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Farmacocinética Estudia la
evolución de Farmacocinética
los fármacos en
el organismo en función del
tiempo y de la dosis. Trata
dinámica y
cuantitativamente los
procesos de liberación,
absorción, distribución,
metabolismo y eliminación
del fármaco y la
interrelación entre los
mismos.
Contenido
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Farmacocinética
1 ABSORCION
o 1.1 Características de
la forma farmacéutica.
o 1.2 Vías de administración enterales
o 1.3 Vías de administración parenterales
o 1.4 Vía respiratoria
o 1.5 Vía tópica
o 1.6 Factores biológicos que condicionan la absorción.
o 1.7 Paso de fármacos a través de membranas.
2 Distribución
o 2.1 Unión a proteínas
o 2.2 Distribución en los tejidos
o 2.3 Paso de fármacos al Sistema Nervioso Central.
3 Eliminación
o 3.1 Metabolismo de fármacos
o 3.2 Excreción de fármacos
4 FARMACOCINETICA CLINICA.
5 FUENTE
ABSORCION
Cuando un fármaco se administra por una vía diferente de laintravenosa debe ser
absorbido para poder acceder a la circulación sistémica y posteriormente a los
tejidos. La absorción de un fármaco y su llegada a la circulación sistémica
depende de factores tales como: características de la forma farmacéutica, vía de
administración, de factores biológicos y de los distintos fenómenos de degradación
que puedan sufrir antes de alcanzar la circulación sistémica.
El proceso de absorción por esta vía es más lento que por vía intravenosa, lo que
puede suponer un inconveniente en situaciones de urgencia. La necesidad de
colaboración del paciente es una desventaja que en ocasiones puede ser obviada
mediante la introducción del fármaco a través de una sonda nasogástrica. Otros
inconvenientes de esta vía de administración es el fenómeno de primer paso en
fármacos con altas tasas de extracción hepática, la aparición de emesis por
irritación de la mucosa gastrointestinal, la destrucción de algunos fármacos por la
acción del pH o enzimas digestivas, la irregularidad de la absorción en función de
factores fisiopatológicos tales como la presencia de alimentos, el vaciamiento
gástrico, etc.
Vía respiratoria
Se emplea para la administración de gases anestésicos, líquidos volátiles,
moléculas liposolubles de elevada tensión de vapor, anestésicos locales y
diversos aerosoles. La velocidad de absorción depende de la concentración del
fármaco en el aire inspirado, de la frecuencia respiratoria, de la perfusión pulmonar
y de la solubilidad en la sangre.
Vía tópica
Entre las vías de administración tópica están incluidas la vía cutánea y las vías
conjuntival y genitourinaria. Aunque destinadas en la mayoría de los casos a
ejercer efectos farmacológicos locales, no debe despreciarse la posible absorción
sistémica por estas vías, y, por lo tanto, la posibilidad de aparición de efectos
tóxicos sistémicos.
Distribución
Una vez que el fármaco alcanza la circulación sistémica se distribuye hacia los
tejidos y a otros fluidos. La velocidad y extensión de la distribución depende
fundamentalmente de las características fisicoquímicas del fármaco, de las
características de las membranas que debe atravesar y de su unión a proteínas
plasmáticas y tisulares.
Unión a proteínas
En la sangre las moléculas de los fármacos pueden ir disueltas en el plasma
(fracción libre del fármaco), unidas a algunas células (en especial hematíes) y
fijadas a proteínas plasmáticas. La albúmina es la principal proteína plasmática
que puede interactuar con los fármacos. Su molécula tiene una carga neta
negativa al pH de la sangre, presentando una gran capacidad con una baja
afinidad para muchos fármacos básicos. Existen dos puntos de la molécula que
ligan fármacos ácidos con una gran afinidad, pero la capacidad es menor. Otras
proteínas plasmáticas capaces de unirse a fármacos son las lipoproteínas (para
bases débiles y sustancias no ionizables liposolubles) y la alfa-glicoproteína
(alguna base débil). Cada fármaco circula unido a proteínas en una determinada
proporción. La importancia de esta relación estriba en que la fracción libre del
fármaco es la que pasa las membranas celulares, interactúa con el receptor para
ejercer su acción farmacológica y la que sufre los procesos de eliminación, por lo
que influye sobre la intensidad y la duración de la acción farmacológica. Sin
embargo, existe un equilibrio dinámico entre ambas fracciones, que se mantiene
en casi toda circunstancia.
Eliminación
El organismo tiene la capacidad de deshacerse de las sustancias externas
eliminándolas directamente cuando esto es posible (excreción), o bien después de
transformarlas en sustancias que pueden ser excretadas más fácilmente
(metabolismo).
