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CUADERNO CAUTELAR

Expediente N°
Especialista:
Escrito N° 01.
SOLICITA MEDIDA CAUTELAR FUERA DE PROCESO.

SEÑOR JUEZ DEL JUZGADO MIXTO DEL DISTRITO DE YARINACOCHA:

UBALDO CANO Raquel, identificada con DNI N° 43728704, con


domicilio real sito en Jirón Lupuna Mz. A Lt. 07, distrito de
Yarinacocha, provincia de Coronel Portillo y departamento de Ucayali,
señalando Domicilio Procesal en Jirón Salaverry N° 496, interior
1-A en Pucallpa y Casilla Electrónica N° 70110; ante usted con el
debido respeto me presento y expongo:

I. PETITORIO.

Que, invocando interés y legitimidad para obrar y al amparo de los


artículos 608°, 610°, 611°, 612°, 613° 618°, 636°, 674° y 677° del Código
Procesal Civil, SOLICITO SE DICTE MEDIDA CAUTELAR FUERA DE
PROCESO en la modalidad de MEDIDA TEMPORAL SOBRE EL FONDO
sobre ENTREGA DE MENOR; medida que la dirijo contra QUISPE RAMOS
Wuistse Diter, domiciliado en Jirón Las Flores Mz. 03, Lt. 02 en Pucallpa
(Km. 7 de la Carretera Federico Basadre por el colegio Maldonado Begazo),
distrito de Callería, provincia de Coronel Portillo y departamento de Ucayali,
en atención a los siguientes fundamentos de hecho y de derecho que paso a
exponer:

II. FUNDAMENTOS DE HECHO DE LA PRETENSIÓN CAUTELAR.

A. Antecedentes.

1. Que, a manera de antecedente señor Juez, quiero empezar señalando que


fruto de la relación convivencial que inició en el año 2005, la recurrente y don
QUISPE RAMOS Wuistse Diter procreamos a nuestro menor hijo de nombre
QUISPE UBALDO WUISTSE JHERZON, quien actualmente cuenta con 8
años de edad.

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2. Sucede señor Juez que en lugar de primar el amor y la unión en nuestro
hogar, primaba la violencia verbal y luego física en contra de mi persona por
celos infundados, motivo por el cual decidí separarme en el año 2014 ante
constantes maltratos. Es así que luego de una vez más que fui víctima de sus
maltratos decidí exigirle que se retire de mi domicilio llevándose todas sus
pertenencias en el acto. Inmediatamente recurrí a la autoridad policial e
interpuse la denuncia por abandono de hogar por incompatibilidad de
caracteres y por violencia familiar, tal como lo acredito con el Certificado de
la Denuncia Verbal de fecha 14OCT14 (ANEXO 01-B). Sírvase tener presente.

3. Luego, dos días después el demandado se apersonó a mi domicilio en


estado de ebriedad a eso de las 18:30 horas quien pretendía llevar en ese
estado a comer a mi hijo, a fin de evitar cualquier tipo de violencia accedí que
llevara a mi hijo a cenar, pero el regresar pretendía entrar a mi cuarto a la
fuerza por lo que yo le negué y opté por cerrar la puerta pidiéndole que se
retire. En lugar de retirarse el demandado empezó a agredirla verbalmente,
luego rompió la puerta de mi cuarto a patadas y me agredió físicamente
delante de mi hijo. Hecho que decidí denunciar a la policía y que en mérito a
ello la Segunda Fiscalía Provincial Civil y Familia de Coronel Portillo lo
demandó por violencia familiar ante el Poder Judicial, tal como lo acredito
con la demanda de fecha 26NOV14 (ANEXO 01-C).

4. Como resultado de la demanda efectuada por el Ministerio Público, el


Primer Juzgado de Familia lo admitió a trámite en el Expediente N° 1083-
2014 (ANEXO 01-D) y mediante Resolución N° SIETE, de fecha 31MAR15
(ANEXO 01-E), se expidió sentencia declarando fundada la demanda de
violencia familiar. Señor Juez, dicha sentencia disponía que tanto el
demandado como la recurrente recibiéramos una atención psicológica
especializada, lo que efectivamente se llevó a cabo, con lo que sinceramente
creía que a partir de ello su actitud cambiaría para mejor. Lo cual no fue así
y de ello me convencí cuando retomamos nuevamente nuestra relación,
pensaba yo, en bienestar sobre todo de nuestro hijo.

