Sie sind auf Seite 1von 4

CONOCIENDO TUS FORTALEZAS Y DEBILIDADES

Al mirar esta lista, te verás probablemente impresionado por el hecho de que es poco el control que
tienes sobre la mayor parte de los ingredientes en esta fórmula. ¡No te engañes! Es cierto que no
puedes cambiar tu temperamento, pero hay tres cosas en la fórmula que tú sí controlas y que pueden
mejorar tu temperamento de tal manera que pueden realmente cambiar tu vida: la motivación, la
actitud mental y los hábitos.

Tu potencial motivación
Cuando Dios creó a Adán, lo hizo diferente de todas las otras criaturas vivientes. Le dio un "alma". Esta
alma no sólo tiene una capacidad para Dios sino que es una fuente de motivación externa que es casi
totalmente desaprovechada por la mayor parte de las personas en la actualidad.
Pero sí da cuenta de las tremendas transformaciones que tienen lugar en aquellos cuando
experimentan el "nuevo nacimiento" en Cristo Jesús. Para comprender esto, tienes que visualizar las
cuatro partes de la naturaleza humana descritas en la Biblia.
Jesucristo conocía más acerca de la naturaleza humana que nadie que jamás haya existido (y así
debiera ser, porque en primer lugar, El fue el Creador del hombre). y El dijo: "Amarás al Señor tu Dios
con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con toda tu fuerza" (Mr. 12:30). Señalemos
cuidadosamente los cuatro aspectos de la naturaleza humana: corazón, alma, mente, fuerza.
Notémoslo en el siguiente diagrama.
EL HOMBRE NATURAL
Tu temperamento heredado reside probablemente en el corazón, donde influencia "el método de tu
pensamiento", no el contenido. Puede ser influenciado por la mente, el alma y el corazón. Esto es a lo
que se refiere la Biblia cuando habla de "la carne" o "naturaleza" u "hombre natural"; Cristo no está en
el hombre natural; se halla fuera de su vida. Llama a la puerta de la vida mediante la convicción del
Espíritu Santo en la predicación, tratados, programas de radio y televisión, testimonio personal, etc. Si
el Espíritu de Dios no está dentro de él, experimentará la culpa, el temor, vacío, miseria, carencia de
propósito, confusión y otros elementos negativos representados en la ilustración. La cantidad de
sentimientos negativos dependerá de su propia
EL HOMBRE NATURAL

voluntad y pecado. Su mayor necesidad es su vacío, este "vacío en forma de


Dios" que Pascal señaló en el corazón de cada hombre y que sólo puede ser
llenado por Jesucristo. Este vacío que azota a la humanidad por toda la vida, no
solamente roba al hombre de la diaria presencia de Dios en su vida, sino de su
poder para mejorar su temperamento.
Dios nunca impone su presencia en la vida de una persona; deja al individuo
que decida si va a recibir o no a Cristo como su Salvador y Señor. Pero si tú
crees que Jesucristo murió por tus pecados y resucitó al tercer día, puedes
humildemente arrepentirte de tus pecados y someterte a El pronunciando una
sencilla pero hermosa oración como la que sigue:
"¡Oh, Dios, sé que soy un pecador y que te he desobedecido voluntariamente
en muchas ocasiones. Creo que Jesús murió por mis pecados y que resucitó a fin
de que yo pudiera tener la vida eterna. Por ello, te invito a que entres en mi vida
para salvarme de mis pecados y para diri~ mi futuro. Hoy me entrego a ti".
"Pero a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio
potestad de ser hechos hijos de Dios" (Jn. 1\12). Todos los que creen en El han
renacido, y tienen dos naturalezas. La nueva ~s el hombre nuevo en Cristo,
abriendo para el creyente una nueva fuente de poder. La vieja naturaleza sigue
queriendo pecar.
Ambas naturalezas están vivas. La que domine la situación será aquella que tú
alimentes mejor. Si alimentas la vieja naturaleza con los alimentos de la cultura
enferma de pecados que nos rodea, no te sorprendas cuando te veas dominado
por las debilidades de tu temperamento. Pero si lo que haces es alimentar la
nueva naturaleza con el alimento espiritual de la Palabra de Dios y de las cosas
que pertenecen a Dios, tu nueva naturaleza se volverá tan dominante que
vencerá las debilidades naturales de tu temperamento, hacendo posible a Dios
usar al máximo las fortalezas o talentos que has recibido.
¿Quién está al control?
Oímos mucho en nuestra cultura humanista acerca de
"asumir el control de tu vida". Esto suena bien al principio, pero si se examina
más a fondo esta secta de auto-realizadores, se encontrará el peor pecado de
todos: el egoísmo.

