Los clientes no sólo necesitan tener el problema, sino saber que tienen el problema”
Para refinar ambas, tu estrategia de marketing y de precios, observa quién ya
te ha comprado tu producto o servicio.
Evaluar la estrategia de marketing de tu competencia podría servirte para
definir tu propio mercado.
En nuestra competencia en la ciudad de Trujillo tenemos a las tiendas del
centro de Trujillo como principal competencia ya que tienen ventas al por mayor a un bajo costo.
Nuestra diferencia con la competencia es que brindamos una buena calidad de
ropa para bebés a un precio asequible diferenciándonos del resto.
Trabajamos una variedad de productos durante el año para las diferentes
marcas con las que trabaja además de contar con su propia marca.
El producto es innovado cada temporada.
¿Por qué elegir comprar nuestro producto?
Porque tenemos modelos innovadores y de gran calidad para los niños y
bebés. Brindamos confianza a los consumidores.
Ofrecemos capacidad de proyectar dos elementos fundamentales hacia tus
clientes: confianza (seguridad, credibilidad) de lo que sabes hacer y la percepción de que les estás brindando un valor adicional a cambio de su dinero.
La importancia de saber proyectar esa confianza se traduce en el hecho de que
el cliente, de manera natural, prefiere adquirir sus productos con alguien que realmente conozca sus necesidades y sepa cómo cubrirlas.
En cuanto al segundo elemento (la percepción de brindar un valor adicional),
aunque aparentemente podría parecer menos obvio para el cliente, no debemos considerarlo menos importante y crítico en la función de ventas de la empresa. Aquí no solo me refiero al valor que necesariamente debe recibir todo cliente a través del producto que adquiere, sino además, al sentimiento de valor que el propietario del negocio proyecta como persona ¿acaso saben tus clientes realmente quién eres y qué te hizo decidirte un día a iniciar tu negocio propio?