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En la configuración del territorio caraqueño, has estado presente procesos urbanos,

determinados, por la fragmentación, superposición y transformación.

En el siglo XX se da un éxodo migratorio, donde los campesinos van hacia la ciudad en

busca de mejores condiciones de vida; dejando despojado el campo y causando una

sobrepoblación en las ciudades.

Dicha superpoblación ha causado expansión de zonas marginales en la periferia de la

ciudad, sin embargo, los índices de desempleo más bajo de todo el país corresponden

precisamente al área metropolitana de caracas.

Según Ontiveros (2002, p. 155),

La ciudad de Caracas ¨ Se ve favorecida por la distribución de la renta petrolera en obras

publicas y burocracia, dando cuerpo y rostro a una ciudad con aires de modernización y

urbanización, imán que empieza atrapar sueños y expectativas¨

En el proceso de urbanización de la ciudad en los últimos 80 años, se pueden destacar tres

grandes momentos

Entre 1936 y 1982, se enmarca una perspectiva expansionista. La ciudad se configura

como un mosaico, un puzzel.

Entre 1983-1999, el territorio urbano se configura como un palimpsesto, donde

predominan los procesos de superposición.

Entre los años 2000 y 2010, en este momento la ciudad se configura como un sistema

caótico y complejo.
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En 1567, el conquistador español Diego de Losada, siguiendo una Real Cédula emitida

en 1563, a raíz del despoblamiento de San Francisco, puebla el lugar, ordena su

reedificación y refunda formalmente la ciudad el 25 de julio de 1567 con el nombre de

Santiago de León de Caracas, nombre que perdura hasta nuestros días, tomando el

topónimo de Caracas por el nombre llevado por los indígenas que habitaban la región a

la llegada de los conquistadores y el nombre del apóstol Santiago por la fecha de la

fundación.

a comienzos del s. XX la capital de Venezuela era una pequeña ciudad agrícola en cuyo

centro se desarrollaba el comercio, con edificaciones bajas de techos rojos y las obras

públicas eran escasas.

Otro aspecto de interés, en cuanto a los medios de comunicación y sus vínculos con la

expansión urbana de la ciudad durante la postrimería del siglo XIX, es la interconexión

ferrocarriles–tranvías. El trazado de las vías para este último medio que hizo su aparición

en 1885, se correspondió con las calles de mayor actividad comercial, permitiendo el

enlace entre la Estación de Ferrocarril de Santa Inés en Caño Amarillo –centro de la

ciudad– con la Estación Ferrocarril de Santa Rosa, en Quebrada Honda. Posteriormente

otras compañías realizaron la conexión Norte–Sur de la ciudad.

Para finales del siglo XIX, Caracas contaba con cuatro líneas férreas para su

comunicación extra urbana: El Gran Ferrocarril de Venezuela, El Ferrocarril Caracas–La

Guaira (ambos con terminal en Santa Inés), el Ferrocarril Central (terminal Santa Rosa)y

el Ferrocarril del Valle (terminal Portachuelo).


El desarrollo experimentado por la infraestructura y los medios de comunicación viales

“fue posible por la injerencia directa de Guzmán Blanco en la ejecución de las obras y en

la obtención y administración de los fondos requeridos, pero sobre todo, por la creación

en 1874 del Ministerio de Obras Públicas” (Martín, 1995: 82). Durante el período

presidencial recogido por la historiografía como el guzmanato (1870–1888), se sientan

las bases para el primer proyecto de capital moderna de la Venezuela Federal, sustentado

en una importante concentración de la inversión en obras públicas en Caracas y

respondiendo a los intereses de la emergente burguesía.

Caracas inició, a partir de la segunda década del siglo XX, un nuevo estadio. En términos

de la teoría de las estructuras disipativas (Prigogine/Stenger, 1988), se podría considerar

que el año 1920 señala un punto de bifurcación o de cambio de la organización urbana.

También podría decirse que para esta fecha Caracas había superado los umbrales

impuestos por dos controles históricos de su crecimiento y expansión: el efecto del río

como barrera para la expansión, y la insalubridad como factor limitante para el aumento

de la población.

Algunas zonas de la ciudad tienen un trazado cuadriculado, ya sea heredado de la colonia

o desarrollado durante los proyectos urbanísticos del siglo XX. Otras zonas, levantadas

en las faldas montañosas, no siguen este patrón, sino que se adaptan a las irregularidades

del terreno. Estas zonas elevadas disfrutan de una temperatura templada a lo largo del

año.
El plano del Gobernador Pimentel y la primera
imagen de Caracas en 1578

Con anterioridad a 1927 los caraqueños desconocían la existencia de este invaluable

testimonio que nos legó el Gobernador Don Juan de Pimentel en el siglo XVI. El hallazgo

se lo debemos al Centro de Estudios Americanistas de Sevilla; y el dibujo del plano, al

copista Antonio Muñoz Ruiz.[1] Se trata en verdad de un solo expediente bajo el título

de Relación de la descripción de la Provincia de Caracas, dirigido al Rey Felipe II por

el Gobernador Pimentel en 1578, que será hecho público por el mencionado centro de

estudios trescientos cuarenta y un años después; es decir, en 1919 en su boletín No.

25. Este trabajo, sin embargo, lo conoceremos los caraqueños luego que la Academia

Nacional de la Historia lo reproduzca, como se indicó, en 1927 en el No. 40 de su Boletín

Oficial.

Tanto ayer como hoy esta famosa pieza documental ha sido centro de interés de los

historiadores y de mucha curiosidad para el caraqueño común. Es indudable el mérito

que podemos atribuirle a los primeros por sus juicios o interpretaciones; pero también, no

deja de sorprendernos lo inquiridor que se muestra el público cuando se planta frente al

plano de Pimentel, que se exhibe desde hace muchos años en el corredor Este del Palacio

Municipal. Puede que sus argumentaciones y conclusiones sean risibles para los más

entendidos sobre el pasado; pero donde éstos deben centrar su juicio crítico, es justamente

ante la incuestionable certidumbre de que aún pervive el nexo entre el pasado y el

presente; entre las nuevas generaciones de caraqueños con las que fueron nuestro núcleo

poblador hace más de cuatrocientos años. La curiosidad espontánea que manifiestan los

caraqueños cuando ven el plano de Pimentel, expresa sin duda una expectación un tanto

difusa o distorsionada sobre los remotos orígenes de la ciudad.


Caracas Colonia

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