PARA RECORDAR HAY QUE OLVIDAR

Por Federico Kukso.

En los últimos 20 años el cerebro pasó a ser el epicentro de una gran revolución. Nuestro cerebro
está conformado por aproximadamente 100 mil millones de células nerviosas llamadas neuronas.
Se diferencian de otras en que contienen dendritas y axones. Hasta la segunda mitad del siglo XX,
se pensaba que la memoria estaba distribuida a lo largo del cerebro. Hoy, en cambio, se sabe que
los recuerdos se almacenan en la corteza cerebral y dentro de ella, en el lóbulo temporal
(aproximadamente detrás de cada sien). El rol del hipocampo es crucial. Esta estructura cerebral
interna, con forma de caballito de mar, trabaja como un oficinista que compila y guarda distintos
archivos: abstrae, licúa todos los detalles y se queda con un concepto; así, genera pensamientos y
recuerdos. Se encarga de codificar la información a ser guardada, para luego transferirla a la corteza
cerebral, donde las memorias y quedan almacenadas. Técnicas neurocientíficas son empleadas
para analizar los efectos de la publicidad en el cerebro. Rodrigo Quian Quiroga es el neurocientífico
que descubrió la neurona de Jennifer Aniston. El estudio se basa en imágenes por resonancia
magnética funcional. Una foto de Jennifer Aniston permitió descubrir cómo, ante una imagen, en los
cerebros reacciona una neurona particular. Estas neuronas individuales funcionan como puente
entre la percepción y la formación de memorias. No quiere decir que todos tengamos en el cerebro
la neurona de Jennifer Aniston. Seguramente, un físico tiene neuronas dedicadas a Einstein; un
músico, a Beethoven; un ajedrecista, a Kasparov. Quian Quiroga es autor del libro Borges y la
memoria. En ese texto, revela cómo el escritor argentino se adelantó al estudio de los recuerdos.
Quian estudió el doctorado en la Universidad Médica de Luebeck. En 2001, fue reconocido como
investigador joven por la Sociedad Americana de Epilepsia.
To remember to forget.

Federico Kukso.

In the past 20 years the brain became the epicenter of a great revolution. Our brain is composed of
approximately 100 billion nerve cells called neurons. They differ from others in that it contains
dendrites and axons. Until the second half of the 20th century, it was thought that the memory was
distributed throughout the brain. Today, however, it is known that memories are stored in the cerebral
cortex and within it, in the temporal lobe (approximately behind each temple). The role of the
hippocampus is crucial. This internal brain structure, in the form of a sea horse, works as a clerk that
compiles and save different files: Abstracts, liquefies all details and you are left with a concept; thus,
generates thoughts and memories. It takes care of encoding the information to be stored, and then
transfer it to the cerebral cortex, where the memories and are stored. Neuroscientific techniques are
employed to analyze the effects of advertising in the brain. Rodrigo Quian Quiroga is the
neuroscientist who discovered the neuron of Jennifer Aniston. The study is based on functional
magnetic resonance images. A photo of Jennifer Aniston made it possible to discover how, before an
image, in the brains reacts a neuron. These individual neurons function as a bridge between
perception and memory formation. Not to say that all of us in the brain neuron of Jennifer Aniston.
Surely, a physicist has neurons dedicated to Einstein; a musician, Beethoven; a chess player, Garry
Kasparov. Quian Quiroga is the author of the book Borges and the memory. In this text, reveals how
the Argentine writer was brought forward to the study of the memories. Quian study the doctorate at
the Medical University of Luebeck. In 2001, he was recognized as the young researcher by the
American Epilepsy Society.