Metabolismo de fármacos
Metabolismo es el término general empleado para denominar las distintas
transformaciones químicas que ocurren en el organismo encaminadas, sobre todo,
a reducir la liposolubilidad y la actividad biológica de los fármacos. En general, las
moléculas polares son fácilmente excretadas por el riñón sin necesidad de ser
sometidas a cambios químicos; por el contrario, las moléculas solubles en lípidos
necesitan ser metabolizadas en sustancias más polares antes de ser eliminadas
por la orina, ya que, aunque éstas sean filtradas por el glomérulo, escapan a la
excreción al ser fácilmente reabsorbidas. La transformación de fármacos en
metabolitos conlleva, en la mayoría de los casos, una pérdida total de actividad
biológica. No obstante, existen fármacos que precisan de una transformación
metabólica para convertirse en el verdadero principio activo (profármacos), y
fármacos con metabolitos activos. Aunque el hígado es el lugar donde se llevan a
cabo la mayor parte de las reacciones de biotransformación a través de los
sistemas enzimáticos del retículo endoplásmico liso, en otros tejidos, como
pulmón, riñón, intestino o sangre están presentes estos sistemas, en cantidades
menores, pudiendo metabolizar también fármacos. Clásicamente, las reacciones
químicas de biotransformación se clasifican en dos subgrupos:
Excreción de fármacos
Excreción renal: Al igual que con moléculas endógenas, los procesos
implicados en la excreción renal de un fármaco o metabolito son: la filtración
glomerular, la secreción tubular activa y la reabsorción tubular pasiva.
Excreción fecal y biliar: Parte del fármaco administrado por vía oral puede ser
eliminado con las heces si ha permanecido en el intestino como fármaco no
reabsorbido.
En el hígado hay un sistema de transporte activo para ácidos y uno para bases,
similar al existente en el túbulo renal proximal.
FARMACOCINETICA CLINICA.
La Farmacocinética Clínica constituye una ciencia de carácter multidisciplinar y de
un gran interés sanitario, cuyo principal objetivo en la práctica asistencial es la
individualización posológica u optimización de los tratamientos farmacológicos, a
fin de alcanzar la máxima eficacia terapéutica con la mínima incidencia de efectos
adversos.
El objetivo de la farmacocinética clínica es el estudio de los procesos de
disposición de los fármacos en el hombre, su modificación en determinadas
situaciones fisiopatológicas y clínicas, así como sus implicaciones posológicas y
terapéuticas. La monitorización de fármacos con escaso margen de seguridad que
conduce, entre otros objetivos, a la individualización de la posología permite la
aplicación de los principios farmacocinéticos a la práctica rutinaria de la
terapéutica. Métodos específicos como la cinética de poblaciones y la estadística
bayesiana contribuyen poderosamente a incrementar la precisión en la estimación
individualizada de la farmacocinética y la posología.
Farmacodinamia
Farmacodinamia
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Receptores
Muchos fármacos se adhieren a las células por medio de receptores que se
encuentran en la superficie de éstas. Las células en su mayoría tienen muchos
receptores de superficie que permiten que la actividad celular se vea influida por
sustancias químicas como fármacos u hormonas, que están localizadas fuera de
la célula.
La configuración de un receptor es tan específica que sólo le permite adherirse al
fármaco con el cual encaja perfectamente (como la llave encaja en su cerradura).
A menudo se puede explicar la selectividad de un fármaco por la selectividad de
su adherencia a los receptores. Algunos fármacos se adhieren tan sólo a un tipo
de receptor y otros son como una llave maestra y se adhieren a varios tipos de
receptores en todo el organismo.
Seguramente los receptores no fueron creados por la naturaleza para que
los fármacos se les pudieran adherir. Sin embargo, los fármacos se aprovechan de
la función natural (fisiológica) que tienen los receptores.
Por ejemplo, hay sustancias que se adhieren a los mismos receptores en el
cerebro; es el caso de la morfina y los analgésicos derivados, y de las endorfinas
(sustancias químicas naturales que alteran la percepción y las reacciones
sensoriales).
Los fármacos llamados agonistas activan o estimulan los receptores, provocando
una respuesta que incrementa o disminuye la función celular.
Por ejemplo, el fármaco agonista carbacol se adhiere a los receptores del tracto
respiratorio denominados colinérgicos, causando la contracción de las células del
músculo liso, lo cual origina broncoconstricción (estrechamiento de las vías
respiratorias).
Otro fármaco agonista, el albuterol, se adhiere a otros receptores en el tracto
respiratorio denominados receptores adrenérgicos, causando la relajación de las
células del músculo liso y produciendo broncodilatación (ensanchamiento de las
vías respiratorias).
Los fármacos denominados antagonistas bloquean el acceso o el enlace de los
agonistas con sus receptores. Los antagonistas se utilizan para bloquear o
disminuir la respuesta de las células a los agonistas (por lo general
neurotransmisores) que normalmente están presentes en el organismo.
