, 1979.
Fig. 7
Lámina VII: De la Madre interna; Edípica.
Fuente: Bohn, 1979.
Fig. 8
Lámina VIII: De la Adaptación afectiva y Fantasía de Curación.
Fuente: Bohn, 1979.
Fig. 9
Lámina XI: De la Sublimación - la madre como objeto parcial.
Fuente: Bohn, 1979.
Fig. 10
Lámina X: Del Espacio vital y del medio ambiente.
Fuente: Bohn, 1979.
La localización permite definir los procesos que utiliza el sujeto a nivel cognitivo,
tanto frente a la situación de evaluación como frente a la realidad. Es decir, si es
globalizador, práctico, minucioso, oposicionista, entre otros, así como también el
tipo de pensamiento que posee, dando cuenta, por ejemplo, si posee un nivel
mayor de concretismo, madurez, puerilidad, abstracción y/o detallismo (UNIACC,
2005).
Para clasificar una respuesta como “G”, debe estar clara la intención de globalizar
por parte del evaluado. Rorschach clasifica las respuestas “G” en primarias y
secundarias, diferenciándose sólo porque las primeras ocurren en un solo acto
perceptivo, en cambio, las otras en varios actos de percepción. Dentro de estos
dos grandes grupos, Aracena (1980) clasifica los siguientes tipos de “G2”:
G Primarias:
G Secundarias:
Puede ocurrir también que la persona verbalice lo que ve en toda la lámina, pero
luego excluya expresamente alguna porción de la mancha. En este caso, la
respuesta ya no sería “G”, sino que se puede clasificar como v cortada (G/) o “G”
incompleta (Gi).
Las respuestas “G” cortadas son respuestas totalizadoras, en las que el sujeto en
su afán de crítica, oposicionismo y/o perfeccionismo, quita porciones de la mancha
que no le resultan significativas. Generalmente durante el interrogatorio, al
preguntarle dónde lo ve, el sujeto da respuestas del tipo “todo, pero sin esto”.
Klopfer (1977) aporta algunas otras categorías, las que se conocen como las
respuestas de “G” incompletas y que son similares a las “G” cortadas, pero su
significación es diferente. En ellas, al localizar su respuesta, el examinado omite
una parte de la mancha, pero habiendo dicho previamente que abarcaba toda el
área. Un ejemplo de esto sería cuando en la lámina V, la persona dice “un
murciélago” y al pedirle que indique en la lámina dónde lo ve, diga “en toda”, pero
al marcarla con el dedo excluye los salientes laterales (UNIACC, 2005).
Este tipo de localización se asocia más que con afán de crítica, con pobreza
intelectual en algunos casos o con perfeccionismo o conductas evitativas en otros.
2.- Respuestas de Detalle Usual: Estas respuestas se representan con una letra
“D” y aluden a aquellas partes de la mancha que resaltan, en virtud de la
composición de las figuras, y que son gestálticamente separables con facilidad.
Según Rorschach, la reacción de las personas ante las láminas es, en primera
instancia, interpretar la mancha de manera que coincida con la totalidad, pero al
no lograrlo o una vez agotadas las posibilidades, pasarían a observar las
diferentes partes de la figura, deteniéndose en "aquellas formas accidentales que
más destacan en su composición".
Tradicionalmente se pensaba que para catalogar las respuestas como “D”, éstas
debían abarcar grandes porciones de la mancha, pero actualmente se ha
acordado que no es necesariamente así, sino que pueden aparecer segmentos
pequeños de las manchas y de igual forma, constituir una “D”, por la frecuencia
que es visto por la población.
Las respuestas de detalle frecuente o detalle grande, tienen estrecha relación con
el pensamiento práctico y se asocian a la percepción de lo inmediato y de lo obvio.
Generalmente, se relacionan con una tendencia al pensamiento concreto y al
denominado “sentido común” (Maffioletti y Andreucci, 2001).
Es posible establecer una relación entre adaptación cotidiana y las respuestas “D”,
pero esta interpretación deber estar apoyada por el contexto total del protocolo. Es
decir, la capacidad para comprender y organizar los aspectos centrales de una
situación y, por ende, lograr un ajuste adecuado estaría también condicionado a
los otros indicadores del test (Rapaport, 2010).
Rorschach afirmó que una vez agotados los detalles que el ojo capta con facilidad,
la vista se detiene en las más pequeñas minucias de la imagen y el sujeto quizás
llegue a producir una o varias respuestas de pequeño detalle. Así, define al detalle
inusual como detalles de la imagen que restan después de sustraer las “D”
(Aracena, 1980).
En ocasiones, las respuestas “Dd” pueden considerarse de mayor tamaño que las
“D” habituales, pero son elegidas en un área que es de tal naturaleza que
habitualmente es inadvertida por la mayoría de las personas (Aracena, 1980).
También es posible que un Dd incluya la reunión de varios “D”.
Por esto, es preferible agrupar este tipo de respuesta en “detalles inusuales”, pues
alude a una percepción poco usual, divisiones poco frecuentes y, en ocasiones,
raras. En palabras simples: “Todo lo que no es D, es Dd”.
Lo más frecuente es que las respuestas de Dde sean de “perfiles” o “costas”, pero
siempre que se utilice sólo el contorno, porque si se usan partes de la superficie
para completar la respuesta, como partes de la cara o topografía del paisaje, ya no
será Dde.
2. Detalle inusual interno o interior (Ddi): son aquellas respuestas en las que
se usan zonas localizadas dentro de la superficie de la mancha, sin contacto con
los bordes, con excepción de los espacios blancos internos, es decir, deben estar
dentro de la superficie gris o coloreada. Generalmente, estas respuestas incluyen
detalles de rostros humanos o animales determinados por las diferencias de
matices de las láminas. Esta operación requiere habilidades cognitivas más
complejas, por lo cual es signo de creatividad, observación e inteligencia.
3. Detalle inusual raro (Ddr): estas respuestas se clasifican así cuando implican
una manera extraña de recortar la lámina, sin seguir los límites conocidos o
habituales ni respetar las formas gestálticas. Esto no necesariamente implica que
la respuesta dada sea mala o no se ajuste a la mancha, sin embargo, implica un
corte arbitrario que no se encuentra determinado por ningún elemento específico
de la lámina. Según Maffioletti y Andreucci (2001), esta conducta se podría
explicar por la presión que ejerce en el sujeto algún contenido conflictivo que lo
fuerza a ajustar el concepto elaborado a esa zona específica.
Este indicador se calcula contando cuántas localizaciones hay del mismo tipo (G,
D, Dd, S), las cuales se dividen por la cantidad de respuestas totales.
Posteriormente, este resultado se multiplica por 100.
Es importante recordar que la S nunca va sola, sino que se asocia a alguna de las
localizaciones anteriores (GS, DS, o DdS), por lo que, al sumar los porcentajes,
sólo se considerarán G + D + Dd para el 100% total.
Conclusión
Se debe recordar la importancia del Encuadre durante la aplicación del test. Como
se vio en el texto anterior, el encuadre es fundamental tanto para el evaluador
como para el evaluado.
El tipo aperceptivo no sólo permite conocer cómo el sujeto percibe la realidad, sino
además, se relaciona con el tipo de inteligencia. Por ejemplo, para lograr dar una
respuesta que implique a la mancha en su totalidad (G) se requieren más recursos
cognitivos que ver en un detalle usual (D).
Referencias Bibliográficas
PET.
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