5. Mientras recibíamos la terapia psicológica y aprovechando la situación, el


demandado me insistía para retomar nuestra relación, por el bienestar de

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nuestro hijo. Considerando que era lo mejor acepté regresar con el
demandado, quien prometió no volver a incurrir en lo mismo; sin embargo,
ello no fue así, tal como lo explico a continuación. Sucede, señor Juez, que
las agresiones jamás han cesado, incluso muchas de las agresiones verbales
continuaban dándose en presencia de nuestro menor hijo, sin importarle el
daño que por ello venía sufriendo en su formación, motivo por el cual en el
mes de Abril del año 2017 decidí separarme de manera definitiva. Después
de muchas insistencias por parte de la recurrente, el demandado aceptó
llegar a un acuerdo que se llevó a cabo en el centro de Conciliación
AMPHORA, mediante Acta de Conciliación N° 075-2016-CCA-PUC (ANEXO
01-F), de fecha 19JUN17, donde se acordó, entre otras cosas, que la
recurrente conservaría la tenencia de nuestro menor hijo, y se fijó un régimen
de visitas abierto con externación a favor del denunciado, todo esto con el fin
de evitar cualquier tipo de violencia familiar.

6. Sin embargo, pese a que el demandado ya no vivía con nosotros las


agresiones jamás han cesado, siendo víctima de constante agresiones
verbales vía mensaje de texto y llamadas del celular por parte del denunciado,
llegando incluso a ser agredida una vez más el 31DIC17; una vez más, delante
de nuestro menor hijo y vecinos del lugar de mi domicilio, hechos que fueron
denunciados en la Comisaria de Yarinacocha el 01ENE18, tal como acredito
con la denuncia que adjunto (ANEXO 01-G).

7. Retomando respecto a la tenencia, sucede que el demandado jamás ha


tenido la intención de cumplir con el régimen de visitas acordado por ambas
partes, siendo que se llevaba a nuestro menor hijo a la hora que el decidía y
lo regresaba de la misma manera, y la recurrente a fin de evitar cualquier
conflicto callaba y aceptaba el accionar del denunciado, pero desde que el
19DIC17 se llevó a mi menor hijo de mi lugar de trabajo hasta la fecha no me
ha devuelto, pese a los constantes requerimientos verbales vía telefónica,
incumpliendo de esta manera el acuerdo plasmado en el acta de conciliación
antes citado, procediendo de esta manera y como manda la ley, a enviarle
una carta notarial el 04ENE18 (AENXO 1-H), mediante la cual le requerí para
que en dentro del plazo de 24 horas me devolviera a mi menor hijo, sin que
hasta la fecha lo haya hecho y ante mi llamada posterior la progenitora del
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demandado me contestó manifestándome que no me entregarán a mi hijo; es
decir, que ni siquiera el denunciado es capaz de dar la cara, haciendo caso
omiso a la carta notarial e incumpliendo con el acuerdo contenido en el acta
de conciliación antes referida. Sírvase tener presente.

B. De la procedencia de la presente solicitud cautelar.

8. Señor Juez, conforme al artículo 18° de la Ley de Conciliación – Ley N°


26872, “El acta con acuerdo conciliatorio constituye título de
ejecución. Los derechos, deberes u obligaciones ciertas, expresas y
exigibles que consten en dicha acta se ejecutarán a través del proceso
de ejecución de resoluciones judiciales”; es decir, conforme a las reglas
del Proceso Único de Ejecución, reguladas en el Título V del Código Procesal
Civil.

9. Así mismo, es preciso tener en cuenta que conforme al artículo 7° de la Ley


de Conciliación – Ley N° 26872, son materias conciliables la tenencia y el
régimen de visitas, por lo que el acta de conciliación se encuentra arreglada
a ley y contiene obligaciones ciertas, expresas y exigibles.

10. En ese orden de ideas señor Juez, la presente solicitud cautelar debe ser
amparada puesto que la misma cumple con los requisitos que nos exige el
artículo 610º del Código Procesal Civil y los presupuestos exigidos en el
artículo 611º del mismo cuerpo legal antes citado. En tal sentido, está
acreditada la verosimilitud del derecho invocado con el acta de conciliación
donde se fijó que la tenencia de mi menor hijo lo ejerce la recurrente; el
régimen de visitas abierto con externación lo ejerce el demandado, pero que
ante la negativa de mi requerimiento para que me devuelva a mi hijo por los
días que se lo ha llevado desde el 19DIC17 me corresponde el derecho de
exigir el cumplimiento de los acuerdos en la vía judicial, conforme me faculta
la ley.

