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Estudios africanos del mayombe antiguo

El congo la escencia del verdero palo mayombe

Además de reproducir antiguos hechizos y ceremoniales, muchos de ellos olvidados o


metamorfoseados, y otros, con una dosis de temprano sincretismo, así como conjuros
actualmente vigentes en África, pretendo que este primer libro, sea un manual sencillo y
práctico, para aprender o perfeccionar el lenguaje que originariamente usaron los primeros
Congos, fundadores del Palo Mayombe, al llegar a la isla caribeña. Quisiera apuntar, que
aunque muchos de los ritos que se describen en este libro, dejaron de ser usados en Cuba,
desde hace bastante tiempo, los actuales ceremoniales, en muchos casos, conservan vestigios
de la conexión existente entre ambos, lo que les hace comprensibles y ejecutables para los
practicantes de esta creencia. En ellos muchos fieles pueden ver reconocidas las numerosas
anécdotas de tradición oral que han llegado hasta nuestro días, pero que muchos se preguntan
a donde fueron a parar. No es de entrañar que se den casos en los que se mencionan, Congos
que volaban a África o piedras poderosas que bailaban al sonido de tambores consagrados e
incluso Tata Nganga que podían hacerse invisibles en incontables cuentos populares, pero que
hoy en día se desconoce cómo eran aquellos ritos secretos que se llevaron los viejos a la
tumba como mayor herencia de antaño. Aunque muchos seguidores de este credo, en la
actualidad, no entiendan la importancia de este aprendizaje, es absolutamente básico
reconocer, que mientras más nos acercamos a la tradición, más podemos aprender de ella, 20
sin tener que desechar lo que hasta ahora hemos conseguido, y todo lo que positivamente sea
evolucionado. Esto lo digo porque puede parecer mas cómoda la posición de algunos,
enquistándose en mantener las creencias, tal y como hoy se conocen, sin intentar evolucionar
hacia la perfección, dejando atrás los tiempos en que eran cosa de «negros congos», cosas
demoníacas y diabólicas el referirse al Palo Mayombe. El practicar estos ritos, es tan loable
como cualquier otra práctica religiosa; a mi modo de ver, nuestros ancestros tuvieron la
necesidad, porque las circunstancias así se lo impusieron, de ocultar su fe, acercándose al
catolicismo, que era «lo que estaba bien visto», ya que de otra forma no eran capaces de hacer
sus rituales, con un mínimo de libertad. La permanecia en el ocultismo solo trae confusión y el
secretismo, tergiversa, a los ojos de los profanos, el sentido instructivo de esta cultura y hace
desaparecer su folclor. La traducción de los rezos, que se ofrece en este libro, es una
interpretación, lo más cercana posible al castellano, respetando, con absoluto rigor el
significado que los Tata Nganga le atribuyen a cada palabra, frase o expresión en su contexto
mágico para que se alcance con ello el efecto deseado en el ritual. La palabra como ente
propio en el campo de la magia encierra además de su significado práctico una personalidad
mágica propia que propicia la comunicación con entidades del mundo invisible y es mediante
el empleo de estas “formulaciones mágicas” que se consigue activarlas para determinado fin
ceremonial. Por otra parte, el lenguaje gramatical y el glosario que se emplea en este libro,
hace referencia al dialecto popular de los Kikongos para una mejor comprensión de su
lenguaje y en el caso de la lengua sagrada sólo compete a los rezos. INTRODUCCIÓN 21 EL
LEGADO VIVO DE ÁFRICA I Principalmente de CABINDA, designación dada a los habitantes del
territorio de Cabinda, provincia más al norte de la República de Angola, y que comprende
numerosos clanes hermanados con un tronco genealógico común como los Bauoio, Bakongo,
Basundi, Balinge, Bavili, Baiombe, Bakoki, en sus fundación, fue confiada a los reyes del