Dios quiere controlar tu vida. No hace ningún misterio de ello. Y nos da este
reto: "Os exhorto, pues, hermanos, en vista de tantos inmerecidos favores
recibidos de Dios, a que correspondáis con una consagración total de vuestras
personas como un continuo sacrificio vivo, santo y agradable a Dios -sea éste
vuestro culto espiritual a Dios. Y no os amo!déis a los criterios del mundo actual,
sino dejad que Dios os vaya transformando mediante la renovación de vuestra
mentalidad, a fin de que en cada circunstancia podáis descubrir lo que Dios
quiere de vosotros: lo bueno, lo que le agrada más, lo perfecto" (Ro 12:1-2,
NVI). ¿Quién controla tu vida? No es difícil saberlo. Pregúntate a ti mismo:
"¿Hago lo que quiere Jesucristo, o lo que quiero yo?" Jesús dijo: "Si me amáis,
guardad mis mandamientos". Es ridículo cantar "Amo a Jesús" mientras que uno
hace con su vida lo que quiere. Cuando Cristo esté al control, harás lo que El te
mande en su Palabra.
Tres modernos estilos de vida
En la actualidad hay sólo tres modernos estilos de vida
posibles. Deberías analizar cuál es el tuyo, y ver si los resultados de este tipo de
vida son lo que realmente deseas.
CULPA
TEMOR
V ACIO
MISERIA
CARENCIA DE PROPOSITO
CONFUSION
Hombre Natural
rnUSTRAClON
RJTIUDAD
CONFUSlON
TURBULENCIA
CULPA
IMPOTENCIA
Auto-controlado
2
PAZ
PERDON
PODER
GOZO
AMOR
VIDA ABUNDANTE
Cristiano bajo el control de
Cristo
3
Nota la similaridad de resultados en los dos estilos de vida representados más
arriba donde el yo está en el trono. La única diferencia real entre el 1 y el 2 es
que Cristo fue una vez invitado a la vida del cristiano, y que irá al cielo a morir.
Pero se siente tan mísero como el individuo que no conoce a Cristo. De hecho,
hay ocasiones en que se siente más miserable, porque el Espíritu Santo puede
darle convicción desde el interior. Estos dos individuos quedarán dominados por
sus debilidades temperamentales.
La tercera ilustración exhibe al individuo que ha rendido el centro de su vida a
Cristo (o que la mayor parte del tiempo esta viviendo así; nadie lo alcanza a la
perfección). Todos vivimos carnalmente en ocasiones, pero al menos esta persona
tiene la capacidad de vivir a la altura de su potencial divino.
FORTALECIENDO TUS
DEBILIDADES
59
Cómo fortalecer tus debl1ldades
"De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura
es; las cosas viejas pasaron; he equí, todas son hechas nuevas" (2 Co. 5:17).
"Cuando un individuo natural redbe la residencia de su poder sobrenatural,
debiera ser diferente". iPiensa en esto! Si Dios está verdaderamente en tu vida,
serás diferente a lo que serías si no estuviera en ella. Pero también es cierto que
el crecimiento tiene lugar de una manera fenta. No se ve mucho crecimiento en
un árbol frutal de día en día, pero hay crecimiento si el árbol está vivo. Así es
con el cristiano. El crecimiento en nosotros es en ocasiones penosamente lento,
pero tiene lugar.
El poder para cambiar
¿Qué diferencias habrá cuando el Espíritu Santo venga
a residir en ti? ¿Tu apariencia? Desafortunadamente, no ¿Te volverás más
inteligente? ¡No! ¿Qué cambios? Tus emociones. El Espíritu Santo trae estabilidad
emocional a nuestras vidas.
Pablo lo describe con estas palabras: "Amor, gozo, paz, paciencia, benignidad,
bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio propio (Gá. 5:22-23). Al estudiar estos
versículos, descubrirás nueve fortalezas positivas que Dios provee al cristiano para
capacitarle para vencer sus debilidades emocionales.
Las nueve fortalezas emocionales del temperamento controlado por el Espíritu
Santo hace de cada temperamento lo que Dios quería al principio. No importa
cuál sea el temperamento natural de uno. Cualquier hombre lleno del Espíritu
Santo, sea sangufneo, colérico, melancólico o flemático, va a manifestar estas
nueve características espirituales. Tendrá sus propias fortalezas naturales y
mantendrá su individualidad, pero el Espíritu transformará sus debilidades.
Estas nueve características representan lo que Dos quiere que sea cada uno de
sus hijos. Examinaremos de manera .detallada cada una de ellas. Hay un anhelo
en el corazón de cada hijo de Dios d~, vivir este tipo de vida. No se llega a ella
como resultado del esfuerzo del hombre, sino que es el resultado sobrenatural del
control del Espíritu Santo sobre cada ¡a del cristiano.

Das könnte Ihnen auch gefallen