11. Al respecto señor Juez, la verosimilitud del derecho invocado, tiene su


forma normativa en el primer párrafo del artículo 611º del Código Procesal
Civil, el cual establece que el Juez podrá conceder la medida cautelar en la

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forma que se solicite, siempre que de lo expuesto y prueba anexa, considere
verosímil el derecho invocado; además de los subsiguientes presupuestos
formales. Esta cláusula abierta del código procesal peruano, permite al juez
precisamente realizar un ejercicio de razonamiento en cuanto considera la
probable presencia de razones justificables en la concesión de la medida. Para
el autor nacional Martell Chang, la verosimilitud no exige comprobación de
certeza, sino solamente humor de derecho, esto es, de probabilidad1. Al
efecto, citando a Monroy Palacios, refiere que la verosimilitud no sugiere que
el Juez evalúe la fundabilidad de la pretensión, sino que considere, por lo
menos que la pretensión tiene un sustento jurídico que la hace discutible 2.
Por eso, la adopción de la medida cautelar no debe depender de que el actor
pruebe la existencia del derecho subjetivo por él alegado en el proceso
principal, ya que esa existencia es la que se debate en éste, pero tampoco
puede adoptarse la medida cautelar sólo porque lo pida el actor, en uno y
otro extremo la adopción precisa que se acrediten unos indicios de
probabilidad, verosimilitud de apariencia del buen derecho. Siendo ello así
señor juez, con las documentaciones antes referidas se puede acreditar la
probabilidad de que nuestro derecho invocado sea amparado, y ese derecho
consiste en nuestra acreencia que debe ser honrada.

12. Que, sustento mi pretensión cautelar en el peligro que ocasionaría la


demora para que el demandado cumpla con entregarme a mi hijo, por cuanto
durante el lapso en que se ventile la causa subsiguiente ante su despacho y
se expida fallo a mi favor, el demandado podría desplegar una serie de actos
tendientes a impedir la entrega de mi hijo e incluso, atendiendo a su carácter
agresivo y violento del demandado mi hijo pueda sufrir algún tipo de violencia
física y/o psicológica, más aún cuando el demandado constantemente está
tratando de poner a mi hijo en mi contra estigmatizándome como una mala

1
MARTELL CHANG, Rolando. Acerca de la necesidad de legislar sobre las medidas autosatisfactivas en
el proceso Civil.

2
MONROY PALACIOS, Juan José. Bases para la formación de una teoría cautelar. Lima. Comunidad,
2002. pág. 173.

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mujer por no estar con él y atentando el interés superior del niño, tornando
inútil el proceso judicial principal.

13. Finalmente, la solicitud resulta razonable para poder garantizar la


eficacia de la pretensión, tanto en la forma de la medida cautelar solicitada y
el momento solicitado y porque así lo dispone expresamente el artículo 677°
del Código Procesal Civil. Sírvase tener presente.

III. FUNDAMENTOS DE DERECHO DE LA PRETENSIÓN CAUTELAR.

A. Código Procesal Civil.

Artículo 608°.- Juez competente, oportunidad y finalidad.

El juez competente para dictar medidas cautelares es aquel que se


encuentra habilitado para conocer de las pretensiones de la demanda.
El juez puede, a pedido de parte, dictar medida cautelar antes de
iniciado el proceso o dentro de éste, salvo disposición distinta
establecida en el presente Código.

Todas las medidas cautelares fuera de proceso, destinadas a asegurar


la eficacia de una misma pretensión, deben solicitarse ante el mismo
juez, bajo sanción de nulidad de las resoluciones cautelares dictadas.
El solicitante debe expresar claramente la pretensión a demandar.

La medida cautelar tiene por finalidad garantizar el cumplimiento de la


decisión definitiva.

Artículo 610°.- Requisitos de la solicitud.

El que pide la medida debe:

1. Exponer los fundamentos de su pretensión cautelar;

2. Señalar la forma de ésta;

3. Indicar, si fuera el caso, los bienes sobre los que debe recaer la
medida y el monto de su afectación;

4. Ofrecer contracautela; y

5. Designar el órgano de auxilio judicial correspondiente, si fuera el


caso. Cuando se trate de persona natural, se acreditará su
identificación anexando copia legalizada de su documento de identidad
personal.

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Artículo 611°.- Contenido de la decisión cautelar.

El juez, atendiendo a la naturaleza de la pretensión principal y a fin de


lograr la eficacia de la decisión definitiva, dicta medida cautelar en la
forma solicitada o en la que considere adecuada, siempre que, de lo
expuesto y la prueba presentada por el demandante, aprecie:

1. La verosimilitud del derecho invocado.

2. La necesidad de la emisión de una decisión preventiva por constituir


peligro la demora del proceso o por cualquier otra razón justificable.