antiguo Reino de Ngoyo y más propiamente a los de la región de la actual ciudad de Cabinda y
alrededores, siendo pueblos que hacen parte de la grande familia bantú, por sus tradiciones,
usos y costumbres. De Cabinda llegaron a Cuba numerosos barcos cargados de esclavos, que
procedían de estas etnias y que llevaron sus ritos y costumbres, que hasta hoy perduran en la
isla caribeña, bajo una forma de culto que se denomina Palo Mayombe o Palo Congo. Si bien
es cierto que desde muy temprano esta cultura se fusiona con el culto a los Orishas, de origen
Yoruba, haciendo un paralelismo, que prácticamente oculta, parcialmente sus orígenes, aun
pueden encontrase vestigios de estas tradiciones, en las ramas de casas de creyentes más
tradicionales. Por un complejo proceso de asimilación propio del pensamiento africano, los
esclavos descendientes de la cuenca ¿DE DONDE PROVIENE EL PALO MAYOMBE O PALO
MONTE? 22 del Congo que desarrollaban tareas más duras como el trabajo agotador de los
campos de cañas de azúcar , cafetales, plantaciones tabacaleras entre otros rubros de la
prolífera industria agrícola de la isla que usaba mano esclava para su producción, vieron que
sus semejantes los Yorubas mas dóciles y versados en artes domésticas copaban posiciones
más cómodas dentro de las casas de los hacendados en zonas rurales o en las mansiones de los
burgueses de la época por lo que asociaron esa posición privilegiada a la fuerza mágica de sus
orishas y entendieron que deberían apoderase de esa magia, para ello utilizaron un proceso de
paralelismo que derivó en la identificación de los NkisiNsi con cada una de las virtudes de un
Orisha en particular. Al igual que hicieron los yorubas con los santos del catolicismo. No solo el
esclavo veía en el catolicismo una religión mas poderosa porque les sometía sino que veía
también como se podían hacer mediante el sincretismo con los poderes de los santos católicos
e influir en ellos para poder por una parte mantener sus prácticas con un mínimo de libertad y
por otra usarla para obtener el mismo bienestar que esos santos le proporcionaban al amo
blanco. Quien por primera vez visita Cabinda queda muy impresionado, al presenciar casas
enrejadas y decoradas majestuosamente, ya sean de personas humildes, o de status social más
elevado, tanto las de ladrillos como las de papiros, alineadas a lo largo de las carreteras, por
entre filas de palmeras cocoteros, que prestan en los momentos de espera, su sombra al
viajero; su gente habladora y comunicativa, entre la cual hay siempre alguien dispuesto a
informarnos en un portugués muy enrarecido, por la mezcla de los diversos dialectos, y
ayudarnos en cualquiera necesidad. Ambiente, que se heredó también en Cuba,
INTRODUCCIÓN 23 EL LEGADO VIVO DE ÁFRICA I quizás la cordialidad y sencillez de nuestros
guajiros sea un síntoma de la resaca de aquellos africanos, que un día colmaron nuestra
población, y se fundieron para crear nuestra idiosincrasia. Los visitantes ven en Cabinda, el
paisaje dominado por la majestuosidad de los árboles ancestrales, sobre todo, en los bosques
del interior y aún más en la de Mayombe de un bello verde en las copas de sus árboles, de las
palmeras, cocoteros, bananeras, etc. Muy similar a los magníficos bosques tropicales que
colman toda la isla de Cuba. Para deleitarnos con el verde en todos sus matices, no hay tierra
en África cómo en Cabinda. Las orillas de sus ríos tienen una belleza indescriptible. Las aguas
torrentosas del Kiloango, las voluminosas del Luáli y del Lukula y las serpenteantes del Lukola,
del Lulondo, del Lubinda, del Fubu, etc. Todo bello, todo desbordante, todo rico, todo
apasionante, como apasionante es su cultura, envuelta en una mística propia que nos
embelesa entre cuentos y leyendas del más profundo misticismo. Paralelismo, de una floresta