Es el caso del ipratropio, antagonista del receptor colinérgico, que bloquea el
efecto broncoconstrictor de la acetilcolina, el transmisor natural de los impulsos a
través de los nervios colinérgicos.
El uso de agonistas y el de antagonistas son métodos diferentes pero
complementarios que se utilizan en el tratamiento del asma. El albuterol, agonista
del adrenérgico, que relaja el músculo liso bronquial, puede utilizarse junto con
el ipratropio, antagonista del receptor colinérgico, el cual bloquea el
efectobroncoconstrictor de la acetilcolina.
Los betabloqueadores, como el propranolol, son un grupo de antagonistas
ampliamente utilizados. Estos antagonistas bloquean o disminuyen la respuesta
cardiovascular que promueven las hormonas adrenalina y noradrenalina, también
denominadas hormonas del estrés. Se utilizan en el tratamiento de la presión
arterial alta, la angina de pecho y ciertas irregularidades del ritmo cardíaco. Los
antagonistas son mucho más efectivos cuando la concentración local de un
agonista es elevada.
Su acción es semejante al corte de tráfico en una carretera principal. La retención
de vehículos en hora punta como las 5 de la tarde es mayor que a las 3 de la
madrugada. De modo similar, si se administran betabloqueadores en dosis que
tengan escaso efecto sobre la función cardíaca normal, éstos pueden proteger el
corazón contra los picos máximos y repentinos de las hormonas del estrés.
Enzimas
Además de los receptores propios de las células, las enzimas son también otras
dianas importantes para la acción de los fármacos. Éstas ayudan a transportar
sustancias químicas vitales, regulan la velocidad de las reacciones químicas o
realizan otras funciones estructurales, reguladoras o de transporte. Mientras que
los fármacos dirigidos a los receptores se clasifican en agonistas o antagonistas,
los fármacos dirigidos a las enzimas se clasifican en inhibidores o
activadores (inductores).
Por ejemplo, la lovastatina se usa en el tratamiento de los individuos con valores
elevados de colesterol en sangre. Este fármaco inhibe la enzima HMG-CoA
reductasa, fundamental para producir colesterol en el organismo.
La mayoría de las interacciones son reversibles, bien sean entre fármacos y
receptores o entre fármacos y enzimas. Es decir que el fármaco se desprende al
cabo de cierto tiempo y el receptor o la enzima recuperan su funcionamiento
normal. Sin embargo, una interacción puede ser irreversible si persiste el efecto
del fármaco hasta que el organismo produzca más enzimas, como sucede con
el omeprazol, un fármaco que inhibe una enzima involucrada en la secreción del
ácido del estómago.
Potencia y eficacia
La potencia se refiere a la cantidad de fármaco (generalmente expresada en
miligramos) que se necesita para producir un efecto, como aliviar el dolor o
disminuir la presión arterial. Por ejemplo, si 5 miligramos de fármaco B alivian el
dolor con la misma eficacia que 10 miligramos de fármaco A, entonces el fármaco
B es dos veces más potente que el fármaco A. De hecho, un fármaco con mayor
potencia no es necesariamente mejor que otro. Cuando los médicos juzgan las
cualidades relativas de los fármacos, consideran muchos factores como el perfil de
los efectos secundarios, la toxicidad potencial, la duración del efecto y, por
consiguiente, el número de dosis diarias requeridas, y también su coste.
La eficacia se refiere a la respuesta terapéutica potencial máxima que un fármaco
puede inducir. Por ejemplo, el diurético furosemida elimina mucha más sal y agua
a través de la orina que el diurético clorotiazida. Por eso la furosemida tiene mayor
eficacia, o efecto terapéutico, que la clorotiazida. Al igual que la potencia, la
eficacia es uno de los factores que los médicos consideran al seleccionar el
fármaco más apropiado para un determinado paciente.
Tolerancia
La tolerancia es una disminución de la respuesta farmacológica que se debe a la
administración repetida o prolongada de algunos fármacos. La tolerancia ocurre
cuando el organismo se adapta a la continua presencia del fármaco. Por lo
general, son dos los mecanismos responsables de la tolerancia: 1)
elmetabolismo del fármaco se acelera (habitualmente porque aumenta la actividad
de las enzimas hepáticas que metabolizan el fármaco) y 2) disminuye la cantidad
de receptores o su afinidad hacia el fármaco. El término resistencia se usa para
describir la situación en que una persona deja de responder a un antibiótico, a un
fármaco antivírico o a la quimioterapia en el tratamiento de cáncer. Según el grado
de tolerancia o resistencia desarrollado, el médico puede aumentar la dosis o
seleccionar un fármaco alternativo.
Fuentes
cap3_farmacodinam.pdf [citado 2012;Febrero,10]Disponible
en:"http://med.unne.edu.ar".