3. La razonabilidad de la medida para garantizar la eficacia de la


pretensión.

La medida dictada sólo afecta bienes y derechos de las partes


vinculadas por la relación material o de sus sucesores, en su caso.

La resolución precisa la forma, naturaleza y alcances de la


contracautela.

La decisión que ampara o rechaza la medida cautelar es debidamente


motivada, bajo sanción de nulidad.

Artículo 612°.- Características de la medida cautelar.

Toda medida cautelar importa un prejuzgamiento y es provisoria,


instrumental y variable.

Artículo 613°.- Contracautela y discrecionalidad del juez.

La contracautela tiene por objeto asegurar al afectado con una medida


cautelar el resarcimiento de los daños y perjuicios que pueda causar su
ejecución.

La admisión de la contracautela, en cuanto a su naturaleza y monto, es


decidida por el juez, quien puede aceptar la propuesta por el solicitante,
graduarla, modificarla o, incluso, cambiarla por la que sea necesaria
para garantizar los eventuales daños que pueda causar la ejecución de
la medida cautelar.

La contracautela puede ser de naturaleza real o personal. Dentro de la


segunda se incluye la caución juratoria, la que puede ser admitida,
debidamente fundamentada, siempre que sea proporcional y eficaz.
Esta forma de contracautela es ofrecida en el escrito que contiene la
solicitud de medida cautelar, con legalización de firma ante el secretario
respectivo.

La contracautela de naturaleza real se constituye con el mérito de la


resolución judicial que la admite y recae sobre bienes de propiedad de
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quien la ofrece; el juez remite el oficio respectivo para su inscripción en
el registro correspondiente.

En caso de ejecución de la contracautela, esta se actúa, a pedido del


interesado, ante el juez que dispuso la medida y en el mismo cuaderno
cautelar; el que resuelve lo conveniente previo traslado a la otra parte.

Cuando se admite la contracautela sometida a plazo, ésta queda sin


efecto, al igual que la medida cautelar, si el peticionante no la prorroga
u ofrece otra de la misma naturaleza o eficacia, sin necesidad de
requerimiento y dentro del tercer día de vencido el plazo.

Artículo 618°.- Medida anticipada.

Además de las medidas cautelares reguladas, el Juez puede adoptar


medidas anticipadas destinadas a evitar un perjuicio irreparable o
asegurar provisionalmente la ejecución de la sentencia definitiva.

A este efecto, si una medida se hubiere ejecutado sobre bienes


perecibles o cuyo valor se deteriore por el transcurso del tiempo u otra
causa, el Juez, a pedido de parte, puede ordenar su enajenación, previa
citación a la contraria. La enajenación puede sujetarse a las
estipulaciones que las partes acuerden. El dinero obtenido mantiene su
función cautelar, pudiendo solicitarse su conversión a otra moneda si se
acreditara su necesidad. La decisión sobre la enajenación o conversión
es apelable sin efecto suspensivo.

Artículo 636°.- Medida cautelar fuera de proceso.

Ejecutada la medida antes de iniciado el proceso principal, el


beneficiario debe interponer su demanda ante el mismo Juez, dentro de
los diez días posteriores a dicho acto. Cuando el procedimiento
conciliatorio extrajudicial fuera necesario para la procedencia de la
demanda, el plazo para la interposición de ésta se computará a partir
de la conclusión del procedimiento conciliatorio, el que deberá ser
iniciado dentro de los cinco días hábiles de haber tomado conocimiento
de la ejecución de la medida.

Si no se interpone la demanda oportunamente, o ésta es rechazada


liminarmente, o no se acude al centro de conciliación en el plazo
indicado, la medida cautelar caduca de pleno derecho. Dispuesta la
admisión de la demanda por revocatoria del superior, la medida
cautelar requiere nueva tramitación.

Artículo 637°.- Trámite de la medida.

La solicitud cautelar es concedida o rechazada sin conocimiento de la


parte afectada en atención a los fundamentos y prueba de la solicitud.
Procede apelación contra el auto que deniega la medida cautelar. En
este caso, el demandado no es notificado y el superior absuelve el grado

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sin admitirle intervención alguna. En caso de medidas cautelares fuera
de proceso, el juez debe apreciar de oficio su incompetencia territorial.

Una vez dictada la medida cautelar, la parte afectada puede formular


oposición dentro de un plazo de cinco (5) días, contado desde que toma
conocimiento de la resolución cautelar, a fin de que pueda formular la
defensa pertinente. La formulación de la oposición no suspende la
ejecución de la medida.

