APRENDIZAJE EMOCIONAL

Introducción:
Para que un conocimiento se consolide se necesita de algo fundamental: estar relacionado
con una emoción. Conforme nos vamos desarrollando vamos adquiriendo muchas
experiencias, donde solo algunas se van quedando en nuestra memoria, donde el factor
principal que permite ello son las emociones.
En la actualidad se ha venido implementando en el sistema educativo pedagogías que
incluyen el sistema de las emociones como uno de los aspectos que más influye en la
formación académica del alumno.
¿Qué son las emociones?
Una emoción se puede entender como un estado afectivo que experimentamos, es una
reacción subjetiva al ambiente que viene acompañada de cambios orgánicos (fisiológicos y
endocrinos) de origen innato influidos por la experiencia.
Las emociones se pueden clasificar en positivas, si es que van acompañadas de
sentimientos placenteros y manifiestan que una situación es beneficiosa, como son la
felicidad o el amor, pero también pueden ser negativas si es que van acompañadas de
sentimientos desagradables, y dan a entender que la situación como una amenaza, estas
pueden ser la ansiedad o la tristeza.
Emoción y aprendizaje
Las emociones juegan un papel fundamental en nuestras vidas, en nuestro desarrollo
personal y notoriamente en nuestros estudios y aprendizaje.
La educación no puede enfocarse solo en lo académico, en el procesamiento de
información o el desarrollo cognitivo sino también preocuparse por la dimensión humana.
Hay emociones que favorecerán o perjudicarán en nuestro aprendizaje. Las emociones
positivas son mejorarán nuestra eficacia en el proceso de aprendizaje, en cambio las
negativas nos afectarán de algún modo en este proceso.
Las emociones pueden influir inicialmente en nuestra predisposición, motivación o interés
por aprender, posteriormente afecta en nuestra perseverancia y regularidad en el estudio y
más adelante también puede influir en el manejo de las dificultades y en el equilibrio
emocional a la hora de poner en práctica nuestros conocimientos.
Por todo lo mencionado es necesario que en el espacio educativo es necesario tener en
cuenta una serie de condiciones para mejorar el proceso de aprendizaje, uno de ellos sería
crear un ambiente favorable, motivador de estudio, que sean positivos y de colaboración,
haciendo participes activos a los alumnos. Pero todo ello se puede dar si es que el alumno
es capaz de equilibrar y controlar sus emociones.
Los estudiantes debido a que experimentan una serie de situaciones que son
desencadenantes emocionales, tienden a expresarlas o reducirlas. Es bueno poder
expresar nuestras emociones, para que otros también las puedan tomar en cuenta, pero en
otros casos es necesario moderarlas ya que obstaculizan el proceso de aprendizaje.
La manera en como regulamos nuestras emociones influyen en nuestra interacción social
con los demás. Es por ello que es necesario tener en cuenta estrategias para poder
regularlas. El poder regular las emociones es parte de la inteligencia emocional, y para ello
es necesario identificar y entender nuestros estados de ánimo, debemos reconocer
nuestras virtudes y recordar nuestros éxitos, en el caso de experimentar emociones
negativas podemos desviar nuestra atención hacia un asunto en concreto, tomar un respiro
y tratar de visualizar alguna experiencia relajante, pensar otras maneras más racionales de
como mirar una situación, intentar calmarnos a través del contacto físico afectuoso y por
ultima si es que las emociones llegan a ser muy complejos si sería necesario la ayuda de
un profesional.
Conclusión:
Los estados emocionales están presentes en los procesos de enseñanza y aprendizaje
como fenómenos sociales, los cuales deben ser considerados fundamentales en el proceso
educativo por parte de los docentes, y debe tratarse con prudencia la situación de los
estudiantes, cuidando de que las estrategias aplicadas sean las más adecuadas para el
grupo ya que todo ello va a influir en el logro de los objetivos planificados, y por parte del
estudiante, éste debe tener un control sobre sus emociones, desarrollando una conciencia
emocional, potenciando su capacidad de esfuerzo frente al aprendizaje y fomentando
siempre una actitud positiva ante la vida.
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