abundante en especies animales y vegetales que también encontró el africano en Cuba, por lo
que su integración fue menos traumática al menos en este sentido, y su asimilación del
entorno propició la continuidad de sus creencias, que se nutren principalmente de la
naturaleza en todas sus formas y esplendor, y de las riquezas que la madre natura pone a su
disposición para crear sus hechizos y rituales. Admiro al africano por sus gentes, con sus usos y
costumbres, la belleza y hasta delicadeza de los principios y leyes familiares y sociales, el tesón
«espiritual» de sus al- 24 mas. Y estas, las almas, no sé si «cazan» con la facilidad con que,
otrora, se podía tomar un Ngulungo a la salida de una roca, un descanso en la planicie del Iabe,
una Mpakasa en el Chela o en el Liko, el Nkoko en el Ntandu Mbambi o en el Kinguingili o ver
aunque con más dificultades un Nzau (elefante) en la Mayombe. Es necesario convivir con
ellos, aceptar sus costumbres tradicionales, comer con ellos una muambada o invitarlos a
nuestra mesa. Cosechar su amistad cuidadosamente, hacerse sentir como parte de ellos y no
con intrusismo por la complejidad cultural, religiosa y social de estos pueblos bantú, se
requiere de un profundo y detallado estudio de todo su entorno para entender su
pensamiento y comportamiento, extrayendo así la savia de sus secretos ancestrales que nos
faciliten utilizar y entender su poderosa magia. El entorno natural donde habitan y se
desarrollan estas etnias, ha sido la principal fuente de su conocimiento y riqueza folclórica. La
observación sistemática del comportamiento de los fenómenos naturales, de los animales y
plantas, y su privilegiada situación geográfica, la selva de la Mayombe, les ha proporcionado
un inabarcable potencial de conocimientos, trasmitidos oralmente de generación en
generación, hasta nuestros días. Los mismos que llegaron a nosotros venidos de África, esa
África negra impenetrable y sufrida que hasta hoy clama por su espacio y por el valor de sus
principios ancestrales y su cultura más antigua que nosotros mismos. La recopilación de datos
se hace muy difícil, por el escepticismo con el que estas tribus tratan a los extranjeros. Los que
como yo, intenataron adentrarse en el místico mundo de su comportamiento social y religioso,
a los que INTRODUCCIÓN 25 EL LEGADO VIVO DE ÁFRICA I siempre relacionan con la
lamentable colonización, hecho que dificulta, aun más, las tareas de estudios en esa región
africana. No se puede mirar a África desde una perspectiva occidental, hay que
inevitablemente comprenderlas desde su propia forma de enfrentar la vida y entenderla y eso
inevitablemente pasa por la magia porque el africano vive sumergido en un mundo místico de
realidades fantásticas que son intrínsecas a su manera de proyectarse y vivir. Otra de las
dificultades que presentan estos pueblos milenarios, es que durante mucho tiempo carecieron
de escritura, lo que provocó que mucho de sus conocimientos desaparecieran, sin dejar rastro
ninguno para la posteridad, no por gusto se dice que cuando en África muere un anciano
muere una biblioteca con él. A pesar de tantas dificultades, África es un pueblo inteligente y
muy capaz, que con el tiempo y no pocos esfuerzos, se han convencido de que para que su
cultura y patrimonio se conserven en esta nueva era, es necesaria la divulgación de sus
preceptos y valores espirituales, para que de alguna forma, se rompa con el mito caníbal y
demoníaco que envuelve a la magia africana, que durante décadas han sido muy maltratadas
por la literatura occidental, acusándolos de demoníacos y atrasados cuando no hay nada más
lejos de la verdad, minimizando los esfuerzos de muchos escritores y científicos - sobre todo
africanos - de diferentes ámbitos que se han opuesto claramente a estas tendencias oficiosas.