De ampararse la oposición, el juez deja sin efecto la medida cautelar.


La resolución que resuelve la oposición es apelable sin efecto
suspensivo.

Artículo 677°.- Ejecución anticipada y cese inmediato de los


actos lesivos en asuntos de familia e interés de menores.

Cuando la pretensión principal versa sobre separación, divorcio, patria


potestad, régimen de visitas, entrega de menor, tutela y curatela,
procede la ejecución anticipada de la futura decisión final, atendiendo
preferentemente al interés de los menores afectados con ella.

Si durante la tramitación del proceso se producen actos de violencia


física, presión psicológica, intimidación o persecución al cónyuge,
concubino, hijos o cualquier integrante del núcleo familiar, el Juez debe
adoptar las medidas necesarias para el cese inmediato de los actos
lesivos, sin perjuicio de lo dispuesto en el Artículo 53°.

IV. FORMA DE LA MEDIDA CAUTELAR.

La solicitud cautelar de MEDIDA TEMPORAL SOBRE EL FONDO es


en la forma de ENTREGA DE MENOR.

V. MONTO DE LA AFECTACIÓN CAUTELAR.

Por la naturaleza de la pretensión cautelar, no existe monto de


afectación.

VI. OFRECIMIENTO DE LA CONTRACAUTELA.

Sin perjuicio que no existe monto de afectación, ofrezco como


contracautela en la modalidad de Caución Juratoria el importe de S/. 500.00
Soles (QUINIENTOS CON 00/100 SOLES), o hasta el monto que vuestro
despacho considere atendible. Para ello cumplo con legalizar mi firma ante el

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Secretario Cursor, de acuerdo a lo regulado en el tercer párrafo del artículo
613° del Código Procesal Civil.

VII. ÓRGANO DE AUXILIO JUDICIAL.

En caso corresponder, solicito se sirva designar como órgano de auxilio


judicial a la propia recurrente, por la naturaleza de la pretensión cautelar.

VII. ANEXOS:

Ofrezco los siguientes anexos.

01-A. Copia simple del DNI de la recurrente (Fs. 01).

01-B. Copia certificada de la Denuncia Policial por retiro de hogar, de fecha


14OCT14 (Fs. 02).

01-C. Original de la Demanda de Violencia Familiar, de fecha 26NOV14 (Fs.


05).

01-D. Original de Resolución N° UNO, de fecha 02DIC14 (Fs. 01).

01-E. Original de la sentencia expedida mediante Resolución N° SIETE, de


fecha 31MAR15 (Fs. 03).

01-F. Copia legalizada del Acta de Conciliación N° 075-2016-CCA-PUC, de


fecha 19JUN17 (Fs. 03).

01-G. Copia legalizada de la Denuncia Policial, de fecha 01ENE18 (Fs. 02).

01-H. Original de la Carta Notarial N° 04-2018 (Fs. 03).

01-I. Original de la Tasa Judicial por solicitud de medida cautelar (Fs. 01).

01-J. Original de la Papeleta de Habilitación Profesional del abogado que


autoriza el presente escrito (Fs. 01).

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POR TANTO:

Sírvase usted señor Juez, tener presente lo expuesto, acceder a lo


solicitado y proveer conforme a ley.

PRIMER OTROSÍ: Que, al amparo del segundo párrafo del artículo 608º del
Código Procesal Civil, cumplo con señalar que la pretensión principal
versará ejecución de Acta de Conciliación – Entrega de menor, la misma
que se tramitará en la Vía del Proceso Único de Ejecución, de conformidad
con el numeral 3) del artículo 688° del Código Procesal Civil.

SEGUNDO OTROSÍ: Que, teniendo en cuenta que el domicilio del demandado


está ubicado en el distrito de Callería y a fin de poder ejecutar la medida
cautelar, cumplo con adjuntar una Tasa Judicial por concepto de Exhorto
dentro del Distrito Judicial (ANEXO 01-K) y una Tasa Judicial por concepto
de Diligencia a realizarse fuera del local judicial (ANEXO 01-L). Sírvase tener
presente.

TERCER OTROSÍ: Que, AUTORIZO al señor Alexandro Gonzales Rivas,


identificado con DNI N° 70834148 (ANEXO 01-M), quien es Asistente del
abogado que autoriza el presente escrito, a fin de que pueda apersonarse a
vuestro despacho y hacer seguimiento del estado de la presente causa; así
como recabar las copias certificadas y partes judiciales que expida vuestro
despacho, por lo que solicito de le den las facilidades del caso. Sírvase
tener presente.

Yarinacocha, 11 de enero del 2018.

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