Mi buen amigo Tata Colense, el verdadero heredero de Ngunga dia Afilica, e importante
baluarte de este libro, cavilando en la mesa durante las comidas y luego, sobreto- 26 do, en las
noches calientes y de luna del mes de febrero y marzo me permitió hacerme uno de ellos,
entrarles en el alma a través de los conocimientos de su lengua, tradiciones e idiosincrasia. Es
preciso oír mucho, estar a su lado en sus horas tristes y en las horas alegres, que también las
tienen. Una vez leí en algún libro que: ¡solo se hace un verdadero juicio del dolor de una pobre
y vieja madre viuda, viéndola echada al lado de su único hijo muerto! Solo se conoce al
africano en la alegría de las fiestas: comunicativas y magnetizadoras, para las cuales, la
resistencia de los occidentales no daría ni para una hora. Fue, en este encantamiento que me
dejé envolver durante mi investigación, para llegar al

Kowayende como Divinidad Africana Las Deidades africanas han utilizado el sincretismo, fuera
de África para lograr y mantener la tradición de sus Deidades. Lo que si es curioso, que
determinadas Deidades, tienen un profundo tratado real que coinciden con el Santo católico
en conclusión. Este por ejemplo es San Lázaro, Asowanno. Para ello veremos el origen e
historia de esta Deidad....... “” Una vez Kariempeve (el Diablo), fue a ver a Nzambi Mpungo
para decirle de su gran hazaña en la tierra sobre los hombres, de los cuales no había quedado
uno que no se rindiera ante sus tentaciones. Nzambi Mpungo lo miró y le dijo que aún faltaba
alguien, alguien que no lo haría ni renegaría de Él. Le dijo que este era Kowayende, que era un
hombre de dignidad y respetaba los juramentos. Kariempeve se rió y le dijo, que él lo seduciría
y lo dominaría también. Entonces toma rumbo Kariempeve para donde vivía Kowayende y lo
primero que hace es hechizarlo, mandándole un espíritu que le transmite la lepra al
mismo...de forma que Kowayende enferma. Este se vio enfermo de tal cosa rara y decide
caminar mundo para ver si encontraba la solución, cosa que Kariempeve aprovechó para
probarlo. Un día se le aparece Kariempeve a Kowayende y le propone un trato, que renuncie a
Nzambi Mpungo a cambio de curar su enfermedad. Este lo mira fijamente y le responde que
prefiere morir de esa enfermedad que renunciar a Nzambi Mpungo. Este es mi Padre y no lo
rechazaré jamás ni a su mandato Divino. Kariempeve en vista de lo sucedido, se da cuenta que
no puede hacer nada, pero no renunciaba a seguir intentando el rechazo de Kowayende.
Entonces Nzambi Mpungo, le dijo a Kariempeve que bueno...que era la ultima vez que le
permitía tal cosa. Ahora lo que hizo fue que por donde quiera que pasara Kowayende, la gente
le tomara asco y lo repudiara, la gente le tiraba cubos de agua para que se alejara.....entonces
al tiempo se le apareció de nuevo y le propuso la misma oferta, mas que la gente lo adoraría y
lo tendrían como un Rey, pero siempre con el propósito y condición de que renunciara a
Nzambi Mpungo. Incluso le ofertó un reino absoluto para el solo. El alma de Kowayende vale
por 100, por lo que Nzambi al ver aquello, decide dar la salud al Desde ese entonces,
Kowayende tampoco se puede mojar con agua ni lavar nada suyo con agua, porque recuerda
cuando le tiraban cubos y lo rechazaban. Este se lava con agua de coco y vino seco sin sal. La
tierra donde está su verdadero Reino es Aranna. También Nzasi Mpungo es uno de los
precursores de que Él ante Nzambi sea Rey de Dahomey y la tierra Yefá, este fue quien le quitó
los yeremikos a Zarabanda para dárselos a Él. Por este tratado en mi casa se le pone en
símbolo a este pacto, una matari nzasi dentro de Kowayende que se le da de comer primero en
Nzasi Mpungo forradas de cuentas blancas y rojas. Esto se ve en el signo Obbara Irete ( 6 – 13
). ******* O ******* NOTA: Los tratados de las Deidades a menudo se confunden con
tratados de Ocha y si bien son los mismos dado que son la misma Deidad adorada en tierras
distintas. Solo que hay que saber determinar en que momento se hacen o no las ceremonias y
de que forma en cada tierra. No se puede mezclar ceremonias de Ifá con las de Ocha, sin
embargo, los Bokonós (babalawos Ararás), trabajan como el briyumbero. Firman, cargan y no
enjuagan nunca nada, todo nace de la pati empemba. Esta representa a Kowayende, por eso
cuando se pinta esto, la pati empemba camina, ya que representa al pacto de Kowayende con
los muertos. ******* O ******* Unganga Kowayende Tratado completo de este Mpungo
******* O ******* Las Ungangas de Kowayende, pueden distinguirse en dos tipos, las
cerradas y las abiertas. Estas son de varias tradiciones, solo que si las aplicamos a la lógica de
esta Deidad, podremos distinguir, cual de las formas debería de ser la correcta. Según la
tradición Arará, bajo la influencia de las tradiciones Fon, Chapkana, como Deidad, es un
Mpungo, que según la tradición, come y se alimenta de las enfermedades, al igual que las
transmite. Esto viene a simbolizar, que esta Deidad es una especie de filtro. De ahí, que se usa
un Ajalalá o Yarará ( cazuela colador), que hace la función siguiente: Cuando se destapa, se
trata de alimentar con la menga de los animales a la Deidad, de manera que absorba todo el
mal de la persona por mediación de los mismos, y cuando se tapa, dejará salir la salud, y
filtrará todo el mal, quedando preso dentro del mismo yarará. Por otro lado, si se tiene abierta
constantemente, esto estará siempre en el aire, (enfermedad). Kowayende, Pata Nyaga,
Chakuaneco, Tata Nfumbe....de cualquier forma se puede llamar a este Mpungo, el cual hace
referencia a Babalú Ayé, excepto un nombre que hace referencia a Oluwo Popó, que es un San
Lázaro judío, brujo y malo, es decir que se usa para mal. Este Mpungo Kowayende, es el que
lleva y trae a los Nfumbes, al Campofinda Kalunga, es el carretonero que se los entrega a
Mariwanga. Es sabio, adivino y tiene el poder de salvar a las personas incluso de la misma
muerte. Sus ceremonias son misteriosas, pues camina como espiritual, como Unganga, como
Oricha o como deidad independiente. Es una de las Prendas o Fundamentos, mas misteriosos y
de poder que existen, dentro de la Rama de Palo Kongo. Este misterio y poder, lo adquiere por
la compatibilidad y relación tan grande que tiene con el Infra Mundo, o Mundo de los Muertos.
Su relación constante con los mismos, y como trabaja con la ayuda de los mismos. Es por
excelencia, la Unganga que mas contacto tiene con los Nfumbes, y con su mundo. Se reitera
incluso y se deja notar, tanto en el mundo espiritual, como el material, pudiendo extender su
acceso de trabajo con el mismo desde la Regla de Ocha e Ifá. Esto puede que se entienda como
una mezcla, pero no es así. Dentro de la regla de Ifá y de la Ocha, hay deidades que son
denominadas Eggún-Orichas, los cuales llevan firma y cargas, al igual que las Ungangas. Por
ejemplo, Asowanno, en la Regla de Ifá, está compuesto de una carga de tierras, palos, hierbas,
etc, y en su fondo lleva firma, o mas comúnmente conocidas atennas ni Ifá. Lo mismo o similar
sucede con otras Deidades como Agganá Okúm (Olokun de Ifá), Odduduwá, Orúnmila, Changó,
Bellis, etc etc. Este fundamento, conlleva a ampliar el tratado del mismo, y no fija límite alguno
dentro del campo de trabajo con él, pero siempre marcando una pauta en sus bases como tal,
como Deidad. Otro punto es el tratado y mantenimiento, así como la atención de esta
Unganga, la cual se puede tener donde están las demás. Realmente este, es partidario, al igual
que yo, de tenerla en su lugar aparte, pues no se le puede molestar, ni se puede estar con agua
cerca de Él, ni nada de eso, por lo que puede vivir en una cajita a modo de velador, similar al
mueble en el que vive Elegguá. A este se le coloca bastante tela de saco dentro, forrando las
paredes y el suelo, luego una estera y encima el Kowayende. Realmente es una Deidad que
vive a oscuras, por lo que se le puede poner una puerta o una cortina de tela de saco y
mariwó.(Hoja de palma tejida). En formas de trabajo, es amigo de las lámparas, un Mpungo
muy bueno para trabajar con eso, ya que el o los aceites, son parte de su esencia natural. Le
gusta el incienso, con esto destruye a los espíritus oscuros. Los granos son su símbolo y
representación, ya que el Jeré (granos), representan en las tradiciones africanas, a las
enfermedades. Para alimentarlo, se hace siempre de rodillas, excepto para darle el ounko
chivo). Entonces se le da a oscuras y de rodillas el resto de los animales. Es importante saber,
que al mismo no se le puede dar agua, ni tocar nada suyo con agua, incluso su omiero, se hace
con vino seco, y agua de coco. Con esto se lava todo lo que le pertenece, pues en un Oddún de
Ifá, en el que se narra el Patakkí, de Asowanno, se ve cómo esta deidad, Esta Unganga, lleva
aproximadamente 14 días de trabajo para poder montarla, y 3 más de ceremonias anteriores a
su entrega y nacimiento. Es Deidad de la noche, de día trabaja pero muy flojo. Para su
consagración, no se puede estar en lugar con luz eléctrica, pues esta se hace a la luz de las
velas. Es una deidad, que es capaz de dar justicia divina a cualquiera y es que simboliza la
misericordia Divina............... NOTA: lo de enterrar los fundamentos es algo que bueno, se
puede hacer, pero se entiende que el Nfumbe ya estuvo enterrado, por lo tanto no es
necesario. Lo que se hace es darle un pollo o 3 jio jio y forrarlo con letal de saco hasta el día de
la ceremonia. Se hace igual para darle la guinea directa. Se envuelve en tela de saco.
********************* O ********************* Nkunia Nfinda y Ceremonias de la
Unganga Kowayende ( hierbas y palos de Kowayende ) Las amasí, como se le llaman a las
hierbas en arará, son muy importantes dentro de esta rama y en especial en este Mpungo. Se
debe de escoger las de Kowayende, y solamente se pueden mezclar con las de Lucero y de
Nzasi Mpungo. Esto es porque en estas ceremonias de consagración de Kowayende, está
principalmente implicado Nzasi Mpungo, y Lucero, ya que esta deidad está acompañado por
uno. Es por ello, que se le puede completar las nkunias de Kowayende, con las de Nzasi
Mpungo y Lucero. Un total de 21 nkunias. Nkunia Kowayende: fruta bomba, cardo santo,
escoba amarga, cundiamor, pendejera, hierba hedionda, hierba de la niña, hierba fina,
higuereta, salvadera, canutillo, alacrancillo, mastuerzo, aguacate, romerillo, albahaca, hierba
buena, paraíso, bleo blanco, bleo rojo, como principales y se pueden añadir las siguientes:
Salvia, guacamaya francesa, prodigiosa o siempre viva, acacia, caña brava, Ceiba, vencedor,
malva blanca, guayaba, albahaca morada, Artemisa, laurel de monte y laurel de Indias,
campana blanca, chamico, pata gallina, incienso, álamo, almendra, algarrobo, maravilla. Los
palos, se le colocan siempre 21 de fundamento, y se le pueden añadir luego los que le
pertenecen al Mpungo, como refuerzo, pero solamente con 21 ya es suficiente. Hay casas que
le colocan 101, es probable que se le coloque en mpolo (polvo), pero cuidando, de que
ninguno sea mata brujo. Palos: Ceiba, cuaba, ayúa, tengue, cocuyo, guaragua, laurel, sarsa,
jocuma, amansa guapo, guamá, guachinango, majagua, pino de la tierra, dagame, moruro,
jagüey, palma real, yaya, yagruma, ateje, gayakán, y de San Lázaro los que conozcamos y
tengamos. ********************* O ********************* Preparación del kindembo y
ceremonias previas al Mpungo Kowayende 1 Ceremonia Las ceremonias de la Unganga
Kowayende, son extensas y complicadas, ya que para ello, se ha de tener muy claro todas y
cada una de las pequeñeces de las mismas, como anteriormente se ha explicado. Lo primero
que se hace es recolectar 7 hierbas del mismo modo que se redactó en el punto de las hierbas.
Al llegar al lugar de cada hierba, se ofrece en pago, vino seco, maíz tostado y 3 céntimos, esto
lo hacemos antes de recoger cada hierba, así en el momento que el Mpungo de Ngurufinda
está comiendo, nos llevamos el aché de la hierba. Lo ideal para trabajar Nfumbe nfinda es a las
12 de la noche o antes de amanecer. Se le habla a la hierba y se le dice para que se le recoge.
Ahora, al tener todas las hierbas, se va para la casa y se hace la mamba ndiambila. Este se hace
de la forma siguiente: en un cuarto, en el que se ha limpiado bien con aguardiente, ya que no
puede haber la mínima gota de agua, se hace la firma en el suelo, en la que colocaremos una
cazuela de barro. Delante de ella, se coloca una estera y se apilan las hierbas, las cuales
estarán amarradas en moños, y atadas con cinta morada o blanca. Cada una de ellas, claro.
Ahora al terminar de amontonarlas, se tiene preparada la mesa con todos los ingredientes
pertinentes para la sazón del mismo omiero. 5 botes de vino seco sin sal (blanco), 5 cocos
abiertos para utilizar su agua, sacar vistas y hacer rogaciones. Ahora se utilizan 7 hierbas nada
más, para hacer este omiero. En este caso, en vez de echar agua, se echa vino seco ligado con
el agua de coco, pues este Mpungo no puede ser tocado por el agua como recordamos en cada
momento. Para hacer la mamba ndiambila: Se prende delante de la cazuela una pemba carire
cantándola, y a continuación se comienza de la forma siguiente. Se recogen las hierbas
amarradas de tres en tres mazos se presentan al cielo y se dice primero por el mayor: Nzambu
Tata: Va con Licencia Nzambi Mpungo, Licencia Nzulo, Licencia Ntoto, Licencia Ntangu Licencia
Ngonda Ochukuan, Licencia Carire, Va con Licencia Guariao kongo, va con Licencia simbiako
Kumba siete Briyumba endianda cuava, va con Licencia oficio kongo, va con Licencia Tronco
Unganga Munanfinda, Licencia simoyambré, Licencia todo Tata kuenda Nfuiri bacheche,
Licencia yo mismo cheche kuenda Ntoto, nkombo ( nombre suyo de Tata ), Licencia to lo
Nfumbes Kuenda Unganga Cabildo batalla Cuava Sácara Mpeño arriba Mundo. Nzambi
Mpungo, Nkunia cheche que yo manda kindembo son bendición Nzalanga cheche, pa kuenda
derechito arriba Ntoto como manda Nzambi. Nkisi que yo Mboba Kowayende Tumba Ngongo
yera Mundo, Ngongo yari yari por masimene awé. Nzala Mayeko. Ahora para hacer la mamba
se canta por ejemplo: Para echar el agua primera que en este caso es vino seco ligado con agua
coco: Bakonfula: tata, Licencia Nsará nkuniafinda, nsará nfumbe, mamba ndiambila. Tata:
Nsara Ngo. Ripiando la nfinda: Tata: Nsara Unganga, como nsara nfinda como nsara ngo...
Coro: Nsara Unganga. Tata: Como nsara mi Unganga como nsara ngo... Coro: Nsara Unganga.
Tata: Kowayende Nkisi como Nsara ngo... Coro: Nsara Unganga. Tata: Lucerito Unganga como
Nsara ngo... Coro: Nsara Unganga. Tata: Tata nkisi Unganga como nsara ngo... Coro: Nsara
Unganga.

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